Logo Studenta

Jovellanos_critico_y_teorico_de_la_arqu

¡Este material tiene más páginas!

Vista previa del material en texto

REAL INSTITUTO DE ESTUDIOS ASTURIANOS
JOVELLANOS, CRÍTICO Y TEÓRICO
DE LA ARQUITECTURA
ISABEL RUIZ DE LA PEÑA GONZÁLEZ
Separata del:
BOLETÍN DE LETRAS
DEL REAL INSTITUTO
DE ESTUDIOS ASTURIANOS
N,o 178
OVIEDO, 2011
JOVELLANOS, CRÍTICO Y TEÓRICO
DE LA ARQUITECTURA 1
ISABEL RUlZ DE LA PEÑA GONZÁLEZ
Universidad de Oviedo
RESUMEN: La historiografia del arte español debe a Jovellanos algunas de las pioneras y
más agudas apreciaciones críticas sobre los monumentos de nuestro pasado. Su ex-
haustivo método de acercamiento a las construcciones que consideró claves en la evo-
lución de la arquitectura nacional sorprende por su modernidad. El presente artícu-
lo pretende ofrecer un panorama, a la fuerza incompleto pero representativo, de las
apreciaciones que en este ámbito nos legó el ilustrado. La minuciosa indagación do-
cumental y bibliogrdfica; así como el profundo análisis y reflexiones acerca de las no-
vedades constructivas y plásticas de las obras que atrajeron su atención, quedan plas-
madas en sus numerosos y dispersos escritos artísticos.
PALABRAS CLAVES: Jovellanos, arquitectura, Ilustración, Edad Media, Romanticismo,
prerrománico, gótico, arte hispanomusulmán.
ABSTRACT: Historiography of Spanish art owes to Caspar Melchor de Jovellanos(J 744-
J 81/) some of the earliest critical appraisals on medieval architecture. His compre-
hensive method of approach to the key monuments of national artis still strikingy
moderno This paper aims to show a representative picture, even incomplete, of his
findings in this area. On his writings, his meticulous documentary and bibliographi-
cal research, and his deep analysis and reflections on the development of buildings
can be appreciated.
KEYWORDS: Jovellanos, Architecture, Enlightment, Middle Ages, Romanticism, Prerro-
manesque Art, Gothic, Hispano-lslamic Art
La presente publicación parte de la conferencia que pronuncié en el Real lnstituto de Estudios Astu-
rianos el 2 de junio de 20 II bajo el títuloJovellanos y las artes. El reducido espacio del que dispon-
go unido a mis preferencias investigadoras me han llevado a restringir aquí el tema a las aportaciones
del ilustrado en el ámbito de la arquitectura, si bien dentro del contexto de su importante labor como
crítico de las Bellas Artes.
Boletín de Letras 178 (2011): 135-160 ISSN: 0020-384X
136 ISABEL RUIZ DE LA PEÑA GONZÁLEZ
* * *
Cup.r )!e1chM de JOVdJ:Ulo.. es 11110 .IO! 1M
¡olere.aDltt, de loa genereción IrioriLha dd.l,fa
e" que, iotrllcnciu de (uera chncan coa tlD'
durable, y deteeminan poliruitu, opinioctl
un espíritu de uitiea que tedelo inv~lt· ~u..
uación. cOItutttbtU. Se'ruz,a el .w.ntido diK
leLt;l' y Jn artes, )u.st. que la ((I/1_moción p
inV'8jóu napole:ooic.a. pone un (orudo l~rh&
putas, y QC'I te eontresren sino idMf ~liriu8 v
el eorucuter¡o burlón. dolorido y #.ntero de r.
~.gr.h.doi~ .
De acuerdo coa eJretrate ge.)'euo, NoettW
1•• el fífiel) de loveUallos: cProporcion~.
de eueepc, ~mbl.nteAP.'aciadn y uprotlho, •
,.}YOf. larga y ri'Xada =bdl".n '! modaJe. SUf'tt.
Fmre &UJI no..,. activid.du (biil.orie-.. p
rWCI8 y ,"oci.le5) den.ea In aficióu arr.j~ ••dl a t.
8~ñ816Mcuéade¡ y Peleye, tomlado l. pal.bra
~I\ la mli$. noble ~. Umpia .cepci~a~que le po~
aCI:IJo te supera. del diplomático .t.gm& Jet(
ra, el e.ncllrnbnflor del pintor M~~, h.su
JOVELLANOS. e
Pese a haber transcurrido dos siglos de la desaparición de Gaspar Mel-
chor de Jovellanos, su biografía y su rico legado científico y cultural siguen
completándose a la luz de los hallazgos documentales inéditos y de las nue-
vas interpretaciones de los textos ya conocidos del ilustrado gijonés'. Dentro
de su versatilidad profesional e intelectual, sus aportaciones como crítico y teó-
rico de las Bellas Artes han suscitado menos atención que su legado en los
ámbitos de la política, economía, literatura y pedagogía entre otros. Pero si
bien se trata de una faceta menos divulgada hasta el momento, ofrece en nues-
tra opinión el máximo interés. Los textos jovellanistas de temática artística
que nos han llegado en forma de discursos, ensayos, informes, pero también
a través de sus viajes, diarios o correspondencia', nos transmiten una visión
crítica y desde el punto de vista metodológico muy avanzada para su época.
Constituyen un núcleo documental del máximo interés para los investigado-
res de la historia del arte antiguo, medieval y moderno, por permitimos un
acercamiento fiable a la realidad de numerosos edificios y obras artísticas
muy modificados, y en algunos casos desaparecidos en época reciente.
JOVELLANOS y LAS BELLAC;
Boletín de Letras 178 (2011): 135-160
oo,
RICARDO OlL .tIl.CO
La independencia científica de la Historia del Arte se impulsa en el con-
texto de la Ilustración a fines del siglo XVIII.! y tiene a Jovellanos como uno
de sus principales artífices, junto a Eugenio Llaguno, CeánBermúdez, Anto-
nio Ponz y Bosarte. La aportación del ilustrado gijonés a la teoría de las Be-
llas Artes se condensa en tres publicaciones claves, que han visto la luz a lo
largo del siglo pasado'(Fotos 1-3). A fines del siglo XIX F. de Selgas atribuía
2 Véase con carácter general la reedición crítica de sus obras completas, cuyos volúmenes está editan-
do desde hace años el Instituto Feijoo de Estudios del siglo XVIII, edición iniciada por J.M. Caso Gon-
zález, en los que se recoge la extensa bibliografía jovellanista. También el catálogo de la exposición
celebrada con motivo del bicentenario de la muerte del ilustrado, coordinado por LorenzoÁlvarez, E.
de; Ocampo Suárez-Valdés. J.; Ruiz de la Peña Solar. A.,La lu; de Jovellanos. Exposición conme-
morativa del bicentenario de la muerte de Caspar Melchor de Jovellanos (181 1-201 1), Cijón, del 15
de abril al4 de septiembre de 201 1,Asturias, 201 l. Igualmente las actas recientemente publicadas por
Fernández Sarasola, 1, Lorenzo Álvarez, E. de, Ocampo Suárez, J. y Ruiz de la Peña Solar, Á. (ed.),I
Congreso Internacional Jovellanos, el valor de la Razon (18 II -201 1),Gijón, 2011.
3 J. González Santos clasificó los escritos artísticos del ilustrado en tres núcleos: discursos e informes
académicos, monografías sobre monumentos y ensayos, disertaciones y otros varios, con los que, se-
gún este autor, sentaría los cimientos de la moderna historia del arte español(Jovellanos, aficionado
y coleccionista, Gijón, 1994, p. 20).
4 Sobre los pioneros ensayos de elaboración de una moderna Historia del Arte español Crespo,D., "Dia-
rio de Madrid 1787-1788: de cuando la historia del arte español devino una cuestión pública",Goya,
319-320,2007, pp. 246-259.
5 Selgas. F. de, "Jovellanos considerado como crítico en Bellas Artes",Revista deEspaña, 1883, reed.
por Morales Saro, M'.C. (estudio preliminar), Archivos de la Fundación Selgas-Fagalde, 2, Oviedo,
2001, pp. 53-88; cit. a partir de aquí por esta última reedición; Arco, R. del, "Jovellanos y las Bellas
Artes", Revista de Ideas Estéticas,núm. 13, T. IV, 1946, pp. 31-64; y la excelentey más extensa1110-
IDEAS DE JOVELL
SOBRE ARQUITEC
(ARQUITECTURA ALTOMEDIEV
lA VlER BARON THAIDIGSMA
CONSEJERIA DE EDUCACION.
CULTURA y DEPORTES
lOVELLA OS. CRíTICO Y TEÓRICO DE LA ARQUITECT RA
JOVELLANOS y LAS BELLAS ARTES l
RICARDO t>l!:L AKc.;n
Guplr )felchor de Jov~1l3u~ es HilO ele los \:lr0l"''' W"..
iOlereMDln de I;r ,;,.t1t'ucióo Itllomi, ••del Ilrlo n-m 111 1:1>0..
en que, ioflucocjaa de(Uf'U c.Lhean coa unatrlldic.itin pu.
durable, y determinan polémicaa, opininnei encontrada, ,
un cspteitu de críticaI(Uf! tode lo iuya/le' teatro. po,.~í:l, 11.1'
rucfon. ecetumbres, Se .~ elS4'ntido discrbniusdor en flh
JI"lrOlI ~. In arles, JI~U. qu, la (,.nmoción promovida J10r lw
inn~jóu hapoleooica pene UD(onado paréutc.is aJu die-
putas, y no se eontrastae sinoid••a. poJi"ricu ':' religic ••a~. con
el comentario bwtan, dolorido 'f entero de Gil,." enfil"n~os
" grah.doi.
De aeueedo eou eJ retrato goyeseo, Nocedalno, h. ,'kICCi.
tu el fífiel) de JoveU4l101: «.Proporcionada ett-¡¡tW'a, eiroec
de CUUJlO, ~mbJ.nte a,rrJlciadny f·xl)r~.ivo. cjoe raegadc •.y
viYo~, fargt y m.ada C3beU,.ra y modales sueltos. yde¡anfeIJ."
Entre &US'·.1ri.~ actividades (biHóricaa, polttiees,~(,:OIlQ'
micas y ¡.nc:iale¡.) destecaID eficidu arraitr;óJd. a la .• artc:o~como
~ñ.ló ~!cuéodez y Peleyo ,tOllljodo J. palebea utiei.tloado,.
en J. má. Doble '!. limpla acepciéa ; que lepoOl"' a par ~y aun
L
acaso le supera. del diplomÁrieo augonéaJ~~ NlcoJás de Az••
la. el enl:umbnrJot' del prutcr Mtn~. hasta bacer+os.rhitro
P11
lA VfER BARON THAIDIGSMA
IDEAS DE JOVELLANOS I
SOBRE ARQUITECTURA
(ARQUITECTURA ALTOMEDlEVAL)
PRINCIPADO DE AsTURIAS
L
CONSEJERIA DE EDUCAClO
CULTURA V DEPORTES
137
FORTlINATO DE SElGAS
]OVELLANOS
CONSIDERADO COMO
CRÍTICO EN BELLAS ARTES
COII un apllldlu que IIIduye
LA ARQUITECTURA GRECQ-RQMANA EN ASTURJAS,
BREVES NOTAS SOBRE LA ARQUITECTURA ASTURIANA
ESTUDIO PRELL\lINAR
M' Cruz vorares Sa.ro
ARCHIVOS DE LA FUNDACiÓN SELGAS-FAGALDE 2
Fotos 1-3.- Publicaciones fundamentales
en la historiografia jovellanista sobre las
aportaciones del ilustrado como críticoy
teórico de las Bellas Artes.
