Logo Studenta

Analisis pelicula Todo el poder

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

Todo el Poder
La relación de los medios y la sociedad
Todo el poder es una película mexicana, rodada el año 2000, dirigida por
Fernando Sariñana, que trata los temas de delincuencia, secuestros, robos y por
sobre todo, el alto grado de criminalización que existe en Ciudad de México. Esta
situación se refleja en la radio, televisión, principalmente, y en la sensación de
vulnerabilidad que tienen los ciudadanos frente a estos hechos. 
En esta cinta, se cuenta la historia de un documentalista, “Gabriel” (Demián
Bichir), que decide realizar una producción acerca de esta temática, ya que ha
sido objeto de varios asaltos. Pero, el robo del automóvil de su ex mujer, durante
una celebración, desencadena la investigación principal que de a poco se enreda
con la venganza y la disconformidad con el actuar de las instituciones, que
aparentemente no hacen nada en contra de la delincuencia y la crisis de
inseguridad. Es por eso, que decide conocer cómo actúan estas redes de crimen
organizado. 
Aún cuando su automóvil es recuperado por la policía, el protagonista no queda
convencido de la manera en que se originó el suceso, por lo que comienza a
investigar a fondo. Así, descubre que el crimen organizado está vinculado a
personas con gran influencia en los poderes fácticos del Estado, es decir,
funcionarios públicos, de fuerzas de orden y seguridad, políticos, que se organizan
para conseguir sus propósitos mediante la delincuencia, por lo que comienza
actividades de contraespionaje.
Con la ayuda de “Sofía” (Cecilia Suárez), una aspirante a actriz que trabaja
vendiendo seguros, y su videocámara Gabriel logra desenredar una red de
corrupción, sin que antes, sus amigos y familiares se vean involucrados y deban
colaborar con su causa.
Todo el poder, sin duda, grafica el espacio que los medios de comunicación han
logrado obtener en nuestras vidas, con un incremento acelerado en la influencia
que tienen en la sociedad. Además, de los distintos aspectos en que se relacionan
los medios de comunicación y la sociedad en la que estos se desenvuelven. 
En un principio, luego de la inversión de la imprenta de Johannes Gutenberg, los
medios de comunicación, escritos en esa época, sólo intentaban dar a conocer
hechos ocurridos en lugares distantes, que de a poco variaron a situaciones
originadas a un nivel más local, para posteriormente difundirse en una esfera
global de información. Sin embargo, nadie hubiese pensado que su importancia
sería tan grande que hoy en día es casi imposible separarnos ellos, convirtiéndose
más que en una forma de conocer lo ocurrido en un lugar distante al que se
encuentra el lector. 
En la actualidad, son muchas las personas que se acompañan de los medios de
comunicación masiva durante el día, ya sea por las emisiones de noticiarios,
diarios, periódicos, radios y más recientemente, sitios de información en internet.
De esta manera, los medios de comunicación han adoptado un carácter
multimedial, ya que abarcan “desde periódicos locales y nacionales hasta
televisión terrestre y vía satélite, desde la publicación de libros y revistas hasta la
producción y distribución cinematográfica” (Thompson, John B., 1998, pág.110).
Así, el papel del los medios de comunicación masiva en la sociedad ha cambiado
conforme a los cambios históricos, culturales y técnicos de la sociedad en la que
se encuentra inserta, ya que “los efectos de la comunicación dependen de un
número amplio y estructurado de factores diversos” (De Moragas S., Miquel.,
1981, pág. 36). De esta forma, se han generado distantes corrientes de
pensamiento, análisis, estudios, entre otros; en torno a la especificación de los
mismos.
En la película Todo el poder, los medios de comunicación se encuentran
presentes en toda su extensión. El filme comienza con una emisión radial, de
mañana, donde se hace referencia a la delincuencia que reina en México. Esta
secuencia que se extiende casi por tres minutos, nos da el contexto en el que se
circunscribe la historia principal. 
