Logo Studenta

Arqueologia_distribucional_y_biogeografi

¡Este material tiene más páginas!

Vista previa del material en texto

Arqueología distribucional y biogeografía humana en un paisaje
andino-patagónico
Agustina A. Rughini, Guadalupe Romero Villanueva , Gustavo Lucero , Marcelo Cardillo ,
Karen Borrazzo , M. Victoria Fernández, Agustina Brera, Cecilia Frigolé, Agustín Castillo,
Marcelo Vitores, Carina Llano , Raven Garvey y Ramiro Barberena
Nuestro objetivo es estudiar las estrategias de uso del espacio por parte de sociedades humanas móviles en un paisaje andino
de Patagonia caracterizado por una marcada heterogeneidad topográfica, climática y ecológica (localidad de Barrancas-
Buta Ranquil, provincia del Neuquén, Argentina). Inicialmente, se analiza la estructura del paisaje desde una perspectiva
biogeográfica, desarrollando un modelo de estacionalidad mediante sistemas de información geográfica. Nuestro enfoque dis-
tribucional combina una prospección sistemática para caracterizar la estructura espacial del registro en superficie y eviden-
cias que han sido obtenidas bajo otras estrategias de muestreo. Sobre la base de la distribución de artefactos líticos y
cerámicos y de motivos rupestres, se evalúan patrones de intensidad ocupacional, diversidad funcional y circulación de infor-
mación en sectores del espacio con propiedades biogeográficas diferentes. Los resultados sugieren una delimitación funcional
del espacio en escala temporal promediada, en la cual los espacios intermedios habrían funcionado como lugares centrales
desde donde se articulan movimientos logísticos hacia otros sectores del paisaje. Dado que la unidad de muestreo captura
variación biogeográfica que se expresa en forma regional más amplia, el modelo de uso del espacio propuesto es relevante
para la comprensión de la arqueología del noroeste de Patagonia en general.
Palabras clave: arqueología distribucional, Andes del sur, estacionalidad, ecotonos topográficos, demarcación del paisaje
The objective of our research presented here is to study the spatial organization of mobile societies from Patagonia. In par-
ticular, we focus on a region characterized by sharp contrasts in topography, climate, and ecology (Barrancas-Buta Ranquil
Locality, Neuquén Province, Argentina). We begin by analyzing the biogeographic structure of the landscape, presenting a
GIS-based model of seasonally available resources. Our approach combines systematic surface survey with the analysis of
evidence produced by other sampling strategies, such as excavation and rock art analysis. Based on the spatial distribution
of lithic and ceramic artifacts and rock art motifs, we characterize patterns of occupational intensity, functional diversity,
and information flow in areas with different biogeographic properties. The results suggest a functional delimitation of
space, which operates in an averaged temporal scale, where the areas of intermediate altitude would have been used as central
places from where the use of other areas was articulated. Because our sampling unit captures biogeographic variation that is
widely expressed, this model of spatial organization would be useful for the archaeology of northwestern Patagonia at large.
Keywords: spatial archaeology, Southern Andes, seasonality, topographic ecotones, landscape marking
Agustina A. Rughini, Cecilia Frigolé, Carina Llano y Ramiro Barberena ▪ CONICET, Instituto Interdisciplinario de
Ciencias Básicas (ICB), Laboratorio de Paleoecología Humana, Universidad Nacional de Cuyo, Mendoza, Argentina
(arughini@mendoza-conicet.gob.ar; cfrigole@mendoza-conicet.gob.ar; llano.carina@gmail.com;
rbarberena@mendoza-conicet.gob.ar, autor de contacto)
Guadalupe Romero Villanueva ▪ CONICET, Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano, Buenos
Aires, Argentina (guada.romero.arq@gmail.com)
Gustavo Lucero ▪ Departamento de Antropología, Facultad de Ciencias Sociales y Humanidades, Universidad Católica de
Temuco, Temuco, Chile (glucero18@gmail.com)
Marcelo Cardillo y Karen Borrazzo ▪ CONICET, Instituto Multidisciplinario de Historia y Ciencias Humanas, Facultad de
Filosofía y Letras, Universidad de Buenos Aires, Buenos Aires, Argentina
(marcelo.cardillo@gmail.com; kborrazzo@yahoo.com.ar)
M. Victoria Fernández ▪ Instituto de Investigaciones en Diversidad Cultural y Procesos de Cambio, Universidad Nacional de
Río Negro, San Carlos de Bariloche, Argentina (fernandezvicky5@gmail.com)
Agustina Brera y Agustín Castillo ▪ Laboratorio de Paleoecología Humana, Facultad de Filosofía y Letras, Universidad
Nacional de Cuyo, Mendoza, Argentina (agustinabrera1@gmail.com; agscastillo19@gmail.com)
Marcelo Vitores ▪ Programa de Arqueología Histórica y Estudios Pluridisciplinarios, Universidad Nacional de Luján, Buenos
Aires, Argentina (marcelovitores@yahoo.com.ar)
Raven Garvey ▪ Department of Anthropology, University of Michigan, Ann Arbor, USA (garveyr@umich.edu)
Latin American Antiquity, pp. 1–20
Copyright © 2020 by the Society for American Archaeology
doi:10.1017/laq.2020.22
1
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
La arqueología distribucional produjo unaprofunda transformación teórica al enfati-zar el carácter espacialmente continuo del
registro arqueológico y otorgar un significado
clave a la información procedente de espacios
con baja o nula densidad de materiales (Foley
1981). En este sentido, al plantear la importancia
histórica de los espacios ubicados entre los nodos
demográficos, anticipó algunas de las preocupa-
ciones centrales que impulsaron los estudios
internodales en los Andes centro-sur (Nielsen
2017). A nivel metodológico, la arqueología
distribucional condujo al desarrollo de nuevas
formas de prospección y registro de las eviden-
cias de superficie (Dunnell y Dancey 1983;
Ebert 1992). Este proceso tuvo un impacto
profundo y perdurable en la arqueología de
Patagonia, en la cual se desarrollaron temprana-
mente enfoques distribucionales en escala
regional y macrorregional (Belardi 2005; Belardi
et al. 1992; Borrero 1998; Borrero et al. 1992).
