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La_Fonologia_Evolutiva_y_el_cambio_fonet

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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA 
UNIVERSIDAD DEL ZULIA 
FACULTAD DE HUMANIDADES Y EDUCACIÓN 
DIVISIÓN DE ESTUDIOS PARA GRADUADOS 
MAESTRÍA EN LINGÜÍSTICA Y ENSEÑANZA DEL LENGUAJE 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
La Fonología Evolutiva y el cambio fonetológico en español. 
Estudio crítico con enfoque integrador y multifactorial 
Trabajo de grado presentado para optar al título de: 
Magíster Scientiarum en Lingüística y Enseñanza del Lenguaje 
 
 
 
 
 
 
 
 
 Maestrante: 
Licdo. Ángel Molina 
 
 Tutor: 
Dr. Godsuno Chela-Flores 
 
 
 
 
 
Maracaibo, julio de 2015 
2 
 
 
La Fonología Evolutiva y el cambio fonetológico en español. Estudio 
crítico con enfoque integrador y multifactorial 
 
 
 
 
 
 
 
 
____________________________ 
AUTOR 
Licdo. Ángel Molina 
C. I. 17.952.045 
Urb. Monte Claro, Av. Guajira, Edif. 7, Apto. 1B. 
0261-7578404, 0416-2206640 
angelmolina20@gmail.com 
 
 
 
 
 
 
_____________________________ 
TUTOR 
Dr. Godsuno Chela-Flores 
C.I. 2.111.031 
godsuno@yahoo.com.mx 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
3 
 
República Bolivariana de Venezuela 
La Universidad del Zulia 
Facultad de Humanidades y Educación 
División de Estudios para Graduados 
 
 
VEREDICTO 
 
 
Quienes suscriben MSc. Donaldo García C.I. 10.452.496 Coordinador; MSc. 
Raimundo Medina C.I. 1.909.961 Secretario y Dr. Godsuno Chela-Flores C.I. 2.111.031 
Tutor, miembros del jurado nombrados por el Consejo Técnico de la División de 
Estudios para Graduados de la Facultad de Humanidades y Educación de la 
Universidad, para evaluar el Trabajo de Grado titulado: 
 
La Fonología Evolutiva y el cambio fonetológico en español. Estudio crítico con 
enfoque integrador y multifactorial 
 
Presentado por el Licdo. Ángel Manuel Molina Lara, C. I. 17.952.045, para optar 
al título de Magister Scientiarum en Lingüística y Enseñanza del Lenguaje, después de 
haber leído y estudiado detenidamente el trabajo y evaluada la defensa de la autora 
consideramos que el mismo reúne los requisitos señalados por las normas vigentes y, 
por tanto se APRUEBA y para que conste se firma en: 
 
Maracaibo, a los veintisiete días del mes de julio de 2015 
 
 
JURADO 
 
 
 _______________ _____________ 
 COORDINADOR SECRETARIO 
 
 MSc. Donaldo García MSc. Raimundo Medina 
 C.I. 10.452.496 C.I. 1.909.961 
 
 
 
 
 
 ______________ 
TUTOR 
 
Dr. Godsuno Chela-Flores 
C.I. 2.111.031 
 
 
4 
 
 
 
 
 
 
 
AGRADECIMIENTOS 
 
 
 
 
No son pocos quienes, de alguna manera, han contribuido a este modesto esfuerzo 
académico. Espero que su resultado haya sido adecuado a la generosidad de algunos 
de ellos. 
 
A mis padres, Maritza y Oriel. Su paciencia, así como la confianza depositada en mi 
criterio para decidir el rumbo profesional de mi vida, es imponderable. 
 
A Mercedes y Ángel, los padres que me dio la academia, quienes siempre están 
presentes para apoyarme con su sabiduría y auténtico afecto. 
 
A mi tutor, Godsuno, por acompañarme en esta pequeña aventura. Jamás podré 
retribuir tanta diligencia y sabiduría. Su disposición a orientarme en los intrincados 
senderos de la investigación, con plena honestidad intelectual, fue extraordinaria. 
 
A mi hermana Marielena, quien estando tan lejos ha sabido estar muy cerca, 
sumándose a la travesía. También a mi hermana Maryori, siempre pendiente del 
camino recorrido. 
 
A Obel y María, aquellos cuyas ideas corresponden con sus acciones. Es un privilegio 
tener amigos incondicionales como ustedes. 
 
A los amigos de siempre, los que supieron ayudarme con un gesto, una idea o un chiste 
en los tiempos de mayor frustración. Algunos se tuvieron que ir, pero dejaron su huella 
en estas líneas: Larry, Álvaro, Albanys, Pedro, Carlos, Vanessa, María Eugenia, Diana, 
Génesis, Jeffrey, Javier, Carlitos, Lenín, Anthony y Verónica. 
 
 
 
Gracias. 
 
 
 
 
 
 
 
 
5 
 
 
MOLINA LARA, Ángel Manuel. La Fonología Evolutiva y el cambio fonetológico en 
español. Estudio crítico con enfoque integrador y multifactorial. Trabajo de grado. 
Universidad del Zulia. Facultad de Humanidades y Educación. División de Estudios para 
Graduados. Programa de Maestría en Lingüística y Enseñanza del Lenguaje. 
Maracaibo, Venezuela, 2015. 
 
 
 
 
RESUMEN 
 
Esta investigación analiza el cambio lingüístico desde un enfoque integrador y 
multifactorial. Dicha perspectiva comprende la interacción entre sincronía y diacronía, 
elementos estructurales y no estructurales, una visión unimodular de la fonética y la 
fonología que entiende el cambio fonológico como fonetológico, así como la aceptación 
de diversos factores que pueden intervenir en un mismo proceso de cambio. 
Posteriormente, se exponen diferentes descripciones, teorías y programas de 
investigación que intentan explicar el cambio fonetológico, profundizando en la 
Fonología Evolutiva. Asimismo, se revisan algunos ejemplos de cambio fonetológico en 
el español y se exponen diversas explicaciones para los mismos. Luego, se aplica el 
Modelo CCC de la Fonología Evolutiva para determinar su utilidad explicativa. 
Finalmente, se establecen las limitaciones de este programa de investigación para la 
comprensión cabal de los fenómenos estudiados, evidenciando la necesidad de 
avanzar en una visión integradora que reconozca la fuerte influencia del contexto social 
para explicar el cambio fonetológico. 
 
 
Palabras clave: cambio fonetológico, lingüística integradora, multifactorial, fonología 
evolutiva. 
 
 
Correo-e: angelmolina20@gmail.com 
 
 
 
 
 
 
 
 
6 
 
 
MOLINA LARA, Angel Manuel. Evolutionary Phonology and Phonetological Change 
in Spanish. Critical Study from an Integrative and Multifactorial Perspective 
Degree research. University of Zulia. Faculty of Humanities and Education. Division of 
Studies for Graduates. Master's Program of Linguistics and Language Teaching. 
Maracaibo, Venezuela. 2015. 
 
 
 
 
ABSTRACT 
 
This research analyzes linguistic change from an integrative and multifactorial 
perspective. This approach implies interactions between synchrony and diachrony, 
structural and non-structural elements, an unimodular view of phonology and phonetics, 
understanding phonological change as phonetological and also recognition of multiple 
factors that can cause a process of change. Subsequently, some descriptions, theories 
and research programs that aim at explaining phonetological change are presented, 
going into detail about Evolutionary Phonology. Likewise, some phonetological cases of 
change in Spanish are examined, and different explanations of them are shown. Then, 
the CCC-Model of Evolutionary Phonology is applied in order to establish its explanatory 
virtues. Finally ,the limitations of this research program for a comprehensive 
understanding of the selected cases are established, showing the need to move forward 
with an integrative view that recognizes the strong influence of social context in the 
explanation of phonetological change. 
 
 
Keywords: phonetological change, integrative linguistics, multifactorial, Evolutionary 
Phonology. 
 
 
 
E-mail: angelmolina20@gmail.com 
 
 
. 
 
 
 
 
 
 
7 
 
 
 
 
 
 
 
ÍNDICE GENERAL 
 
 
 
 
 
VEREDICTO…………………………………………………………………………………… III 
 
AGRADECIMIENTOS………………………………………………………………………... IV 
 
RESUMEN…………………………………………………………………………………….. V 
 
ABSTRACT…………………………………………………………………………………… VI 
 
ÍNDICE GENERAL…………………………………………………………………………… VII 
 
INTRODUCCIÓN ............................................................................................................ 10 
 
CAPÍTULO I: EL PROBLEMA DE INVESTIGACIÓN..................................................... 13 
 
1. Planteamiento del problema. El cambio lingüístico y sus dificultades 
teóricas ........................................................................................................................ 14
1.1. Sincronía y diacronía......................................................................................... 14
1.2. Los elementos estructurales y no-estructurales. Abstracciones y 
realidades empíricas ................................................................................................ 15
1.3. Fonética y fonología .......................................................................................... 17 
1.4. Enfoques y modelos contemporáneos de explicación lingüística...................... 18 
1.5. Fonología Evolutiva ........................................................................................... 20
2. Objetivos de la investigación ................................................................................... 21
2. 1. Objetivo general ............................................................................................... 21
2. 2. Objetivos específicos ....................................................................................... 21
8 
 
3. Justificación y delimitación ....................................................................................... 21
4. Hipótesis de trabajo ................................................................................................. 22
 
