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Rev Esp Med Legal. 2011;37(2):59-66
0377-4732/$ - see front matter © 2011 Asociación Nacional de Médicos Forenses. Publicado por Elsevier España, S.L. Todos los derechos reservados.
www.elsevier.es/mlegal
Publicación Oficial de la asOciación naciOnal de MédicOs fOrenses
revISta eSpañola de
medIcINa
legal volumen 37 Número 2 abril-Junio 2011
Fundada en 1974
www.elsevier.es/mlegal
edItorIal
el médico forense como garante de los derechos humanos
orIgINal
determinación de un eje hipotético en registros incompletos. 
Su utilidad para la individualización de las marcas de mordeduras 
humanas
artÍcUlo eSpecIal
determinación de drogas de abuso en pelo )
caSo mÉdIco-ForeNSeS
ectopic tubular pregnancy in post tubectomy death 
medIcINa ForeNSe prÁctIca
guía práctica de evaluación medicoforense de alegaciones 
de maltratos y tortura 
revISIÓN
drogas emergentes: una perspectiva medicolegal 
cartaS al edItor
muerte súbita inexplicada en la epilepsia: implicaciones 
en patología forense 
medIcINa legal eN ImÁgeNeS
paludismo como causa de muerte súbita
revista española de 
medicina legal
* Autor para correspondencia.
Correo electrónico: anamaria.bermejo@usc.es (A.M. Bermejo 
Barrera).
ARTÍCULO ESPECIAL
Determinación de drogas de abuso en pelo
Ana María Bermejo Barrera * y María Jesús Tabernero Duque 
Instituto Universitario de Medicina Legal, Facultad de Medicina, Santiago de Compostela, La Coruña, España
Recibido el 7 de febrero de 2011; aceptado el 23 de febrero de 2011
PALABRAS CLAVE
Pelo;
Drogas de abuso;
Alcohol etílico
Resumen
La determinación de drogas de abuso en pelo es hoy en día una técnica habitual implan-
tada en los laboratorios de toxicología forense que siguen las recomendaciones propues-
tas por la Society of Hair Testing en el año 2004. Es una muestra biológica alternativa de 
fácil recogida, difícil adulteración, que no necesita condiciones especiales de conserva-
ción y, además, permite demostrar consumos anteriores a la toma de muestra. Es por ello 
que sus aplicaciones son cada día numerosas, incluida la posibilidad de determinación de 
marcadores de consumo crónico de alcohol etílico. No obstante, los métodos analíticos 
no están aún estandarizados por lo que ha de realizarse una correcta interpretación de 
resultados y tener en cuenta las limitaciones que esta muestra biológica presenta.
© 2011 Asociación Nacional de Médicos Forenses. Publicado por Elsevier España, S.L. 
Todos los derechos reservados.
KEYWORDS
Hair;
Drugs of abuse;
Ethyl alcohol
Determination of drugs of abuse in hair
Abstract
The determination of drugs of abuse in hair is now a routine technique in forensic 
toxicology laboratories following the Society of Hair Testing recommendations in 2004. It 
is an alternative biological sample that is, easily obtained, difficult to adulterate, does 
not require special storage conditions, and, furthermore, it demonstrates shows 
consumption prior to obtaining a blood or urine sample. For this reason, its applications 
are increasing in number, including the possibility of determining markers of chronic 
ethyl alcohol use. However, the analytical methods are not yet standardized; therefore, 
a correct interpretation of results must be performed, and the limitations of this biological 
sample must be taken into account.
© 2011 Asociación Nacional de Médicos Forenses. Published by Elsevier España, S.L. 
All rights reserved.
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60 A.M. Bermejo Barrero y M.J. Tabernero Duque 
Introducción
La investigación toxicológica de drogas de abuso en distin-
tas matrices biológicas ha sido siempre objeto de estudio y 
se ha desarrollado enormemente en los últimos años.
