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QUE SABE USTED ACERCA DE LAS ENFERMEDADES NEURODEGENERATIVAS

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Revista Mexicana de Ciencias Farmacéuticas
ISSN: 1870-0195
rmcf@afmac.org.mx
Asociación Farmacéutica Mexicana, A.C.
México
Ramírez M., María del Carmen
¿Qué sabe Ud. acerca de ....... las enfermedades neurodegenerativas?
Revista Mexicana de Ciencias Farmacéuticas, vol. 39, núm. 3, julio-septiembre, 2008, pp. 71-73
Asociación Farmacéutica Mexicana, A.C.
Distrito Federal, México
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¿Qué sabe Ud. acerca de ……. las enfermedades 
neurodegenerativas?
What do you know about ………..neurodegenerative diseases?
María del Carmen Ramírez M.
Departamento Sistemas Biológicos
Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Xochimilco, México.
Preguntas
1. ¿Cuáles son las enfermedades degenerativas más comunes y cómo se manifiestan?
2. ¿Qué prevalencia tienen estas enfermedades?
3. ¿Qué población es más susceptible de sufrir enfermedades neurodegenerativas?
4. ¿Qué alteraciones bioquímicas y fisiopatológicas se encuentran en las enfermedades neurodegenerativas?
5. ¿Qué estrategias terapéuticas recientes se han explorado en la búsqueda de nuevos tratamientos para
 la enfermedad de Alzheimer?
Respuestas
1. Diversas enfermedades neurodegenerativas se caracterizan por la acumulación de agregados proteicos intra y extracelulares y 
degeneración neuronal progresiva en zonas específicas del cerebro. Aunque las zonas afectadas y la magnitud del daño varían con 
el tipo y forma de la enfermedad, frecuentemente involucran estructuras del cerebro que controlan la actividad motriz y la fun-
ción cognitiva. Como consecuencia, estas enfermedades suelen manifestarse con marcados trastornos motores, del lenguaje, la 
memoria y el aprendizaje.
Las enfermedades neurodegenerativas más comunes son la enfermedad de Alzheimer (EA) y la enfermedad de Parkinson (EP). 
La EA se distingue por la presencia en el cerebro de depósitos (placas) amiloides que contienen el péptido neurotóxico beta ami-
loide (Aß), un péptido de 39 a 42 aminoácidos derivado del proceso proteolítico de la proteína precursora de amiloide (APP). Las 
placas amiloides interfieren con la función neuronal ocasionando pérdida de la memoria y demencia. 
La EP tiene como rasgo distintivo el desarrollo progresivo de déficit motor con degeneración y muerte neuronal, predominante-
mente de neuronas dopaminérgicas de la sustancia nigra en el cerebro. La enfermedad se manifiesta primariamente por trastornos 
motores como tremor en reposo, rigidez muscular, bradiquinesia (dificultad para iniciar movimientos) e inestabilidad postural. 
Todos estos síntomas responden bien al tratamiento con Levodopa. La EP puede acompañarse e incluso comenzar a manifestar-
se por alteraciones no motoras que incluyen trastornos del olfato, del sueño y de la capacidad cognitiva.
2. La EA es la enfermedad neurodegenerativa más frecuente, afectando aproximadamente a 15 millones de personas en todo el 
mundo La EP es la segunda enfermedad neurodegenerativa más común después de la enfermedad de Alzheimer, con una preva-
lencia de 1 a 2% en personas mayores de 65 años. La EP y la EA idiopáticas se presentan esporádicamente en individuos mayo-
res de 60 años y son las formas más comunes de estas dos enfermedades. Aunque se desconoce su origen, los factores genéticos y 
su combinación con factores ambientales influyen en su desarrollo. En los casos más raros estas dos enfermedades tienen un cla-
ro componente genético, pueden ser heredadas y aparecen antes de los 60 años de edad. El factor de riesgo genético identificado 
hasta ahora en la EA que aparece tardíamente es un gen que codifica para una forma específica de la apolipoproteína E (ApoE), 
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una proteína que normalmente transporta colesterol sanguíneo. Aproximadamente, 15% de la población tiene una forma altera-
da de ApoE que incrementa el riesgo de desarrollar esta enfermedad. 
3. Por lo general, los individuos de edad avanzada son los más afectados ya que el riesgo de padecer Alzheimer o Parkinson, au-
menta con la edad. Así, en adultos mayores de 65 años el número de personas con EA se duplica cada cinco años, y se ha estimado 
que alrededor del 50% de los individuos de 85 años padecen Alzheimer. Asimismo, la prevalencia de las enfermedades neuro-
degenerativas ha aumentado considerablemente como consecuencia de una mayor expectativa de vida (75 o más años) de pobla-
ciones de todo el mundo –principalmente de países desarrollados–. Así, por ejemplo, la forma más común de demencia entre los 
ancianos es la EA, aunque, estrictamente, esta enfermedad no es considerada como un componente normal del envejecimiento. 
Por otra parte, algunas formas raras de las enfermedades de Alzheimer y de Parkinson aparecen en individuos más jóvenes, con 
edades cercanas a los 30 y 20 años, respectivamente. 