Boletin de Le/ras 178 (2011): 135-160
138 ISABEL RUIZ DE LA PEÑA GONZÁLEZ
el origen de la sensibilidad artística de un Jovellanos adolescente a su estan-
cia en Ávila, ciudad a la que fue a estudiar Humanidades, cuyos magníficos
monumentos le harían sentir sus primeras emociones artísticas". Su primer
viaje por Asturias lo realizaría unos años antes de instalarse en Sevilla tras ser
nombrado alcalde del crimen de la Audiencia (1768-1778). En esta ciudad co-
noció de forma directa algunos de los más importantes edificios del pasado
medieval hispano, tanto cristianos como islámicos. Allí escribió algunas
obras poéticas y teatrales', estudió la pintura sevillana y entró en contacto con
algunos de los artistas más relevantes del momento. En el taller del pintor
Juan de Espinal (1714-1783) conoció a Ceán Bermúdez, con quien manten-
dría a lo largo de su vida una sólida amistad y en estos años adquirió además
una importante colección pictóricas. Su formación artística se completará en
sus estancias en Madrid (1778-1790 Y 1797-1798), ciudad de la que fue igual-
mente alcalde del crimen y en la que conecta con la pintura de Mengs y Tié-
polo y con el arquitecto Ventura Rodríguez, gran amigo a partir de entonces,
y al que le dedicaría uno de sus mejores discursos". Asímismo, en la Real
Academia de Bellas Artes de San Fernando coincidiría con Goya, que ingre-
sa en esta institución como académico de mérito el mismo año que Jovella-
nos (1780)10.
Su inclinación por las artes le acompañó siempre, como destacó Carlos
González de Posada, gran amigo y biógrafo suyo, quien afirmó que desde su
juventud el ilustradose entregó al imán de las buenas pinturasy al conoci-
miento de las artes, que amó en buen grado toda su vida".
Una constante en la fructífera carrera intelectual de Jovellanos es su in-
sistencia en la necesidad de documentarse en archivos y bibliotecas para aco-
meter un análisis crítico de la obra artística, frente a la mera e inútil acumu-
lación de datos". C. Sánchez Albornoz clasificó las contribuciones históricas
nografía de Barón Thaidigsmann, J.,Ideas de Jovellanos sobre arquitectura (arquitectura altomedie-
val), Oviedo, 1985.
6 Op. cit., p. 55. Sobre su estancia en Ávila bajo la protección del obispo asturiano Romualdo Velarde
Cien fuegos vid. Caso González, J.M.,JoveLlanos. Biografia/Biography, reed. de M.T. Caso Machica-
do, Oviedo, 2010, especialmente el cap. 1: "Nacimiento, infanciay estudios", pp. 67-73.
7 Ibidem, pp. 80·83.
8 González Santos, J.,op. cit., pp. 33-35; abunda en este asunto en pp. 33-55. Según este autor en suco·
lección predominaba la pintura, fundamentalmente de iconografía religiosay también los retratos de
sus amigos. Entre sus artistas preferidos se contabanVelázquez, Zurbarán, Murillo, Carreño Miranda,
Mengs y Goya (vid. de esta publicación los capítulos"Jovellanos coleccionista", pp. 59-72Y "Re-
construcción de la colección artística deJovellanos", pp. 75-151).
9 Selgas, F. de,op. cit., p. 57.
10 Sobre su etapa en Madrid González Santos, J.,op. cit., pp. 36-43 Y sobre su relación con Goya p. 37
Y ss.
II Caso González, J.M., "Una biografía inédita de Jovellanos: las Memorias de González de Posada",De
Ilustracián y de ilustrados, Oviedo, 1988, p. 174.
12 Barón Thaidigsmann, J.,op. cit., pp. 22 Y 23.
Boletín de Letras 178 (2011): 135·160
JOVELLANOS.
y artísticas de Jovellanos en
ríodos": en el primero de ello
rrallado en Madrid, redacta
famosos Elogios, a los que n
riremos más adelante; la segu
se (1790-1801) tiene comoes
su Asturias natal", y, finalm
período más fructífero como
de la arquitectura coincide
exilio y prisión en Mallorca
1811), primero en la cartuja,
demosa y luego en el cas
Bellver.
(Foto 4) Las primeras
ciones de Jovellanos al estu
las Bellas Artes coinciden ea
greso en las Academias, deII
del Conde de Campoman
1779 es nombrado acadérnic
Historia y un año después in
la Academia de Bellas Artes
Fernando. En esta instituci
nunciará suElogio de las Be
tes", el 14 de julio de 1781.
gio de Ventura Rodriguet",
discurso de tema artístico, fu
años después de la muerte del
ideas sobre los orígenes de la
mundo antiguo hasta laIlustrí
13 Sánchez Albornoz,e., "Jovellanos
res, 1945, pp. 564 Yss.;cít. por Bau
14 Los diarios de los viajes por su Astut
troducción de García Díaz,N. y Día;
rias (1790·180 1), Oviedo, 2011.
15 Publicado en laDistribuciá« delosp
al Academia de SanFernando enla
ed. en la Biblioteca de Autores Espa
16 Se publicaría dos años después,Elog
rra, 1790, ed. en la Biblioteca de Au
17 R. del Arco apuntaba en su día quer
José Moreno, pronunciado en la Re
tadas y gran parte de los planos que
sultar este último discurso tenemos(
JOVEllANOS. CRÍTICO Y TEÓRICO DE lA ARQUITECTURA 139
y artísticas de Jovellanos en tres pe-
ríodos": en el primero de ellos, desa-
rrollado en Madrid, redacta sus dos
famosos Elogios, a los que nos refe-
riremos más adelante; la segunda fa-
se (1790-1801) tiene como escenario
su Asturias natal", y, finalmente, el
período más fructífero como teórico
de la arquitectura coincide con su
exilio y prisión en Mallorca (1801-
1811), primero en la cartuja de Val-
demos ay luego en el castillo de
Bellver.
(Foto 4) Las primeras aporta-
ciones de Jovellanos al estudio de
las Bellas Artes coinciden con su in-
greso en las Academias, de la mano
del Conde de Campomanes. En
1779 es nombrado académico de la
Historia y un año después ingresa en
la Academia de Bellas Artes de San
Fernando. En esta institución pro-
nunciará suElogio de las Bellas Ar-
tes", el 14 de julio de 1781. ElElo-
gio de Ventura Rodriguer"; su otro
discurso de tema artístico, fue leído en la Sociedad Económica de Madrid tres
años después de la muerte del arquitecto (1788)17. En ambos se sintetizan sus
ideas sobre los orígenes de la creación artísticay su variedad formal, desde el
mundo antiguo hasta la Ilustración. En elElogio de las Bellas Artes,conside-
ELOGIO
DE D. VENTURA RODRIGUEZ
LEIDO
EN LA REAL SOCIEDAD
DE MADRID
POR EL SOCIO
D. GASPAR MELCHOR DE JOVE LLANOS,
en la Junta ordinaria del,áhado19 de EMro
de '788.
I:t.US'I'RADO CON NOTAS.
I impres» de acuerdo de¡~misma Sociedad.
MADRID MDCCLXXXX.
En la Imprenta de la Viuda de Ibarra.
eo. /tu 1i&,lICü" .'eI,oriar.
13 Sánchez Albornoz,c., "Jovellanos y la historia", AA.VV., Jovellanos, su viday su obra, Buenos Ai-
res, 1945. pp. 564 Y ss.; cit. por Barón Thaidigsmann, J.,op. cit., p. 25, nota 14.
14 Los diarios de los viajes por su Asturias natal han sido reeditados recientemente con una excelente in-
troducción de García Díaz, N.y Díaz Álvarez, J., Gaspar Me1chor de Jovellanos,Los viajes por Astl/-
rias (1790-180 1), Oviedo, 201 1.
15 Publicado en laDistribución de los premiosf. ..} á los discípulos de las Nobles Artes, hecha por la Re-
al Academia de San Fernando en la junta pública del14 de julio de 1781, Madrid, 1782, pp. 35-102,
ed. en la Biblioteca de Autores Españoles, tomo1, pp. 350-363.
16 Se publicaríados años después,Elogio de D. Ventura Rodriguez;Madrid, imprenta de la viuda de Iba-
rra, 1790, ed. en la Biblioteca de Autores Españoles, tomo 1, pp. 369-388.
17 R. del Arco apuntaba en su día que para elElogio de Ventura Rodrigue; Jovellanos aprovechó del de
José Moreno, pronunciado en la Real Academia de Bellas Artes en 1785. la relación de obras ejecu-
tadas y gran parte de los planos que no llegaron a realidad(op. cit., p. 64). Al no haber podido con-
sultar este último discurso tenemos que abstenernos de dar una opinión sobre este extremo.
Foto 4.- Portada delElogio de Ventura
Rodriguez, de G.M. de Jovellanos, pro-
nunciado en 1788y publicado en 1790.
Boletín de Letras 178 (2011): 135-160
140 ISABEL RUIZ DE LA PEÑA GONZÁLEZ
rada como laprimera historia del arte español";repasa con detalle la evolu-
ción de las mismas, no sólo en España sino también en el extranjero. Destaca
como épocas doradas el mundo de la antigua Romay el Renacimiento, y en-
salza la labor de Rafaely Miguel Ángel como restauradores de las artes. A es-
tos períodos opone la decadencia arquitectónica del arte churrigueresco de fi-
nes del siglo XVII, sólo superada por el retorno del clasicismo en tiempos de
Felipe V, quien trae a maestros extranjeros para trabajar en el alcázar de Ma-
drid, siguiendo modelos italianos". En la elaboración de este discurso Jove-
llanos emplea el método de Winckelmann en suHistoria del Arte entre los
Antiguos, publicado en Dresde en 1764 y, según J. González Santos, en él se
sirve de fuentes como Antonio Palomino y elViaje de Españade Antonio
Ponz".
Uno de los rasgos más ilustrados de Jovellanos fue, como ha apuntado J.
Barón, su preferencia por el estudio de la arquitectura sobre el resto de las ar-
tes. Pues bien, en elElogio de Ventura Rodrigue:acomete su más exhausti-
vo análisis de la génesis y evolución de los distintos estilos arquitectónicos,
anticipando, según este autor, la obra enciclopédica sobre la historia de la ar-
quitectura española de Eugenio Llaguno, ampliada por Ceán Bermúdez en
182921• Como el resto de los ilustrados, Jovellanos rechaza el arte churrigue-
resco para alabar las nuevas corrientes neoclásicas, atribuyendo a CarlosIn
el mérito de restaurar la arquitectura italiana al calor de los descubrimientos
arqueológicos impulsados por este monarca en Pompeya y Herculano. No
obstante, si bien Jovellanos adjudica al mérito foráneo la recuperación de
nuestra arquitectura, atribuye al arquitecto español Ventura Rodríguez sus co-
tas más altas de perfección por saber reproducir como nadie el clasicismo re-
nacentista, pese a su conocimiento indirecto, a través de dibujosy grabados,
de los monumentos italianos. Tras iniciar su amistad en Sevilla, Jovellanos se
hizo eco en todo momento de la maestría de Ventura Rodríguez, consiguien-
do que CarlosIII aprobara su proyecto no consumado del nuevo templo de
Covadonga (1779)22.
