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94 Manual de Endourología | Edición 2016Manual de Endourología | Edición 2016 residuales, consecuencia de tratamientos incompletos, considerados clínicamente insignificantes, en realidad constituyen fuentes de recidiva e infección. Por lo tanto, resulta de enorme impor- tancia tratar de dejar libres de cálculo a estos pacientes. El desarrollo de instrumentos cada vez más delicados, de menor calibre y flexi- bles, sumado a la aparición de fuentes de energía como el láser, la digitalización de las imágenes permiten, al combinar su uso en forma simultánea, resolver los casos de litiasis más complejas. A pesar de estas claras ventajas, el de- cúbito de Valdivia Galdakao, mantiene las mismas desventajas que el decúbito supino, esto es: limitada exposición de la zona lumbar de punción segura y la necesidad de punción e instrumentación ascendentes. Decúbito supino intermedio En nuestro Servicio, hemos instaurado una pequeña variante al decúbito de Valdivia Galdakao, el cual denomina- mos decúbito supino intermedio, que permite preservar todas las ventajas de las posiciones anteriormente mencio- nadas y evitar sus desventajas (Figura 34) (Figura 35). El decúbito supino intermedio se dife- rencia del decúbito de Vadivia Galdakao en solamente un detalle: la almohadilla, que en el decúbito supino de Valdivia o el de Valdivia Galdakao, se coloca bajo la zona lumbar del lado a tratar Figura 36. Decúbito supino intermedio. Excelente exposición de la zona lumbar de punción segura. Figura 37. Decúbito supino intermedio. Punción horizontal. Figura 38. Decúbito supino intermedio. Instrumentación horizontal.
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