TFG_2022_AragonV

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TRABAJO FINAL DE GRADO 
GRADO EN HISTORIA Y PATRIMONIO 
 
 
 
 
 
 
LA AVIACIÓN DURANTE LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA. 
LA BATALLA DE LEVANTE Y 
LA MUSEALIZACIÓN DEL CAMPO DE AVIACIÓN DE VILAFAMÉS. 
 
 
 
 
 
Autor: VÍCTOR ARAGÓN RENAU 
Tutor: IMILCY BALBOA NAVARRO 
 
 
CURSO 2021-2022 
 
2 
 
ÍNDICE 
 
RESUMEN............................................................................................................................... 4 
 
INTRODUCCIÓN................................................................................................................... 5 
 
CAPÍTULO I. ESTELAS EN EL CIELO.............................................................................8 
1- Contexto histórico. El conflicto en España y la mirada de Europa. ..............................8 
2- Chatos y Pavas. Dos aviaciones frente a frente. ..........................................................13 
3- Distribución de los aeródromos militares en la zona de Levante. ...............................22 
 
CAPÍTULO II. LA CAMPAÑA DE LEVANTE................................................................29 
1- La batalla por Valencia. ...............................................................................................29 
2- La batalla aérea más grande. .......................................................................................35 
3- La línea XYZ y su puesta en valor. .............................................................................39 
 
CAPÍTULO III. VILAFAMÉS EN TIEMPOS DE GUERRA.........................................45 
1- Vilafamés y su tejido social. ........................................................................................45 
2- 442. Campo de aviación de Vilafamés. .......................................................................51 
3- La musealización de un espacio de batalla. .................................................................58 
 
CONCLUSIONES..................................................................................................................65 
 
BIBLIOGRAFÍA....................................................................................................................67 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
3 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
A través del presente Trabajo Final de Grado, tras una de las etapas más importantes 
de mi vida, puedo cerrar este ciclo universitario. Me siento con el deber de darles las gracias 
a todas las personas que me han acompañado durante este viaje. A mis seres queridos y 
amigos, a todas las personas que me han abierto las puertas de sus casas y me han ofrecido 
toda la información de la cual disponían, a mis compañeros y, sobre todo, a Imilcy Balboa, 
mi tutora, sin su paciencia y dedicación, el trabajo no habría salido. 
Para todas aquellas personas que como yo vean que mediante esfuerzo y dedicación 
pueden sacar adelante sus proyectos e ilusiones. 
Con el objetivo de que la historia no se olvide y en este caso no se repita. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
4 
 
RESUMEN: 
 
El presente Trabajo Final de Grado examina, dentro del contexto de la Guerra Civil 
española, la importancia de la aviación en los dos bandos contingentes, el papel que jugó en 
la contienda y cómo evolucionó. En 1938 tuvieron lugar los combates aéreos más duros hasta 
la fecha en la denominada Batalla de Levante, operación militar con la que Franco buscaba 
tomar la ciudad de Valencia de un modo rápido. No obstante, las tropas franquistas no 
pudieron romper las defensas republicanas, las cuales detuvieron el avance del ejército 
rebelde en la denominada Línea XYZ, un cinturón defensivo que abarcaba 150 km y el cual 
era la última opción para proteger Valencia. Lo anterior da paso al examen del aeródromo 
militar de Vilafamés, que vinculó a todo el pueblo con el conflicto, llegando a día de hoy a 
convertirse en un museo al aire libre y punto de interés. 
 
Palabras clave: Guerra Civil, aviación, Legión Cóndor, Aviazione Legionaria, Batalla de 
Levante, Línea XYZ, campo de aviación, museo, patrimonio, difusión cultural. 
 
 
ABSTRACT: 
 
This Final Degree Project examines, within the context of the Spanish Civil War, the 
importance of aviation on both contingent sides, the role it played in the conflict and how it 
evolved. In 1938 the toughest air battles to date took place in the so-called Battle of Levante, 
a military operation with which Franco sought to quickly take the city of Valencia. However, 
the Francoist troops could not break through the republican defenses, which stopped the 
advance of the rebel army in the so-called XYZ Line, a defensive belt that covered 150 km 
and which was the last option to protect Valencia. The foregoing gives way to an examination 
of the Vilafamés military aerodrome, which linked the entire town to the conflict, becoming 
today an open-air museum and point of interest. 
 
Keywords: Civil War, aviation, Condor Legion, Aviazione Legionaria, Battle of Levante, 
XYZ Line, airfield, museum, heritage, cultural dissemination. 
 
 
 
 
5 
 
INTRODUCCIÓN 
 
 
El 14 de abril de 1931 se proclamó en España la Segunda República. Se ponía fin al 
reinado de Alfonso XIII y se abrió un tiempo nuevo que supuso un cambio radical en el 
sistema de gobierno. Aunque en las grandes ciudades se consiguió una mayoría de votos 
republicanos, en muchos otros municipios del país se encontraba presente la figura del 
cacique y todavía se hallaban muy arraigados los valores tradicionales en parte de la 
sociedad. La presencia de sectores radicales de diversa ideología convirtió el país en una olla 
a presión, la cual podía estallar en cualquier momento. 
El golpe de estado de 1936, encabezado por Francisco Franco y apoyado por los 
sectores más conservadores, dio paso a un cruento conflicto armado. La Guerra Civil 
española ha sido un acontecimiento muy tratado en la historiografía del siglo XX. Sobre todo 
por historiadores e hispanistas como Hugh Thomas, Ian Gibson o Paul Preston. Además ha 
sido reflejada desde diversas artes por, poetas, escritores - tanto nacionales como 
internacionales - que además se alistaron en las Brigadas Internacionales como fueron los 
casos de Miguel Hernández o George Orwell que llegaron, como muchos otros, con idea de 
derrotar al fascismo. 
La Guerra Civil española tuvo un gran impacto más allá de sus fronteras. El escenario 
que se mostraba en España, entre otras cuestiones, era ideal para que el resto de países 
pusieran en marcha su industria de guerra. La evolución de la aviación estaba en auge y 
distintos gobiernos enviaron a España más de 1.500 aparatos a ambos bandos. El uso de la 
aviación se intensificó con el paso de los años, hasta darse el caso de llegar a enfrentarse unos 
200 aviones en un solo día en el verano de 1938. El uso de la aviación para atacar las zonas 
alejadas de los frentes y sembrar el terror en la población fue frecuente durante los conflictos 
armados del siglo XX y, como podemos observar, a día de hoy todavía se emplea la aviación 
para estos fines. 
Nuestro trabajo consta de tres capítulos. El primero, se centra sobre el tejido social 
que encontramos en España en la década de 1930. El estallido de la Guerra Civil y la 
implicación de los países europeos directa e indirectamente. Además, abordaremos el papel y 
desarrollo de la aviación a lo largo del conflicto, presentando a los dos bandos beligerantes 
(en el bando rebelde englobamos las unidades alemanas, italianas y españolas) y la 
disposición de los campos de aviación en la zona valenciana y sus funciones. 
6 
 
El conflicto dejó una serie de batallas y cifras bastante alarmantes, durante la guerra 
se llevaron a cabo intensos combates y una de las ofensivas que analizamos en el segundo 
capítulo será la Batalla de Levante, conocida también como la batalla olvidada o silenciada, 
debido a tratarse de una victoria republicana y que la historiografíafranquista trató de 
esconder. No obstante, y como veremos, el patrimonio bélico que dejó esta ofensiva no se 
pudo esconder. Hablamos de la Línea XYZ y de su progresiva musealización para dejar 
constancia a día de hoy de este cinturón defensivo que frenó el avance franquista hacía la 
ciudad de Valencia. 
En el tercer capítulo, abordamos el contexto histórico y tejido social del municipio de 
Vilafamés, en Castellón, en relación a los primeros años de la república hasta 1940. 
Examinaremos el impacto que tuvo en la población la construcción de un campo de aviación 
en el propio municipio. Las vidas de los habitantes quedaron ligadas a la construcción de este 
espacio militar ya fuera de manera directa -participando en su construcción- o indirecta –las 
consecuencias de los bombardeos-. A día de hoy, este espacio de batalla se encuentra 
totalmente musealizado, y se trata de una atracción turística para el municipio, cuestión que 
abordaremos. Para este capítulo hemos empleado sobre todo el libro El aeródromo militar de 
Vilafamés. 1937-1940 (2019) de Carlos Mallench, Blas Vicente, Jose Albelda y Josep 
Miralles así como los estudios acerca del campo de aviación del arqueólogo Jose Albelda y 
de Isabel Marzá Torlá, vecina de Vilafamés. 
Respecto a la metodología empleada en la investigación, hemos adoptado los métodos 
propios de la historia social y las técnicas propias de la arqueología. Aunque también se han 
hecho varios trabajos de campo (sobre todo en la Línea XYZ y el campo de aviación de 
Vilafamés). También hemos realizado entrevistas a habitantes del territorio que nos han 
trasmitido sus experiencias respecto al aeródromo y nos han ofrecido tanto material 
bibliográfico como un documental ligado al proyecto de puesta en valor del campo de 
aviación. 
Para finalizar, me gustaría señalar que una de las principales razones por las que he 
decidido realizar este trabajo es la relación que guardo con el municipio de Vilafamés, mi 
pueblo, y mi participación en jornadas de excavación del aeródromo de la localidad. Se trata 
de un lugar cuya existencia no era conocida por muchos, apenas unos pocos vecinos de 
mayor edad referían que en ese lugar, a escasos kilómetros del pueblo, durante la Guerra 
Civil se levantó un aeródromo. El estudio sobre el campo y su relación con el pueblo se ha 
ido acrecentando en los últimos cinco años. 
7 
 
Esperamos que este trabajo contribuya a enriquecer y ofrecer más información acerca 
del museo al aire libre 442 campo de aviación de Vilafamés, así como la Batalla de Levante y 
el papel de la aviación en la Guerra Civil. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
8 
 
CAPÍTULO I 
ESTELAS EN EL CIELO 
 
 
En el año 1930, se firmó en San Sebastián un pacto entre varios intelectuales de 
carácter político republicano donde se posicionaron a favor de una república. Estos firmantes 
fueron detenidos, lo que indignó a parte del país. Tras un breve periodo de tiempo fueron 
puestos en libertad. La fuerte presión pública que se ejercía impidió al rey negarse a realizar 
unas elecciones que fueron convocadas el 12 de abril de 1931. Pronto empezaron a conocerse 
los resultados y se comprobó que en las grandes ciudades, los candidatos monárquicos 
perdían frente a los republicanos de manera bárbara como en Madrid o Barcelona. No 
obstante, en las zonas rurales, donde estaba muy presente la figura del cacique, se daba la 
victoria a la monarquía. Al día siguiente de las elecciones, los republicanos empezaban a 
agruparse por las calles mientras proclamaban la república. Las figuras más cercanas a 
Alfonso XIII le aconsejaron abandonar la capital para evitar una posible confrontación. El rey 
haría pública una declaración antes de marchar hacia el exilio. 
 
