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Victoria en la Tormenta Una Guía para Derrotar el Desaliento y la Depresión por Sandra Hastings MaxHoltMedia VICTORIA EN LA TORMENTA ©2017 Sandra Hastings Cuarta Impresión Edición anterior (CONTRAATAQUE) © 2002 Traducido al español por Fanny Hurtado, revisado por Nolan McFadden 2017 Todos los derechos reservados. No se permite reproducir ninguna parte de este libro, de ninguna forma ni por ningún medio, sin el permiso por escrito del editor, excepto por un revisor que puede citar pasajes breves en una reseña. En esta traducción las citas de las Escrituras están basadas en la Santa Biblia Versión Reina Valera 1960 (RVR) Publicado por MaxHoltMedia 303 Cascabel Place, Mount Juliet, TN 37122 www.maxholtmedia.com El autor es totalmente responsable por el contenido y la edición de este trabajo y Max Holt Media no ofrece ninguna garantía, expresa o implícita, ni asume alguna responsabilidad legal o responsabilidad por la exactitud de la información aquí contenida. El autor es responsable de obtener el permiso para usar cualquier parte de este trabajo que pueda ser propiedad intelectual de otra persona u organización. Cubierta diseñada por Max Holt Media Cover Photoi: ID 18063067 © Iakov Filimonov, Dreamstime.com ISBN -13: 978-1-944537-32-6 DEDICACIÓN Dedicado con amor y aprecio a los dos queridos amigos que me ayudaron y alentaron a través del valle más profundo de mi vida. http://www.maxholtmedia.com/ https://www.myidentifiers.com/myaccount_manageisbns_titlereg?isbn=978-1-944537-32-6&icon_type=new VICTORIA EN LA TORMENTA. "Sandy Hastings no escribe desde la perspectiva de la teoría cristiana. En cambio, escribe desde la experiencia cristiana...su propia experiencia cristiana. Los principios que ella comparte en este volumen han sido probados en los altibajos de su propio caminar como misionera, esposa, madre, consejera y mujer que aprendió la lección de la total dependencia del Señor. No leas simplemente este libro. Respíralo". - Dr. Gin Wood, Misionero / Pastor, Rheinland Baptist Church, Landstuhl, Alemania "En Victoria en la Tormenta , Sandy Hastings ha asumido una gran prueba de su vida, la convirtió en algo útil para los demás glorificando al Señor Jesús. Muchas mujeres (y hombres) están en el tormento del problema de la depresión...clínica (físicamente afín), emocional y espiritual. El testimonio de Sandy de la sanidad de Dios a través de Su Palabra será beneficioso para cualquier persona que padezca depresión, para sus amigos y familiares, y para los consejeros de las personas deprimidas". - Mina Oglesby, Cantautora y Conferencista, Chattanooga, TN “Un día recogí este libro, Victoria en la Tormenta y no pude dejarlo. Doy gracias a Dios porque le dio a Sandy el deseo y la fuerza para escribir. He estado luchando con el desánimo y la depresión por algún tiempo. Mientras lucho contra Satanás con la palabra de Dios y, no por mí, sé que tendré la victoria. Gracias por escribir este libro." - David Collins, Empresario, El Paso, TX "Leí Victoria en la Tormenta por primera vez como un recurso para ayudar a otros. Pero cuando me desanimé y enfrenté la depresión saqué Victoria en la Tormenta del estante y lo leí con otros ojos. Me pareció muy útil para mí personalmente, especialmente trabajando en los versículos dados. Ahora tengo a Victoria en la Tormenta como un recurso para ayudar a los demás y para mí. Todos somos susceptibles a los ataques de Satanás y Victoria en la Tormenta es una gran arma porque nos ayuda a comprender lo que Dios nos ha provisto para enfrentar las artimañas del diablo". - Phyllis Brakeen, Esposa de misionero, Siberia "La preocupación no vacía tus penas del mañana; vacía tu fuerza de este día". - Corrie Ten Boom CONTENIDO Notas de la Autor a Prefacio 1. “NO ME ELEGISTEIS VOSOTROS A MÍ, SINO QUE YO ELEGÍ A VOSOTROS …” 2. “Y SABEMOS QUE A LOS QUE AMAN A DIOS, TODAS LAS COSAS LES AYUDAN A BIEN,… ” 3. “LA SOBERBIA DE TU CORAZÓN TE HA ENGAÑADO ,” 4. “ERRÁIS, IGNORANDO LAS ESCRITURAS ...” 5. LA NECESIDAD DE NUESTROS CORAZONES 6. PERDÓN 7. SEGURIDAD . 8. MISERICORDIA 9. CONFIAR EN DIOS 10. AGRADECIMIENTO 11. ALABANZA 12. “ A JEHOVÁ CLAMÉ …” 13. NUESTRA POSICIÓN EN CRISTO EPÍLOGO ACERCA DE LA AUTORA . Mi ojo no está en la densidad de la niebla, sino en el Dios viviente que controla cada circunstancia de mi vida.” George Mueller NOTAS DE LA AUTORA Fui al campo misionero como una joven esposa y madre convencida de que conocía al Señor y de cómo vivir la vida para Él. Tenía grandes intenciones, pero mucho por aprender. Entre otras cosas, el Señor eligió la depresión para ser parte de mi experiencia de aprendizaje. Mientras comencé a salir del lugar oscuro y sin esperanza en el que había estado, vi multitudes de mujeres luchando en la misma oscuridad. Mi corazón fue hacia ellas y quise compartir lo que Dios me había enseñado. Animada por este deseo, el Señor me llevó a escribir la primera versión de "Victoria en la Tormenta". El Señor siempre estuvo allí protegiendo, enseñando y proveyendo para mis necesidades. Él envió personas especiales para ayudarme. Estoy extremadamente agradecida con el Rev. L.E Holmes y su querida esposa Edna. Ellos invirtieron incontables horas no solo con mi esposo y conmigo, sino también con nuestros hijos mientras luchaba en la oscuridad. No afirmaron tener todas las respuestas, sino que nos dieron la Palabra de Dios envuelta en amor y comprensión. Este libro ha sido revisado y reimpreso varias veces, y hoy continúa siendo utilizado por el Señor. También se ha traducido al alemán, ruso y rumano. La depresión no está limitada a ninguna edad, cultura, género o posición social en particular. Le puede pasar a cualquiera, y aunque las causas varían, el oscuro sentimiento de desesperanza y desesperación es el mismo. En este libro, comparto mi testimonio y un bosquejo sobre lo que significa ser una nueva criatura en Cristo. Conocer y reclamar posesión personal de estas verdades transformará tu vida espiritual y traerá tu victoria sobre la depresión. PRE FACIO Estoy segura de que Sandy no estaba pensando en identificarse con otros cuando estuvo luchando contra la depresión, sino solo en sobrevivir. Por la gracia de Dios, ella no solo sobrevivió, sino que desarrolló un mayor amor por Dios y Su Palabra. Compartir una experiencia tan dolorosa y revelar las propias emociones profundas no es algo fácil. Sin embargo, cada vez que Sandy intentaba dejar el libro a un lado, el Señor la enfrentaba cara a cara con alguien que necesitaba desesperadamente combatir la depresión, y la urgencia de terminar lo que se había iniciado fue renovada. Victoria en la Tormenta es una mirada muy práctica sobre el desaliento y la depresión, y es fácil de narrar. Muchos pidieron copias de este libro cuando solo eran montones de notas escritas a mano. Su deseo al compartir este libro es glorificar a Dios por lo que ha hecho por ella y ayudar a otros que están experimentando depresión. Ese deseo se cumplirá, ya que muchos ya han recibido ayuda, y Sandy ha asesorado a las mujeres individualmente y en grupos al hablar en las reuniones de damas en las iglesias. Ya estoy agradecida por lo que el Señor hará con este pequeño libro. La ayuda por la que muchos están orando la encontrarán en Victoria en la Tormenta . - Edna Holmes, Esposa de Pastor. Grapevine, Texas 1 “NO ME ELEGISTEIS VOSOTROS A MÍ, SINO QUE YO ELEGÍ A VOSOTROS…” En la gracia de Dios, Él me atrajo hacia sí, cuando por fe, fui salvada a la edad de diez años. A esta edad temprana la mano del Señor estaba guiando mi vida. Al ser criada como un hija única, mis padres y yo éramos muy unidos y juntos compartimos la mayoría de todo. Sin embargo, ellos no eran salvos durante este tiempo y, por lo tanto, no pudieron entender asuntos espirituales.A pesar de esto, mi deseo de conocer al Señor y de ser usada por Él parecía crecer. No lo entendí, pero hubo momentos en el tiempo que me hicieron darme cuenta de que Dios tenía un plan definido para mi vida. Mis padres me enseñaron a ser independiente y autosuficiente; estas son cualidades deseables; pero mezcladas con mi fuerte voluntad, resultarían ser un obstáculo en mi vida cristiana. Al final de la escuela preparatoria, aunque todavía no estaba segura de lo que el Señor quería para mi vida, empecé mi formación como enfermera. Durante los dos años siguientes, en mi trabajo me enfrenté a la muerte día a día. Podía ver la realidad de Job 24:22 "… ninguno está seguro de la vida ." Santiago dijo, “… es neblina que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece .” (Santiago 4:14) Con más determinación que nunca supe que quería que mi vida contara para el Señor. Con toda mi sinceridad comencé a planear cómo podría servirle. A menudo seguía mi propia iniciativa y planificación en lugar de la dirección del Espíritu Santo. Había conocido a Thomas Hastings en mi último año en la escuela preparatoria. Estuvimos saliendo durante nuestros primeros días de universidad. Nos casamos justo después de mi graduación de formación como enfermera en 1966. Antes del matrimonio, Tom ya se había entregado para predicar y yo esperaba con ansia el ministerio. Sin embargo, dos meses después de casarnos, el Espíritu Santo llenó nuestros corazones y nos entregamos para ser misioneros. Era casi increíble para mí. No era mi plan. En mi opinión, los misioneros eran personas super-espirituales que tienen una relación especial con Dios. Yo era cualquier cosa, menos eso, y ciertamente no me sentía capaz de dar semejante servicio. Sin embargo, como dice Juan 15:16, Él me eligió, yo no lo había elegido. El sabía lo que haría con mi vida, y cómo cumpliría el propósito que había planeado desde el principio. Usa ésta y la siguiente página para anotar cómo te sientes acerca de que Dios "te haya escogido". (Efesios 1:4) ¿Es esta verdad una realidad en tu vida? Si es así, ¿cómo ha impactado la realidad en tu viaje a través de TU tormenta? Haz una lista de las referencias bíblicas adicionales que te están ayudando. 