La sangre y la orina han sido, a lo largo del tiempo, las 
muestras biológicas más utilizadas para el análisis de drogas 
de abuso. La incorporación de las drogas en estos fluidos es 
bien conocida y el análisis y la interpretación de resultados 
se han convertido ya en hábito en los laboratorios de toxico-
logía. Sin embargo, en las últimas décadas se han comenza-
do a utilizar las “muestras alternativas”, que ofrecen mu-
chas ventajas frente a las muestras convencionales. Esto ha 
sido posible por el desarrollo reciente de técnicas analíticas 
de alta sensibilidad, que permiten la utilización de estas 
matrices, en las que, generalmente, se dispone de poca can-
tidad de muestra y con bajas concentraciones de tóxico, 
pero que son más fáciles de recoger y difíciles de adulterar.
Tras la absorción de una droga, la distribución, el meta-
bolismo y las vías de excreción justifican la aparición se-
cuencial de esta y sus metabolitos en diferentes tejidos y 
fluidos. Las propiedades fisicoquímicas de la droga y del 
fluido biológico pueden ser utilizadas para racionalizar la 
aparición de la droga en un fluido corporal o compartimento 
corporal. El pKa, la liposolubilidad, enlace a proteínas y la 
composición de los fluidos biológicos determinan en gran 
medida en qué fluidos la droga está presente.
En general, la elección de muestra biológica que analizar 
está condicionada por una serie de factores:
1. Recogida de muestra.
2. Análisis propiamente dicho.
3. Interpretación de resultados.
En cuanto a la recogida de muestra, se valorará: la inva-
sividad, el riesgo de infección, la facilidad y rapidez de re-
cogida, la necesidad de tener personal especializado para 
la toma, la facilidad de adulteración, la posible contamina-
ción, así como el volumen de muestra recogida.
En relación con el análisis, su finalidad cualitativa o cuan-
titativa, la ventana de detección, la concentración/acumu-
lación de droga en la muestra, la estabilidad de la droga, la 
necesidad de almacenamiento especial, el pretratamiento, 
así como la posibilidad de interferencias, disponibilidad de 
técnicas analíticas, la rapidez de análisis y el requerimiento 
de personal especializado, son también condicionantes en 
la elección de la muestra biológica que analizar.
Por último, la interpretación de resultados es también un 
determinante, en relación con los posibles efectos farmaco-
lógicos y el indicador de uso reciente de droga (horas), ex-
posición a corto plazo (días), exposición a largo plazo (se-
manas), sin olvidar en algunos casos la validez medicolegal 
del análisis cuando esta es importante.
Es importante, además, conocer los tiempos de aparición 
y desaparición de las drogas de las diferentes muestras bio-
lógicas (tabla 1), sobre todo de aquellas de gran utilidad en 
toxicología clínica y forense.
Actualmente el principal obstáculo al uso de toda la va-
riedad de matrices alternativas está representado por la 
ausencia de métodos de análisis universalmente aceptados 
y estandarizados. Así, el pelo y las matrices queratínicas, 
en general, están adquiriendo relevancia dentro de las 
muestras biológicas, existiendo ya materiales de referencia 
y valores de corte a que atenerse. Por el contrario, mues-
tras como la saliva o el sudor están aún en fase de estudio, 
aunque la SAHMSA (Substance Abuse Mental Health Service 
Administration) haya establecido una guía y valores de cor-
te también para estas dos muestras.
Muestras biológicas alternativas
Estas muestras presentan muchas ventajas frente a las con-
vencionales como, principalmente, la facilidad de recogida, 
la dificultad de adulteración y las diferentes ventanas de 
detección que presentan. Dichas ventanas, como puede 
verse en la figura 1, van desde pocas horas hasta años, por 
lo que, según la finalidad de nuestro análisis, la elección de 
la muestra puede ser diferente. 