En esta primera parte, los medios corroboran el alto grado de criminalización
existente en la sociedad, que se refleja en las portadas de los diarios, comentarios
de personas que llaman a las radios y de los locutores de las mismas, además de
material audiovisual de personas que han sido afectadas por la situación de
criminalización que se vive en Ciudad de México.
De acuerdo a esta primera impresión, los medios cumplen con su función más
conocida: la de informar. Pretenden contar el acontecer diario, reflejar lo que pasa
en la sociedad en el día a día, para contar aquello que afecta a las personas,
concordando con la función del periodismo de difusión periódica de
acontecimientos que acaban de producirse, conocerse o que sucederán
próximamente a un público masivo o específico a través de un medio de
comunicación.
Esta característica de los medios, se vislumbra en las primeras décadas del
s.XVII, donde cada semana y con cierto grado de fiabilidad aparecen los
semanarios impresos, donde los administradores de correo recopilaban noticias de
sus regiones y luego las enviaban a las principales ciudades, creando sentidos de
mundo de acontecimientos que abarcan espacios mayores a los de su realidad
próxima. “La circulación de las primeras formas de noticieros ayudaron a crear el
sentido de un mundo de acontecimientos más allá del entorno inmediato de los
individuos, pero que tenía alguna relevancia, y potencialmente alguna relación,
con su vida” (Thompson, John B., 1998, pág. 97).
Más tarde, la producción de noticias pasó de la presentación de información del
extranjero a la presentación de noticias más locales. Se crearon publicaciones
periódicas que tenían injerencia en asuntos del Estado y capaces de ofrecer
información y comentarios críticos sobre los mismos. Para el siglo XVIII, aparecen
publicaciones periódicas especializadas en temas de cultura y entretenimiento;
noticias comerciales y financieras; comentarios sociales y políticos; los que
intentaban reflejar, de alguna manera, lo que ocurría en la sociedad. En la
producción cinematográfica, los medios hacen una convergencia de estos
aspectos, mostrando lo que ocurre en la actualidad, donde un locutor de radio por
ejemplo, puede dar a conocer un hecho, generar un análisis a partir del mismo y
posteriormente vincularlo con otras áreas como economía, política o
entreteniendo.
De esta manera, lo expresado a través del lenguaje en los medios de
comunicación toma forma y mayor peso en la incidencia de lo social. Tal como lo
mencionara Ludwig Wittgenstein, para quien el lenguaje no es sólo un medio de
comunicación o de la verbalización de los pensamientos y señala que “hay una
correspondencia entre el lenguaje y el mundo” (Mattelart, Michèle y Armand, 1997,
pág. 95). 
Posteriormente, se propondrá “una definición de la comunicación como
‘convergencia’, un proceso en el que los participantes crean y comparten
información a fin de llegar a una ‘comprensión mutua’ [Rogers y Kincaid, 1981]”
(Mattelart, Michèle y Armand, 1997, pág. 108).
A medida que la película avanza, aparecen otras características y otras
connotaciones en la relación de los medios de comunicación y la sociedad. Se
puede observar, cerca del minuto 20, como se intenta cambiar la percepción de la
delincuencia por parte de la sociedad, que tiene una idea negativa del grado en
que ésta se desarrolla y de la efectividad de las instituciones gubernamentales por
contrarrestar la situación. 
Desde esta perspectiva, la comunicación se transforma en un medio que facilita la
información de lo que está haciendo otro grupo, lo quepermite controlar ciertos
canales de información con el objetivo de conservar el poder. Los medios informan
lo que un grupo minoritario de la población que, por lo general, contienen poder
político y económico, quiere expresar o mostrando lo que les interesa o les parece
mejor. Pero esta visión de mundo, está sesgada por sus intereses permitiéndoles
que, a través de los medios de comunicación en lo que también tiene incidencia,
se dé a conocer la vida de una delimitada e incompleta, suprimiendo la cabida
opiniones que difieran a las suyas.
Las élites dirigentes están también sensibilizadas respecto de potenciales
amenazas en el entorno interior, aparte de emplear fuentes de información
abiertas, también se adoptan medidas secretas, se toman precauciones
para imponer «seguridad» a tantas cuestiones políticas como sea posible. Al
propio tiempo, la ideología de la élite es reafirmada y las ideologías
contrarias son suprimidas. (Lasswell, Harold D., 1985, pág. 6).