CAPÍTULO II: MARCO TEÓRICO .................................................................................. 25
 
1. La tradición de estudios del cambio fonetológico y su alcance teórico .................... 25
2. Referencias clásicas de los estudios del cambio fonetológico en el español .......... 32
3. Estudios contemporáneos del cambio fonetológico ................................................. 33
3. 1. El modelo de Ohala: el error del oyente como motor del cambio .................... 35
3. 2. La “Teoría H y H” de Lindblom: el rol del hablante y la teleología del 
cambio ...................................................................................................................... 36
3. 3. El modelo basado en el uso de Bybee: el rol reductivo-compresivo del 
hablante ................................................................................................................... 36
3. 4. La Fonología Evolutiva de Blevins: la metáfora de la evolución 
aplicada al lenguaje ................................................................................................. 37
 
CAPÍTULO III: MARCO METODOLÓGICO .................................................................... 47
 
1. Tipo de estudio ........................................................................................................ 47
 
CAPÍTULO IV: LA INTERPRETACIÓN DEL CAMBIO FONETOLÓGICO EN 
ESPAÑOL DESDE LA FONOLOGÍA EVOLUTIVA Y OTROS ENFOQUES 
INVESTIGATIVOS .......................................................................................................... 53
 
1. La reestructuración del sistema de sibilantes del romance medieval ...................... 53 
2. La glotalización de la / f / en el español ................................................................... 59
3. Una mirada desde la fonología evolutiva a este tipo de problemas ......................... 61
3. 1. Aproximación evolutiva a la reestructuración del sistema de sibilantes ........... 62 
3. 2. Aproximación evolutiva a la glotalización de la / f / en español ........................ 64
9 
 
 
CONCLUSIONES: EL CAMBIO FONETOLÓGICO Y LOS DESAFÍOS PARA 
LA LINGÜÍSTICA CONTEMPORÁNEA ......................................................................... 68
 
REFERENCIAS DOCUMENTALES ............................................................................... 74
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
10 
 
 
 
 
 
 
 
INTRODUCCIÓN 
 
 
 
 La lingüística, como es bien sabido, engloba diversas disciplinas y subdisciplinas 
que se encargan del estudio del lenguaje desde diversos ángulos, atendiendo cada una 
de ellas a un aspecto particular de la realidad lingüística. Sin embargo, las mismas no 
se encuentran aisladas ni en situación de independencia con respecto al resto; al 
contrario, suelen suscitarse interacciones diversas entre los distintos módulos. En este 
orden de ideas, observamos fenómenos y procesos morfosintácticos, semántico-
pragmáticos, morfofonológicos, etc. 
 
 Un caso especialmente controversial de este tipo de relaciones es el que se 
establece entre la fonética, “ciencia que estudia las características de los sonidos 
humanos, especialmente aquellos sonidos que se utilizan en el habla y que 
proporcionan métodos para su descripción, clasificación y transcripción” (Crystal, 2000: 
238) y la fonología, “rama de la lingüística que estudia los sistemas de sonidos de las 
lenguas” y cuyo objetivo es “mostrar los patrones de sonidos distintivos de una lengua y 
hacer afirmaciones lo más generales posible sobre la naturaleza de los sistemas de 
sonidos de las lenguas del mundo” (Crystal, 2000: 242). 
 
 La discusión se ha desarrollado en torno a las explicaciones últimas del 
comportamiento de los hablantes en una lengua determinada, así como en las lenguas 
en general. En la medida en que se ha avanzado en la explicación de los patrones 
fónicos observados a través de las lenguas, incluso en casos en los que no están 
emparentadas, se ha evidenciado una constante relación y coincidencia entre los 
resultados arrojados tanto por las investigaciones fonéticas como por las fonológicas. 
Así, observamos explicaciones fonológicas de base fonética, procesos de cambio 
lingüístico en una lengua determinada que se explican fonéticamente, etc. Esta 
11 
 
situación ha llevado al replanteamiento de la relación entre ambos módulos, 
rechazando la necesidad de una interfaz entre ellos (Ohala, 1990a) o incluso 
considerándolos como uno solo (Chela Flores y Chela Flores, 2007). 
 
 En este contexto, ha surgido en los últimos años un renovado interés por el 
cambio lingüístico, observable en la diacronía, reforzado por las observaciones 
dialectológicas que dan cuenta de procesos emergentes de cambio. De esta manera, 
se ha empezado a tender puentes entre ambas esferas temporales, posibilidad 
impensable décadas atrás, cuando el prejuicio saussureano que las separaba se 
aceptaba sin reparo. 
 
 Esta situación ha motivado el surgimiento, en las últimas décadas, de diversas 
líneas de investigación que observan el origen de los patrones fónicos en la diacronía, 
además de la utilidad previamente referida de los estudios dialectológicos para 
esclarecer algunos procesos de cambio fonético-fonológico (es decir, fonetológico) 
pendientes por resolver satisfactoriamente. 
 
 Dadas estas circunstancias, es pertinente probar la utilidad teórica y 
metodológica de los desarrollos obtenidos por aquellas líneas en la explicación del 
cambio lingüístico del español, tarea que hemos decidido asumir en este estudio, al 
menos con alguna de ellas. Se trata de la Fonología Evolutiva, programa de 
investigación ideado por Juliette Blevins, que hace uso de la metáfora de la evolución 
biológica para explicar los patrones fonetológicos de las lenguas y su origen en sus 
procesos de cambio. 
 
 Para tales fines, realizaremos una presentación más amplia de los diversos 
temas y problemas del estudio del cambio lingüístico tratados en esta introducción, para 
desembocar en la exposición de los objetivos planteados en este estudio (Capítulo I). 
Posteriormente, haremos un breve recuento histórico de los estudios clásicos del 
cambio fonetológico desde sus orígenes, así como los de la tradición filológica de la 
lengua española, para finalmente exponer una síntesis de algunas corrientes 
contemporáneas que proponen teorías y modelos para explicar el cambio fonetológico, 
12 
 
con especial énfasis en la Fonología Evolutiva (Capítulo II). Luego de estas necesarias 
consideraciones, estableceremos los recursos metodológicos que utilizaremos para 
lograrlos objetivos de este estudio (Capítulo III).Teniendo como base todo lo anterior, 
nos dedicaremos a analizar las descripciones y explicaciones de dos procesos 
emblemáticos de cambio fonétológico del español, a saber, la reestructuración del 
sistema de sibilantes en el romance medieval y la glotalización del fonema fricativo 
labiodental sordo (/ f / > / h /); a partir de esta revisión, aplicaremos el Modelo CCC de la 
Fonología Evolutiva para explicar dichos fenómenos (Capítulo IV). Finalmente, 
presentaremos las Conclusiones que surgieron de todo el proceso investigativo 
previamente descrito. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
13 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO I 
EL PROBLEMA DE INVESTIGACIÓN 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
14 
 
 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO I 
EL PROBLEMA DE INVESTIGACIÓN 
 
 
 
1. Planteamiento del problema. El cambio lingüístico y sus dificultades teóricas 
 
 
 
 1.1. Sincronía y diacronía 
 
 El fenómeno del cambio lingüístico es probablemente el principal de los 
problemas que atañen a la lingüística histórica o diacrónica. Asimismo, es el más 
intrincado y polémico. El plano diacrónico es, por definición, más complejo de abordar 
que su tradicional contraparte, a saber, el sincrónico, dado que, a diferencia de este 
último, no cuenta con el privilegio de la constatación directa, inmediata, de los 
fenómenos que intenta explicar. Esta situación de minusvalía del investigador histórico 
hace coherente pensar en la posibilidad de aprovechar los datos que ofrece la 
lingüística sincrónica; asimismo, resulta bastante razonable que el comportamiento 
observado por las lenguas en su evolución histórica pueda darle cierto respaldo a los 
modelos teóricos surgidos en la investigación sincrónica. Sin embargo, estas ideas 
interdisciplinarias distan mucho de formar parte del consenso de los lingüistas en la 
historia de la disciplina durante el siglo pasado. 
 
 Una de las razones fundamentales de esta actitud es la notable influencia de la 
premisa saussureana que postula que la lingüística sincrónica y la diacrónica tienen 
objetivos y características distintas e, incluso, opuestas. Pese a que, en el estudio del 
cambio lingüístico, ya se observan argumentaciones que hacen uso de datos del 
presente para comparar y explicar fenómenos históricos, en algunos casos se realizan 
con cierto recelo. A modo de ejemplo, tomemos esta afirmación de Hualde respecto al 
cambio fonológico: 
15 
 
 
 “Synchronic and diachronic phonology have different goals. The goal of 
the diachronic analysis of a phonological pattern is to discover how it 
developed through time. A synchronic analysis of the same phenomenon, 
on the other hand, may be concerned with providing a succinct and precise 
statement of the facts and/or with modeling speakers’ knowledge of the 
phenomenon in question” (Hualde, 2011: 2214). 
 
 Más adelante, complementa esta opinión con la afirmación de que los hablantes 
no necesariamente toman las mismas decisiones en el presente y en el pasado, por lo 
cual las explicaciones sincrónicas y diacrónicas no siempre coinciden: 
 
“[…] synchronic and diachronic phonology do not need to provide 
converging accounts. Knowing how an alternation came about does not 
necessarily tell us how it should be analyzed synchronically. Sometimes 
there is, in fact, evidence that speakers interpret the facts in a way that is 
not consistent with their diachronic origin” (Hualde, 2011: 2215). 
 
