Mercurio

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Mercurio
¿Qué es Mercurio?
Recibe el nombre de Mercurio el primer planeta del Sistema Solar a partir de su cercanía con el Sol y el más pequeño de todos, ubicado en una órbita pequeña a su alrededor.
Este planeta forma parte de los planetas interiores o terrestres, junto con Venus, La Tierra y Marte, y carece totalmente de satélites.
Es un planeta rocoso del cual se sabía bastante poco hasta la visita de la sonda Mariner 10, que lo visitó en tres oportunidades entre 1974 y 1975, y obtuvo imágenes telescópicas y radioscópicas.
Mercurio pasó a ser el planeta más pequeño del Sistema Solar luego de que se reclasificó a Plutón como un planeta enano o planetoide.
Recibe su nombre del dios de la tradición grecorromana Mercurio (Hermes, para los griegos), mensajero de los dioses y encargado de llevar las almas de los difuntos a la entrada del inframundo.
Descubrimiento de Mercurio
La existencia de Mercurio se ha conocido desde la antigüedad. Las primeras menciones registradas datan de la cultura sumeria, del tercer milenio antes de Cristo, al igual que la cultura babilónica, que lo bautizó como Nabu o Nebu, el mensajero celestial en su propia mitología.
Los antiguos griegos lo llamaban Apolo cuando era observable durante la mañana y Hermes cuando lo era durante el atardecer, hasta que el propio Pitágoras propuso que se trataba de un mismo objeto.
Sin embargo, el nombre de Hermes, en su versión latina de Mercurio, terminó imponiéndose históricamente.
Dimensiones de Mercurio
Mercurio tiene un diámetro de apenas 4879 kilómetros en el ecuador y una superficie de 7,5 x 107 km2, lo que supone las menores dimensiones del Sistema Solar interior, apenas un poco más grande que la Luna terrestre.
Su masa es de 0,055 Tierras (unos 3,302 x 1023 Kg) y su densidad es de 5,43 gm/cm3: el segundo planeta más denso luego de la Tierra.
Ubicación de Mercurio
Mercurio está ubicado en la órbita más próxima al Sol del Sistema Solar, apenas a unos 58 millones de kilómetros (casi un tercio de los 149,5 millones de nuestro planeta).
Se lo puede detectar a simple vista, sin necesidad de telescopio o binoculares, justo después del atardecer junto al horizonte, o al alba, pero nunca de noche.
Características orbitales de Mercurio
La órbita de Mercurio es pequeña, de 88 días terrestres y una inclinación de 7° respecto al plano de la elíptica. Esta órbita es, no obstante, muy peculiar, ya que es casi circular y varía la distancia del planeta respecto al Sol.
Por otro lado, su rotación es lenta, al punto de que antiguamente se pensó que mostraba siempre la misma cara al Sol, como hace la Luna con la Tierra. Pero hoy se sabe que gira 3 veces sobre su eje durante cada 2 órbitas alrededor del Sol, lo cual genera temperaturas muy extremas en sus dos caras.
Además, Mercurio viaja unos 50 km/s más aprisa que el resto de los planetas conocidos y tiene un curioso fenómeno de doble amanecer: el Sol se asoma, vuelve a ocultarse y luego vuelve a salir para continuar su recorrido.
Clima de Mercurio
El clima mercuriano es extremo en sus dos caras: la cara expuesta al Sol alcanza temperaturas de alrededor de 427 a 430 °C, mientras que su rostro oculto desciende a los -173 °C.
Su atmósfera es sumamente delgada (por eso los meteoritos logran penetrarla fácilmente) y está compuesta por oxígeno, sodio, helio, hidrógeno y potasio principalmente, ya que las altas temperaturas generan que los átomos escapen al espacio.
Magnetósfera de Mercurio
Mercurio posee una magnetósfera cuyo origen es desconocido, si bien posee un núcleo de metal semejante al terrestre. Esta atmósfera magnética se puso en evidencia al estudiar los comportamientos del viento solar contra el planeta.
Geología de Mercurio
La superficie de Mercurio es rocosa, similar a la de la Luna, con abundantes cráteres de meteoritos, lo cual evidencia períodos de mucha acción meteórica (hace 4000 años más o menos).
También presenta extensas llanuras y depresiones profundas, como los cráteres Caloris y Rachmaninoff, de 1500 y 306 kilómetros de profundidad respectivamente.
Su estructura se compone de tres capas: un núcleo de metal semifundido de unos 2 km de radio, un manto de 600 km de espesor y luego una corteza de 200 km de grueso, en la cual se han detectado, a pesar de las intensas temperaturas registradas, depósitos de hielo de origen desconocido.
Fases mercurianas
Visto desde la Tierra, Mercurio presenta fases, tal y como la Luna. Cada 116 días en promedio el planeta alcanza su conjunción inferior, es decir, su fase ‘nueva’, y avanza paulatinamente hasta su conjunción superior o fase ‘llena’.
En los extremos de dicha ciclo el planeta empieza a ser visible desde la Tierra, pues en el intervalo se hace mucho más difícil de percibir.
Tránsito de Mercurio
Al paso de Mercurio entre el Sol y la Tierra se lo denomina tránsito y ocurre cuando los tres astros se alinean perfectamente, lo cual tiene lugar unas 13 veces durante el siglo, a intervalos de 3, 7, 10 y 13 años, debido a que el planeta está en otro plano al de la Tierra.
Sondas espaciales que visitaron Mercurio
No es sencillo aproximarse a Mercurio, dada su cercanía con el Sol y su falta de atmósfera de frenado, por lo que no son muchas las ocasiones que han habido de estudiarlo con cercanía.
Las sondas espaciales Mariner 10 (1974-1975), MESSENGER (2011) y BepiColombo (proyectada para 2024) son los proyectos de exploración espacial que nos han brindado imágenes y datos respecto a Mercurio.