Comenzando con el trabajo pionero de Borrero
(1990) sobre evolución divergente en Patagonia
austral, la biogeografía ha constituido el marco
de referencia clave para el desarrollo de
este enfoque, dado que permite situar el registro
arqueológico a nivel de la estructura del paisaje
y su evolución (Barberena 2008; Borrero 1990).
Inserto en esta trayectoria de investigación, el
objetivo de este trabajo consiste en estudiar las
estrategias de uso del espacio por parte de socieda-
des móviles en un paisaje andino del noroeste de
Patagonia caracterizado por una marcada hetero-
geneidad topográfica, climática y ecológica. Para
alcanzar dicho objetivo se desarrolla un análisis
distribucional de artefactos líticos, tiestos cerámi-
cos y motivos rupestres en la localidad de
Barrancas-Buta Ranquil (provincia del Neuquén,
Argentina; Figura 1). Esta unidad de muestreo
microrregional fue seleccionada para desarro-
llar esta prospección sistemática dado que
abarca una parte importante de la variación
topográfica y ecológica presente en la escala
más amplia del noroeste de Patagonia (Oyarzá-
bal et al. 2018). Mediante el uso de sistemas de
información geográfica, se construye un
modelo de estacionalidad que evalúa la influen-
cia de la topografía, variable que incide en la
distribución y accesibilidad anual de recursos
críticos para la subsistencia humana.
Sobre la base de los resultados generados,
discutimos aspectos de la escala espacial de
los movimientos realizados por las socieda-
des que habitaron este paisaje de ecotono
entre desiertos y los Andes, integrando infor-
mación etnográfica (Binford 1980; Kelly
2013). La escala de movilidad de sociedades
pasadas es un tema abordado recurrentemente
en la arqueología de Patagonia mediante
diferentes conceptos y unidades de análisis
(Barberena 2008; Goñi et al. 2018; Martínez
et al. 2017).
Este trabajo se inserta enun proyecto de
investigación macrorregional que evalúa la
jerarquización de diferentes sectores biogeográ-
ficos del noroeste de Patagonia en términos de
intensidad ocupacional humana. Las preguntas
de investigación se orientan a identificar la
existencia de espacios nodales e internodales
en ambas vertientes andinas (Barberena et al.
2017; Romero Villanueva et al. 2020). Se ha
construido un marco robusto de conocimiento
interdisciplinario sobre la estructura espacial y
la composición geoquímica de las fuentes de
obsidiana (Barberena et al. 2019; Fernández
et al. 2017), la variabilidad formal del arte
rupestre y su contextualización cronológica
(Romero y Re 2014; Romero Villanueva
2019; Romero Villanueva y Barberena 2017)
y las tendencias temporales de ocupación
humana en distintas escalas (Barberena 2015).
Las secuencias estratigráficas de los sitios de
Cueva Huenul 1 (CH1) y Cueva Yagui (CY),
que proceden de diferentes unidades geográficas
del paisaje, ofrecen datos cuantitativos relevan-
tes sobre las historias ocupacionales, agregando
una dimensión temporal al registro espacial
estudiado (Barberena, Borrazzo et al. 2015;
Romero Villanueva et al. 2020). Actualmente
se dispone de un cúmulo de información
sobre la estructura espacial del registro arqueo-
lógico para una región que era escasamente
conocida (Fernández 1976; Schobinger 1985),
a pesar de localizarse en una posición central
en referencia a procesos históricos clave para
el Cono Sur de Sudamérica, tales como la extin-
ción de la megafauna, el poblamiento humano
inicial, la existencia de discontinuidades en el
Holoceno medio y eventos recientes de migra-
ción y cambio lingüístico.
2 LATIN AMERICAN ANTIQUITY
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
Marco regional
La localidad de Barrancas-Buta Ranquil (de aquí
en adelante, LBB) se ubica en el departamento
Pehuenches del norte de la provincia del
Neuquén, Argentina (Figura 1), conteniendo
una importante heterogeneidad ecológica entre
850 y 2.200 m snm. La LBB abarca las provin-
cias fitogeográficas del monte, patagónica y
altoandina (Figura 2).
La provincia del monte está compuesta por
una comunidad zonal de estepas arbustivas de
Larrea divaricata, L. cuneifolia ( jarillas),
Parkinsonia aculeata (espinillo), acompañada
de los géneros Lycium, Chuquiraga, Prosopis y
Ephedra (monte austral). Son frecuentes las
comunidades azonales de las especies arbustivas
como Prosopis alpataco y P. flexuosa (León
et al. 1998). Por sobre 1.000-1.100 m snm se
encuentra la provincia fitogeográfica patagónica,
que consiste en una combinación de estepa
graminosa con baja cobertura de Sporobolus
rigens (unquillo), Panicum urvilleanum y mato-
rral de Ephedra ocreata (solupe), Mulinum
spinosum (neneo), Stillingia patagonica y
Grindelia chiloensis (botón de oro). Finalmente,
la LBB incluye la provincia fitogeográfica altoan-
dina por sobre 2.000 m snm con una vegetación
zonal muy heterogénea (Oyarzábal et al. 2018).
