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Cátedra de Cirugía y Anestesiología Facultad de Ciencias Veterinarias Universidad Nacional del Nordeste VENOCLISIS, CANALIZACION ENDOVENOSA AÑO 2020 VENOCLISIS Son las maniobras que se realizan para administrar directamente líquidos o fluidos en una vena periférica, mediante la introducción de un catéter en el vaso. Se pueden introducir grandes cantidades de líquidos y por un tiempo prolongado (horas- días) CATETERES ENDOVENOSOS 1) DEFINICIÓN: Se denomina así a aquellos elementos que se utilizan para proporcionar fluidos intravenosos o para el acceso intravascular destinado a la administración de medicamentos o extracción de muestras de sangre. 2) TIPOS DE CATÉTERES: En los animales de compañía se utilizan fundamentalmente tres tipos de catéteres: a.- Catéteres de agujas con alas (Butterfly) b.- Catéteres de inserción por dentro de la aguja (Venocath, Intracath) c.- Catéteres de inserción por fuera de la aguja (Abbocath, Terumo, Angiocath) A) Catéteres de aguja con alas: Están diseñados para la administración a corto plazo de fluidos intravenosos, se pueden utilizar para la administración temporaria de fluidos, pero no se recomienda su uso en pacientes que serán anestesiados, ya que se salen de vena con mucha facilidad, infiltrando los tejidos adyacentes y perdiendo además la vía endovenosa. Se utilizan para el acceso vascular (extracción de muestras de sangre, administración de medicamentos). Se comercializan estériles con envoltura de nylon o papel. Son tubuladuras plásticas flexibles que constan, en un extremo, de una aguja con aletas laterales que facilitan la manipulación y fijación del mismo, y en el otro un adaptador que permite conectarlo a una aguja o perfus. La aguja se presenta cubierta por un protector de plástico rígido, y el conector por un tapón plástico a rosca o a presión. Tanto este como el protector de la aguja, tienen como función mantener la esterilidad una vez retirado el butterfly del envoltorio. Para su colocación se retira previamente el tapón del conector. El flujo continuo de sangre dentro de la tubuladura confirma su correcta colocación en la vena. Están disponibles en agujas de calibre variable de 16 a 27 y con longitudes de 1,6 a 2,5 cm. Si bien este tipo de catéteres son económicos y de fácil empleo, suelen provocar más trastornos de los deseables. La colocación de una aguja metálica fina dentro de una vena lleva a la necesidad de crear una inmovilidad completa por parte del paciente que a veces resulta imposible de lograr. Si además, la medicación debe ser prolongada en el tiempo, nos obliga a la punción frecuente y reiterada de venas superficiales con las consiguientes complicaciones (flebitis, periflebitis, trombos,etc) que las inutilizan. Asimismo, cuando las drogas a administrar resultan peligrosas para el operador o muy irritantes en caso de extravasación, se incrementan los problemas potenciales. En la siguiente tabla se detallan las diferentes presentaciones de los catéteres considerando el diámetro de la aguja: Nro. (Gauge) Diámetro de la aguja Diámetro de la tubuladura 25G 0.3mm 2mm 23G 0.4mm 2mm 21G 0.6mm 2mm 19G 0.8mm 2mm Número utilizado según el peso del animal (Orientativo). Peso Nro. Butterfly Menos de 1Kg 25 23G De 1 a 5 Kg -21G De 5 a 15 Kg 21G Más de 15 Kg 21G-19G Figura 1: Catéter de aguja con alas (butterfly) B) Catéteres de inserción por dentro de aguja: Por ejemplo, Venocath, Intracath. Estos catéteres son dispositivos largos (22,9 cm) que se utilizan cuando se desea cateterizar una vena intermedia o profunda. Estos catéteres permiten la administración de soluciones hipertónicas irritantes o viscosas, y permite una fácil extracción de muestras sanguíneas con fines diagnósticos, la administración de fluidos intravenosos, y la determinación de la presión venosa central para ayudar a establecer la fluidoterapia. Aunque estos catéteres pueden insertarse con facilidad en las venas de las extremidades proximales, a menudo es difícil avanzar el catéter mas allá del codo, y el movimiento de esta articulación mientras está pasando el catéter puede contribuir al desarrollo de ulterior flebitis. Las ventajas de estos catéteres incluyen el acceso a venas centrales y la seguridad y facilidad de mantenimiento. El acceso venoso central permite la extracción fácil de sangre. Los inconvenientes incluyen mayor complejidad de inserción y vendaje en comparación con los catéteres de inserción sobre aguja, y una velocidad de fluido lenta que impide la administración de grandes