Para lograr este objetivo, en la película, se pretende realizar una campaña o una
especie de propaganda donde se entreguen las cifras que hablan de la
disminución de la delincuencia en un tres por ciento. Es por eso, que
Subcomisionado “Julián Luna” (Juan Carlos Colombo) se contacta con “Gabriel”
para darle a conocer las estadísticas que avalan el descenso, el interés que tiene
el servicio de policía de México en dar a conocer su trabajo y el resultado de éste
en relación al control del crimen, para que este a su vez realice un producción
audiovisual de corta duración para graficar esta información y hacerla masiva a la
ciudadanía.
Con este hecho, se intenta modificar la percepción que se tiene de la
criminalización y de la efectividad de las fuerzas de orden y seguridad por
contrarrestar el crimen organizado, cambiando del foco de atención de los
ciudadanos hacia una menor percepción de criminalización, para aumentar la
seguridad de en el país. 
Esta visión de los medios, se ve contenida en los estudios de agenda setting,
donde se postula que “los medios de comunicación nos dicen no lo que hay que
pensar, sino en qué hay que pensar” (Mattelart, Michèle y Armand, 1997, pág.
102). Por lo que, delimitan los temas que deben ser objeto de debate en la
sociedad, visibilizando u omitiendo temas de distinta índole, con mayor o menor
influencia en la sociedad. De esta manera, se realiza un selección de temas que
se abordarán en la entrega informativa y que pretenden ser los de mayor
relevancia para la comunidad en que se emiten.
Aún cuando el nivel de delincuencia pudo haber disminuido, Gabriel, el
protagonista se reúsa a aceptar el trabajo debido a su experiencia personal y a la
de su círculo que ha sido constantemente afectado por la delincuencia. Esta
decisión, además, se ve complementada con lo expresado en los medios que
refuerzan el constructo de la gran cantidad de hechos delictuales ocurridos en la
ciudad, manteniéndose la sensación de gran criminalidad. En este momento, se
podría decir que los medios cumplen función de reforzar una idea, puesto que no
sólo muestran lo que ocurre sino que lo muestran con mayor intensidad, lo que no
permite cambiar la percepción que se tiene de aquel constructo creado, o también
como lo intenta el subcomisionado Luna, reforzar la idea contraria para cambiar la
percepción de la opinión pública frente al mismo tema.
Pero además, los medios son capaces de invisibilizar cierta información, ya sea
consciente o no, hay un grupo de datos que queda fuera de la entrega informativa
y conlleva a una deficiencia, puesto que no entregan una visión completa de lo
que en realidad está ocurriendo. Este rango de información faltante puede incurrir
en que los receptores puedan formarse una idea equívoca o moldeada según solo
un punto de vista, que permite ver una parte del conjunto total de factores que
afectan y modifican una situación determinada.
Ignorancia significa ausencia, en un punto determinado del proceso de la
comunicación, del conocimiento disponible en otro punto cualquiera de la
sociedad. El personal destinado a reunir y diseminar la información, carente
de una formación apropiada, tergiversa o descuida continuamente ciertos
hechos. (Lasswell, Harold D., 1985, pág. 7)
Asimismo, los medios se vislumbran como un dispositivo para poder cambiar la
percepción sobre los hechos y se les usa para contrarrestar alguna situación. Es
por esto, que ya no se les considera como un ente meramente difusor, sino que,
además, se le otorga la propiedad de que puede modelar la opinión pública, la
opinión del espectador, mediante la repetición constante de algunos temas.
 
Se parte de la exigencia política de convencer a la población o a grupos
sociales determinados, de la conveniencia de aceptar como positiva una
determinada idea, consigna o línea de conducta. No se trata ya de saber,
simplemente, cómo opina la gente, sino de hacer que la gente actúe de una
determinada manera. (De Moragas S., Miquel, 1981, pág. 58).