En trabajos previos se ha empleado el modelo
de capacidad de carga de ovinos (Mendía 2006)
para evaluar la capacidad de carga de guanacos
(Barberena 2013), el recurso faunísticomás impor-
tante en la dieta humana a nivel regional (Rindel
2017). Sobre esta base, la provincia patagónica
puede caracterizarse como de alta capacidad de
carga, presentando entre 0,16 y 0,66 ovinos por
ha, con un promedio de 0,41 (Mendía 2006). La
provincia del monte presenta sectores de producti-
vidad media (0,03-0,15 ovinos/ha) y baja (<0,03
ovinos/ha). En balance, la provincia del monte
tiene un valor promedio de 0,08 ovinos por ha,
casi cinco órdenes demagnitud por debajo del pro-
medio de la provincia patagónica (Barberena
2013). Por otra parte, la provincia del monte ofrece
recursos vegetales clave como algarrobo, molle y
chañar (Llano 2015), marcando una complementa-
riedad clave entre los recursos alimenticios que
ofrecen estas regiones.
Hay otros aspectos relevantes para el asenta-
miento humano que, aunque no tienen una
Figura 1. Ubicación del área de prospección sistemática en la localidad de Barrancas-Buta Ranquil. (Color en la versión
electrónica)
[Rughini et al.] 3ARQUEOLOGÍA DISTRIBUCIONAL Y BIOGEOGRAFÍA HUMANA EN UN PAISAJE ANDINO-TAGÓNICO
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
distribución homogénea, se encuentran disponi-
bles en los distintos pisos altitudinales. Esto
incluye las fuentes de agua, entre las cuales se
destacan la cuenca del Barrancas-Colorado y cur-
sos menores permanentes, como los arroyos Buta
Có y Huantraico (Figura 1); los reparos y aflora-
mientos rocosos adecuados para la ocupación
humana y la realización de representaciones
rupestres; y las fuentes de obsidiana de Cerro
Huenul y Laguna del Maule 2-Río Barrancas,
disponibles en forma discontinua entre 850 y
2.000 m snm (Barberena et al. 2019).
Diseño de investigación y métodos
El enfoque distribucional implementado concibe
al registro arqueológico como un fenómeno
espacialmente continuo, en el cual el artefacto
o el motivo rupestre son la unidad de análisis
(Aschero 1988; Belardi 2005; Foley 1981).
Esta aproximación combina un acercamiento dis-
tribucional en sentido estricto, basado en una
prospección sistemática mediante transectas diri-
gidas a caracterizar la estructura espacial del
registro arqueológico en superficie (Ebert
1992), y un trabajo distribucional en sentido
amplio, en el cual se visualizan en un marco
espacial continuo evidencias obtenidas bajo
diferentes estrategias de muestreo (recolecciones
dirigidas de superficie, excavaciones, releva-
mientos rupestres). La combinación de estos
datos permite evaluar la distribución espacial
de artefactos líticos, cerámicos y motivos rupes-
tres. Sobre esta base, se discuten patrones de
Figura 2. Ambientes de la región de estudio: (a) provincia fitogeográfica del monte en los sectores bajos; (b) ecotono en
los sectores intermedios; y (c) provincia fitogeográfica patagónica en los sectores altos. (Color en la versión electrónica)
4 LATIN AMERICAN ANTIQUITY
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
intensidad ocupacional, diversidad funcional y
circulación de información en sectores del espa-
cio con diferentes propiedades biogeográficas.
Sistemas de información geográfica y
estacionalidad
Los sistemas de información geográfica ofrecen
un marco para indagar la influencia de variables
ambientales y geográficas en la organización
espacial humana, mediante la producción de
capas que representan la pendiente, altitud,
recursos hídricos, vegetales y cobertura nívea
(Johnston 2010). Como vía de entrada, prioriza-
mos la evaluación de la topografía, que es una
variable regional clave e incide en la distribución
y accesibilidad anual de recursos críticos. El
modelo de estacionalidad que se propone se ela-
boró sobre la base de modelos digitales de eleva-
ción de 12,5 m de resolución de fuente ALOS/
PALSAR1 e imágenes satelitales Landsat 82. Se
utilizó la variable bioclimática “estacionalidad
de la precipitación (coeficiente de variación)”
incluida en el conjunto de datos de WorldClim
(Hijmans et al. 2005)3, que representa la varia-
ción en la precipitación total mensual a lo largo
del año. Se realizó un análisis de cobertura
nívea invernal a partir de bandas espectrales
Landsat 8 (Hall y Riggs 2014).
Para analizar la distribución de las evidencias
arqueológicas se utilizó la herramienta de esti-
mación de densidad de núcleo o kernel density
estimate, que permite pasar de una sumade pun-
tos con información arqueológica discreta
(sitios, artefactos) a una visualización y análisis
de los datos en una superficie continua, compati-
ble con un acercamiento distribucional (Baxter
2017). Se estima la densidad de materiales para
cada unidad espacial del área contenida en el
núcleo como una probabilidad modelada a partir
de la información para las celdas vecinas del
mapa analizado.
Prospección arqueológica: Registro lítico,
cerámico y de representaciones rupestres
La LBB fue seleccionada para el desarrollo de
una prospección sistemática que combina diver-
sos métodos de muestreo. Para el emplazamiento
de las transectas se implementó una estrategia
dirigida, que implica resignar el carácter probabi-
lístico del muestreo, sesgándolo hacia aquellos
ámbitos del paisaje considerados a priori como
más relevantes (Banning 2002). Sin embargo,
permite maximizar la energía y el tiempo de tra-
bajo en un contexto con restricciones presupues-
tarias y dificultades para acceder a múltiples
espacios. Así, se produjo un muestreo compara-
ble para los sectores altitudinales relevantes
para nuestras preguntas. La muestra resultante
puede presentar limitaciones para el tratamiento
de preguntas por fuera de nuestros objetivos de
investigación.