2 “Y SABEMOS QUE A LOS QUE AMAN A DIOS, TODAS LAS COSAS LES AYUDAN A BIEN,…” En 1967, mi esposo y yo nos matriculamos en el Baptist Bible College. Estábamos deseosos de aprender acerca del Señor y de cómo pudiéramos servirle de manera más eficaz. En este punto yo había aceptado Su voluntad para ser misioneros, sin embargo, mi voluntad obstinada todavía, a menudo estaba en el mando. Durante el primer año asistí a clases de tiempo completo y trabajé tiempo parcial como enfermera registrada. Mis responsabilidades aumentaron a mediados de año, mi esposo se convirtió en Pastor de una pequeña iglesia rural. Los tres años siguientes de nuestra vida escolar estuvieron muy ocupados: mi esposo continuó como pastor durante dos años y enseñó medio día en una escuela cristiana, y nacieron dos de nuestros tres hijos. De alguna manera, a medida que aumentaba mi actividad y la demanda de mi energía, comencé a descuidar mi tiempo personal con el Señor. Así como Jesús le habló a Marta en Lucas 10:40-42, me preocupé por muchas cosas y descuidé lo más necesario. Al graduarnos, entramos en una nueva etapa de nuestra vida. Mi marido comenzó a viajar por el país presentando el campo de Alemania a muchas iglesias. A medida que fueron guiadas por el Señor para apoyarnos, ganamos los fondos necesarios para ir al campo misionero. Fue un tiempo agitado y el primer campo de pruebas real para las cosas que nos habían enseñado en la escuela. En quince meses habíamos levantado nuestro apoyo y, con muchas expectativas, nos dirigimos a Alemania Occidental. Nuestro primer año y medio estuvimos muy ocupados y asistimos a la escuela de idiomas, trabajamos con una iglesia militar estadounidense, y nació nuestro tercer hijo. En 1974, nos mudamos a Koblenz donde nuestra obra en Alemania iba a ser establecida. Durante los siguientes cuatro años, no hubo interrupción en la ocupación de mi tiempo y energía. Los días se llenaron con la traducción de lecciones, la enseñanza de damas y reuniones de niños y trabajar en la música para la iglesia. Con tres niños en la escuela, siempre había alguna actividad que necesitaba atención. Debido a nuestra ubicación, nuestro hogar se convirtió en una escala para muchos pastores, otros misioneros y familias militares solitarias que deseaban tener compañerismo. A medida que las horas se hacían cada vez más abarrotadas, la presión empezó a aumentar. Sin embargo, todavía creía que podía manejar cualquier situación o tarea. Oré, leí mi Biblia, y muchas veces me hice cargo de mis necesidades y preocupaciones al Señor, pero mi confianza estaba en mí, no en Él. En 1 Corintios 10:12 Pablo dijo: “ Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga .” Ciertamente, yo estaba en la cima de una caída. Con el paso del tiempo, el ritmo de nuestra vida continuó su aceleración. Los huéspedes en nuestra casa fueron casi constantes mientras nuestro trabajo creció, trayendo más actividad con esto. Parecía que la fatiga se había convertido en un compañero constante. Debido a que no podemos separar las partes físicas, espirituales y emocionales de nuestro ser, cada parte comenzó a verse afectada. Nada parecía funcionar normalmente. A veces las exigencias del momento me obligaban a continuar. Mi confianza en mí misma y mi resistencia estaban siendo llevadas más allá del límite. El miedo y una inexplicable sensación de presentimiento comenzaron a surgir. Aunque no confío en nadie, el Señor sabía exactamente dónde estaba. Incluso como Jeremías 23:24 dice, “¿Se ocultará alguno, dice Jehová, en escondrijos que yo no lo vea? ¿No lleno yo, dice Jehová, el cielo y la tierra?” Mi marido y yo tuvimos mucho que aprender sobre la comunicación y nuestras prioridades en el trabajo. De alguna manera, habíamos adquirido la idea de que el trabajo era lo primero, independientemente de las necesidades en las otras áreas de nuestra vida. Nos tomamos tiempo para la gente y cada necesidad del trabajo, pero poco o nada de tiempo del uno para el otro. Mi situación parecía haber alcanzado su máximo durante el último año en el campo misionero. El pánico pasó a través de mí cuando me di cuenta de que estaba perdiendo el control por primera vez en mi vida. Mi auto suficiencia y fuerza se habían agotado. Cuanto más me sentía deslizar, más me esforcé y más resentida me volví. Sentí que todo en mi vida estaba cayendo a pedazos y no podía ver en absoluto que Dios estaba trabajando todas las cosas para mi bien (Romanos 8:28). En este punto, Dios en Su gran misericordia, dirigió a mi marido para llevarnos a los EEUU en un permiso. Pensé que lo peor había terminado, pero ni siquiera había comenzado. ¿Te sientes abrumado por las responsabilidades o las expectativas de los demás? Haz una lista de todo esto. ¿Qué cosas parecen no estar trabajando juntas en tu viaje a través de TU tormenta? ¿Qué podría estar tratando de mostrar Dios? Enumera las referencias de las Escrituras que te están ayudando. 3 “LA SOBERBIA DE TU CORAZÓN TE HA ENGAÑADO,…” Las noches se volvieron largas y mi sueño intranquilo. Mi cuerpo dolía de fatiga, pero mi mente no podía estar quieta. Se precipitaron los días contando el trabajo que se había hecho y todos los proyectos no terminados. Parecía que podía oír a Satanás, como se describe en Apocalipsis 12:10, acusándome delante del trono día y noche. Me pareció que la Escritura dice en Deuteronomio 28:67: " Por la mañana dirás: ¡Quién diera que fuese la tarde! y a la tarde dirás: ¡Quién diera que fuese la mañana! ” Satanás en su manera astuta parecía atacar desde todas las direcciones. Una sensación de impotencia aumentó a medida que las viejas dudas resurgieron, irritaciones menores se convirtieron en problemas mayores y surgieron nuevas tentaciones. Me sentí dominadapor sentimientos de culpa, inferioridad y falta de valor propio. Un fuerte deseo de escapar empezó a ocupar mis pensamientos. A veces incluso jugaba con la idea del suicidio. Pensé: "Oh Dios mío, ¿soy tan pecaminosa? ¿Me has abandonado por completo? ¿Dónde estás, Señor? Lentamente, mis emociones rotas y destrozadas comenzaron a filtrarse con amargura y resentimiento. Me encontré arremetiendo contra el Señor y los que me rodeaban. " ¡No es justo! He dado toda mi vida al Señor: abandonado mis ambiciones, mis deseos. Incluso había dejado mi patria y me esforcé por adaptarme en un país extranjero. Había trabajado y hecho lo mejor que pude, ¿cómo pudo pasarme esto? ” Todavía no me había dado cuenta de que mi servicio había sido por miedo y no por amor. Mi idea de Dios no era de un Padre amoroso y misericordioso, sino más bien de un Creador poderoso y enojado que esperaba castigarme por cada error. Por lo tanto, trabajé para ganar Su aceptación y detener su mano de la ira. En momentos de silencio, mi mente retrocedió a lo largo de los años. Recordé dos casos distintos que eran claramente advertencias del Señor. Una vez, una esposa misionera mayor y más sabia que yo, me advirtió que debía frenar, tomar tiempo para mí y mis propias necesidades. Escuché, pero no lo relacioné conmigo. Tú puedes ver, hasta ahora yo nunca fui inestable o que tuve problemas de depresión. Mi vida estaba llena, ocupada y satisfecha. En otra ocasión, una amiga, que también es la esposa de un pastor, me advirtió sobre el paso rápido que yo mantenía. Me encogí de hombros, después de todo, ella era mayor que yo y tenía algunos problemas de salud. Yo estaba sana y fuerte, y siempre había mantenido una agenda agitada en nuestro ministerio. No podía dejar nada de lado. No me di cuenta de que mi visión estaba borrosa por el orgullo. Como Abdías dijo, " La soberbia de tu corazón te ha engañado,… " (Abdías 1:3). No había escuchado la escritura en Proverbios 12:15, "El camino del necio es derecho en su opinión ; Mas el que obedece al consejo es sabio .". Es increíble lo limitada que puede ser nuestra visión espiritual. No tenía idea de las lecciones que Jehová iba a enseñarme, ni las bendiciones que había preparado. Me di cuenta de que estaba refinando el vaso que había escogido (Isaías 48:10). En las semanas y meses que siguieron, mi esposo se dio cuenta de que yo no podía hacer frente a las exigencias del campo misionero. Por lo tanto, en 1979, después de nueve años de servicio, renunciamos como misioneros. Utiliza este espacio para escribir cómo el orgullo te ha afectado y cómo Dios te está ayudando a lidiar con aquel en tu viaje a través de TU tormenta. Haz una lista de las cosas que has "sacrificado" por Dios. Cuando estamos luchando con orgullo, ¿quién está en el centro de nuestros pensamientos? (1 Juan 2:16) Enumera las referencias bíblicas adicionales que le están ayudando. 