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Revista Argentina de Clínica Psicológica ISSN: 0327-6716 racp@aigle.org.ar Fundación Aiglé Argentina Canestri, Luca; Donati della Lunga, Silvia; Reda, Mario Antonio Correlaciones psicofisiológicas durante una sesión standard de psicoterapia entre paciente y terapeuta: Observaciones preliminares Revista Argentina de Clínica Psicológica, vol. XIX, núm. 2, agosto, 2010, pp. 183-187 Fundación Aiglé Buenos Aires, Argentina Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=281921801008 Cómo citar el artículo Número completo Más información del artículo Página de la revista en redalyc.org Sistema de Información Científica Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto http://www.redalyc.org/revista.oa?id=2819 http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=281921801008 http://www.redalyc.org/comocitar.oa?id=281921801008 http://www.redalyc.org/fasciculo.oa?id=2819&numero=21801 http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=281921801008 http://www.redalyc.org/revista.oa?id=2819 http://www.redalyc.org 183 REVISTA ARGENTINA DE CLÍNICA PSICOLÓGICAVol. XIX 2 AGOSTO 2010 informe breve de invesTigación: correlaciones psicofisiológicas dUrante Una sesión standard de psicoterapia entre paciente y terapeUta: observaciones preliminares Luca Canestri, Silvia Donati della Lunga y Mario Antonio Reda* Resumen En la psicoterapia, como contexto diádico particular, es posible observar implicancias fisiológi- cas y emocionales tanto en el paciente como en el terapeuta. El presente estudio fue diseñado para investigar la relación entre las respuestas fisiológicas y las consecuentes respuestas emocionales que tienen lugar durante una sesión de psicoterapia. Nuestra investigación se focaliza en la observación de la fisiología de las emociones compartidas durante sesiones en vivo y de las consecuencias autonómicas que éstas producen en ambos par- ticipantes. Se efectuaron mediciones simultáneas de la conductividad epidérmica (GSR) y de la temperatu- ra de la piel (T) en 4 díadas paciente-terapeuta durante una sesión en vivo. En numerosos estudios la conductividad de la piel y la temperatura periférica demostraron ser dos de las medidas físicas más sensibles tanto para el nivel de activación como para la responsividad emocional y empática. Nuestros resultados preliminares sugieren que los terapeutas presentan respuestas fisiológicas consonantes con las de sus pacientes y en algunas de las díadas hemos observado una correlación significativa y concordante en la activación fisiológica. La fluctuación fisiológica fue registrada en sesiones de psicoterapia y grabada con diferentes pacientes en distintos momentos. Los resultados sugieren que cada terapeuta muestra un perfil psicofisiológico particular y que éste se mantiene en todas las sesiones, independientemente de los diferentes pacientes. Palabras clave: psicoterapia, empatía, fisiología. Key words: psychotherapy, empathy, physiology. * Luca Canestri, Silvia Donati della Lunga y Mario Antonio Reda. Universidad de Siena, Departmento de Ciencias Neurológicas y Comportamentales; Hospital Santa Maria delle Scotte, Siena, Italia E-Mail: reda@unisi.it REVISTA ARGENTINA DE CLÍNICA PSICOLÓGICA XIX p.p. 183-187 © 2010 Fundación AIGLÉ. (*) Título original en italiano: Correlazioni psicofisiologiche durante una seduta standard di psicoterapia tra paziente e terapeuta: osservazioni preliminari. Traducción: María Teresa Nieto. Los autores agradecen a los terapeutas que se sometieron al procedimiento de registro, haciendo posible el comienzo de la investigación. Introducción En la investigación científica efectuada a través del uso de fisiopolígrafos y, por ende, de técnicas de registro de índices psicofisiológicos, ha sido posible observar que a estados y fenómenos psíquicos como por ejemplo pensamientos y emociones, correspon- den variaciones orgánicas de índices bioquímicos periféricos (Anchisi y col., 1996; Basmajian, 1983). En los seres humanos, la activación emocional está caracterizada por una serie de procesos que se desa- rrollan a nivel somático, neuroendócrino, vegetativo y psíquico. Si los procesos cognitivos son difíciles de indagar a nivel neuronal, la actividad vegetativa autónoma del organismo humano puede ser obser- vada en forma directa a través de la medición de ín- dices periféricos de activación psicofisiológica. En la investigación de tipo psicológica, el regis- tro de datos electrofisiológicos (por ejemplo ritmo cardíaco, tensión muscular, reactividad eléctrica de las glándulas sudoríparas, etc.) se realiza durante la luCa CanEStRi, SilVia donati dElla