18 González Santos, J.,op. cit., p. 20.
19 Este gusto se impulsa con la creación de la Real Academia de Bellas Artes (Selgas, F. de,op. cit., pp.
58 Y 71-74).
20 Jovellanos, aficionadoy coleccionista, p. 20.
21 Llaguno y Amirola, E.,Noticia de los arquitectos y arquitectura de España desde su restauración,
Madrid, 1829,4 vols.; ed. facs. Madrid, 1977 (cit. Barón Thaidigsmann, J.,op. cit., pp. 9,10 Y 16).
22 Selgas, F. de,op. cit., pp. 74-77. Sobre este proyecto fallido vid. también González Santos,1., op. cit.,
p. 39, con bibliografía y reproducción del mismo.
Boletín de Letras 178 (2011): 135-160
JOVELLANOS.
El exhaustivo método d
tónica y artística en general
seguía con una descripción
ea, como demuestra en su ex
de León", en la carta sobre
cultor Luis Fernández de la
zaba claramente, según reflej
la arquitectura civil residenc
cios nobiliarios asturianos d
ambientes en los que se dese
pajes fami lias de la región, a
ración, colecciones pictórica
Según el criterio jovellai
condición de modelo represq
maba a buscar los nombres d
surando a aquellos eruditosq
carta enviada en 1808 aD.
ron muy poco de conservar e
reciese también lugar en lah
23 La solicitud de documentación por
parlantes de Asturias como Corias,
García Díaz, N. y Díaz Álvarez, L,
24 Recogida en Jovellanos, G.M. de, "
(cartas a Ponr],Caso González, 1.
97 -142. En esta carta Jovellanos tra
la iglesia unas décadas antes de su
con la renovación ejecutada en elp
sobre el convento de San Marcos de
das por1.M. Caso González, T. IX.
de y Ruiz de la Peña Solar,A., Ovi
25 Recogidas en Jovellanos, G.M. de, ,
(cartas aPOl1z), Caso González, J.M
Véase también la reed. "Carta sobr
completas, iniciadas por lM. Caso
renzo Álvarez, E. de y Ruiz de la Peñ
tor Luis Fernández de la Vega",lbid.
26 Díaz Álvarez. J., "La residencia nobi
Lorenzo Álvarez, E. de, acampo Su
García Díaz, N. y Díaz Álvarez,J. (in
jeron la atención de Jovellanos se en
cea y el de los marqueses de Valdec
este último conjunto vid. Ruiz de la
de Grado. Construcción, historiay r
27 Barón Thaidigsmann, J.,op. cit., pp.
28 Fernández y González, A.R.,Jovella
a Ceán Bermúdez las orientaciones
JOYELLANOS, CRíTICO Y TEÓRICO DE LA ARQUITECTURA 141
El exhaustivo método de acercamiento de Jovellanos a la obra arquitec-
tónica y artística en general partía del rastreo de la documentación histórica",
seguía con una descripción detalladay finalizaba con una valoración artísti-
ca, como demuestra en su excelente descripción del convento de San Marcos
de León", en la carta sobre la catedral de Oviedoy en las notas sobre el es-
cultor Luis Fernández de la Vega".y si bien el interés de Jovellanos priori-
zaba claramente, según reflejan las fuentes, las edificaciones religiosas sobre
la arquitectura civil residencial, los apuntes que nos legó sobre ciertos pala-
cios nobiliarios asturianos de su Asturias nataly sus capillas nos dibujan los
ambientes en los que se desenvolvía la vida social e intelectual de las princi-
pales familias de la región, a través de las descripciones del mobiliario, deco-
ración, colecciones pictóricas, etc."
Según el criterio jovellanista el mérito de un edificio podía otorgarle la
condición de modelo representativo de un determinado estilo, Y ello le ani-
maba a buscar los nombres de los artistasy arquitectos de obras notables, cen-
surando a aquellos eruditos que no los reconocían", tal como manifiesta en una
carta enviada en 1808 a D, Miguel Juan de Pradinas:nuestros pasados cuida-
ron muy poco de conservar estos nombres, como si un insigne artista no me-
reciese también lugar en la historia como un distinguido militaro literato",
23 La solicitud de documentación por parte de Jovellanos a algunos de los archivos monásticos más im-
portantes de Asturias como Corias, Cornellana, o Teverga ha sido puesta de relieve recientemente por
García Díaz, N,y Díaz Álvarez, J" op. cit. p. 43,
24 Recogida en Jovellanos, G,M, de, "Carta segunda del viaje de Asturias",Cartas del Viaje de Asturias
(cartas a Ponz),Caso González, J,M, (edición), Gijón, 1981, T, 1, pp. 77-95 Y apéndiceTI, T. TI, pp.
97-142. En esta carta Jovellanos transmite a Ponz su crítica de la reforma acometida en la fábrica de
la iglesia unas décadas antes de su visita:No es fácil de explicar cuanto ha perdido esta bella obra
con la renovación ejecutada en el presente siglo (Ibidem.pp. 82-83). Véase también la reed. "Carta
sobre el convento de San Marcos de León", Gaspar Melchor de Jovellanos,Obras completas, inicia-
das por J.M. Caso González, T. IX.Escritos asturianos,ed., prólogo y notas de Lorenzo Álvarez, E.
de y Ruiz de la Peña Solar, A., Oviedo, 2005, pp. 23-38.
25 Recogidas en Jovellanos, G.M. de, "Carta cuarta del viaje de Asturias",Cartas del Viaje de Asturias
(cartas a Ponz),Caso González, J.M. (edición), T.I, pp. 115-143 Y "Carta décima", T. l l, pp. 73-85.
Véase también la reed. "Carta sobre la catedral de Oviedo", Gaspar Melchor de Jovellanos,Obras
completas, iniciadas por J.M. Caso González, T. IX.Escritos asturianos,ed., prólogo y notas de Lo-
renzo Álvarez, E. dey Ruiz de la Peña Solar, A., pp. 53-72 Y "Carta en que sedan noticias del escul-
tor Luis Fernández de la Vega",lbidem, pp. 145-152.
26 Díaz Álvarez, J., "La residencia nobiliaria asturiana a través de Jovellanos", en Fernández Sarasola, 1,
Lorenzo Álvarez, E. de, Ocarnpo Suárez, J.y Ruiz de la Peña Solar, Á. (ed.),op. cit., pp. 799-813 Y
García Díaz, N.y Díaz Álvarez, J. (introd.),op. cit., p. 43. Entre los ejemplos más destacados que atra-
jeron la atención de Jovellanos se encuentran los palacios de los condes de Toreno en Cangas del Nar-
cea y el de los marqueses de Valdecarzana, con su espléndida capilla, sito en la villa de Grado. Sobre
este último conjunto vid. Ruiz de la Peña González, l.,La capilla de Nuestra Señora de los Dolores
de Grado. Construcción, historiay restauración, Oviedo, 2005.
27 Barón Thaidigsmann, J.,op. cit., pp. 26-27
28 Fernández y González, A.R.,Jovellanos y Mallorca, Palma de Mallorca, 1974, p. 124. Cuando dicta
a Ceán Bermúdez las orientaciones para la edición de su diccionario de artistas insiste en que no re-
Boletín de Letras 178 (2011): 135-160
142 ISABEL RUIZ DE LA PEÑA GONZÁLEZ
* * *
Una de las aportaciones más relevantes de Jovellanos a la Historia del
Arte es su intensa dedicación al estudio de la arquitectura medieval en un ám-
bito intelectual plenamente neoclásico". El ilustrado gijonés mira al pasado
con una actitud romántica oprerromántica" de tinte nacionalista, igualando
en grandeza al arte medieval y al clásico". Pero respecto a algunos de sus con-
temporáneos ilustrados románticos europeos que compartían este interés por
el medievo, Jovellanos avanza un paso más, como ya destacó J. Barón, al es-
tudiar el nacimiento de la arquitectura española -visigoda (denominada por él
gótica) y prerrománica, desde dos puntos de vista: el material o arquitectóni-
co y el histórico, superando la actitud contemplativa para buscar los rasgos
que individualizan a los edificios visigodos y asturianos. Será además pione-
ro en hacer corresponder la arquitectura de un determinado pueblo con su pai-
saje e historia, como hace en el caso asturiano, formulando así el tema delre-
gionalismo arquitectonico",
La apreciación de la alta Edad Media por parte de los autores román-
ticos corrió paralela al surgimiento de los movimientos nacionalistas euro-
peos, identificados, en cierto modo, con el sentir de los pueblos germano s
tras la disolución de la unidad del Imperio Romano". Como en muchas
otras opiniones respecto a la valoración de ciertas corrientes o períodos
culturales y artísticos, la inicial posturaneoclásica de rechazo al arte y cul-
señe a los que no tengan mérito conocido y en que ponga todo su esmero en calificar el estilo de los
que incluya (Arco, R. del.op. cit., p. 33).
29 Sobre esta faceta de la obra legada por Jovellanos sigue siendo la principal referencia la obra repeti-
damente citada de Barón Thaidigsrnann, J.,op. cit. Dentro de su inclinación por el estudio del arte me-
dieval, prioriza claramente la arquitectura sobre la pintura y escultura, por tomar aquélla a la natura-
leza como modelo mientras éstasse esclavizan a sus formas (lbidem,p. 28).
30 R. del Arco destacaba su carácter prerrornántico no sólo al final de su vida, durante su reclusión en el
castillo de Bellver en el que exalta la arquitectura gótica, sino también en los inicios de sus estudios
sobre el arte cristiano medieval(op. CiT.,p. 32). Esta actitud prerromántica con la que Jovellanos an-
ticipa en algunas décadas la admiración por el medievo ha sido objeto de una reciente reflexión por
parte de Crespo, D. y Domenge, J., "Trazos de una naciente historia del arte: los dibujos de la lonja de
Palma para laMemoria de Jovellanos", Locus Amoenus, 10, 2009-20 I0, pp. 153-168, p. 167, con
abundante bibliografía sobre el tema en la nota 49.
31 En este sentido se refiere a las formas de la arquitectura medieval cuando dice quemodificando unas,
desfigurando otras, combinándolas Todasy reduciéndolas a unidad, completaron aquel sistema dear-
quitectura, que por su novedad, su osadíay rica gentileza, puede competir con la de Romay Grecia
y llenar de orgullo al genio de Europa(Azcárate, 1.M. de, "Valoración del Gótico en la estética del
siglo XVl!I", Simposio El Padre Feijoo, Ponenciasy comunicaciones. Cuadernos de la cátedra Fei-
joo, núm. 18, vol. Il, Oviedo, 1966, pp. 525-549, p. 535).
32 Barón Thaidigsmann, J.,op. cit., pp. 10-11. Entre otros autores que han destacado recientemente la la-
bor pionera del ilustrado en la apreciación de la arquitectura altomedieval española vid. García Cue-
tos, M'.P., "El florecimiento de los estudios asturianistas y la restauración del arte prerrománico en la
segunda mitad del siglo XIX",Boletín del Real Instituto de Estudios Asturianos,núm. 156,2000, pp.
177-209, p. 177.