4 “ERRÁIS, IGNORANDO LAS ESCRITURAS...” ¿Puede relacionarse con alguna de las situaciones anteriores? Más que nunca, mujeres cristianas se encuentran en alguna etapa de la depresión. ¿Es esto un nuevo dilema o enfermedad? ¡Definitivamente no! La Palabra nos dice en Eclesiastés 1:9, "...y nada hay nuevo debajo del sol." Esto es definitivamente cierto con respecto a la depresión. Muchos grandes hombres de la Biblia lo experimentaron. Moisés, en Números 11:15, se sintió desesperado por los pecados de los hijos de Israel. Elías, en 1 Reyes 19:4, pidió a Jehová que le quitara la vida. En gran angustia, Job dijo, “Está mi alma hastiada de mi vida;…” (Job 10:1) Incluso los discípulos de Jesucristo en diferentes ocasiones se sintieron derrotados, rechazados, temerosos y querían renunciar. Sin embargo, la depresión parece estar en un momento histórico en nuestra sociedad actual. Las causas varían desde la enfermedad física, a la muerte de un ser querido, crisis financiera, una experiencia traumática personal, o fatiga extrema. Pero quizás una de las principales causas para los cristianos es la falta de lectura y conocimiento de la Palabra de Dios. " Entonces respondiendo Jesús, les dijo: Erráis, ignorando las Escrituras y el poder de Dios ." (Mateo 22:29). Cada cristiano está ocupado en una batalla, pero no de carne y sangre. Pablo dijo que estamos luchando “…contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes." (Efesios 6:12) Satanás, el líder de estos principados y potestades es astuto, engañoso, vicioso y poderoso. Una vez que somos salvos, nuestras almas no están en peligro (Juan 10:27-28), pero podemos ser atacados física y emocionalmente. " Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar ." (1 Pedro 5:8). Cristo le dijo a Pedro: " Simón, Simón, he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo ..." (Lucas 22:31). ¿Cómo entonces podemos luchar contra este enemigo? Efesios 6 describe nuestra armadura espiritual, incluyendo nuestro escudo de fe. Cuando estamos desanimados y deprimidos, nuestra fe es definitivamente débil, causando que nuestro escudo sea bajado. Además, la Palabra se describe como nuestra espada. Si descuidamos Su Palabra , no tenemos ninguna arma con la cual luchar. En este estado desprotegido somos vulnerables a todo ataque de Satanás. Su ataque puede no ser obvio, pero sí sutil, como lo fue con Eva en el Jardín del Edén. Él nos sacude a nuestro mismo fundamento mientras pregunta: "´¿ Ha dicho Dios?´”, nada “…nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro ? (Romanos 8:38-39); “¿´ Ha dicho Dios´: “porque todo aquel que invocare el nombre del Señor será salvo ?'" (Romanos 10:13) Somos atormentados en agonía mientras nuestras mentes están inundadas de incredulidad y miedo. Debido a que estamos tan abrumados por estos sentimientos, no nos damos cuenta de que esto es pecado. Pablo dijo, "...todo lo que no proviene de fe, es pecado." (Romanos 14:23) y "Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio ." (2 Timoteo 1:7) Si continuamos en estos pensamientos temerosos, incrédulos, mezclados con la culpa, nos encontraremos cayendo precipitadamente en un torbellino solitario de desesperación. A medida que comienza a descender en espiral, aumenta en rapidez e intensidad. Cuanto más dudes, mayor es el temor, más pesada es la culpa. Clamamos desesperados por ayuda antes de que estemos totalmente quebrados. Rogamos " Oh Jehová, Dios de mi salvación, Día y noche clamo delante de ti. Porque mi alma está hastiada de males, Y mi vida cercana al Seol. Soy contado entre los que descienden al sepulcro; Soy como hombre sin fuerza, " (Salmo 88:1,3,4). Hay ayuda. Jehová dice “ No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.” (Isaías 41:10) Debemos enfrentar la realidad del pecado en nuestras vidas. Es este pecado el que está robando nuestro gozo y poder, y causándonos ser inmovilizados en nuestra vida cristiana. Sin embargo, es de vital importancia que nos demos cuenta de que el pecado no está en la tentación, sino la entrega. Una vez reconocido y confesado, el perdón del Señor es seguro y Él comienza a restaurar nuestra alma. Aunque la batalla ha cambiado, la lucha no ha terminado. Satanás nunca se rinde tan fácilmente. Después de haber confesado nuestro pecado y haber sido perdonados, él puede tratar de derrotarnos con sentimientos recurrentes de culpa. Es inútil tratar de razonarlo. Sólo las Escrituras pueden vencer este ataque y darnos la seguridad que necesitamos. Juan nos dice que " Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad. " (1 Juan 1:9) Porque Dios no puede mentir (Tito 1:2), podemos estar seguros de que somos perdonados. Jehová dice " Yo, yo soy el que borro tus rebeliones por amor de mí mismo, yno me acordaré de tus pecados ." (Isaías 43:25). Por lo tanto, si nuestros pecados son confesados, son perdonados y olvidados. Si son olvidados, entonces la culpa que sentimos no proviene del Espíritu Santo, sino del padre de la mentira, Satanás (Juan 8:44). Si seguimos escuchando a sus mentiras, nuestra condición empeorará hasta que ya no podamos hacer frente a la realidad o ser activos en la obra del Señor. Con el tiempo, algunos pueden, en total derrota, tomar su propia vida como un medio de escape. Esto es una enorme pérdida y un profundo dolor para nuestro Señor. Dios nos dice que tenemos un sumo sacerdote “que fue tentado en todo…” como nosotros somos tentados (Hebreos 4:15-16). Eso significa que él ha experimentado la misma tentación contra la que luchamos. Sin embargo, no pecó y tuvo victoria sobre Satanás en todas las áreas. Nos dice , “Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.” (Hebreos 4:16) Tal vez no hay mayor necesidad que cuando estamos siendo destruidos por el desánimo y la depresión. Cristo no sólo proveyó el camino de la salvación (Juan 14:6), y soportó cada forma de tentación sin pecar, también dio a cada creyente nacido de nuevo el poder de resistir al Diablo (Santiago 4:6-7). La capacidad de resistir viene mediante de la fe (1 Pedro 5:9), y la fe proviene de la Palabra de Dios (Romanos 10:17). Podemos tener la victoria sobre la depresión y derrotar a todos los diversos ataques de Satanás. Nuestro poder está en la Palabra de Dios. A medida que la leemos, mediante esto y reclamarlo por la propia vida personal, nuestra fe aumentará. Así como Hebreos 10:23 dice, " Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió. " Si la victoria estuviera basada en nuestra habilidad para ser más inteligentes que Satanás, estaríamos perdidos. Pero la batalla es del Señor y sólo tenemos que leer su Palabra, aceptarla como verdad y aplicarla a nuestras vidas personales (Zacarías 4:6). A menudo buscamos ayuda y alivio de nuestros compañeros, familiares o amigos, pero no hay nadie que pueda darnos la victoria y la paz que deseamos, excepto Jehová. " Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado ." (Isaías 26:3). Usted puede encontrarse en el mismo dilema que yo. ¿Dónde debo leer? ¿Dónde empiezo? El Señor me condujo al libro de Salmos. Cuando comencé a leer, David a través de la dirección del Espíritu Santo, expresó los mismos sentimientos que sentí. Las Escrituras se referían a mí. Lentamente las promesas de perdón y misericordia se hicieron realidad, trayendo consigo paz y consuelo. Esto no sucedió de la noche a la mañana, ni siquiera en pocos días. Había tardado mucho tiempo en llegar a este estado . Por lo tanto, la curación también llevaría tiempo. Tenía que leer todos los días, frecuentemente, pasando mucho tiempo durante el día poniendo la Palabra de Dios en mi corazón y mente. A veces esto no significaba leer muchos capítulos sino repetir los mismos versos una y otra vez hasta que comenzaron a ser realidad para mí. Mientras este proceso continuaba, lentamente, como David, alabaría a Jehová y ganaría la victoria en mi vida. Nuestro Dios es fiel cuando promete oír a los quebrantados de corazón y sanar sus heridas. (Salmo 147:3) Desde entonces, he conocido a tantas otras mujeres cristianas y incrédulas que sufren de derrota y depresión. Por lo tanto, es mi deseo compartir lo que el Señor, a través de Su Palabra, ha hecho por mí con la esperanza de que será una ayuda y aliento a otros. En las páginas siguientes, los versículos de los Salmos se clasifican de la manera en que fueron una bendición para mí. Al leerlos, piensa en ellos y pídelos para tu vida. Son las promesas de Dios para TI. Escribe lo que la Palabra de Dios significa para ti. ¿Cómo ha influido en tu vida en tu viaje a través de TU tormenta? ¿Sabías que la Biblia es la carta de amor de Dios para ti? Considera ese pensamiento mientras lees la siguiente sección de este libro. Lee Colosenses 3:16. Enumera otras referencias de las Escrituras que te estén ayudando. 5 LA NECESIDAD DE NUESTROS CORAZONES SALMOS 13:1 “ ¿Hasta cuándo, Jehová? ¿Me olvidarás para siempre? ¿Hasta cuándo esconderás tu rostro de mí?”. 22:1,2 “ Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado? ¿Por qué estás tan lejos de mi salvación, y de las palabras de mi clamor? Dios mío, clamo de día, y no respondes; Y de noche, y no hay para mí reposo.”. 22:6 “ Mas yo soy gusano…”. 22:11 “No te alejes de mí, porque la angustia está cerca; Porque no hay quien ayude…”. 22:15 “Como un tiesto se secó mi vigor,…”. 22:19 “Mas tú, Jehová, no te alejes; Fortaleza mía, apresúrate a socorrerme…”. 25:4 “Muéstrame, oh Jehová, tus caminos; Enséñame tus sendas…”. 38:6 “Estoy encorvado, estoy humillado en gran manera,…”. 38:9,10 “ Señor, delante de ti están todos mis deseos, Y mi suspiro no te es oculto. Mi corazón está acongojado, me ha dejado mi vigor, Y aun la luz de mis ojos me falta ya.”. 