“Las elecciones celebradas el domingo revelan claramente que no tengo el amor 
de mi pueblo. Mi conciencia me dice que ese desvío no será definitivo, porque procuré 
siempre servir a España, he puesto el único afán en el interés público hasta en las más 
críticas coyunturas. Un rey puede equivocarse, y sin duda erré yo alguna vez; pero sé 
muy bien que nuestra patria se mostró en todo momento generosa ante las culpas sin 
malicia. Soy el rey de todos los españoles y también un español. Hallaría medios 
sobrados para mantener mis regias prerrogativas, pero estoy dispuesto de una manera 
eficaz a apartarme de cuanto sea lanzar a un compatriota contra otro, en fratricida 
guerra civil. No renuncio a ninguno de mis derechos, porque más que míos son depósito 
acumulado por la Historia, de cuya custodia ha de pedirme algún día cuenta rigurosa.”1 
 
 
1- Contexto histórico. El conflicto en España y la mirada de Europa. 
De este modo, el 14 de abril, es proclamada la segunda república española, la cual 
nació con la esperanza de poner fin a los viejos problemas. La república se había alcanzado 
sin derramar ni una gota de sangre. La figura del jefe del gobierno recayó en Niceto Alcalá 
Zamora y por primera vez se legalizó el sufragio universal para toda la población mayor de 
edad, sean hombres o mujeres. En las elecciones de junio de 1931 ganaron los socialistas y 
republicanos de izquierda. Este nuevo gobierno trató de llevar a cabo diversas reformas, 
sobre todo durante los dos primeros años. Se buscó reformar el ejército y hacer uno fiel a la 
 
1 Hugh Thomas, La Guerra Civil española, Ruedo ibérico, París, 1967, p. 18. 
9 
 
república, debido a que la mayoría de generales y oficiales tenían tendencias más 
conservadoras. Las relaciones entre el nuevo gobierno, en su mayoría laico, y la iglesia 
fueron desde un principio difíciles. También se trató la cuestión autonómica con Cataluña, el 
País Vasco y el regionalismo gallego. Dentro de este bienio progresista se realizaron también 
diversas reformas laborales y posiblemente la más importante fue la reforma agraria. Las 
regiones de Andalucía y Extremadura eran tierras de grandes latifundios a la par que 
descuidados. Multitud de campesinos que no poseían tierras propias, trabajaban aquí. Estos 
trabajadores se encontraban a merced de los propietarios y vivían precariamente. El problema 
de la agricultura española se extendía por todo el país. El gobierno trató de repartir estos 
grandes latifundios entre campesinos individuales sin tierra o a colectividades de campesinos, 
no obstante la falta de organización y los pocos recursos económicos hicieron que esta 
reforma no prosperase ya que a finales de 1933 solamente se habían expropiado unas 8.900 
hectáreas e instalado en ellas a menos de 9.000 familias.2 
La formación de la Confederación Nacional de Derechas Autónomas, conocida como 
CEDA, que agrupaba a diversos grupos de derechas así como también el Partido Radical, el 
recién nacido partido La Falange Española (encabezada por José Antonio Primo de Rivera, 
hijo del dictador) y el partido monárquico Renovación Española se posicionaron en contra de 
las reformas del régimen. La división entre los partidos republicanos y las izquierdas y la 
presión de la CEDA y las derechas en 1933, harán dimitir al primer ministro Azaña y se 
convocarán nuevas elecciones. En las elecciones de 1933, el grupo más mayoritario de todas 
las derechas y también de todas las Cortes, se trataba del recién formado partido católico 
CEDA, encabezado por un joven abogado llamado José María Gil Robles, que mantenía en 
algunos aspectos, posturas cercanas al fascismo.3 
El nuevo gobierno, estuvo conformado con miembros del Partido Radical, debido a la 
amenaza por parte de anarquistas y sindicatos de iniciar una revuelta social en el caso de que 
algún miembro de la CEDA formara parte del nuevo gobierno. A inicios de 1934, el gobierno 
puso en marcha una serie de medidas con la finalidad de suspender las reformas emprendidas 
por sus antecesores. Las nuevas medidas parecían dictatoriales a ojos de los partidos de 
izquierda, por lo que la historiade España a lo largo de los casi tres años que siguieron a estas 
elecciones generales de 1933, tuvo como características la violencia, la crispación y el 
desorden.4 
 
2 Ibid., p. 69. 
3 Ibid., p. 70. 
4 Ibid., pp. 85-86. 
10 
 
En este ambiente estalló una revolución social. Barcelona proclamó un Estado catalán 
independiente y en Asturias triunfó la revuelta a pesar de la intervención de la experimentada 
Legión bajo el mando del general Franco, que acabó con unas 1.300 víctimas y unos 30.000 
obreros presos. 
Las elecciones que se llevarían a cabo el 16 de febrero de 1936 dividieron aún más a 
la sociedad española. La victoria en las urnas del Frente Popular, que reunía a socialistas, 
comunistas y otros republicanos de izquierdas, sobre el Frente Nacional encabezado por la 
CEDA de Gil Robles y otros partidos conservadores y monárquicos, inquietó a esa parte de la 
población que veía en un golpe de estado, la solución para poder mantener sus intereses y 
privilegios, una idea que se venía planteando desde hacía algunos años. El asesinato del jefe 
de la oposición José Calvo Sotelo, el 13 de julio de 1936, precipitó el alzamiento militar que 
daría inicio a la Guerra Civil Española. 
 
Tabla nº1 
Votos por grupo político en las elecciones de 1936. 
 
 
Fuente: Hugh Thomas, La Guerra Civil española, Ruedo 
ibérico, París, 1967. 
 
 
Al inicio de la Guerra Civil española en julio de 1936, Europa vivía una situación 
ciertamente alarmante. Todavía se encontraban muy presentes las consecuencias del Tratado 
11 
 
de Versalles, que había supuesto cierta humillación para Alemania. La política 
ultranacionalista llevada a cabo y las consecuencias de la “Gran Depresión” iniciada a partir 
de 1929 impulsó la victoria, por la vía electoral, de Adolf Hitler en 1933. 
Alemania había restablecido el servicio militar obligatorio y reconstruido su poderosa 
aviación sin que el resto de potencias europeas, principalmente Francia y Gran Bretaña, 
intervinieran. Es cierto que tras el asesinato del canciller austriaco Engelbert Dollfuss en 
1934, impulsado por Alemania, se firmó el Pacto de Stresa en 1935 donde Francia, Gran 
Bretaña e incluso la Italia de Mussolini intentaron poner límites en las medidas tomadas por 
Alemania si trataba de cambiar las condiciones del Tratado de Versalles. Este tratado había 
nacido con poca esperanza. 
Cabe recordar que existía la organización internacional llamada Sociedad de Naciones 
creada por el Tratado de Versalles en 1919 cuyo objetivo principal fue el de evitar un nuevo 
conflicto global. Resultaría un fracaso. Alemania ingresó en 1926 y la abandonó en 1933, 
como también la conferencia sobre desarme. Japón hizo lo mismo cuando fue condenado por 
la invasión de Manchuria el mismo año. Italia en 1935 invadió Abisinia (Etiopía) el Pacto de 
Stresa estaba herido de muerte y la Sociedad de Naciones tampoco hizo nada frente a la 
nueva situación.5 
La política europea se caracterizó pues por la búsqueda de los propios intereses de los 
diferentes estados, que mostraban unas políticas extremadamente dispares. Podemos 
encontrar una Francia donde gobierna el Frente Popular, presidido por León Blum de carácter 
socialista, una Gran Bretaña con un gobierno conservador y luego de manera totalmente 
diferente la Italia fascista de Benito Mussolini y la Alemania hitleriana que mantenían una 
política agresiva frente al apaciguamiento de Gran Bretaña y Francia. 
El fracaso progresivo del Comité de no intervención era evidente. Desde un primer 
momento, ni Italia ni Alemania tuvieron reparos en intervenir directamente en la guerra. A 
fines de julio y tras una serie de entrevistas entre el ministro de asuntos exteriores italiano y 
algunos representantes militares españoles insurrectos, llegaron a Marruecos 9 bombarderos 
italianos, camuflados para evitar el control internacional. A fines de ese mes, Hitler decidió 
enviar directamente hacia Marruecos una veintena de aviones Junkers destinados al 
transporte de tropas. Este hecho fue fundamental para que Franco pudiera trasladar su ejército 
 
