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TEJIDO SANGUINEO

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República Bolivariana de Venezuela 
Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria 
Universidad Nacional Experimental Politécnica de la Fuerza Armada (UNEFA) 
Edo-Lara 
 
 
 
 
TEJIDO SANGUINEO 
 
 
 
 
 
 
Integrantes: 
Vicmary Peñas 30.509.356. 
Angeles Totesaut 30.179.010. 
María Lozada 31.118.349. 
Enyerlin Pereira 24.162.504. 
Eduardo Rodríguez 29.997.071. 
Jhorfrank Coronel. 30.560.081 
Ammary Alvarado 30416742. 
Sección: 2D04. 
Profesora: Claudia Leon. 
 
Tejido Sanguíneo 
 El tejido sanguíneo es muy importante en nuestro cuerpo, ya que, cumple funciones 
muy interesantes para que estemos vivos y saludables. En efecto, está compuesto de 
glóbulos rojos, glóbulos blancos, plaquetas y otras sustancias suspendidas en un 
líquido que se llama plasma y su función es el traslado de oxígeno, la provisión de 
nutrientes y el transporte de células y de diversas sustancias. 
 Cabe destacar que el sistema circulatorio es el responsable de la circulación del 
tejido sanguíneo por el organismo. y El órgano que impulsa la actividad circulatoria es 
el corazón, que bombea la sangre a través de las venas, las arterias y los capilares. 
Elementos solidos 
 Es un tipo de tejido conjuntivo especializado, con una matriz coloidal líquida y una 
constitución compleja. Tiene una fase sólida (elementos formes) que incluye a los 
eritrocitos (o glóbulos rojos), los leucocitos (o glóbulos blancos) y las plaquetas, y una 
fase líquida. Estas fases son también llamadas partes sanguíneas, las cuales se 
dividen en componente sérico (fase líquida) y componente celular (fase sólida). 
Los eritrocitos 
 Los eritrocitos también llamados glóbulos rojos o hematíes, son las células más 
numerosas de la sangre. La hemoglobina es uno de sus principales componentes, y su 
función es transportar el oxígeno hacia los diferentes tipos de tejidos del cuerpo. Los 
eritrocitos humanos, así como los del resto de mamíferos, carecen de núcleo y de 
mitocondrias, por lo que deben obtener su energía metabólica a través de la 
fermentación láctica. La cantidad considerada normal en la especie humana fluctúa 
entre 4 500 000 (en la mujer) y 5 400 000 (en el hombre) por milímetro cúbico (o 
microlitro) de sangre, es decir, aproximadamente 1000 veces más que los leucocitos. El 
exceso de glóbulos rojos se denomina policitemia y su deficiencia se llama anemia. Los 
eritrocitos se utilizan comúnmente en transfusiones en la práctica clínica y se han 
sugerido como transportadores de fármacos y nanopartículas. El tiempo de vida es de 
120 días, posteriormente muere por un proceso llamado apoptosis. 
https://definicion.de/sistema-circulatorio/
Eritrocitos humanos 
 Los eritrocitos tienen una forma oval, bicóncava, aplanada, con una depresión en el 
centro. Este diseño es el óptimo para el intercambio de oxígeno con el medio que lo 
rodea, pues les otorga flexibilidad para poder atravesar los capilares, donde liberan la 
carga de oxígeno. El diámetro de un eritrocito típico es de 6-8 µm. Los glóbulos rojos 
contienen hemoglobina, que se encarga del transporte de oxígeno y del dióxido de 
carbono. Asimismo, es el pigmento que le da el color rojo a la sangre. 
Valores considerados normales de eritrocitos en adultos 
 Mujeres: 4,7 ± 0,7 x 106/μL (microlitro) de sangre 
 Hombres: 5,3 ± 0,8 x 106/μL (microlitro) de sangre 
Hemoglobina. 
 Es un pigmento especial que da a los eritrocitos su color rojo característico. Su 