33 Barón Thaidigsmann, J.,op. cit., p. 59.
Boletín de Letras178 (2011): 135-160
JOVELLANOS,CRÍTI
tura visigoda> que Jovellanos
evoluciona en dirección contrar
nunciaba elElogio de Ventura
los godos por la construcciónr
los que aquéllos disponían, hech
tura pobre, y en las necesidades
al paganismo romano. Este radi
profunda inmersión que Jovellan
de la legislación visigoda, queI
estos pueblos>.
(Fotos 5 y 6) Entre los esca
ción de Jovellanos destaca el terr
sitó en 1795, del que había ano
tencia de la inscripcióngótica e
cesvindo>. En la descripción qu
34 Debemos aclarar que, frente a la postur
para el ilustrado desde el siglo IV al XlI
35 Barón Thaidigsmann, J.,op. cit.,pp. 60-
36 Jovellanos, G.M. de,Obras completas,T.
(Ed. crítica, introducción y notas deJ. M.
jón, 1994, Cuaderno /l, pp. 236 Y252.El
bien se trata de una copia del original,con
JOVELLANOS. CRíTICO Y TEÓRICO DE LA ARQUITECTURA
tura visigoda" que Jovellanos manifiesta en suElogio de las Bellas Artes,
evoluciona en dirección contraria en pocos años. Así, cuando en 1788 pro-
nunciaba elElogio de Ventura Rodriguez.justificaría el rechazo que sentían
los godos por la construcción romana basándose en los modestos medios de
los que aquéllos disponían, hecho que les obligaba a plantearse una arquitec-
tura pobre, y en las necesidades religiosas de estos primeros cristianos frente
al paganismo romano. Este radical cambio de parecer ha sido atribuido a la
profunda inmersión que Jovellanos realizó en la década de 1780 en el ámbito
de la legislación visigoda, que le ayudaría a comprender mejor la cultura de
estos pueblos".
(Fotos 5 y 6) Entre los escasos edificios visigodos que llamaron la aten-
ción de Jovellanos destaca el templo palentino de San Juan de Baños, que vi-
sitó en 1795, del que había anotado cuatro años antes en suDiario la exis-
tencia de la inscripcióngótica en su interior, que la fechaba entiempo de Re-
cesvindo": En la descripción que nos ofrece de ella identifica los elementos
Foto 5.- Iglesia visigoda de San Juan de Baños, Palencia.
34 Debemos aclarar que, frente a la postura vigente en la actualidad, la cronología visigoda se extendía
para el ilustrado desde el siglo IV al XII.
35 Barón Thaidigsmann. J.,op. cit., pp. 60-66.
36 Jovellanos, G.M. de,Obras completas,T. VI, Diario 1° (Cuadernos I a V, hasta 30 de agosto de 1794),
(Ed. crítica, introducción y notas de J. M. Caso González, con la colaboración de J. González Santos), Gi-
jón. 1994, Cuaderno 11,pp. 236 Y252. El epígrafe fundacional aún preside el arco triunfal de la iglesia. si
bien se trata de una copia del original, conservado en el Museo Arqueológico Nacional.
Boletín de Letras 178 (2011): 135-160
143
144 ISABEL RUIZ DE LA PEÑA GONZÁLEZ
Foto 6.- Interior de la iglesia visigoda de
San Juan de Baños, con una copia de la ins-
cripción fundacional sobre el arco triunfal.
constructi vos característicos de la
arquitectura visigoda, pero sin
mencionar siquiera la escultura, y
cabe destacar su agudeza visual al
mencionar la desfiguración de la
planta primitiva por algunas reno-
vaciones". Aparte del análisis deta-
llado de esta iglesia, Jovellanos no
se detiene en otras obras de este pe-
ríodo, salvo una breve y poco do-
cumentada mención del sepulcro
de Itacio, que se conserva aúnhoy
en el recinto dedicado a panteón de
la monarquía asturiana en la capilla
del Rey Casto de la catedral de
Oviedo".
El segundo estilo arquitectóni-
co estudiado de forma pionera por
Jovellanos fue el Prerrománico as-
turiano o arquitectura asturiana,
según su propia denominación. En
1769 realizó su primer recorrido
por los monumentos altomedievales del centro de la región. F. de Selgas re-
chazó la hipótesis que emitiría el ilustrado gijonés sobre el nacimiento es-
pontáneo de esta arquitectura al calor de la Reconquista, aduciendo que aquél
apenas la conocía entonces, como sí la conocería en su segunda estancia lar-
ga en el Principado entre 1790 y 180039•
37 Barón Thaidigsmann, 1., op. cit., p. 68. En efecto, la hipótesis actualmente admitida sobre su cabece-
ra primitiva propone su configuración en tres capillas separadas entre síy no tangentes como suele ser
habitual en los templos de esta época.
38 En la misma capillita se ve también un sepulcro o arca de piedra deformay escultura bien antigua,
donde, según la tradición, estuvo sepultado no sé qué infante.Su falta de interés en esta obra se ma-
nifiesta en que reproduce la inscripción del sepulcro en la que figura el nombre de !tacio, sin identifi-
carlo con el del difunto que dice ignorar (Jovellanos, G.M. de, "Carta cuarta del viaje de Asturias",
Cartas del Viaje deAsturias (cartas aPonr], Caso González,1.M. (edición), T. 1, p. 133. Y la reed.
"Carta sobre la catedral de Oviedo", Gaspar Melchor deJovellanos, Obras completas, iniciadas por
1.M. Caso González, T.IX. Escritos asturianos,ed., prólogo y notas de Lorenzo Álvarez, E. dey Ruiz
de la Peña Solar, A., p. 64, nota 32.
39 Escribía este erudito que la imaginación de Jovellanosno menos poderosa que su rarán, se inflama-
ba al evocar en esas humildes construcciones los héroes de la reconquista: a Alfonso11 bajo las bó-
vedas de su Tirso, Santullanoy Cámara Santa; a Ramiro I en las iglesias del Naranco[ignora aquí la
primitiva función de aula regia del palacio del Naranco];y al rey Magno en las de Tuñán, Priescay
Valdediós. Pero su espíritu critico se perdía al indagar las causas generadoras de las formas con que
se manifiestan estos monumentos(Selgas, F.de, op. cit., pp. 56 Y 60-61).
Boletín de Letras178 (2011): 135-160
JOVELLANOS. cRí
Foto 7.- 1/
(Foto 7) La ambigüedad
te una vez más, como ocum
muestra en un primer momen
los jóvenes estudiantes la vis'
tes de viajar a Italia para con
la Roma Antigua".
La mayor aportación de
val es el hecho de ser el prim
turiana en suElogio de Ven
desde la entrada de losáral}
metodología de investigación
car los elementos definitorio
los dibujos de plantas, alzado
rios". (Fotos 8 y 9) Los dos
ducción científica fueron, po
tectura y por otro, su definici
él, al país en el que principal
mas destacar en el acercamid
quitectura es el determinisma
40 Especialmente los datados en las do
e igualmente los atribuidos al patr
do la atención de Jovellanos(lbider
41 Se reproducen algunos de estos dibu
de A. del Río, ed. preparada por1. S
alzado de Santa Cristina de Lena en
j la planta de la colegiata de Valde
42 Barón Thaidigsmann, 1., op. cit..pp.
JOVELLANOS. CRíTICO Y TEÓRICO DE LA ARQUITECTURA 145
Foto 7.- Iglesia de Santianes de Pravia.
(Foto 7) La ambigüedad de su juicio sobre el arte asturiano queda paten-
te una vez más, como ocurría con el visigodo, en el hecho de que, si bien
muestra en un primer momentoun cierto desprecio por él, va a recomendar a
los jóvenes estudiantes la visita de los templos de la monarquía asturiana an-
tes de viajar a Italia para conocer los insignes vestigios de la arquitectura de
la Roma Antigua".
La mayor aportación de Jovellanos a la historiografía del arte altomedie-
val es el hecho de ser el primero que individualiza elestilo o arquitectura as-
turiana en su Elogio de Ventura Rodriguez;si bien extiende su cronología
desde la entrada de los árabes hasta el siglo XIII.Como fue habitual en la
metodología de investigación aplicada por Jovellanos, su interés por identifi-
car los elementos definitorios de la arquitecturaasturiana queda patente en
los dibujos de plantas, alzados y detalles decorativos que realiza en susDia-
rios". (Fotos 8 y 9) Los dos objetivos prioritarios en este ámbito de su pro-
ducción científica fueron, porun lado, la búsqueda del origen de esta arqui-
tectura y por otro, su definición con un nombre preciso, que respondía, según
él, al país en el que principalmente seUSÓ42. Otra de las cuestiones que debe-
mos destacar en el acercamiento del ilustrado gijonés a la historia de la ar-
quitectura es el determinismo económico, que vincula en su opinión el naci-
40 Especialmente los datados en las dos primeras centurias de la Reconquista. como Santianes de Pravia,
e igualmente los atribuidos al patrocinio de Alfonso 11,cuya traza de inspiración clásica había llama-
do la atención de Jovellanos(lbidem. p. 62).
41 Se reproducen algunos de estos dibujos en Gaspar Melchor de Jovellanos,Diarios, estudio preliminar
de A. del Río, ed. preparada por J. Somoza, Oviedo, RlDEA, 1953,3 vols. Los relativos a la planta y
alzado de Santa Cristina de Lena en vol. 1. p. 347, la planta del monasterio de Carracedo vol. 1, p. 264
J la planta de la colegiata de Valdecarzana de Teverga vol. 1, p. 278.
42 Barón Thaidigsmann, J.,op. cit., pp. 109 Y 120.
Boletín de Letras 178 (2011): 135-160
]46 ISABEL RUIZ DE LA PEÑA GONZÁLEZ
I
I
¡
1
*~
~ Foto 8.- Dibujo realizado por Jovellanos
• de la planta del monasterio de Carracedo
(Gaspar Melchor de Jovellanos,Diarios,
estudio preliminar de A. del Río, ed. pre-
parada por 1. Somoza, Oviedo, RIDEA,
1953, vol. I, p. 264) .
{
• • • " •• , • • • • • • • • .1"'"1.• , ... -~
I
\ .
o- · -.....- ....
I
I ,
•
I
........... ·····d o o· . " .....
Foto 9.- Dibujo realizado por Jovellanos de la planta de la colegiata de Valdecarza-
na de Teverga (Gaspar Melchor de Jovellanos,Diarios, estudio preliminar de A. del
Río, ed. preparada porJ. Somoza, Oviedo, RIDEA, 1953, vol 1,p. 278).
miento de nuestros templos altomedievales a lanecesidad", como había
apuntado al tratar la arquitectura visigoda. Dentro de ese mismo interés por
indagar en la condición histórica de los edificios altomedievales, Jovellanos
manifiesta en suCarta Cuarta del Viaje de Asturiasdedicada a la catedral de
Oviedo, que la reedificación del templo de San Salvador por parte de Alfon-
so II respondía a su deseo derestablecer la gloria del antiguo templo toleda-
no, así como había querido también restaurar en su cortey palacio el es-
43 lbidem, p. 117.
Boletín de Letras 178 (2011): 135-160
JOVELLA OS.e
Foto 10.- Capitel de la Cámara
tudios Asturianos,
plendor y la magnificencia
ción adelanta casi dos siglos
fonso II el Casto, que ha sido
Asturianas por los investiga
En su permanente afán
riales de estaarquitectura as
la Barquera y Santillana del
monasterio de Sandoval de
nasterio de Cornellana". De
algunas provincias limítrofes
turias.