fluidos en forma rápida. Por tanto estos catéteres no son de primera elección para la resucitación mediante fluidoterapia en animales hipovolémicos. Este tipo de catéteres es empleado para canalización de venas de gran calibre por ej: vena yugular. El sitio elegido para la colocación del catéter debe prepararse de modo similar a la preparación de un campo quirúrgico para prevenir complicaciones de tipo infecciosas. En caso de requerirse terapia endovenosa de larga duración es necesario realizar un vendaje adecuado del catéter que debe cambiarse al menos cada 24 horas. Durante el tiempo que quede colocado el catéter se lubrica con una solución heparinizada estéril cada 6 horas con el fin de impedir la agregación de fibrina a la porción intravascular del dispositivo. El objetivo es no solo evitar la obstrucción de la luz del catéter, sino que la fibrina depositada forme un nido en el cual se puedan depositar los microorganismos. En pequeños animales se aconseja el recambio del catéter cada 72 horas, como máximo para impedir infecciones locales, tromboflebitis, sepsis, etc. Figura 2. Partes que componen el catéter de inserción por dentro de la aguja (Intracath) En la siguiente tabla se detallan las diferentes medidas de catéteres según diámetro y longitud de aguja: Catéter(calibre) Longitud Aguja 21G ID (11 ½) 293 mm 18G Odx17G ID x 1 ½ 18G ID (11 ½) 293 mm 16G Odx15G ID x 1 ½ 16G ID 14 G ID C) Catéteres de inserción por fuera de la aguja (Abbocath) Estos catéteres están diseñados para ser colocados en una vena superficial periférica. Aunque se puede insertar fácilmente en la vena yugular externa este tipo de catéter no es el adecuado para usar en este vaso por más de unas horas. Son de elección en cirugía y fluidoterapia, independientemente del tiempo que dure el procedimiento a realizar, ya que nos permite mantener la vía endovenosa hasta la finalización del procedimiento sin que se infiltre y proporcionando una mayor seguridad para el paciente (esto lo diferencia del butterfly). En fluidoterapias prolongadas permiten mantener una vía permeable hasta 72hs, siempre y cuando se evite la contaminación. Se comercializan estériles dentro de un envase de papel y nylon. Una cubierta de plástico rígido que protege al catéter. Las partes constitutivas de este tipo de catéteres son las siguientes: Catéter externo de teflón con collar integrado y conector. El catéter de teflón (4), que se ubica por fuera de la aguja será la única porción que permanecerá en el interior de la vena. Es visible y radiopaco. Con respecto a la composición del catéter los materiales más comúnmente empleados incluyen tetrafuoretileno (Teflón), poliuretano, cloruro de polivinilo, el polietileno, el elastómero de silicona, y el polipropileno. En general el material más rígido es más fácil de manipular durante la inserción. El Teflón y el poliéster de polipropileno son los materiales más rígidos, el poliéster de poliuretano es muy flexible, tan solo superado en flexibilidad por el elastómero de silicona, este último el más flexible. El collar integrado (5) conecta firmemente el catéter con el conector (6). Desde el punto de vista de seguridad esta es la parte más importante del diseño del equipo, ya que de elladepende que esa conexión no se desuna y que el catéter se pierda en la vena del paciente. La aguja (1) con bisel, perfora la pared vascular permitiendo que el flujo de la sangre sea visualizado dentro de la cámara transparente (2) ubicada en el extremo caudal de la aguja, confirmando así la venoclisis. La cámara en su parte posterior posee un tapón (3) a presión con un filtro que permite el ingreso de la sangre a la cámara sin que se derrame. Estos elementos serán retirados conjuntamente quedando en la vena solamente el catéter de teflón Figura 2-: Partes que conforman un abbocath: 1- bisel de la aguja; 2- cámara transparente; 3- tapón; 4- catéter de teflón; 5- collar integrado; 6- conector. Foto de catéter por fuera de la aguja. (Abbocath) Tapones para catéteres endovenosos Su función es impedir el reflujo sanguíneo e inyectar soluciones cuando el catéter se deja colocado en la vena. Con este fin se han diseñado tapones especiales o se han adaptado elementos que cumplen con dicha función: a) Tapones estériles: De venta comercial y fabricados expresamente, son tapones compuestos por un cilindro plástico que se adapta al conector posterior del catéter. Poseen un diafragma de goma a través del cual se pueden inyectar soluciones por medio de una aguja. b) Chupetes de guías de perfusión: Los