Dentro de las muestras biológicas alternativas, el pelo ha 
comenzado ya a utilizarse como muestra biológica en los 
años sesenta-setenta para evaluar la exposición a metales 
como el arsénico o el mercurio, al pensar que en dicha 
muestra estos compuestos serían almacenadospor algún 
tiempo, por lo que su utilización era más recomendable que 
la de la sangre o la orina. Años más tarde, comienzan a 
realizarse análisis de compuestos orgánicos, entre ellos las 
drogas de abuso. Baumgartner (1979)1 publicó un trabajo 
sobre la determinación de heroína en pelo por radioinmu-
noensayo y, a partir de ese momento, comenzó a utilizarse 
todo tipo de técnicas analíticas para este tipo de determi-
naciones. En 1995 se fundó la Society of Hair Testing (SOHT), 
que ha establecido las líneas que deben seguirse en los aná-
lisis de pelo, desde la recogida de la muestra, como su pre-
paración y análisis propiamente dicho, estableciendo ade-
más valores de cut-off de referencia tanto para los 
procedimientos de cribado como los de confirmación. De 
hecho, en la actualidad es utilizado para determinación de 
todo tipo de xenobióticos (drogas, fármacos, hormonas, 
contaminantes ambientales, etc.) en ciencias forenses, 
toxicología clínica, etc.
Hoy en día es la muestra no convencional cuya utilización 
se ha implantado más en los laboratorios de toxicología, al 
presentarse como una muestra alternativa a la orina para el 
análisis de drogas de abuso, principalmente cuando esta no 
es válida por haber transcurrido demasiado tiempo tras el 
último consumo.
La muestra de pelo permite demostrar consumo de dro-
gas en momentos anteriores a la toma de muestra, ya que 
Tabla 1 Tiempo de aparición y desaparición de las 
drogas
Matriz Aparición Desaparición
Plasma 1-2 h Menos 24 h
Saliva 1-2 h 24-26 h
Orina 2-4 h 3-6 días
Sudor 2-4 h 3-6 días
Pelo 1 semana Hasta 1-2 años
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Determinación de drogas de abuso en pelo 61
en ella aparecen las drogas a los 7-10 días tras el consumo 
y ahí permanecen retenidas indefinidamente. Esto es debi-
do a las propiedades que tiene el pelo de almacenar, sin 
metabolizar, las diferentes sustancias que llegan a él trans-
portadas por la sangre o el sudor, representando una alter-
nativa al análisis de orina y de sangre cuando ha transcurri-
do demasiado tiempo desde el último consumo.
Es importante destacar, además, la facilidad de toma de 
muestra, así como el hecho de que no necesita condiciones 
especiales de almacenamiento y conservación.
El análisis de pelo no debe considerarse excluyente del de 
la orina, sino más bien como una prueba complementaria, 
aunque el resultado cuantitativo que proporciona sirve para 
evaluar la severidad y el modelo individual de consumo, cosa 
que no ocurre con los resultados obtenidos en la orina.
El mecanismo por el que las drogas se incorporan al pelo 
es bien conocido ya desde hace algunas décadas. El modelo 
multicompartimental propuesto por Henderson (fig. 2) es 
hoy en día el más aceptado2. Según este modelo, las drogas 
llegan al pelo por varias vías: primero desde la sangre que 
irriga el folículo piloso, por lo que la droga se incorpora al 
tallo del crecimiento del pelo. Además, llegan también des-
de el sudor y las secreciones de las glándulas sebáceas y 
apocrinas que rodean al folículo piloso, y por esta vía se 
incorporan ya en el pelo definitivo. Esto explicaría uno de 
los motivos de la gran variabilidad que existe en las concen-
traciones detectadas en el pelo entre individuos que consu-
men la misma dosis, debido a la gran variabilidad individual 
que existe en este tipo de secreciones.
Por último, no se puede dejar de mencionar el tercer 
mecanismo de incorporación, la contaminación externa, so-
bre todo en el caso de las drogas que se consumen por vía 
inhalatoria o en las personas que manipulan grandes canti-
dades de droga3. Esta vía ha de tenerse en cuenta siempre 
para evitar dar un falso resultado positivo. Por ello se reco-
mienda un riguroso lavado de la muestra antes del análisis.
Una vez incorporadas, quedan retenidas en función de 
factores que dependen del pelo (cutícula, médula, color) y 
factores que dependen de la droga (estructura química, li-
pofilia, afinidad por la melanina, capacidad de penetración 
por la membrana). El efecto de la melanina sobre la incor-
poración de las drogas al pelo fue objeto de estudios por 
numerosos autores4,5, demostrándose que, en general, las 
concentraciones de droga son más altas en los pelos pig-
mentados. En efecto, se ha señalado que las drogas estable-
cen un enlace con la melanina que facilita su retención6,7. 
