La escuela de la Señorita Olga

Vista previa del material en texto

"La escuela de la Señorita Olga"
El video arranca con niños en un taller de arte que opinan sobre la escuela y se manifiestan muy adoctrinados por la escuela y sin saber el objetivo de esta. Luego habla una docente que nos cuenta que el primer día de clases les hicieron observar el cielo a todos. Esa experiencia la tuvo en la escuela Nro. 79 donde trabajaban las hermanas Cossettini. 
El video habla sobre la aluminosa experiencia educativa conducida por la maestra Olga Cossettini en la Escuela Provincial "Dr. Gabriel Carrasco" , del Barrio Alberdi, Rosario, Santa Fe, Republica Argentina, entre 1935 y 1950. Cuenta con el testimonio de exalumnos y de la hermana de Olga, Leticia Cossettini. 
El método de enseñanza de Olga implicaba la observación de la naturaleza, el goce con el cielo, ver la forma de las nubes, la observación del follaje de un árbol, la escucha del canto de un pájaro.
Fue escuela sin fila y sin campana. Cuando sonaba la música en el patio, sabían que era hora de salir al recreo.
Uno de los interlocutores manifestó que en su trabajo docente siempre recurre al recuerdo en la escuela de Olga, ya que ahí encuentra recursos y sostén.
Olga se convierte en directora de la escuela en 1935, después del ensayo educacional importante que había realizado con la profesora Amanda Arias en la Escuela Normal de Rafaela. 
Olga llega a escuela con pasión, con un deseo inmenso de conectarse con la gente, con el barrio y se encuentra ahí con un grupo de maestros que ya trabajaban en la escuela. El gran prodigio inicial de Olga, fue conseguir lentamente que esos maestros comprendieron sus postulados de educación. 
Los niños y niñas salieron de los bancos en hilera para reunirse en una mesa de trabajo. Se paso de una disciplina rígida a una autodisciplina. Los planes de estudios eran los planes del estado, pero vivificados de una experiencia con la vida circundante, con la gente, con las circunstancias, de manera que barrio y paisaje convivían en una armoniosa fraternidad.
Prácticamente todos los días salían de excursión. En esas excursiones aprendían de matemáticas, de ciencias naturales, etc. Exploraban y realizaban entrevistas a los habitantes del pueblo, que tenían profesiones y vivencias que transmitir a los chicos.
Se hacían conciertos de música una vez por semana. Se ponían música de músicos celebres, como Mozart y Beethoven, y así aprendían lo que era la música. Al concierto cada chico llevaba su silla y a la cabeza se ubicaba Olga, quien les iba enseñando a los niños y niñas sobre música. 
Había mucha presencia del arte (música, danza, pintura, etc.). Desde que iniciaba el niño la escuela se le ponía en las manos el uso de la acuarela. Pero no había maestros de plástica o una clase de de arte, el arte estaba en el vivir cotidiano, porque la sensibilidad estaba en el vivir cotidiano. Se hacían juegos rítmicos.
Había también una formación solidaria, con el medio, con el pueblo, con la gente, a través de las misiones culturales que los niños realizaban a los barrios llevando temas que pudiesen interesar a sectores un poco postergados de la sociedad, como temas de la vida, el agua, los insectos dañinos, ciertas precauciones que había que tener para decantar el agua, para evitar epidemias. 
Cada alumno encontraba su manera de expresarse, dibujando, escribiendo, exponiendo, cantando, etc. 
Además, recibieron visitas de Gabriela Mistral, Margarita Hirst, Juan Ramón Giménez y Javier Villafañe
Leyeron el libro Platero y lo tenían como libro de lectura. Inauguraron un teatro de títeres denominado "Juan Ramón Giménez". 
Se jugaba al compás de la música y después se hacia un concurso de barriletes. 
Había un centro cooperativo. Sus directivos eran elegidos entre los alumnos. Cada grado elegía a sus candidatos, se armaban listas de candidatos y estas listas comenzaban a trabajar preparando la elección. Luego se preparaban los comicios, con fiscales, urnas y sobres. Terminado el acto de votación, se hacia públicamente el escrutinio.
Se creó el "Coro de pájaros". Su función era escuchar el canto de los distintos pájaros de la localidad y luego cada uno imitaba uno. 
Era un clima de paz, de trabajo, de felicidad. Se vivía la vida desde una óptica artística. Pero el golpe al entrar a la escuela secundaria fue muy duro. Pasaron a un sistema rígido, con lecciones, hora por hora con una persona distinta, sin posibilidad de expresarse artísticamente, 
La experiencia de Olga duro 15 años, de 1935 a 1950. La experiencia ceso por decreto, por motivos políticos. Los docentes no quisieron dar clases luego de que Olga fuera retirada del cargo.