molécula posee hierro, y su función es el transporte de oxígeno. Está presente en todos 
los animales, excepto en algunos grupos de animales inferiores. Participa en el proceso 
por el que la sangre lleva los nutrientes necesarios hasta las células del organismo y 
conduce sus productos de desecho hasta los órganos excretores. También transporta 
el oxígeno desde los pulmones (o desde las branquias, en los peces), donde la sangre 
lo capta, hasta los tejidos del cuerpo. 
 Cuando la hemoglobina se une al oxígeno para ser transportada hacia los órganos 
del cuerpo, se llama oxihemoglobina. Cuando la hemoglobina se une al CO2 para ser 
eliminada por la espiración, que ocurre en los pulmones, recibe el nombre de 
carboaminohemoglobina (también se denomina desoxihemoglobina a la hemoglobina 
cuándo no está unida al oxígeno). Si la hemoglobina se une al monóxido de carbono 
(CO), se forma entonces un compuesto muy estable llamado carboxihemoglobina, que 
tiene un enlace muy fuerte con el grupo hemo de la hemoglobina e impide la captación 
del oxígeno, con lo que se genera fácilmente una anoxia que conduce a la muerte. 
 La hemoglobina también transporta productos residuales y el dióxido de carbono de 
vuelta a los tejidos. Menos del 2 % total del oxígeno, y la mayor parte del CO2, son 
mantenidos en solución en el plasma sanguíneo. La hemoglobina representa el 35 % 
del peso del eritrocito. Un compuesto relacionado, la mioglobina, actúa como almacén 
de oxígeno en las células musculares. 
Leucocitos 
 Los leucocitos son un conjunto heterogéneo de células sanguíneas que son 
ejecutoras de la respuesta inmunitaria, interviniendo así en la defensa del organismo 
contra sustancias extrañas o agentes infecciosos (antígenos). Se originan en la médula 
ósea y en el tejido linfático. Los leucocitos son producidos y derivados de unas células 
multipotenciales en la médula ósea, conocidas como células madre hematopoyéticas. 
Los glóbulos blancos (leucocitos) son las únicas células sanguíneas que se encuentran 
en todo el organismo, incluyendo la sangre y el tejido linfoide. 
 Existen cinco tipos diferentes de leucocitos, divididos en granulocitos y 
agranulocitos, y varios de ellos (incluyendo monocitos y neutrófilos) son fagocíticos. 
Estos tipos se distinguen por sus características morfológicas y funcionales. 
 El número de leucocitos en la sangre suele ser un indicador de enfermedad. El 
recuento normal de glóbulos blancos fluctúa entre 4 y 11 x 109/L, y suele expresarse 
como 4000-11 000 glóbulos blancos por microlitro. Conforman, aproximadamente, el 
1% del volumen sanguíneo total de un adulto sano. Al aumento del número de 
leucocitos por arriba del límite superior se le llama leucocitosis, y al decrecimiento por 
debajo del límite inferior se le llama leucopenia. 
Clasificación 
 Los leucocitos son células nucleadas, pero, por otra parte, distintos en forma y 
función. 
Los leucocitos se dividen en dos grandes clases: 
• Granulocitos (neutrófilos, eosinófilos y basófilos) 
• Agranulocitos, que carecen de gránulos específicos, son mononucleares y tienen 
el núcleo más grande que los granulocitos. Son los monocitos y linfocitos. 
 Por su linaje, los glóbulos blancos se dividen en: el mieloide (compuesto de los 
granulicitos y monocitos) y el linfoide (linfocitos T, linfocitos B y las células naturales 
killer (células NK). 
Plaquetas 
 Las plaquetas o trombocitos son pequeños fragmentos citoplasmáticos, irregulares, 
carentes de núcleo, de 2-3 µm de diámetro, derivados de la fragmentación de sus 
células precursoras, los megacariocitos; la vida media de una plaqueta oscila entre 8 y 