 Si bien consideramos acertada esta última afirmación, es una verdad incompleta. 
Y es que a la misma conclusión puede llegarse en el marco de la diacronía: los 
hablantes pueden tomar distintas decisiones en momentos históricos diferentes, incluso 
en la evolución de una misma lengua. En el artículo de Hualde previamente citado, se 
presenta un ejemplo de esa circunstancia (Hualde, 2011:2223-2224). De manera que la 
contradicción en las reglas asumidas por los hablantes es un lugar común de la 
sincronía y la diacronía, siendo independientes de estas. Por lo tanto, no invalida su 
interacción (del mismo modo que la diacronía no se invalida a sí misma debido a sus 
casos contradictorios internos, ni la sincronía se invalida a sí misma porque, por 
ejemplo, una variedad dialectal de una lengua sea rotacista y otra lambdacista). Tales 
contradicciones solo son un reflejo de la complejidad y riqueza del objeto de estudio de 
la lingüística, por momentos inasible y desconcertante. 
 
 1.2. Los elementos estructurales y no-estructurales. Abstracciones y 
realidades empíricas 
 
 Premisas del tipo “la lingüística diacrónica se opone a la sincrónica”, como las 
que subyacen a la posición previamente expuesta, o “la lingüística, para ser científica, 
16 
 
debe plantearse la abstracción de un hablante ideal, despojado de la contingencia 
concreta” (enmarcada en la tradición generativista), o bien “la lingüística, para ser 
científica, debe postular leyes que tengan el mismo grado de predictibilidad de una ley 
natural, que no tengan excepciones” (tesis positivista planteada por los Neogramáticos 
y recientemente, con su debida revisión y atenuamiento, por otros autores como Labov 
(1981,1994)), resultan contraproducentes para la lingüística. Estos principios 
metodológicos, más que contribuir a darle un auténtico rango científico a la disciplina, le 
impiden considerar hechos pertinentes para la investigación lingüística, o bien deforman 
las características de tales hechos. Esto se hace especialmente palpable cuando nos 
enfrentamos al problema del cambio lingüístico. 
 
 En el caso del generativismo y su concepción del hablante ideal, semejante 
abstracción separa al usuario de la lengua de su contexto, lugar donde acaecen los 
cambios, impidiendo la posibilidad de explicar muchos casos donde la sociolingüística y 
la pragmática tienen un rol fundamental. Para estudiar un tema como el del cambio 
lingüístico, es necesario el reconocimiento de lo contingente y volitivo si se pretenden 
lograr explicaciones satisfactorias. Respecto al generativismo y sus limitaciones para 
estudiar el cambio lingüístico, Itkonen recuerda la distinción chomskiana entre misterios 
y problemas: 
 
“For Chomsky, the operation of free will is a mystery, and beyond scientific 
treatment, whereas other aspects of linguistic behavior are amenable to 
scientific, that is, nomic [‘in conformity with laws’] and predictive 
description. However, this dichotomy is unjustified, because most aspects 
of human (including linguistic) behavior fall neither under absolute chance 
(or 'freedom') nor under absolute necessity, but somewhere in between”. 
(Itkonen, 1984:207) 
 
 Esta distinción arbitraria le impone unos límites artificialmente rígidos a la ciencia 
lingüística, privándola de estudiar fenómenos interesantes; más aún, si aceptamos que 
la libertad humana tiene participación potencial en todos los fenómenos lingüísticos, 
precisamente porque la lengua es un producto humano, tal dicotomía anula toda 
aproximación que intente comprender plenamente lo observado, impide la investigación 
con pretensión explicativa basada en los hechos tal como se nos presentan. En 
17 
 
conclusión, buscando explicaciones elegantes y de valor predictivo, se han ignorado 
hechos -incómodos- pero pertinentes, se han esquivado las dificultades inherentes a la 
investigación del ser humano y sus creaciones, como si la realidad adquiriera mayor 
orden y simetría por ignorar sus inconsistencias y accidentes. 
 
 
 1.3. Fonética y fonología 
 
 Una nueva premisa, que puede sernos muy útil para abordar temas tan 
complejos como el del cambio lingüístico, es la de asumir la multiplicidad como opción 
(más que norma) metodológica para la investigación lingüística. Tal idea se justifica por 
la naturaleza compleja de los fenómenos que estudia la ciencia lingüística. 
 
 La colaboración de múltiples disciplinas conla investigación lingüística es, desde 
luego, una práctica bastante extendida. Los ejemplos del uso de métodos y 
descubrimientos físicos (en especial acústicos), arqueológicos, sociológicos, 
antropológicos, matemáticos, informáticos, neurocientíficos, etc. en la lingüística son 
amplísimos. Asimismo, en la lingüística contemporánea se consideran las interfaces 
entre módulos en función de ciertos problemas; así, tenemos la morfosintaxis, la 
morfofonología, la semántico-pragmática, etc. Incluso se ha ido más allá y se habla de 
fonetología, entendida como la unión entre fonética y fonología. Este neologismo fue 
introducido por C. J. N. Bailey en 1971, pero luego lo descartó. Godsuno Chela Flores 
lo ha utilizado constantemente asignándole un significado en función de su Modelo 
Polisistémico Natural (por ejemplo, véase Chela Flores y Chela Flores, 2007)1
 
. 
 
 
 
1 Respecto a la historia de la separación entre fonética y fonología, la consideración de algunos 
argumentos y problemas fundamentales que requieren aceptar la integración de ambas disciplinas, así 
como la conclusión, basada en ejemplos y datos precisos, de que la segunda no puede responder 
adecuadamente sus interrogantes sin la primera (y tampoco sin acudir a otras áreas de la ciencia), véase 
Ohala (2010). 
18 
 
 1.4. Enfoques y modelos contemporáneos de explicación lingüística 
 
 La necesidad de integrar sincronía y diacronía, elementos estructurales y no-
estructurales, además de los módulos fonético y fonológico de la lingüística, se ha 
incrementado en las últimas décadas, motivada por el desafío teórico que implica la 
explicación del cambio lingüístico; entendiendo por esto último la propuesta de teorías y 
modelos teóricos de alto nivel de generalización, que den cuenta de las razones y 
causas más fundamentales de los fenómenos lingüísticos, yendo más allá de la mera 
descripción sistemática de los procesos fonológicos de una lengua determinada; siendo 
esto último habitual dentro de la tradición filológica y lo primero en el contexto de la 
lingüística sincrónica. Vale decir que esta búsqueda de integración se ha realizado 
desde tradiciones y enfoques de investigación diversos. 
 
 Respecto a la integración entre sincronía y diacronía, tenemos un claro 
antecedente dentro de la tradición estructuralista (Coseriu, 1978). Desde enfoques más 
contemporáneos, este planteamiento se ha hecho en el marco de la Fonología 
Evolutiva (Blevins, 2004). 
 
 Acerca de la integración de elementos estructurales y no-estructurales, diversos 
autores han planteado la importancia de incluir factores extralingüísticos en la 
explicación de los fenómenos lingüísticos. Por ejemplo, respecto a la glotalización del 
fonema / f /, proceso acontecido durante el Medioevo ibérico, consistente en sustituir 
ese fonema del latín por / h / (fonema de realización aspirada, fricativo glotal, [ h ]), y 
que fue el paso intermedio hacia el establecimiento del cero fonético, la realización 
muda característica en español correspondiente con el grafema < h >, se han ofrecido 
diversas explicaciones. Una de ellas, es la influencia del vasco durante el período de 
bilingüismo vasco-castellano (este último en estado de formación a partir del latín 
vulgar), dado que esa lengua no contaba en esa época con dicho sonido (Menéndez 
Pidal, 1922). Otra explicación es la alta frecuencia en aquel entonces del alófono 
bilabial [ ϕ ] para dicho fonema, que es auditivamente muy similar a [h], haciéndolos 
difíciles de distinguir (Penny, 1972). Nótese que ambas explicaciones apelan a 
aspectos totalmente distintos: la primera a la interacción entre lenguas, una causa 
19 
 
externa, sociolingüística; la segunda a la virtual equivalencia acústica de dos fonos, 
manteniéndose a un nivel interno (considerando el castellano en sí mismo, sin 
necesidad de considerar la interacción con el vasco). Pese a la evidente diferencia 
entre estas dos maneras de aproximarse al evento histórico tratado, esta diferencia no 
implica un antagonismo excluyente. 
 
 Este tipo de aproximación a los problemas lingüísticos implica la comprensión del 
carácter multifactorial del cambio lingüístico (y, por extensión, aceptando la integración 
sincronía-diacronía, de cualquier fenómeno lingüístico). Una categoría muy útil y 
acertada, enmarcada en esta concepción explicativa multifactorial, es la de catalizador 
(Chela Flores, 1995). Son catalizadores tanto los principios que gobiernan la lengua, 
estableciendo restricciones de los diversos caminos que puede tomar una comunidad 
de hablantes, como las circunstancias y accidentes históricos de dicha comunidad, 
interviniendo estos últimos en la selección de los procesos de cambio particulares y en 
su intensidad. 
 
 Respecto a la integración entre fonética y fonología, además de Chela Flores 
(que, como indicamos previamente, tiene una visión unimodular de estas disciplinas), 
podemos mencionar como otro referente de esta visión integrada a Ohala (1990). 
 
 Asimismo, es pertinente resaltar que esta integración suele estar asociada al 
enfoque de explicación fonética de los fenómenos fonológicos, incluyendo el cambio 
lingüístico: todo cambio es explicable, e incluso predictible, como producto de 
variaciones fonéticas. Pero el sustrato fonético puede considerarse desde dos 
perspectivas: desde la articulación (hablante) y desde la audición (oyente). En el caso 
de la Fonología Experimental, a la cual pertenece Ohala, o de la referida Fonología 
Evolutiva de Blevins, se suele considerar exclusivamente (en el caso del primero), o 
principalmente (en el caso de la segunda) el aspecto auditivo como motor del cambio. 
 
