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mejoramiento de praderas naturalizadas

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Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue 
Serie Actas N° 9 
 
 
MEJORAMIENTO DE 
PRADERAS NATURALIZADAS 
Enrique Siebald Sch. Ingeniero 
Agrónomo, INIA Remehue 
1. INTRODUCCIÓN 
La investigación en mejoramiento 
de praderas se inició en la X 
Región a comienzos de la década 
del 70, con resultados positivos 
en cuanto a mejoramiento de la 
producción y rentabilidad de las 
explotaciones ganaderas (Siebald 
y col, 1983). Posteriormente se 
han desarrollado varios trabajos 
en esta línea, tanto por 
investigadores de la Universidad 
Austral como de INIA Remehue. 
Los resultados logrados, más la 
acción del Plan de Recuperación 
de Suelos Degradados, han 
permitido aumentar la proporción 
de praderas mejoradas en la 
región, aunque queda aún gran 
superficie por mejorar, de acuerdo 
a los resultados del VI Censo 
realizado en 1997, Cuadro 1. 
Con la a l t a superficie que 
continúa como pradera natural, 
se limita la capacidad de carga 
de este importante recurso, 
p e r d i é n d o s e a d e m á s 
competitividad, debido a la baja 
eficiencia en la utilización del 
recurso suelo. 
La provincia de Osorno aparece 
con la mayor proporción de 
praderas mejoradas (67%). 
Tanto en el X I X Congreso 
Internacional de Praderas 2001, 
realizado recientemente en Brasil, 
(N.Teuber, c o m u n i c a c i ó n 
 
personal), como en otros foros 
internacionales se resalta con 
fuerza algunos aspectos básicos 
para desarrollar la producción 
animal, éstos son: 
• Bajar los costos de producción 
de los sistemas pecuarios, con 
el fin de aumentar el margen 
económico. 
• Propender a una producción 
animal más sana y limpia. 
• Cuidado del medio ambiente, 
desarrollando sistemas de 
producción animal no 
contaminantes. 
• Énfasis en el cuidado y 
bienestar de los animales en 
general. 
Provincia Praderas mejoradas Praderas naturales 
 ha % ha % 
Carga animal 
Cabezas/ha 
Valdivia 152.296 38 245.638 62 1,5 
Osorno 215.099 67 105.058 33 1,6 
Uanquihue 129.982 49 135.757 51 1,3 
Chiloé 23.357 13 155.756 87 0,7 
Palena 2.579 6 38.307 94 0,7 
TOTAL REGIÓN 525.312 44 680.516 56 
Cuadro 1. Superficie de praderas y grado de mejoramiento, por provincia, 
X Región, 1997. 
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• Desarrollo y manejo de 
parques para agroturismo, 
descanso y rec reac ión . 
• Fuerte tendencia a disminuir 
la in tens i f icac ión de los 
sistemas productivos. Esto 
i m p l i c a reducir el uso de 
concentrados y producir en 
condiciones más naturales. 
El trabajar con praderas 
compuestas por varias especies es 
una alternativa s i m p l e de 
desarrollar al trabajar sobre 
praderas naturalizadas. Esta 
situación presenta ventajas 
relacionadas a balance de 
nutrientes, menor incidencia de 
plagas, mayor resistencia a 
condiciones adversas de clima, 
(di v e r s i d a d g e n é t i c a ) . 
Normalmente hay especies que 
ev i t an la i n c i d e n c i a de 
meteorismo y mejoran la 
e f i c i e n c i a de absorción de 
a m i n o á c i d o s ( t a n i n o s 
condensados), además de 
p r e s e n t a r p r o p i e d a d e s 
antihelmínticas, diuréticas y 
antibióticas, como es el caso del 
siete venas (Plantago lanceolata), 
(Rumbal et al, 1997; Stewart, 
1996). Además se ha observado 
altos niveles de producción con 
buenos indicadores de calidad 
(Siebald et al, 1999; Balocchi y 
López, 1996). 
Ex i s te un dinamismo en la 
composición botánica de l as 
praderas naturalizadas, producto 
de la competencia por nutrientes, 
espacio y luz. Esto podría explicar 
los altos niveles de producción de 
las praderas mixtas en relación 
con los datos obtenidos de 
evaluaciones de especies puras 
en siembras, como es el caso del 
pasto miel (Holcus lanatus), (Alfaro 
y col, 1998). 
2. ESPECIES NATIVAS Y 
NATURALIZADAS 
IMPORTANTES POR 
PRODUCTIVIDAD EN LA 
X REGIÓN. 
En la pradera naturalizada de la 
X Región predominan gramíneas 
perennes, más malezas de hoja 
ancha y un porcentaje variable de 
leguminosas, dependiendo la 
presencia de las últimas del nivel 
de fósforo y de aluminio en el 
suelo. 
Entre las especies gramíneas de 
mayor valor forrajero están: 
Bromus valdivianus (Bromus), 
nativa. 
Bromus stamineus, nativa 
Bromus catharticus, nativa 
Holcus lanatus (pasto miel), 
naturalizada 
Arrhenatherum elatius ssp. bulbosum 
(pasto cebolla), naturalizada 
Poa anua y Poa pratensis (poa), 
naturalizada 
Dactylis glomerata (pasto ovillo), 
naturalizada, sembrada 
Lolium perenne y L multiflorum 
(ballicas), naturalizadas y 
sembradas 
En leguminosas son importantes: 
Trifolium repens (trébol blanco), 
naturalizada y sembrada 
Lotus uliginosus (alfalfa chilota), 
naturalizada 
Otras especies gramíneas de 
bajo valor forrajero presentes, 
son: 
Agrostis capillaris (chépica), 
naturalizada 
Anthoxanthum ordoratum (pasto 
oloroso), naturalizada 
Las especies malezas de hoja 
ancha más importantes son: 
Hypochoeris radicata (pasto del 
chancho), naturalizada 
Taraxacum officinale (diente de 
león), naturalizada 
Plantago lanceolata (siete venas), 
naturalizada 
Rumex acetocella (vinagrillo), 
naturalizada 
Rumex crispus (romaza), 
naturalizada 
Descripción de especies nativas 
y naturalizadas más 
importantes: 
Holcus lanatus (pasto miel): es una 
especie originaria de Europa, 
noroeste de África y Asia 
templada. Se distribuye en 
regiones húmedas con suelos 
moderadamente fértiles, siendo 
poco afectada por la acidez del 
suelo, alcanzando niveles de 
producción de 10,6 toneladas de 
M.S./ha en el segundo año de 
producción, con fertilización 
(Balocchi, 1996). Puede dominar 
en la pradera a menos que se 
realice un pastoreo intensivo 
(Charlton y Stewart, 2000). 
En relación con otras gramíneas 
el pasto miel posee una mayor 
concentración de t a n i n o s 
condensados, compuestos que 
reducen la degradación de la 
proteína en el rumen, pero esto 
no afectó el consumo ni la 
ganancia de peso en corderos, 
(Liu y Hodgson, 1998). Bajo 
condiciones de alta fertilidad de 
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suelos y con un manejo intensivo 
la mezcla ballica-trébol blanco 
presenta un mayor valor 
alimenticio que la mezcla pasto 
miel-trébol, trabajando con 
corderos, (Montosi and Hodgson, 
1997). En Chile, Balocchi et al, 
2000, señalan que el Holcus 
lanatus es una especie con 
atributos comparables a los de 
especies sembradas de alto valor 
forrajero, como pasto ovil lo. 
Bromus valdivianus (Bromo, 
bromus): Del género Bromus 
existe una gran cantidad de 
especies con características 
propias, varias tienen su origen 
en el Cono Sur de Sudamérica, 
encontrándose distribuido en todo 
el mundo. Bromus valdivianus es 
de macollaje intermedio, perenne, 
apto para el pastoreo. Produce 
fuertemente en primavera y 
verano, presentando resistencia 
a sequía, pero presenta un 
moderado c r e c i m i e n t o en 
invierno. Es persistente en suelos 
fértiles, con buen drenaje. Como 
otras especies de Bromus no 
toleran inundaciones ni pisoteo 
en suelo inundado, pero tolera 
condiciones de grandes lluvias 
mejor que otros Bromus, 
(Charlton and Stewart, 2000). 
Bromus stamineus: Al igual que el 
anterior es perenne, pero produce 
más en invierno, presentando 
también tolerancia a sequía. 
Persiste en suelos bien drenados 
y con menor fertilidad que el 
anterior (Charlton and Stewart, 
2000). Al evaluar ecotipos 
de B. 
valdivianus, considerando región, 
altitud, se encontró que la 
región Sur-Llano Central (X 
Región) contiene ecotipos con 
mejores características 
forrajeras; y la Región Norte-
Llano Central presenta 
ecotipos con aptitud de 
producción de semillas (Blanco 
y Balocchi, 2000). 
Bromus valdivianus es la especie 
que presenta un mayor número y 
período de producción de hojas, 
en relación con B. stamineus y B. 
catharticus. El largo finalde 
macollos es de 129 cm para 
Bromus valdivianus, 122 para B. 
catharticus y 97 para B. 
stamineus, (Doussoulin y col, 
2000). 
En una evaluación de genotipos 
realizada en el sur de Chile y 
Argentina (Seguel y col 1999), 
identificaron ocho especies, 
encontrando 10 poblaciones con 
respuesta estadísticamente 
similares en rendimiento a la 
variedad comercial, usada como 
testigo, pero con diferentes 
distribuciones de crecimiento y 
época de floración. 
Lotus uliginosus (alfalfa chilota, 
l o t e r a ) : Es una leguminosa 
perenne que se desarrolla en 
suelos húmedos, ácidos y de baja 
fertilidad, con pastoreos suaves. 
Es una planta pionera, creciendo 
donde el trébol blanco no está 
presente (Charlton and Stewart, 
2000). En los trabajos de 
mejoramiento de praderas 
naturalizadas de la X Región, se 
les ve con alta presencia los 
primeros dos años de fertilización, 
posteriormente deja el espacio al 
trébol blanco (Siebald y col, 
2000). 
Esta especie puede usarse en 
agroforestería por su tolerancia a 
la sombra (Charlton and Stewart, 
2000). Además es resistente a 
varias plagas de suelos, por lo 
que se la ve cubriendo suelos 
desnudos dejados por ataques de 
plagas. La lotera posee un alto 
c o n t e n i d o de t a n i n o s 
condensados, (compuestos 
fenólicos), los que bajan la 
degradación de las proteínas en 
el rumen, mejorando la absorción 
de aminoácidos; sobre 5 g/kg M.S. 
en la planta evita el meteorismo. 
En el Cuadro 2 se presenta el 
contenido de taninos de algunas 
especies, adaptado de Barry et al, 
2001. 
Especie Taninos condensados 
Lotera 77 
Trébol rosado 1,7 
Alfalfa 0,5 
Ballica perenne 1,8 
Pasto miel 2,6 (Liu and Hodgson, 1998) 
Chicoria 4,2 
Cuadro 2. Contenido de taninos condensados (g/kg materia seca) 
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Plantago lanceolata (siete venas): 
Es una maleza perenne, que se 
desarrolla en suelos pobres y 
praderas de baja densidad. La 
selección ha permitido obtener 
plantas más vigorosas y de 
crecimiento más erecto. Son 
variedades de alta palatibilidad, 
de rápido establecimiento, 
resistentes a sequía y plagas, 
presentando un alto contenido de 
minerales, siendo necesario evitar 
el desarrollo de tallos florales 
(Stewart, 1996). Esta especie 
p r e s e nt a p r o p i e d a d e s 
antihelmíntica, d iurét ica y 
antibiótica (Rumball et al, 1998; 
Stewart, 1996). A continuación 
se presenta un 
listado de cultivares comerciales 
de las especies descritas, con 
dosis de semillas y estimaciones 
de producción. 
3. MEJORAMIENTO DE 
PRADERAS 
NATURALIZADAS EN 
SUELOS DE BAJA 
FERTILIDAD 
De acuerdo a un estudio de 
caracterización de los sitios de 
crecimiento de las especies 
naturalizadas, se observa que 
especies de mayor potencial como 
el Bromus domina en suelos con 
bajo nivel de aluminio, profundos 
y de buen drenaje, con un nivel 
medio de fósforo. Agrostis 
( c h é p i c a ) , d o m i n a 
preferentemente en suelos con 
alto nivel de aluminio, pero bien 
drenados (Balocchi y López, 
1996). 
Considerando este dinamismo de 
la pradera naturalizada, en función 
de la fertilidad, presencia de 
aluminio, es que es factible el 
mejoramiento de éstas por la vía 
de la fert i l ización, uso de 
enmiendas y optimización de la 
utilización. 
En un suelo del Llano central de 
la X Región, con un pH 5,5-5,8, 
con un porcentaje de saturación 
de aluminio normalmente inferior 
Cuadro 3. Variedades comerciales de especies nativas y naturalizadas en la X Región 
 