chupetes de goma de las guías de perfusión sanguíneas, una vez retiradas de las mismas, se adaptan perfectamente al contorno del conector del catéter. Se pueden emplear los chupetes de guías en desuso siempre y cuando se los higienice y esterilice correctamente. Para que se mantengan in situ se los fijar mediante varias lazadas y nudos de hilo de nylon o se los adhiere con un pegamento instantáneo a base de cianoacrilato. Funcionan, como en el caso antedicho, como un diafragma a través del cual se pueden aplicar fluidos con aguja. c) Conector de guía de perfus con chupete: Una variación al método recién mencionado es el empleo del conector de la guía de perfusión que se separa de la misma conservando unos 2 o 3 cm de tubuladura plástica, cuyo extremo libre se tapa con el chupete de goma, siguiendo con las mismas medidas de fijación que en el caso anterior. La ventaja de este tipo de taponamiento es alejar el catéter del punto de inyección, evitando así la posible perforación de la pared de teflón al punzar sucesivamente el chupete de goma. d) Tapones plásticos de canalizadores tipo mariposa (butterflay): Los canalizadores tipo mariposa traen en su conector un tapo plástico roscado que puede emplearse como medio de oclusión del conector del tubo de teflón una vez finalizada la aplicación de fluidos (previa heparanización). Funcionan solo como tapón ya que para nuevas aplicaciones deben retirarse y conectar directamente el adaptador de la guía de perfusión: ELECCIÓN DE LA VENA En la elección de la vena a cateterizar influyen la accesibilidad, los objetivos terapéuticos, y los riesgos de infección, trombosis o daño en el catéter o en el material de administración intravenosa. La accesibilidad de una vena viene determinada por el tamaño de la vena, la situación de la piel subyacente y la habilidad del cirujano. Por ejemplo, aunque la vena yugular externa es grande un cirujano no familiarizado con los principios básicos de la cateterización, encontrara mayor dificultad en esta vena que en un vaso periférico más pequeño. La vena más fácil para visualizar y palpar en la mayoría de los animales es la vena safena externa, aunque la interna es extremadamente pequeña se visualiza fácilmente en los gatos a través de la piel fina de la superficie interna del muslo. Los vasos más utilizados son: vena cefálica antibraquial, vena safena externa e interna, vena femoral y ocasionalmente vena auricular en perros de orejas caídas. En general el riesgo de trombosis o flebitis es mayor en las venas pequeñas o cuando el catéter atraviesa una articulación móvil. Las venas centrales grandes tienen un flujo de sangre mayor, lo que permite la administración de sustancias irritantes que causarían flebitis en las venas periféricas más pequeñas. Los catéteres de inserción a través de la aguja colocado en un túnel subcutáneo largo tienen menor posibilidad de infectarse que los catéteres cortos situados en las venas de las extremidades, donde son más propensos a ser masticados o ensuciados con el vómito la orina y las heces. TÉCNICA DE COLOCACIÓN DEL CATÉTER 1. Preparación de la piel: Los animales enfermos no toleran una técnica inadecuada cuando se tratan con dispositivos permanentes, especialmente catéteres intravenosos. Excepto en situaciones de emergencia, la cateterización intravenosa debería realizarse cuidadosamente adhiriéndose estrictamente a una técnica estéril: 2. Rasurar el pelo en una zona amplia alrededor del área donde se va realizar la venopunción. Asegurarse de cortar el pelo suficientemente distal a la localización de la inserción de modo que la aguja no contacte con el pelo durante la maniobra. 3. Realizar la antisepsia de la zona mediante la utilización de una solución antiséptica estéril, para conseguir resultados óptimos la solución debe permanecer en contacto con la piel durante 2 a 3 minutos. 4. Incisión de la piel: La realización de una pequeña incisión pequeña y profunda en el sitio elegido para la venopunción con el ángulo biselado de una aguja intradérmica 25/8, ayuda a prevenir el desgaste de la punta del catéter, se debe recordar que estos elementos están diseñados para su uso en medicina humana y que las características de la piel en los animales son diferentes. 