5 Pelai Pagès, “Europa i la Guerra Civil espanyola: El Comité de No Intervenció”, Ponencia 
presentada en La Batalla de Llevant un retrobament amb la Història i la memòria oblidada // II 
trobada d’investigadors de les universitats i representants d’ajuntaments, grups, entitats i 
associacions cíviques memorialístiques valencianes, 2020, p. 1 
12 
 
del norte de África hacia la Península y sortear las naves republicanas en el mar, donde 
ostentaba la hegemonía marítima.6 El 18 de noviembre de 1936, los gobiernos totalitarios de 
Italia y Alemania reconocieron oficialmente el gobierno de Franco como el único legítimo de 
España. 
Al año siguiente, en enero de 1937, comenzaron a llegar escalonadamente los 
primeros efectivos pertenecientes al ejército regular italiano y a las milicias fascistas. En 
febrero la cifra rondaba los 50.000 hombres. Las tropas llegaban respaldadas por aviones, 
bombas, cañones y morteros, además de un gran número de tanquetas y vehículos a motor. Se 
conoce que los militares italianos ocuparon la isla de Mallorca, que se convirtió en un gran 
centro de control desde el que durante toda la guerra, se bombardearon las ciudades de la 
costa mediterránea.7 
Por otro lado, la intervención de Alemania en el conflicto se materializó 
principalmente en forma de armamento y demás material bélico junto al personal militar 
especializado. El envío de la Legión Cóndor fue sin duda de suma importancia para los 
sublevados y a la larga les proporcionaría la hegemonía aérea a las tropas franquistas. Las 
tropas alemanas fueron reforzadas hasta alcanzar la cifra máxima de 279 aviones de combate, 
180 tanques y 180 cañones, a inicios de 1938. Los combatientes alemanes en España no 
sobrepasaron los 16.000. Sin olvidar las grandes sumas de dinero enviadas por Hitler al 
gobierno franquista que al cambio en 1939 fueron alrededor de 17.250 millones de pesetas.8 
La única respuesta frente a la colaboración entre la Italia de Mussolini y la Alemania 
de Hitler, para la República fue la ayuda de la Unión Soviética. Stalin primero la apoyó desde 
el punto de vista ideológico y propagandístico. La URSS, que había firmado el Tratado de No 
intervención y lo cumplía escrupulosamente, no intervino hasta el 15 de octubre de 1936, 
cuando mandó a bordo del barco Komsomol armamento militar, a lo largo de ese mismo mes 
enviaría los primeros tanques, artillería y aviación. Al mismo tiempo, la Unión Soviética 
junto con los partidos comunistas de diversos países europeos, empezaron a fraguar las 
Brigadas Internacionales.9 El envío de la ayuda militar soviética se llevó a cabo a cambio del 
conocido como “Oro de Moscú”, que se extrajo de las reservas del Banco de España y que 
salió a través del puerto de Cartagena el 25 de octubre, lo que causaría el endeudamiento de 
la República con la URSS. 
 
6 Ibid., p. 10. 
7 Ibid. 
8 Ibid., p.11. 
9 Ibid. 
13 
 
La intervención de la URSS en la Guerra Civil española se justificaría por las 
continuas violaciones del tratado por otras naciones firmantes desde su inicio, donde los 
rebeldes disfrutaban de una situación favorable y por ello el conflicto se había prolongado. 
Era evidente que si no se hubiera realizado la contribución soviética a la República, la guerra 
hubiera concluido más pronto. La ayuda soviética si bien no le sirvió a la República para 
ganar la guerra, al menos sí para que no la perdiera de manera inmediata. 
El único modo de solucionar el intervencionismo extranjero en el conflicto español, 
era establecer ciertas formas de control por parte del Comité de No intervención. Así, a 
finales de enero de 1937 se empezaron a adoptar decisiones como el control de fronteras, 
tanto terrestrescomo marítimas, y la prohibición de enviar tanto material bélico como 
voluntarios. Las armadas inglesas y francesas debían supervisar las costas que quedaban bajo 
control del ejército franquista mientras que Italia y Alemania debían vigilar las zonas costeras 
de la España republicana. Pronto se vería que su eficacia era mínima debido a que los 
alemanes suministraban armamento a través de barcos con bandera de países al margen del 
Comité de No Intervención y pasaban los barcos bajo la protección de naves controladas por 
italianos y alemanes, mientras que los soviéticos emplearon normalmente barcos españoles.10 
 
 
2- Chatos y Pavas. Dos aviaciones frente a frente. 
El desarrollo de la aviación durante las primeras décadas del siglo XX sobretodo una 
vez acabada la Primera Guerra Mundial hizo que la mayoría de potencias europeas invirtieran 
en aumentar su poder aéreo debido en parte a las experiencias que acumularon en la lucha 
frente a estas nuevas máquinas en la conocida como “guerra de trincheras”. Estas teorías de 
un dominio aéreo no sólo alcanzaron a los países europeos, sino a otras potencias de Asia y 
América. 
El desarrollo de la aviación, comportó de manera paralela la investigación con fines 
militares. La aviación militar permitió un salto de gran magnitud a la hora de plantear y hacer 
la guerra. A partir de ahora, cualquier nación participante en un conflicto armado y con una 
aviación militar lo suficientemente desarrollada tendría la capacidad de invadir el espacio 
aéreo de otro país beligerante y bombardear ciudades, carreteras, puentes, puertos y demás 
 
10 Ibid., pp. 12-14. 
14 
 
elementos en el interior del país, perdiendo de esta manera la relativa seguridad de la 
retaguardia al encontrarse alejada del frente de batalla.11 
La industria aérea se encamino cada vez más a la creación de aviones cada vez más 
eficientes, efectivos y poderosos. Sobre todo, para dotar a los aviones de una mayor 
autonomía, con más cota de vuelo y mayor capacidad de carga. 
Aunque se habían alcanzado verdaderos avances en la aviación militar, no se había 
podido probar sus capacidades en total plenitud. El escenario que se estaba formando en 
España con el estallido de la Guerra Civil era perfecto para llevar a la práctica todas las 
nuevas teorías militares y estrategias y también para probar todo tipo de aeronaves y otros 
materiales bélicos totalmente novedosos. 
Las potencias que participaron en la Guerra Civil, Francia y Rusia en favor del bando 
republicano y Alemania e Italia a favor de los golpistas, tuvieron la oportunidad de desplegar 
sus respectivas industrias armamentísticas. 
A lo largo de la Guerra Civil participaron, en mayor o menor medida, más de 150 
modelos de aviones de procedencia diversa, aunque sabemos que principalmente la gran 
mayoría provenían de Rusia, Alemania e Italia o eran de fabricación española. Se conoce que 
los dos bandos beligerantes adquirieron a lo largo de la contienda casi 3.000 aviones. El 
gobierno legítimo republicano adquirió unos 1.400 aparatos y los sublevados contaron con 
1.500. Todo indica que a pesar de estas igualadas cifras, tras la Batalla de Brunete el 25 de 
julio de 1937, la avanzada aviación de los sublevados sería dominante en los cielos españoles 
hasta el fin de la guerra.12 
Encontramos en esta guerra una gran variedad de aviones de caza, bombarderos, de 
reconocimiento y asalto, hidroaviones y aviones de transporte, aunque las escuadras de 
bombarderos y cazas fueron las más representativas de la contienda. Algunos modelos 
dejaron su huella en la memoria debido a su participación y carácter, aquí podemos citar los 
cazas Polikarpov I-15 e I-16 soviéticos, los Heinkel He 112 y He 51 alemanes o los Savoia 
SM.81 italianos. 
 
 
 
 
11 Carlos Mallench, Blas Vicente, Objetivo Levante: Actuación de las unidades de bombardeo y 
reconocimiento aéreo entre abril y junio de 1938, Muñoz Moya Editores, Sarrión, 2015, pp. 9-11. 
12 Manuel Carreres, Aeródroms Valencians de la Guerra Civil. Escenaris, elements i memòria d’una 
xarxa per a la defensa del territori, Generalitat Valenciana, Conselleria d’Habitatge, Obres Públiques 
i Vertebració del Territori, València, 2018, p. 16. 
15 
 
Imagen nº1 
Caza I-16 (Mosca) 
 
 
Fuente: Subdirección General de Archivos. La Guerra Civil 
española: exposición itinerante, 1980 
. 
 
Imagen nº2 
Savoia S.81 
 
 
Fuente: Carlos Mallench Sanz y Blas Vicente Marco. Objetivo: 
Levante. Actuación de las unidades de bombardeo y 
reconocimiento aéreo entre abril y junio de 1938, 2015. 
 
 
El Ejército del Aire dependía directamente del general Franco y contaba con un Jefe 
del Aire, responsabilidad que cayó en la figura del general Alfredo Kindelán y Duany; en el 
Estado Mayor se encontraban Luís Moreno Abella y Julián Rubio López. Dicho Estado 
16 
 
Mayor del Aire se elaboró en los últimos días de julio de 1936 cuando en la ciudad andaluza 
de Sevilla se estableció el Cuartel General de Franco, dividido en tres secciones. En su 
traslado a Salamanca en octubre de 1936 donde se realizan estudios para organizar a este 
Estado Mayor y que acabó dividido en siete secciones. De este modo funcionó hasta el fin de 
la guerra.13 
Bajo el mando de la llamada Jefatura del Aire se encontraban englobadas las unidades 
aéreas de La Brigada Hispánica, las tropas alemanas de la Legión Cóndor y las italianas de la 
Aviazione Legionaria. Las dos últimas, cuyo mando supremo fue Millán Astray, fueron sin 
duda cruciales en el desarrollo de la guerra en España, ofreciendo un apoyo constante al 
ejército de los sublevados desde 1936 con el envío de unos 12 aviones Savoia S.81. Por su 
parte, la sección de la Aviazione Legionaria delle Baleari, sería la encargada de bombardear 
toda la costa mediterránea de febrero de 1937 hasta 1939 desde su base en las Baleares y bajo 
el mando del general Vincenzo Velardi.14 
La Brigada Aérea Hispana se formó en 1938 con la idea de agrupar todos los 
bombardeos españoles existentes desde el comienzo de la guerra. Otro de los principales 
objetivos de la nueva unidad fue la de intentar ponerse a la altura de las otras fuerzas aéreas 
aliadas, la Legión Cóndor de Hitler y la Aviazione Legionaria de Mussolini, las cuales habían 
demostrado un gran dominio de la guerra aérea y una gran organización. El coronel Apolinar 
Sáenz de Buruaga, jefe del Estado Mayor del general Kindelán (principal teórico de este 
“dominio del aire” en España) sería el encargado de estar al mando de la 1ª Brigada del Aire. 
Por otro lado el teniente coronel Francisco Arranz Monasterio sería designado como Jefe de 
Estado Mayor de la nueva unidad.15 
A fines del año 1937 se llevó a cabo la reorganización de estas fuerzas. Se 
organizaron los aeródromos, intendencia y personal. La nueva Brigada Hispana estaría 
formada por unidades de bombardeo, no obstante también empleó unidades de 
reconocimiento y diversos cazas que ofrecieron apoyo a las unidades más rezagadas de 
bombardeo para protegerlos de la aviación enemiga. La integraron tres escuadras. 
En la primera se integraron las unidades aéreas alemanas que comprendían los dos 
Grupos de Junkers Ju 52, aviones que originalmente se emplearon como transporte, por no 
ser muy veloces y anticuados para la fecha. No obstante, fueron bastante eficaces y muy 
 