Especie Cultivar Origen* Dosis de 
Semilla 
(kg/ha) 
Nivel de 
producción 
(Ton M.S/ha) 
Fuente 
información 
Holcus lanatus Massey basyn Massey Univ. 
 Melita N.Z. Agriseeds 2-3 mezcla 9,7 (6,0) Alfaro y col 1998 
 Forester PGG** 
 Ecotipos locales Valdivia 25-30 10,6 Balocchi y López 1996 
 Ecotipos locales Chiloé 25-30 9,5 (5,4) Alfaro y col 1998 
Bromus valdivianus Bareno N.Z. Agriseeds 25-30 
 Ecotipos locales Valdivia 25-30 13,1 Balocchi y López 1996 
Bromus stamineus Gala PGG Ag. Res. 25-30 10,8 
Bromus catharticus Matua Agr. Res 25-30 Stewart, 1996 
 Ceres Atom PGG 25-30 
Lotus uliginosis Sunrise Agr. Res 5 
 Maku Agr. Res 5 
 Barsilvi N.Z. Agriseeds 5 
Lotus carniculatus Goldie Agr. Res 10 
Plantago laceolata Lancelot Agr. Res 1-2 (mezcla) 7,6 Stewart, 1996 
 Tonic PGG 1-2 (mezcla) 8,4 Stewart, 1996 
' La información de los cultivares neozelandeses correponde a Charlton y Stewart, 2000. " PGG: Pyne Gould Guinnes Ltd. 
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a 5 y pobre en fósforo (4 
ppm,Olsen), se logró una muy 
buena respuesta en composición 
botánica (incremento de trébol, 
Bromas, Holcus) y en producción 
de forraje. Con aplicaciones 
anuales de 90 kg de P2O5 por 
hectárea, más 40 kg de nitrógeno, 
se logró una producción de 12 
ton m.s./ha al cuarto año (Siebald 
y col 1983). 
En suelos con alta acidez y alta 
presencia de aluminio, (costa de 
la provincia de Llanquihue, Los 
Muermos, suelo ser ie Nueva 
Braunau), en una primera etapa 
de su desarrollo se fertilizó con 
110 kg de fósforo (Superfosfato 
t r ip le) y 40 kg de nitrógeno 
(Supernitro, Nitromag), más 45 kg 
de azufre en el cuarto año, se 
obtuvo una alta respuesta en 
producción y calidad, (Cuadro 4). 
El contenido de fósforo se 
incrementó desde 5 a 13 ppm 
(Olsen) en estos cuatro años, 
manteniéndose el pH (H2O) en 
5,3 y un 19% de saturación de 
aluminio, Cuadro 5. 
La alta respuesta a la fertilización 
se manifiesta en el incremento de 
leguminosas, pasto miel {Holcus 
lanatus) y en la fuerte reducción 
del material muerto. Esto 
concuerda con resultados 
obtenidos por Balocchi, 1996, 
Se observó una tendencia a mayor 
producción con el en5calado, 
así como se logró un aumento 
en el contenido de trébol blanco y 
pasto miel. 
La producción de materia seca 
en las dos últimas temporadas en 
que se evaluó la cal se presenta 
en el Cuadro 6. 
 
 
 
Nut r ien te Unidad 1996 Pradera 
Fertilizada 
Abril 2000 
Pradera 
Fer t i l i zada+Ca 
1 A b r i l 2 0 0 0 
Fósforo ppm 5,6 13,3 12,7 
Potasio ppm 176 164 149 
pHH2O 5,3 5,3 5,62 
pH CaCI2 4,4 4,5 4,85 
M. Orgánica % 21,7 20,6 17,6 
Calcio cmol(+)/kg 2,17 2,94 7,6 
Magnesio cmol(+)/kg 1,05 1,13 1,37 
Potasio cmol(+)/kg 0,45 0,42 0,38 
Sodio cmol(+)/kg 0,28 0,26 0,28 
Suma de bases cmol(+)/kg 3,96 4,75 9,63 
Aluminio Ínter. cmol(+)/kg 0,90 1,10 0,25 
Al Saturación % 18,65 18,82 2,56 
Azufre ppm — 3,53 3,97 
Cuadro 4. Respuesta a la fertilización de las praderas naturalizadas de precordillera de la costa, 
Llanquihue (1996-2000). 
 
 Producción 
Kg. m.s./ha 
Composición botánica % Año 4 
(2000) 
C o n t e n i d o d e n u t r i e n t e s 
% ( i nv ie rno 97) 
T r a t a m i e n t o Año 1 A ñ o 4 Trébo l Lotus Chépica P. Mie l Malezas M. 
Muerto 
m.s. Prot. T. Digest. 
m.s. 
P 
Prad. na t .Tes t igo 4 .852 5 .740 -- 2 41 15 7 35 18,6 14 ,5 54 0,26 
Pradera nat . Fer t . 8 .527 10.503 20 9 22 27 18 2 11,9 25 70 0,52 
Siebald y Col. 1999, Charles y 
Haggar 1978. 
En el mismo trabajo al aplicar cal 
(Soprocal), dos toneladas en la 
segunda temporada y 1,5 en la 
cuarta, se logró un efecto 
importante en el grado de 
acidez y presencia de aluminio, 
Cuadro 5. 
Cuadro 5. Efecto de la aplicación de cal en el suelo, costa provincia 
 de Llanquihue 
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En la precordillera andina de la 
provincia de Llanquihue, se 
trabajó en praderas utilizadas con 
bovinos y otras con ovinos. Al 
hacerlo con ovinos se partió con 
un suelo muy pobre, lográndose 
una buena respuesta con una 
fertilización con nitrógeno, fósforo 
y potasio, Cuadro 7 y 8. 
La fertilización del primer año fue 
de 37 kg de nitrógeno, 95 kg de 
fósforo, 48 kg de potasio. Desde 
el segundo año subió la dosis defósforo a 110 kg y el potasio a 72 
kg, agregándose 36 kg de azufre 
en la última temporada. A partir 
del segundo año de 
fertilización fue posible sostener 
una carga de 10 ovejas por 
hectárea. 
En Puerto Toledo, comuna de 
Puerto Montt, suelo serie Nueva 
Braunau, con un pH 5,6 y 10 ppm 
de fósforo, se comparó el uso de 
roca fosfórica (Carolina del Norte) 
con el superfosfato triple, con la 
alternativa de encalar. Al usar 
roca se observó mayor presencia 
de leguminosas y una tendencia 
a subir el pH en el tiempo. Las 
producciones de materia seca y 
carne fueron muy simi lares, 
observándose un 7,7% de mayor 
producción al usar cal, desde 
1.021 kg de aumento de peso vivo 
por hectárea, se subió a 1.100, 
como promedio de c i n c o 
temporadas. La mayor respuesta 
económica se logra sin el uso de 
c a l , S i e b a l d y Col, 1 9 9 9 . 
De acuerdo a los resultados 
obtenidos en diferentes trabajos 
en fertilización de praderas, en la 
Xa. Región se proyectó el nivel de 
respuesta en el Cuadro 9. 
4. ÍNDICES PRODUCTIVOS 
Y ECONÓMICOS EN 
MEJORAMIENTO DE 
PRADERAS, CON 
SISTEMAS DE RECRÍA DE 
VAQUILLAS DE 
REEMPLAZOS Y 
TERNEROS. 
En el sector de la Costa de 
Llanquihue, se evaluó la respuesta 
de la fertilización en producción 
Cuadro 7. Fertilidad del suelo y composición botánica. Pradera ovinos, Ralún, Pocoihuén Alto (cuarta 
temporada 1999/2000). 
 