40:11 “ Jehová, no retengas de mí tus misericordias; Tu misericordia y tu verdad me guarden siempre.”. 40:13 “Quieras, oh Jehová, librarme; Jehová, apresúrate a socorrerme.”. 55:4-6 “ Mi corazón está dolorido dentro de mí, Y terrores de muerte sobre mí han caído. Temor y temblor vinieron sobre mí, Y terror me ha cubierto. Y dije: !Quién me diese alas como de paloma! Volaría yo, y descansaría.”. 61:1,2 “Oye, oh Dios, mi clamor; A mi oración atiende. Desde el cabo de la tierra clamaré a ti, cuando mi corazón desmayare. Llévame a la roca que es más alta que yo,”. 63:1 “Dios, Dios mío eres tú; De madrugada te buscaré; Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela, En tierra seca y árida donde no hay aguas,”. 69:1-3 “ Sálvame, oh Dios, Porque las aguas han entrado hasta el alma. Estoy hundido en cieno profundo, donde no puedo hacer pie; He venido a abismos de aguas, y la corriente me ha anegado. Cansado estoy de llamar; mi garganta se ha enronquecido; Han desfallecido mis ojos esperando a mi Dios.”. 69:5 “ Dios, tú conoces mi insensatez, Y mis pecados no te son ocultos.”. 69:16-17 “ Respóndeme, Jehová, porque benigna es tu misericordia; Mírame conforme a la multitud de tus piedades. No escondas de tu siervo tu rostro, Porque estoy angustiado; apresúrate, óyeme.”. 69:20 “ El escarnio ha quebrantado mi corazón, y estoy acongojado. Esperé quien se compadeciese de mí, y no lo hubo; Y consoladores, y ninguno hallé.”. 70:1 “ Oh Dios, acude a librarme; Apresúrate, oh Dios, a socorrerme.”. 70:5 “Yo estoy afligido y menesteroso; Apresúrate a mí, oh Dios. Ayuda mía y mi libertador eres tú; Oh Jehová, no te detengas.”. 71:1-4 “En ti, oh Jehová, me he refugiado; No sea yo avergonzado jamás. Socórreme y líbrame en tu justicia; Inclina tu oído y sálvame. Sé para mí una roca de refugio, adonde recurra yo continuamente. Tú has dado mandamiento para salvarme, Porque tú eres mi roca y mi fortaleza. Dios mío, líbrame de la mano del impío, De la mano del perverso y violento.”. 86:1 “ Inclina, oh Jehová, tu oído, y escúchame, Porque estoy afligido y menesteroso.”. 88:1-4 “ Oh Jehová, Dios de mi salvación, Día y noche clamo delante de ti. Llegue mi oración a tu presencia; Inclina tu oído a mi clamor. Porque mi alma está hastiada de males, Y mi vida cercana al Seol. Soy contado entre los que descienden al sepulcro; Soy como hombre sin fuerza,”. 88:6-9 “Me has puesto en el hoyo profundo, En tinieblas, en lugares profundos. Sobre mí reposa tu ira, Y me has afligido con todas tus ondas. Selah Has alejado de mí mis conocidos; Me has puesto por abominación a ellos; Encerrado estoy, y no puedo salir. Mis ojos enfermaron a causa de mi aflicción; Te he llamado, oh Jehová, cada día; He extendido a ti mis manos.”. 88:15 “ Yo estoy afligido y menesteroso; Desde la juventud he llevado tus terrores, he estado medroso.”.102:1,2 “ Jehová, escucha mi oración, Y llegue a ti mi clamor. No escondas de mí tu rostro en el día de mi angustia; Inclina a mí tu oído; Apresúrate a responderme el día que te invocare.”. 119:107 “ Afligido estoy en gran manera; Vivifícame, oh Jehová, conforme a tu palabra.”. 130:1-3 “ De lo profundo, oh Jehová, a ti clamo. Señor, oye mi voz; Estén atentos tus oídos A la voz de mi súplica. JAH, si mirares a los pecados, ¿Quién, oh Señor, podrá mantenerse?”. 141:1 “ Jehová, a ti he clamado; apresúrate a mí; Escucha mi voz cuando te invocare.”. 142:1-6 Con mi voz clamaré a Jehová; Con mi voz pediré a Jehová misericordia. Delante de él expondré mi queja; Delante de él manifestaré mi angustia. Cuando mi espíritu se angustiaba dentro de mí, tú conociste mi senda. En el camino en que andaba, me escondieron lazo. Mira a mi diestra y observa, pues no hay quien me quiera conocer; No tengo refugio, ni hay quien cuide de mi vida. Clamé a ti, oh Jehová; Dije: Tú eres mi esperanza, Y mi porción en la tierra de los vivientes. Escucha mi clamor, porque estoy muy afligido. Líbrame de los que me persiguen, porque son más fuertes que yo.”. 143:4 “ Y mi espíritu se angustió dentro de mí; Está desolado mi corazón.”. 143:6 “Extendí mis manos a ti, Mi alma a ti como la tierra sedienta. Selah.”. 143:7 “Respóndeme pronto, oh Jehová, porque desmaya mi espíritu; No escondas de mí tu rostro, No venga yo a ser semejante a los que descienden a la sepultura.”. 143:9-12 “ Líbrame de mis enemigos, oh Jehová; En ti me refugio. Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios; Tu buen espíritu me guíe a tierra de rectitud. Por tu nombre, oh Jehová, me vivificarás; Por tu justicia sacarás mi alma de angustia. Y por tu misericordia disiparás a mis enemigos, Y destruirás a todos los adversarios de mi alma, Porque yo soy tu siervo.”. Usa ésta y la página siguiente para escribir los versículos de los Salmos que expresan cómo te sientes. Comienza a registrar las Necesidades de tu Corazón mientras viajas a través de TU tormenta. Escribe otros versículos que te están ayudando en este momento. 6 PERDÓN SALMOS 25:7 “ De los pecados de mi juventud, y de mis rebeliones, no te acuerdes; Conforme a tu misericordia acuérdate de mí, Por tu bondad, oh Jehová.”. 25:11 “Por amor de tu nombre, oh Jehová, Perdonarás también mi pecado, que es grande.”. 25:18 “Mira mi aflicción y mi trabajo, Y perdona todos mis pecados.”. 32:5 “Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis Transgresiones a Jehová; Y tú perdonaste la maldad de mi pecado. Selah.”. 38:18 “Por tanto, confesaré mi maldad, Y me contristaré por mi pecado.”. 51:1-2 “ Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; Conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones. Lávame más y más de mi maldad, Y límpiame de mi pecado.”. 51:7,9,10 “Purifícame con hisopo, y seré limpio; Lávame, y seré más blanco que la nieve. Esconde tu rostro de mis pecados, Y borra todas mis maldades. Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, Y renueva un espíritu recto dentro de mí.”. 51:16,17 “Porque no quieres sacrificio, que yo lo daría; No quieres holocausto. Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios.”. 86:5 “ Porque tú, Señor, eres bueno y perdonador, Y grande en misericordia para con todos los que te invocan.”. 103:10,12 “ No ha hecho con nosotros conforme a nuestras iniquidades, Ni nos ha pagado conforme a nuestros pecados. Cuanto está lejos el oriente del occidente, Hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones.”. 130:4,5 “Pero en ti hay perdón, Para que seas reverenciado. Esperé yo a Jehová, esperó mi alma; En su palabra he esperado.”. Usa esta página y la siguiente para registrar las áreas de tu vida donde luchas con el perdón. ¿Sufres con el sentimiento de culpa? Si es así, escribe los versículos de la lista anterior que te muestran el perdón de Dios. ¿Por qué Él nos perdona? (Efesios 1:7) Enumera las referencias bibliográficas adicionales que te están ayudando. 7 SEGURIDAD SALMOS 4:8 “ En paz me acostaré, y asimismo dormiré; Porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado.”. 5:11 “Pero alégrense todos los que en ti confían; Den voces de júbilo para siempre, porque tú los defiendes; En ti se regocijen los que aman tu nombre.”. 7:10 “Mi escudo está en Dios, Que salva a los rectos de corazón.”. 9:9 “El juzgará al mundo con justicia, Y a los pueblos con rectitud.”. 17:8 “Guárdame como a la niña de tus ojos; Escóndeme bajo la sombra de tus alas,”. 18:1-2 “ Te amo, oh Jehová, fortaleza mía. Jehová, roca mía y castillo mío, y mi libertador; Dios mío, fortaleza mía, en él confiaré; Mi escudo, y la fuerza de mi salvación, mi alto refugio.”. 18:18B “… Mas Jehová fue mi apoyo.”. 18:31-33 “ Porque ¿quién es Dios sino sólo Jehová? ¿Y qué roca hay fuera de nuestro Dios? Dios es el que me ciñe de poder, Y quien hace perfecto mi camino; Quien hace mis pies como de ciervas, Y me hace estar firme sobre mis alturas;”. 23:1 “ Jehová es mi pastor; nada me faltará.”. 27:1 “Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme?”. 27:13,14 “ Hubiera yo desmayado, si no creyese que veré la bondad de Jehová En la tierra de los vivientes. Aguarda a Jehová; Esfuérzate, y aliéntese tu corazón; Sí, espera a Jehová.”. 28:7,8 “Jehová es mi fortaleza y mi escudo; En él confió mi corazón, y fui ayudado, Por lo que se gozó mi corazón, Y con mi cántico le alabaré. Jehová es la fortaleza de su pueblo, Y el refugio salvador de su ungido.”. 29:11 “ Jehová dará poder a su pueblo; Jehová bendecirá a su pueblo con paz.”. 31:2-3 “ Inclina a mí tu oído, líbrame pronto; Sé tú mi roca fuerte, y fortaleza para salvarme. Porque tú eres mi roca y mi castillo; Por tu nombre me guiarás y me encaminarás.”. 31:19-20 “ ¡Cuán grande es tu bondad, que has guardado para los que te temen, Que has mostrado a los que esperan en ti, delante de los hijos de los hombres! En lo secreto de tu presencia los esconderás de la conspiración del hombre; Los pondrás en un tabernáculo a cubierto de contención de lenguas.”. 31:24 “Esforzaos todos vosotros los que esperáis en Jehová, Y tome aliento vuestro corazón. ”. 32:7-8 “ Tú eres mi refugio; me guardarás de la angustia; Con cánticos de liberación me rodearás. Selah Te haré entender, y te enseñaré el camino en que debes andar; Sobre ti fijaré mis ojos.”. 33:18-20 “He aquí el ojo de Jehová sobre los que le temen, Sobre los que esperan en su misericordia, Para librar sus almas de la muerte, Y para darles vida en tiempo de hambre. Nuestra alma espera a Jehová; Nuestra ayuda y nuestro escudo es él.”. 34:4 “ Busqué a Jehová, y él me oyó, Y me libró de todos mis temores.”