13 Carlos Mallench, Blas Vicente, Objetivo Levante: Actuación de las unidades de bombardeo y 
reconocimiento aéreo entre abril y junio de 1938, Muñoz Moya Editores, Sarrión, 2015, p. 15. 
14 Ibid., p.16. 
15 Ibid., p.20. 
17 
 
utilizados para realizar labores de bombardeo. Estos dos Grupos fueron empleados uno para 
la realización de operaciones militares diurnas, y el otro para las operaciones nocturnas. La 
Primera Escuadra se encontrabaen 1938 bajo el mando del teniente coronel Eduardo 
González Gallarza.16 
La segunda escuadra dirigida por el teniente coronel José Lacalle Lárraga estaba 
compuesta por los aviones italianos Savoia S.79, unidades de bombardeo muy veloces, que 
no precisaban ser protegidas por cazas u otras unidades como si era el caso de los Junkers 
alemanes. La tercera, comandada por Alfonso de Orleans y Borbón, se denominaría 
“Escuadra Mixta”, debido a que se encontraba formada por unidades S.79 italianas y otro 
grupo formado por los He 70, alemanes, aviones muy veloces empleados para misiones de 
reconocimiento y de bombardeo. 
En el verano de 1938 tuvo lugar una nueva reorganización y se formó una Segunda 
Brigada del Aire para acoger de algún modo las nuevas unidades enviadas por la Aviazione 
Legionaria italiana, los S.M.81.17 Para poder ofrecer su apoyo en la campaña de Levante, las 
unidades aéreas fueron emplazadas en los aeródromos más próximos al frente. El aeródromo 
de Calamocha o el estratégico campo de Alfamén, en Zaragoza, sirvieron de campamento 
base para los Ju 52, apoyados por los Fiat CR.32, los S.79 y los He 70. 
 
Imagen nº3 
Ju 52 alemán 
 
 
Fuente: Carlos Mallench Sanz y Blas Vicente Marco. Objetivo: Levante. 
Actuación de las unidades de bombardeo y reconocimiento aéreo entre abril 
y junio de 1938, 2015. 
 
16 Ibid., p.21. 
17 Ibid., p.22. 
 
18 
 
Imagen nº4 
Fiat CR-32 
 
Fuente: Jesús Salas Larrazábal. La Guerra Civil 1936-1939, 2011. 
 
 
La Aviazione Legionaria Continental estuvo dirigida hasta el verano de 1938 por el 
general Mario Bernasconi, y tras finalizar su mandato por el general Adriano Monti. A lo 
largo de la batalla de Levante, el ejército de los sublevados contó con el apoyo de la aviación 
fascista principalmente el 111º Stormo da Bombardamento Veloce con base en Logroño y 
posteriormente transferida a Zaragoza para estar más próxima al frente. Este cuerpo se 
organizó mediante la unión del Grupo XXIXº y XXXº de unidades S.79 y sus respectivas 
escuadras. El 21º Storno da Bombardamento Pesante tenía su centro de mando en Tudela y lo 
componían un total de 33 aviones, entre los cuales 19 eran los S.M.81, los innovadores 
bombarderos trimotores, que se distribuían entre los grupos XXIVº, XXVº y XXXVº y sus 
Escuadras.18 
A igual que la Italia de Mussolini, la Alemania de Hitler también prestó su apoyo a 
Franco desde los primeros momentos del levantamiento militar. La creación de la Legión 
Cóndor a finales de 1936 y su participación directa en la Guerra Civil Española sirvió de 
campo de pruebas a los alemanes para la II Guerra Mundial. En las operaciones en el frente 
de Levante, el Cuartel General de la Legión Cóndor se ubicó en Almazán, en Soria. El cuerpo 
alemán no solo contaba con su avanzada aviación, sino que también con un buen número de 
tropas en tierra. Helmut Volkmann era el comandante en jefe y su Jefe del Estado Mayor 
Hermann Plocher. El mayor Karl Mehnert dirigió al Grupo K/88 a lo largo de la batalla de 
Levante. Grupo formado por 4 Escuadrillas y que hacían un total de 48 aviones He 111 
posiblemente uno de los bombarderos más modernos empleados en la Guerra Civil. Este 
 
18 Ibid., pp. 27-31. 
 
19 
 
grupo se desplazaría al aeródromo de Sanjurgo en Zaragoza para apoyar el frente de Levante 
y a partir de 1938 algunos pilotos y tripulantes españoles formarían parte de las escuadrillas. 
También actuaría en la batalla de Levante el Grupo A/88 en misiones tanto de 
reconocimiento como de bombardeo. Esta unidad se situaría en diversos aeródromos 
próximos al frente de Levante como los de Tauste (Zaragoza) o La Senia (Tarragona). Por 
último cabe destacar también la Escuadrilla Mixta AS/88 que actuaría durante la batalla de 
Levante en operaciones de reconocimiento y bombardeo marítimo con sus hidroaviones He 
59 y 60.19 
 
Imagen nº5 
Heinkel He 111 
 
 
Fuente: Rosa Monlleó Peris, Alfredo Fornás Pallarés y David Oliver. Nules, un 
municipi estratègic a la Batalla de Llevant. Bombardejos i supervivència de la 
població civil, 2017. 
 
 
Hemos venido reseñando los aviones empleados por los sublevados a lo largo de la 
contienda. No obstante, los aviones de bombardeo que desde un principio usaron los Grupos 
Hispanos y también durante la Batalla de Levante fueron los Savoia-Marchetti S.M.79 de 
origen italiano y los Junkers 52 alemanes. Los Junkers 52 podían realizar diferentes 
combinaciones a la hora de lanzar sus bombas, y podían llevar una carga de hasta 1.500 kg de 
explosivos. Su tripulación estaba compuesta por grupos de entre seis y siete hombres y en un 
 
19 Ibid., pp. 33-37. 
 
20 
 
inicio conformaron la columna vertebral de la Legión Cóndor. Cuando los nuevos He 111 
llegaron a la península, los He 52 serían traspasados a la Brigada Hispana. Los He 111, eran 
más modernos que los He 52, el Dornier Do 17, el Savoia S.81, los Fiats Br.20 y los Ba.65 
italianos y también Heinkel He 70 denominados “Rayo” por su velocidad. El S.79 italiano 
por otro lado, era un innovador trimotor con una autonomía de casi 2.000 km y bastante más 
veloz que los He 52. Poseía también la capacidad de albergar hasta 1.000 kg de material 
explosivo.20 
La Gloriosa, como era conocida la Aviación republicana, dependía a nivel 
administrativo de la Subsecretaría de Aviación. A inicios de 1938, se organizaron las 
Jefaturas Administrativas, que organizaban y revisaban las necesidades del Arma de 
Aviación, ejecutan las misiones encomendadas al Cuerpo de Intendencia de la Aviación y 
ofrecían asesoría al Mando. También se creó la Jefatura Administrativa Central de Fuerzas 
Aéreas y cinco a nivel regional. 
Valencia quedó encuadrada en la Cuarta Región Aérea que comprendía las tres 
provincias valencianas y la parte republicana de Aragón. El Estado Mayor tenía cuatro 
secciones: Organización, Información, Operaciones y Servicios.21 Las Fuerzas Aéreas de la 
república se encontraban organizadas en dos escuadras: la Escuadra Número 5 de Bombardeo 
y la Escuadra Número 11 de Caza, a la que se añadía la Escuadra Número 7 que era mixta y 
engloba todo tipo de material bélico aéreo de origen holandés, francés, norteamericano y 
polaco. También encontramos incorporadas en la Escuadra Mixta un grupo de hidroaviones y 
una Escuadrilla de Vuelo Nocturno. A diferencia de esta última las Escuadras 5 y 11 estaban 
principalmente formadas por unidades aéreas de origen soviético. La Número 5 de 
Bombardeo estaba compuesta por el Grupo 30 de Polikarpov R-Z conocidos como Natacha y 
por el Grupo 24 de Tupolev SB-2 llamados Katiuska. La Número 11 de Caza la componían el 
Grupo 26 de biplanos soviéticos I-15 conocidos como Chatos y el Grupo 21 de I-16 
vulgarmente llamados Moscas.22 
Posiblemente de todos los aviones que empleó el gobierno republicano a lo largo del 
conflicto, los más conocidos serían los Polikarpov R-Z y los Tupolev SB-2, considerado 
como el avión más avanzado en aquella época a nivel mundial, que alcanzaba velocidades 
muy elevadas y dominó el cielo hasta la llegada de los Bf 109 alemanes, a diferencia del 
 
20 Ibid., pp. 39-52. 
21 Ibid., pp. 54-55. 
22 Ibid., pp. 56-69. 
21 
 
Polikarpov R-Z, ya anticuado al inicio de la Guerra Civil Española, si lo comparamos con los 
aviones alemanes o italianos. 
El gobierno de la república también contó con aviones como el Vultee V.1, comprado 
a Estados Unidos y transformado en bombardero ya que originalmente fue pensado para el 
transporte de pasajeros. También encontramos los Potez 540, diseñado por el francés Louis 
Coroller y capaces de realizar tareas de bombardero y transporte; los Fokker Trimotor y los 
Polikarpov R-5 que fueron ideados para reemplazar a los R-1 y realizar acciones de 
reconocimiento y bombardeo,además de asalto y de combate, al ser más ligero que otros.23 
 
Imágenes nº6 y nº7 
Polikarpov R-Z (Natacha) Bombardero ruso Tupulev SB-2 (Katiuska) 
 
 
Fuente: Carlos Mallench Sanz y Blas Vicente Marco. Objetivo: Levante. Actuación de las unidades 
de bombardeo y reconocimiento aéreo entre abril y junio de 1938, 2015. 
 