 
Tipo pradera 
Indicadores de fertilidad y 
acidez del suelo Composición Botánica (%} 
 Fósforo 
ppm 
Potasio 
ppm 
Bases 
Cmol(+)/k
g 
PH H2O Al % 
Sat. 
Trébol 
Blanco 
Alfalfa 
Chilota Chépica 
Pasto 
Miel 
Malezas Material Muerto 
Pradera Natural 2 82 4,47 5.5 10,3 -- 2 45 1 11 41 
Natural Fertilizada 12 254 4,64 5,5 14,6 10 20 37 6 18 9 
Fuente: Siebald y col (FNDR, 2000). 
Cuadro 8. Respuesta en producción de materia seca y en calidad, Ralún. Pocoihuén Alto. 
 
 
Producción de materia seca (kg/ha) 
 
Contenido de nutrientes (%) dic. 1999 
Tipo pradera 
 
1996/97 
 
1997/98 
 
1998/99 
 
1999/00 
Materia 
Seca 
Proteina 
Total 
Digest. 
M.S. 
FND Fósforo 
Pradera Natural 3.561 5.433 5.471 5.528 37,0 10,7 53 63 0,11 
Natural Fertilizada 5.926 8.927 10.064 10.481 18,8 17,1 70 49 0,26 
Fuente: Siebald y col (FNDR, 2000). 
Temporada Pradera natural Pradera Fertilizada Pradera Fertilizada+Cal 
1998/99 5.109 9.357 10.735 
1999/00 5.740 10.503 12.407 
Cuadro 6. Producción de materia seca (kg/ha)/temporada/tipo de pradera 
Costa Llanquihue. 
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Cuadro 9. Nivel de producción por tipo de pradera (kg m.s./año) 
 
Tipo de pradera Nivel de producción 
Pradera natural sin fertilizar 3000 - 5.000 
Pradera fertilizada 1er. Año 7.500 - 8.500 
Pradera fertilizada dos años 8.500- 10.500 
Pradera fertilizada tres años y más 10.500- 13.500 
Pradera permanente sembrada 10.000- 14.000 
Cuadro 10. Carga animal y producción de carne en recría de vaquillas. 
Módulo precordillera de la costa Llanquihue. 
 
Temporada Carga (vaquillas/ha) Producción (kg P.V/ha) 
1997/98 2,7 482 
1998/99 4,0 693 
1999/00 4,0 745 
2000 / 01 4,0 835 
Fuente: Proyecto mejoramiento de praderas de precordillera FNDR. INIA-Remehue, 2001 
 
 Figura 1. Costo por kg de M.S. de pradera naturalizada 
 fertilizada en precordillera de la costa ( $ de abril 
 2001, Los Muermos ) 
 
 
Figura 2. Evolución del Margen Bruto por hectárea en recría 
 sobre praderas naturalizadas mejoradas de 
 precordillera Costa ( $ de abril 2001) 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
animal, mediante un módulo de 
recría de vaquillas en 1,5 há. La 
carga evolucionó de 2 , 7 a 4 
terneras/há, realizándose una 
suplementación con heno o 
ensi laje, (dos kg de m.s. por 
animal por un período de 90-110 
días). La información en 
producción de carne se presenta en 
el cuadro 10, y l o s 
antecedentes económicos en las 
Figuras 1 y 2. 
Los resultados hasta ahora 
logrados permiten señalar que el 
mejoramiento de praderas 
naturalizadas es una alternativa de 
bajo requerimiento de capital, 
p e r m i t e a u m e n t a r 
significativamente la producción y 
la calidad de los forrajes. Al 
ser el i n c r e m e n t o de producción 
gradual en el tiempo, permite 
aumentar año a año la carga 
animal diluyéndose el costo de 
reposición, el cual corresponde 
aproximadamente al 70% del 
costo total en sistemas de 
producción de carne. 
P r o d u c i r en p r a d e r a s 
permanentes, un kilo de materia 
seca a un costo inferior a $ 10, es 
lograr una base para 
d e s a r r o l l a r una ganadería 
competitiva, sustentable, con un 
mínimo de impacto ambiental, 
ofreciendo alimentos limpios, 
demandados por un consumidor 
cada vez más culto. 
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ALFARO, M.; TEUBER, N.; 
DUMONT, J.C. y MEDONE, F. 
1998. Efecto del carbonato de 
calcio en el establecimiento y 
producción de gramíneas y 
leguminosas forrajeras en Chiloé. 
Agricultura Técnica (Chile) (3): 
173-180. 
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5. LITERATURA 
 CITADA 
 
Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue 
Serie Actas N° 9 
 
ÉNFASIS EN EL ESTABLECIMIENTO 
DE PRADERAS PERMANENTES 
NolbertoTeuber K., 
Ingeniero Agrónomo, Ph.D., INIA Remehue 
1. INTRODUCCIÓN. 
En la X Región se encuentra el 
11% de las praderas de Chile 
(alrededor de 1,48 millones de 
hectáreas). Esto t i ene gran 
importancia, debido al desarrollo 
de sistemas de producción animal 
(leche y carne) basados en su 
utilización a pastoreo. Según el 
VI Censo Nacional 
Agropecuario (1997), en la 
Región de Los Lagos las praderas 
se d i s t r i b u y e n en: 49% 
naturalizadas, 38% mejoradas y 
13% sembradas. 
Las praderas naturalizadas se 
caracterizan por tener bajo 
rendimiento, baja ca l i dad 
nutritiva, son estacionales en su 
crecimiento y se desarrollan en 
suelos de baja fertilidad. En el 
lado opuesto están las praderas 
mejoradas y sembradas, que 
presentan mejores especies 
botánicas, más productivas, se 
desarrollan en suelos de fertilidad 
media a alta y consecuentemente 
presentan mayor rendimiento y 
calidad nutritiva. Las 
praderas mejoradas y 
sembradas pueden degradarse 
botánica y productivamente al 
ser tratadas en condiciones de 
manejo no adecuados; por lo 
tanto es necesario poner atención 
permanente en los diferentes 
aspectos técnicos. 
 
Las praderas naturalizadas 
pueden mejorarse en un plan de 
desarrollo a mediano o largo 
plazo; el que involucra el uso del 
cerco eléctrico, la regulación de 
la carga animal, la aplicación de 
fertilizantes, la incorporación de 
especies m e j o r a d a s vía 
regeneración, etc. La aplicación 
de fertilizantes en dosis y 
balance adecuado entre macro 
y micro nutrientes, posibilita 
la recuperación de una pradera 
degradada. 
Las espec ies fo r ra je ras 
actualmente comercializadas en 
el sur de Chile, presentan alto 
potencial de rendimiento cuando 
crecen en suelos sin limitaciones 
de fertilidad; por lo tanto el 
establecimiento directo de una 
pradera permanente en un suelo 
de alta fertilidad es una inversión 
biológica y económicamente 
rentable. 
El objetivo planteado es enfatizar 
los aspectos técnicos de mayor 
relevancia en el establecimiento 
de una pradera permanente. 
Otros temas relacionados se 
detallan por Teuber (1999) . 
2. ESTABLECIMIENTO 
En general se puede admitir que 
el establecimiento de una pradera 
 
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Serie Actas N° 9 
 
permanente es el período 
comprendido entre la siembra y 
el p r i m e r p a s t o r e o , 
posteriormente se considera que 
la pradera está establecida. 
El éxito en el establecimiento y 
persistencia de una pradera 
permanente contempla diferentes 
a c c i o n e s como: atender, 
supervisar, ejecutar y controlar 
los diferentes aspectos técnicos 
involucrados en el proceso. Estas 
acciones deben ser "manejadas" 
por el propietario o administrador 
del predio. 
Existen muchos factores técnicos 
involucrados tanto antes de la 
siembra, como durante esta labor 
y en el desarrollo de la pradera 
en su primer año. Sin embargo, 
el énfasis del aná l i s i s está 
relacionado con los siguientes 
aspectos: 
• Preparación de la cama de 
semillas. 
• Siembras asociadas. 
• Control de malezas. 
• Manejo en el primer año. 
Preparación de la cama de 
semillas. 
El objetivo p r inc ipa l en la 
preparación de la cama de 
semillas es mejorar la condición 
f í s i ca del suelo para dar un 
ambiente propicio a la planta, es 
decir, disponer de suficiente agua 
y aire en el suelo; elementos 
esenciales para el desarrollo de 
los cultivos. 
La preparación convencional o 
tradicional de la cama de siembra 
normalmente contempla l as 
siguientes labores: un arado 
subsolador, un arado de discos o 
vertederas, rastrajes, nivelación 
y rodillos. 
El arado s u b s o l a d o r ( s i 
corresponde), se utiliza cuando 
el subsuelo (estrato localizado 
debajo de la capa arable), no es 
permeable o se d i f i cu l ta la 
penetración de las raíces y del 
agua. 
La aradura (barbecho), tiene la 
finalidad de aflojar e invertir el 
suelo para promover su aireación 
y aumentar la capacidad de 
almacenar agua. Además sirve 
para enterrar la vegetación 
existente y reducir las plagas del 
suelo. 
Los rastrajes son labores que se 
realizan antes y después de la 
aradura. Los rastrajes iniciales se 
hacen con el fin de romper la 
vegetación existente, y los finales, 
con el objetivo de crear una capa 
superficial fina que faci l i te la 
germinación de las semillas. 
La nivelación consiste en la 
reparación de las imperfecciones 
en el microrelieve del potrero. 
Esta labor se puede realizar con 
una pieza de madera en bruto 
(alrededor de 8x8 pulgadas) lo 
suficientemente pesada y larga, 
que se a p l i c a c a s i 
perpendicularmente a la línea de 
avance de la tracción (animal o 
tractor). 
Pasar un rodil lo antes de la 
siembra con el fin de compactar 
y mejorar el microrelieve del 
suelo y posterior a la siembra 
para permitir un buen contacto 
de las semillas con el suelo. 
Hoy día la siembra directa de 
praderas se realiza sobre cultivos 
anuales, por lo que normalmente 
se efectúa con el mínimo laboreo 
del suelo. Esto signif ica no 
disturbar el suelo, mantener alta 
fertilidad en los primeros 15 a 
20cm de p r o f u n d i d a d y 
especialmente, reducir los costos 
en las labores de preparación 
del suelo. 
En definitiva, una buena cama de 
semillas debe reunir las siguientes 
características: 
• Romper las capas compactas 
del suelo. 
• Reducir la competencia de 
plantas no deseadas (malezas). 
• Mejorar la captación, 
infiltración y retención de 
agua. 
• Debe ser mullida, firme y libre 
de terrones. 
• Permitir un íntimo contacto 
de las semillas forrajeras con 
el suelo. 
Un suelo idealmente preparado 
se observa en la fotografía 1. 
Siembras asociadas. 
Otro aspecto por enfatizar en el 
establecimiento de praderas es la 
siembra de especies forrajeras en 
mezcla o asociadas a cereales. 
Los cereales son gramíneas 
anuales de rápido crecimiento 
inicial, que compiten y aniquilan 
fácilmente a las forrajeras 
perennes durante la etapa de 
establecimiento. La avena y el 
trigo son los cereales de mayor 
uso para sembrar praderas 
 
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Serie Actas N° 9 
 
 
Fotografía 1. Cama de semillas ideal para la siembra de las especies forrajeras. 
Cuadro 1. Rendimiento relativo (%) de una pradera mixta (ballica 
perenne y trébol blanco) asociada a trigo de invierno y 
primavera. Resultados obtenidos en Osorno y Chillán. 
 