. 34:7 “El ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen, Y los defiende.”. 34:10 “Los leoncillos necesitan, y tienen hambre; Pero los que buscan a Jehová no tendrán falta de ningún bien.”. 34:15 “Los ojos de Jehová están sobre los justos, Y atentos sus oídos al clamor de ellos.”. 34:17-19 “ Claman los justos, y Jehová oye, Y los libra de todas sus angustias. Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; Y salva a los contritos de espíritu. Muchas son las aflicciones del justo, Pero de todas ellas le librará Jehová.”. 37:4-5 “Deléitate asimismo en Jehová, Y él te concederá las peticiones de tu corazón. Encomienda a Jehová tu camino, Y confía en él; y él hará.”. 37:7 “ Guarda silencio ante Jehová, y espera en él. No te alteres con motivo del que prospera en su camino, Por el hombre que hace maldades.”. 37:23-24 “ Por Jehová son ordenados los pasos del hombre, Y él aprueba su camino. Cuando el hombre cayere, no quedará postrado, Porque Jehová sostiene su mano.”. 37:28 “ Porque Jehová ama la rectitud, Y no desampara a sus santos.”.37:39 “Pero la salvación de los justos es de Jehová, Y él es su fortaleza en el tiempo de la angustia.”. 39:7 “Y ahora, Señor, ¿qué esperaré? Mi esperanza está en ti.”. 40:1-3 “ Pacientemente esperé a Jehová, Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios. Verán esto muchos, y temerán, Y confiarán en Jehová.”. 40:5 “ Has aumentado, oh Jehová Dios mío, tus maravillas; Y tus pensamientos para con nosotros, No es posible contarlos ante ti. Si yo anunciare y hablare de ellos, No pueden ser enumerados.”. 40:17 “Aunque afligido yo y necesitado, Jehová pensará en mí. Mi ayuda y mi libertador eres tú; Dios mío, no te tardes.”. 42:5 “¿Por qué te abates, oh alma mía, Y te turbas dentro de mí? Espera en Dios; porque aún he de alabarle, Salvación mía y Dios mío. ”. 46:1 “ Dios es nuestro amparo y fortaleza, Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones. ”. 48:14 “ Porque este Dios es Dios nuestro eternamente y para siempre; Él nos guiará aún más allá de la muerte.”. 50:15 “E invócame en el día de la angustia; Te libraré, y tú me honrarás.”. 55:16-17 “ En cuanto a mí, a Dios clamaré; Y Jehová me salvará. Tarde y mañana y a mediodía oraré y clamaré, Y él oirá mi voz.”. 55:22 “ Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; No dejará para siempre caído al justo.”. 59:9 “ A causa del poder del enemigo esperaré en ti, Porque Dios es mi defensa.”. 61:1-2 “ Oye, oh Dios, mi clamor; A mi oración atiende. Desde el cabo de la tierra clamaré a ti, cuando mi corazón desmayare. Llévame a la roca que es más alta que yo,”. 62:2 “ El solamente es mi roca y mi salvación; Es mi refugio, no resbalaré mucho.”. 62:5-7 “ Alma mía, en Dios solamente reposa, Porque de él es mi esperanza. El solamente es mi roca y mi salvación. Es mi refugio, no resbalaré. En Dios está mi salvación y mi gloria; En Dios está mi roca fuerte, y mi refugio.”. 73:22-26 “Tan torpe era yo, que no entendía; Era como una bestia delante de ti. Con todo, yo siempre estuve contigo; Me tomaste de la mano derecha. Me has guiado según tu consejo, Y después me recibirás en gloria. ¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti? Y fuera de ti nada deseo en la tierra. Mi carne y mi corazón desfallecen; Mas la roca de mi corazón y mi porción es Dios para siempre.”. 84:5 “ Bienaventurado el hombre que tiene en ti sus fuerzas, En cuyo corazón están tus caminos.”. 86:6-7 “ Escucha, oh Jehová, mi oración, Y está atento a la voz de mis ruegos. En el día de mi angustia te llamaré, Porque tú me respondes.”. 91:4 “ Con sus plumas te cubrirá, Y debajo de sus alas estarás seguro; Escudo y adarga es su verdad.”. 94:22 “Mas Jehová me ha sido por refugio, Y mi Dios por roca de mi confianza.”. 103:13-14 Como el padre se compadece de los hijos, Se compadece Jehová de los que le temen. Porque él conoce nuestra condición; Se acuerda de que somos polvo.”. 105:4-5 “Buscad a Jehová y su poder; Buscad siempre su rostro. Acordaos de las maravillas que él ha hecho, De sus prodigios y de los juicios de su boca,”. 116:1-2 “Amo a Jehová, pues ha oído Mi voz y mis súplicas; Porque ha inclinado a mí su oído; Por tanto, le invocaré en todos mis días.”. 118:6 “ Jehová está conmigo; no temeré Lo que me pueda hacer el hombre.”. 118:14 “Mi fortaleza y mi cántico es JAH, Y él me ha sido por salvación.”. 119:114 “Mi escondedero y mi escudo eres tú; En tu palabra he esperado.”. 121:1-3 “ Alzaré mis ojos a los montes; ¿De dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene de Jehová, Que hizo los cielos y la tierra. No dará tu pie al resbaladero, Ni se dormirá el que te guarda.”. 125:2 “ Como Jerusalén tiene montes alrededor de ella, Así Jehová está alrededor de su pueblo Desde ahora y para siempre. ”. 126:5-6 “Los que sembraron con lágrimas, con regocijo segarán. Irá andando y llorando el que lleva la preciosa semilla; Mas volverá a venir con regocijo, trayendo sus gavillas.”. 128:1 “ Bienaventurado todo aquel que teme a Jehová, Que anda en sus caminos.”. 138:8 “Jehová cumplirá su propósito en mí; Tu misericordia, oh Jehová, es para siempre; No desampares la obra de tus manos.”. 139:1-16 “ Oh Jehová, tú me has examinado y conocido. 2 Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme; Has entendido desde lejos mis pensamientos. 3 Has escudriñado mi andar y mi reposo, Y todos mis caminos te son conocidos. 4 Pues aún no está la palabra en mi lengua, Y he aquí, oh Jehová, tú la sabes toda. 5 Detrás y delante me rodeaste, Y sobre mí pusiste tu mano. 6 Tal conocimiento es demasiado maravilloso para mí; Alto es, no lo puedo comprender. 7 ¿A dónde me iré de tu Espíritu? ¿Y a dónde huiré de tu presencia? 8 Si subiere a los cielos, allí estás tú; Y si en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estás. 9 Si tomare las alas del alba Y habitare en el extremo del mar, 10 Aun allí me guiará tu mano, Y me asirá tu diestra. 11 Si dijere: Ciertamente las tinieblas me encubrirán; Aun la noche resplandecerá alrededor de mí. 12 Aun las tinieblas no encubren de ti, Y la noche resplandece como el día; Lo mismo te son las tinieblas que la luz. 13 Porque tú formaste mis entrañas; Tú me hiciste en el vientre de mi madre. 14 Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras; Estoy maravillado, Y mi alma lo sabe muy bien. 15 No fue encubierto de ti mi cuerpo, Bien que en oculto fui formado, Y entretejido en lo más profundo de la tierra. 16 Mi embrión vieron tus ojos, Y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas Que fueron luego formadas, Sin faltar una de ellas.”. 142:2 “ Delante de él expondré mi queja; Delante de él manifestaré mi angustia.”. 145:18-19 “ Cercano está Jehová a todos los que le invocan, A todos los que le invocan de veras. Cumplirá el deseo de los que le temen; Oirá asimismo el clamor de ellos, y los salvará.”. Todo el mundo tiene la necesidad de sentirse seguro. Usa esta página y la siguiente para registrar las necesidades que tengas en el área de seguridad. Usando los versículos anteriores, escribe aquellos que te hablan personalmente sobre el cuidado de Dios. ¿De qué manera Dios nos mantiene seguros? ¿Por qué puedes depender del cuidado que Dios tiene de ti? Lee 1 Pedro 4:7. Enumera las referencias adicionales de las Escrituras que te están ayudando. 8 MISERICORDIA SALMOS 6:2 “ Ten misericordia de mí, oh Jehová, porque estoy enfermo; Sáname, oh Jehová, porque mis huesos se estremecen.”. 9:13 “Ten misericordia de mí, Jehová; Mira mi aflicción que padezco a causa de los que me aborrecen, Tú que me levantas de las puertas de la muerte,”. 27:7 “Oye, oh Jehová, mi voz con que a ti clamo; Ten misericordia de mí, y respóndeme.”. 30:10 “Oye, oh Jehová, y ten misericordia de mí; Jehová, sé tú mi ayudador.”. 31:9-10 “ Ten misericordia de mí, oh Jehová, porque estoy en angustia; Se han consumido de tristeza mis ojos, mi alma también y mi cuerpo. Porque mi vida se va gastando de dolor, y mis años de suspirar; Se agotan mis fuerzas a causa de mi iniquidad, y mis huesos se han consumido.”. 31:16 “ Haz resplandecer tu rostro sobre tu siervo; Sálvame por tu misericordia.”. 41:10 “Mas tú, Jehová, ten misericordia de mí, y hazme levantar, Y les daré el pago.”. 51:1 “Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; Conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones. ”. 57:1 “ Ten misericordia de mí, oh Dios, ten misericordia de mí; Porque en ti ha confiado mi alma, Y en la sombra de tus alas me ampararé Hasta que pasen los quebrantos.”. 86:15 “Mas tú, Señor, Dios misericordioso y clemente, Lento para la ira, y grande en misericordia y verdad,”. 103:4 “El que rescata del hoyo tu vida, El que te corona de favores y misericordias;”. 103:8 “Misericordioso y clemente es Jehová; Lento parala ira, y grande en misericordia.”. 103:11 “Porque como la altura de los cielos sobre la tierra, Engrandeció su misericordia sobre los que le temen.”. 103:17 “Mas la misericordia de Jehová es desde la eternidad y hasta la eternidad sobre los que le temen, Y su justicia sobre los hijos de los hijos;”. 116:5 “Clemente es Jehová, y justo; Sí, misericordioso es nuestro Dios.”. 138:8 “ Jehová cumplirá su propósito en mí; Tu misericordia, oh Jehová, es para siempre; No desampares la obra de tus manos .” La misericordia de Dios es Su bondad, compasión y ternura con la cual Él trata al hombre pecador. De acuerdo con los versículos anteriores, ¿qué te ha asegurado Dios acerca de su misericordia? ¿Cómo has experimentado las misericordias de Dios en tu vida? (Efesios 2:4) Enumera otras referencias bibliográficas que te estén ayudando. 