 
El avance del ejército sublevado por el territorio valenciano se realizaría por dos 
principales zonas. La primera, por las comarcas del Maestrazgo con la intención de 
adentrarse por el Alto Palancia, pero las tropas franquistas se toparon con la conocida como 
línea XYZ, (una serie de fortificaciones que llegaba hasta Almenara) entre las sierras de 
Javalambre y Toro. El segundo se realizó paralelo a la costa, ocupando las principales 
poblaciones hasta encontrarse de nuevo con la Línea XYZ a la altura de Nules. Desde el 
inicio de la ofensiva en abril de 1938 hasta que finalizó a finales de julio, los ataques aéreos 
sobre las poblaciones e infraestructuras (bombardeo a los puertos de Gandía, Valencia, 
Castellón o Sagunto) fueron frecuentes, con la devastación de pueblos enteros. Cuando los 
sublevados consiguieron ocupar la zona de Castellón, llegando así al Mediterráneo, partieron 
el territorio republicano en dos partes, Cataluña al norte y Valencia al sur. 
 
23 Ibid., pp. 78-85. 
22 
 
La ofensiva franquista quedó paralizada a las puertas de Sagunto y tras el inicio de la 
Batalla del Ebro permaneció así hasta el fin de la guerra. Las consecuencias de la ofensiva 
sobre el Levante fueron la caída de la provincia de Castellón frente a las tropas franquistas. 
No obstante, el objetivo principal del gobierno republicano se había cumplido, ofrecer una 
fuerte resistencia para ganar tiempo a que el resto de países europeos actuasen a su favor. La 
Batalla de Levante se podría catalogar como una victoria defensiva republicana y la línea 
XYZ la causa principal de dicha victoria. 
 
 
3- Distribución de los aeródromos militares en la zona de Levante. 
A mitad de 1936 la Aviación Militar española se encontraba en medio de un proceso 
de cambios, transformación y en fase de reorganización general. Las unidades aéreas de 
carácter militar se transformaron en Regiones Aéreas y ya no se reconocerían como 
Escuadras. El personal militar dentro de la aviación, a pesar de la reorganización continuó 
manteniendo su antigüedad en las armas y también el grado que ya poseían en el cuerpo.24 
En 1936 la industria aeronáutica española no se encontraba entre las más punteras 
respecto a otros países europeos. Este hecho lo podremos ver plasmado a lo largo del 
conflicto civil. A inicios de 1936 en España, la sociedad Hispano Suiza agrupaba las fábricas 
de camiones, automóviles y motores en Barcelona, la fábrica de forja en Ripoll y el caso que 
más nos interesa, la fábrica aeronáutica de Guadalajara. Dicha factoría se encargaba de la 
fabricación de la avioneta HS-34, los Hawker Fury, la elaboración del proyecto E-303 y el 
mantenimiento de los Nieuport 52. Con el estallido de la Guerra Civil, la proximidad del 
frente de Madrid y el quedar expuestas las fábricas a posibles ataques bombarderos, la 
Hispano se trasladó a una zona más alejada. 
El campo de aviación de La Rabasa, situado en Alicante, fue el destino de la Hispano 
Suiza y sus labores. El traslado afectó también a otras empresas aeronáuticas que tenían su 
sede en la zona central del país y veían acercarse el frente de guerra a sus infraestructuras. 
Muchas de las empresas pasaron a ser propiedad del Estado y otras se fusionaron. Debido a la 
gran demanda de reparación de aviones militares, empresas como la AISA o La Hispano 
Suiza tuvieron que suspender sus planes de fabricación, y adaptarse a los aviones extranjeros, 
como los rusos o franceses. La plantilla de unos 500 obreros especializados había llegado a 
 
24 Inmaculada Aguilar, 100 años de Historia de la Aviación en la Comunidad Valenciana, Generalitat 
Valenciana, Conselleria d’Infraestructures i Transport, Valencia, 2009, p. 167. 
23 
 
las tierras alicantinas en 1936, tres años después serían unos 1.300. La actividad llegaría a su 
fin con la llegada de las tropas italianas a las zonas de Alicante.25 
Hasta esa fecha, en el territorio valenciano solo existían tres aeródromos, Manises, 
Altet y Castellón, y ninguno tenía carácter militar. El de Manises y Altet eran empleados por 
las líneas aéreas, mientras que el aeródromo de Castellón era usado con fines deportivos y 
lúdicos por el aeroclub o en caso de emergencia. 
Podemos hablar de un verdadero esfuerzo bélico en el Levante español a la hora de la 
construcción de los aeródromos y sus infraestructuras. El territorio pasó de los tres iniciales a 
unos 45, a los que sumaron los campos de socorro y los ficticios (para engañar a la aviación 
enemiga). De los nuevos aeródromos: 8 se ubicaron en las provincias limítrofes de Cuenca y 
Teruel; 9 en la provincia de Castellón; 18 en Valencia y unos 10 en Alicante. Como podemos 
observar, en la provincia de Valencia fue donde el gobierno republicano ordenaría construir 
un número mayor de aeródromos militares. La planificación de los emplazamientos y de sus 
construcciones tenía como principal objetivo dotar al territorio de una red de aeródromos 
capaces de ofrecer apoyo aéreo a los frentes que se encontraban bajo su responsabilidad. En 
el caso de los aeródromos, del Levante, su objetivo inicial fue el apoyo al frente de Teruel. 
La mayoría de los campos del levante español, se edificaron entre fines de 1936 y 
mediados del año siguiente; las obras, como término medio tuvieron una duración de mes y 
medio, tiempo considerado suficiente para allanar el terreno y delimitar el campo, aunque la 
construcción de defensas y refugios podía hacer que la construcción se alargase más por 
ejemplo el caso del aeródromo de Vilafamés que tardaría unos tres meses en alcanzar su 
máxima operatividad. 
Dada la gran importancia de la aviación durante el conflicto, en mayo de 1937 el 
gobierno republicano creó un organismo con el objetivo de unificar todas las ramas y el 
personal existente a nivel militar, civil y naval en una. Se había creado el Arma de Aviación y 
se había conformado de este modo el Ejército del Aire. Todo el territorio que ocupaba el 
gobierno republicano se hallaba estructurado en siete regiones aéreas, que poseían su propia 
prefectura y se dividían a su vez en diversos sectores aéreos. 
 
 
 
 
 
25 Ibid., p.177. 
24 
 
Mapa nº1 
Distribución de los aeródromos republicanos valencianos en 1937 
 
 
Fuente: Manuel Carreres. Aeròdroms Valencians de la Guerra Civil. Escenaris, elements i 
memòria d’una xarxa per a la defensa del territori, 2018. 
 
 
A efectos del presente trabajo nos interesa resaltar la cuarta región correspondiente al 
País Valencià y parte de Teruel, región encabezada por el aeródromo de Manises a Valencia. 
A lo largo de todo el conflicto civil, el gobierno republicano dotaría a cada región aérea de 
multitud de campos de aviación, con un mínimo de treinta y un máximo de cien, para un total 
de cuatrocientos aeródromos de carácter militar. 
25 
 
Los campos de aviación estaban divididos en cuatro tipos, según su importancia o 
categoría: permanentes, semipermanentes, campos de socorro y campos eventuales. 
 Los campos permanentes contaban con una fuerte presencia de elementos de 
comunicación así como guarniciones y defensas permanentes y servían de base de 
aprovisionamiento principal. Los aeródromos semipermanentes ofrecían servicios o reunían 
las condiciones y características de una base de aprovisionamiento secundaria. Los eventuales 
eran el resto, siempre que un avión pudiera aterrizar y despegar en él. En último lugar, los 
campos de socorro fueron aquellos en losque debido a sus condiciones y características 
solamente debían emplearse en casos de extrema necesidad. El número de guarniciones y 
defensas también variaba en dependencia de la importancia del campo, en algunos casos de 
aeródromos militares de socorro por ejemplo, solamente se empleaba un guardia para 
vigilarlo.26 
Para las construcciones que eran de vital importancia para el funcionamiento óptimo 
de los aeródromos, se realizaron unas directrices que marcaban las instalaciones 
mínimamente necesarias para cada uno de los cuatro tipos de campos. 
Un campo de carácter permanente tenía la obligación de contar con dormitorios tanto 
para sus oficiales como para soldados además de baños, cocina, cantina y comedor para la 
tropa. También debía estar dotado de un centro médico y habitaciones destinadas al alto 
mando y para los de telecomunicaciones, telefónico y telegráfico. Para la defensa, se debía 
contar con un gran refugio antibombas con capacidad para el alto mando y todo el que lo 
precisara (unas 150 personas de capacidad) y diversos refugios elementales situados 
alrededor del perímetro, cobertizos para vehículos, aljibe, depósitos y luz eléctrica propia. 
Los aeródromos militares semipermanentes debían contar con casi los mismos elementos y 
edificaciones que un campo permanente, solo que los semipermanentes estaban destinados a 
ser utilizados por un menor número de soldados y mecánicos, por lo que los refugios, 
almacenes, barracones y otros elementos no eran tan grandes e imponentes como en un 
campo destinado a funcionar de manera constante y permanente. En realidad los campos 
permanentes y semipermanentes solo se distinguían por el número de efectivos destinados en 
ellos.27 
Por su parte los aeródromos eventuales, eran más pequeños, con dormitorios para 
unas 30 personas, baños y duchas más sencillas, un refugio para 100 personas y varios 
refugios elementales. En último lugar encontramos los campos de socorro, débilmente 
 