(Foto 10) A la hora deb
rianas y la arquitectura extra
el arte musulmán, concretad
Santa, que califica comoel
44 Jovellanos, G.M. de, "Carta cuarta
tedral de Oviedo", Gaspar Melchor
lez, T. IX. Escritos asturianos ed
lar, A., p. 55. ' .,
45 Gil Fernández, J., Moraleja,Ll, y
pecialmente el cap. de Ruiz de la P
46 Barón Thaidigsmann, J.,op. cit., p.
JOVELLANOS. CRíTlCO y TEÓRICO DE LA ARQUITECTURA 147
Foto 10.- Capitel de la Cámara Santa antes de la restauración, Real Instituto de Es-
tudios Asturianos, Archivo Mas, carpeta 13, núm. 25.241
plendor y la magnificencia de los monarcas godos".De nuevo esta observa-
ción adelanta casi dos siglos la teoría del neovisigotismo de la política de Al-
fonso II el Casto, que ha sido demostrada en la interpretación de lasCrónicas
Asturianas por los investigadores del siglo XX45•
En su permanente afán didáctico, Jovellanos establece los límites territo-
riales de estaarquitectura asturiana:al noreste las iglesias de San Vicente de
la Barquera y Santillana del Mar, al sureste San Isidro de Dueñas, al sur el
monasteriode Sandoval de León y al oeste San Andrés de Pravia y el mo-
nasterio de Cornellana". De modo que, exceptuando la expansión puntual a
algunas provincias limítrofes, la mayoría de estos templos se localizan en As-
turias.
(Foto 10) A la hora de buscar analogías formales entre las iglesias astu-
rianas y la arquitectura extrarregional, el ilustrado menciona los parecidos con
el arte musulmán, concretados en ejemplos como la decoración de la Cámara
Santa, que califica comoel más bello monumento de la arquitectura arabes-
44 Jovellanos, G.M. de, "Carta cuarta del viaje de Asturias", pp. 117-118. Y la reed. "Carta sobre la ca-
tedral de Oviedo", Gaspar Melchor de Jovellanos,Obras completas, iniciadas por J.M. Caso Gonzá-
lez, T. IX. Escritos asturianos,ed., prólogo y notas de Lorenzo Álvarez, E. dey Ruiz de la Peña So-
lar, A., p. 55.
45 Gil Fernández, J., Moralejo, J.L.y Ruiz de la Peña Solar, J.I..Crónicas asturianas.Oviedo, 1985. es-
pecialmente el cap. de Ruiz de la Peña Solar, J.I., "La cultura ovetense en el siglo IX", pp. 15-16.
46 Barón Thaidigsmann, J.,op. cit., p. 122.
Boletín de Letras 178 (2011): 135-160
148 ISABEL RUIZ DE LA PE- A GO ZÁLEZ
~1'~
~ ; ~
..illlr
-o-tr'
Foto 11.- Dibujos realizados por Jovellanos de la plantay alzado de Santa Cristina
de Lena (Gaspar Melchor de Jovellanos,Diarios, estudio preliminar de A. del Río,
ed. preparada por J. Somoza, Oviedo, RIDEA, 1953, vol. 1, p. 347).
ea", las celosías de San Miguel de Lillo o los capiteles de Santa María de Vi-
llamayor, justificando estos paralelos por la posible intervención de artífices
musulmanes prisioneros en la construcción de estos templos y en la ejecución
de algunas piezas del tesoro de los reyes asturianos". La importancia del edi-
ficio concebido como capilla y relicario regio nos lleva a transcribir la valo-
ración que de ella hace Jovellanos en suCarta Cuarta del Viaje de Asturias
enviada a su amigo Ponz: ...no dejaré de decir a usted que la arquitectura in-
terior de la capillita donde se conserva tan precioso relicario, es otra espe-
cie de reliquia no poco apreciable para los devotos de las artes".Y siempre
pensando en la vertiente formativa tan presente en los postulados ilustrados,
Jovellanos reseña la buena conservación de este edificio, condición a su jui-
cio fundamental para posibilitar su estudio en profundidad:En efecto, es la
obra más bien conservada, ya mi ver más graciosa y elegante que se puede
hallar de aqueltiempo",
47 "Carta Cuarta del Viaje de Asturias", p. 130. Y la reed. "Carta sobre la catedral de Oviedo", Gaspar
Melchor de Jovellanos, Obras completas, iniciadas por1.M. Caso González, T. IX.Escritos asturia-
nos, ed., prólogo y notas de Lorenzo Álvarez, E. de y Ruiz de la Peña Solar, A., p. 62.
48 Barón Thaidigsmann, 1., op. cit., p. 122- I23. Debemos recordar que tanto la ornamentación de la Cá-
mara Santa como la de los capiteles de la iglesia de Villamayor pertenecen ya a la etapa románica.
49 "Carta Cuarta del Viaje de Asturias", p. 127. Y la reed. "Carta sobre la catedral de Oviedo", Gaspar
Melchor de Jovellanos, Obras completas, iniciadas por J.M. Caso González, T. IX.Escritos asturia-
nos, ed., prólogo y notas de Lorenzo Álvarez, E. de y Ruiz de la Peña Solar, A., p. 6 l.
50 1.M. Caso llama la atención sobre el hecho de que Jovellanos, en su clara preferencia por la arquitec-
tura sobre el resto de las artes, ignore en esta descripción la destacada escultura del Apostolado que
reviste los muros de la nave de la capilla ("Carta Cuarta del viaje de Asturias", p. 127, nota 19). Y la
Boletín de Letras 178 (2011): 135-160
JOVELLANOS. CRf
(Foto 11) Entre los mont
Jovellanos destacaespecíairne
21 de noviembre de 1793.Apc
Diario Quinto, explica la dist
cia varios cuadradosque se d
gundo cuadrado,que se comu
el principal o gran cuadrado,
y la capillita mayor.Su prolij
dos tableros de cancel con el
nave a base de arcos ciegos eo
con relieves, de los que desta
Otras construcciones alto
sus Diarios como en elElogi
las, la Foncalada, San Tirsoy
la colegiata de Teverga, de la
mos más arriba" (Foto 9).
Entre los monumentos de
esa arquitectura asturianae
Oviedo y la portada de San Pe
esculpidos con el tema ieonog
zados como fuente para doeu
cería en suMemoria para el a
reed. "Carta sobre la catedral de Ovi
por J.M. Caso González, T. IX.Escri
Ruiz de la Peña Solar, A., p. 61. Per
vos de sogueados de algunos templos
del ilustrado de dedicar espacio a este
te no llegara a buen puerto. A este re
sionales que le agobiaron a lo largo d
de la falta de tiempo necesario para la
J.,op. cit., p. 25). Al recoger la dese
apunte histórico personal sobre la ref
g/o XI! se reconstruyó partede la Cá
J J 70-//80, arte románico.Si bien el
unos años una revisión a fondo de la
guna de que haya habido una primer
del siglo XII, coincidiendo con el obi
Fernando 11a la catedral de Oviedo
contemporáneas las obras de aboved
Peña González, l., "La Cámara Santa
de Fernando IJ",De Arte. Revistade ~
51 Gaspar Melchor de Jovellanos,Obra
agosto de 1794), ed. crítica, introduce
Santos, J., Oviedo, 1994, pp. 490Y ss
167.
52 Vid. Barón Thaidigsmann,1., op. cit.,
e
a
JOVELLANOS, CRíTICO Y TEÓRICO DE LA ARQUITECTURA 149
(Foto 11) Entre los monumentos altomedievales asturianos que estudia
Jovellanos destaca especialmente Santa Cristina de Lena, iglesia que visitó el
21 de noviembre de1793, Apoyándose en los dibujos que se conservan en su
Diario Quinto, explica la distribución interior del espacio, en el que diferen-
cia varios cuadradosque se desarrollan a distintos niveles: el vestíbulo, el se-
gundo cuadrado,que se comunica con el principal y tiene encima su tribuna,
el principal o gran cuadrado, el presbiterioal que se sube por dos escaleritas
y la capillita mayor, Su prolija descripción del interior del templo incluye los
dos tableros de cancel con el epígrafe, así como la articulación interior de la
nave a base de arcos ciegos con columnas sogueadas y medallones esculpidos
con relieves, de los que destaca su similitud con los del aula del Naranco".
Otras construcciones altomedievales que Jovellanos menciona tanto en
susDiarios como en elElogio de Ventura Rodrigue;son San Martín de Sa-
las, la Foncalada, San Tirso y Santianes de Pravia, deteniéndose algo más en
la colegiata de Teverga, de la que nos legó varios dibujos, como menciona-
mos más arriba" (Foto 9),
Entre los monumentos del período románico que incluye Jovellanos en
esa arquitectura asturianacabe destacar la Torre Vieja de la catedral de
Oviedo y la portada de San Pedro de Villanueva. Los capiteles de esta última
esculpidos con el tema iconográfico de ladespedida del caballero,son utili-
zados como fuente para documentar el estudio que el ilustrado dedica a la ca-
cería en suMemoria para el arreglo de los espectáculos y diversiones públi-
reed. "Carta sobre la catedral de Oviedo", Gaspar MeJchor de Jovellanos,Obras completas. iniciadas
por J.M. Caso González, T. IX.Escritos asturianos,ed., prólogo y notas de Lorenzo Álvarez, E. de y
Ruiz de la Peña Solar, A., p. 61. Pero dado que sí menciona, aunque sea muy brevemente, los moti-
vos de sogueados de algunos templos prerrománicos, nos inclinamos más bien a pensar en la intención
del ilustrado de dedicar espacio a este conjunto iconográfico en otra parte, deseo que quizá finalmen-
te no llegara a buen puerto. A este respecto ya se ha apuntado que las múltiples obligaciones profe-
sionales que le agobiaron a lo largo de su vida activa fueron las culpables, según el propio Jovellanos,
de la falta de tiempo necesario para la adecuada documentación de sus estudios (Barón Thaidigsmann,
J., op. cit., p. 25). Al recoger la descripción de Jovellanos de la Cámara Santa, R. del Arco hace un
apunte histórico personal sobre la reforma románica, afirmando quesabido es que a principios del si-
glo XII se reconstruyó parte de la Cámara Santa, cuyas esculturas, por su estilo, revelan la fecha de
1170-1180, arte románico.Si bien el segundo dato nos parece atinado, tras haber llevado a cabo hace
unos años unarevisión a fondo de la documentación disponible al respecto, no tenemos constancia al-
guna de que haya habido una primera intervención arquitectónica en la capilla relicario a principios
del siglo XII, coincidiendo con el obispado de Pelayo. Sin embargo, la abundancia de donaciones de
Fernando 11a la catedral de Oviedo y su sensibilidad hacia este edificio nos ha llevado a considerar
contemporáneas las obras de abovedamienro y la talla del Apostolado durante su reinado (Ruiz de la
Peña González, J., "La Cámara Santa de la Catedral de Oviedo en el contexto del patronato artístico
de Fernando 11",De Arte. Revista de Historia del Arte,2. 2003, pp. 29-45).
5 I Gaspar MeJchor de Jovellanos,Obras completas, Tomo VI. Diario I (Cuadernos 1 a V, hasta 30 de
agosto de 1794), ed. crítica, introducción y notas de Caso González. J.M., con la colab. de González
Santos, J., Oviedo, 1994, pp. 490 Y ss. También García Díaz, N. y Díaz Álvarez. J.,op. cit .• pp. 165-
167.