9 CONFIAR EN DIOS SALMOS 5:11 “ Pero alégrense todos los que en ti confían;… ”. 7:1 “ Jehová Dios mío, en ti he confiado; Sálvame de todos los que me persiguen, y líbrame,”. 9:11 “ Cantad a Jehová, que habita en Sion; Publicad entre los pueblos sus obras.”. 11:1 “En Jehová he confiado;…”. 13:5 “Mas yo en tu misericordia he confiado; Mi corazón se alegrará en tu salvación.”. 16:1 “Guárdame, oh Dios, porque en ti he confiado.”. 18:2 “Jehová, roca mía y castillo mío, y mi libertador; Dios mío, fortaleza mía, en él confiaré; Mi escudo, y la fuerza de mi salvación, mi alto refugio.”. 18:30 “En cuanto a Dios, perfecto es su camino, Y acrisolada la palabra de Jehová; Escudo es a todos los que en él esperan.”. 25:2 “Dios mío, en ti confío; No sea yo avergonzado, No se alegren de mí mis enemigos.”. 28:7 “Jehová es mi fortaleza y mi escudo; En él confió mi corazón, y fui ayudado, Por lo que se gozó mi corazón, Y con mi cántico le alabaré.”. 31:1 “En ti, oh Jehová, he confiado; no sea yo confundido jamás; Líbrame en tu justicia.”. 31:6 “Aborrezco a los que esperan en vanidades ilusorias; Mas yo en Jehová he esperado.”. 31:14 “Mas yo en ti confío, oh Jehová; Digo: Tú eres mi Dios.”. 32:10 “…Mas al que espera en Jehová, le rodea la misericordia.”. 34:8 “Gustad, y ved que es bueno Jehová; Dichoso el hombre que confía en él.”. 34:22 “Jehová redime el alma de sus siervos, Y no serán condenados cuantos en él confían.”. 36:7 “¡Cuán preciosa, oh Dios, es tu misericordia! Por eso los hijos de los hombres se amparan bajo la sombra de tus alas.”. 37:3 “Confía en Jehová, …”. 37:40 “ Jehová los ayudará y los librará; Los libertará de los impíos, y los salvará, Por cuanto en él esperaron…”. 40:4 “Bienaventurado el hombre que puso en Jehová su confianza, Y no mira a los soberbios, ni a los que se desvían tras la mentira.”. 52:8 “Pero yo estoy como olivo verde en la casa de Dios; En la misericordia de Dios confío eternamente y para siempre.”. 56:3-4 “ En el día que temo, Yo en ti confío. En Dios alabaré su palabra; En Dios he confiado; no temeré; ¿Qué puede hacerme el hombre?”. 56:11 “ En Dios he confiado; no temeré; ¿Qué puede hacerme el hombre?”. 62:8 “Esperad en él en todo tiempo, oh pueblos; Derramad delante de él vuestro corazón; Dios es nuestro refugio. Selah .”. 71:1 “ En ti, oh Jehová, me he refugiado; No sea yo avergonzado jamás .”. 71:5 “ Porque tú, oh Señor Jehová, eres mi esperanza, Seguridad mía desde mi juventud. ”. 73:28 “ Pero en cuanto a mí, el acercarme a Dios es el bien; He puesto en Jehová el Señor mi esperanza, Para contar todas tus obras.”. 91:2 “Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío; Mi Dios, en quien confiaré.”. 115:11 “Los que teméis a Jehová, confiad en Jehová; El es vuestra ayuda y vuestro escudo.”. 118:8-9 “ Mejor es confiar en Jehová Que confiar en el hombre. Mejor es confiar en Jehová Que confiar en príncipes.”. 141:8 “ Por tanto, a ti, oh Jehová, Señor, miran mis ojos; En ti he confiado; no desampares mi alma.”. 143:8 “Hazme oír por la mañana tu misericordia, Porque en ti he confiado; Hazme saber el camino por donde ande, Porque a ti he elevado mi alma.”. La confianza en Dios requiere una elección de conciencia, un acto deliberado de mi voluntad. ¿En qué áreas de mi vida necesito confiar en Dios? De acuerdo con los versículos anteriores, ¿cuáles son los beneficios de confiar en Él? ¿Cómo estás aprendiendo a confiar más en Jehová? Proverbios 3:5 Enumera las referencias adicionales de las Escrituras que te están ayudando. 1 0 AGRADECIMIENTO SALMOS 30:12 “Por tanto, a ti cantaré, gloria mía, y no estaré callado. Jehová Dios mío, te alabaré para siempre.”. 75:1 “Gracias te damos, oh Dios, gracias te damos, Pues cercano está tu nombre; Los hombres cuentan tus maravillas. ”. 92:1 “ Bueno es alabarte, oh Jehová, Y cantar salmos a tu nombre, oh Altísimo;”. 106:1 “Aleluya. Alabad a Jehová, porque él es bueno; Porque para siempre es su misericordia.”. 118:29 “Alabad a Jehová, porque él es bueno; Porque para siempre es su misericordia.”. 119:71 “Bueno me es haber sido humillado, Para que aprenda tus estatutos.”. 136:1 “Alabad a Jehová, porque él es bueno, Porque para siempre es su misericordia.”. 138:3 “El día que clamé, me respondiste; Me fortaleciste con vigor en mi alma.”. 139:14 “Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras; Estoy maravillado, Y mi alma lo sabe muy bien.”. 139:17-18 “ ¡Cuán preciosos me son, oh Dios, tus pensamientos! ¡Cuán grande es la suma de ellos! Si los enumero, se multiplican más que la arena; Despierto, y aún estoy contigo.”. ¿Por qué debemos ser agradecidos a Dios? Enumera aquellas cosas, personas y situaciones por las cuales estás agradecido. Expresa tu agradecimiento a Dios y a alguien por una cosa, por lo menos, todos los días. Lee Hebreos 13:15. Enumera las referencias adicionales de las Escrituras que te están ayudando. 1 1 ALABANZA SALMOS 9:1-2 “Te alabaré, oh Jehová, con todo mi corazón; Contaré todas tus maravillas. Me alegraré y me regocijaré en ti; Cantaré a tu nombre, oh Altísimo.”. 27:6 “ Luego levantará mi cabeza sobre mis enemigos que me rodean, Y yo sacrificaré en su tabernáculo sacrificios de júbilo; Cantaré y entonaré alabanzas a Jehová.”. 32:11 “Alegraos en Jehová y gozaos, justos; Y cantad con júbilo todos vosotros los rectos de corazón.”. 33:1 “Alegraos, oh justos, en Jehová; En los íntegros es hermosa la alabanza.”. 34:1-3 “ Bendeciré a Jehová en todo tiempo; Su alabanza estará de continuo en mi boca. En Jehová se gloriará mi alma; Lo oirán los mansos, y se alegrarán. Engrandeced a Jehová conmigo, Y exaltemos a una su nombre.”. 35:18 “ Te confesaré en grande congregación; Te alabaré entre numeroso pueblo.”. 44:8 “En Dios nos gloriaremos todo el tiempo, Y para siempre alabaremos tu nombre. Selah.”. 56:10 “ En Dios alabaré su palabra; En Jehová su palabra alabaré.”. 63:3 “Porque mejor es tu misericordia que la vida; Mis labios te alabarán.”. 68:19 “Bendito el Señor; cada día nos colma de beneficios El Dios de nuestra salvación. Selah”. 69:30 “Alabaré yo el nombre de Dios con cántico, Lo exaltaré con alabanza.”. 95:1-2 “ Venid, aclamemos alegremente a Jehová; Cantemos con júbilo a la roca de nuestra salvación. Lleguemos ante su presencia con alabanza; Aclamémosle con cánticos.”. 100:1-2 “Cantad alegres a Dios, habitantes de toda la tierra. Servid a Jehová con alegría; Venid ante su presencia con regocijo.”. 100:5 “ Porque Jehová es bueno; para siempre es su misericordia, Y su verdad por todas las generaciones.”. 103:1-2 “ Bendice, alma mía, a Jehová, Y bendiga todo mi ser su santo nombre. Bendice, alma mía, a Jehová, Y no olvides ninguno de sus beneficios.”. 105:1-2 “Alabad a Jehová, invocad su nombre; Dad a conocer sus obras en los pueblos. Cantadle, cantadle salmos; Hablad de todas sus maravillas.”. 105:3 “ Gloriaos en su santo nombre; Alégrese el corazón de los que buscan a Jehová.”. 107:2 “Díganlo los redimidos de Jehová, Los que ha redimidodel poder del enemigo,”. 108:4 “Porque más grande que los cielos es tu misericordia, Y hasta los cielos tu verdad. ”. 109:30 “ Yo alabaré a Jehová en gran manera con mi boca, Y en medio de muchos le alabaré.”. 111:1 “Alabaré a Jehová con todo el corazón En la compañía y congregación de los rectos.”. 118:28 “Mi Dios eres tú, y te alabaré; Dios mío, te exaltaré.”. 135:3 “Alabad a JAH, porque él es bueno; Cantad salmos a su nombre, porque él es benigno.”. 135:13 “Oh Jehová, eterno es tu nombre; Tu memoria, oh Jehová, de generación en generación.”. 139:14 “Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras; Estoy maravillado, Y mi alma lo sabe muy bien.”. 145:2-3 “ Cada día te bendeciré, Y alabaré tu nombre eternamente y para siempre. Grande es Jehová, y digno de suprema alaba.”. 145:5 “ En la hermosura de la gloria de tu magnificencia, Y en tus hechos maravillosos meditaré.”. 145:21 “La alabanza de Jehová proclamará mi boca; Y todos bendigan su santo nombre eternamente y para siempre.”. 146:1-2 “Alaba, oh alma mía, a Jehová. Alabaré a Jehová en mi vida; Cantaré salmos a mi Dios mientras viva.”. 147:1 “ Alabad a JAH, Porque es bueno cantar salmos a nuestro Dios; Porque suave y hermosa es la alabanza.”. 147:7 “Cantad a Jehová con alabanza, Cantad con arpa a nuestro Dios.”. 148:1 “Alabad a Jehová desde los cielos; Alabadle en las alturas…”. 148:13 “Alaben el nombre de Jehová, Porque sólo su nombre es enaltecido. Su gloria es sobre tierra y cielos.”. 150:6 “Todo lo que respira alabe a JAH. Aleluya.”. Reflexiona sobre los versículos anteriores y enumera las cosas por las que puedes alabar a Dios. ¿Por cuáles otras cosas en tu vida puedes alabarle? (1 Pedro 2:9) Enumera las referencias bibliográficas adicionales que te están ayudando. 