26 Manuel Carreres, Aeródroms Valencians de la Guerra Civil. 2018, p.26 
27 Ibid., p.12. 
26 
 
protegidos debido a su empleo muy ocasional y donde se empleaban casetas próximas al 
perímetro para la tropa de guardia, aprovechando cualquier elemento ya edificado para su uso 
y así evitar costes.28 
Con la finalidad de mantener unas directrices comunes sobre la construcción de los 
campos de aviación se elaboraron varios panfletos y circulares donde se ofrecían los pasos y 
las instrucciones a seguir. Ahí se especificaba que en la construcción de un campo de 
aviación no se podía tardar más de un mes y los trabajos debían ser realizados por la 
población civil de los alrededores. Una vez se seleccionaba el sitio y se aprobaba, se 
elaboraba el plan de trabajo a seguir siempre cumpliendo con las necesidades mínimas que se 
debían cumplir. Todos los campos en un inicio eran catalogados como eventuales hasta que 
se ordenaba lo contrario, para adaptarse a las funciones que el gobierno necesitase de él. 
El primer y más importante de los pasos para la construcción de un campo de aviación 
era el de buscar, preparar y trazar el perímetro. En la mayoría de las veces los terrenos 
seleccionados se expropiaron, los cultivos que había en él se arrancaban para allanar y 
limpiar la superficie y uniformar la tierra todo lo que fuera posible y facilitar el despegue y 
aterrizaje de las aeronaves. El resultado final era una pista de unos 300 m de longitud, a favor 
de los vientos dominantes para ayudar a la aviación. El siguiente paso serían las obras 
generales.29 
Dentro de lo posible siempre se aprovechaba la presencia de corrales y masías 
próximos al campo de aviación para reducir los costes. Para la construcción de edificios se 
emplearon materiales de calidad a fin de ofrecer la mayor comodidad aunque siempre con el 
menor coste posible. Uno de los aspectos más importantes de los campos de aviación serían 
las defensas para las personas que operaban allí: los refugios. El principal refugio antibombas 
se encontraría próximo a las instalaciones más importantes, con gran capacidad y resistencia 
para bombas de hasta 100 kg en algunas ocasiones. También dispondrían de trincheras-
refugios más pequeños distribuidos por la periferia del resto del campo. Tanto los polvorines 
como almacenes de munición y talleres, siempre que el aeródromo contase con ellos, debían 
situarse a las afueras de los campos, o en las poblaciones próximas, para minimizar los daños 
en caso de un ataque. La disposición de los aviones y las defensas antiaéreas en hangares o 
camuflados en arboledas próximas al campo era lo habitual pues así no podían ser detectados 
fácilmente desde el aire.30 
 
28 Ibid., p. 12. 
29 Ibid., p. 13. 
30 Ibid., pp. 13-15. 
27 
 
A consecuencia de la conocida como Ofensiva del Norte en el otoño de 1937, las 
tropas sublevadas ocuparon toda la franja cantábrica y marcaron como objetivo continuar 
hacia Madrid, marchando por el frente de Guadalajara. Con la finalidad de alejar a las tropas 
franquistas de la capital, el ejército republicano decidió realizar un contragolpe e intentar 
tomar el control de Teruel. El 22 de diciembre de 1937 las tropas republicanas tomaron la 
capital turolense. En respuesta, el general Franco decidió parar su ataque sobre Madrid y 
enviar sus tropas en dirección a Teruel. Daba comienzo a la conocida como Batalla de Teruel, 
una de las más cruentas de todo el conflicto y que finalizaría con el abandono de la ciudad 
por parte de los republicanos el 22 de febrero de 1938. 
A lo largo de este episodio bélico de apenas dos meses, podemos observar que es la 
primera vez, desde que se inicia la Guerra Civil española, en la que los aeródromos del 
territorio valenciano participaron de manera activa y directa en el conflicto. Hasta la fecha 
solamente se había empleado la aviación estacionada en las infraestructuras valencianas para 
labores en retaguardia y para hacer frente a los constantes ataques aéreos, por parte de la 
aviación italiana y franquista, proveniente de las Islas Baleares que se habían intensificado ya 
que Mallorca, quedó desde el inicio de la guerra bajo control de los sublevados. 
Para preparar el ataque sobre Teruel, el mando republicano desplazó la aviación, 
concentrada en mayor medida en Aragón y Cataluña, a los aeródromos del territorio 
castellonense y valenciano. Con el transcurso de la batalla algunas de las escuadrillas irían 
posicionándose por otros campos como el de Barracas, El Toro, Sagunto, Liria, Vilafamés o 
Sarrión. 
 A medida que el ejército republicano iba perdiendo terreno y el frente acercándose a 
Castellón, la aviación republicana se situaría en los campos de aviación catalanes y 
valencianos. 
De los campos de aviación despegarían diversas escuadras de bombarderos y de 
cazas, los primeros, más pesados, estarían protegidos por los segundos. Los cazas enemigos, 
realizaron verdaderos combates veloces y vertiginosos que dejaban tras de sí campos, pueblos 
y ciudades asoladas. 
Como hemos podido observar, la función de la aviación fue cogiendo protagonismo al 
paso de las campañas y el avance de la guerra. Los aviones de caza y bombarderos rusos 
fueron perdiendo ventaja en algunos aspectos frente a los nuevos aviones alemanes de la 
Legión Cóndor y los veloces aviones italianos. 
28 
 
Franco fijó su objetivo en la conquista de Valencia. Las batallas aéreas se 
intensificaron y el avance de las tropas franquistas se quedó detenido ante las defensas 
republicanas como la imponente línea XYZ. 
 
 
 
29 
 
CAPÍTULO II 
LA CAMPAÑA DE LEVANTE 
 
 
Una vez finalizada la Ofensiva de Aragón en abril de 1938, las tropas franquistas 
preparon una nueva ofensiva, ahora, sobre Valencia y los territorios levantinos. El objetivo 
principal era ocupar la capital del Turia que había capital de la República duranteun año. A 
lo largo de los cuatro meses que duró la ofensiva (entre abril y julio de 1938) las tropas 
republicanas ofrecieron una verdadera resistencia numantina, que acabó dándole una 
verdadera victoria defensiva frente a las tropas franquistas, rechazadas debido a la defensa 
palmo a palmo del territorio y a la inexpugnable línea XYZ. 
Tras la derrota republicana en Aragón, las tropas sublevadas habían conseguido llegar 
a Vinaroz y el día 15 de abril, cuando la tomaron, dividieron a la España legítima en dos. 
Cataluña, al norte, quedó separada de las tierras valencianas al sur de Vinaroz. Con la llegada 
de los sublevados a la costa del Mediterráneo, en Vinaroz, tuvieron que tomar la decisión de 
atacar Cataluña o avanzar hacia Valencia, en el sur. 
 
 
1- La batalla por Valencia. 
La decisión de Franco sobre atacar Valencia fue el detonante de la Batalla de Levante, 
que afectó a las provincias de Castellón y Teruel. Tras un rápido avance por las tierras del 
Maestrazgo, el alto mando de las tropas sublevadas pensó que en pocos días conseguirían 
alcanzar Valencia.31 
La decisión de Franco de avanzar hacia Valencia ha sido tema de debate entre los 
historiadores. La mayoría concuerda en afirmar que si Franco hubiera optado por tomar 
Cataluña, en lugar de Castellón, Sagunto y Valencia, la Guerra Civil se hubiera acabado en 
mayo de 1938. La victoria defensiva republicana en la Batalla de Levante y la posterior 
resistencia en la Batalla del Ebro alargó la vida de la República casi un año más.32 
 
31 Alfredo Fornás Pallarés, “La línia XYZ a la Batalla de Llevant. Contextualització històrica i 
projecte per posar en valor la línia defensiva que aturà a l’exèrcit de Franco”, Ebre 38, nº 10, 2020, p. 
45. 
32 Vicent Grau Reig, “La gran batalla de Llevant: una victòria republicana silenciada”, Ebre 38, nº 10, 
2020, p. 15. 
30 
 
Se ha señalado que la decisión de Franco de atacar primero Valencia, tenía otros fines. 
El hispanista e historiador Paul Preston asegura que se debió a la búsqueda de la rendición 
total e incondicional del enemigo y la aniquilación gradual de la República. 
 
“Una ofensiva sobre Cataluña, donde se ubican los restos de la industria bélica de la 
República, habría precipitado el fin de la guerra; pero Franco no tenía ningún interés en la 
caída abrupta de las fuerzas republicanas, que habría dejado aún a cientos de miles de 
enemigos armados en el centro y el sur de España. Tampoco quería volverse sobre Madrid, 
puesto que una debacle rápida en la capital habría dejado a su vez numerosas fuerzas 
republicanas en Cataluña y el sudeste. Ambas opciones hubieran desembocado en un 
armisticio, que habría supuesto hacer concesiones a los vencidos. Franco se proponía, como 
ya había explicado claramente a los italianos, la aniquilación gradual pero absoluta de la 
República y sus defensores”.33 
 
Franco optó por una decisión cruel y también muy criticada entre algunos de sus 
generales. Alargar la guerra significaba la victoria total y a ojos de Franco debió ser la 
decisión más efectiva. La decisión se adoptó más por motivos políticos que militares, ya que 
Barcelona se encontraba casi indefensa y a la mayoría de generales franquistas se les impuso 
dicha táctica militar muy en contra de su voluntad. 
Es importante también señalar el contexto político de la República cuando tuvo lugar 
la ofensiva. El 6 de abril se presentó dentro del Estado español, el nuevo gobierno de Juan 
Negrín, después de una gran crisis política interna debido a las dos posturas que se 
enfrentaban. Por un lado, el bando pactista de Indalecio Prieto y Manuel Azaña, del otro lado, 
Negrín y sus seguidores socialistas y comunistas, partidarios de la resistencia. Tras la 
dimisión de Prieto, se formó un gobierno de Guerra, plural y unitario donde volvieron a 
participar activamente los sindicatos. Se asumió el eslogan “Resistir es vencer” y continuar 
con la guerra, con la idea de que la tensión presente en Europa diera paso a un conflicto 
global y por ello, el resto de democracias necesitarían ese apoyo de la República frente a los 
totalitarismos europeos. El principal objetivo del gobierno era aguantar todo lo posible hasta 
la llegada de ayuda internacional y con ella vencer a los sublevados y sus aliados.34 
La situación de las tropas republicanas era bastante alarmante. Tras el final de la 
Batalla de Aragón la desbandada que siguió por parte de los soldados republicanos fue 
desordenada. La llegada de las tropas sublevadas a la costa desmoralizó aún más al Ejército 
de Maniobra. El Ejército Popular de la República acababa de perder unas 7 divisiones y había 
 
