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Tratamiento quirúrgico y oncológico en cánceres urológicos pediátricos El tratamiento de los cánceres urológicos pediátricos implica un enfoque multidisciplinario que combina estrategias quirúrgicas y oncológicas para proporcionar la mejor atención posible a los niños afectados por estas enfermedades. Los cánceres urológicos en niños incluyen tumores renales, de vejiga, testiculares y otros menos comunes, y su manejo requiere una evaluación cuidadosa y un plan de tratamiento personalizado. En este ensayo, exploraremos los avances en el tratamiento quirúrgico y oncológico de los cánceres urológicos pediátricos, así como las consideraciones especiales que in�uyen en la atención de estos pacientes. **Evaluación y Diagnóstico:** El proceso de evaluación comienza con una historia clínica detallada y un examen físico completo, seguido de pruebas de imagenología como ecografía, tomografía computarizada (TC) y resonancia magnética (RM) para caracterizar el tumor y evaluar su extensión. Además, se pueden realizar biopsias para con�rmar el diagnóstico histológico y determinar el tipo especí�co de cáncer. **Tratamiento Quirúrgico:** La cirugía desempeña un papel fundamental en el tratamiento de los cánceres urológicos pediátricos y puede ser curativa en muchos casos. Las opciones quirúrgicas varían según el tipo y la etapa del cáncer, así como la ubicación y el tamaño del tumor. Algunos procedimientos comunes incluyen: 1. **Nefrectomía:** Extirpación parcial o total del riñón afectado en casos de tumores renales, como el tumor de Wilms. 2. **Cistectomía:** Extirpación parcial o total de la vejiga en casos de tumores vesicales, a menudo seguida de reconstrucción de la vejiga o derivación urinaria. 3. **Orquiectomía:** Extirpación del testículo afectado en casos de tumores testiculares, como el carcinoma embrionario. 4. **Resección de Tumor:** Extirpación quirúrgica del tumor en otros sitios, como la próstata o las glándulas suprarrenales, cuando sea posible. **Tratamiento Oncológico:** Además de la cirugía, el tratamiento oncológico puede incluir quimioterapia, radioterapia y terapias dirigidas, dependiendo del tipo y la extensión del cáncer. Estas modalidades terapéuticas pueden ser utilizadas antes o después de la cirugía para reducir el tamaño del tumor, controlar la propagación del cáncer y mejorar los resultados a largo plazo. **Consideraciones Especiales:** El tratamiento de los cánceres urológicos pediátricos presenta desafíos únicos debido a las diferencias anatómicas y �siológicas en los niños en comparación con los adultos. Además, se deben tener en cuenta las consideraciones psicosociales y emocionales, así como los efectos a largo plazo del tratamiento en el crecimiento y desarrollo del niño. **Conclusiones:** El tratamiento quirúrgico y oncológico de los cánceres urológicos pediátricos ha experimentado avances signi�cativos en las últimas décadas, lo que ha mejorado las tasas de supervivencia y la calidad de vida de los niños afectados. Sin embargo, se necesitan más investigaciones para desarrollar terapias más efectivas y menos invasivas, así como para abordar las necesidades únicas de estos pacientes en términos de cuidados a largo plazo y calidad de vida. Con un enfoque multidisciplinario y personalizado, podemos continuar mejorando los resultados para los niños con cánceres urológicos.
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