11 días. Las plaquetas desempeñan un papel fundamental en la hemostasia y son una 
fuente natural de factores de crecimiento. Estas circulan en la sangre de todos los 
mamíferos y están involucradas en la hemostasia, iniciando la formación de coágulos o 
trombos. 
 Si el número de plaquetas es demasiado bajo, puede ocasionar una hemorragia 
excesiva. Por otra parte, si el número de plaquetas es demasiado alto, pueden 
formarse coágulos sanguíneos y ocasionar trombosis, los cuales pueden obstruir los 
vasos sanguíneos y ocasionar un accidente cerebrovascular, infarto agudo de 
miocardio, embolismo pulmonar y el bloqueo de vasos sanguíneos en cualquier otra 
parte del cuerpo, como en las extremidades superiores e inferiores. Cualquier 
anormalidado enfermedad de las plaquetas se denomina trombocitopatía, la cual 
puede consistir, ya sea en tener un número reducido de plaquetas (trombocitopenia), 
un déficit en la función (tromboastenia), o un incremento en el número (trombocitosis). 
Se pueden producir desórdenes que reducen el número de plaquetas, como la púrpura 
trombocitopénica idiopática (PTI) y causan problemas hemorrágicos. Sin embargo, 
otros como la trombocitopenia inducida por la heparina pueden causar trombosis, o 
coágulos, en lugar de hemorragias. 
 Las plaquetas liberan un gran número de factores de crecimiento incluyendo el 
factor de crecimiento derivado de plaquetas (PDGF, por platelet derived growth factor), 
un potente agente quimiotáctico, y el factor de crecimiento transformante beta, (TGF-
beta, por transforming growth factor) el cual estimula el depósito de matriz extracelular. 
Estos dos factores de crecimiento han demostrado desempeñar un papel significativo 
en la regeneración y reparación del tejido conectivo. 
 Otros factores de crecimiento producidos por las plaquetas y asociados a los 
procesos curativos incluyen: factor de crecimiento básico del fibroblasto (basic 
fibroblast growth factor), factor de crecimiento-1 asociado a la insulina (IGF-1 del inglés 
insulin-like growth factor-1), factor de crecimiento del epitelio (EGF del inglés epithelial 
growth factor), factor de crecimiento del hepatocito (HGF del inglés hepatocyte growth 
factor) y el factor de crecimiento del endotelio vascular (VEGF del inglés vascular 
endothelial growth factor). La aplicación local de estos factores de crecimiento en altas 
concentraciones a través del plasma rico en plaquetas (PRP del inglés platelet-rich 
plasma) ha sido utilizada, por varias décadas, para acelerar el proceso curativo de 
diferentes lesiones 
Elementos químicos 
 La sangre es tejido vivo formado por líquidos y sólidos. La parte líquida, llamada 
plasma, contiene agua, sales y proteínas. Más de la mitad del cuerpo es plasma. 
 El plasma es la fracción acelular de la sangre. Se obtiene al dejar a la sangre 
desprovista de células como los glóbulos rojos y los glóbulos blancos. Está compuesto 
por un 90 % de agua, un 7 % de proteínas, y el 3 % restante por grasa, glucosa, 
vitaminas, hormonas, oxígeno y dióxido de carbono, además de productos de desecho 
del metabolismo como el ácido úrico. A estos se les pueden añadir otros compuestos 
como las sales y la urea. Es el componente mayoritario de la sangre, representando 
aproximadamente el 55% del volumen sanguíneo total, mientras que el 45 % restante 
corresponde a los elementos formes (tal magnitud está relacionada con el hematocrito). 
 El suero es el remanente del plasma sanguíneo una vez consumidos los factores 
hemostáticos por la coagulación de la sangre. 