 Pradera asociada 
Siembra 
Pradera 
sola 
Osorno Chillán 
Trigo invierno y pradera simultánea 100 35 40 
Trigo primavera y pradera simultánea 100 21 50 
Trigo invierno y pradera diferida 100 * 14 
*: sin información 
asociadas en la zona s u r ; 
ocasionalmente también la 
cebada y el triticale. 
La baja competitividad de las 
especies forrajeras frente a los 
cereales anuales, entre otras 
razones se debe a la gran 
diferencia en el tamaño de las 
semillas. 
Teuber (1999), indica que una 
semilla de trébol blanco es 70 
veces más pequeña que una 
semilla de trigo. Esto marca la 
d i f e renc ia en la capacidad 
competitiva entre los cereales y 
las forrajeras; además de la 
irregular profundidad de siembra 
que siempre juega en contra de 
las pequeñas semillas de las 
especies forrajeras. 
En general, se puede indicar que 
el rendimiento de materia seca 
de una pradera permanente 
sembrada en asociación a 
cereales es siempre más afectado 
que lareducción del rendimiento 
obtenido en el cereal. 
En la década de los 80, en INIA 
se desarrol ló una línea de 
investigación en siembras de 
praderas asociadas a cereales. 
Algunos de los resultados se 
indican en el Cuadro1. 
Resultados obtenidos por Teuber 
(1981) en Osorno, indican que 
el rendimiento de materia seca 
de una pradera mixta de ballica 
perenne con trébol blanco 
(BP/TB) sembrada asociada a trigo 
de invierno produjo el 40% de 
la pradera sembrada sola. De 
igual modo, la pradera en 
asociación a trigo de primavera 
produjo el 21% del rendimiento 
 
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Serie Actas N° 9 
 
obtenido en la siembra directa 
de la pradera sin trigo (Cuadro 
1). Además, en la siembra 
asociada a trigo se posterga la 
utilización de la pradera hasta 
después de la cosecha del cereal. 
El efecto de la competencia del 
cereal sobre l as espacies 
forrajeras en siembras asociadas 
es también severo en otras zonas 
del país; incluso bajo condiciones 
de riego en la zona centro sur. 
Figueroa y otros (1980), en 
diferentes ensayos realizados en 
C h i l l á n encontraron fuerte 
reducción en el rendimiento de 
la pradera en el primer año, 
cuando la siembra de las especies 
f o r r a j e r a s se r e a l i z ó 
simultáneamente o d i f e r i d a 
(Cuadro 1). 
En Chillán, la mayor reducción 
en el rendimiento de la pradera 
o c u r r i ó cuando la mezcla 
pratense se asoció a trigo de 
invierno y la siembra se realizó 
posterior a la emergencia del trigo 
(pradera diferida). En cambio en 
Osorno la mayor reducción del 
rendimiento se produjo en la 
siembra simultánea ( t r igo y 
forrajeras) en primavera, como se 
indica en el Cuadro 1. 
Entre los productores es habitual 
establecer trébol rosado con 
avena en siembra de otoño. Sin 
embargo, l o s r e s u l t a d o s 
experimentales obtenidos por 
Torres y otros (1988), indican una 
reducción significativa en la 
población de plantas en la 
siembra asociada (Cuadro 2). 
La siembra directa del trébol 
rosado solo y asociado a avena 
se realizó en forma simultánea 
en la última semana de marzo. 
En el Cuadro 2 se observa que 
además de la reducción de la 
población de trébol rosado entre 
la siembra de la leguminosa sola 
y la siembra asociado (143 a 33 
ó 61 plantas/m2) ocurrida en una 
misma fecha de evaluación; se 
observa una fuerte reducción de 
la población de plantas entre 
ambas fechas de evaluación, 
i nc luso cuando el trébol fue 
sembrado solo, donde se observa 
una reducción de plantas cerca 
al 70% (de 143 a 44 plantas/m2) 
Por los antecedentes expuestos, 
la siembra de una pradera 
permanente compuesta por una 
mezcla de especies forrajeras 
pe rennes (g ramíneas y 
leguminosas) e incluso el trébol 
rosado, no debe rea l i zarse 
asociada a cereales. 
La evidencia experimental y la 
experiencia práctica, indica que 
es t é c n i c a m e n t e más 
recomendable realizar la siembra 
del cereal solo en el primer año 
del cul t ivo y posteriormente 
(segundo año) sembrar la pradera 
sola. Así se obtiene excelente 
rendimiento de granos a la 
cosecha del cereal y una pradera 
establecida en buena forma, 
productiva y p e r s i s t e n t e . 
Control de malezas. 
Entre los numerosos factores que 
afectan el potencial productivo 
de las praderas, debe destacarse 
a las malezas que compiten en 
la utilización de agua, nutrientes, 
luz y espacio. 
El control integral de malezas está 
compuesto por t é c n i c a s 
culturales, control mecánico, 
pastoreo con a n i m a l e s y 
a p l i c a c i ó n de he rb i c i das 
específicos. 
Previo a la siembra de la pradera 
definitiva, la rotación de cultivos 
es un manejo que permite el 
control de una gran gama de 
semillas de malezas presentes en 
el suelo, las que imponen fuerte 
competencia a l as especies 
pratenses. El uso de semillas puras 
o l ibres de malezas es otra 
medida que evita la competencia 
innecesaria de las plantas no 
deseables. 
Durante la labor de siembra es 
necesario estar permanentemente 
atento al funcionamiento de la 
Evaluaciones 
Tipo de siembra y manejo 
14 mayo 
(50 días 
11 enero 
(291 días) 
Trébol rosado solo 143(100%) 44(100%) 
Avena y T. rosado (2 utilizaciones invernales) 33 (23) 11(25) 
Avena y T. rosado (3 utilizaciones invernales) 61 (43) 6(14) 
Cuadro 2. Población de trébol rosado (Ny/m2) en siembra solo y 
asociado a a\/ena en otoño. 
 
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Serie Actas N° 9 
 
máquina sembradora evitando 
cualquier anomalía, tanto en la 
dosificación de las semillas como 
de los fertilizantes. En la etapa 
de establecimiento existen 
diferentes formas de controlar 
las malezas: 
Rotaciones culturales.- Por medio 
de un plan de rotación de cultivos 
anuales, es posible realizar un 
excelente control de malezas y 
acondicionamiento del suelo para 
establecer una pradera definitiva. 
Animales. - El pastoreo con 
animales livianos (terneros) es 
una práctica recomendable, 
siempre y cuando no se produzca 
daño por pisoteo en la pradera 
y/o las plantas sean arrancadas 
durante su utilización. 
Es necesario asegurarse que las 
plantas están bien arraigadas, 
cuando al tirarlas con la mano 
no son arrancadas. El cerco 
e l éc t r i co es una 
h e r r a m i e n t a que permite 
controlar el crecimiento de la 
pradera y la utilización del forraje 
disponible, a través del pastoreo 
directo. 
Mecánico. - Debe realizarse antes 
de la siembra de la pradera, a 
través de la rotación de cultivos 
anuales con el fin de eliminar las 
semillas de malezas estratificadas 
y en la pradera establecida 
mediante el uso de una barra 
segadora o rana. 
Cualquier equipo o implemento 
podría utilizarse luego del primer 
pastoreo, con el objeto de 
c o n t r o l a r l a s malezas y 
consecuentemente eliminar la 
vegetación no consumida por los 
animales, además de desparramar 
parte de las bostas. 
Químico.- Como se sabe, este 
tipo de control debería evitarse 
hasta donde sea posible por el 
conocido deterioro ambiental que 
ocasionan los herbicidas y en 
general los pesticidas. 
En el cuadro 3 se presenta un 
resumen de las ventajas y 
desventajas entre el control 
mecánico de malezas y el uso de 
herbicidas. 
Mane jo en e l p r imer año . 
El cuidado de la pradera durante 
el año del establecimiento es de 
vital importancia en el desarrollo, 
producción y persistencia de las 
especies forrajeras establecidas. 
D u r a n t e el p e r í o d o de 
establecimiento (siembra al 
primer pastoreo), es necesario 
recorrer frecuentemente la 
siembra con el fin de observar en 
deta l le el desarrollo de las 
diferentes especies. 
La emergencia de las plántulas 
de las especies forrajeras y 
malezas, ocurre entre los 10 y 15 
días posteriores a la labor de 
siembra. Entre la cuarta y sexta 
semana posterior a la siembra es 
necesario identificar la presencia 
y en lo pos ib le estimar la 
población de plantas de las 
especies no deseadas (malezas) 
presentes en el cultivo, con el 
objeto de realizar el control de 
malezas que sea más apropiado 
para la e l iminación de esta 
competencia sobre la praderas. 
Las especies de la f a m i l i a 
Crucíferas (Ej.: yuyo, rábano), son 
malezas de fácil control en una 
siembra de pradera constituida 
por gramíneas y leguminosas. Sin 
embargo, existen otras especies 
de malezas de difícil control en 
Control Ventajas Desventajas 
Mecánico Mantiene los rendimientos del 
cultivo. 
Mantiene o reduce los costos 
en el control de las malezas. 
Airea el suelo, estimulando el 
desarrollo del cultivo. 
Reduce la polución. 
Deja mayor población de 
malezas que al usar 
pesticidas. 
La época de realización de 
las labores es crítica. 
Necesita condiciones más 
secas del suelo para operar 
Herbicidas Control casi total de las 
malezas. Es una labor 
rápida de realizar. 
Contribuye a la polución. 
Está sujeto a las 
fluctuaciones delprecio. 
Crea malezas resistentes, 
reduciendo la efectividad de 
los herbicidas. 
Envuelve riesgos de salud 
en su manipulación. 
Cuadro 3. Resumen ventajas y desventajas control de malezas. 
 