33 Paul Preston, El holocausto español: odio y exterminio en la Guerra Civil y después, Debate, 
Barcelona, 2011, p. 603. 
34 Vicent Grau Reig, “La gran batalla de Llevant”, pp. 15-16. 
31 
 
sufrido la disolución de tres cuerpos, encontrándose prácticamente derrotado.35Así era la 
situación en la que se encontraban las tropas republicanas cuando los sublevados 
consiguieron llegar al mar, días antes al inicio de la ofensiva de Levante. A partir del 18 de 
abril, las tropas franquistas dirigidas por el general Antonio Aranda se enfrentaron a las 
tropas desgastadas del coronel Leopoldo Menéndez. 
Con el fin de mejorar la moral y el rendimiento de los soldados, Leopoldo Menéndez, 
como comandante en jefe del Ejército de Maniobra, propuso una serie de pautas a seguir al 
general valenciano Vicente Rojo. 
Una de las principales necesidades era acabar con la indisciplina de algunas unidades 
y también con las desbandadas de las tropas, para ello se organizaron las líneas de defensa. 
También hizo falta incrementar los centros de recuperación de soldados y la mejora de su 
etapa instructiva. Todas las medidas se convirtieron en leyes que afectaron no solo al 
Ejército de Maniobra, sino al conjunto del Ejército Republicano. El general José Miaja, 
considerado uno de los héroes de la Batalla de Madrid, hizo frente a la situación de 
agotamiento y desorganización de los dos ejércitos que participaron en la Batalla de Levante; 
el de Levante y el de Maniobra. Castellón se convirtió entonces, en el principal centro de 
instrucción y movilización de tropas además de principal punto de resistencia de las comarcas 
del norte del territorio valenciano.36 
El papel que tuvo la población valenciana, para preparar las defensas del territorio 
frente a las tropas sublevadas, fue muy importante. Ejemplo de dicha colaboración entre la 
población civil y el ejército fue la construcción de las líneas de defensa o también el 
incremento de los voluntarios. Acciones que ayudaron a acabar con los tópicos sobre lo 
desorganizado e incapacitado que era el Ejército Republicano. 
 
“Frente al tópico del caos y la desorganización, tan presentes en la visión común que 
tenemos de la República en guerra, este episodio de la defensa valenciana fue, en líneas 
generales, un modelo de colaboración entre el ejército y el pueblo, de consenso entre las 
fuerzas políticas del Frente Popular, de cuidada planificación en la defensa, de organizaciones 
en el abastecimiento, reclutamiento y preparación de la tropa”.37 
 
Franco buscaba conseguir la victoria del mismo modo empleado para conseguir la 
derrota de las tropas republicanas en la ofensiva de Aragón. Una ofensiva rápida y mecánica 
 
35 Ibid., p. 17. 
36 Ibid., pp. 18-19. 
37 José Vicente Durbán Aparisi, Edelmir Galdón Casanoves, Ramón Juan Navarro et al., La guerra 
civil en el Alto Palancia. La comarca en la defensa de Valencia (1938), Instituto de Cultura del Alto 
Palancia, La Vilavella, 2011, p. 15. 
32 
 
pero ahora con el objetivo de tomar Castellón, Sagunto y Valencia, con la idea de que tras 
conquistar la que una vez fuera capital de la República, la zona central caería también.Desde un comienzo, el alto mando franquista planificó para la Ofensiva de Levante el 
avance de sus tropas en dos direcciones. Por la costa, siguiendo la carretera Barcelona-
Valencia y por el interior, en dirección a Sagunto desde Teruel. Otra línea de ataque acabó 
surgiendo entre estas dos y con Rafael García Valiño al mando que dio apoyo al general 
Antonio Aranda que avanzaría por la costa y a José Enrique Varela por el interior.38 
 
Tabla nº2 
 
 
Fuente: Elaboración propia. Datos extraídos a partir de Vicent Grau (2021) 
 
 
El 18 de abril a la madrugada dio comienzo la Batalla de Levante y la 4ª División de 
Navarra se puso en marcha desde Benicarló hacia Castellón, sin esperar ningún tipo de 
resistencia. Por otro lado, las tropas republicanas ocuparon sus posiciones en la primera línea 
avanzada desplegando entre sus hombres vehículos blindados.39 
Con el inicio del avance franquista en el frente, también dieron comienzo los ataques 
aéreos. La primera en actuar fue la aviación republicana, la 4ª División de Navarra no tuvo el 
apoyo ni de la artillería ni de la aviación durante el primer día de la ofensiva, debido a un 
exceso de confianza y de infravalorar a las tropas republicanas. En los siguientes días, las 
tropas franquistas ya actuaron con el apoyo, antes de avanzar, de la artillería y de las unidades 
aéreas.40 
 
38 Vicent Grau Reig, La batalla de Llevant, una victòria silenciada, Publicacions de la Universitat 
Jaume I, Castellón, 2021, pp. 415-416. 
39 Ibid., pp. 420-421. 
40 Carlos Malench Sanz y Blas Vicente Marco, ¡Objetivo: Levante!, 2015, pp. 125-127. 
33 
 
Al día siguiente del inicio de la ofensiva franquista el 18 de abril, se empezó a 
desplazar gran parte de la aviación republicana a los aeródromos militares valencianos. La 
tercera y cuarta escuadrillas de cazas I-15 se movieron a los campos de Castellón y Vilafamés 
respectivamente. 
Desde el principio de la ofensiva, las tropas sublevadas se encontraron con una fuerte 
resistencia y capacidad de respuesta de las tropas republicanas que se mantendría así durante 
toda la campaña. El avance de las tropas franquistas fue muy lento y cuando conseguían 
ocupar una posición, muchas veces era a costa de sufrir numerosas bajas. 
En contra de todo lo previsto el 4 de mayo, el frente se estabilizó a la altura del río 
San Miguel (a unos 50 km de Castellón) ya que las tropas del Ejército de Galicia no pudieron 
superar las defensas republicanas. Aranda no pudo llegar al Mijares, ni tomar la ciudad de 
Castellón.41 
El fracaso de Aranda en la primera fase de la ofensiva de Levante, permitió a la 
República empezar con la construcción de la línea de defensa llamada XYZ. Además la 
victoria defensiva republicana facilitó la recuperación de las tropas y la creación del Ejército 
del Ebro como ha señalado el historiador Vicent Grau Reig.42 
Una vez detenido el avance de las tropas del general Aranda por la costa, Franco se 
vio obligado a añadir más recursos y hombres a las fuerzas con las que contaba para la 
ofensiva. El general Rafael García Valiño fue el elegido para intentar romper la línea 
defensiva republicana, siendo ahora tres las vías de penetración franquista. Las tropas de 
Valiño avanzaban muy lentamente debido a la resistencia que ofrecían las tropas 
republicanas, mientras las tropas del general Aranda, que no habían cruzado el río. 
El avance del general Valera por el sector más cercano a Teruel y el de las tropas de 
Valiño, amenazaban con romper el frente republicano, pero las defensas realizadas por los 
Ejércitos de Levante y el de Maniobra, de la zona del Maestrazgo, todavía ofrecían 
resistencia.43 
La nueva situación que se daba en el campo de batalla obligó al bando republicano a 
reaccionar. El general Miaja, decidió crear la Agrupación Toral con el objetivo de defender 
los sectores de Vilafranca-Ares y ordenó la construcción de una línea defensiva (la de 
Levante) que nació en Oropesa, transcurrió por Cabanes-Vilafamés hasta Vistabella y hacia 
el interior pasando Mosqueruela, con la idea de proteger la capital de la provincia. A pesar de 
 
41 Vicent Grau Reig, “La gran batalla de Llevant”, p. 22. 
42 Ibid., p. 26. 
43 Vicent Grau Reig, La batalla de Llevant, p. 417. 
34 
 
la conquista de Mosqueruela el 17 de mayo, las tropas franquistas de Valiño habían 
conseguido avanzar pero se encontraban ya desgastadas debido al elevado coste de su avance. 
Las posiciones defensivas republicanas todavía eran muy sólidas. Aranda se encontraba 
paralizado en la costa y Valera se topó con una carretera Teruel-Sagunto fuertemente 
defendida por las tropas republicanas.44 
Debido al mal tiempo de las últimas semanas de mayo, el general en jefe del Ejército 
del Norte, Fidel Dávila, modificó su estrategia centrando todas sus fuerzas en un sector 
reducido del frente. Una estrategia totalmente nueva para conseguir apoderarse de Castellón. 
Su objetivo era el de atacar el flanco de Ares a Vistabella y a la altura de Canes-Adzaneta 
dirigirse hacia la costa al sur de Castellón. Los principales bombardeos de la aviación nazi, 
con los aviones Stukas, se centraron en los pueblos de Ares, Albocácer i Benasal en la última 
semana de mayo de 1938. Para hacer frente a la superioridad del Ejército franquista y a la 
nueva estrategia de Dávila, (superioridad tanto en hombres como en material bélico) Miaja, 
siguió abasteciendo de tropas frescas al Ejército de Levante, dirigido por Menéndez. Frente al 
peligro de quedar totalmente rodeados las tropas republicanas de Albocácer-Coves de 
Vinromà acabaron retrocediendo hasta la línea de Levante el 11 de junio.45 
El inicio de la tercera fase de la Ofensiva de Levante tuvo lugar el 12 de junio de 
1938, cuando se organizaron las defensas para intentar proteger la ciudad de Castellón en 
caso de un ataque directo. El mismo día, la población civil más comprometida con la 
República abandonó la ciudad por miedo a que cayera en manos de los sublevados, lo que 
ocurrió el día 13 de junio. Al día siguiente las tropas republicanas tenían la orden de 
recuperar la ciudad de Castellón, y lo lograron, combatiendo casa por casa los días 13 y 14. 
No obstante, el día 15, por miedo a que las tropas republicanas fueran rodeadas, se les ordenó 
que abandonaran la ciudad.46 La llegada de las tropas sublevadas a la ciudad de Castellón fue 
magnificada por la propaganda franquista, habían previsto apoderarse de la ciudad en días y 
les había costado meses. La toma de Castellón la podemos encontrar en el documental 
realizado por Rusell Palmer, Defenders of the faith que refleja la ocupación de la ciudad 
como un día de fiesta, donde tras un desfile militar, las tropas rebeldes reparten todo tipo de 
alimentos a las masas.47 
 