5. Venopunción: Se avanza la punta de la aguja con el catéter ensamblado en la zona cutánea a puncionar y proximalmente, paralelo al eje axial de la vena, a través del tejido celular subcutáneo hasta entrar en la vena. El bisel de la aguja debe estar orientado hacia arriba, una vez hecho esto, se sitúa la punta del catéter directamente sobre la vena y de forma superficial a ésta, y el eje del catéter se coloca lo más paralelo posible al eje de la vena. El eje del catéter no puede contactar con el pelo de la extremidad distal, se angula el catéter en dirección a la vena y se introduce en su interior. El objetivo es enganchar la capa externa de la vena con la punta de la aguja, el flujo de sangre dentro de la cámara transparente confirma la venopunción. Posteriormente, mientras se mantiene fija la aguja se avanza el catéter sin la aguja proximalmente dentro de la luz vascular, el catéter se avanza totalmente hasta que el conector quede a la altura de la incisión. Una vez completado este paso se retira completamente la aguja. En este momento, el ayudante puede comprimir ligeramente la vena sobre la punta del catéter colocado a fin de evitar el reflujo sanguíneo. TÉCNICA DE COLOCACIÓN DEL CATÉTER Para ingresar al video en youtube : https://youtu.be/r7drVOoAw4I A continuación, se puede proceder de diferentes formas, según el uso que se le desee dar al catéter: • Conexión directa del pico de una jeringa para administrar drogas (por ej quimioterápicos) • Conexión directa de una guía de sueros (por ej. fluidoterapia intraquirúrgica). En este caso es posible colocar posteriormente un tapón para conservar la vía. • Conexión de una válvula de tres vías. • Colocación de diversos tipos de tapones, generalmente cuando se desea dejar el catéter durante varios días. 6. Fijación del catéter: Es muy importante una buena fijación del catéter al miembro del animal para evitar desplazamientos o ruptura del mismo, trauma vascular o introducción de microorganismos. Existen diferentes técnicas para obtenerla que se enumeran a continuación: a) Tela adhesiva: Se aplica una banda de tela adhesiva en forma circunferencial sobre el miembro, por debajo de la zona de entrada del catéter, de forma tal que el conector y el tapón descansen sobrela misma. Se cortan una o dos tiras de tela adhesiva, una con la cara del pegamento hacia arriba se pasa por debajo del conector y, envolviéndolo se pega sobre sí misma. El extremo libre de la tira se gira de forma tal que el pegamento quede hacia abajo y se aplica alrededor del miembro fijando el conector al mismo. b) Tela adhesiva y adhesivo a base de cianocrilato: Se aplica una banda de tela adhesiva en forma circunferencial sobre el miembro, por debajo de la zona de entrada del catéter, de forma tal de que el conector y el tapón descansen sobre la misma. En la zona de contacto entre la tela adhesiva y el conector se colocan unas gotas del adhesivo instantáneo a base de cianocrilato, ejerciendo presión hasta que se seque. Se cubre todo con una tira de tela adhesiva. En ambos casos, sobre el punto de entrada del catéter al organismo se aplica unas gotas de solución antiséptica por ej. povidonaiodo. Se envuelven estos elementos con varias pasadas de tela adhesiva, dejando expuesto el tapón de goma en forma parcial. Para evitar que el animal arranque el catéter es conveniente aplicar un catéter tipo cambric que se removerá cada vez que sea necesario emplear el catéter. 7. Empleo de solución heparinizada: Para evitar que la sangre se coagule dentro del catéter se debe inyectar aproximadamente 0,5 ml de solución salina heparinizada antes y después de utilizarlo, o bien 3 o 4 veces al día si no se lo empleará con esta frecuencia. Esta se prepara diluyendo 2 UI de heparina por ml de solución salina. Para obtener una concentración de 5 UI por ml en un sachet de 500 ml se requieren 2500 UI. La heparina se presenta a una concentración de 5000 UI por ml. Por lo tanto; será necesario incorporar al sachet 0,5 ml de heparina. 8. Mantenimiento del catéter: Los catéteres deben ser revisados diariamente y deben ser retirados tan pronto como sea posible desde el punto de vista terapéutico. Se debe inspeccionar el lugar de inserción y la vena, palpar los linfonódulos regionales y evaluar la formación de edema en la extremidad. 9. Extracción: Un catéter de teflón colocado asépticamente y controlado correctamente puede permanecer viable hasta 96 horas, pasado este período deberá retirarse el catéter y cualquier evidencia de inflamación o trombosis de la vena es suficiente para insertar un nuevo catéter en una vena diferente y eliminar el anterior. Los catéteres serán irrigados con solución heparinizada 1 a 5 UI por ml después de cada administración de soluciones o medicamentos. Con respecto a los catéteres que no se utilizan deberán ser irrigados una vez por día con solución heparinizada 10 a 100 UI por ml. Debe evitarse la administración de volúmenes o concentraciones altas de heparina en gatos y perros pequeños ya que puede producir anticoagulación. Para evitar la contaminación, durante la fluidoterapia deben evitarse las desconexiones del catéter al equipo de administración. La administración de medicamentos se hará a través de del tapón de inyección del perfus. 