52 Vid. Barón Thaidigsmann, J.,op. cit., pp. 129 Y 130.
Boletín de Letras 178 (20 I 1): 135- I 60
ISO ISABEL RUIZ DE LA PEÑA GONZÁLEZ
cas y sobre su origen en Espa-
ña",
Junto a estas obras Jovella-
nos dedica una atención espe-
cial a los monasterios cister-
cienses, que incluye en su arqui-
tectura asturiana, como los de
Sandoval y Santa María de Val-
dediós (Foto 12). De este últi-
mo, datado en el siglo XIII, nos
ofrece una minuciosa descrip-
ción de la bóveda del crucero
que merece ser reproducida:
Es notable que la bóveda del
crucero no solo tiene las fajas que
arrancan de los ángulos formados
por cuatro arcos, y se apoyan so-
bre los de los machones bajos, si-
no que hay otras que las cortan en
cru; y que no tienen apoyo alguno,
pues aunque terminan en sus cla-
ves, no es estribando en ellas sino
cortándolas. Lo es también que las dovelas de los arcos apoyasen no solo so-
bre elfuste de las columnas sino también sobre el capitel?',
I
Foto 12.- Monasterio cisterciense de Santa
María de Valdediós.
Las apreciaciones de Jovellanos sobre laarquitectura asturianafueron
muy criticadas por distintos autores a lo largo del siglo XIX. Entre los más
duros podemos mencionar a J. Cavcda en suMemoria histórica de los tem-
plos construidos en Asturias,J.Ma. Quadrado o Pedro de Madraza, quien le
atribuye unaescasa ciencia arqueolágica",
* :;: *
(Foto 13) Si el prerromanticismo jovellanista de fines del siglo XVIII fue
el impulsor de su interés por la arquitectura cristiana altomedieval, también
53 Memoria para el arreglo de los espectáculosy diversiones públicas.1'sobre Sil origen el/ España,XL-
VI, p. 50 I a. nota 2: cit. por Barón Thaidigsmann. 1..op. cit .. p. 132. Sobre este terna iconográfico y
su expansión en el Románico vid. Ruiz de la Peña.!.. "Un terna iconográfico en torno al 1200: lades-
pedida del caballero", Fernando 1/1y su tiempo (1201-1252). V¡¡¡ Congreso de Estudios Medievales,
Fundación Sánchez Albornoz. León. 2003, pp. 435-467.
5.. Coleccián de Asturias. reunida por D. Gaspar Melchor de Jovellanos.publicada por el Marqués de
Aledo. ed. y notas de M. Ballesteros Gaibrois. 4 T, Madrid, 1948, T. 11. fig. 2'.
55 o obstante hoy en día está sobradamente reconocido su mérito y el inusual conocimiento que tenía
de la bibliografía extranjera. hecho que le situaba muy por encima de estos eruditos (Vid. Barón Thai-
digsmann. J .. op. cit., pp. 11-12).
Boletin de Letras 178 (2011): 135-160
JOVELLANOS,
alentaría, en el contexto
arranque de los estudios sobr
mundo islámico, susanálisi
valoraciones sobre la len
árabe vulgar y sobre el arte
panomusulmán. Con ellor!
tendía, en la línea del cienti
mo ilustrado, sustituir lavisí
meramente exótica, y por lo
to acientífica de la cultura ár
por su apreciación como pe
do histórico de gran relevan
en el pasado nacional.
Como en su análisis del
te altomedieval asturiano,
ideas de Jovellanos sobre la
quitectura y cultura islámi
están teñidas de una ambig]
dad patente en susElogiosP'l
nunciados en la década de171
Por un lado rechaza el caráo
destructivo de la incursión m
de una arquitectura propia en
cias obligarían a los invasor
ya existentes en la península,
tación temprana, como la me
juicios en sus testimonios te
ción hacia el arte musulmán.
basa sólo en los elementos de
mo se recoge en elElogio de
Una de las mejores al
valoración del arte islámico
árabes de Granaday Cárdol
56 Selgas. F. de,op. cit., pp. 59·60.
57 Habiendo enriquecido después el o
aunque no podamos fijar laépo
XI/ ... Nosotros sabemos queperte
lla y en la Alhambra de Granada,
plendor (p. 382).
58 Informe que dio. siendo individuoa
los mOI/LIInenlOSde Granaday Có
Biblioteca de Autores Españoles, t
JOVELLANOS, CRÍTICO Y TEÓRICO DE LA ARQUITECTURA 151
alentaría, en el contexto del
arranque de los estudios sobre el
mundo islámico, sus análisis y
valoraciones sobre la lengua
árabe vulgar y sobre el arte his-
panomusulmán. Con ellos pre-
tendía, en la línea del cientifis-
mo ilustrado, sustituir la visión
meramente exótica, y por lo tan-
to acientífica de la cultura árabe,
por su apreciación como perío-
do histórico de gran relevancia
en el pasado nacional.
Como en su análisis del ar-
te alto medieval asturiano, las
ideas de Jovellanos sobre la ar-
quitectura y cultura islámicas
están teñidas de una ambigüe-
dad patente en susElogios pro-
nunciados en la década de 1780.
Por un lado rechaza el carácter
destructivo de la incursión musulmana en la Península, y critica la inexistencia
de una arquitectura propia en el primer siglo de esta invasión. Estas circunstan-
cias obligarían a los invasores a la reutilización de vestigios de construcciones
ya existentes en la península, tanto romanas como visigodas, en edificios de da-
tación temprana, como la mezquita de Córdoba". Pero una vez sentados estos
juicios en sus testimonios textuales, manifestaría igualmente una clara admira-
ción hacia el arte musulmán. En su análisis de la evolución del arte andalusí, se
basa sólo en los elementos decorativos y no en cuestiones arquitectónicas, co-
mo se recoge en elElogio de Ventura Rodriguez",
Una de las mejores aportaciones de Jovellanos al conocimiento y
valoración del arte islámico español son susInformes sobre los monumentos
árabes de Granaday Cordobai". Dichos textos procedieron de su labor como
Foto 13.- Grabado romántico de la mezquita
de Córdoba, s. XIX.
56 Selgas, F. de,op. cit., pp. 59-60.
57 Habiendo enriquecido después el ornato de su arquitectura propia, desecharon del todo el antiguo, y
aunque no podamos fijar la época de este mejoramiento, no hay duda que precedería al siglo
XII ... Nosotros sabemos que pertenecen al XIV gran parte de las obras hechas en el alcázar de Sevi-
lla y en la Alhambra de Granada, donde la arquitectura árabe aparece en su mayor riqueza y es-
plendor (p. 382).
58 Informe que dio, siendo individuo de la Academia de San Fernando, sobre arreglar la publicación de
los monumentos de Granada y Córdoba, grabados por orden superior,Madrid, 14 de mayo de 1786,
Biblioteca de Autores Españoles, t. 46, pp. 364-365.
Boletín de Letras 178 (20 11): 135-160
152 ISABEL RUIZ DE LA PEÑA GONZÁLEZ
censor de la edición de un álbum de ilustraciones de estos edificios, que
encargó a la Real Academia de Bellas Artes el conde de Floridablanca en
1786, y que aquélla adjudicó a un equipo de pintores y arquitectos. Para aco-
meter esta tarea de forma rigurosa recomienda la redacción de un texto
explicativo y el envío a las dos ciudades andaluzas de un arquitecto para
recoger estas notas".
En ellos Jovellanos insiste en la importancia de este tipo de obras como
medio para divulgar una imagen del arte de este período fiel a la realidad
histórica. Y considera dos cauces para alcanzar este objetivo: por un lado la
elaboración de unos grabados de las planimetrías, alzados y detalles
decorati vos precisos en las medidas, proporciones y escalas, y por otro, la
inclusión en el volumen delanálisis científico de estos monumentospara
conducir a la exposición de los principios generales de aquel arte.Según
Jovellanosrecogía en su informe la inclusión de dicho estudio era,en
dictamen de la Academia, la más esencial e importante, como que, sin ellay
por la simple vista de los dibujos, es imposible conocer el modo de edificar
que siguieron los árabes, la solidez, comodidady belleza de sus edificios, el
uso de las piedras, maderas, estucos, pinturasy otras materias empleadas en
su fábrica y adorno, los varios miembros de que constaba su ornato, los
módulos a que estaba arreglado cada unoy, en una palabra, el sistema
general de proporciones que debe resultar de la confrontación de todas las
medidasy de su paralelo con las de los órdenes griegosy latinos. Y concluye
esta parte de su informe añadiendo:en efecto, señor excelentisimo, sin esta
ilustración las láminas grabadas serán mudasy muertas, podrán entretener,
más no instruir, y, cuando satisfagan la curiosidad, ciertamente que no
llenarán el deseo de los amantes de lasartes".
Pese a la sólida argumentación de Jovellanos no fue atendida por Flori-
dablanca y la obra se publicó sin los comentarios a las láminas.
En estos mismos informes y en su descripción de la catedral de Oviedo re-
coge su teoría sobre el origen árabe de la arquitectura gótica, apoyada funda-
mentalmente en los paralelos ornamentales:Los árabes a la verdad no obser-
varon los órdenes, el ornato ni las proporciones de la arquitectura griega; pe-
ro si se examinan con cuidado sus obras antiguas, se hallará que habían deri-
vado de ella toda la idea de sus edificios. Por esto,y porque el carácter de la
arquitectura tudesca dista mucho más de la griega que de la morisca, creo que
la arquitectura llamada gótica es hija de la moriscay nieta de la griega".
59 González Santos,1., op. cit., pp. 23-24.
60 Informe que dio ...cit., pp. 364-365.
61 "Carta Cuarta del Viaje de Asturias", p. 129. Y reed. "Carta sobre la catedral de Oviedo", Gaspar Mel-
chor de Jovellanos, Obras completas, iniciadas por1.M. Caso González, T. IX.Escritos asturianos,
ed., prólogo y notas de Lorenzo Álvarez, E. dey Ruiz de la Peña Solar, A., p. 62.
Boletín de Letras 178 (2011): 135-160
JOVELLANOS.
Foto 14.-Patio de
(Foto 14) Pero, como
años matizarán esta postura
elemento diferenciador deUJ
el arte islámico.
Coincidiendo con el pe
XVIII se comienza a difund
que se afianzará a lo largo d
Jovellanos participó pIe
ceta prerromántica. Frutodé
bajomedieval es su importa
do a través de ejemploscon
rencias indiscutibles para la
medieval en nuestro país.
Una de sus mejores apo
la arquitectura inglesay la 1
62 Así, en elElogio de Ventura Rodríg
los árabes conocieron y usaron elQ
ces muy desfigurado con picaduras
imposta. Con estas palabras alude a
plej idad le lleva a fecharlos conPOS!
63 Azcárate, 1.M. de, op. cit., p. 353.
JOVELLANOS, CRÍTICO Y TEÓRICO DE LA ARQUITECTURA 153
Foto 14.- Patio del Yeso de los Reales Alcázares de Sevilla.
(Foto 14) Pero, como ya es una constante en sus escritos artísticos, los
años matizarán esta postura", y con posterioridad Jovellanos destacará como
elemento diferenciador de una y otra arquitectura la carencia de figuración en
el arte islámico.
* * *
Coincidiendo con el período plenamente neoclásico, desde fines del siglo
XVIII se comienza a difundir el interés y aprecio por el Gótico en Europa",
que se afianzará a lo largo de la primera mitad del siglo XIX.