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Serie Actas N° 9 
 
una pradera mixta, especialmente 
porque los productos que 
controlan estas especies, también 
dañan o afectan a las leguminosas 
forrajeras acompañantes, como 
el trébol blanco y rosado. 
Las especies malezas de 
difíci l control en una pradera 
mixta en el s u r de Chi le, 
corresponden a la f a m i l i a 
Ranunculáceas (Ej. Botón de oro), 
Poligonáceas (Ej. : duraznillo, 
sanguinaria, romasa), Compuestas 
(Ej.: hierba del chancho, diente 
de león, cardos, etc.), entre las 
más comunes. 
Cuando la siembra de la 
pradera se realiza temprano en 
otoño (marzo), la primera 
utilización con animales puede 
ocurrir entre los 60 y 80 días 
posteriores a la siembra. Esto 
debería suceder entre la segunda 
quincena de abril y la primera 
semana de mayo o cuando las 
plantas for ra jeras están 
firmemente arraigadas y no son 
arrancadas al t i rar las con la 
mano. 
La primera utilización de 
la pradera debe realizarse con 
animales livianos (terneros), con 
al ta presión de pastoreo para 
evitar la selección del forraje y 
se obtenga un buen control de 
las malezas existentes. Lo ideal 
es implementar un sistema de 
pastoreo rotativo mediante el uso 
del cerco eléctrico, entregando 
una franja diaria o dos franjas por 
día. 
Las praderas de primer año 
no deben ser pastoreadas durante 
el invierno cuando el suelo está 
muy blando a consecuencia de 
las precipitaciones. El daño por 
pisoteo que se produce en la 
población de plantas es mayor 
que el beneficio que otorga el 
pastoreo. 
 
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3. LITERATURA 
 CITADA 
Instituto de Investigaciones Agropecuarias – Centro Regional de Investigación Remehue 
Serie Actas N° 9 
 
ÚLTIMOS AVANCES EN 
REGENERACIÓN DE PRADERAS 
Alfredo Torres B. Ing. Agrónomo M. Sc, 
INIA Remehue 
1. INTRODUCCIÓN 
Una pradera degradada, llega a 
esa condición principalmente por 
problemas de fertilidad de suelo, 
por daños a causa de un ataque 
de plagas y por otros factores de 
manejo que no se llevan en la 
forma adecuada. Existen dos 
estrategias para enfrentar este 
problema. Una de ellas es elevar 
el nivel de fertilidad del suelo a 
través de cultivos (cultivos 
tradicionales, cultivos 
suplementarios y praderas de 
rotación corta), hasta lograr un 
nivel de fertilidad adecuado para 
la siembra de una pradera con 
especies de alto valor forrajero 
como la ballica perenne, festuca, 
pasto ovillo y trébol blanco. Esta 
estrategia se debe ocupar cuando 
la pradera degradada está 
compuesta en un 100% por 
especies de bajo valor forrajero 
(chépica, poa, hierba del chancho, 
diente de león, siete venas, etc.). 
Cuando la pradera degradada 
presenta un pequeño porcentaje 
de especies de medio y/o alto 
valor forrajero (pasto dulce, 
bromo, alfalfa chilota y/o ballica 
perenne, pasto ovil lo, trébol 
blanco), existe la posibilidad de 
recuperarla a través de una serie 
de medidas de manejo de 
praderas como la sectorización 
del predio (praderas permanentes 
y sector de rotación), la regulación 
de la carga a n i m a l , el 
 