 Más aún, en estos dos enfoques los cambios fonetológicos son accidentales, 
causados por errores de percepción, inconscientemente. Sin embargo, esta no es una 
posición que goce de aceptación plena: autores como Lindblom (1983) e Itkonen (1984) 
20 
 
explican teleológicamente dicho cambio fonetológico: el mismo tiene motivaciones; se 
debe a razones e incluso decisiones (según Itkonen) del hablante en función del 
oyente. Lindblom plantea estas motivaciones en función de la optimización, mediante 
una creciente economía articulatoria y un mayor contraste auditivo. Por su parte, 
Itkonen se mantiene en un nivel más abstracto, considerando el cambio lingüístico en 
general; en este nivel, incluye aspectos psicológicos y contextuales que permiten 
entender el cambio como un acto razonado, cuyo objetivo es mantener el “isomorfismo 
entre significado y forma” (Itkonen, 1984: 207). 
 
 1.5. Fonología Evolutiva 
 
 En esta investigación, realizaremos un estudio de la Fonología Evolutiva de 
Juliette Blevins, considerando que es uno de los paradigmas de explicación integradora 
más sólidos de la actualidad. Este programa de investigación incorpora elementos de la 
tradición histórica (Neogramáticos, Escuela de Kazan, etc.), de la explicación fonética 
del cambio lingüístico y de los patrones fónicos en la sincronía, así como una 
interpretación no-teleológica del cambio lingüístico, aceptando la interpretación de 
Ohala de su origen, basado en el error del receptor al escuchar una expresión hablada 
(Blevins, 2004: 81-85). 
 
 En torno a este enfoque o paradigma de investigación, analizaremos la 
pertinencia y conveniencia de asumir posturas de explicación del cambio fonetológico 
estrictamente fonéticas y basadas en el error perceptivo del oyente o si, por el contrario, 
es necesario acudir a explicaciones teleológicas. Estas consideraciones se asumirán 
partiendo de: 1) los datos históricos ampliamente documentados de cambios 
fonetológicos del español, 2.) los datos sincrónicos de los patrones observables en las 
diversas variedades dialectales del español actual, 3) un enfoque integrador y 
multifactorial, justificado previamente, 4) las contribuciones explicativas del ModeloPolisistémico Natural de Godsuno Chela Flores, el cual consideramos de gran 
pertinencia teórica2
 
2 El Modelo Polisistémico Natural (MPN) es una estructura conceptual de explicación fonetológica que 
estudia la conducta de los hablantes mediante tres sistemas intrasilábicos: núcleo (sonante, 
. 
21 
 
2. Objetivos de la investigación 
 
 2. 1. Objetivo general 
 
- Explicar el cambio fonetológico del español desde una perspectiva integradora 
y multifactorial, considerando los aportes de la Fonología Evolutiva. 
 
 2. 2. Objetivos específicos 
 
- Comparar los diversos enfoques de explicación del cambio lingüístico con la 
Fonología Evolutiva, con el fin de establecer su pertinencia teórica y efectividad 
explicativa. 
 
- Analizar fenómenos de cambio fonetológico en el español, como la 
reestructuración del sistema de sibilantes y la glotalización de la fricativa 
labiodental sorda, en torno a los cuales se puedan presentar explicaciones 
teóricas generales. 
 
- Precisar las implicaciones epistemológicas y metodológicas de categorías como 
“evolutivo”, “teleología” y “polisistémico”. 
 
3. Justificación y delimitación 
 
 
 La explicación del cambio lingüístico es uno de los temas más interesantes y 
controversiales en la lingüística en general. Específicamente, el cambio fonetológico ha 
propiciado una serie de teorías y modelos explicativos en la ciencia lingüística 
contemporánea, siendo una línea de investigación especialmente compleja y de gran 
vitalidad en la fonología y fonética contemporáneas. 
 
 
generalmente vocálico), prenúcleo y posnúcleo. Este modelo plantea principios que rigen el 
comportamiento, los procesos y las tendencias de cada uno de estos sistemas (véase Chela Flores y 
Chela Flores, 2007: 12-40). 
22 
 
 Estas características particulares del problema del cambio fonetológico, que en 
algún momento se consideraba un misterio, fueron comprendidas durante los cursos de 
Fonología y Teoría Fonetológica Contemporánea, a cargo del profesor Godsuno Chela-
Flores. En el marco de las reflexiones y discusiones suscitadas en los mismos, 
analizando eventos históricos de cambio fonetológico ampliamente documentados, se 
llegó a la conclusión de la necesidad de un enfoque integrador y multifactorial, en la 
misma línea que viene desarrollando el profesor Chela Flores en sus investigaciones. Si 
comparamos este enfoque con los desarrollos del mismo tema en la lingüística 
contemporánea, podemos observar su originalidad y pertinencia. 
 
 Asimismo, no encontramos en nuestro idioma ningún estudio exhaustivo 
respecto a la Fonología Evolutiva. En la medida en que esta investigación le prestará 
especial atención a este paradigma, la consideramos un aporte al conocimiento en 
nuestra lengua, provechosa para los investigadores de nuestra región, especialmente 
los de la Maestría en Lingüística y Enseñanza del Lenguaje de la Universidad del Zulia. 
 
4. Hipótesis de trabajo 
 
 
 La explicación satisfactoria del cambio fonetológico implica la aceptación de la 
integración y la multiplicidad. Integración de la sincronía y la diacronía, de los elementos 
estructurales y no estructurales, y de la fonética y la fonología (que entendemos, como 
Chela-Flores, unimodularmente: fonetología). Esta integración implica el reconocimiento 
de la multiplicidad: admitir plenamente la utilidad de considerar los enfoques de 
diversas subdisciplinas lingüísticas o incluso integrarlas (multiplicidad modular), de los 
diversos momentos y lugares de los eventos lingüísticos (multiplicidad espacio-
temporal, que incluiría la confluencia entre la lingüística sincrónica y la diacrónica), así 
como de las leyes, comportamientos y variables que intervienen en un fenómeno 
lingüístico determinado (multifactorialidad causal). 
 
 Asumiendo esta perspectiva de investigación, se pueden analizar los casos 
concretos de cambio fonetológico en el español, para determinar la validez y 
consistencia de las explicaciones teóricas teleológicas, no-teleológicas, de base 
23 
 
fonética, psicolingüística, sociolingüística, etc. Esta evaluación debe desembocar 
directamente en la valoración teórica y metodológica de la Fonología Evolutiva, y 
también del Modelo Polisistémico Natural. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
24 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO II 
MARCO TEÓRICO 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
25 
 
 
 
 
 
 
 
CAPÍTULO II 
MARCO TEÓRICO 
 
 
1. La tradición de estudios del cambio fonetológico y su alcance teórico 
 
 
 El estudio de los cambios de los sonidos de las palabras a lo largo de su 
evolución histórica es de larga data. De hecho, el estudio sistemático inicial de los 
fenómenos fonetológicos se desarrolló en la esfera diacrónica de la lengua; por esta 
razón, la fonetología se desarrolla en este tiempo en el marco de la filología. En 
Occidente, el interés riguroso por el estudio del cambio fonetológico es muchísimo más 
tardío que en Oriente. Y es que para un estudio sistemático de la fonología podemos 
remontarnos al célebre gramático indio Pāɳini (s. IV a. C.). 
 
 Desde luego, tal como muchos otros estudiosos de la esfera fonetológica del 
lenguaje, anteriores al paradigma contemporáneo de la disciplina, este sabio de la 
antigüedad se aproximó a esta área de un modo estrictamente descriptivo y con fines 
prácticos muy precisos y limitados. De hecho, prevalece en el caso de Pāɳini el aspecto 
normativo del análisis del lenguaje (del sánscrito), con miras a establecer una 
estandarización de la lengua hablada en aquel entonces en la India mediante una 
gramática de la lengua. Sin embargo, el conocimiento fonetológico recogido en su obra 
exhibe una profundidad y exhaustividad –no solo de este sabio, sino de toda la tradición 
india a la que pertenece- que solo será alcanzada en Occidente mucho después. A este 
respecto, señala Robins: 
 
“Lo que es más notable en la obra fonética india es su manifiesta 
superioridad en concepción y ejecución, comparada con todo lo producido 
en Occidente o en cualquier parte antes de que la contribución india se 
conociese allí. En general podemos decir que Henry Sweet emprende las 
26 
 
cosas donde las dejaron los tratados indios de fonética” (Robins, 2000: 
218). 
 
 En este punto, conviene hacer un paréntesis, lo cual nos facilitará la comprensión 
del desarrollo histórico de la ciencia lingüística en general y de la fonética y fonología 
(fonetología) en particular. 
 