Jovellanos participó plenamente en esa corriente, muy acorde con su fa-
ceta prerromántica. Fruto de ese interés por el estudio de la cultura y el arte
bajomedieval es su importante legado sobre el origen del Gótico, desarrolla-
do a través de ejemplos concretos en sus ensayos, cartas y memorias, refe-
rencias indiscutibles para la reconstrucción de la historia de la arquitectura
medieval en nuestro país.
Una de sus mejores aportaciones al estudio del Gótico es laCarta sobre
la arquitectura inglesay la llamada gótica,remitida a Ceán Bermúdez desde
62 Así, en elElogio de Ventura Rodrigue;establece la diferencia entre el arco ojival y el árabe, puesaunque
los árabes conocieron y usaron el arco agudo ... sólo le vemos en ventanas y puertas interiores, )' enton-
ces muy desfigurado con picaduras y recortes en medias lunas, que giran por las dovelas de imposta a
imposta. Con estas palabras alude a los motivos de mocárabes y arcos de lambrequines, cuya mayor com-
plejidad le lleva a fecharlos con posterioridad al estilo gótico (p. 385 a, cit. Barón Thaidigsmann, p. 101).
63 Azcárate, J.M. de,op. cit., p. 353.
Boletin de Le/ras 178 (20 11): 135-160
154 ISABEL RUIZ DE LA PEÑA GONZÁLEZ
Bellver en 1805, firmada con el seudónimo dePhilo Ultramarino". En esta
obra repasa las fases de la arquitectura inglesa: anglosajona, gótica y moder-
na, a través de las referencias a sus edificios y principales maestros". Jove-
llanos tuvo siempre una preferencia por el arte inglés frente al francés, así co-
mo por la cultura, lengua y la literatura anglosajonas. Desde su llegada a Se-
villa estudió inglés y de este modo, y a través de su relación con Alexander
Jardine, cónsul inglés en La Coruña entre 1793 y 1799, pudo acceder a las
obras de autores como Locke y AdamSmith".
En su definición de la arquitectura y cultura góticas, Jovellanos se esfor-
zó por determinar uncarácter general,que definiera la singularidad y entidad
propia de este período". Su constante preocupación por otorgar un término
preciso a cada corriente o estilo artístico está presente también en este ámbi-
to de estudio. Como ya observó F. de Selgas en su pionera aportación, el ilus-
trado desechó la denominación dearquitectura gótica,dado que ni los godos
hispanos ni los italianos sabían emplear esas técnicas constructivas". El tér-
mino empleado con más frecuencia en su época eraarquitectura tudesca,da-
da la opinión generalizada de que esta forma de construir se había originado
en Alemania. Pero una vez más, el carácter crítico de Jovellanos le lleva a re-
chazar esta filiación y a proponer la denominación dearquitectura ultrama-
rina, ya que contextualizaba su procedencia a fines del siglo XII o principios
del XIII en las iglesias edificadas en Tierra Santa en el contexto histórico de
las Cruzadas".
El interés y la admiración de Jovellanos por el arte medieval aumentó con
el paso del tiempo y alcanzó sus más altas cotas en susMemorias histórico-
artísticas de arquitectura,redactadas desde su exilio en Palma de Mallorca
entre 1805 y 180870, donde pasó los últimos diez años de su vida. En esta obra
reivindica la grandeza artística de los edificios góticos de la isla, especial-
mente erigidos en tiempos del rey Jaime II (1276-1311), época considerada
por Jovellanos la más brillante del territorio balear desde el punto de vista
económico, político y cultural".
64 Biblioteca de Autores Españoles, V, pp. 365-382.
65 Sobre ella González Santos, J.,Jovellanos, aficionado y coleccionista,pp. 27-28.
66 Helman, E.,JoveLlanos y Goya,Madrid, 1970, pp. 91-94.
67 Barón Thaidigsmann, J.,op. cit., p. 29.
68 Op. cit., p. 64.
69 En su desarrollo de esta idea, expone que los elementos verticales de las iglesias góticas como los va-
nos apuntados o las flechas tomaron sus modelos de las construcciones defensivas. Propone esta teo-
ría en la segunda parte de suCarta sobre la arquitectura inglesa y la Llamada góticay las destaca F.
de Selgas,op. cit., p. 67.
70 Biblioteca de Autores Españoles, t. 46, pp. 391-409.
71 Vid. sobre este texto Sanz de la Torre. A.. "Jovellanosy la reivindicación de la arquitectura gótica de
Palma", Espacio, Tiempo y Forma,Serie VII, H' del Arte, t. 6, 1993, pp. 433-470, pp. 438-439. Este
Boletín de Letras 178 (2011): 135-160
tas Memorias ,'W
con pleno derechoen Is mst.
cribió detalladamente la catedraly
conventos de Santo DomingoyS
res que han tratado este texto,e .
cos superior al de los discursos
queza de este trabajo aumentaal i
toria, paisaje y literatura de la isla
haber sido capaz de escribir sobre
ra mano, excepto el castillo deBe
sin poder acceder a sus archivos",
limitación fue salvada por la ines
ayudantes y amigos del ilustrado,
datos de archivos apetición suya.
Martínez Marina y Domingo Garcí
nard Planes, Rollani y Esvert, con
otros eruditos mallorquines comoJ
Luis de Vilafranca y algunoscartuj
Para demostrar sus principaJe
tico toma como modelos la catedr
palmesano. Como ya analizóJ. B
los edificios, Jovellanos los consi
tos de manera numérica, su fonn
segundo nivel de análisis definirá
determinada dentro de todo el eng
Siguiendo su método habitual
religiosos y civiles se apoyan sie
mismo autor desarrolla el tema con mayor
quitectura palmesana (Literatura artística
Palma), Tesis doctoral, U.N.E.O., Facultad
te, Madrid, 1996, edición en microficha.
72 Un análisis reciente de esta faceta de su eo
y Domenge, J., 'Trazos de una naciente hist,
moria de Jovellanos", Locus Amoellus,lO.:
rias pp. 156 Y ss. en las que se destaca la m
y su interés por plasmar la diversidad funci
civil y militar (p. 159).
73 Selgas, F. de,op. cit., p. 69-70.
74 Al salir de su encierro uno de sus mayores
op. cit., p. 26).
75 Crespo, D.y Domenge, J., op. cit.,pp. 158-'
encerrado en Bell ver vid. también Caso M
1801-1808)", Homenaje al Ateneo Iovellan
JOVELLANOS, CRÍTICO Y TEÓRICO DE LA ARQUITECTURA 155
Recientemente se ha apuntado que el prestigio y la rápida difusión de es-
tasMemorias incluyeron a los edificios más destacados del Gótico mallorquín
con pleno derecho en la historia del arte español. Jovellanos documentó y des-
cribió detalladamente la catedral y la lonja de Palma, el castillo de Bellver y los
conventos de Santo Domingo y San Francisco", donde, en opinión de los auto-
res que han tratado este texto, exhibeun dominio de sus conocimientos históri-
cos superior al de los discursos de sus primeros años de Académico". La ri-
queza de este trabajo aumenta al incluir en él numerosos datos acerca de la his-
toria, paisaje y literatura de la isla de Palma. Y su mérito crece por el hecho de
haber sido capaz de escribir sobre estos monumentos sin conocerlos de prime-
ra mano, excepto el castillo de Bellver, en el que vivió parte de su reclusión, y
sin poder acceder a sus archivos". Como se ha observado recientemente, esta
limitación fue salvada por la inestimable colaboración deun gran número de
ayudantes y amigos del ilustrado, que le facilitaron abundantes dibujos, notas y
datos de archivos a petición suya. Entre ellos destacan sus secretarios Manuel
Martínez Marina y Domingo García de la Fuente, excelentes dibujantes, Lleo-
nard Planes, Rollani y Esvert, contratados a sueldo para la labor de archivo,
otros eruditos mallorquines como José Barberí, Francesc Tomás, el capuchino
Luis de Vilafranca y algunos cartujos de Valldemosa como Bruno Montaner".
Para demostrar sus principales teorías sobre el modo de construcción gó-
tico toma como modelos la catedral y la lonja, ubicadas en el centro histórico
palmesano. Como ya analizó J. Barón, en una primera fase de acercamiento a
los edificios, Jovellanos los consideraráestructuras, estudiando sus elemen-
tos de manera numérica, su forma, dirección, situación y extensión. Y enun
segundo nivel de análisis definirá la obra comoorganismo, con una función
determinada dentro de todo el engranaje arquitectónico gótico.
Siguiendo su método habitual, sus descripciones de los edificios góticos
religiosos y civiles se apoyan siempre en dibujos de plantas, alzados y deta-
mismo autor desarrolla el tema con mayor profundidad en su investigaciónVisión romántica de la ar-
quitectura palmesana (literatura artística del romanticismoy exaltación de la arquitectura gótica de
Palma). Tesis doctoral, U.N.E.D., Facultad de Geografía e Historia, Departamento de Historia del Ar-
te, Madrid, 1996, edición en microficha.
72 Un análisis reciente de esta faceta de su contribución a la historiografía del arte gótico en Crespo, D.
y Dornenge, J., 'Trazos de una naciente historia del arte: los dibujos de la lonja de Palma para laMe-
moria de Jovellanos", Locus Amoenus, 10,2009-2010, pp. 153-168; especialmente sobre lasMemo-
rias pp. 156 Y ss. en las que se destaca la metodología crítica empleada por Jovellanos en este trabajo
y su interés por plasmar la diversidad funcional de estos edificios adscritos a la arquitectura religiosa,
civil y militar (p. 159).
73 Selgas, F. de,op. cit., p. 69-70.
74 Al salir de su encierro uno de sus mayores placeres fue la visita de estas obras (González Santos, .l.,
op. cit., p. 26).
75 Crespo, D. y Domenge, L,op. cit., pp. 158-159. Sobre esteequipo humano que asistía al Jovellanos
encerrado en Bellver vid. también Caso Machicado, A., "Lamuerte civil de Jovellanos (Mallorca
1801-1808)", Homenaje al Ateneo Jovellanos,Gijón, 2004, pp. 19-44, p. 36.
Boletín de Letras 178 (2011): 135-160
156 ISABEL RUIZ DE LA PEÑA GONZÁLEZ
n, 1,IIJU!JJ.JJ.U.tjJllllfJ'·JJ·JI',li,
<,
Foto 15.- Lámina con alzadoy sección longitudinal del castillo de Bellver, dibuja-
das por Manuel Martínez Marina (Femándezy González, A.R.,Jovellanos y Ma-
llorca, Palma de Mallorca, 1974).
lIes decorativos y estructurales para acercarse al máximo a la realidad". Co-
mo ya hemos mencionado en ocasiones, por ejemplo en susDiarios, los dibujos
-a los que curiosamente llamaborrones-,proceden de su mano". (Foto 15) Pe-
ro en estos estudios realizados en Mallorca, predomina el encargo de los mismos
a sus ayudantes, como es el caso de las seis interesantes láminas relativas al cas-
tillo de Bellver, que reproducen con una gran fidelidad la planta, el alzado, la
sección, así como algunos detalles de los arcos, columnas, capiteles, tallas de
carpinterías y rejerías, realizadas por Manuel Martínez Marina". En su descrip-
ción de este edificio, teñida de un sentimiento evocador del pasado", atribuye
76 Barón Thaidigsmann, J.,op. cit., pp. 37-39 Y41.
77 Véase nota 41.
78 Las publicó Fernándezy González, A.R., Jovellanos y Mal/arca, Palma de Mallorca, 1974. Se reco-
gen estas láminas al final del volumen sin paginar precedidas del título: "Láminas que ilustran los dos
manuscritos: Descripción del castillo de Bellvery sus vistasy Apéndice a la descripción del castillo
de Bellver sus vistas,propiedad de la Biblioteca de Son Verí de la familia Cotonery Gual de Torre-
Ila, cfr. p. 167Y ss. La exhaustividad y cientifismo del estudio de esta obra por Jovellanos le lleva a
analizar además la composición geológica de su fábrica a base de una piedraareniza denominada en
la isla marés (vid. Ordaz Gargallo, J.Y Gutiérrez Claverol, M., "Observaciones geológicas de Jove-
llanos en el castillo de Bellvery su entorno", en Fernández Sarasola, 1, Lorenzo Álvarez, E. de, Ocam-
po Suárez, J.y Ruiz de la Peña Solar, Á.(ed.),op. cit., pp. 861-874).