lunga, maRio antonio REda 184 REVISTA ARGENTINA DE CLÍNICA PSICOLÓGICAVol. XIX 2 AGOSTO 2010 ejecución de una tarea o en respuesta a un estre- sor controlado por parte de un experimentador. De tal modo, es posible correlacionar el grado de acti- vación neurovegetativa y/o psicofisiológica con el comportamiento efectuado por el paciente durante el procedimiento experimental. Es posible observar todo esto también en las in- teracciones interpersonales, donde se activan fisio- lógicamente sistemas cognitivos y emocionales de tipo empático. El núcleo afectivo/sensorial que caracteriza a cada ser humano determina, en gran parte, la mo- dalidad a través de la cual un individuo se pone en contacto con otro (Reda y Mahoney, 1984; Reda, 2001) en cada contexto intersubjetivo, dentro del cual se determinan fluctuaciones emocionales que son sincrónicas en el sujeto implicado en esa rela- ción específica. En la psicoterapia, la relación terapeuta-paciente representa una particular interacción intersubjetiva, caracterizada por un alto nivel de confidencialidad y de involucración afectiva. No obstante, dicha rela- ción respeta de todos modos las mismas reglas y las mismas características presentes en toda relación entre seres humanos: los sujetos, dentro de la rela- ción, son parte activa y están implicados emocional- mente en ese proceso de interacción. Objetivo, materiales y método Esta investigación está orientada a la observa- ción de índices psicofisiológicos durante una sesión de psicoterapia, efectuada en forma contemporánea sobre el paciente y sobre el terapeuta. A través del uso sincronizado de dos fisiopolígra- fos, se releva tanto la respuesta galvánica cutánea (GSR) como la temperatura superficial (T) de ambos sujetos, durante el transcurso de una sesión normal de psicoterapia de aproximadamente 45 minutos de duración. Los terapeutas de la muestra difieren entre sí en cuanto a los grados de experiencia (principiantes, experiencia entre 1 y 5 años, experiencia mayor a 5 años). Los mismos fueron reclutados de la Escuela de Especialización en Psicología Clínica de Siena. En cambio, los pacientes de la muestra fueron voluntarios, reclutados del Servicio Universitario de Psicología y Psicoterapia para los Estudiantes, y tenían características sociodemográficas homogé- neas. Cada registro fue subdividido en 2 sesiones ex- perimentales. La primera de ellas, de aproximada- mente 3 minutos, para permitir a la díada adaptarse al procedimiento. La segunda, de 42 minutos, de Psicoterapia propiamente dicha. El relevamiento de los datos fue conducido con equipos SATEM Modulab 800 y SATEM Psycholab VD13, con intervalos de integración de los datos de 1 segundo; y a continuación fue registrado de modo digital a través de la conexión a una computadora personal con un software denominado Panda B6 (Fig.1.) Resultados y comentario Del número de registros efectuados hasta aho- ra puede observarse que los datos relativos a los índices psicofisiológicos de las diferentes sesiones (Figura 2-5) indican modalidades diferenciadas de respuesta psicofisiológica para cada díada pacien- te-terapeuta. En las activaciones de tipo emocional general- mente se observa un rápido incremento de algunosíndices psicofisiológicos , como la actividad electro- térmica, que aumenta de modo instantáneo durante las reacciones al estrés (Scrimali, Grimaldi, 1982). Otros índices, por el contrario, cambian en forma más lenta, como es el caso de la temperatura cutá- nea (Meichenbaum, 1990, 1976), la que normalmen- te sufre una disminución en condiciones de estrés. En algunos trazados psicofisiológicos, en condicio- nes de perturbación emocional, se observa fisioló- gicamente una correlación inversamente propor- cional entre los valores de temperatura (T) y los de respuesta galvánica cutánea (GSR) (Blanco, Marchi, Reda, 1982). La combinación de un índice rápido y de uno lento permite evaluar las diferentes fases de la terapia, permitiendo observar tanto el curso ins- tantáneo en las diversas sesiones como aquél más global de la sesión completa. Figura 1. Material y procedimiento para la adquisición de datos informe breve de invesTigación: CoRRElaCionES pSiCofiSiológiCaS duRantE una SESión StandaRd dE pSiCotERapia EntRE paCiEntE y tERapEuta... 