apotreramiento, el manejo de 
pastoreo, los cortes de limpieza, 
el control de plagas, el drenaje en 
suelos con problemas y la 
fertilización, además si existe la 
posibilidad, también se puede 
incluir el riego. 
De esta forma se puede llegar a 
una pradera mejorada, a la que, 
si es necesario, se le pueden 
introducir especies de alto valor 
f o r r a j e r o a través de la 
regeneración de praderas. 
La regeneración de praderas es un 
proceso mediante el cual se 
persigue incorporar semillas de 
especies de alto valor forrajero y 
fe r t i l i zan te en una pradera 
dominada por especies de bajo 
valor forrajero, pero de buena 
fertilidad, con un mínimo de 
alteración de la vegetación 
residente. 
Las ventajas que ofrece este 
sistema de mejoramiento, respecto 
a otros, son las siguientes: 
• Menor costo que la siembra 
tradicional. 
• R á p i d a r e s p u e s t a en 
producción de forraje y en 
utilización. 
• Disminuyen los problemas de 
erosión. 
• Menor alteración del suelo y 
de su actividad biológica, de 
manera significativa. 
• Mantiene una producción de 
forraje más estable en el 
tiempo. 
• Impide que el fósforo y otros 
nutrientes acumulados en los 
primeros centímetros del perfil 
del s u e l o sean llevados a 
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mayor profundidad (lo que 
ocurre al arar el suelo), donde 
las posibilidades de fijación 
son más altas y dificulta su 
captación por parte de las 
raíces (en balIicas el 70% de 
las raíces está entre 0 y 5 cm). 
• Disminuyen los problemas de 
descalce. 
• Posibilidad de ser realizado en 
condiciones de terreno no 
aptos para el s i s t e m a 
t r a d i c i o n a l (en sue los 
pedregosos, de topografía 
irregular, delgados, etc.) 
Por otra parte, la regeneración 
también presenta a l g u n a s 
limitantes, como los diferentes 
requerimientos de manejo en 
relación al método convencional 
y el riesgo de fracaso, más alto 
q u e en l o s métodos 
convencionales de siembra. 
En este artículo, sólo se analizarán 
factores en los cuales existe 
información reciente o que por 
diferentes motivos no están siendo 
utilizados correctamente en la 
práctica de esta tecnología. 
2. MÉTODOS DE 
REGENERACIÓN DE 
PRADERAS 
Balocchi y Cuevas (1982) señalan 
que existen, básicamente, cuatro 
métodos de regeneración de 
praderas: al voleo, utilizando 
potreros de sacrificio, a través del 
animal y con máquina. 
Con maquinaria especializada 
Con este método se persigue dejar 
el fertilizante y la semilla en línea. 
Se puede aplicar a situaciones de 
topografía plana a levemente 
ondulada. 
Las principales ventajas del 
método son las s iguientes: 
• La semi l la queda cubierta. 
• Hay menores pérdidas, ya sea 
por desecación o por 
depredadores. 
• Se obtiene una germinación 
más homogénea. 
• Se puede disminuir la dosis de 
semilla. 
• Se obtiene un mayor eficiencia 
en el uso del ferti l izante. 
E x i s t e n diferentes tipos de 
máquinas regeneradoras, que se 
detallan a continuación. 
Tipo cincel 
Utiliza un cultivador que deja un 
surco más ancho abajo que arriba, 
lo que minimiza las pérdidas de 
humedad y deja a la semil la 
cubierta con la pradera intacta. 
Su uso es aconsejable en sectores 
con problemas de bajo contenido 
de humedad. 
Los inconvenientes de esta 
máquina se producen cuando se 
cierra el surco, caso habitual en 
suelos arcillosos, lo que impide 
la germinación. 
Tipo zapata 
Deposita la semilla y el fertilizante 
a distintas profundidades en un 
surco de aproximadamente 7 cmde ancho, quedando todo cubierto 
por una cadena que va en cada 
surco. Con esto se favorece la 
conservación de la humedad y se 
reduce la competencia. 
En suelos con mal drenaje se 
acumula agua en los surcos. 
Cuando el microrrelieve del suelo 
es acentuado, la profundidad de 
siembra es desuniforme. 
Es apropiada para condiciones de 
suelo de extrema adversidad, 
como suelos compactados, 
pedregosos, enmalezados, etc. 
Tipo disco 
El disco forma una ranura donde 
cae la semilla y el fertilizante. 
Los discos son independientes, lo 
cual ayuda a controlar la 
profundidad de siembra. El surco 
queda muy abierto, por lo que 
hay pérdida de sem i l l a por 
depredación de aves y excesiva 
deshidratación. Se podría evitar 
esto con una pasada de rastra 
liviana. 
La semilla de gramínea queda 
depositada junto al fertilizante, lo 
que puede d i s m i n u i r la 
germinación. En este caso debería 
evitarse el uso de fertilizantes 
amoniacales en dosis altas o tratar 
de regenerar en suelos con alto 
contenido de humedad. Otra 
característica de esta 
máquina es que tiene reducido 
requerimiento de tiro. 
Tipo disco rotativo 
Un pequeño disco rotativo va 
cultivando una franja angosta de 
tierra, donde se deposita la semilla 
y el fertilizante, tapados por una 
adecuada cantidad de tierra, la 
que es compactada por un disco 
posterior. La semilla de gramínea 
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es depositada j u n t o a los 
fertilizantes. 
Tipo disco triple 
Es una modificación a la 
regeneradora de disco; posee un 
disco frontal que actúa como un 
cuchillo cortando la pradera, con 
dos discos posteriores que abren 
el suelo y permiten que la semilla 
y el fertilizante caigan a una 
profundidad correcta. 
 Con este tipo de maquinaria se 
produce una mayor compactación 
del fondo del surco, quedando la 
semilla poco cubierta. A su vez, 
el requerimiento de fuerza para 
la penetración es dos veces mayor 
para el disco triple que para el 
cincel o zapata. 
3. FACTORES DE MAYOR 
IMPORTANCIA EN 
REGENERACIÓN DE 
PRADERAS 
Época de realización 
Es uno de los aspectos más 
importantes en una regeneración. 
Los p r i nc ipa les factores a 
considerar son la precipitación y 
temperatura, por ser los que más 
afectan la germinación y la 
emergencia. Desde este punto de 
vista, y considerando la menor 
agresividad de la pradera a fines 
de verano, ésta sería la época 
óptima, después que las primeras 
l luvias permitan una buena 
penetración de la máquina; es 
importante realizarla temprano, 
de tal forma, que se consiga un 
buen arraigamiento para evitar 
descalce por efecto de heladas. 
También es fundamental que las 
plantas entren al invierno con un 
buen nivel de carbohidratos de 
reserva, que le permitan sobrevivir 
en esta época desfavorable e 
i n i c i a r el c rec im ien to de 
primavera. En caso de realizar 
regeneraciones a fines de invierno, 
éstas deben realizarse temprano, 
para permitir que las plantas 
logren un buen desarrollo radical 
antes del período de sequía estival. 
En esta época es muy fuerte la 
competencia con malezas, por lo 
que se hace fundamental realizar 
controles químicos de la 
vegetación residente y estar atento 
a colonizaciones posteriores. 
Selección de especies a 
introducir 
Debe considerarse el medio 
ambiente y el manejo al cual se 
va a someter la pradera. Una 
característica importante en las 
especies debe ser su agresividad, 
el alto poder germinativo de las 
semillas y la rápida germinación 
y establecimiento. Por este 
motivo, son deseables especies 
anuales o de rotación corta, como 
las ballicas; también se han 
obtenido buenos resultados con 
ballicas perennes, no así con pasto 
ovillo, festuca y trébol blanco. 
Un buen éxito se obtiene con 
trébol subterráneo. Con trébol 
rosado, aunque t i e n e una 
agresividad mayor que las dos 
leguminosas anteriores, no ha 
tenido éxito en las regeneraciones, 
excepto en aquéllas a través del 
tracto digest ivo del animal. 
El gasto en semillas, constituye un 
alto porcentaje del costo total de 
la regeneración; por este motivo, 
se debe asegurar el uso de semillas 
de alta calidad. Debe existir plena 
seguridad de comprar la semilla 
de la especie y variedad que se 
ha elegido, no poseer impurezas 
(semi l l as de malezas) que 
dificultan el establecimiento y 
debe tener un buen poder 
germinativo. Las semillas se ven 
afectadas por la edad y 
condiciones de almacenamiento, 
siendo la humedad y altas 
temperaturas, las condiciones más 
adversas. Si la semilla presenta 
un poder germinativo inferior al 
normal, se puede corregir 
aumentando la dosis de siembra; 
sin embargo, si es inferior al 50% 
las plántulas serán débiles y no 
resistirán condiciones adversas de 
c l i m a ni de competencia. 
Desinfección de semillas 
En la zona sur, no hay un 
d i a g n ó s t i c o y prospección 
fitopatológico de las praderas, por 
lo tanto, no se puede sacar 
ninguna conclusión al respecto 
en forma categórica. Sin embargo, 
a través de otro t i p o de 
investigaciones se puede inferir 
que en el caso de siembra de 
praderas permanentes no hay 
problemas de gran importancia, 
y éstos son superados por las dosis 
de semillas utilizadas y el gran 
poder de macollamiento de las 
gramíneas. En cambio, en la 
regeneración de praderas, se 
observan mayores problemas en 
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algunas ocasiones. La infección 
puede producirse por el uso de 
semilla y/o suelo infectado, por 
lo tanto, el daño se presenta en 
la germinación de la semilla o a 
través de la muerte de plantas 
(caída de plantas) . Existen 
antecedentes claros de la 
Estación Experimental Carillanca, 
que la práctica de la desinfección 
de semillas de gramíneas produce 
algunos problemas, como el 
retraso inicial de la germinación 
de la semilla, en la emergencia 
de plantas y una menor altura y 
producción posterior. S i n 
embargo, donde el problema de 
caída de plantas es grave, debe 
usarse esta tecnología. 
Dosis de semilla 
Para lograr una pradera densa se 
debe considerar principalmente 
el tamaño de la semilla y la 
agresividad de la especie. La dosis 
debe incrementarse, al menos, en 
un 50%, en relación a una 
siembra, para compensar las 
pérdidas, generalmente más altas, 
debido a las condiciones adversas 
que tiene la semilla para germinar 
y emerger. 
En general, se deben ocupar 22 a 
30 kg de ballica perenne o 30 a 37 
kg de festuca o 19 a 25 kg de pasto 
ovillo, en todos los casos con 3 a 
5 kg de trébol blanco, para praderas 
permanentes. En praderas de 
rotación, se deben usar de 30 a 37 
kg de ballicas anuales o bianuales 
con 12 a 18 kg de trébol rosado. 
La dosis más baja corresponde a 
condiciones óptimas en el manejo 
pre y post-regeneración. 
Fertilidad del suelo y 
fertilización 
El nivel de fertilidad del suelo es 
un factor de suma importancia, 
pues, si es bajo, es posible que se 
logre una buena emergencia, pero 
no una buena persistencia de las 
especies introducidas, aunque se 
ap l ique una dosis a l t a de 
fe r t i l i zan te al momento de 
regenerar. 
Profundidad de siembra 
Lograr la adecuada profundidad 
de siembra es uno de los 
problemas que t i e n e la 
regeneración de praderas. Aquella 
debe ser bastante superficial y 
pareja; como regla general, puede 
decirse que la profundidad debe 
ser el doble del diámetro mayor 
de la semilla. Hay que considerar, 
además, la textura del suelo; por 
ejemplo, en suelos arcillosos la 
semilla debe quedar a menor 
profundidad que en suelos 
arenosos, debido a la baja 
capacidad de retención de agua 
de estos últimos. 
 Las semi l las de gramíneas 
perennes tienen un diámetro de 
5 a 6 milímetros, por lo tanto, no 
deben ser sembradas a más de 1,0 
a 1,2 centímetros de profundidad. 
Los tréboles rosado y blanco, 
tienen 2 y 1 milímetro de 
diámetro, respectivamente,por lo 
tanto, no debe ir con la gramínea, 
debe ser depositada en la línea, 
pero sobre el sue lo y, en lo 
posible, con el posterior paso de 
un rodillo. 
Manejo previo a la 
regeneración, control de la 
vegetación residente 
Este constituye un factor decisivo en 
el éxito de una regeneración de 
praderas. Como primera medida, al 
momento de regenerar, se debe tener 
la pradera con la menor altura 
posible; esto se puede lograr con un 
pastoreo intenso, en lo posible con 
ovinos, dejando un residuo menor 
a 3 cm. Otra manera de reducir la 
competencia es a través del uso de 
productos químicos que controlan 
la vegetación. 
El uso de productos químicos para 
eliminar la vegetación, es una 
tecnología que ha incrementado su 
frecuencia de uso en los últimos 
años. La elección del herbicida a 
utilizar dependerá del tiempo de 
control que se pretenda. Un 
efecto prolongado se puede 
lograr con glifosato, posee un amplio 
espectro de control de gramíneas y 
de especies de hoja ancha, es de 
acción lenta, por lo tanto, es 
aconsejable realizar su aplicación, 
al menos, 15 días antes de la 
regeneración. 
Un control no selectivo y por un 
período de tiempo más corto se 
obtiene con paraquat, desecante 
foliar de acción rápida, el cual 
también debe ser aplicado algunos 
días antes de la regeneración. 
El u s o de los productos 
mencionados, debido a su eficiente 
control de la vegetación, permite 
realizar regeneraciones en momentos 
de gran competencia, como fines 
de invierno-comienzos de primavera. 
Por otra parte, la ausencia total de 
vegetación, puede provocar que las 
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plantas nuevas sean fuertemente 
atacadas por insectos del suelo y del 
follaje. Finalmente, aunque no 
existen antecedentes nacionales, se 
cree que la descomposición de la 
vegetación residente, estaría 
produciendo algunos compuestos 
q u í m i c o s q u e afectarían 
negativamente la germinación y 
establecimiento de plantas nuevas. 
Basado en estos antecedentes, se 
planteó un proyecto de investigación 
en el Centro Regional de 
Investigación Remehue del INIA, 
cofinanciado por Moviagro y Norsk 
Hydro y cuyos resultados se 
presentan en este seminario, 
proponiéndose para tal efecto los 
objetivos de mejorar la productividad 
de las praderas en términos de 
rendimiento y composición botánica 
mediante la incorporación de 
semillas al suelo con un mínimo de 
alteración del mismo. 
La investigación se realizó en la 
provincia de Osorno, Xa Región, 
zona sur de Chile (40e35' 
Latitud sur). El clima es 
templado. La temperatura 
media anual es de 11.5ºC y las 
precipitaciones medias anuales de 
1200 a 1500 mm. Se regeneró en 
Marzo 1998 con Lolium perenne 
variedad Nui (22kg/ha) y con 
Trifolium repens cultivar Aran 
(4kg/ha), con equipo ATCHINSON 
en hileras a 15 cm. Se fertilizó con 
50 u/ha de N, 150 u/ha de P2O5 y 
50 de u/ha KCI. Se consideraron 5 
tratamientos con 3 repeticiones: 
(1)Pradera Degradada Testigo, 
(2)Pradera Degrad.+ Fertilización, 
( 3 ) P r a d e r a 
Degrad.+Fert. +Regeneración, 
(4)Pradera Degrad.+Fert.+Reg. con 
Roundup [aplicación de Roundup 
20 cm, Además se determinó la 
variación en la composición 
botánica (Dic 98') con respecto al 
composición inicial de la pradera 
residente. Se utilizaron parcelas de 
7.2 * 20 m (144m2) cortando los 
6m2 centrales. 
La producción total en kg MS/ha/año 
se observa en la Figura 1, 
correspondiendo al tratamiento 
 
Figura 1. Producción (kg de m.s./ha/año) y composición botánica (%) 
. en la primera temporada. 
 