• El plasma es salado, arenoso y de color amarillento traslúcido. 
• Además de poder transportar los elementos formes, mantiene diferentes 
sustancias en solución, la mayoría de las cuales son productos del metabolismo 
celular. 
• La viscosidad del plasma sanguíneo es 1,5 veces la del agua. 
 El plasma es una de las reservas líquidas corporales. El total del líquido corporal (60 
% del peso corporal; 42 L para un adulto de 70 kg) está distribuido en tres reservas 
principales: el líquido intracelular (21-25 L), el líquido intersticial (10-13 L) y el plasma 
(3-4 L). El plasma y el líquido intersticial en conjunto hacen al volumen del líquido extra 
celular (14-17 L). 
Componentes 
 El plasma es un fluido coloidal de composición compleja que contiene numerosos 
componentes. Abarca el 55% del volumen sanguíneo.1 Está compuesto por un 91,5 % 
de agua, además de numerosas sustancias inorgánicas y orgánicas (solutos del 
plasma), distribuida de la siguiente forma: 
• LDL, HDL, protrombina, transferrina. 
• Metabolitos orgánicos (no electrolíticos) y compuestos de desecho (20 %), 
fosfolípidos (280 mg/dL), colesterol (150 mg/dL), triacilgliceroles (125 mg/dL), 
glucosa (100 mg/dL), urea (15 mg/dL), ácido láctico (10 mg/dL), ácido úrico (3 
mg/dL), creatinina (1,5 mg/dL), bilirrubina (0,5 mg/dL) y sales biliares (trazas). 
Componentes inorgánicos 
• Componentes inorgánicos (10 001010%) 
• Cloruro de sodio (NaCl010203040506070809) 
• Bicarbonato de sodio (NaHCO3) 
• Tulita de magnesio 
• Cloruro de calcio (CaCl2) 
• Cloruro de magnesio (MgCl2) 
• Cloruro de potasio (KCl) 
• sulfato de sodio (Na2SO4) 
Componentes proteicos 
Funciones de conjunto de las proteínas plasmáticas: 
• Función oncótica manteniendo el volumen plasmático y la volemia. 
• Función tampón o buffer colaborando en la estabilidad del pH sanguíneo. 
• Función reológica por su participación en la viscosidad de la sangre, y por ahí, 
mínimamente contribuyen con la resistencia vascular periférica y la presión 
vascular (tensión arterial). 
• Función electroquímica, interviniendo en el equilibrio electroquímico de 
concentración de (Efecto Donnan). 
Las proteínas plasmáticas se clasifican en: 
• Albúmina: intervienen en el control del nivel de agua en el plasma sanguíneo, y 
en el transporte de lípidos por la sangre. 
• Globulinas: relacionadas fundamentalmente con mecanismos de defensa del 
organismo. 
• Fibrinógeno: proteína esencial para que se realice la coagulación sanguínea. 
Origen 
 Los componentes del plasma se forman en varias partes del organismo: 
 En el hígado se sintetizan todas las proteínas plasmáticas salvo las 
inmunoglobulinas, que son producto de síntesis de las células plasmáticas. 
• Las glándulas endocrinas secretan sus hormonas correspondientes hacia la 
sangre. 
• El riñón mantiene constante la concentración de agua y solutos salinos. 
• Los lípidos son aportados por los colectores linfáticos. 
• Otras sustancias son introducidas por absorción intestinal. 
Arterias y arteriolas 
 Las arterias (que son fuertes, flexibles y elásticas) transportan la sangre desde el 
corazón y soportan las mayores presiones. Debido a su elasticidad, las arterias se 
contraen (retroceso) pasivamente cuando el corazón se relaja entre latidos y así 
ayudan a mantener la presión arterial. Las arterias se ramifican en vasos cada vez más 
estrechos, que finalmente llegan a ser diminutos y se denominan arteriolas. Las arterias 
y las arteriolas poseen paredes musculares cuyo diámetro puede ajustarse con el fin de 
aumentar o disminuir el flujo de sangre que va hacia una zona determinada del cuerpo. 
 