Cada transecta fue ejecutada por dos personas
que caminaron en forma paralela. La unidad básica
de muestreo fue un segmento de 100 × 8m (800
m2), que refleja un rango visual adecuado para
dos personas. Dependiendo de la facilidad de cir-
culación y las propiedades geográficas del paisaje,
se implementaron números variables de segmen-
tos consecutivos en cada transecta, variando así
su longitud total (Tabla Suplementaria 1). Sin
embargo, dado que la unidad de análisis es el seg-
mento que compone todas las transectas, los datos
son plenamente comparables. Se registraron las
condiciones de visibilidad que, debido a la escasa
cobertura vegetal, son buenas o muy buenas en
todas las unidades de paisaje (Figura 2). Se consi-
dera que las distribuciones identificadas ofrecen un
indicador adecuado de la estructura espacial del
registro arqueológico. Las transectas produjeron
información sobre las distribuciones de artefactos
líticos y cerámicos y de representaciones rupestres.
El registro de motivos rupestres requirió pasos
metodológicos adicionales. Inicialmente, los
relevamientos comenzaron en los sitios CH1 y
Paso de las Tropas 4 (PDT4), cuya ubicación
era conocida (Fernández 1976). Posteriormente,
se efectuaron prospecciones dirigidas hacia
sectores con afloramientos rocosos aptos para la
ejecución de motivos en los distintos sectores
(Romero Villanueva 2019). Esta prospección se
enfocó en las bardas que flanquean los arroyos
Buta Có y Huantraico, que constituyen vías
naturales de circulación entre los distintos pisos
altitudinales (Figura 3). Esto aplica particular-
mente al arroyo Buta Có, que nace a 2.000 m
snm y desemboca en el Río Colorado a 900 m
snm, cuyo curso transcurre a través de aflora-
mientos basálticos. Se efectuaron coberturas
pedestres intensivas a una distancia inferior a 1
m de los soportes rocosos para maximizar las
[Rughini et al.] 5ARQUEOLOGÍA DISTRIBUCIONAL Y BIOGEOGRAFÍA HUMANA EN UN PAISAJE ANDINO-TAGÓNICO
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
oportunidades de visualizar los motivos, que
suelen presentarse desvaídos (Romero Villa-
nueva 2019). Esta estrategia de muestreo dirigido
e intensivo resultó productiva, permitiendo
aumentar notablemente la muestra inicial y ofre-
ciendo información confiable sobre las caracte-
rísticas y distribución de soportes rocosos sin
arte rupestre.
Para evaluar la distribución espacial del mate-
rial cerámico se combinan los datos de presencia
o ausencia producidos mediante las transectas,
muestreos de superficie dirigidos, excavaciones
y sondeos. Las evidencias se cuantifican por
abundancia y peso.
Análisis estadístico de la estructura espacial del
registro arqueológico
Para comparar las transectas y explorar el rol de la
altitud en la abundancia de las clases artefactuales,
los conteos registrados en losmuestreos en los dis-
tintos pisos altitudinales fueron estandarizados en
relación con su área (número total de artefactos
dividido por el área total de las transectas en
cada sector altitudinal). De esta manera, la
Figura 3. Análisis de cobertura nívea en la localidad de Barrancas-Buta Ranquil, basado en la superposición de capas
NDSI de los inviernos de 2013 a 2017. (Color en la versión electrónica)
6 LATIN AMERICAN ANTIQUITY
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
frecuencia relativa de clases es ponderada de
acuerdo con las diferencias en la cobertura espa-
cial entre sectores. Se utilizó la correlación lineal
r de Pearson para establecer el grado de asociación
entre variables. Dado que las frecuencias son en
general bajas y variables entre unidades de mues-
treo, se estimó a posteriori la potencia del análisis
para rechazar correctamente la hipótesis nula (H0)
de no correlación (se consideró una potencia [1−
β] de 0,8). Posteriormente, se aplicó el análisis de
independencia entre datos categóricos de chi cua-
drado (χ2) para el conteo de artefactos líticos, ties-
tos y manifestaciones rupestres. Se utiliza la
hipótesis nula, que afirma que no hay relación
entre las abundancias de las categorías, como
acercamiento para estudiar los patrones espacia-
les. Para estimar la probabilidad, se utilizó la apro-
ximación de Montecarlo, más adecuada en casos
con frecuencias menores a cinco (Fishman
1995). Los residuales de χ2 son las diferencias
entre las frecuencias observadas y las esperadas
por azar y son útiles para determinar en qué cate-
gorías se observa la mayor diferencia, teniendo
más peso en los resultados. Valores superiores a
1,96 (95% de confianza para residuales estandari-
zados) indican que las abundancias de las varia-
bles están relacionadas entre sí. En todos los
casos el umbral de significación (α) fue 0,05.
Los análisis se realizaron mediante el programa
PAST (Hammer et al. 2001).
Resultados
Modelo geográfico de la estacionalidad
El polígono de análisis que cubre la LBB posee
un perímetro de 139 km y un área de 121.300
ha (Figura 1). La clasificación climática global
de Köppen-Geiger ofrece un marco actual para
caracterizar diferencias climáticas y ecológicas
(Kottek et al. 2006). Este acercamiento se com-
bina con un análisis de la cobertura nívea invernal
registrada en imágenes Landsat 8 correspondien-
tes a los meses de junio de 2013, julio de 2014,
junio de 2015, junio de 2016 y julio de 2017
(Figura 3). Dada la existencia de múltiples facto-
res de variación climática que operan en distintas
escalas temporales, esta reconstrucción de los
niveles variables de cobertura nívea en el pasado
es preliminar. Estudios recientes marcan que el
período 2010-2015 es uno de los más secos del
registro instrumental (Rivera et al. 2017), por lo
cual consideramos que este modelo de estaciona-
lidad es conservador. El análisis de superposición
de capas NDSI (Normalized-Difference Snow
Index) muestra que la cobertura nívea dificulta
el acceso a un sector amplio del paisaje y dismi-
nuye la conectividad en escalas regional y macro-
rregional (Figura 3).
En la Figura 4 se presenta un modelo de esta-
cionalidad construido a partir de la variable bio-
climática “estacionalidad de la precipitación
(coeficiente de variación)” de WorldClim (Hij-
mans et al. 2005), que representa la variación en
la precipitación total mensual a lo largo del año.
