Analisis pelicula El niño con el pijama de rayas

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ANÁLISIS DEL CASO PELÍCULA: ‘”THE BOY IN STRIPPED PIJAMAS
1. Asunto Ético:
La película de “The Boy in Stripped Pajamas” es basada en el tiempo de la opresión de Hitler a los 
judíos, esto surgió en la segunda Guerra mundial. El holocausto judío fue una gran matanza de 
personas, aproximadamente seis millones de judíos, con el fin de exterminarlos; según la 
terminología nazi “la solución final”. Al ir más allá, vemos la ironía en la definición (según: 
www.wordreference.com) de holocausto entre los judíos cual era un sacrificio religioso que 
consistía en la cremación total de un animal. Triste es saber que ellos fueron los que terminaron 
sacrificados y quemados sin ninguna razón.
El asunto ético principal de la película es el genocidio. Cuando hablamos del genocidio a igual que 
el holocausto se refiere (según: www.rae.es) al exterminio sistemático de un grupo humano por 
motivos de raza, religión o política. 
Los alemanes consideraban a los judíos responsables por la derrota en la guerra y la crisis 
económica. También Hitler y los nazis pensaban que la raza aria era la mejor, la más fuerte; los 
judíos pertenecían a una raza tan inferior que los nazis ya no los consideraban más como 
personas. Notamos esto cuando en la película el papa de Bruno le contesta: “La cuestión, es que 
esas personas, pues en realidad, no son personas”. La solución para todos esos problemas era 
excluir a los judíos de la sociedad. Entre las herramientas genocidas utilizadas estuvieron la cámara
de gas, los disparos, el ahorcamiento, los trabajos forzados, el hambre, los experimentos (no 
científicos), la tortura médica, los golpes y la deportación. Podemos argumentar el mismo con la 
película en la parte en el que los soldados del campo de concentración ya habían preparado la 
ejecución en masa, allí estaba Bruno y Shmuel, quienes ingresaron a la cámara de gas para ser 
incinerados. Los soldados Nazis, realizan la ejecución en la cámara de gas e iniciándose la 
incineración a través de las chimeneas. También, al principio de la película podemos comprobar la 
incineración cuando Bruno le pregunta a su padre: “¿tú oliste?; ese olor horrible de las chimeneas. 
¿Qué es?”. El genocidio del pueblo judío a manos del ejército nazi fue una de las eras históricas 
más orondas.
2. Solución Ética:
En la película, su padre describe a judíos como “humanos, pero no” y la cosa irónica es, que 
realmente se describía a él y a los Nazi. Entonces por supuesto la solución planteada en la película 
es “tratar a otros como quieres ser tratado” tanto es obvio, pero si vamos más profundo es que 
cuando el hombre piensa que él está en el control del mal (quiere decir una realidad defectiva, no 
tiene entidad, desorden; según: http://lengua-y-literatura.glosario.net), él se engaña a si mismo 
porque el mal es el caos, y el caos no puede ser controlado. Se crea una máquina de odio tan 
perversa como aquel del holocausto, una bestia de la cual uno puede perder fácilmente el control. 
Las armas de este animal pueden extender la mano y arrancar hasta el más invulnerable; de los 
lugares más aparentemente seguros, y crear a una víctima de ellos. Básicamente Bruno era alguien
que sería el exento a hacerse una víctima de holocausto, ya que su padre era el que estaba en el 
control de Auschwitz. El comandante Ralph, que en su locura se hizo cada vez más distante de la 
humanidad verdadera, fue derrotado por lo más principal de toda la humanidad: la inocencia de un 
niño. 
3. Opinion Critica:
Me siento muy contenta por haber podido ver esta película y poder indagar mas acerca del 
genocidio de los judíos. Hay varias cuestiones éticas y morales dirigidas en esta película, pero 
cuatro se destacan. Me ha distorsionado mi vida, de una buena manera. Pues aunque uno no nota 
las barbaridades que pasaron en el holocausto, tan drásticamente en el mundo hoy; como la 
importancia de una amistad inocente, del odio que se enseña, de la discriminación o violencia o 
prejuicio, y de la ignorancia e indiferencia; a veces se olvidan. Es de suma relevancia que lo 
tengamos en cuenta en nuestro diario vivir, pues es la ética y los valores los que nos harán triunfar 
y tener una vida de paz.