 Las principales características de las arterias son la elasticidad y la contractilidad. 
Hay dos tipos de arterias: 
 Las arterias elásticas, las de mayor calibre, que son la aorta y sus ramas. La 
principal función de estas arterias es la conducción de la sangre del corazón a las 
arterias de mediano calibre. 
 Las arterias musculares, de calibre intermedio, que regulan el flujo sanguíneo en 
las distintas partes del cuerpo. 
Venas 
 Conocidas también como vasos sanguíneos, las venas son conductos cuyo 
propósito es trasladar la sangre hasta el corazón y distribuir por un mecanismo de 
bombeo tanto el oxígeno como el dióxido de carbono y los desechos metabólicos al 
resto de los órganos y tejidos para su uso o eliminación. 
Las características de las venas y el sistema venoso incluyen: 
• Las venas son más abundantes que las arterias. 
• En comparación con las arterias, las venas tienen: 
✓ Grandes lúmenes. 
✓ Paredes delgadas. 
✓ Menos músculo liso y tejido elástico. 
• La sangre pasa por las venas en orden creciente de diámetro luminal: 
✓ Comienza con los vasos más pequeños (vénulas) 
✓ Termina en el vaso más grande (la vena cava). 
• Las venas suelen acompañar una arteria: 
✓ Las venas rodean la arteria en una red ramificada irregular. 
✓ Funciona como un intercambio de calor en contracorriente → permite 
que la sangre fría que regresa de la periferia se caliente antes de 
regresar al corazón.• Vasos con capacitancia: 
✓ Colapsan cuando están vacías, pero pueden distenderse 
significativamente (conocido como distensibilidad). 
✓ El sistema venoso puede contener hasta el 70%-80% del volumen 
sanguíneo en reposo. 
¿Para qué sirven nuestras venas? 
 La función de las venas en nuestro sistema circulatorio es de gran importancia, 
pues son las encargadas de trasportar la sangre desde los órganos y tejidos hacia el 
atrio izquierdo de nuestro corazón. 
 El órgano cardíaco es el encargado de bombear sangre oxigenada y rica en 
nutrientes a través de nuestro cuerpo, proceso que se realiza mediante las arterias. 
Cuando la sangre rica en nutrientes es conducida a través de las arterias la misma va 
oxigenando y nutriendo los capilares y, al mismo tiempo, todos los desechos 
provenientes de los tejidos pasan a las venas, encargadas de distribuirlos a los 
distintos órganos responsables de su eliminación. 
 Las venas transportan la sangre que ya ha sido usada por los tejidos y órganos y 
que, por tanto, se ha quedado sin oxígeno, esta es la razón de que la misma sea más 
espesa pues se encuentra cargada de dióxido de carbono y desechos producto del 
proceso de combustión de los nutrientes. Las venas son las encargadas también de 
distribuir la sangre llena de desechos a cada uno de los órganos responsables de su 
eliminación: 
• Los pulmones, encargados de eliminar el dióxido de carbono. 
• Los riñones, que eliminarán el sodio, calcio, potasio, magnesio, urea, amonio y 
bicarbonato. 
• El hígado que, gracias a la bilis, conseguirá eliminar desechos como la 
bilirrubina restante. 
 Este procedimiento es fundamental para nuestra salud, ya que es tan importante 
que la sangre llena de oxígeno circule adecuadamente por nuestras arterias como que 
