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Inervación Pulmonar

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UNIVERSIDAD MEXIQUENSE DEL
BICENTENARIO
ANATOMIA
LIC. ENFERMERIA
ALUMNO: EDUARDO
LA INERVACIÓN PULMONAR
La inervación pulmonar es el conjunto de nervios que controla la función
respiratoria y la vascularización de los pulmones. Es esencial para asegurar que el
oxígeno se suministre adecuadamente a los tejidos del cuerpo y que el dióxido de
carbono se elimine de manera efectiva. La inervación pulmonar se divide en dos
partes: la inervación parasimpática y la inervación simpática. Cada una tiene un
papel importante en la regulación de la respiración y el flujo sanguíneo pulmonar.
La inervación parasimpática se origina en el nervio vago y se extiende a través de
los nervios bronquiales hasta los pulmones. La activación de los nervios
parasimpáticos disminuye la frecuencia cardíaca y la contractilidad del músculo
liso bronquial, lo que provoca una disminución en el diámetro de las vías
respiratorias. Esto ayuda a controlar la cantidad de aire que entra y sale de los
pulmones y garantiza que los niveles de oxígeno y dióxido de carbono se
mantengan dentro de los límites normales. La inervación parasimpática también
estimula la secreción de moco y líquido en los bronquios, lo que ayuda a mantener
las vías respiratorias húmedas y protegidas contra irritantes y patógenos.
Por otro lado, la inervación simpática se origina en la cadena simpática torácica y
lumbar y se extiende a través de los nervios pulmonares hasta los pulmones. La
activación de los nervios simpáticos aumenta la frecuencia cardíaca y la
contractilidad del músculo liso bronquial, lo que provoca una dilatación de las vías
respiratorias. Esto permite que el aire fluya más libremente hacia y desde los
pulmones, aumentando la cantidad de oxígeno que se entrega a los tejidos del
cuerpo. Además, la inervación simpática también provoca una constricción de los
vasos sanguíneos pulmonares, lo que aumenta la resistencia vascular pulmonar y
desvía la sangre hacia otras áreas del cuerpo. Esto es importante para la
regulación del flujo sanguíneo pulmonar y para garantizar una distribución
adecuada de la sangre y el oxígeno en el cuerpo.
La inervación pulmonar también se ve afectada por otros factores, como la
temperatura, la humedad y los niveles de gases en los pulmones. Por ejemplo,
cuando se inhala aire frío o seco, las vías respiratorias se contraen para evitar que
se produzca una pérdida excesiva de agua y calor. Del mismo modo, cuando los
niveles de dióxido de carbono en los pulmones aumentan, se produce una
vasodilatación para aumentar el flujo sanguíneo pulmonar y eliminar el exceso de
dióxido de carbono del cuerpo.
En resumen, la inervación pulmonar es un proceso complejo y esencial para la
regulación de la respiración y el flujo sanguíneo pulmonar. La inervación
parasimpática y simpática trabajan juntas para garantizar que los niveles de
oxígeno y dióxido de carbono se mantengan dentro de los límites normales.
La inervación pulmonar se refiere a las conexiones nerviosas que
controlan el funcionamiento de los pulmones. Los nervios que
inervan los pulmones se originan en el sistema nervioso
autónomo y se dividen en dos ramas principales: el sistema
nervioso simpático y el sistema nervioso parasimpático.
El sistema nervioso simpático es responsable de la respuesta de
"lucha o huida" del cuerpo y se activa en situaciones de estrés o
peligro. En relación con los pulmones, el sistema nervioso
simpático aumenta la frecuencia respiratoria y la dilatación de los
bronquios para permitir una mayor entrada de aire en los
pulmones. Esta respuesta se produce mediante la liberación de
noradrenalina y adrenalina, que se unen a los receptores
adrenérgicos presentes en los músculos lisos de las vías
respiratorias y los pulmones.
Por otro lado, el sistema nervioso parasimpático es responsable
de la respuesta de "descanso y digestión" del cuerpo y se activa
en momentos de relajación y tranquilidad. En relación con los
pulmones, el sistema nervioso parasimpático disminuye la
frecuencia respiratoria y la constricción de los bronquios para
permitir una menor entrada de aire en los pulmones. Esta
respuesta se produce mediante la liberación de acetilcolina, que
se une a los receptores colinérgicos presentes en los músculos
lisos de las vías respiratorias y los pulmones.
Además de estas dos ramas principales, los pulmones también
reciben inervación sensorial que transmite información sobre la
calidad del aire inhalado y la presencia de irritantes en las vías
respiratorias. Los receptores sensoriales presentes en los
pulmones incluyen los receptores de estiramiento, los receptores
J y los receptores de irritación.
En resumen, la inervación pulmonar es un proceso complejo que
involucra la interacción de múltiples ramas nerviosas y receptores
sensoriales para controlar la función respiratoria y proteger los
pulmones de posibles irritantes. El conocimiento de esta
inervación es fundamental para entender el funcionamiento del
sistema respiratorio y desarrollar tratamientos efectivos para
enfermedades pulmonares.

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