10. Complicaciones: Se evitan con técnicas adecuadas de colocación y mantenimiento: a) Extravasación: Se produce cuando la punta del catéter rompe la pared de la vena o se perfora la vena durante el proceso de inserción. Punzar las venas correctamente y lejos de las articulaciones. Limitar el movimiento de los catéteres localizados cerca de las articulaciones mediante la inmovilización del miembro con un vendaje o una tablilla. b) Trombosis: Cualquier catéter que se deje en una vena por varias horas se cubre con una capa de fibrina que se fragmenta durante la retirada del catéter. La misma puede formar un émbolo y alcanzar los pulmones o bien incorporarse a la pared vascular. En los puntos de contacto entre la pared vascular y el catéter pueden formarse trombos más grandes. La probabilidad de que esto ocurra aumenta cuando la punta del catéter está desgastada. c) Tromboflebitis: La tromboflebitis se caracteriza por trombosis e inflamación suficiente como para producir signos locales o regionales. Los signos incluyen: molestias, eritema de la piel, engrosamiento y trombosis del vaso en cuestión, secreción purulenta en el sitio de inyección. En casos más graves pueden aparecer signos sistémicos de inflamación: fiebre y leucocitosis. d) Infección: Los signos son similares a la tromboflebitis pero pueden progresar a bacteriemia, endocarditis. Ante la sospecha de infección se debe retirar el catéter en forma inmediata. Previamente a la extracción se procederá a lavar la zona con solución antiséptica, limpiarla con alcohol y esperar que se seque. A continuación, se lo extrae, se corta la punta con una hoja de bisturí estéril y se manda a cultivo. e) Embolismo gaseoso: Se produce cuando el aire entra en el vaso proveniente del catéter o del equipo de administración. La administración de pequeñas cantidades de aire produce un embolismo pulmonar sin signos clínicos y se adsorben. Cantidades mayores de aire pueden producir distrés respiratorio y edema pulmonar. Grandes bolos de aire originan un atrapamiento aéreo en el tracto de salida del ventrículo derecho causando un cese inmediato de la circulación. Es importante para prevenir la embolia gaseosa: evitar la entrada de aire en la tubuladura cuando se inyectan soluciones; no hacer ingresar aire en los sache de soluciones. En caso de que se advierta la presencia de aire dentro de la tubuladura se debe aspirar en forma inmediata con una jeringa. f) Separación del tubo de teflón del conector: Este tipo de complicación puede ocurrir fundamentalmente por dos causas, ambas evitables. • La primera es por mordedura del conector y del tapón por parte del paciente. La correcta protección de la zona y el estricto control por parte del propietario suelen ser suficientes. Sin embargo, pueden implementarse otros medios, como los collares isabelinos, en caso de considerárselo necesario. • La segunda es por defectos de fabricación del catéter, siendo la calidad del producto un punto muy importante a tener en cuenta. De presentarse un accidente de este tipo lo ideal es poder rastrear radiológicamente la ubicación del tubo perdido para poder extraerlo en forma quirúrgica, ya que de otra forma resulta casi imposible conocer su localización. VÍAS DE ADMINISTRACIÓN DE FLUIDOS VÍA INTRAVENOSA Constituye la vía de elección en todos los casos, más aún si se trata de pacientes con deshidratación severa o shock. Por esta vía se pueden administrar todo tipo de soluciones a diferentes volúmenes y velocidades de acuerdo a la necesidad del tratamiento, obteniéndose efectos inmediatos sobre el estado del paciente. Son excepcionales los casos en los cuales no puede accederse a una fluidoterapia endovenosa. Los fluidos deben ser administrados a temperatura corporal para prevenir la hipotermia. VIA INTRAMEDULAR o INTRAOSEA El acceso intraóseo es ideal para pequeños cachorros, gatitos y algunos exóticos. El sitio elegido será aquel que ofrezca una superficie ósea próxima a la piel, que tenga una cortical muy fina y una médula amplia. La absorción es casi tan rápida como la vía endovenosa. Permite la infusión de todo tipo de soluciones drogas y