la misma sea conducida por las venas a aquellos órganos encargados de su limpieza. 
Cateterismo venoso periférico 
 El cateterismo venoso periférico es el procedimiento invasivo más frecuente en el 
área de hospitalización, el cual se utiliza con fines terapéuticos. Alrededor de dos mil 
millones de equipos de venoclisis son utilizados anualmente en el mundo y la mayoría 
de los pacientes hospitalizados requieren algún tipo de terapia intravenosa. A pesar de 
que es un procedimiento seguro, tiene una alta tasa de falla en la continuidad de una 
vía venosa permeable y en consecuencia complicaciones como la repetición del 
procedimiento hasta en un 69%, debido a la salida del catéter, infiltración, oclusión del 
catéter, flebitis o infección. Por esta razón es necesario conocer la técnica y reducir al 
mínimo estos riesgos y complicaciones. 
Objetivos específicos 
1. Conocer la anatomía venosa periférica e identificarla en el simulador. 
2. Identificar y preparar correctamente el equipo y material. 
3. Aprender y ejecutar la técnica de canalización. 
4. Obtener una vía permeable. 
5. Demostrar la adecuada instalación del equipo para venoclisis. 
6. Enunciar sus indicaciones, los cuidados generales y reconocer complicaciones. 
Indicaciones 
• Reposición de volumen. 
• Reposición de electrolitos. 
• Administración de fármacos. 
• Transfusión de hemoderivados. 
• Mantenimiento de una vía en caso de emergencia. 
• Nutrición parenteral. 
• Quimioterapia. 
• Procedimientos anestésicos. 
Contraindicaciones 
Evitar venas con: 
• Punciones recientes. 
• Flebitis. 
• Vasculitis. 
• Alteraciones anatómicas, rigidez o demasiada movilidad. 
Evitar áreas anatómicas que presenten: 
• Edema. 
• Quemaduras. 
• Celulitis. 
• Trombosis. 
• Coagulopatía primaria o secundaria. 
Material 
• Práctica clínica 
• Solución alcoholada al 70% 
• Guantes estériles 
• Equipo para venoclisis 
• Solución 
• Catéter 
• Torundas alcoholadas 
• Ligadura 
• Apósito adherible 
• transparente 
• Contenedor para 
• punzocortantes. 
Práctica en simulador 
• Solución alcoholada al 70% 
• Modelo para punción 
• Guantes estériles 
• Equipo para venoclisis 
• Agua destilada 
• Mariposa 23G o menor 
• Torundas 
• Contenedor para 
• punzocortantes. 
Consideraciones para el cuidado del simulador: 
• No utilizar antiséptico en el simulador. 
• Realizar un máximo de 2 punciones continuas en el mismo lugar, y se 
recomienda cambiar sitio de punción durante la práctica, se puede utilizar toda la 
superficie del antebrazo. 
• Utilizar únicamente agua destilada; drenarla al término la práctica. 
Utilizar únicamente mariposa 23G para puncionar el simulador. 
• No utilizar tela adhesiva, Micropore o apósito adherible transparente en el 
simulador. 
• Al término de la práctica colocar el sellador sobre los sitios 
en el que se punciono el simulador. 
Desarrollo de la técnica 
• Relación médico-paciente: 
• Presentarse. 
• Identificar al paciente por nombre. 
• Explicar el procedimiento y la justificación de este. 
• Solicitar consentimiento informado verbal. 
• Mostrar que el catéter que se usará es nuevo. 
• En paciente consciente y hemodinámicamente estable. 
 
