Analisis pelicula Un monstruo viene a verme

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ANÁLISIS DE LA PELÍCULA “UN MONSTRUO VIENE A VERME”
La película Un monstruo viene a verme cuenta la historia de Connor, un
muchacho que tiene que madurar a pasos forzados al prepararse para perder a su
madre. Esta película demuestra una gran profundidad psicológica al tratar un tema
con los que todos nos enfrentamos en la vida: las emociones.
Un día Connor recibe la visita de un gran árbol que le contara tres historias a
cambio de que el niño le cuente la cuarta, que es, su mayor pesadilla, y a la que el
monstruo llama “la verdad”. A través de estas historias y de la relación que ambos
construyen, el árbol le ayudara a gestionar las emociones de manera sana y a
aceptar las circunstancias que le toca vivir.
El personaje del árbol es una clara figura terapéutica que acompaña y ayuda a
Connor en su proceso de duelo, le ayuda a aceptar, expresar, tomar conciencia y
despenalizar, las intensas emociones que generan las situaciones que está
viviendo.
En la película, Connor reprime sus emociones, y a pesar de ser la mejor respuesta
que puede dar en ese momento, es una actitud que le perjudica a muchos niveles,
el monstruo le enseña a expresar sus emociones, le da el permiso que no se da a
sí mismo para que por fin pueda aceptarlas, transitarlas y finalmente, vaciarlas.
En algún momento, el monstruo se convierte en esa parte oculta de Connor, que
tanto necesita mostrar y aceptar, esa parte que él niega y que está llena de rabia,
frustración y miedo. Con el acompañamiento del árbol por fin puede descargar la
rabia que tanto tiempo lleva reprimiendo.
Lo que callamos nos puede llegar a matar. Como dice esta frase del árbol, la
represión o negación de las emociones tiene consecuencias negativas, el darnos
la oportunidad de expresarlas nos permitirá liberarnos de la carga neurótica que
conlleva a su negación.
Como Connor, a veces nos empeñamos en ignorar o esconder nuestras
emociones, por no estar bien vistas o porque nos hacen sentir “malos”. Pero hasta
que uno no se de una aceptación de lo que no estamos queriendo ver, no
podremos ocuparnos de nosotros mismos e incrementaremos el dolor que por otro
lado queremos evitar.
Cuando por fin llega el momento de enfrentarse a “la verdad”, Connor revela que
“quería que todo acabara”, una parte de él deseaba la muerte de su madre. El
árbol despenaliza ese pensamiento para que el niño pueda aceptar que es una
reacción natural, fruto del profundo dolor que siente.