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501 leSiOneS QUíSTicAS del PáncReAS Dr. Guillermo Watkins Sepúlveda Introducción La importancia de conocer las Neoplasias Quísticas de Páncreas (NQP) radica en el aumento de su incidencia, en la potencial malignización de algunas de ellas, en que afectan más frecuentemente a la población mayor y que su resección quirúrgica no está exenta de morbimortalidad. La conducta de intervención u observación tiene gran importancia para el médico clínico. Historia A principios del siglo XIX, se clasificaron las lesiones quísticas del páncreas en quistes infecciosos, quistes hemorrágicos, quistes de retención y pseudoquistes. En 1830, Beust publicó un quiste pancreático neoplásico. En 1926, Fiedenwald y Cullen publicaron la transformación maligna de tres neoplasias quísticas drenadas con anterioridad. Luego, en 1929, Lichtenstein publicó la “transformación” de un cistoadenoma en un cistoadenocarcinoma. El mismo año se diferencian por primera vez los tumores macroquísticos (con epitelio de recubrimiento cilíndrico) de los tu- mores microquísticos (con epitelio de recubrimiento cuboide). Sólo en el año 1978, Compagno y Oertel, caracterizan las lesiones quísticas serosas y mucinosas y en 1982 Ohashi describe la neoplasia papilar intraductal mucinosa. Epidemiología Las NQP han incrementado su prevalencia llegando a encontrarse entre 2,6 y 13,5% de las Tomografías computadas (TAC) o Resonancias de abdomen (RNM) realizadas en adultos por otra causa. La cifra puede llegar a 40% en los mayores de 80 años. En Chile, la estadística ministerial de egresos hospitalarios recién las individualizó a partir del año 2012 y muestra una prevalencia anual para el período 2012-2014 de 52 casos, cifra muy por debajo de su incidencia real debido a que la mayoría de estas lesiones son manejadas en forma ambulatoria. Estos 52 casos pueden corresponder a las NQP tratadas quirúrgicamente. Clasificación de las NQP Existen varias clasificaciones de las NQP, una de ellas es la de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que se muestra en la Figura 1. Dada la complejidad de la clasificación de la OMS se han desarrollado otras
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