Preparación del material 
• Realizar higiene de manos. 
• Preparar fármaco: Identificar las siguientes características. 
• Descartar alergia al fármaco. 
• Verifica fármaco correcto. 
• Presentación. 
• Concentración. 
• Dosis. 
• Fecha de caducidad. 
• Vía de administración. 
• Preparar solución parenteral: Identificar las siguientes características 
• Tipo de Solución 
• Fecha de caducidad. 
• Presentación acorde a la cantidad por ministrar. 
 Preparar equipo de venoclisis con técnica aséptica: 
• Sacar el equipo de venoclisis del empaque sin contaminar el conector, ni el 
punzón. 
• Cerrar la llave reguladora. 
• Retirar el capuchón del punzón. 
• Retirar la tapa protectora de la solución 
• Insertar el punzón de la venoclisis en el tapón de goma de la solución. 
• Colgar la solución en el tripié del lado en que será canalizado el paciente, 
procurar la asepsia del conector del equipo de venoclisis. 
• Llenar la cámara de goteo a un tercio de su capacidad. 
• Retirar la tapa del conector, purgar la solución para eliminar el aire a lo largo de 
toda la longitud 
de tubo flexible, tapar nuevamente el conector con técnica aséptica. 
 
Preparar catéter, Identificar las siguientes características 
• Verificar tipo y calibre. 
• Verificar el sellado del empaque que asegure esterilidad. 
• Abrir el empaque del catéter con técnica aséptica sin retirar el protector de la 
aguja. 
 Preparar al paciente: 
• Posicionar al paciente, en decúbito dorsal o semi Fowler. 
• Colocar el antebrazo en una superficie plana yfirme. 
• Seleccionar la vena a canalizar. 
• 8. Técnica de cateterismo o canalización periférica. 
• Realizar higiene de manos. 
• Colocar preferentemente guantes. 
• Colocar ligadura de 6 a 10cm proximal al sitio de punción. 
• Realizar antisepsia en el área de punción. 
• Sujetar el catéter y retirar el protector de la aguja. 
• Tomar el catéter con el dedo índice y pulgar. 
• Orientar el bisel de la aguja hacia arriba. 
• Ejercer tracción mínima sobre la piel en el área de punción. 
• Puncionar la vena en ángulo agudo hasta 
• visualizar retorno venoso. 
• Introducir el catéter empujando el cono de conexión siguiendo el trayecto de la 
vena, en su 
• totalidad hasta el contacto con la piel. 
• Retirar la aguja y presionar la punta del catéter para evitar retorno venoso. 
• Introducir el conector de la venoclisis en la conexión del catéter. 
• Retirar la ligadura. 
• Verificar: Permeabilidad de la vía venosa, al observar goteo continuo de solución 
en la cámara de goteo del equipo de venoclisis. 
• Verificar: Ausencia de infiltración en el tejido contiguo en el sitio de punción. 
• Ajustar el goteo de infusión por medio de la llave reguladora del equipo para 
venoclisis. 
• Fijar el catéter con un apósito transparente adherible. 
• Colocar membrete en el sitio de punción con los siguientes datos: 
✓ Nombre del paciente: _______________________________✓ Numero: _________________________________________ 
✓ Fecha de canalización: ______________________________ 
✓ Nombre completo de quién canalizó: __________________ 
✓ Observaciones: ____________________________________ 
• Informar al paciente que ha finalizado el procedimiento y corroborar el estado 
clínico 
• Desechar los punzocortante en el contenedor para punzocortantes, el resto de 
material en el contenedor asignado. 
• Retirar guantes y realizar lavado clínico de manos o higiene de manos. 
Cuidados Generales 
• Mantener la vía permeable. 
• Mantener una técnica aséptica, en el seguimiento del sitio de punción. 
• Mantener el sitio de punción seco. 
• Manipulación mínima de la fijación del catéter. 
• Identificar procesos inflamatorios. 
Complicaciones 
• Salida del catéter. 
• Dolor intenso continúo. 
• Oclusión del catéter. 
• Flebitis. 
• Infiltración. 
• Infección del área de punción. 
• Infección sistémica. 
Administración de fármacos 
 La administración de fármacos tiene dos tipos que son la enteral y la no enteral, en 
la enteral se subdivide en dos grupos la vía oral y la vía rectal que se caracterizan 
porque ingresan al aparato digestivo y la no enteral se subdivide en dos grupos que 
son parenteral y la no parenteral, la no enteral se caracteriza porque los medicamentos 
no ingresan por el aparato digestivo si no que por otros mecanismos como : la vía 
parenteral que es perforando la piel, vía ID, vía SC, vía IM, vía EV, venoclisis y 
raquídea ésta solo la usan los médicos, la no parenteral estos no perforan la piel sino q 
se administra en la piel y mucosa como la vía tópica y la vía respiratoria. 
Patologías 
Las patologías del tejido sanguíneo incluyen: 
1. Anemia: Una condición en la que el cuerpo no produce suficientes glóbulos 
rojos o hemoglobina, lo que resulta en fatiga, debilidad y falta de aliento. 
 
2. Leucemia: Un tipo de cáncer que afecta a los glóbulos blancos y se caracteriza 
por la producción excesiva de células anormales. 
 
3. Trombocitopenia: Una condición en la que hay una cantidad insuficiente de 
plaquetas en la sangre, lo que puede provocar hemorragias y moretones. 
 
4. Hemofilia: Un trastorno genético en el que la sangre no coagula correctamente, 
lo que puede provocar hemorragias graves. 
 
5. Policitemia vera: Una condición en la que el cuerpo produce demasiados 
glóbulos rojos, lo que puede provocar problemas circulatorios y aumentar el 
riesgo de coágulos sanguíneos. 
 
6. Enfermedad de Von Willebrand: Un trastorno de la coagulación sanguínea en 
el que el cuerpo no produce suficiente factor de von Willebrand, lo que puede 
provocar hemorragias prolongadas. 
 
7. Talasemia: Un trastorno genético en el que el cuerpo no produce suficientes 
glóbulos rojos normales, lo que puede provocar anemia y otros 
problemas de salud.

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