Nakahara (1992)8 diseñó un modelo experimental para estu-
diar la “capacidad incorporativa de las drogas en el pelo 
(ICR)”, estudiando la relación existente entre la concentra-
ción de droga en sangre y en el pelo. Los resultados obteni-
dos han servido para clasificarlas en tres grupos según sea 
su ICR: alto, medio o bajo. En esta clasificación, sustancias 
como la cocaína, con un ICR alto, son retenidas con facili-
dad en el pelo, al contrario de lo que ocurre con otras sus-
tancias como el metabolito hidroxilado del cannabis, que 
por sus propiedades fisicoquímicas tiene dificultad para in-
corporarse a la matriz queratínica.
Una vez incorporadas las drogas al pelo permanecen al-
macenadas en él sin sufrir alteraciones durante un tiempo, 
De 1 semana
hasta años
2-3 días
2-3 días
24 horas
24 horas
Pelo
Sudor
Orina
Saliva
Sangre
N.° días 0,1 1 10 100 1.000
Figura 1 Ventanas de detección de diferentes muestras bioló-
gicas.
Pelo
Superficie de la piel
Contaminación externa
Glándulas
sudoríparas
Glándulas
sebáceas
y apocrinas
Pelo
definitivo
Zona
queratógena
Zona
de síntesis
del pelo
S
a
n
g
r
e
P
i
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l
Figura 2 Mecanismo de incorporación de las drogas al pelo.
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62 A.M. Bermejo Barrero y M.J. Tabernero Duque 
siempre y cuando el pelo no haya recibido tratamientos cos-
méticos. En este caso, la estabilidad de las drogas en la 
matriz queratínica está afectada. Asi, Martins et al9 demos-
traron la disminución en la concentración de compuestos 
anfetamínicos en pelos que previamente habían sido deco-
lorados en comparación con aquellos que no habían recibi-
do ningún tratamiento cosmético. Estudios similares han 
sido publicados para otras drogas10. Además, se ha demos-
trado también que algunos tratamientos cosméticos produ-
cen interferencias analíticas que pueden dificultar la detec-
ción de las drogas. Este es el caso del Minoxidil®, que impide 
la detección de los derivados trimetilsilados de la cocaína y 
sus metabolitos11. 
Los diferentes tipos de pelo que se encuentran en el 
cuerpo humano han sido propuestos para el análisis de dro-
gas; no obstante, las diferencias en la biología de cada uno 
de ellos han de ser consideradas para una correcta interpre-
tación de los resultados analíticos.
En general, el pelo del cuero cabelludo es el que se ana-
liza con más frecuencia por ser el más fácil de recoger y 
tener mayor grado de crecimiento, aunque es el más ex-
puesto a contaminación externa y su integridad fisiológica 
está más alterada por los posibles tratamientos cosméticos 
que sobre él se realizan. El vello púbico y el axilar también 
se analizan a menudo; en estos tipos de pelo, la contamina-
ción por secreciones de las glándulas sudoríparas apocrinas 
y sebáceas es mayor. No obstante, en algunos casos es ne-
cesario recogerlos por tener una velocidad de crecimiento 
mucho más lenta que el pelo del cuero cabelludo y, por lo 
tanto, su análisis proporciona una información más prolon-
gada en el tiempo, aunque en este caso el análisis secuen-
cial no es posible. 
Los resultados obtenidos analizando los diferentes tipos 
de pelo no son comparables, ya que se ha demostrado en 
numerosos estudios que el vello púbico es el que almacena 
mayor cantidad de drogas, debidoa su lenta velocidad de 
crecimiento12,13 y a la posibilidad de contaminación externa 
por la orina.
Recomendaciones de la SOHT
La Society of Hair Testing (SOHT, 2004)14, tras diversas 
reuniones con diferentes laboratorios, ha llegado a un con-
senso para establecer unas guías para el análisis de esta 
matriz biológica con recomendaciones que afectan a varios 
aspectos:
Recogida, transporte y conservación. La correcta recogi-
da de pelo es fundamental para la realización del análisis. 