 Ya desde la Antigüedad clásica, en épocas tempranas del surgimiento occidental 
del estudio racional del mundo y de la sociedad, se realizaron intentos de 
sistematización de los saberes según sus contenidos y maneras de abordar sus objetos 
de estudio. Se considera a Aristóteles como el primer gran sistematizador de las 
disciplinas científicas (entendiendo que, en su contexto, aún no existía la separación 
contemporánea entre ciencia y filosofía). Así, el pensador griego estableció su famosa 
clasificación del conocimiento en grados del saber, según su generalidad conceptual y 
objetivos: percepción, memoria, experiencia, arte o saber práctico (téchne, en griego) y 
ciencia (epistéme, en griego)3
 
. Estos modos de conocimiento están jerarquizados, de 
modo ascendente, según su grado de generalidad, dependencia (cada nivel superior 
depende del inmediatamente inferior), carácter de necesidad y confiabilidad. En este 
sentido, no es igual saber, por experiencia, qué es algo, que conocer su porqué, su 
causa (saber práctico); asimismo, no es igual un conocimiento (como este último) de 
utilidad práctica por su escasa generalidad, que explique la causa inmediata de un 
fenómeno, que un conocimiento general de las causas y principios últimos delhecho 
estudiado. Por otra parte, esta gradación denota otro aspecto del conocimiento de un 
objeto determinado: si se persigue con un fin práctico, o por mera curiosidad, por querer 
entenderlo y explicarlo: el conocer como un bien en sí mismo. En la Antigüedad, solo en 
el segundo caso se podía hablar inequívocamente de conocimiento científico. 
 Pese a los importantes cambios que se han dado en la historia de la ciencia y de 
su concepción, tal distinción mantiene cierta vigencia, dada la persistencia de las 
dicotomías teoría-praxis, concreción-abstracción y descripción-explicación. Asimismo, la 
búsqueda de las causas que originan un fenómeno estudiado es uno de los aspectos 
 
3 Para consultar el célebre pasaje donde Aristóteles plantea esta clasificación, véase Metafísica, Libro I, 
Capítulo I. Para un comentario del mismo, véase García Borrón (1987: 82-86). 
27 
 
más distintivos de la ciencia en su historia y en su estado actual; esta búsqueda de las 
razones se traduce en la capacidad de explicar los hechos, objetivo primordial de esta 
modalidad del conocimiento humano, independientemente de los distintos métodos y 
paradigmas que se han asumido como medios y enfoques investigativos. Lo que 
persiste en la práctica científica y permite trazar una guía para entenderla es dicha 
búsqueda, apelando a los elementos conceptuales, metodológicos y tecnológicos 
disponibles en cada época para interpretar los hechos del mundo de la manera más 
rigurosa posible, procurando teorías con fuerza explicativa, coherencia y valor 
predictivo. 
 
 En la lingüística y sus subdisciplinas observamos un desarrollo histórico que 
describe un incremento en la comprensión de los complejos hechos lingüísticos que 
estudia. Por supuesto, pueden darse ciertos estancamientos o retrocesos en momentos 
puntuales del progreso de la disciplina; no obstante, cada nuevo enfoque y tradición 
investigativa, pese a sus limitaciones inherentes, brinda interesantes aproximaciones y 
puede revelar nuevos aspectos del conocimiento del lenguaje que hasta entonces no 
hayan sido considerados en su justa profundidad. 
 
 Un aspecto interesante del desarrollo del conocimiento humano, y que se deduce 
de la clasificación aristotélica previamente citada, es el ascenso desde los matices más 
concretos y particulares del objeto estudiado, hasta los más generales y teóricamente 
sólidos. Pero así como podemos aceptar el carácter jerárquico de esta clasificación, es 
preciso hacerlo incluyendo la dependencia que considera entre los niveles, a modo de 
un edificio donde cada piso se soporta en el que está debajo. 
 
 Esto implica que, si bien una explicación supera a una mera descripción (y el 
conocimiento suele partir de un juicio empírico para luego progresivamente avanzar a 
uno teórico), una buena explicación (justificada y coherente) debe ser consistente y 
servirse de algún modo, incluso surgir (inductivamente), de los datos fácticos 
proporcionados por una descripción apropiada. Así, tenemos que el conocimiento 
científico requiere de procesos previos de descripción rigurosa para surgir (como 
cuando, a partir de la observación amplia y detallada, se aprehenden los patrones 
28 
 
inherentes a fenómenos relacionados) o para refinarse (como cuando un nuevo hecho 
contradice alguna afirmación teórica, conduciéndola a un replanteamiento o revisión). 
Por otra parte, nuevos enfoques y modelos teóricos suelen suscitar nuevas maneras de 
aproximarse a los hechos, lo cual se traduce en descripciones más precisas. Este tipo 
de relación recíproca, bidireccional, entre las explicaciones teóricas y las descripciones 
concretas, las observamos con claridad en la historia de la fonética y de la fonología. 
 
 Volviendo la vista a la historia de la fonetología y a su –tardío- desarrollo en 
Occidente, podemos mencionar a Sir William Jones (1746-1794) como un hito 
fundamental en los estudios fonetológicos, siendo uno de los iniciadores de los estudios 
de lenguas comparadas, detectando las relaciones de familiaridad entre el sánscrito, el 
griego y el latín. A partir de este descubrimiento, se desarrollan los trabajos de célebres 
filólogos como el alemán Jakob Grimm (1785-1863), quien realiza una gramática 
comparada de las lenguas germánicas con un enfoque histórico, y Friedrich Pott (1802-
1887), quien establece comparaciones entre diversas lenguas indoeuropeas, 
estudiando las transformaciones fonéticas y su relación con la etimología de las 
palabras. 
 
 Los vigorosos esfuerzos de estos investigadores motivan a una tradición de 
estudios diacrónicos, cuya búsqueda de reglas para el cambio fonetológico lleva a un 
grupo de estudiosos a buscar que la pretensión de verdad de las leyes que postulan a 
partir de la evidencia histórica recolectada sea equivalente a la de las ciencias 
naturales. El mismo, surgido en la década de los setenta del siglo XIX, compuesto de 
jóvenes investigadores, pasó a ser conocido como Junggrammatiker (Neogramáticos o 
Jóvenes Gramáticos). Partiendo de la idea -correcta, pero incompleta- de que los 
sonidos proferidos por los hablantes tienen una dimensión física real, plantearon que 
sus cambios debían comportarse conforme a leyes de la naturaleza, del mismo modo 
que el resto de los fenómenos empíricos. Así, las leyes fonéticas genuinas debían 
cumplirse sin excepción, del mismo modo que cualquier otra ley natural, y en el caso de 
que no se cumpliera la ley, debían explicarse detalladamente las condiciones y factores 
29 
 
que lo impidieron. A esta exigencia se le llamó la teoría de la Ausnahmslosigkeit der 
Lautgesetze (inexcepcionalidad de las leyes fonéticas)4
 
. 
 Este tipo de enfoque positivista que da origen a semejante exigencia fue 
cuestionado en aquella época por algunos de sus colegas, quienes apelaron a la 
concepción del lenguaje como actividad humana, y no como un simple proceso natural. 
Pese a tan acertada crítica, a la cual nos adherimos, podríamos admitir que la postura 
neogramática era en buena medida razonable en su contexto, debido al mayor 
desarrollo que tenían las ciencias naturales, por lo cual servían de referencia y 
paradigma del proceder científico de las ciencias humanas de aquel entonces. 
Recordemos, a modo ilustrativo, la inspiración en las ciencias naturales que tuvo 
Auguste Comte para desarrollar su sistema sociológico, y Karl Marx para desarrollar su 
planteamiento político-económico (este último consideraba a su socialismo científico, 
justamente porque planteaba leyes inexorables del devenir histórico de las sociedades). 
Esta comparación nos muestra otro aspecto fundamental de las nacientes ciencias 
humanas en general y la de lingüística en particular en el s. XIX: la historia como 
contexto en el cual se observan los patrones, leyes, cambios y accidentes de la acción 
humana. 
 
 Otro lingüista que merece ser mencionado en este proceso de desarrollo 
científico de la fonetología es Baudouin de Courtenay (1845-1929), fundador de la 
Escuela de Kazan. Este ilustre polaco anticipa muchas de las ideas modernas de la 
lingüística y tiene una importancia capital en el desarrollo de la fonetología, ya que es 
un claro antecedente de los esfuerzos contemporáneos –y que revisaremos más 
adelante– de integrar la sincronía y la diacronía desde los patrones observados en la 
primera hasta el origen histórico descubierto en la segunda. 
 
 Lamentablemente, esta escuela y su visión integral viene a ser opacada por la 
revolución que origina Ferdinand de Saussure (1857-1913), cuya concepción 
sistemática del lenguaje originó la conocida oposición entre sincronía y diacronía; 
 
4 Para una explicación más detallada de las exigencias neogramáticas y sus discrepancias teóricas con 
otros estudiosos de su tiempo, véase Porzig (1986: 309-325). 
30 
 
oposición esta que marca el distanciamientoentre lingüistas y filólogos. Y es que con la 
refundación saussureana de la lingüística, el interés de los investigadores de esta área 
debía centrarse en los elementos directamente constatables de las lenguas, en su 
estado actual, para así captar la estructura subyacente, el sistema general que esconde 
la contingencia de los eventos individuales. 
 
 De hecho, esta oposición depende de otra más general: langue y parole (lengua 
y habla); para el lingüista ginebrino, el cambio histórico de las lenguas pertenece a la 
parole, aspecto asistemático e individual de la expresión lingüística De este modo, 
entra en franca oposición al paradigma vigente en los círculos científicos europeos de 
su tiempo, de tradición neogramática y que consideraba al ámbito histórico como el 
único en el que se podía llevar adelante un estudio científico y riguroso del lenguaje. 
Respecto a este punto, nos dice Anderson: 
 
“[…] al abogar por que las consideraciones sincrónicas sean las 
fundamentales, Saussure estaba desafiando la doctrina central del modelo 
neogramático de explicación lingüística entonces en curso, que defendía 
que el estudio histórico era no sólo importante sino, de hecho, la única 
aproximación genuinamente ‘científica’ a los hechos del lenguaje” 
(Anderson, 1990: 44). 
 