185 REVISTA ARGENTINA DE CLÍNICA PSICOLÓGICAVol. XIX 2 AGOSTO 2010 Las curvas presentan un trazo similar en todos los terapeutas, tal como es posible notar en las figu- ras 2-5. Los índices rápidos (GSR) de los trazados de terapeuta y paciente se caracterizan por un curso no constante, con fases de activación y fases de recu- peración, aún cuando los valores absolutos al final de la sesión se mantienen poco diferentes de los del inicio y aún cuando los índices lentos (T) presentan valores iniciales y finales no muy diferentes entre sí. En todos los registros, la relativa estabilidad de la temperatura y de los valores medios del GSR indica una estimación global de cada adquisición. Tanto el paciente como el terapeuta muestran una serie de activaciones neurovegetativas, siendo capaces en- tre sí de modular esas activaciones en el curso de la sesión. Al final de las sesiones de registro el nivel de activación psicofisiológica retorna a valores simila- res a aquellos del inicio de la psicoterapia. Se evidencian relaciones de proporcionalidad directa entre las variaciones de los índices de los pacientes y aquellos de los terapeutas: a un incre- mento de los valores de GSR y de T del paciente se asocia un aumento de los valores de los índices rela- tivos a los terapeutas, y viceversa, como si hubiera una respuesta psicofisiológica que se activa y, por lo tanto, se modula durante la interacción, en dife- rentes fases de la sesión. Es interesante notar cómo, en el trazado que muestra la Fig. 2, el terapeuta con experiencia cer- cana a un año muestra poca activación fisiológica y tiene oscilaciones no muy elevadas tanto en lo que respecta al GSR como a las variaciones de tempe- ratura. Hay que tener presente, de todas maneras, que las oscilaciones del (GSR) indican variaciones mayores en relación a la activación del paciente. Figura 2. Terapeuta con experiencia cercana a 1 año Figura 3. Terapeuta con experiencia entre 1 y 5 años Figura 4. Terapeuta con experiencia de alrededor de 5 años Figura 5. Terapeuta con experiencia > de 5 años luCa CanEStRi, SilVia donati dElla lunga, maRio antonio REda 186 REVISTA ARGENTINA DE CLÍNICA PSICOLÓGICAVol. XIX 2 AGOSTO 2010 Otro resultado interesante es el obtenido en la sesión que se informa en la Fig 6: Podemos notar que en torno a los minutos 12- 13 el curso de la curva de GSR del terapeuta sufre un repentino incremento y la temperatura cambia su tendencia ascendente, aplanándose. Normal- mente la relación inversamente proporcional entre temperatura y actividad electrogalvánica cutánea representa un índice de estrés. La variación del GSR evidencia un notable aumento de tamaño respecto de antes, asentándose sobre valores bastante ele- vados. Posteriormente esta respuesta es regulada y mantenida constante. Un perfil como éste parece indicar que el terapeuta, luego de verse activado, ha logrado a continuación modular el estrés controlan- do la respuesta neurovegetativa. Comentario En las sesiones de psicoterapia registradas por nosotros se evidencian notables variaciones de la actividad psicofisiológica tanto por parte de los pa- cientes como de los terapeutas durante las sesiones de adquisición de datos. Al mismo tiempo se puede observar que los valores finales de temperatura y actividad galvánica cutánea resultan muy similares a los del inicio. En cada gráfico puede notarse que tanto los pacientes como los terapeutas resultan ac- tivados emocionalmente en el curso de la terapia, pero que de todos modos pueden recuperar, al final de la sesión, niveles de actividad neurovegetativa similares a los del inicio. Las perturbaciones emocionales, observables a través del incremento del índice rápido (GSR), se de- terminan en el curso de todas las sesiones tanto en el paciente como en el terapeuta. En casi todos los casos esas perturbaciones se ven activadas de ma- nera casi simultánea y, a continuación, son recípro- camente moduladas, evidenciando una tendencia de los índices a estabilizarse o a decrecer en ambos. En efecto, si se observa el curso de los trazos, se puede notar el modo en que en cada sesión tanto el paciente como el terapeuta han activado los pro- pios componentes emocionales y, a continuación, han modulado la respuesta de modo mayormente sintónico. En la sesión informada en la Figura 6 se hace evidente una elevación significativa del GSR del te- rapeuta sin una aparente variación en la actividad neurovegetativa del paciente. A continuación el te- rapeuta mantiene un elevado nivel de activación. La elevación del GSR representa un fenómeno de au- torregulación que el terapeuta puede operar ya sea para alcanzar el nivel de activación que le es nece- sario para conducir la sesión como también puede estar en relación a un tema cognitivo o emocional propio que el paciente puede activar en el curso de una sesión. En la mayor parte de los registros que efectua- mos, paciente y terapeuta han experimentado even- tos o situaciones emocionalmente significativas en el curso de las sesiones de psicoterapia. En ese sen- tido, el