sangre. Los puntos anatómicos a acceder son: El fémur, en la fosa trocantérica, es el espacio que comúnmente se usa (ilustración 1, 2, 3 y 4), pero también se puede realizar en la cara craneal de la tibia, lo que es bien tolerado por las aves; en estos animales se usa una aguja 21G x 1” (25/8); 20G x 11/4” (32/9). Más comúnmente usada en mamíferos de menos de 0,5 kg, esta ruta es inicialmente empleada para realizar fluido terapia hasta conseguir una expansión intravascular que permita aplicar posteriormente un catéter intravenoso. Ciertas pautas deben tenerse en cuenta en esta vía. Extremas medidas de asepsia. Solo pueden realizarse una punción por cada lugar de acceso. Se debe recordar que se está atravesando un hueso No debe dejarse canalizado el paciente por más de72 horas Se puede llegar hasta una velocidad de infusión de hasta 11 ml/min. Maniobra: La aguja es aplicada en la fosa trocantérica del fémur o lateral a la cresta tibial. Después de la tricotomía y la asepsia del área se puede infiltrar con lidocaína la piel, el subcutáneo y depositar sobre el periostio. La aguja debe ser insertada rotándola, para que taladre el hueso (Ilustración 1, 2, 3 y 4). Es importante que la aguja sea acorde al tamaño del hueso para que la perforación en el espacio intraóseo sea lo más chica posible. Una aguja bien puesta debe estar firme y moverse junto con el hueso. El sitio de la inserción debe ser cubierto con ungüento antibiótico y vendaje estéril. Por esta ruta también podemos administrar drogas o fluidos como sangre entera y coloide. CONTRAINDICACIONES: La punción intraósea está contraindicada cuando los huesos están fracturados y en los previamente perforados, ya que parte de los fármacos administrados se perderían a través de la fractura o del orificio de punción. Tampoco sirven los huesos de aquella extremidad cuyo recorrido venoso pudiera estar interrumpido por una lesión o traumatismo que impida su desagüe en la circulación venosa central, ni cuando presente signos de infección en la zona de punción. Fosa trocantérica 1 2 3 1 2 4 Lateral a la cresta tibial Fluidoterapia en radio de una cotorrita Radiografia de una iguana con fluidoterapia en Tibia VIA INTRAPERITONEAL Es útil en aquellos casos donde no se puede acceder a una vía endovenosa o en pacientes de pequeño tamaño. La absorción de los líquidos a través de los vasos peritoneales es más rápido que en el caso de la vía subcutánea. Las soluciones a infundir deben estar atemperadas para evitar disminuir en forma brusca la temperatura del paciente. Debe tenerse en cuenta también el tipo de solución y el volumen. Al igual que la vía endovenosa requiere una técnica adecuada ya que se pueden provocar infecciones y traumatizar órganos abdominales. VIA SUBCUTÁNEA Los escasos volúmenes que pueden ser administrados y la absorción limitada la hacen posible solamente en pacientes hidratados y para la administración de soluciones isotónicas, no irritantes y que no contengan dextrosa. 4 3 CANALIZACION VENOSA: Es el acceso a un vaso mediante un abordaje quirúrgico, para lo cual se tratan de elegir los vasos de mayor calibre y periféricos. Esta maniobra está indicada, cuando el paciente se presenta en estado de shock hipovolémico o con vasoconstricción periférica marcada; situaciones en la que los vasos se encuentren colapsados. Para su realización se deben seguir los siguientes pasos: ▪ Preparación de la zona, de la forma mencionada para la colocación de catéteres endovenosos. ▪ -Infiltración de la piel con anestésicos locales. ▪ -Incisión de la piel, divulsión del Tejido subcutáneo. ▪ -Disección y exteriorización del vaso. (Figura Nº 1) ▪ -Realización de una ligadura en el extremo distal del vaso. ▪ -Colocación del catéter a través del vaso, en dirección proximal; y ligadura del vaso junto al catéter (Figura Nº2) ▪ -Protección de la herida mediante un vendaje. Una vez de utilizada la canalización, si un vaso quedo muy dañado por la venopunción debido al tamaño del catéter; se debe inhabilitar la vena ajustando o ciñendo una ligadura. Por último, se debe suturar piel. Fi gura Nº 1: Colocación de ligaduras Figura Nº 2: Se observa como se ciñe la ligadura para inhabilitar la vena. CATETERIZACIÓN VENOSA PERIFÉRICA POR DISECCIÓN La colocación mediante disección o cutdown está indicada cuando no es posible visualizar la vena periférica (normalmente cefálica o safena) para una colocación percutánea adecuada, o si es necesario establecer un acceso intravenoso de urgencia. En algunos pacientes con severa hipovolemia, deshidratación