Al integrar esta información con los patrones cli-
máticos y ecológicos previamente descriptos, se
diferencian tres sectores del paisaje con propieda-des climáticas y ecológicas diferentes dentro de la
LBB (Figura 3). Los mismos se asocian a tres sec-
tores altitudinales que se describen a continuación.
Espacios bajos (850-1.200 m snm). Abarcan
27.200 ha (272 km2) de la LBB. Presentan un
bajo coeficiente de variación de la estacionali-
dad, se caracterizan por la escasez de precipi-
taciones níveas y están disponibles en forma
anual para la instalación humana. A nivel fito-
geográfico, se corresponden con la provincia
del monte e incluyen climas áridos (tipos bsk y
bwk [Kottek et al. 2006]).
Espacios intermedios (1.200-1.800 m snm).
Cubren 34.500 ha (345 km2) de la LBB y definen
ambientes de ecotono entre las provincias del
monte y patagónica, estando representados los
taxones clave del monte (Prosopis sp., Larrea
sp.) en los sectores más bajos de estos espacios.
Se caracterizan por inviernos fríos o templados
y veranos secos (tipo csb [Kottek et al. 2006]).
La mayor parte de las lluvias caen en invierno
o en estaciones intermedias con un coeficiente
intermedio de variación de la estacionalidad
(Figura 4). Su disponibilidad anual es interme-
dia, siendo más discontinua en los espacios de
mayor elevación dentro del sector, un efecto
que se refuerza en años con precipitaciones
invernales más intensas.
Espacios altos (>1.800 m snm). Abarcan
59.500 ha (595 km2) de la LBB y poseen clima
continental de veranos frescos e inviernos muy
fríos (tipos dsb y dsc [Kottek et al. 2006]). En
los meses de invierno la cobertura nívea en este
[Rughini et al.] 7ARQUEOLOGÍA DISTRIBUCIONAL Y BIOGEOGRAFÍA HUMANA EN UN PAISAJE ANDINO-TAGÓNICO
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
sector es de aproximadamente un 70% (400
km2), remarcando su baja disponibilidad para
el aprovechamiento humano.
Distribución de materiales líticos en superficie
Se realizaron 27 transectas con longitudes totales
que varían entre 0,5 y 1,5 km, en todos los casos
utilizando la unidad de muestreo de 100 × 8 m.
La distancia total prospectada es de 26,8 km
lineales, que definen un área de 21,44 ha
(0,02% de la LBB). El 42% de los muestreos
se emplazó en los espacios bajos, 30% en los
espacios intermedios y 28% en los espacios altos.
Se recuperaron 2.328 artefactos líticos, distri-
buidos de la siguiente forma: 479 (20,6%) en
espacios bajos, 1.267 (54,4%) en espacios inter-
medios y 582 (25%) en espacios altos (Tabla
Suplementaria 1). La densidad espacial de los
artefactos líticos es muy heterogénea: 50 artefac-
tos por ha en espacios bajos, 200 artefactos por
ha en espacios intermedios y 10 artefactos por
ha en espacios altos. La densidad de artefactos
en los espacios intermedios es 4 veces superior
a la de los espacios bajos y 20 veces mayor que
en los espacios altos. En el caso de los espacios
bajos, se observa una elevada heterogeneidad
interna, ya que el 58,4% de los segmentos (66
de 113; áreas en color oscuro o verde en la Figura
5) presentan densidades nulas. La contracara de
este patrón se observa en el Segmento 1 de la
Transecta 2, emplazado en asociación con aflora-
mientos rocosos de la localidad de Huenul, que
aporta el 68,3% (n = 327) de los artefactos líticos
recuperados en los espacios bajos (Tabla Suple-
mentaria 1). En los espacios intermedios solo
se registró un 8,8% de segmentos con densidad
nula (7 de 80), sugiriendo una distribución espa-
cial más homogénea. Por último, en los espacios
altos se observó un 34,7% de los segmentos sin
material de superficie (26 de 75).
La obsidiana es la materia prima predominante
en todas las áreas de muestreo. Estudios geoquí-
micos muestran el predominio de la obsidiana
Cerro Huenul, disponible en forma discontinua
y densidad variable en los tres pisos altitudinales,
complementada por obsidiana Laguna del Maule
Figura 4. Estacionalidad de la precipitación en la localidad de Barrancas-ButaRanquil. (Color en la versión electrónica)
8 LATIN AMERICAN ANTIQUITY
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
2-Río Barrancas, cuya presencia más cercana se
da en el Río Colorado (espacios bajos; Barberena
et al. 2019). Finalmente, resulta altamente infor-
mativo que en ninguna de las transectas se recupe-
raron tiestos cerámicos o se observaron motivos
rupestres.
Al considerar la abundancia relativa de las cla-
ses, se observa que los desechos son la categoría
más frecuente de artefactos por ha (media = 1;
mínimo = 0,1; máximo = 6), seguidos por los
núcleos (media = 0,03; mínimo = 0; máximo =
0,2), las puntas deproyectil (media = 0,02;mínimo
= 0; máximo = 0,07) y los raspadores (media =
0,01; mínimo = 0; máximo= 0,07; Tabla 1). Cuatro
de las cinco categorías poseen frecuencias nulas en
varios segmentos: los raspadores están ausentes en
16, las puntas de proyectil en 12 y los núcleos en
7. La estadística descriptiva sugiere una distribu-
ción espacial heterogénea y, en algunos casos,
muy baja frecuencia relativa de ciertas categorías.
La correlación entre categoría artefactual y altitud
señala que las puntas de proyectil se correlacionan
de forma positiva y significativa (r = 0,53; p =
0,004). Esta relación indica un mayor descarte de
estos instrumentos en los espacios altos de la
LBB. La potencia del análisis para este tamaño de
muestra e intensidad de correlación es 0,85, indi-
cando un resultado robusto.