La amistad de Bruno con Schmuel es una amistad prohibida. Le gusta su amigo, Schmuel, pero 
aprende que él es un Judío, y se supone que Judíos son el mal, animales, la causa de todo lo que 
paso con Alemania. A pesar de la instrucción clara de no ofrecer amistad a Judíos, él ve más allá de
etiquetas a la humanidad verdadera. Bruno era un niño en necesidad de la compañía, y Schmuel 
estaba en una condición similar. Ambos, de sus propios modos, eran víctimas del encarcelamiento. 
Schmuel fue encarcelado físicamente. Bruno era un preso de la fabricación de su padre, aislada de 
amigos y encarceló en la célula de cárcel de odio racial e intolerancia. Aún, ellos formaron una 
amistad improbable, un parentesco que cruzó la cerca de alambre de púas que los separó.
También comprendí en la película que el odio tiene que ser enseñado, no es algo que alguien 
naturalmente nace. El instructor enseñaba a Bruno a odiar a Judíos, y así es como el odio se 
extiende en cualquier parte del mundo. No, nunca habrá demasiados libros sobre este período 
terrible que preferimos olvidar. No tenemos ningún derecho no de hacer caso del pasado porque es 
desagradable o rechazar y dejar a la realidad meterse en nuestra preferencia para la diversión y 
para la risa. Al contrario debemos ensenar de estas cosas horribles que han pasado y pasan para 
combatir que eventos como estos pasen nuevamente. Según el poeta britanico John Betjeman: "La 
niñez se mide por sonidos, olores e imágenes, antes de que se extienda la hora oscura de la 
razón". 
Los judíos fueron aquellos que soportaron el infierno en la tierra. La película presenta que nadie 
podría evitar los males del partido Nazi, y hasta el hijo de un soldado superior podrían ser 
confundido como los muchachos que ellos tanto odiaban y mataban a diario. El tratamiento de los 
Judíos como la personas, que no eran personas es obviamente moralmente detestable. Los judíos 
son gente como todos los humanos son gente. Somos todos hechos en la imagen de Dios, sin tener
en cuenta raza, sexo, religión, color o credo (Gen 1:26-27). Tratar a la gente con la brutalidad, hasta
matándolos debido a su religión, es un pecado y un delito que no puede ser condonado. Esto va en 
contra de todo lo que Jesús enseño. 
Aun si debemos creer en The boy in stripped pajamas“, era posible vivir en la proximidad inmediata 
de Auschwitz y simplemente no saber - la misma defensa de todos aquellos alemanes después de 
la guerra que decidieron negar su complicidad. Sugerir que Bruno simplemente no tuviera ni idea lo 
que pasaba en el campo que su padre dirigía yardas de su casa. Es permitir el mito que aquellos 
que no estuvieron directamente implicados pueden reclamar la inocencia. Mientras tanto, los 
soldados Nazi que sirve a su país, incondicionalmente matando a los Judíos en la cámara de gas, 
mientras la madre no sabia nada. La vida la continúa hasta que ella finalmente descubre cual era el 
humo asqueroso que huele del campo realmente es. Entonces ella es devastada y comienza a 
desintegrarse emocionalmente. Podemos ver que la lección mas cruel del Holocausto era la 
capacidad mucho más frecuente y peligrosa para la indiferencia. Había millones quién sabía e hizo 
nada. Había la gente buena que miró; como si la pasividad ante el mal era libre de pecado. Si 
debemos aprender algo del Holocausto es que nunca más que debe ser aplicado de aquí en 
adelante a nuestra cobardía para intervenir, nuestro fracaso de reaccionar cuando los malhechores 
se precipitan en llenar el vacío ético. 
¿Con qué frecuencia dejamos a etiquetas o las emociones nos separan de otros? ¿Con qué 
frecuencia nos encontramos solos y nos preguntamos por qué? ¿Cuál es la causa de nuestro 
encarcelamiento? ¿Es ello nosotros mismos o es impuesto a nosotros de otros? ¿Si platónico ypuro, cómo puede realmente una amistad estar prohibida? Podemos argumentar según este pasaje
bíblico en (Mateo18:4) “Les aseguro que a menos que ustedes cambien y se vuelvan como niños, 
no entrarán en el reino de los cielos. Por tanto, el que se humilla como este niño será el más grande
en el reino de los cielos“. Vamos hacer como Bruno. Haciéndonos como un niño, quizás nosotros 
podemos ganar o reforzar nuestra fe en Dios y nuestro amor por otros.