o hipotensión, el acceso vascular percutáneo puede ser imposible o muy difícil. El acceso quirúrgico mediante cutdown permite la visualización directa de la vena para su cateterización. Esta es una técnica que se lleva a cabo en el paciente de urgencias. A pesar de que la técnica sea aséptica, es muy probable que se introduzcan bacterias en el torrente circulatorio del paciente, con lo que esta técnica debe restringirse a emergencias reales. El catéter debe sustituirse por otro de colocación percutánea tan pronto como la situación del paciente sea lo suficientemente estable. Material: • Catéter (Nº de G en función del tamaño del vaso). • Gasas o algodones humedecidos en alcohol y clorhexidina. • Paños de campo. • Tapón. • Peladora. • Suero salino heparinizado. • Venda de algodón. • Venda cohesiva. • Material de sutura y disección. • Bisturí o aguja hipodérmica 18-20G. • Pomada antibiótica/antiséptica. Colocación y mantenimiento (figuras. 1a-1f): Preparar la zona de acceso vascular quirúrgica/asépticamente, de igual modo que para la colocación percutánea. Puede utilizarse el borde biselado de una aguja hipodérmica (18-20G) como escalpelo para incidir la piel. Tensar la piel y cortar en sentido oblicuo, justo por encima de la zona de proyección de la vena. Una vez visualizado el vaso, introducir el catéter. La utilización de suturas de tracción es opcional. Se recomienda utilizar pomada antibiótica o antiséptica una vez introducido el catéter, y colocar un vendaje de cobertura estéril. Los cuidados de mantenimiento de la vía son los mismos que en el caso de la colocación percutánea. Cambiar diariamente el vendaje y aplicar posteriormente pomada antibiótica. Colocar a continuación un nuevo vendaje estéril. La herida resultante puede dejarse cicatrizar por segunda intención o bien cerrarse con grapas. Es recomendable realizar el cultivo microbiológico del extremo del catéter, una vez éste ha sido retirado. Figura 1a-1f . Protocolo paso a paso de la técnica de cutdown. La imagen a ) muestra como se realiza la incisión oblicua/transversal de piel con bisel de aguja hipodérmica. TÉCNICAS DE ACCESO VASCULAR CENTRAL EN PEQUEÑOS ANIMALES La cateterización central está indicada en los casos que sea necesario establecer un acceso venoso a largo plazo, la infusión de fluidos hipertónicos, la instauración de técnicas de soporte nutricional parenteral, la monitorización de la PVC o la extracción sanguínea reiterada y atraumática. Existen diferentes técnicas, con la posibilidad de disección (cutdown) cuando no es posible la colocación percutánea. Cateterización venosa central percutánea y por disección Existen diferentes técnicas de colocación en función del tipo de catéter: overthe-needle, over-the-wire, through-the-needle y peel-off. La cateterización central se requiere cuando se pretende monitorizar hemodinámicamente al paciente, administrar fluidos o fármacos de elevada osmolaridad o extraer muestras de sangre de forma reiterada. Por lo general, este tipo de catéteres pueden dejarse en el paciente durante periodos de tiempo más prolongados que en el caso de los catéteres periféricos, lo cual es especialmente útil en el caso de pacientes críticos. La cateterización central está, teóricamente, contraindicada en pacientes con coagulopatías, con estados de hipercoagulabilidad, incremento de la presión ocular o incremento de la presión intracraneal. Material: • Catéter (diferente nº de G, longitud y tipología en función del tamaño del vaso/técnica). • Gasas o algodones humedecidos en alcohol y clorhexidina. • Paños de campo. • Tapón. • Peladora. • Suero salino heparinizado. • Venda de algodón. • Venda cohesiva. • Guantes estériles. • Gasas estériles. • Suero salino estéril. • Material de sutura y disección. • Bisturí o aguja hipodérmica 18-20G. • Pomada antibiótica/antiséptica. Colocación y mantenimiento: La técnica de acceso vascular central requiere una colocaciónaséptica. El paciente debe disponerse en decúbito lateral, aunque el decúbito esternal puede ser más fácil en pacientes con sobrepeso o con importante masa muscular. Si se desea una colocación del extremo del catéter en la vena cava craneal/ aurícula derecha, se debe extender el cuello del animal y medir el catéter desde el nivel del quinto espacio intercostal hasta el punto de venopunción. Es recomendable realizar una incisión cutánea en la zona de venopunción para así facilitar la introducción del catéter. Éste debe introducirse siguiendo las instrucciones y técnicas recomendadas por el fabricante. Una vez colocado