La muestra se debe recoger de la zona occipital y cortarse 
lo más cerca posible de la raíz, en una cantidad suficiente 
(200 mg, el diámetro de un lápiz), señalizando los extremos 
proximal y distal. Si se solicita un análisis secuencial, el 
mechón de pelo se debe coger con una cinta adhesiva antes 
del corte. El pelo de elección es el del cuero cabelludo, 
pero si no está disponible, se recurre a otras partes del 
cuerpo, como se ha mencionado anteriormente.
Además, es importante el envío de la muestra con la in-
formación necesaria para cada caso, anotando la longitud, 
el color y la posibilidad de aplicación de tratamientos cos-
méticos previos y, por supuesto, la zona del cuerpo donde 
se ha recogido la muestra. 
Las condiciones de almacenamiento no deben alterar la 
muestra, por ello, se recomienda almacenar las muestras 
en una habitación oscura a temperatura ambiente.
En los casos post mórtem, el pelo debe ser recogido antes 
de empezar la autopsia, a fin de evitar posible contamina-
ción por otras muestras biológicas.
La contaminación externa es considerada una de las prin-
cipales limitaciones del análisis del pelo y, por ello, debe 
ser eliminada completamente o minimizada aplicando di-
versos métodos:
— Eliminado fuentes de contaminación externa en el propio 
laboratorio.
— Utilizando valores apropiados de cut-off.
— Realizando múltiples lavados con disolventes orgánicos o 
disoluciones acuosas.
— Conservando el líquido del último análisis para realizar 
eventuales análisis.
La desintegración o digestión del pelo y la extracción de 
las sustancias son diferentes para cada laboratorio, pero ha 
de asegurar que no produce alteraciones en el patrón meta-
bólico de cada sustancia.
Análisis de cribado y confirmación. Los primeros pueden 
efectuarse después de la validación de un método analítico 
que permita la correcta identificación de los analitos, con 
un cut-off que no dé falsos resultados negativos. En lo que 
respecta a los análisis de confirmación, que generalmente 
se basan en métodos espectrofotométricos, deben ser tam-
bién validados y los resultados de positividad dados según 
los criterios recomendados por las sociedades científicas 
aceptadas internacionalmente.
Valores de corte (cut-off). Se han establecido valores de 
corte, a partir de los cuales un resultado debe considerarse 
positivo para los diferentes tipos de drogas. Así:
— Opiáceos: se considera positivo a partir de 0,2 ng/mg en 
los análisis de cribado y 0,2 ng/mg para cada sustancia en 
los análisis de confirmación. Además, debe diferenciarse 
el uso de heroína con el de codeína o morfina, lo que 
únicamente se consigue con la identificación de la 6-mo-
noacetilmorfina (MAM).
— Cocaína: en este caso el punto de corte es de 0,5 ng/mg 
para las técnicas de cribado y 0,5 ng/mg para la cocaína 
y 0,05 ng/mg para cada uno de sus metabolitos en las 
técnicas de confirmación. En este caso, al menos uno de 
sus metabolitos debe ser identificado (benzoilecgonina, 
ecgonina metiléster, cocaetileno o norcocaína).
— Anfetaminas: se considera positivo a partir de 0,2 ng/mg 
en las técnicas de cribado y 0,2 ng/mg de cada anfetami-
na en las técnicas de confirmación. 
— Cannabis: 0,1 ng/mg se considera el valor mínimo detec-
table en los métodos analíticos de cribado, y los mismos 
valores para el THC en las técnicas de confirmación, 
mientras que para su metabolito el THC-COOH, 0,2 pg/
mg es la cantidad mínima detectable. La identificación 
de este último, aunque sea a bajas concentraciones, es 
imprescindible para poder establecer un consumo de can-
nabis.
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Determinación de drogas de abuso en pelo 63
Controles de calidad internos. En el caso del pelo, no es 
fácil al no poseer materiales de referencia. Como alternati-
va, muestras positivas y negativas deben ser tratadas y ana-
lizadas conjuntamente con muestras reales para garantizar 
la calidad del análisis.
Controles de calidad externos. El laboratorio debe parti-
cipar en controles interlaboratorios que reciben auténticos 
estándar de pelo para analizar conjuntamente con sus 
muestras habituales.