44 Vicent Grau Reig, “La gran batalla de Llevant”, p. 27 
45 Ibid., pp. 28-30. 
46 Ibid., p. 31. 
47 Alfredo Fornás Pallarés, “La línia XYZ a la Batalla de Llevant”, p. 47 
35 
 
La última etapa de la ofensiva tuvo dos fases diferenciadas. La primera, se desarrolló 
en el umbral de la línea XYZ, pero alrededor de la Sierra de Espadán entre el 23 de junio y el 
10 de julio. Una vez los sublevados consiguieron tomar Castellón y los pueblos de Villarreal, 
Onda, Betxí, Burriana y Nules, a partir del 8 de julio, los ataques se concentraron en las 
principales cimas de la Sierra de Espadán, en el corazón de la línea XYZ.48 
En la última fase de la Ofensiva de Levante, las tropas franquistas tuvieron que hacer 
frente a la imponente línea XYZ, llamada así debido a que las tres últimas letras del 
abecedario significaban que dicha línea de defensas era la última con las garantías de proteger 
Valencia.49 Constaba de unos 150 km de fortificaciones en torno a 14 puntos de resistencia, 
partiendo desde Almenara en la costa y prosiguiendola Sierra de Espadán hasta llegar al 
oeste de Santa Cruz de Moya en Cuenca. 
Las tropas franquistas lanzaron ataques directos sobre la línea, la orografía del terreno 
dificultaba mucho su avance y la cantidad de refugios y lo estratégicamente de su posición 
los hacían casi indetectables para la aviación y artillería sublevada. A los pies de la Sierra de 
Espadán tuvieron lugar los enfrentamientos más intensos de toda la batalla y también donde 
el ejército rebelde sufrió más bajas. En muchas ocasiones los dos frentes quedaron 
paralizados uno frente a otro, sin poder avanzar. Los enfrentamientos fueron enfriándose 
debido al agotamiento y desgaste de ambos bandos, hasta el inicio de la Batalla del Ebro el 25 
de julio, que desplazó la atención hacía el nuevo escenario dando por finalizada la Ofensiva 
del Levante. 
 
 
2- La batalla aérea más grande. 
A mediados del mes de julio de 1938, tuvo lugar la ofensiva rebelde más dura y fuerte 
sobre las defensas y territorios republicanos. Además se dio una de las batallas aéreas más 
grandes de la historia hasta la fecha. Ya que la aviación, aunque presente ya en algunos 
escenarios de la Gran Guerra, se encontraba en su punto álgido de actuación en la Guerra 
Civil Española. 
La batalla de Levante se encontraba en su fase más decisiva, por lo cual, antes de que 
se iniciara la ofensiva franquista, el día 13 de julio, todas las actividades de la fuerza aérea 
con la que podían contar las tropas rebeldes se intensificaron enormemente.50 Una vez que el 
 
48 Vicent Grau Reig, “La gran batalla de Llevant”, p. 32. 
49 Alfredo Fornás Pallarés, “La línia XYZ a la Batalla de Llevant”, p. 48. 
50 Vicent Grau Reig, La batalla de Llevant, p. 542. 
36 
 
frente de batalla se desplazó a los territorios valencianos, las intervenciones de la aviación 
fueron un factor decisivo para el resultado de los enfrentamientos. 
A lo largo del conflicto, como hemos podido ver anteriormente, la actuación de los 
cazas y bombarderos fue adquiriendo un mayor protagonismo. El papel de la aviación llegó a 
ser tan importante que su participación en una batalla condicionaba el avance de las tropas de 
infantería por el terreno que había sido previamente atacado desde el aire, ofreciendo así un 
apoyo que decidió en muchas ocasiones el resultado de las batallas. 
El 12 de julio, fueron varios los vuelos que tenían como objetivo el reconocimiento de 
los territorios de Sarrión y la Puebla de Valverde. Por la noche una veintena de He-111 
alemanes protegidos por cazas Bf-109 lanzaron unas 25 toneladas de material explosivo sobre 
las tropas republicanas que se encontraban destinadas en las localidades de Soneja, Navajas y 
Segorbe, siendo la última muy afectada debido a su importancia en la línea republicana de 
defensa, funcionando como importante centro de comunicaciones además de ser la capital de 
la comarca.51 
Al desplazamiento del gran número de efectivos aéreos le acompañó hasta un total de 
12 divisiones terrestres con el objetivo de ir rompiendo las defensas republicanas en dirección 
a la ciudad de Valencia. El objetivo principal de las tropas rebeldes era acabar con las 
defensas del Ejército de Levante y así poder tomar la capital valenciana. 
Debemos recordar que Mussolini tenía pensado terminar de un modo rápido con la 
Guerra Civil española y así poder retirar sus tropas del conflicto. Por dicho motivo, en las 
siguientes fechas, había enviado nuevas tropas de refresco y también un número importante 
de bombarderos. De las 12 divisiones rebeldes lanzadas para avanzar hacia Sagunto-
Valencia, 4 eran italianas. La División Legionaria XXIII de Marzo, la División Littorio, el 
Regimiento de Carros y la Brigada Mixta Flechas Azules.52 
Así se presentaban en el mes de julio las estrategias que siguieron las tropas rebeldes 
con el fin de conseguir tomar Valencia, defendida por varias líneas de defensa, entre las 
cuales encontramos la línea XYZ. 
Según los datos encontrados, el primer día de la fase final de la ofensiva franquista 
sobre Levante, hubo una serie de intensos ataques por parte de los bombarderos y la artillería 
rebelde. Llegaron a participar casi 200 aviones de todo tipo (cazas, bombarderos, escolta y 
apoyo) y se arrojaron unas 84 toneladas de bombas para apoyar a las tropas terrestres que se 
 
51 Ibid., p. 543. 
52 Ibid., p. 544. 
37 
 
lanzaban al asalto de las defensas republicanas. Táctica más que habitual en los ataques 
rebeldes hasta el fin de la guerra.53 
Para entender la magnitud de la ofensiva franquista, observamos los datos que ofreció 
el General Vicente Rojo. El 12 de julio, el Ejército Popular republicano disponía de unos 
220.000 soldados. Por su parte las tropas rebeldes llegaron a movilizar cerca de unos 260.000 
hombres.54 Fue una de las batallas más importantes de todo el conflicto civil, tanto por el 
número de personal y recursos empleados, como por los objetivos que se buscaban en el caso 
de una victoria rebelde. 
En cuanto al número de efectivos aéreos con los que contaba cada bando, 
encontramos a un ejército republicano ahogado por la política europea y que contaba con 
unos 128 aviones. Mientras el bando insurgente, contaba con la ayuda de toda la aviación 
italiana, de la Legión Cóndor de Alemania y parte de la aviación franquista. Las fuerzas 
aéreas rebeldes sumaban un total de entre 500 y 600 efectivos, que superaba con creces a la 
aviación gubernamental.55 
Las tropas rebeldes pensaban que la moral de los soldados republicanos era baja, no 
obstante, la serie de defensas como trincheras y refugios construidos con ayuda de la 
población local, inyectó cierta moral en las tropas defensoras que hicieron frente al avance 
franquista y lograron retrasarlo. El lento avance y algunas veces, los contraataques lanzados 
por los republicanos, hicieron fracasar el objetivo principal de las tropas franquistas: un 
avance rápido hacia Valencia. 
A partir del 17 de julio, la participación de la aviación fue más intensa y decisiva 
debido a que se tenía como objetivo acabar con las defensas republicanas en la línea de 
Viver-Jérica-Bejís, justo en la línea XYZ y a su vez sembrar el terror en la población civil 
que ayudaba al mantenimiento y construcción de las defensas. Debido a las casi agotadas 
dotaciones de los aviones republicanos, solamente podían actuar en aquellos lugares del 
frente donde se consideraban de máxima prioridad, ya que sin su ayuda, el frente corría el 
peligro de romperse y así las tropas rebeldes entrarían en su cinturón defensivo.56 
La comarca castellonense del Alto Palancia, sufrió la batalla aérea más grande hasta el 
momento ya que la aviación rebelde concentró aquí casi todas sus actuaciones. Atacando 
 
53 José Vicente Durbán Aparisi, Edelmir Galdón Casanoves, Ramón Juan Navarro et al., La guerra 
civil en el Alto Palancia, p. 252. 
54 Vicent Grau Reig, La batalla de Llevant, p. 546. 
55 Francisco Ciutat de Miguel, Relatos y reflexiones sobre la Guerra de España, Forma Ediciones, 
Madrid, 1978, p. 197. 
56 Vicent Grau Reig, La batalla de Llevant, p. 551. 
38 
 
todas las vanguardias republicanas, sus vías de aprovisionamiento y los pueblos de la 
retaguardia. La comarca soportó hasta el 25 de julio (final de la ofensiva) de manera 
consistente, los efectos brutales de los 27 bombardeos que se llegaron a realizar, donde 
algunas fuentes apuntan que dejaron casi 200 víctimas mortales y unos 374 civiles heridos. 
 
Tabla nº3 
Unidades de aviones enfrentados el 17 de julio de 1938. 
 
 
Fuente: Elaboración propia. Datos extraídos a partir de Vicent Grau (2021). 
 
 
El 25 de julio, algunos aviones rebeldes avistaron una concentración de tropas 
republicanas a orillas del Ebro. Las noticias de un ataque por parte de las tropas republicanas 
que se encontraban