El análisis de χ2 agrupando las transectas en
los tres sectores señala una distribución diferencial
Figura 5. Distribución espacial de artefactos líticos en transectas en la localidad de Barrancas-Buta Ranquil. (Color en
la versión electrónica)
Tabla 1. Frecuencias absolutas y relativas de las clases artefactuales por segmento altitudinal en la localidad de Barrancas-Buta
Ranquil.
Sector Desechos Núcleos Puntas de proyectil Raspadores Otros Total
Espacios bajos 412 (86%) 29 (6%) 5 (1%) 7 (1,5%) 26 (5,5%) 479 (20,6%)
Espacios intermedios 1.136 (89,7%) 50 (3,9%) 13 (1%) 14 (1,1%) 54 (4,3%) 1.267 (54,4%)
Espacios altos 529 (90,9%) 9 (1,5%) 19 (3,3%) 4 (0,7%) 21 (3,6%) 582 (25%)
Total 2.077 (89,2%) 88 (3,8%) 36 (1,5%) 25 (1,1%) 102 (4,4%) 2.328 (100%)
[Rughini et al.] 9ARQUEOLOGÍA DISTRIBUCIONAL Y BIOGEOGRAFÍA HUMANA EN UN PAISAJE ANDINO-TAGÓNICO
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
de las categorías de desechos, núcleos, puntas de
proyectil y raspadores (χ2 = 49.705; p = 0,0001;
Tabla 1). El análisis de los residuos normalizados
sugiere que los espacios altos poseen un número
mayor de puntas de proyectil (3,86) y un número
menor de núcleos (−3,28) que los esperados por
azar. El sector intermedio posee menos puntas
(−2,21), mientras que el sector bajo posee un
mayor número de núcleos (2,94) y un menor
número de desechos que lo esperado por la hipó-
tesis nula (−2,97). En el caso de los raspadores, el
sector intermedio posee una mayor frecuencia
absoluta y densidad (n = 14; 4 × 10−4 artefactos/
ha) en comparación con los espacios bajos (n =
7; 2,5 × 10−4 artefactos/ha) y altos (n = 4; 1,4 ×
10−4 artefactos/ha; Tabla 1). Sin embargo, el aná-
lisis de los residuos no indica frecuencias mayores
o menores que lo esperado por azar.
En síntesis, se observa una distribución espa-
cial heterogénea de los artefactos líticos. Los
espacios intermedios presentan una densidad
artefactual 4 veces superior a la de los espacios
bajos y 20 veces mayor que en los espacios
altos. Asimismo, los análisis descriptivos y el
testeo de hipótesis sugieren una distribución
desigual de las categorías artefactuales en rela-
ción con la altitud. Solo las puntas de proyectilposeen una correlación significativa y positiva
entre la frecuencia relativa de los muestreos y
la altitud, siendo este el patrón más robusto.
En cambio, mediante el test de χ2 sobre los
datos agrupados en tres categorías espaciales,
se observan diferencias entre la distribución
observada y esperada para las cuatro categorías
artefactuales en al menos uno de los pisos
altitudinales.
Distribución espacial de los motivos rupestres
Los muestreos dirigidos para el registro de arte
rupestre implicaron la prospección de 12 km
lineales (9,6 ha) en asociación a los principales
afloramientos rocosos. A esto se suman los
26,8 km prospectados mediante las transectas,
en las cuales no se registraron motivos en los
múltiples soportes disponibles. Sobre la base
del muestreo intensivo se identificaron 12 sitios
con arte rupestre —incluyendo los dos ya cono-
cidos (CH1 y PDT4)— con un total de 1.128
motivos (Tabla 2). Casi todos ellos fueron ejecu-
tados mediante la técnica de la pintura,
registrándose solo dos motivos grabados en los
sectores altos (Figura 6).
Aún dentro de un marco de análisis distribu-
cional, existe una necesidad analítica de seg-
mentar los hallazgos de motivos rupestres para
operativizar el enfoque (Binford 1992). A tal
fin, se utilizó el concepto de sitio definido a partir
de una combinación de criterios —distancia y
topografía—, comúnmente aplicado en otros
estudios distribucionales (Fiore y Acevedo
2016; Fiore y Ocampo 20094; Re 2010). A los
fines de nuestra investigación, los sitios con
arte rupestre corresponden a loci de concentra-
ciones más o menos continuas de motivos, sepa-
rados de otros sitios por una distancia igual o
superior a 200 metros (Romero Villanueva
2019). La excepción la constituyen las cuevas y
los aleros, cuya topografía diferencial facilita la
delimitación operativa de sitios dentro de las
localidades (Fiore y Ocampo 2009).
Se registró una amplia variedad de tipos de
sitios que incluye el uso de áreas reparadas,
como cuevas y aleros, paredones a cielo abierto
y situaciones mixtas (Figura 6). Los soportes
empleados también presentan variabilidad, ya
que fueron seleccionados diferentes tipos de
rocas como ignimbritas o basaltos de distintas
formaciones. En gran medida se utilizaron pare-
des, si bien hay sectores del techo de áreas bajo
reparo, así como algunos bloques con represen-
taciones (Romero Villanueva 2019).
Los espacios bajos concentran el 60,5% (n =
684) del total de motivos, los espacios interme-
dios el 24,5% (n = 275) y los altos el 15% (n =
169; Tabla 2; Figura 7). En términos de densidad
en relación con la amplitud de cada sector, se
observa que en los espacios bajos hay 0,025
motivos por ha, en los intermedios 0,008 moti-
vos por ha y en los bajos 0,003 motivos por ha.