Recomendaciones similares han sido publicadas por la 
SAMSHA (Substance Abuse and Mental Health and Service 
Administration)15 que ha establecido normas para la recogi-
da de muestra y valores de cut-off.
Interpretación de resultados
La principal ventaja del análisis de pelo es su capacidad de 
proporcionar información sobre un período preferentemen-
te largo, además de acumular la sustancia inalterada en 
mayor concentración que sus metabolitos.
La acumulación de la sustancia madre permite no sólo 
distinguir el consumo de heroína del de morfina o codeína, 
a través de la identificación de la MAM, sino también el uso 
ilícito de anfetaminas de sustancias que se pueden metabo-
lizar a compuestos similares, como ocurre con la fenetilina, 
la selegilina, el clobenzorex, etc. El patrón metabólico per-
mitirá distinguir diferentes situaciones y diferentes consu-
mos que pueden producir el mismo metabolito. 
De hecho, la SOHT ha establecido unas relaciones míni-
mas de concentración entre sustancia madre y su metaboli-
to para dar un resultado positivo y excluir la contaminación 
externa (MAM/morfina > 1,3; BEG/cocaína > 0,05 y presen-
cia de THC-COOH para confirmar uso de cannabis).
A pesar de los esfuerzos efectuados para establecer cri-
terios universales para dar un resultado de positividad, se 
deben considerar ciertos artefactos analíticos que puedan 
alterar la relación de los metabolitos. No siempre la rela-
ción entre la concentración de la sustancia madre y sus me-
tabolitos entra en los criterios de positividad establecidos, 
aun tratándose de consumidores habituales. Un estudio pu-
blicado por Cairns et al16 en 2004 ha puesto de manifiesto 
tal aseveración al analizar el pelo de 75 consumidores habi-
tuales de cocaína, donde BEG/cocaína no se ajustaba a lo 
establecido por la SOHT, detectándose, sin embargo, la pre-
sencia de norcocaína y cocaetileno, que indicaban un con-
sumo previo de la droga. De hecho, se considera que cuan-
do la concentración de cocaína en el pelo es superior a 2 
ng/mg, este criterio no es válido. 
Además, es necesario excluir la contaminación externa 
persistente debida a contactos con la droga en ámbitos de 
trabajo17. Por otro lado, la utilización de valores de corte 
(cut-off) adecuados para evitar dar falsos resultados positi-
vos por contaminación externa puede acarrear el riesgo de 
dar falsos resultados negativos, aun disponiendo hoy en día 
de técnicas analíticas de alta sensibilidad que permitirían 
detectar valores mucho más bajos al cut-off.
La interpretación del resultado analítico debe ser efec-
tuada considerando numerosas variables, especialmente 
cuando se trata de análisis forenses. Asi, Felli et al18 demos-
traron la presencia de cocaína en pelo de sujetos tras algún 
período de abstinencia, por lo que se deben establecer con 
cautela los períodos de consumo/abstinencia.
Cuando no se dispone de muestra de cabello, se puede 
recurrir a otros tipos de pelo del cuerpo (pubis, axila, etc.), 
pero teniendo en cuenta la diferente biología de cada uno 
de ellos. Los mecanismos y tiempos de acumulación de los 
xenobióticos en estas matrices no están todavía aclarados, 
por ello se deben interpretaren este caso los resultados 
analíticos con muchísima cautela. No se tiene la certeza, 
además, de la ventana de detección de las diferentes dro-
gas en estas muestras, considerada quizá hasta 2 años, ni 
las relaciones entre la sustancia madre y sus metabolitos, 
que probablemente son diferentes que en el cabello.
No se puede establecer una correlación entre dosis con-
sumida y concentración detectada, ya que existe una gran 
variabilidad individual en la retención de las drogas en el 
pelo, como ya se mencionó anteriormente.
Tampoco se ha establecido la dosis mínima detectable, 
por lo que un negativo no siempre excluye un consumo y el 
resultado cuantitativo del análisis sólo indica la severidad 
del consumo.
En los últimos años, todos estos aspectos han sido recogi-
dos por Musshoff y Burkhard19, que han estudiado las dificul-
tades que a veces supone la interpretación correcta de los 
resultados en los análisis de pelo.
