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335 Recursos no vivos sus eficiencias alcanzan 30 a 35%. Sin embargo, los combustibles fósiles se están extinguiendo y en el futuro, serán necesarios otros métodos de generación de energía alternativa y renovable, como la energía producida por las plantas OTEC. Desde que Jacques D’Arsonval planteó su idea de utilizar la energía termal del océano en 1881, los sistemas OTEC han variado en su producción eléctrica, con rangos de 22 kW de energía gruesa en una planta piloto en 1930 hasta el récord de 255 kW de energía gruesa (103 kW de energía neta) en una planta en Kona-Hawai, que además producía 23 litros de agua desalinizada por minuto. Neta se refiere a la electricidad producida por la planta después de sustraer la energía requerida para hacer funcionar el sistema. Se estima que en un año, la energía solar absorbida por el océano sea de al menos 4 000 veces la energía que actualmente consume la humanidad. Se necesitaría sólo un 1% de la energía renovable que podría producir OTEC, con un rendimiento del 3% para satisfacer todas las necesidades energéticas actuales. Para que estas plantas OTEC sean adecuadas, se requieren fuentes termales y una distancia corta de la costa. Los parámetros a identificar son: gradientes de temperatura entre 0 y 1 000 m y la distancia desde esta fuente a la costa. Muchos países en vía de desarrollo podrían tener acceso a la energía de OTEC, ya que cuentan con este gradiente de temperatura de 20°C, dentro de una distancia de la costa menor a 25 km en los primeros 1 000 m debajo de la superficie del mar. Colombia cuenta con dos cuencas oceánicas que cumplen con el requisito para producir energía maremotérmica. Es por esto que el Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas del Caribe (CIOH) de la Armada Nacional de Colombia, en conjunto con universidades nacionales e internacionales, están evaluando los lugares donde sería factible colocar una planta OTEC en el futuro, debido a su potencial energético. Las islas del Caribe han sido identificadas como sitios adecuados para generar electricidad y agua desalinizada, por lo que este método podría ser especialmente útil en el Archipiélago de San Andrés y Providencia y otras regiones insulares y costeras del país (Figura 5.5).
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