1 2 “A JEHOVÁ CLAMÉ…” “ A Jehová clamé estando en angustia, Y él me respondió. (Salmo 120:1) “ Pacientemente esperé a Jehová, Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios…” (Salmo 40:1-2, 3A). Hoy debo decir: Yo soy lo que soy por la gracia de Dios. En los últimos años desde mi gran combate contra la depresión, la Palabra de Dios ha llegado a significar cada vez más y más. Hubo un tiempo en mi vida cuando la leí sólo porque eso era lo que los cristianos debían hacer. Hoy la leo porque me da lo que necesito para hacer frente a la vida diaria y me acerca al Señor. Las Escrituras concernientes a la vida cristiana son como las de salvación; si no las aceptamos personalmente no tienen poder en nuestras vidas. A medida que leemos las promesas de Dios, debemos aceptar su Palabra y creer que están hechas para cada una de las PERSONAS. Pídelas, mantente firme con toda confianza en lo que Dios ha prometido. Seguramente lo hará. " Yo hablé, y lo haré venir; lo he pensado, y también lo haré. " (Isaías 46:11) . Ojalá pudiera decir que la batalla terminó, que jamás volveré a pelear. Sin embargo, éste no es el caso. Satanás seguirá intentando el mismo ataque sólo que desde un enfoque diferente. Ahora, sin embargo, lo reconozco mucho más rápido y por experiencia sé cómo ganar la victoria. Nunca debemos cometer el error de pensar que estamos más allá de cierta tentación. La falsa confianza en uno mismo puede ser el comienzo de una caída. Satanás nunca toma vacaciones. Pero Dios conoce todas nuestras necesidades. "Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad. Mi porción es Jehová, dijo mi alma; por tanto, en él esperaré. Bueno es Jehová a los que en él esperan, al alma que le busca.” (Lamentaciones 3:22-25). Hoy, yo y mi marido hemos vuelto al campo de Alemania. Muchas veces las situaciones han sido difíciles, pero el Señor nos ha enseñado muchas lecciones. Él no comete errores. Cuando me escogió antes de la fundación del mundo, (Efesios 1:4-5) Él sabía lo que sería necesario para romper la voluntad obstinada y cómo Él me enseñaría las verdades de Su Palabra. Como el salmista dijo, " No moriré, sino que viviré, Y contaré las obras de JAH. Me castigó gravemente JAH, Mas no me entregó a la muerte ." (Salmo 118:17-18). Quizás una de las tentaciones más comunes es la de la autoestima. Miles de personas hoy, tanto las salvadas como las no salvas, están tratando de encontrar la aprobación de otros para afirmar su propio valor. Invierten millones de dólares en ropa, cosméticos, dietas, joyas y modas diversas, en un intento de ganar la aceptación de los demás. Esto es evidente en todos los grupos de edad. Sin embargo, estos intentos derivan en un éxito de corto plazo o en un fracaso completo. La aceptación incondicional y el amor sólo pueden encontrarse en una relación personal con Jesucristo. Ésta es nuestra experiencia al aceptar a Cristo como nuestro Salvador personal y aprender a vivir en la posición que Él nos da como hijos de Dios. Lee Juan 1:12; 3:16. El siguiente esquema está diseñado para ayudar a entender esa posición. Cada uno de nosotros es único. Dios hizo solamente a una persona exactamente como tú. No fuiste un error o una idea tardía, sino fuiste formado por Dios para un propósito definido. Según leas y estudies los siguientes pensamientos y escrituras, deja que se conviertan en realidad en tu vida y acepta todo lo que el Señor te ha dado. Pedro dijo, “ Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia;… ” (2 Pedro 1:3-4). Utiliza esta página y la siguiente para registrar el tiempo en que oraste (CLAMASTE) al Señor y cómo Él respondió. También puedes escribir una oración a Dios, orando mientras escribes las palabras. Enlista las Escrituras adicionales que están ayudándote en el área de ORACIÓN. 1 3 NUESTRA POSICIÓN EN CRISTO I. Considera a nuestro Dios A. Hay un solo Dios. 1. Isaías 40:18 “ ¿A qué, pues, haréis semejante a Dios, o qué imagen le compondréis?”. 2. Isaías 43:10-11 “Vosotros sois mis testigos, dice Jehová, y mi siervo que yo escogí, para que me conozcáis y creáis, y entendáis que yo mismo soy; antes de mí no fue formado dios, ni lo será después de mí. Yo, yo Jehová, y fuera de mí no hay quien salve.”. 3. Isaías 40:25 “ ¿A qué, pues, me haréis semejante o me compararéis? dice el Santo.”. 4. Isaías 45:5-6 “Yo soy Jehová, y ninguno más hay; no hay Dios fuera de mí. Yo te ceñiré, aunque tú no me conociste, para que se sepa desde el nacimiento del sol, y hasta donde se pone, que no hay más que yo; yo Jehová, y ninguno más que yo,…”. B. Su tremendo poder va más allá de nuestra comprensión. 1. Jeremías 10:12 “ El que hizo la tierra con su poder, el que puso en orden el mundo con su saber, y extendió los cielos con su sabiduría;”. 2. Jeremías 10:10 “ Mas Jehová es el Dios verdadero; él es Dios vivo y Rey eterno; a su ira tiembla la tierra, y las naciones no pueden sufrir su indignación.”. 3. Génesis 1:1 “ En el principio creó Dios los cielos y la tierra.”. 4. Génesis 2.7 “ Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.”. 5. Salmo 115:3 “ Nuestro Dios está en los cielos; Todo lo que quiso ha hecho.”. C. Él es Todopoderoso con todo el poder dentro de Sí. 1. Salmo 135:6 “ Todo lo que Jehová quiere, lo hace, En los cielos y en la tierra, en los mares y en todos los abismos.”. 2. Colosenses 1:16-17 “Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios,sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él. Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten;”. 3. Hebreos 2:10 “ Porque convenía a aquel por cuya causa son todas las cosas, y por quien todas las cosas subsisten, que habiendo de llevar muchos hijos a la gloria, perfeccionase por aflicciones al autor de la salvación de ellos.”. 4. Romanos 11:36 “ Porque de él, y por él, y para él, son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén.”. II. Mantén la imagen de nuestro increíble Creador en tu mente y pregúntate: SÉ HONESTO: ¿Lo conozco? ¿Me siento amado y aceptado por Él? A. Muchos problemas se desarrollan porque estamos controlados por los sentimientos y no por la verdad de Dios. Estamos plagados de pensamientos tales como: "No soy tan bueno como los demás; Dios lo hará por ti, pero no por mí; no soy digno; he fracasado tan completamente, que Dios no puede usarme". B. La clave para cambiar estas actitudes y sentimientos es darse cuenta de que nuestro valor total está en Jesucristo. No está en nuestras capacidades o logros. III. Nuestro valor desde la perspectiva humana. A. Muchas veces el Señor nos insta a estar quietos. 1. Salmo 46:10 “ Estad quietos, y conoced que yo soy Dios; Seré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra.”. 2. Isaías 30:15 “ Porque así dijo Jehová el Señor, el Santo de Israel: En descanso y en reposo seréis salvos; en quietud y en confianza será vuestra fortaleza. Y no quisisteis,”. B. En nosotros mismos, somos indignos. 1. Isaías 64:6 “ Si bien todos nosotros somos como suciedad, y todas nuestras justicias como trapo de inmundicia; y caímos todos nosotros como la hoja, y nuestras maldades nos llevaron como viento.”. 2. Romanos 7:18 “ Y yo sé que en mí, esto es, en mi carne, no mora el bien; porque el querer el bien está en mí, pero no el hacerlo.”. 3. Romanos 3:10 “ Como está escrito: No hay justo, ni aun uno;”. 4. Romanos 8:8 “ y los que viven según la carne no pueden agradar a Dios.”. 5. Hebreos 11:6 “ Y si por gracia, ya no es por obras; de otra manera la gracia ya no es gracia. Y si por obras, ya no es gracia; de otra manera la obra ya no es obra.”. C. Muchas veces establecemos nuestras metas sin consultar a Dios. Cuando fallamos, creemos que somos fracasados y por lo tanto de poco valor. 1. Dios no promete fuerza para todos los objetivos y deseos de la carne. 2. Debido a que hemos construido nuestro valor en bases equivocadas, éste comienza a desmoronarse. D. Vemos la forma en que otros nos tratan como una indicación de nuestro valor. 1. Jesús es el único Hijo de Dios, perfecto y aún de valor infinito. Fue rechazado " A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron. " (Juan 1:11) Lee Lucas 23:18 e Isaías 53:3. "Lo escarnecieron, lo ridiculizaron y lo escupieron" . (Mateo 27: 28-31). 2. Otras personas también son seres pecaminosos, obstinados e imperfectos, con conocimiento limitado. Por lo tanto, sus opiniones son una base pobre para evaluar nuestro propio valor. Pablo advirtió, " Porque no nos atrevemos a contarnos ni a compararnos con algunos que se alaban a sí mismos; pero ellos, midiéndose a sí mismos por sí mismos, y comparándose consigo mismos, no son juiciosos." (2 Corintios 10:12). IV. Nuestro valor desde la perspectiva de Dios. A. Él conoce todo acerca de nosotros. 1. Salmo 103:14 “ Porque él conoce nuestra condición; Se acuerda de que somos polvo.”. 2. Salmo 139:1-3 “Oh Jehová, tú me has examinado y conocido. Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme; Has entendido desde lejos mis pensamientos. Has escudriñado mi andar y mi reposo, Y todos mis caminos te son conocidos.”. 3. Job 42:2 “ Yo conozco que todo lo puedes, Y que no hay pensamiento que se esconda de ti.”. 4. Mateo 6:8 “ No os hagáis, pues, semejantes a ellos; porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis.”. B. Fuimos creados a Su imagen. 1. Génesis 1:27,31 “ Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; … Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera.”. C. Recuerda que Él hace lo que quiere. 1. Salmo 115:3 “ Nuestro Dios está en los cielos; Todo lo que quiso ha hecho.”. D. El plan de salvación y todo lo que Dios nos da cuando nos convertimos en Sus hijos es porque le agrada. Nada se basa en que lo merecemos. Isaías dijo, "…todos los llamados de mi nombre; para gloria mía los he creado, los formé y los hice." (Isaías 43:7). 1. Pablo proclamó, “ En él asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad ,” ( Efesios 1:11). 