El análisis de χ2 que vincula la cantidad de
sitios y de motivos es significativo (χ2 = 24,12;
p < 0,001), lo que es acorde con una distribución
desigual de las frecuencias observadas. Los espa-
cios altos poseen los únicos residuales significati-
vos, sugiriendo que hay menos representaciones
en relación con la cantidad de sitios que lo espe-
rado por azar (−4,86); en los espacios interme-
dios y bajos la tendencia es contraria, aunque
no significativa, con un mayor número esperado
de representaciones en ambos casos. En el caso
10 LATIN AMERICAN ANTIQUITY
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
de las representaciones por piso altitudinal en
relación con el número de sitios, el análisis de
χ
2 no muestra resultados significativos (χ2 = 1;
p > 0,05), indicando que el número de sitios con
manifestaciones es similar en cada piso altitudi-
nal, si bien existen diferencias en las abundancias
absolutas de motivos. Dos sitios producen este
patrón, ya que aportan el 55,3% de la muestra
total: CH1 (n = 446; 39,5%), en los espacios
bajos, y CY (n = 176; 15,8%), en los intermedios.
En relación con la morfología de los motivos,
se observaron similitudes y diferencias entre sec-
tores (Romero Villanueva 2019). Mientras que
en todos ellos predominan motivos abstractos
en frecuencias mayores al 80%, los sectores
intermedios registran una mayor proporción de
motivos zoomorfos en comparación a los
espacios bajos y altos (Figura 6). Los antropo-
morfos se documentan exclusivamente en los
sectores bajos. Asimismo, también se observa-
ron variaciones entre sectores en relación con la
presencia o ausencia de determinados tipos de
motivos. Así, se destaca la existencia de un reper-
torio común a todos ellos formado por un total de
20 tipos (19 abstractos y un zoomorfo). No obs-
tante, los espacios bajos y altos registran una
mayor frecuencia de líneas quebradas y los inter-
medios de líneas rectas. Otras divergencias entre
sectores refieren a la mayor cantidad de círculos,
escalonados y puntos en los sectores bajos, así
como de triángulos y líneas rectas paralelas
para los sectores intermedios, mientras que los
sectores altos registran mayor cantidad de comi-
llas angulares, cuadrados y triángulos adosados
Tabla 2. Frecuencias de tiestos cerámicos y de motivos rupestres en la localidad de Barrancas-Buta Ranquil.
Sitio Código Altitud (m snm) Tiestos cerámicos Motivos rupestres
Espacios bajos (850-1.200 m snm)
Vega Vieja VV 993 4 0
El Ciénego 7 CNG7 1.123 0 20
Cueva Huenul 1 CH1 1.127 6 446
Cueva Huenul 3 CH3 1.146 5 0
Cueva Huenul 6 CH6 1.161 3 0
El Ciénego 1 CNG1 1.179 0 65
El Ciénego 2 CNG2 1.179 1 0
El Ciénego 3 CNG3 1.180 0 153
Total 19 (14,3%) 684 (60,5%)
Espacios intermedios (1.200-1.800 m snm)
El Ciénego 6 CNG6 1.207 0 1
El Ciénego 5 CNG5 1.234 0 2
El Ciénego 4 CNG4 1.235 0 71
Puesto Cuello, Sitio de superficie 1 PCS1 1.320 5 0
Puesto Cuello 5 PC5 1.368 0 1
Puesto Cuello 6 PC6 1.380 0 3
Cueva Yagui CY 1.383 62 176
Puesto Cuello 4 PC4 1.392 7 0
Paso de las Tropas 4 PDT4 1.714 0 21
Total 74 (55,6%) 275 (24,5%)
Espacios altos (>1.800 m snm)
Paso de las Tropas 2-3 PDT2-3 1.807 32 59
Paso de las Tropas 5 PDT5 1.816 0 72
Paso de las Tropas 6 PDT6 1.818 0 38
Laguna Chica
del Tromen
LCTr 1.959 1 0
Buta Có Arriba,
Barda basáltica 2
BCA.BB2 2.094 7 0
Total 40 (30,1%) 169 (15%)
Total general 133 (100%) 1.128 (100%)
[Rughini et al.] 11ARQUEOLOGÍA DISTRIBUCIONAL Y BIOGEOGRAFÍA HUMANA EN UN PAISAJE ANDINO-TAGÓNICO
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
Figura 6. Principales sitios con representaciones rupestres de la región de estudio y ejemplos de los motivos relevados:
(a, c) sitio de Cueva Huenul 1, foto original y resaltada digitalmente con el programa DStretch (espacio de color LRE);
(b, d) sitio de Cueva Yagui, foto original y resaltada digitalmente con el programa DStretch (espacio de color
CRGB). (Color en la versión electrónica)
12 LATIN AMERICAN ANTIQUITY
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
(Figura 6). Se sugirió que estas diferencias se
vinculan con un uso diferencial de la informa-
ción transmitida en los distintos sectores del pai-
saje (Romero Villanueva 2019).
Distribución espacial del registro cerámico
Se cuenta con una muestra total de 133 tiestos
que proceden de 11 sitios (Tabla 2; Figura 8).
No se registraron tiestos en los 26,8 km de tran-
sectas, enfatizando su escasez en contextos que
pueden describirse como off-site (Foley 1981).
Los espacios bajos aportan el 14,3% (n = 19)
de la muestra, los intermedios el 55,6% (n =
74) y los altos el 30,1% (n = 40). Se señala que
el 46,6% (n = 62) de la muestra procede del
sitio CY, ubicado en los espacios intermedios
de lacuenca del arroyo Buta Có (1.371 m snm;
Figura 8). Al analizar la densidad por peso se
registran 3 × 10−3 gramos de cerámica por ha
en los espacios bajos, 20 × 10−3 gramos por ha
en los intermedios y 0,5 × 10−3 gramos por
ha en los altos. Un análisis por abundancia
numérica muestra un patrón semejante, aunque
con diferencias menos marcadas entre los
estratos espaciales: 0,066 tiestos por ha en los
espacios bajos, 0,206 tiestos por ha en los espa-
cios intermedios y 0,015 tiestos por ha en los
espacios altos. Esto sería producido por la pre-
sencia de tiestos de mayor peso en los espacios
intermedios, algo que ha sido observado particu-
larmente en el sitio CY.