Aplicaciones del analisis de pelo
Las principales aplicaciones del análisis de pelo son aque-
llas derivadas de la amplia ventana de detección de las sus-
tancias en la matriz queratínica.
Al ser una muestra biológica de fácil recogida y que no 
necesita condiciones especiales de conservación, los estu-
dios epidemiológicos a gran escala son realizados sobre esta 
matriz. De hecho, han sido publicados numerosos estudios a 
este respecto, desde control de consumo de sustancias de 
abuso en población universitaria20 hasta control de consumo 
de cocaína durante la gestación a través del análisis del 
pelo del recién nacido y del propio vello púbico mater-
no21-23.
Entre las múltiples aplicaciones que tiene el análisis de 
pelo, el seguimiento de pacientes sometidos a curas de des-
habituación es una de las más importantes, ya que se puede 
controlar de manera secuencial el cumplimiento terapéuti-
co. De la misma forma, es de gran utilidad en las ejecutorias 
penales, sustituyendo de esta forma los frecuentes análisis 
de orina. Es utilizado, además, para demostrar consumos 
habituales de drogas de abuso en sujetos que han pasado a 
disposición judicial y cuya responsabilidad penal puede ser 
modificada por su condición de drogodependiente. En este 
caso, el médico forense es el encargado de la toma de mues-
tra y determina la necesidad de la realización de la prueba 
como medio diagnóstico para constatar tal adicción.
Los análisis de pelo también pueden ser utilizados en el 
ámbito laboral para controlar el consumo de sustancias de 
abuso por los trabajadores.
Es también utilizado con frecuencia en procedimientos 
civiles relativos a la custodia de hijos con el fin de controlar 
el consumo de drogas por parte de alguno de los progenito-
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64 A.M. Bermejo Barrero y M.J. Tabernero Duque 
res. De hecho, ya han sido publicados trabajos que ponen 
de manifiesto la utilidad de esta muestra biológica para 
este fin2,25. 
En los últimos años ha comenzado a utilizarse esta mues-
tra biológica para demostrar la administración de sustan-
cias depresoras (benzodiacepinas, GHB, ketamina, etc.) a 
ancianos con fines criminales26 o en casos de agresiones 
sexuales27. En este caso ha llegado a determinarse la sus-
tancia después de una única dosis administrada tras el paso 
de un breve período. Para tal fin, ha de tenerse en cuenta 
que deben pasar al menos 4 semanas para la toma de mues-
tra del pelo, para dar tiempo a que las sustancias se depo-
siten en la queratina en crecimiento y, además, recoger una 
cantidad de muestra suficiente para realizar el análisis de 
drogas en secciones seriadas del cabello.
Diagnóstico del abuso de alcohol
Si bien durante mucho tiempo el análisis del pelo solamente 
se relacionaba con las drogas de abuso, en los últimos años 
ha comenzado a utilizarse para la determinación de marca-
dores directos de consumo de alcohol etílico. 
Existen varios tipos de marcadores de consumo de alco-
hol etílico dentro de los cuales los marcadores de estado 
son los más importantes y los que se están utilizando ac-
tualmente. Estos pueden ser directos o indirectos.
Los marcadores directos son principalmente aquellos de-
rivados de sus propios procesos metabólicos, siendo los más 
importantes el etilglucurónido, los ésteres etílicos de los 
ácidos grasos (FAEES) y el cocaetileno, que ya desde hace 
algún tiempo han comenzado a determinarse en muestras 
de pelo28-30. Por el contrario, los marcadores indirectos son 
aquellos derivados de las alteraciones que el etanol produ-
ce en el organismo (VCM, CDT, GGT, etc.).
En la actualidad han sido ya publicados numerosos méto-
dos analíticos para la determinación del etilglucurónido en 
pelo, utilizando técnicas como la LC-MS31-35 o la GC-MS36-38. 
Por el contrario, para la determinación de FAEES en pelo la 
microextracción en fase sólida acoplada a la GC-MS ha sido 
el método más utilizado39-41.
Igualmente, se ha demostrado en numerosos estudios 
que la determinación de estos dos compuestos es una pode-
rosa herramienta para monitorizar la abstinencia y distin-
guir entre bebedores sociales y abusivos.