Por otro lado, en Todo el poder se muestra cómo se pretende manipular, de
alguna forma, la información que se entrega por los medios de comunicación. El
poder político utiliza los medios para dar a conocer su perspectiva y los medios la
replican. Así, los medios se ven influenciados por los poderes de la sociedad y son
utilizados para que un grupo de la sociedad logre alcanzar sus intereses. 
Dentro de su estudio, Herbert I Shiller encuentra la red de intereses económicos
que determinan el funcionamiento de la mass media y constata que para la
dominación de una sociedad no sólo es necesario un poderío militar, sino que
además es necesario controlar la semántica de la mass media. “En la sociedad
capitalista desarrollada, la clase dominante genera un sistema cultural, una
estructura de valores, cuya finalidad es la de conseguir que la población mantenga
un sistema de expectativas en sintonía con el status quo dominante”. (De Moragas
S., Miquel, 1981, pág. 83).
Desde otro punto de vista y hacia el final en la película de Sariñana, los medios
son considerados cómo un dispositivo de poder. La relación de los medios en la
sociedad es de gran influencia, puesto son capaces de cambiar radicalmente el
curso de las cosas y crear un nuevo escenario para una situación dada con
anterioridad. Esta particularidad de los medios, se sitúa ya en los años cuarenta,
cuando se afirmaba que “los medios de comunicación resultan sospechosos de
violencia simbólica y son temidos como medios de poder y dominación”. (Mattelart,
Michèle y Armand, 1997, pág. 51).
Este poder de los medios de comunicación y su inminente influencia en la
sociedad, queda demostrado cuando Gabriel amenaza al subcomisario Luna con
la difusión del material audiovisual que tiene de él, donde su vinculación a la red
de crimen organizado se constata de manera concreta y comprobable. La difusión
del material audiovisual en los medios de comunicación no sólo cambiará el curso
de los eventos sino que eventualmente, Luna podría perder toda su carrera y
poder político, estatus quo, credibilidad e influencia en la sociedad como líder de
opinión. “La falta de cualificación puede, también, contribuir a la ineficacia de la
comunicación. Con excesiva frecuencia el comunicador consigue su prestigio
gracias a la utilización de hechos deliberadamente falsos o deformados”.
(Lasswell, Harold D., 1985, pág. 7)
Por lo mismo, su discurso en favor de la disminución de la criminalidad quedaría
sepultado, dando paso a una condena por parte de la opinión pública que,
además, estaría acompañada de responsabilidades jurídicas y civiles por estar
vinculado a redes de acciones ilegales, por manipulación de instrumentos y
facultades de la administraciónpública para el usufructo personal. 
De esta manera se constata la supremacía de la divulgación de la información,
que mediante su rapidez de difusión, pluralidad de formatos de entrega y su
amplio rango de alcance permite que los datos que informan estén disponibles a
todo el que tiene acceder a ellos, al mismo tiempo que genera reacciones
inmediatas sobre los temas expuestos y que obtienen mayor respuesta en la
medida que afecta a un mayor número de personas. Así, “la comunicación de
masas puede llegar a ser un instrumento de libertad y mejora de las condiciones
de vida” (De Moragas S., Miquel, 198, pág. 126).
En contraste a esto, el protagonista, se ve un poco limitado en la entrega de todo
esta información, puesto que el no es el único involucrado, también esta su familia
y amigos. Mientras que, la red a la que se enfrenta tiene gran poder e influencia en
la sociedad, por lo que la divulgación misma podría haberle generado
repercusiones negativas para él. 
Por tanto, aun cuando cuenta con la información audiovisual, los medios están
controlados por estos poderes fácticos del Estado que restringen que la
información sea difundida. De esta manera, la libertad de expresión también se ve
limitada puesto que no puede decir lo que se quiere, por miedo o temor de las
represalias que esto pueda acarrear. “Mientras para unos la garantía de la libertad
<<dejar hacer, dejar pasar>>, la constituye el respeto a la libre iniciativa, para
otros la libertad de información es negada en su misma raíz cuando no se facilitan
los medios adecuados para ejercerla” (De Moragas S., Miquel, 1981, pág. 118).

Continuar navegando