79 ¿Quién, pues, recordando aquella época, en medio de estos salones, cuya gallarda arquitectura ar-
moniza tan admirablemente con tales destinos, no se detendrá a meditar sobre lo que en otro tiempo
pasaba en ellos? De mí sé decir que a veces me representan tan al vivo aquellas fiestas, que creo ha-
llarme en el/as,y, siguiendo la vo~y los pasos de sus concurrentes, admiro la enorme diferencia que
Boletín de Letras 178 (2011): 135-160
JOVELLANOS, CR
Foto 16.-e
los méritos de laosadía, dest
mismo contexto, y siguiendos
tes, el ilustrado llama la atenci'
Media de la moda orientalizan
de las costumbres caballeresc
surgimiento del Gótico y el fl
ruralización de los primeros si
apunta en sus descripciones de
ficultades económicas las que
traso del inicio de la edificació
el curso de pocos siglos puso entre la
castillo de Bel/ver, descripciónhistá
SO Ibidem (cit. Azcárate, J.M. de,op. ei
SI Observaciones que recoge ensu dese
pp. I 19-120). En la década de 1940
ción plenamente romántica caballere
edificio cuando admite quetales ide
imaginación, y la hieren con tantam
se, sino que probablemente se vieron
S2 Barón Thaidigsmann, J.,op. cit.,p. I
ma anota quea pesar de que estasfi
vorable efecto, el que produce eltod.
grande y majestuoso que sorprende \
534). .
JOVELLANOS. CRíTICO Y TEÓRICO DE LA ARQUITECTURA 157
Foto 16.- Catedral de Palma de Mallorca.
los méritos de laosadía, destreza técnicay fortaleza a susbóvedas". En este
mismo contexto,y siguiendo su doctrina del determinismo económico de las ar-
tes, el ilustrado llama la atención sobre la coincidencia temporal en la baja Edad
Media de la moda orientalizante en los ambientes aristocráticos, la suavización
de las costumbres caballerescas con la irrupción de la poesía trovadoresca, el
surgimiento del Góticoy el florecimiento urbano, en oposición a la pobrezay
ruralización de los primeros siglos de la Edad Media". (Foto 16) Asímismo,
apunta en sus descripciones de la catedraly lonja de Palma, que fueron las di-
ficultades económicas las que provocaron la interrupción de las obrasy el re-
traso del inicio de la edificación de unoy otro edificio respectivamente".
el curso de pocos siglos puso entre las ideasy costumbres de aquel tiempoy del nuestro (Memoria del
castillo de Bellver, descripción historico-arttstica,Biblioteca de Autores Españoles,1. 46) .
80 Ibidem (cit. Azcárate, J.M. de,op. cit., p. 534).
81 Observaciones que recoge en su descripción del castillo de Bellver (Barón Thaidigsmann,J., op. cit.,
pp. 119-120). En la década de1940 R. del Arco ya llamaba la atención sobre la manifiesta imagina-
ción plenamente romántica caballeresca del ilustrado al dirigirse a Ceán en relación a este evocador
edificio cuando admite quetales ideaso, si usted quiere, ilusiones, seofrecen frecuentemente a mi
imaginación, y la hieren con tanta más viveza, cuanto se refieren a objetos que no sólo pudieron ver-
se, sino que probablemente se vieron en este castillo ... (op.cit.,p. 57).
82 Barón Thaidigsmann, Lop. cit., p. 116. En suDescripción historico-artistica de la catedral de Pal-
ma anota quea pesar de que estas faltas de euritmiay de una forma tan extraña prometen. poco fa-
vorable efecto, el que produce el lodo de esta obra, sin ser bello ni elegante, tiene un no sé qué de
grande y majestuoso que sorprendey agrada notablemente a la vista(Azcárate, J.M. de.op. cit .. p.
534).
Boletin de Letras 178 (20 11): 135·160
158 ISABEL RUIZ DE LA PEÑA GONZÁLEZ
(Foto 17) Finalmente, el ter-
cer apéndice de lasMemorias his-
tórico-artísticas de arquitectura
corresponde a suMemoria sobre
la fábrica de la Lonja de Palma,
en la que incluye, con su rigor me-
todológico habitual, interesantes
datos de archivo relativos al inicio
de su construcción impulsada por
el colegio de mercaderes de la ciu-
dad y a su maestro Sagrera. El ma-
nuscrito sobre este edificio que Jo-
vellanos envió a Ceán Bermúdez
para incluir en suHistoria de la
arquitectura españolaestuvo ori-
ginalmente ilustrado, pero en las
sucesivas ediciones que sobre el
mismo fueron apareciendo en los
siglos XIX Y XX no aparecían ta-
les dibujos, sino, en su caso, ilus-
traciones posteriores". Se trata de
cinco láminas, realizadas en tinta y
aguada, que recogen la planta, el alzado de fachada norte, una sección longi-
tudinal y los detalles de una de las torrecillas, ventana y gárgola del remate
superior y dos tipos de ventanas".
Junto a sus investigaciones sobre la arquitectura gótica, el reconocimien-
to del prestigio intelectual de Jovellanos por parte del cabildo de la catedral
de Mallorca, le hace implicarse en otros asuntos que afectaban al patrimonio
artístico de Palma, no exentos de cierta polémica. De uno de ellos tenemos
noticia en una carta que se ha supuesto dirigida a su gran amigo José Barbe-
Foto 17.- Grabado romántico del interior
de la lonja de Palma de Mallorca, s. XIX.
83 Vid. sobre una nueva versión manuscrita con cinco láminas inéditas descubierta en la Biblioteca Real
la obra ya citada de Crespo, D. y Domenge, J. Jovellanos se refería a estas ilustraciones cuando ad-
vierte a Ceán en la carta que precede a este apéndice:Al fin de él hallará usted los dibujos de planta,
alzado y corte de la Lonja ("Notas al apéndice tercero de las Memorias de arquitectura, o sea, a la des-
cripción de la Lonja de Palma", Biblioteca de Autores Españoles, tomo L, 1952, p. 484;cit. por Cres-
po, D. y Dornenge, J.,op. cit., p. 161, nota 33).
84 Las reproducen Crespo, D. y Dornenge, J.,op. cit., figs. 4, 5, 8, 9Y 11. Los dibujos que le facilitan sus
dos secretarios siguen fielmente las indicaciones dictadas por Jovellanos sobre las proporciones y de-
talles de los elementos estructurales y muebles que debían recoger, acordes con los planteamientos de
los dibujos analíticos y técnicos irnperantes en el cientifismo ilustrado de la época (Barón Thaidigs-
mann, J., op. cit., pp. 36-37). No obstante Crespo y Domenge advierten la ausencia de escala en estas
cinco láminas y la superioridad de los dibujos de la lonja que realizaría en 1812 el arquitecto Isidro
Velázquez para una edición de este texto de Jovellanos(op. cit., p. 165).
Boletin de Letras 178 (2011): 135-160
Foto 18.- Grabado romántico del
catedral de Palma de Mallorca,
ría ... No negaré a V. que e
edificio; pero ¿le traerá a
lo que es menester discutí
Ante esta disyuntiva,y en
Jovellanos, que había rechazad
en su lugar primitivo, se decan
la nave, con una argumentació
¿Cuál mejor para un
en su forma y estructura,
85 Transcribió este texto y publicó su ed
quien apuntaba su carácter inéditoy au
manuscritas en la Biblioteca Bartolom
proyecto de quitar el coro del centro
manuscrito una serie de apuntes sueltos
disertación y forman unpequeñofolle«
na el destinatario, este autor loidentific
les unía, testimoniada en el densointen
dos colaboradores del ilustrado durante
lémica cuestión en las actas capitulare
y /10 U/1 acuerdo (Ibidem,pp. 55,57-58
86 Ibidem, p. 63.
JOVELLA OS, CRÍTICO Y TEÓRICO DE LA ARQUITECTURA 159
ri, en la que realiza unaDiserta-
ción sobre el traslado del coro de
la catedral de Palma,obra de fá-
brica fechada en el siglo XVI, pa-
ra responder a la consulta del ca-
bildo sobre la posibilidad, ya bara-
jada con anterioridad, de trasladar-
lo desde el centro de la nave, ubi-
cación habitual en la arquitectura
hispana, al lugar que ocupaba la
capilla real, delante del presbite-
ri085 (Foto 18):
Considerándome V. interesado
en las cosas de esta ciudad por mi re-
sidencia en Palma en años pasados
me comunica V, la noticia de que los
Señores Canónigos de esa catedral
tienen idea de variar el coro que está
en medio de esta Iglesia, colocándolo
detrás del altar mayor yadelantándo-
lo a éste, sacándolo de la Capilla
Real para poner en ella la sille-
ría ... No negaré aV. que esta operación deberá desembarazar el mencionado
edificio; pero ¿le traerá acaso más propiedad, brillantez y devoción? Esto es
lo que es menester discutir"
Foto 18.- Grabado romántico del coro de la
catedral de Palma de Mallorca, s. XIX.
Ante esta disyuntiva, y en su habitual tendencia a rectificarse a sí mismo,
Jovellanos, que había rechazado en un primer momento la ubicación del coro
en su lugar primitivo, se decanta finalmente por aconsejar su permanencia en
la nave, con una argumentación llena de vehemencia y convencimiento:
¿Cuál mejor para una catedral y cuanto más prodigioso sea su edificio
en su forma y estructura, que encontrar después de su primer golpe de vista
85 Transcribió este texto y publicó su edición crítica Fernández y González, A.R.,op. cit., pp. 53-81,
quien apuntaba su carácter inédito y autógrafo de Jovellanos, así como la existencia de dos versiones
manuscritas en la Biblioteca Bartolomé March con el nombreConsideraciones o dictamen sohre el
proyecto de quitar el coro del centro de la Catedral de Palma.Menciona en el encabezamiento del
manuscrito una serie de apuntes sueltos pero numerados, que debió anotar el ilustrado para redactar su
disertación y forman unpequeño folleto de trece páginas de tamaño cuartilla.Si bien no se mencio-
na el destinatario, este autor lo identifica, como ya adelantamos, con José Barberi, por la amistad que
les unía, testimoniada en el denso intercambio epistolar de ambos, y por ser uno de los ya menciona-
dos colaboradores del ilustrado durante su prisión en Bellver. Pero observa que la ausencia de esta po-
lémica cuestión en las actas capitulares debe responder a que pudo ser sólouna idea de los canónigos

Continuar navegando

Otros materiales