 Esta decisión saussureana tendrá un impacto fundamental en el desarrollo de la 
lingüística como disciplina contemporánea. Por ejemplo, en la escuela generativista 
fundada por Noam Chomsky (n. 1928) la distinción entre langue y parole va a ser 
asumida de manera bastante aproximada mediante la oposición entre competence y 
performance (competencia y actuación). Anderson explica: 
 
“La competencia representa el conocimiento atribuido a un hablante-
oyente ideal (obviamente inexistente) en una comunidad de habla 
lingüísticamente uniforme; se opone a los ´pormenores acerca de cómo y 
hasta qué punto los hablantes individuales utilizan ese conocimiento en 
condiciones reales y sujetos a limitaciones extralingüísticas (lo que sería la 
actuación). La competencia tiene, pues, una naturaleza bastante similar a 
la noción de langue de Saussure […] En ambos casos, esta distinción es 
la que permite ‘despegar’ a la teoría, al proporcionar una base 
fundamentada que permite delimitar el objeto de estudio, idealizándolo a 
31 
 
partir de la variedad infinita de eventos del tiempo real y centrando la 
atención en el aspecto sistemático de éstos.” (Anderson, 1990: 39). 
 
 
 La nueva oposición generativista, del mismo modo que la saussuriana, va a 
contribuir a mantener la separación entre sincronía y diacronía, interesándose 
estrictamente en el contexto sincrónico. Blevins, en un capítulo dedicado a los distintos 
enfoques de explicación fonológica a lo largo de la historia, sostiene: 
 
“By the middle of the twentieth century, the chasm between the two areas 
of study was so deep that Hjelmslev (1953) described historical and 
general linguistics as two separate disciplines. 
 This schism between diachronic and synchronic linguistics 
continues to the present. Chomsky’s Saussurian conception of generative 
grammar as a synchronic rule system disembodied from its history has 
been influential in maintaining this divide. The generative model was 
extended to phonology in Chomsky and Halle (1968), where sound 
patterns are described and formalized, but “scientific explanation of the 
ways and means by which these forms originated,” so important to 
Baudouin, is entirely absent.” (Blevins, 2004: 65) 
 
 En este orden de ideas, el interés por integrar las dimensiones sincrónica y 
diacrónica del lenguaje es reciente, y por buena parte del siglo pasado no tuvo la 
atención, salvo contadas excepciones, de los lingüistas de las diferentes escuelas. Así, 
podemos observar en la historia contemporánea de la lingüística cómo las premisas y 
distinciones fundamentales, que sirvieron de fundamento para el edificio de la disciplina, 
orientaron las investigaciones de manera rígida, impidiendo el desarrollo de algunas 
áreas de investigación y la posibilidad de relaciones lógicas distintas entre algunas 
nociones fundamentales. 
 
 En el caso de la lingüística, las áreas de estudio que se vieron más perjudicadas 
por este –de gran importancia histórica, pero en ningún caso idóneo– esfuerzo 
sistematizador fueron justamente las que nos atañen: la fonetología, el cambio 
lingüístico y el origen de los patrones generales observados en la sincronía. 
Consideramos que esto se debió al afán de estabilidad y simetría teórica, a la 
búsqueda, bajo el supuesto de condición sine qua non de la ciencia, de un sistema 
formal, puro, que describiera perfectamente la estructura del lenguaje; si bien los 
32 
 
modelos formales han sido muy útiles para el desarrollo teórico de la disciplina, 
generalmente se ha ignorado el aspecto dinámico del lenguaje en su concreción, que 
incide directamente en el sistema de la lengua y que, pese a su aparente 
comportamiento accidental y caótico, es susceptible en muchas ocasiones de una 
explicación precisa y teóricamente sustentada. 
 
 
2. Referencias clásicas de los estudios del cambio fonetológico en el español 
 
 En vista de que nuestra investigación se circunscribe al cambio fonetológico en el 
español, es importante hacer un breve recuento del desarrollo de los estudios 
fonetológicos y diacrónicos de nuestra lengua. 
 
 Se considera como un hito fundamental y el auténtico iniciador del análisis 
gramatical del español, usando los métodos clásicos de las gramáticas latinas, a 
Antonio de Nebrija (1441-1522). Asimismo, Arellano afirma: 
 
 “Nadie puede discutir a Nebrija la primacía en el estudio de los sonidos 
del castellano, en la indicación de su origen y hasta en el planteamiento de 
problemas fonéticos que están aún por resolver. Nebrija vio también antes 
que nadie la relación de la lengua vulgar con la latina y fue el primero que 
hizo una exposición de la historia de la lengua.” (Arellano, 1979: 120). 
 
 Otro referente interesante de los estudios del español es Juan Pablo Bonet 
(1560-1625), quien superó las observaciones y análisis de su tiempo con respecto a la 
fonética articulatoria, motivado por la búsqueda de métodos efectivos para enseñar a 
hablar a las personas mudas. Asimismo, el erudito Bernardo Aldrete (1565-1645) realiza 
una historia de la lengua española, titulada Del origen y principio de la lengua castellana 
ó romance que oi se usa en España (1606). En esta obra, se observan numerosos 
datos de diversas transformaciones fonetológicas, pero a un nivel estrictamente 
descriptivo (como señalamos previamente, hace falta superar el nivel descriptivo para 
pasar al explicativo: una buena explicación no puede prescindir de los datos 
descriptivos; he allí el aporte de Aldrete: el brindar la plataforma descriptiva para las 
explicaciones posteriores). 
33 
 
 
 En épocas más cercanas, podemos ubicar como hito fundamental de los 
estudios del español, iniciador de la escuela española de estudios filológicos, a Ramón 
Menéndez Pidal (1869-1968). Referencia obligada para el estudio de la historia del 
español, incluyendo el cambio fonetológico, educó a filólogos de la talla de Tomás 
Navarro Tomás, Rafael Lapesa, Amado Alonso y Ángel Rosenblat. 
 
 Si bien estos autores algunas veces trascienden el nivel descriptivo y explican los 
procesos observados durante la historia de la lengua, dicha explicación es de poco 
alcance teórico: las razones esbozadas no tienen la posibilidad de extenderse 
satisfactoriamente a lenguas que no estén emparentadas con el español, no se 
consideran de ninguna manera los modelos teóricos fonetológicos desarrollados desde 
la lingüística sincrónica y suelen ser unifactoriales, sin atender la posibilidad de la 
confluencia de causas del fenómeno estudiado. 
 
 Algunos autores formados en la lingüística sincrónica serán los que, en años 
recientes, volverán la vista haciael origen de los patrones observados en la actualidad, 
con el fin de explicar satisfactoriamente los datos de los que disponen; de esta manera, 
surge la necesidad de integrar ambos módulos, pero las posibilidades y orientaciones 
de la integración son diversas, como veremos a continuación 
 
3. Estudios contemporáneos del cambio fonetológico 
 
 
 Desde hace algunas décadas, ha cobrado fuerza la explicación de los patrones 
fonológicos observados a partir de procesos fonéticos; es decir, a partir de los claros 
paralelismos observados entre los procesos fonológicos de orden abstracto y los de la 
substancia fonética, de orden concreto, se puede establecer una clara relación entre 
unos y otros, incluso considerando una variación fonética como el origen del patrón 
fonológico. Tal como señala Hansson: 
 
“As even a cursory acquaintance with phonology will reveal, the vast 
majority of sound patterns and phonological processes in the world’s 
34 
 
languages show clear indications of being shaped by the physical 
constraints of speech production and perception […] Common 
phonological processes usually have clear parallels in low-level patterns of 
phonetic variation, both in the articulatory domain (coarticulation, gestural 
undershoot, inter-gestural timing and overlap, boundary strengthening) and 
in the acoustic-perceptual domain (confusion, misperception; aerodynamic 
effects on the acoustic signal). Such obvious and pervasive correlations 
raise a number of questions that cut to the conceptual core of phonology 
as a discipline.” (Hansson, 2008: 859) 
 
 Esto nos lleva a un enfoque de explicación fonológica de base fonética. Ahora 
bien, si asumimos dicha postura, inferimos la premisa de que entre la fonética y la 
fonología solo hay, a lo sumo, una diferencia de grado y de perspectiva temporal, pero 
en gran medida representan dos aspectos de un mismo proceso lingüístico. Esta 
situación ha motivado a autores como Chela Flores a difuminar las fronteras entre estas 
dos disciplinas y enmarcarlas bajo un mismo rótulo: fonetología (denominación que, 
dada la naturaleza de esta investigación, hemos asumido plenamente) y a otros, como 
Ohala, a vincularlas hasta el punto de no admitir una interfaz entre ambos módulos 
(Ohala, 1990a). 
 
 Por otra parte, la integración entre fonética y fonología implica el mismo nexo 
entre sincronía y diacronía, ya que buena parte de los cambios fonéticos que explican 
los procesos fonológicos del presente se encuentran documentados en la historia de las 
lenguas a lo largo de los siglos. 
 
 Pero este enfoque integrado en el marco de la explicación del cambio 
fonetológico puede tener diversas modalidades, variando según el agente del cambio 
(el hablante u oyente), si el cambio se debe a una finalidad (teleología) o a un mero 
error (lo cual está relacionado con el aspecto anterior), y si el modelo propuesto, para 
explicar la asimilación del cambio por parte de los hablantes, presupone una Gramática 
Universal o si simplemente se atiene a los datos concretos aprendidos por los 
hablantes. Estas y otras diferencias en algunos modelos teóricos de explicación 
integrada del cambio fonetológico serán expuestas a continuación.5
 
5 Para una excelente presentación a este tema, véase Hansson (2008). En buena medida, seguimos en 
esta sección el esquema de ese artículo. 
 