terapeuta puede asumir un rol de perturba- dor que induce estratégicamente estados emocio- nales particularmente significativos siendo capaz, entonces, de sintonizarse emocionalmente con el paciente ayudándolo en el proceso de regulación afectiva. Conclusiones La sintonización emocional diádica que se evi- dencia en nuestros registros representa, a nuestro parecer, uno de los elementos que caracterizan una relación orientada en sentido terapéutico. A través de su propia resonancia emocional, el terapeuta es capaz de reconocer, regular y reorganizar su propia actividad cognoscitiva relativa a sí mismo y al otro y de operar con el paciente un proceso de sintoniza- ción emocional (Reda y Canestri, 2006). En el modelo post-racionalista, el presupuesto de una relación terapéutica es el de instaurar una re- ciprocidad afectiva en la cual se respetan las carac- terísticas individuales en el conjunto de procesos de intercambio y de negociación afectiva. La condición de sintonía intersubjetiva permite al terapeuta indu- cir perturbaciones emocionales, sin que las mismas alcancen niveles extremos o no manejables por par- te del paciente. Esta posibilidad de experimentar de modo controlado sentimientos que de otra manera Figura 6. Terapeuta con experiencia de alrededor de 5 años informe breve de invesTigación: CoRRElaCionES pSiCofiSiológiCaS duRantE una SESión StandaRd dE pSiCotERapia EntRE paCiEntE y tERapEuta... 187 REVISTA ARGENTINA DE CLÍNICA PSICOLÓGICAVol. XIX 2 AGOSTO 2010 serían intolerables, favorece los procesos de reor- ganización del flujo cognoscitivo y orienta al pacien- te hacia el cambio (Guidano, 1990, 1992; Mahoney, 2003). BIBLIOGRAFíA Anchisi R., Gambotto Dessi M, (1996): Manuale del biofeedback: psicologia e medicina comportamentale, Cortina, Torino. Basmajian J.V., (1983): Biofeedback. Principles and practice for clinicians. II ed. Trad. it., (1985) Il biofeedback, aspetti teorici ed applicazioni pratiche. Piccin Nuova Libraria, Padova. Blanco S., Marchi E., Reda M.A., (1982): Modificazioni cognitive dopo trattamento in biofeedback. III Congr. Naz. di Biofeedback e di Medicina Comportamentale, Catania, 2-3 ott. pp. 67. Guidano V.F., (1990): De la revolución cognitiva a la intervención sistémica en términos de complejidad, La relaciõn entre teoría y práctica en la evolución de un terapeuta cognitivo. Revista de Psicoterapia, n° 10,pp. 113-129, Buenos Aires. Guidano V.F., (1992): Il Sé nel suo divenire. Bollati Boringhieri, Torino. Mahoney M.J., (2003): Constructive psychotherapy. Guilford Press N.Y. Meichenbaum D., (1990): Al termine dello stress. Prevenzione e gestione secondo l’approccio cognitivo- comportamentale. Erikson Editore, Trento. Meichenbaum D., (1976): Cognitive factors in biofeedback therapy. Biofeedback and self-regulation, 2, pp 201- 216. Reda M.A., (2001): Sistemi cognitivi complessi e psicoterapia. Carocci Editore, Roma. Reda M.A., Canestri L., (2006): Un approccio post- razionalista alla relazione in psicoterapia. Quaderni di Psicoterapia Cognitiva, 19, Vol.11,n°2, pp36-49 Reda M.A., Mahoney M.J. (1984): Cognitive psychoterapies. Ballinger, Cambridge Mass. Scrimali T, Grimaldi L., (1982): Il biofeedback dell’attività elettrodermica, Franco Angeli, Milano. Abstract: In psychotherapy, as a particular dyadic context, we can observe emotional and physiological implications for both therapists and patients. The present study was designed to investigate the relationship among physiologic responses and emotional consequences during a session of psychotherapy. Our investigation is oriented to observe the physiology of shared emotions during live psychotherapy sessions, and autonomic consequences for both participants. Simultaneous measurements of skin conductance (GSR) and skin temperature (Temp) of four patient-therapist dyads during a live therapy session were conducted. In many other studies skin conductivity and peripheral temperature were two of the most sensitive physical measures of arousal level, and of emotional and empathic responsiveness. Our preliminary results suggest that therapists have physiological responses in common with patients, and for some dyads patient-therapist we have observed a significant correlation and concordance in physiological activation. The physiological fluctuation concerning therapist was acquired in tree session of psychotherapy, and recorded in different times and with different patients. Our results suggest that every psychotherapist show an unique psycophisiological profile, which is maintained in every session regardless of’ different patients.
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