Varias enfermedades neurodegenerativas de rara incidencia se manifiestan desde la infancia. Por ejemplo, la enfermedad de Sandhoff, 
una gangliosidosis [GM(2) tipo II] letal que afecta el sistema nervioso central y, en menor medida, el sistema nervioso periférico. 
Ésta es una enfermedad metabólica neurodegenerativa del tipo de las enfermedades de almacenamiento lisosomal caracterizada 
por alteraciones en el almacenamiento de esfingolípidos como resultado de la deficiencia en las hexosaminidasas A y B. 
4. Diversas enfermedades neurodegenerativas están asociadas con mutaciones genéticas familiares de proteínas tales como sinu-
cleína, parkina y tau, entre otras. Muchas de estas proteínas son componentes de los agregados proteicos presentes en estos pade-
cimientos En el cerebro de los pacientes con Alzheimer son característicos los depósitos de conglomerados de fibrillas de proteína 
conocidos como placas amiloides neurofibrilares. Éstas pueden estar localizadas en el núcleo, el citoplasma o en el espacio extra-
celular. Las placas extracelulares son conocidas comúnmente como placas “seniles”. De acuerdo con la “hipótesis amiloide” los 
péptidos neurotóxicos Aß (componentes principales de las placas amiloides) son determinantes en la patogénesis de la enferme-
dad. El balance favorable a su producción más que a su eliminación es el factor determinante para el comienzo y progresión del 
padecimiento. 
Las características distintivas de la EP son déficit motor, pérdida masiva de las neuronas dopaminérgicas en la región pars com-
pacta de la sustancia nigra (aunque también pueden estar afectadas otras áreas del cerebro) y la formación de inclusiones citoplás-
micas denominadas cuerpos de Lewy y neuritas de Lewy en las neuronas sobrevivientes. Si bien la degeneración dopaminérgica 
es la responsable del déficit motor y, en cierta medida, de los trastornos cognitivos, la EP puede considerarse como una verdadera 
degeneración multisistémica que abarca la neurotransmisión colinérgica, serotoninérgica y noradrenérgica. A la fecha se desco-
noce el origen de esta enfermedad; sin embargo, investigaciones recientes han establecido que las mutaciones en el gen de parki-
na son las causantes de la enfermedad de Parkinson familiar con herencia autosómica recesiva y de aparición temprana, así como 
del parkinsonismo juvenil.
En su forma más severa, la enfermedad de Sandhoff progresa rápidamente y cursa con retraso mental severo, déficit motor, pér-
dida del oído y la visión y parálisis. Los niños afectados conesta forma de la enfermedad mueren en la infancia temprana. Otras 
formas más leves de la misma enfermedad comienzan en la adolescencia o aun en la vida adulta. Igual que en la forma infantil, 
hay deterioro progresivo en la capacidad cognitiva, el lenguaje y pérdida de la coordinación muscular (ataxia).
5. Las investigaciones encaminadas a la búsqueda de tratamientos efectivos para la EA se han enfocado en la identificación de 
compuestos con potencial terapéutico para promover la eliminación de los péptidos neurotóxicos Aß. Recientemente se ha de-
mostrado que varias isoformas de apolipoproteína E unida a lípidos aumentan la degradación del péptido soluble Aß42 por la 
microglía. La isoforma E2 es la más efectiva, y la E4 la menos efectiva. Estos hallazgos son congruentes con el hecho de que los 
individuos portadores de la isoforma E4 tienen mayor riesgo de desarrollar EA. 
Otras investigaciones se han enfocado en la función de la molécula de plasmina (una proteasa producida tras la ruptura de plas-
minógeno por el activador tisular de plasminógeno) en la degradación de estos péptidos. Experimentos recientes in vitro y con 
modelos animales de la EA han mostrado que la generación de plasmina en el hipocampo con un compuesto desarrollado para 
inhibir selectivamente al inhibidor del activador de plasminógeno (PAI-1) estimula el catabolismo de péptidos Aß. Una sola do-
sis del fármaco, denominado PAZ-417, fue suficiente para disminuir significativamente los niveles cerebrales y plasmáticos de 
los péptidos neurotóxicos en modelos animales de la EA y revertir el déficit motor y de aprendizaje en ratones transgénicos que 
producen péptidos Aß. 
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Por último, la llamada Iniciativa de Neuroimágenes de Enfermedad de Parkinson es un amplio proyecto del Instituto Nacional 
de la Vejez, en EUA, que intenta establecer la utilidad de las imágenes del cerebro por resonancia magnética (RMI) y por tomo-
grafía de emisión de positrones (PET) para ver cambios tempranos en este padecimiento o medir su progresión. Este proyecto 
(www.alzheimers.nia.nih.gov) tiene como objetivo principal ayudar a acelerar los ensayos clínicos y encontrar nuevas formas de 
medir la efectividad de los tratamientos para esta enfermedad.
Referencias
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4. Jiang, Q., Lee, CYD., Mandrekar, S., Wilkinson, B., Cra-
mer, P., Zelcer, N. y col. 2008. Apo E promotes the pro-
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5. Nisipeanu P., Inzelberg, R., Mouch, S. A., Carasso, R. L., 
Blumen, S. C., Zhang, J. y col. 2001. Parkin gene causing 
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