30 días antes de la regeneración] y 
(5)Pradera Degrad.+Fert.+Reg. con 
Barbecho Químico [aplicación de 
mezcla Roundup + Unifilm + Aliado 
90 días antes de regenerar y solo 
Roundup 30 días antes para eliminar 
rebrote]. Se determinó la producción 
de Materia Seca (kg m.s./ha) 
mediante cortes cada vez que la 
pradera alcanzó una altura de 15 a 
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Barb. Quím. la mayor producción 
obtenida. Al comparar la relación 
porcentual entre los tratamientos en 
función al rendimiento del testigo 
se obtiene que la pradera fertilizada 
(2) supera en un 40% al rendimiento 
del testigo, el regenerado (3) lo 
supera en un 67%, el tratamiento 
con Roundup (4) lo aventaja en un 
61% y el barbecho químico (5) 
obtiene un 136% de mayor 
producción en comparación con el 
tratamiento testigo. 
En relación a la composición 
botánica, tenemos que en el trébol 
blanco y material muerto, no se 
observa una mayor variación entre 
los tratamientos. Las especies de 
hoja ancha siguen una secuencia 
decreciente en los tratamientos (1), 
(2), (3) y (4), pero en el tratamiento 
(5) se acentúa esta disminución, no 
e x i s t i e n d o d i f e r e n c i a s 
estadísticamente significativas para 
estas tres fracciones en la 
composición botánica. 
Con respecto a la participación de 
otras gramíneas, éstas son 
mayoritarias en el tratamiento testigo, 
disminuyendo gradualmente en los 
tratamientos (1), (2) y (3), hasta 
alcanzar el menor porcentaje de 
participación en los tratamientos (4) 
y (5); el comportamiento de las 
ballicas ocurre en forma inversa, el 
valor más bajo está asociado al 
tratamiento testigo para ir 
aumentando su participación en los 
tratamientos intermedios obteniendo 
el máximo valor en el tratamiento 
de barbecho químico. Se 
e n c o n t r a r o n d i f e r e n c i a s 
estadísticamente significativas para 
ambas fracciones de especies. 
En la segunda temporada, las 
tendencias son similares, pero con 
menores producciones, 2,7 ton 
m.s./ha para el testigo y 6,7 ton 
m.s/ha, para el barbecho químico. 
De este trabajo se concluye que la 
producción de forraje es mayor en 
el tratamiento f e r t i l i z a d o , 
acentuándose aún más en los 
tratamientos regenerados, siendo la 
regeneración con Barbecho químico 
la con mayor producción. Con 
relación a la composición botánica 
se puede observar un incremento 
en el porcentaje de ballicas en los 
tratamientos fertilizados y en los 
regenerados, de estos últimos 
destacan aquellos donde se 
emplearon herbicidas para el control 
de la vegetación. 
En el trébol blanco se observa una 
tendencia similar al de la ballica, 
pero con un bajo establecimiento 
en general. 
Manejo posterior a la 
regeneración 
El control de la vegetación 
después de la regeneración, es 
v i t a l para m i n i m i z a r la 
competencia de la pradera 
residente; ello se puede lograr a 
través del pastoreo, teniendo la 
precaución de retirar los animales 
antes de la emergencia de las 
especies introducidas para no 
provocar daño por pisoteo. El 
primer pastoreo después de la 
emergencia debe efectuarse 
cuando las especies introducidas 
estén firmemente arraigadas, de 
manera que lo resistan sin ser 
arrancadas. Este talajeo se justifica 
siempre que la competencia de 
la pradera residente sea fuerte (5 
a 7,5 cm de altura); debe realizarse 
con una alta presión de pastoreo 
para evitar la selectividad. 
Pastoreos de s i m i l a r e s 
características deben realizarse 
durante el primer año. 
Producto de la acción de la 
m á q u i n a al regenera r , 
frecuentemente se remueve el 
t e r reno , e s t o p r o v o c a 
generalmente la germinación de 
malezas, para lo cual habría que 
considerar las medidas de control 
que correspondan en cada caso 
en particular, ya sea cortes o 
pastoreos y/o control químico. 
4. COSTOS DE 
REGENERACIÓN 
Una de las principales ventajas 
que ofrece la regeneración de 
praderas es el menor costo que 
tiene, en comparación con la 
siembra directa. 
Al comparar costos entre una 
siembra y una regeneración, se 
puede decir que los costos de 
semillas son mayores para la 
regeneración en un 30% 
aproximadamente (mayores 
dosis), siendo similares para 
f e r t i l i z a c i ó n entre ambos 
sistemas de establecimiento. 
Donde se producengrandes 
diferencias es en la preparación 
de suelos y establecimiento; la 
siembra, en este caso, supera en 
más de t r e s veces a la 
regeneración. Finalmente, se 
puede decir que el costo de la 
siembra es aproximadamente un 
3 5 % s u p e r i o r al de la 
regeneración. 
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Serie Actas N° 9 
 
5. LITERATURA 
CITADA 
ALOMAR, D. y ULLOA, V. 1994. 
Recuperación fecal y viabilidad 
de semillas de tres gramíneas 
forrajeras consumidas por ovinos. 
Agro Sur 22 (2 ) : 107 -114. 
ALOMAR, D.; WILHELM, A. y 
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Universidad Austral de Chile. 
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BALOCCHI, O.; FUENTES, J.R. y 
JELVES, M. 1989. Efecto de la 
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Chile. Agro Sur 17(1): 41-49. 
BALOCCHI, O. y LÓPEZ, I. 1994. 
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Latrille, L. (ed.). Producción 
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Producción de leche, parámetros 
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Austral de Chile, Facultad de 
Ciencias Agrarias. Valdivia, Chile. 
104 p. (Tesis para optar al título 
de Lie. Agr.). 
GOIC M., L. 1969. Potencialidad 
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GUTIÉRREZ G., G.; FIGUEROA 
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GUTIÉRREZ V., T. 1 9 7 7 . 
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Valdivia, Universidad Austral de 
Chile, Facultad de Ciencias 
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al título de Ing. Agr.). 
NÚÑEZ, V. 1984. Productividad 
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con trébol subterráneo (Trifolium 
subterraneum L.) en su segundo 
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Austral de Chile, Facultad de 
Ciencias Agrarias. Valdivia, Chile. 
114 p. (Tesis para optar al título 
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RIOS C, L. 1983. Productividad 
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pastoreo con ovinos. Universidad 
Austral de Chile, Facultad de 
Ciencias Agrarias. Valdivia, Chile. 
79 p. (Tesis para optar al título de 
Ing. Agr.). 
SANTAMARÍA G., R. y SOTO 
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alternativas de mejoramiento para 
una pradera natural de baja 
p r o d u c c i ó n u t i l i z a d a en 
producción de leche. Universidad 
Austral de Chile, Facultad de 
Ciencias Agrarias. Valdivia, Chile. 
79 p. (Tesis para optar al título de 
Ing. Agr.). 
SIEBALD Sch., E.; MATZNER K., 
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Mejoramiento de praderas 
naturales del Llano Central de la 
X Región. Agricultura Técnica 
(Chile) 43: 313-321. 
SIEBALD Sch., E.;TEUBER K., N.; y 
MATZNER K., M. 1985 . 
Introducción de trébol rosado en 
praderas permanentes. Instituto 
de Investigaciones Agropecuarias, 
Estación Experimental Remehue. 
Área Producción Animal. Informe 
Técnico 1984/85. 242 p.* 
TRUJILLO C, V. 1983 . 
Regeneración de una pradera 
natural de la zona sur con trébol 
s u b t e r r á n e o ( T r i f o l i u m 
subterraneum L.). Universidad 
Austral de Chile, Facultad de 
Ciencias Agrarias. Valdivia, Chile. 
64 p. (Tesis para optar al título de 
Ing. Agr.). 
 
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Serie Actas N° 9 
 
ESTRATEGIAS DE FERTILIZACIÓN 
DE PRADERAS PERMANENTES 
Pablo Undurraga D. / Ing. Agr. INIA Remehue. 
Rene Bernier V. / Ing, Agr., M. Sc. INIA Remehue. 
1. INTRODUCCIÓN. 
La superficie de praderas en la 
Décima Región alcanza al 11% 
del total del país, representadas 
por 1,48 millones de hectáreas. 
Un 38% son mejoradas y un 13% 
son sembradas. Ambos tipos 
presentan especies forrajeras de 
buena calidad, que con una 
adecuada fertilización y manejo 
del pastoreo pueden proporcionar 
la mayor p a r t e de l o s 
requerimientos nutritivos para los 
bov inos de carne y leche. 
La producción animal en esta 
Región representa un importante 
aporte al total nacional, con 
alrededor del 45% de la carne y 
el 65 % de la leche. Esto en su 
mayor proporción se basa en el 
recurso pradera. 
Se entregan recomendaciones 
generales de fertilización de 
praderas, considerando distintos 
niveles de fertilidad y acidez de 
un suelo representativo de la 
Región, para sustentar un nivel de 
producción de forraje que permita 
el pastoreo y el rezago para 
ensilaje. La fertilización de 
praderas no sólo 
significa mejorar la fertilidad del 
suelo y la producción de forraje, 
sino también se produce un 
traspaso de minerales y nutrientes 
a los animales. Esto tiene una 
importancia relevante en la 
conversión de la materia seca de 
la pradera en producto animal. 
La adecuada nutrición de la planta 
con nitrógeno aumenta el 
 
contenido de proteína del forraje, 
su adecuada relación con azufre 
mejora la calidad de la proteína, 
el sodio mejora la producción y 
contenido de materia grasa en 
producción de leche, el calcio y 
el magnesio son importantes en 
la composición del esqueleto y 
en la leche. 
2. DIAGNOSTICO DE 
FERTILIDAD DEL SUELO. 
Para iniciar un plan de producción 
agrícola e f i c i e n t e se debe 
diagnosticar la condición de 
suministro de los elementos 
esenciales del suelo y establecer 
las estrategias y soluciones para 
que el nivel de dichos nutrientes 
sea suficiente para el crecimiento 
óptimo de los cultivos y praderas. 
La explotación agrícola de los 
suelos ha producido con el tiempo 
un desbalance entre las entradas 
y las salidas de algunos nutrientes 
esenciales. Como consecuencia 
de esto, se ha producido un déficit 
en el aporte de los elementos que 
es necesario suplir mediante la 
fertilización. 
El método más utilizado para 
realizar un buen diagnóstico de la 
fertilidad es el análisis químico de 
suelos. Este consiste en extraer, 
mediante una solución química, 
una fracción del elemento esencial 
para el crecimiento de las plantas 
y luego medir la cantidad 
solubilizada con procedimientos 
q u í m i c o s adecuados. Los 
resultados analíticos se deben 
 