En 2009 la Society of Hair Testing ha publicado los valores 
de cut-off para el etilglucurónido y FAEE para distinguir a 
los bebedores sociales de los consumidores crónicos. Los 
valores propuestos para el cuero cabelludo han sido de 30 
pg/mg para el etilglucurónido y 0,5 ng/mg para la suma de 
los 4 FAEE (etilmiristato, etilpalmitato, etiloleato y etiles-
tearato). 
A pesar de los numerosos estudios realizados hasta la fe-
cha, la interpretación de resultados no está tan clara como 
en el caso de las drogas de abuso. De hecho, la abstinencia 
total no puede ser demostrada ya que existen pequeñas con-
centraciones de FAEE en el pelo de abstemios y niños y se 
han visto casos de bebedores moderados en los que el etil-
glucurónido no fue detectado en el pelo. Lo que sí es cierto 
es que la presencia de etilglucurónido en el pelo y el aumen-
to en la concentración de FAEE excluye la abstinencia.
En la práctica, en la mayoría de los laboratorios forenses 
sólo uno de los dos marcadores es determinado, particular-
mente el etilglucurónido. Sin embargo, recientemente se 
ha demostrado que el uso combinado de la determinación 
de los dos marcadores mejora la sensibilidad del diagnósti-
co del abuso de alcohol etílico. Aun así, se ha demostrado 
también que no hay proporcionalidad entre la dosis diaria 
consumida de alcohol y la concentración de FAEE y etilglu-
curónido en el pelo, al igual que ocurre con las drogas de 
abuso, debido a variaciones interindividuales sumadas a los 
posibles errores analíticos inevitables. Por todo ello, siem-
pre existirá la posibilidad de falsos positivo o negativo, po-
sibilidad que disminuye si se utilizan los dos marcadores 
conjuntamente. Ambos se forman por diferentes vías meta-
bólicas del etanol y se incorporan al pelo por distintas vías, 
se eliminan del pelo por los tratamientos cosméticos en di-
ferente cantidad (los FAEE son lipofílicos y el etilglucuróni-
do, hidrofílico), y además se determinan por diferentes 
métodos analíticos. Por ello, el uso combinado de ambos es 
lo más recomendable.
Recientemente, las recomendaciones de la SOHT al res-
pecto han sido cuestionadas por algunos autores por las ra-
zones anteriormente expuestas43.
Limitaciones del análisis del pelo
El análisis de esta muestra biológica, que ha comenzado a 
utilizarse de forma extensiva en las últimas décadas, no 
está exento de limitaciones que han de tenerse en cuenta. 
Todavía hoy falta la total comprensión de los mecanismos 
de acumulación de las drogas en el pelo y la estandarización 
de los métodos analíticos necesarios, así como la correcta 
interpretación de resultados.
Los primeros problemas pueden surgir cuando la recogida 
de la muestra no es adecuada (por ejemplo, longitud inade-cuada del mechón). La muestra debe ir acompañada de la 
máxima información posible, incluyendo datos de la histo-
ria clínica, el propósito de la investigación, sospecha de 
drogas y tiempo de consumo, etc. 
Además, la posibilidad de dar un falso positivo por conta-
minación externa siempre existe si el proceso de lavado de 
la muestra no ha sido suficientemente riguroso44.
Se ha demostrado en sucesivas ocasiones que la correla-
ción existente entre dosis consumida y concentración de-
tectada es limitada debido a las diferencias interindividua-
les que existen en relación con los procesos metabólicos y 
picos plasmáticos, así como de la propia incorporación de 
las drogas en el pelo, su pigmentación y su estado físico. 
Por todo ello, se aconseja que cada laboratorio, que utiliza 
sus propios métodos analíticos, sea el encargado de realizar 
estadísticas entre sus casos.
Conclusiones
El pelo es una muestra biológica alternativa de gran utilidad 
hoy en día en el campo de la pericia medicolegal, pero los 
resultados obtenidos en el análisis han de interpretarse con 
suma cautela por la cantidad de parámetros que pueden 
afectarlo.
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Determinación de drogas de abuso en pelo 65
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