35 
 
 
 3. 1. El modelo de Ohala: el error del oyente como motor del cambio 
 
 En la explicación de John Ohala, el cambio de sonido se debe al error en la 
representación del oyente de lo expresado por el hablante (Ohala, 1981, 1989). La 
discordancia entre ambas versiones del mensaje se resuelve inclinándose a la del 
oyente, quien en adelante expresará la cadena de sonidos según como fue capaz de 
escucharla. Ahora bien, según este autor existen dos maneras en las que se produce el 
error del oyente y el subsiguiente cambio: por hipocorrección y por hipercorrección. En 
el primer caso, un efecto contextual es malinterpretado como una propiedad inherente 
de la secuencia escuchada (por ejemplo, el proceso de asimilación). En el segundo, 
una propiedad inherente al segmento representado es interpretada como contextual, 
omitiéndose (por ejemplo, la disimilación). 
 
 Un elemento resaltante de la teoría de Ohala es que solo da cuenta del inicio del 
cambio y no de su propagación; sin embargo, algunos defensores de esta propuesta 
apelan a la difusión léxica, cambiándose progresivamente los sonidos de cada palabra 
donde se repite el segmento modificado, una cada vez. Asimismo, es llamativo que los 
estudios de cambios fonetológicos a partir del error perceptivo del oyente muestran que 
dichos errores tienden a ser claramente asimétricos; es decir, que en la amplia mayoría 
de los casos, un cambio A > B, donde [A] en un contexto particular es confundido con 
[B], no suele tener un cambio inverso B > A de similar frecuencia, a veces sin aparecer 
este último ni una sola vez. Esto es especialmente curioso en un modelo donde operan 
dos mecanismos inversos (hipocorrección e hipercorrección), llevando a algunos 
detractores a criticar este aspecto de la teoría. Sin embargo, estamos de acuerdo con 
Hansson en que quienes argumentan en contra del modelo de Ohala enfatizando su 
asimetría parten de una “unsupported assumption that misperception necessarily should 
be symmetric” (Hansson, 2008: 866). 
 
 En este modelo, el hablante queda relegado a un rol marginal. Esto es 
consistente con la postura no-teleológica del mismo: en ningún momento, el cambio se 
36 
 
debe a una adecuación o anticipación del hablante con respecto al oyente; es decir, no 
hay ninguna finalidad en el cambio fonetológico6
 
. 
 
 3. 2. La “Teoría H y H” de Lindblom: el rol del hablante y la teleología del 
cambio 
 
 
 Björn Lindblom desarrolló una propuesta conocida como “H & H theory”, la cual 
plantea que el cambio fonetológico surge en los hablantes, quienes adaptan 
constantemente sus expresiones habladas a sus necesidades comunicativas y 
contextuales particulares, aumentando la articulación o reduciéndola, siempre tomando 
en consideración la posibilidad del oyente para captar la información. De esta manera, 
las variaciones de los sonidos de los hablantes se manejan entre límites de 
“hyperspeech and hypospeech” (hipoarticulación e hiperarticulación). 
 
 Respecto a este planteamiento, comenta Lindblom: “suppose that the talker is 
capable of making a (gross) predictive, running estimate of the implicit, listener-
generated contribution. In the subconscious planning of an utterance the speaker can 
elaborate (overarticulate), or simplify (underarticulate) his articulatory gestures in 
accordance with that estimate.” (Lindblom, 1983: 157). 
 
 3. 3. El modelo basado en el uso de Bybee: el rol reductivo-compresivo del 
hablante 
 
 
 Para Joan Bybee, el cambio fonetológico se inicia en el hablante, mediante la 
reducción en la magnitud gestual de la articulación, o la compresión y superposición 
temporal de la misma. Así, esta autora no solo comparte con Lindblom la postura de 
 
6 En este sentido, sostiene Ohala: “[…] neither speaker nor hearer chooses - consciously or not – to 
change pronunciation […] Rather, variation occurs due to "innocent" misapprehensions about the 
interpretation of the speech signal or, as suggested above, due to listeners' inexperience. In this respect 
sound change is not unlike the transmission of scribal errors in the copying of manuscripts. It does not 
occur to "optimize" speech in any way: it does not make it easier to pronounce, easier to detect, or easier 
to learn” (Ohala, 1990b: 266). 
37 
 
que el cambio surge en el plano de la producción de los sonidos, sino que su 
argumentación también contiene elementos de economía y optimización motora7
 
: 
“[…] a unified view of articulatory modificationsover time or over speech 
styles is likely to reveal that the general tendencies affecting speech 
production are the same as those affecting other instances of repeated 
motor behavior. With repetition, neuromotor routines become more 
compressed and more reduced.” (Bybee, 2001: 78). 
 
 Por otra parte, vale señalar que, si bien es patente la oposición de esta lingüista 
a la explicación de Ohala del origen del cambio fonetológico a partir del error 
perceptivo, admite que algunos cambios pueden darse de este modo en etapas 
tempranas de la adquisición de la lengua, es decir, en la infancia. 
 
 3. 4. La Fonología Evolutiva de Blevins: la metáfora de la evolución aplicada 
al lenguaje 
 
 La pertinencia de la presentación anterior de los modelos teóricos del cambio 
fonetológico estriba en que coexisten con –y tienen influencia en– el programa de 
investigación desarrollado por Juliette Blevins, propuesta principal de análisis y 
discusión de la presente investigación. 
 
 La autora establece una analogía, que considera útil por su valor ilustrativo, entre 
la evolución biológica y la del lenguaje. Sin embargo, aclara inmediatamente el carácter 
estrictamente metafórico de esta caracterización, negando que ello implique una 
interpretación neodarwiniana del lenguaje o que considere que el lenguaje evolucione 
por selección natural8
 
7 La teleología de Lindblom incorpora no solo el fin comunicativo del lenguaje, sino la búsqueda de un 
desempeño articulatorio óptimo: “The landing manoeuvre is purpose controlled in the sense that it is the 
goal of the movement that determines the sequence of motor events. It expends no more physiological 
energy than necessary and it is miraculously well suited to the circumstances of the moment. An infinitive 
variety of novel situations; constant goal; new, purposively adapted movement patterns. Those are key 
characteristics of biological motion. In the terminology of Granit (1977) motor control is teleologicallv 
organized. These key notions are also found in speech” (Lindblom, 1983: 157). 
. Enfatizando la analogía, Blevins afirma que 
 
8 Para ampliar esta aclaratoria, véase Blevins (2004: 17-19). Aclaratoria, por demás necesaria, ya que las 
frecuentes alusiones al evolucionismo biológico pueden confundir a más de un lector desprevenido. Esto 
se hará evidente en la siguiente nota al pie. 
38 
 
 
“Language transmission is a form of cultural evolution. Each human being 
constructs a language-specific grammar anew from information gleaned 
from the environment in the form of utterances of surrounding speakers. 
Cultural evolution, like biological evolution, involves three interacting 
processes: a source of variation; a means of high-fidelity information 
preservation between generations of variants; and one or more selective 
mechanisms serving as feedback loops between specific variants and 
‘success’ (Steels 1997)” (Blevins, 2006a: 125)9
 
. 
 Si bien la explicación del cambio fonetológico en este programa es ampliamente 
deudora del modelo de Ohala previamente expuesto, es preciso señalar que tiene 
diversas influencias en la historia de lingüística y amalgama algunas tesis planteadas 
por diversos autores. A este respecto, Blevins señala: 
 
“Evolutionary Phonology has much in common with other schools of 
historical and synchronic analyses of sound systems, but, as sketched in 
chapter 3, [it] presents a distinctive synthesis of these ideas, which is 
informed by the descriptive, typological, and theoretical advances in 
phonetics and phonology over the past century. Evolutionary Phonology 
shares with the nineteenth-century neogrammarian doctrine the view that 
synchronic sound patterns are best understood in terms of their diachronic 
origins. 
 At the same time, it differs significantly from the neogrammarian 
tradition in its amplified model of sound change, and in the attempt to 
model synchronic systems in their own terms. The interrelationships 
established between diachrony and synchrony in Evolutionary Phonology 
are closest, at least in spirit, to the work of Baudouin de Courtenay 
(Stankiewicz 1972). However, the use of underlying and surface forms, 
phonemes specified in terms of distinctive features, and autosegmental 
and prosodic representations, make Evolutionary Phonology distinctly 
modern.” (Blevins, 2004: 15) 
 
 Siguiendo las premisas fundamentales de Ohala, la aproximación al problema del 
cambio de sonido y su relación con los patrones observados en la sincronía en la 
Fonología Evolutiva es no-teleológico (not goal-directed). En este sentido, y 
 
 
9 Otro ejemplo de las comparaciones establecidas por la autora entre evolución biológica y lingüística lo 
tenemos en una tabla donde compara diversos fenómenos y similitudes entre ambos tipos de cambio. En 
uno de los casos comparados, considera como “adaptación por selección natural” la evolución paralela e 
independiente tanto de las almohadillas de los dedos de diversos géneros de reptiles (Iguanidae, 
Scincidae y Gekkonidae) como el ensordecimiento de las obstruyentes finales en las familias 
indoeuropea, túrquica y cusita (Blevins, 2006a: 121). 
39 
 
cuestionando el modelo teleológico de Lindblom, la autora afirma: “[…] sound change 
itself is non-optimizing. Sound change may result in a less effortful pronunciation, or 
more extreme perceptual contrast, but these are emergent, non-deterministic, properties 
of change which reflect common sources of sound change, and nothing more.” (Blevins 
2004: 15). 
 