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calibrar en terreno para darles un 
significado agronómico y para que 
tengan utilidad para la generación 
de recomendac iones de 
fertilización. 
Las recomendaciones de 
fertilización en el caso de las 
praderas, pueden estar orientadas 
a fertilizaciones de corrección, 
fertilizaciones de producción y/o 
fertilizaciones de mantención. 
Los suelos de la Décima Región, 
son de origen volcánico, lo que 
los caracteriza por especiales 
propiedades químicas, que afectan 
las necesidades de fertilización. 
Los suelos derivados de cenizas 
volcánicas del sur de Chile poseen 
una alta capacidad de retención 
de fósforo (P), lo que obliga a la 
aplicación de elevadas dosis de 
este elemento para la producción 
de cultivos y praderas. 
Junto con las severas deficiencias 
de fósforo, se debe tener presente 
la marcada acidez de los suelos, 
natural o inducida, que a su vez 
afectará la fijación del P, la 
toxicidad de aluminio que afecta 
el desarrollo y establecimiento de 
especies forrajeras especialmente 
a l gunas gramíneas y las 
leguminosas, se afecta la actividad 
microbiana y la mineralización de 
la materia orgánica que puede ser 
una importante fuente de 
minerales,como el nitrógeno, y la 
fijación de este elemento por las 
leguminosas. 
En general, la acidez afecta 
severamente la disponibilidad de 
macro y micronutrientes y la 
eficiencia de los fertilizantes. 
producción, compuesta de 
especies y variedades mejoradas 
que requieren un nivel de acidez 
mínimo, para un adecuado 
desarrollo y que sólo necesite de 
una fertilización de mantención. 
En suelos trumaos, para sustentar 
praderas de alta producción en 
pastoreo con vacas lecheras, se 
requiere un nivel óptimo de 
fertilidad del suelo. (Cuadro 1), 
La extracción de nutrientes por 
una pradera de alta producción 
(12.000 kg materia seca) y bien 
fertilizada se presenta en el 
Cuadro 2. 
 
Cuadro 1: Nivel óptimo de fertilidad de un suelo trumao, para una 
fertilización de mantención. 
 
 Nivel Óptimo 
pH agua 5.8 6.2 
pH Ca CI2 5.2 5.4 
% Sat Aluminio menor 5.0 
S. Bases 11.6 16.9 
Ca cmol(+)/kg 9.0 13.0 
Mg cmol(+)/kg 1.8 2.6 
K cmol(+)/kg 0.5 0.8 
Na cmol(+)/kg 0.25 0.5 
P ppm 20 25 
S ppm 20 25 
Cuadro 2: Extracción de nutrientes promedio de una pradera de alta 
 producción. 
 %de la 
M. Seca 
Extracción 
neta kg/ha 
Unidades 
kg/ha 
Nitrógeno N 3 420 420 
Fósforo P 0.45 63 144 
Potasio K 3 420 504 
Magnesio Mg 0.21 29.4 41 
Azufre S 0.6 84 84 
Sodio Na 0.6 84 84 
Calcio Ca 2.4 336 470 
3. FERTILIDAD ÓPTIMA 
 DE SUELOS PARA 
PRADERAS DE ALTA 
PRODUCCIÓN. 
Como se mencionó anteriormente 
es muy importante conocer la 
realidad química de los suelos en 
que se está desarrollando la 
actividad productiva, conocer sus 
características y los niveles de 
fertilidad mediante el análisis de 
suelos. 
El n i v e l a d e c u a d o de 
disponibilidad de los nutrientes 
definido para una pradera de alta 
 
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Para realizar una fertilización 
equilibrada es necesario conocer 
la exportación de nutrientes del 
sistema lechero. Esto ocurre por 
la extracción a través de la 
producción de leche en base al 
consumo directo de la pradera. 
La exportación neta para una 
producción de leche de 10.000It 
en términos de nutrientes se 
 
Nutriente Unidad Raza 
Jerzey 
Raza 
Frison 
Nitrógeno Kg 63 49 
Fósforo Kg 11 9 
Potasio Kg 14 16 
Calcio Kg 13 11 
Magnesio Kg 1 1 
Sodio Kg 3 3 
Zinc Gr. 3,4 3.3 
Hierro Gr. 6 9.8 
Manganeso Gr. 1.5 2.4 
Cobre Gr. 3.2 2 
Aluminio Gr. 13.5 15.9 
Cuadro 4: Dosis anual de fertilización de mantención para un nivel 
óptimo de f e r t i l i d a d en el suelo (según cuadro 1) 
 
Fertilización 
Rango Anual 
(kg/ha) 
Parcialización 
Otoño-Primavera 
% 
Nitrógeno N 100 120 30-35-35 
Fósforo P2O5 90 110 40-60 
Potasio K2O 50 60 40-60 
Magnesio MgO 25 35 0-100 
Azufre S 40 50 0-100 
Boro B 1 2 0-100 
Cobre Cu 2 4 0-100 
Carbonato Calcio (1) CaCO3 250 
Épocas de fertilización: 
Con el objeto de estimular el 
crecimiento de la pradera a la 
salida del periodo estival, es 
aconsejable la aplicación de 
fertilizantes en otoño, como es 
tradicional en la zona. 
Fines de febrero a primera 
quincena de marzo: 
Las condiciones climáticas 
imperantes en la Décima Región 
durante el invierno, no favorecen 
el crecimiento de las praderas, 
debido fundamentalmente a las 
bajas temperaturas ambientales. 
Además, estos mismos factores 
tampoco f a v o r e c e n la 
mineralización de nutrientes del 
suelo, por lo que la disponibilidad 
es baja, sumado a la lixiviación 
de algunos de ellos, por efecto de 
las lluvias. 
La fertilización se recomienda 
realizarla a salidas de invierno o 
principios de primavera según las 
condiciones climáticas imperantes. 
Primera quincena de agosto (según 
condiciones climáticas) 
Durante la primavera se deberá 
hacer las apl icaciones de 
fertilizantes nitrogenados en dos, 
tres o cuatro parcialidades. 
Para praderas que se rezagan para 
conservación de forraje se debe 
aplicar una dosis adicional de 
nitrógeno para estimular el 
crecimiento del forraje. 
(1): anual para uso de urea (aplicación cada 3 años) 
presenta en el cuadro 3. 
Mantención del nivel 
óptimo de fertilidad. 
Las dosis de fer t i l i zac ión, 
según anál is is de suelo, para 
producir 12.000 kg de materia 
seca de praderas, aparece en 
el Cuadro 4. 
Cuadro 3. Exportación de nutrientes minerales en leche de dos 
 razas de vacas en base a 10.000 lt. 
 
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Corrección de la fertilidad de un 
suelo de nivel medio. 
En praderas permanentes en un 
suelo trumao de nivel medio de 
fertilidad, es necesario aplicar dosis 
mayores de fertilizantes para 
c o r r e g i r gradualmente l as 
deficiencias que presenta el suelo 
para alcanzar los niveles óptimos. 
Posteriormente se deben aplicar 
las dosis de mantención que se 
han recomendado anteriormente. 
Una c o n d i c i ó n común de 
encontrar en suelos trumaos con 
praderas, es que éstos presentan 
Cuadro 5: Nivel medio de fertilidad de un suelo trumao de la 
Décima Región 
 
 Nivel Medio s. Osorno 
pH agua 5.4 5.6 
pH Ca CI2 4.8 5.0 
% Sat Aluminio 5.0 10.0 
S. Bases 5.2 7.8 
Ca cmol(+)/kg 4.0 6.0 
Mg cmol(+)/kg 0.8 1.2 
K cmol(+)/kg 0.3 0.4 
Na cmol(+)/kg 0.1 0.2 
P ppm 12 17 
S ppm 6 12 
Cuadro 6: Dosis anual de fertilización de corrección para un nivel 
medio de fertilidad en el suelo (según cuadro 5) 
 
Fertilización (3) Rango Anual 
(kg/ha) 
Parcialización % 
Otoño-Primavera 
Nitrógeno N 80 100 30-35-35 
Fósforo P20s 145 165 40-60 
Potasio K2O 80 100 40-60 
Magnesio MgO 40 50 0-100 
Azufre S 60 80 0-100 
Carbonato (2) CaCo3 2600 
Hay que recordar que la 
productividad de una pradera 
permanente (de composición 
mixta) también depende del 
manejo y utilización que se lleve 
a cabo durante la temporada. Es 
de importancia relevante el 
m a n e j o d e l p a s t o r e o , 
especialmente la altura de la 
pradera ya que si se utiliza muy 
intensivamente, dejándola crecer 
poco y con residuos bajos, se 
afectará la sobrevivencia. Al 
contrario si se deja encañar o no 
se pastorea con cerco eléctrico, 
en forma rotativa, la calidad 
nutritiva disminuirá dado que los 
minerales y las proteínas se diluyen 
y aumenta las fibra de los pastos. 
De esta forma no se aportará lo 
necesario para las necesidades de 
producción y mantención de los 
animales. 
4. USO ESTRATÉGICO 
DE NITRÓGENO EN 
PRADERAS 
La composición botánica de la 
mayoría de l as praderas 
permanentes de la Décima Región 
presenta un claro predominio de 
gramíneas, lo que hace muy 
notoria la respuesta de éstas a la 
aplicación de nitrógeno. Además 
debido al bajo contenido de 
materia orgánica fácilmente 
mineralizable (N potencialmente 
mineralizable), el aporte de N por 
parte del suelo es generalmente 
bajo, dependiendo de l a s 
condiciones ambientales y de 
fertilidad del suelo, 
un nivel medio de fertilidad, como 
se indica en el Cuadro 5. 
Según las normas de fertilización 
vigentes en el Servicio de Análisis 
de Suelos de INIA Remehue, para 
corregir el nivel medio de fertilidad 
que se señala en el Cuadro 5, se 
sugiere aplicar las dosis 
recomendadas en el Cuadro 6 por 
tres años, con aplicaciones de cal 
en dos parcialidades (años). 
Luego del tercer año, 
dependiendo de la evolución del 
nivel de fertilidad y de la 
producción de la pradera, se 
deberá pasar a las dosis de 
mantención descritas 
anteriormente. 
 
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fundamentalmente, presentando 
marcadas variaciones durante el 
año. 
El uso de nitrógeno en praderas se 
ha ido incrementando en los 
últimos años, en especial en 
sistemas de alta producción, 
alcanzando dosis de 100 a 200 
Kg de nitrógeno por

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