debe asegurarse mediante adhesivos de cianoacrilato (pegamento rápido) o sutura. Los catéteres de silicona multilumen son los más recomendables dado que inducen un menor grado de trombofebitis, pueden disponerse a medio-largo plazo y permiten la administración simultánea de soluciones a través de lúmenes independientes (normalmente entre 1-3). Esta característica permite administrar dos o más infusiones continuas, incluso incompatibles entre sí, al mismo tiempo e incluso monitorizar simultáneamente diferentes parámetros, por ejemplo: PVC. Los diferentes lúmenes que presentan se denominan proximal, media y distal (en el caso de tener tres) en función de su proximidad al lugar de inserción. El lumen proximal suele utilizarse para la administración de fluidos y medicamentos, obtener sangre, administrar hemoderivados; el lumen medio para la administración de nutrición parenteral (NP), fármacos o fluidos (siempre y cuando no se esté administrando NP); y el lumen distal para la administración de fluidos de alta viscosidad, de hemoderivados, para fujos elevados, o bien para la medición de parámetros hemodinámicos, gasométricos, etc. En relación al mantenimiento de este tipo de catéteres, debe comprobarse su viabilidad y posicionamiento varias veces al día mediante la infusión de suero salino heparinizado a través de los diferentes lúmenes del catéter. El apósito y vendaje protector deben disponerse de forma similar a lo descrito en el caso de la cateterización periférica y seguir también el protocolo sobre el mantenimiento y sus cuidados. Es recomendable comprobar con cierta frecuencia la presión de oclusión del vendaje de los catéteres centrales. Si la presión es excesiva puede ocasionarse compromiso vascular, incluso respiratorio de vías altas. Asimismo, cuando se extrae el catéter se tiene que realizar un cultivo del extremo del catéter, sobre todo si hay sospecha de trombofebitis, sepsis, etc. También se debe aplicar presión en la zona de vasopunción durante unos minutos y colocar finalmente un apósito protector. Técnica Seldinger Esta técnica utiliza catéteres de menor tamaño y una guía que permite acceder al vaso en cuestión de modo poco traumático, ya sea por vía percutánea o por disección. Permite a su vez la introducción de catéteres uni y multilumen, y puede utilizarse para reemplazar catéteres en la misma localización de modo atraumático. El concepto básico de la técnica es el mismo, independientemente del vaso escogido (vena yugular, safena lateral o medial proximal, vena femoral) y de las peculiaridades del catéter elegido. Los diferentes pasos de la técnica de introducción Seldinger en vena yugular son descritos a continuación (Figura. 2a 2w): • Realizar una incisión cutánea previa a la introducción del estilete o trócar. La utilización de suturas de tracción es opcional. • Una vez se encuentre el estilete dentro de la vena yugular, introducir el fiador metálico hasta asegurar un posicionamiento suficientemente distal a la zona de venopunción. El fiador metálico conocido como J-wire permite no dañar el vaso durante su avance gracias a la particular forma de su extremo. Solo si el diámetro de la vena es menor al de la guía J- wire, usaremos el extremo no curvado del fiador. • Una vez colocado el fiador, retirar el estilete aplicando una ligera presión en el punto de venopunción y sujetando el fiador en la posición adecuada. • Insertar el dilatador siguiendo un suave movimiento rotatorio y deslizándolo por el fiador. Retirar posteriormente el dilatador. • Introducir el catéter, del mismo modo que el dilatador, y tras su colocación se retira la guía. A continuación se irriga la zona con solución salina heparinizada. Paso a paso de la técnica de Seldinger. Las imágenes muestran: la incisión de piel con bisturí; divulsión de los tejidos perivasculares para visualización de la vena; exteriorización de la vena con ligadura inferior; venipuncion con el estilete. Introducción del estilete; colocación delfiador. Las figuras muestran: colocación del dilatador; tras luego de sacar el dilatador se procede a la colocación del catéter. Fijación del catéter con puntos de sutura. Protección y vendaje con venda tipo coban BIBLIOGRAFIA 1) SLATTER, DOUGLAS .Textbook of Small Animal Surgery.1993 (Second Edition) .Cap. 31. Pág. 370-398.W.B.Saunders Company. 2) BOJRAB, JOSEPH. Técnicas Actuales en Cirugía de Pequeños Animales.1985. (Tercera Edición).Cap.22. Pg. 347-359.Editorial Intermédica. 3) FOSSUM, THERESA WELCH. 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