 Un aspecto que aclara Blevins de su programa de investigación es que, a 
diferencia de la manera habitual en que se ha interpretado el de Ohala10, el suyo no 
considera como única fuente del cambio fónico el error perceptivo, sino que también 
incluye la variación articulatoria11. Sin embargo, resulta patente en sus trabajos la 
preponderancia que le otorga al rol del oyente para explicar el cambio lingüístico12
 
. De 
hecho, aún en los casos donde este cambio se atribuya a variaciones articulatorias, 
como en el caso de lenición y fortición, es el oyente quien malinterpreta la señal 
acústica y da inicio al cambio. Es evidente que la preponderancia que Blevins y Ohala 
le dan al rol del oyente, incluso en cambios explicables mediante consideraciones 
estrictamente articulatorias, no solo se deben a los efectos acústicos de las 
modificaciones de esta índole –y que pueden justificar una participación destacada del 
oyente en estos cambios–, sino a la premisa teórica que siguen estos autores del 
carácter no-teleológico del cambio. 
 Asimismo, Blevins precisa que sus investigaciones solo apuntan a los cambios 
acaecidos en el hablante-oyente considerado individualmente. Es decir, atiende al 
origen del cambio fónico, a las fuentes últimas, no a la difusión del mismo (ni a los 
 
10 En contraste con esta interpretación, que Blevins considera errónea, la autora cita la siguiente 
afirmación de Ohala: “These results add to the growing body of evidence pointing to the crucial role of the 
listener in initiating certain sound changes […] This is not to deny that much of the synchronic variation in 
speech – from which diachronic variation arises – can be traced to the speaker or the physical principles 
which map articulation to sound” (Ohala, 1990b: 266). En todo caso, tal como vimos en una cita previa de 
la misma fuente, este reconocimiento en el esquema de Ohala de procesos articulatorios en el 
surgimiento de algunos cambios fonetológicos, no le confiere al hablante la posibilidad de dar inicio al 
cambio. Al contrario, siempre se debe a una aprehensión errónea de la expresión fónica. 
 
11 Respecto a este punto, véase Blevins (2004: 31-44, 140-147). 
 
12 Un ejemplo especialmente significativolo tenemos en un artículo publicado por la autora titulado 
Interpreting Misperception. Beauty is in the Ear of the Beholder (Blevins, 2007: 144-154), haciendo clara 
alusión al refrán popular beauty is in the eye of the beholder (la belleza está en los ojos de quien 
observa). 
 
40 
 
cambios fonetológicos que puedan surgir, justamente, debido a contacto entre lenguas 
o a la difusión de ellas)13
 
. Consideramos que esto constituye una debilidad de la 
propuesta, ya que, como veremos en el Capítulo IV de esta investigación, el 
componente sociológico es fundamental para explicar de manera plena y satisfactoria 
los procesos de cambio fonetológico del español (y, claro está, de cualquier lengua, 
dada la naturaleza y función social del lenguaje). 
 Un elemento central de este programa de investigación, intrínsecamente 
relacionado con la consideración individual del hablante-oyente, es el rol que cumple la 
adquisición de la lengua. Para Blevins, en las primeras etapas de interacción lingüística 
surgen las variantes que, eventualmente, pueden modificar el sistema de la lengua. En 
estas condiciones, el cambio fonetológico está latente y puede manifestarse en 
cualquier momento14
 
. 
 También es preciso destacar el énfasis que hace la autora en desmarcarse de la 
Fonología Generativa y de la Teoría de la Optimidad, no solo por la inclusión de la 
diacronía en la explicación de los patrones fónicos de la sincronía, sino además en los 
presupuestos teóricos y enfoques de explicación de los mismos. En este sentido, 
Blevins es tajante en rechazar cualquier explicación de los patrones fónicos que se 
fundamente en el conocimiento fonológico innato, tal como lo hacen estas escuelas de 
investigación. Al contrario, parte de la premisa de que las explicaciones extra-
 
13 “This study focuses only on sound change at the level of the individual which can spread and give rise 
to sound change at the level of the speech community. Within the sociolinguistic literature, these phonetic 
changes are sometimes viewed as the “seeds” or ultimate sources of sound change. Moreover, though 
contact-induced changes are mentioned briefly, in contrast to sound changes which reflect direct 
inheritance, this book does not deal at any length with the many interesting sound changes which result 
from language contact and diffusion, and have no clear biological analogue” (Blevins, 2004: 19). Sin 
embargo, en Blevins, 2006a:120-121 reconoce que estos factores externos pueden ser una de las causas 
de similitud entre dos lenguas, aspecto fundamental para dar cuenta de la tipología de las lenguas y los 
patrones fónicos recurrentes en ellas. 
 
14 En este orden de ideas, afirma la autora: “[...] though language transmission from one generation to the 
next is constrained by perceptual, articulatory, cognitive, and social factors, language transmission is, by 
its very nature, indirect and imperfect. Within this imperfect system of transmission, sound change may be 
viewed as the norm, not the exception. Since every individual will have slightly different early childhood 
experiences, every individual will, by definition, form a grammar based on distinct sets of surface forms” 
(Blevins, 2004: 8). 
 
41 
 
fonológicas de los patrones fónicos tienen prioridad sobre las fonológicas, salvo que se 
demuestre que una explicación estrictamente fonológica es la que actúa15
 
. 
 Esto, desde una perspectiva multifactorial, en la que se admite la intervención de 
diversos factores –incluso, al mismo tiempo- para explicar un hecho lingüístico 
determinado, luce excesivo y contraproducente. Asimismo, pese a que la autora justifica 
este tratamiento por la dificultad de probar tales principios, inclinándose por enfoques 
experimentales de mayor carga empírica y reconstrucciones históricas, al asumir esta 
premisa puede estar ignorando, entre otros aspectos, el elemento psicolingüístico. 
 
 Continuando con su crítica a la Fonología Generativa y a la Teoría de la 
Optimidad, Blevins sostiene que la Fonología Evolutiva busca resolver dos deficiencias 
de tales corrientes de explicación fonológica. En primer lugar, sostiene que ninguna 
tiene como fin primordial explicar las evidentes similitudes entre los patrones fónicos y 
los tipos de cambios de esa naturaleza (debido, claro está, a no interesarse por la 
esfera diacrónica de la fonetología). En segundo lugar, la autora asevera que estas 
escuelas proponen un tipo de explicación que es, al mismo tiempo, muy débil y muy 
fuerte. Su debilidad radica en la incapacidad de dar cuenta de la alta frecuencia de 
algunos patrones fónicos y de la rareza de otros (es decir, de explicar las tendencias 
observadas como tales). A su vez, su fortaleza (entendida como exceso de rigurosidad, 
que no corresponde a los casos atestiguados) está en descartar patrones fónicos 
constatados por la experiencia (y que desde un enfoque diacrónico pueden explicarse) 
(Blevins, 2006a: 131). 
 
 Por otra parte, en esta propuesta se plantea la existencia de tres clases de 
cambios de sonido, que constituyen el Modelo CCC: Cambio (Change), Azar (Chance) y 
Elección (Choice). Cuando ocurre un cambio, el oyente escucha de manera incorrecta 
 
15 “An important premise, related to this general approach, distinguishes Evolutionary Phonology from 
Generative Phonology […] The premise is that principled extra-phonological explanations for sound 
patterns have priority over competing phonological explanations unless independent evidence 
demonstrates that a purely phonological account is warranted. In terms of the sources of similarities in 
Table 1, this means that similar sound patterns which are directly inherited from a mother tongue (a), the 
consequence of recurrent natural phonetically motivated sound change (b), the result of language contact, 
prescriptive norms, or literacy (d), or due to chance (e), should not be attributed to innate linguistic 
phonological knowledge (c)” (Blevins, 2006a: 124). 
42 
 
la emisión fonética proferida por el hablante, lo cual conduce inmediatamente a un 
cambio en la pronunciación del receptor con respecto a la versión del emisor. En el 
caso del azar, un oyente malinterpreta una señal acústica, asociándola a una imagen 
fonológica errónea, distinta de la imagen fonológica de la gramática del hablante; es 
decir, la realización fonética es “intrínsecamente ambigua fonológicamente” (Blevins, 
2006a: 126). Este mecanismo sería el causante de procesos como la metátesis y la 
disimilación. Finalmente, en una elección, el receptor percibe adecuadamente el 
conjunto de variantes alofónicas de un fonema dado; sin embargo, elige como fonema o 
representación fonológica a una variante que no corresponde con la representación 
fonológica del emisor. En este caso, Hansson sostiene que la autora, asumiendo el 
rango de variantes de la Teoría H y H de Lindblom, plantea que en el caso de que estas 
variantes aumenten su frecuencia, los oyentes pueden llevar adelante un reanálisis 
fonológico (Hansson, 2008: 872). Blevins presenta esquemáticamente estas tres 
posibilidades de estas dos maneras, en un sentido interrogativo y afirmativo: 
 
“Phonetic sources of sound change: three questions 
i. Can XaY be misheard as XbY? 
If yes, CHANGE is possible source. 
ii. Are there multiple analyzes of XaY which include XbY, 
aXY, XYa, etc.? 
If yes, CHANCE is possible source. 
iii. Is XaY a slow -or fast- speech variant of XbY, Xab Y, XY, 
etc.? 
If yes, CHOICE is possible source.” (Blevins, 2004: 85). 
 
“A general typology of sound change, S = speaker, L = listener 
i. CHANGE: The phonetic signal is misperceived by the listener due to: 
acoustic similarities between the utterance and the perceived utterance; 
and biases of human perceptual system. 
S says [anpa] L hears [ampa] 
ii. CHANCE: The phonetic signal is accurately perceived by the listener

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