2. Jesús dijo: “ Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres…Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres.” (Juan 8:31-32,36). E. Todos crecemos con ciertas creencias acerca de Dios, de nosotros mismos y del mundo que nos rodea. Estas creencias son aquellas cosas de las que estamos convencidos en nuestros corazones y de ellas vienen nuestras actitudes, pensamientos y sentimientos. Muchas veces estas creencias no están basadas en la verdad de Dios, sino más bien en tradiciones, supersticiones y razonamientos erróneos del hombre. Son mentiras. Por ejemplo, puedo estar convencida de que realmente no soy una pecadora como otros, Dios no puede amarme, no soy tan valiosa como alguien más, o no merezco las bendiciones de Dios. Estas mentiras son las raíces desde las que crecen diversos temores, inseguridades y otras actitudes defectuosas. Si no se modifican, interferirán con nuestra comunión con el Señor y pueden limitar enormemente nuestra disponibilidad y crecimiento espiritual. ¡Un estudio exhaustivo de los temas enumerados en esta próxima sección te hará libre! Te ayudará a despojarte “del viejo hombre” y vestirte “del nuevo hombre,…" (Efesios 4:22-24) ¡Recuerda, estas verdades son realidad y nuestro rechazo o falta de fe ¡las anula! V. La posición del creyente en Cristo. A. UNA NUEVA CRIATURA. 1. Pablo dijo, “De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas Viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.” (2 Corintios 5:17). 2. El apóstol predicó, “ Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras,” (Efesios 2:10). . B. PERDONADO – Nuestros pecados son perdonados en y a través de Jesucristo. 1. Pablo enseñó, “ en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia,” (Efesios 1:7). 2. El apóstol Pablo dijo, “Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos todos los pecados, anulando el acta de los decretos que había contra nosotros, que nos era contraria, quitándola de en medio y clavándola en la cruz,” (Colosenses 2:13-14). Para nosotros es importante admitir y arrepentirnos de nuestros pecados (Hechos 20:21). Esta es nuestra nueva posición en Cristo que hace posible para nosotros el ser perdonados. C. SANTIFICADOS – Estamos apartados por Dios para Su servicio. El creyente pertenece al Señor y es Su siervo. 1. La Palabra de Dios dice, “En esa voluntad somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una vez para siempre. Y ciertamente todo sacerdote está día tras día ministrando y ofreciendo muchas veces los mismos sacrificios, que nunca pueden quitar los pecados; pero Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios, de ahí en adelante esperando hasta que sus enemigos sean puestos por estrado de sus pies; porque con una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los santificados.” (Hebreos 10:10-14). 2. Leemos en Hebreos 13:12, “ Por lo cual también Jesús, para santificar al pueblo mediante su propia sangre, padeció fuera de la puerta.”. 3. Pablo dijo, “ Así que,amados, puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios .” (2 Corintios 7:1). 4. Pedro predicó, “ Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él sea gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén.” (2 Pedro 3:18). 5. Juan dijo, “ Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es.” (1 Juan 3:2). D. JUSTO - El creyente no tiene su propia justicia y, por lo tanto, recibe la justicia perfecta de Jesucristo. 1. Pablo dijo, “Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.” (2 Corintios 5:21). 2. El apóstol Pablo enseñó , “y ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que es por la ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia que es de Dios por la fe;…” (Filipenses 3:9). 3. Pablo predicó, “Pues si por la transgresión de uno solo reinó la muerte, mucho más reinarán en vida por uno solo, Jesucristo, los que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia.” (Romanos 5:17). E. JUSTIFICADO - La palabra "justificados" (Romanos 5:1) viene de una palabra griega que fue usada en el ámbito judicial y significa más que perdonar, más que absolución. Significa que somos declarados justos ; libre de culpas y del castigo eterno ante Dios el Padre. La Palabra de Dios dice que “…la sangre de Jesucristo NOS LIMPIA DE TODO PECADO.” (1 Juan 1:7). 1. Pablo declaró, “por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús,…” (Romanos 3:23-24). 2. Pablo dijo, “Concluimos, pues, que el hombre es justificado por fe sin las obras de la ley.” (Romanos 3:28). 3. El apóstol dijo, “Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.” (2 Corintios 5:21). F. ADOPTADOS para ser de la familia de Dios por la eternidad. 1. Juan dijo, “Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;” (Juan 1:12). 2. Pablo predicó, “ Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley, para que redimiese a los que estaban bajo la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos. Y por cuanto sois hijos, Dios envió a vuestros corazones el Espíritu de su Hijo, el cual clama: ¡Abba, Padre! Así que ya no eres esclavo, sino hijo; y si hijo, también heredero de Dios por medio de Cristo.” (Gálatas 4:4-7). G. ACEPTADOS - A través de Jesucristo somos hechos aceptos a Dios el Padre. 1 . Pablo dijo, “…para alabanza de la gloria de su gracia, con la cual nos hizo aceptos en el Amado,” (Efesios 1:6). 2. Pedro enseñó, “…vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo.” (1 Pedro 2:5). H. SELLADOS por el Espíritu Santo - El Espíritu Santo es dado a cada creyente. 1. Pablo predicó, “En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa, que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria.” (Efesios 1:13-14). 2. El apóstol dijo, “Mas vosotros no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él.” (Romanos 8:9). 3. Juan declaró, “En esto conocemos que permanecemos en él, y él en nosotros, en que nos ha dado de su Espíritu.” (1 Juan 4:13). 4. Pablo dijo, “el cual también nos ha sellado, y nos ha dado las arras del Espíritu en nuestros corazones.” (2 Corintios 1:22). I. El creyente es el templo del Espíritu Santo. 1. Pablo dijo, “¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros? Si alguno destruyere el templo de Dios, Dios le destruirá a él; porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es .” (1 Corintios 3:16-17). 2. El Espíritu Santo es dado para guiar, proteger, consolar, capacitar y convertirme del pecado. El Espíritu Santo nunca dejará al creyente. Sin embargo, a través de la rebelión o del pecado deliberado, el creyente puede entristecerlo o apagarlo (Efesios 4:30-32). 3. Pablo advirtió, “Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención.” (Efesios 4:30). 4. Pablo mandó, “No apaguéis al Espíritu.” (1 Tesalonicenses 5:19). Cuando contristamos o apagamos al Espíritu Santo, disminuye nuestro poder espiritual y estorba nuestra comunión con el Señor. El problema se puede remediar con la confesión y el arrepentimiento. Nuestro Señor entonces es fiel para perdonarnos. 5. Juan escribió, “Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.” (1 Juan 1:9). J. VIDA ETERNA – El creyente tiene vida eterna y no se puede perder otra vez. 1. Jesús proclamó, “ Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna .” (Juan 3:16). 2. Juan dijo, “El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él.” (Juan 3:36). 3. Jesús dijo, “Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano.” (Juan 10:27-28). 4. Pablo predicó, “Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.” (Romanos 6:23). 5. Pablo dijo, “…en la esperanza de la vida eterna, la cual Dios, que no miente, prometió desde antes del principio de los siglos,” (Tito 1:2). 6. Juan declaró, “Y este es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna; y esta vida está en su Hijo. El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida. Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna, y para que creáis en el nombre del Hijo de Dios.” (1 Juan 5:11-13). K. La nueva posición nuestra como creyentes es ésta: 1. Basada en Jesucristo. 2. Inmediata 3. Espontánea 4. No es intercambiable. 5.No está relacionada con experiencias o sentimientos de hombre. 6. Es completa. 7. No depende de la conducta del hombre ni de su habilidad para ganarla. 8.Es eterna. Salomón dijo, “He entendido que todo lo que Dios hace será perpetuo; sobre aquello no se añadirá, ni de ello se disminuirá; y lo hace Dios, para que delante de él teman los hombres.” (Eclesiastés 3:14). Podemos confiar en nuestro Señor Jesús y descansar a salvo y con seguridad en la posición que nos ha dado. Conocer estas verdades es el primer paso. Luego, debemos elegir recibirlas personalmente para que sean verdad en nuestra vida. Ahora podemos avanzar con el poder del Espíritu Santo confiando en que nuestro Señor hará lo que ha prometido. Es Cristo viviendo a través de nosotros. Pablo dijo, “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.” (Filipenses 4:13). El aire se carga con un sentido de urgencia a medida que se aproxima la venida de nuestro Señor Jesús. Vencemos a Satanás, aceptando nuestra posición en Cristo y aprovechando el poder que se nos ha prometido. ¡Cristo ya tiene la victoria! Eres especial a los ojos de Dios: creado, amado, redimido y llamado a servirle. Permíteme, como Pablo, exhortarte a olvidar aquellas cosas que están atrás y extenderse a aquellas cosas que están adelante, prosiguiendo hacia la meta para obtener el “premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús.” (Filipenses 3:14). Usa esta página
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