El test de χ2 entre la cantidad de tiestos y
número de sitios por piso altitudinal es signifi-
cativo (χ2 = 10.702; p = 0,005). Los residuales
ajustados señalan que los espacios bajos y
altos poseen menos tiestos de lo esperado en
relación con la cantidad de sitios (−2 y
−2,11), mientras que los intermedios tienen
mayor frecuencia a la esperada (3,22) en rela-
ción con la cantidad de sitios, ya que la mayo-
ría de los fragmentos proceden de CY. El
análisis de X2 entre la frecuencia de sitios
con y sin cerámica por sector altitudinal
sugiere que no hay diferencias significativas
entre ambas categorías (χ2 = 2; p > 0,05), es
decir, la proporción de sitios con cerámica es
similar entre sectores, si bien se observan dife-
rencias en la abundancia por sitio.
Figura 7. Análisis de densidad de núcleo de la distribución de motivos rupestres en la localidad de Barrancas-Buta
Ranquil. (Color en la versión electrónica)
[Rughini et al.] 13ARQUEOLOGÍA DISTRIBUCIONAL Y BIOGEOGRAFÍA HUMANA EN UN PAISAJE ANDINO-TAGÓNICO
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
Movilidad y uso humano del espacio en un
paisaje de transición topográfica y
ecológica
Situando la LBB a nivel temporal y espacial
El análisis espacial presentado funciona en una
escala temporal amplia y promediada y tiene
baja resolución, aunque hay elementos contex-
tuales que permiten situarlo en un marco tempo-
ral relativo. En primer lugar, las evidencias
cerámicas corresponderían a los últimos 2.000
años, en consonancia con la cronología pro-
puesta para su presencia macrorregional (Hajduk
et al. 2011; Marsh 2017). En segundo lugar, con-
tamos con tendencias temporales que dan cuenta
de una formación diacrónica del registro de moti-
vos rupestres de la LBB, en general, y de aque-
llos registrados en CH1, en particular, durante
los últimos 5.000 años (Romero Villanueva
2019). Así, la información provista por indicado-
res cronológicos relativos y absolutos sugiere
que algunos motivos de la LBB habrían sido eje-
cutados durante el Holoceno medio, si bien la
gran mayoría habría sido producida durante el
Holoceno tardío (Romero Villanueva 2019).
Por último, aunque aún no se cuenta con
información que permita contextualizar tempo-
ralmente las evidencias líticas de superficie,
cabe señalar que el registro radiocarbónico pre-
senta un pulso regional y macrorregional en los
últimos 1.500 años (Barberena, Prates y de
Porras 2015; Gordón et al. 2019), siendo coinci-
dente con estimaciones demográficas realizadas
a partir de ADN mitocondrial (Perez et al.
2016). Sobre esta base, se sugiere que una
parte sustantiva —aunque indeterminada— de
las evidencias líticas estudiadas se habría deposi-
tado en los últimos 1.500 años.
Asimismo, también nos interesa visualizar el
área prospectada en la LBB en el marco de infor-
mación etnográfica sobre uso humano del espacio.
El polígono de análisis de la LBB posee un perí-
metro de 139 km y un área de 121.300 ha. Datos
presentados por Kelly (2013:Tabla 4-1) para 37
sociedades de distintos continentes marcan una
media de 17 km y una mediana de 11,2 km para
el promedio de cada desplazamiento residencial.
En este sentido, el área prospectada puede conte-
ner potencialmente múltiples desplazamientos
Figura 8. Análisis de densidad de núcleo del registro cerámico en la localidad de Barrancas-Buta Ranquil. (Color en la
versión electrónica)
14 LATIN AMERICAN ANTIQUITY
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
residenciales entre los distintos pisos altitudinales
en la LBB. Se considera también la información
sobre el área total ocupada anualmente por un
grupo humano, que ofrece una medida más cer-
cana al rango de acción (Foley 1981). Kelly
(2013:Tabla 4-1) ofrece información para 64
sociedades, con una media de 151.800 ha y una
mediana de 67.500 ha. La dispersión en torno a
estos valores es enorme y se sitúa entre 2.500 y
2.500.000 ha, algo esperable dado que estos
casos integran sociedades con diversa organiza-
ción económica y procedentes de distintas regio-
nes a nivel global. Aunque estos datos no
pueden ser aplicados en forma lineal, permiten
enfatizar un sencillo argumento: nuestra área de
prospección de 121.300 ha, que engloba una suce-
sión de pisos altitudinales y ecosistemas diversos,
tiene el potencial de reflejar una fracción impor-
tante, aunque ciertamente indefinida, de los
rangos de acción de sociedades móviles. En rela-
ción con ello, se entiende que las semejanzas for-
males evidenciadas entre los motivos rupestres de
la región dan cuenta del uso de un código visual
común en esta escala (Romero Villanueva
2019). Así, esta evidencia sugiere que los sitios
con arte rupestre fueron conocidos o utilizados
en forma complementaria por los mismos grupos
humanos quienes los incorporaron dentro de sus
circuitos de movilidad. Gracias a estos desplaza-
mientos y al uso de un código visual común, la
información codificada en el arte rupestre pudo
circular al interior de la LBB a pesar de la fijeza
que caracteriza los motivos (Fiore 2009).
A nivel ecológico, al ajustar el grado de reso-
lución de los recursos vegetales en el área de la
LBB, el género Prosopis (algarrobo) se destaca
como uno de los componentes clave del hábitat,
localizándose en lugares con una provisión extra
de agua, como márgenes de ríos o bordes de
paleocauces (e.g., localidad de Puesto Cuello-
Cueva Yagui). Como especies freatófitas, la dis-
ponibilidad hídrica condiciona la distribución de
los algarrobales, que puede ser fragmentada y
heterogénea (Aranibar et al. 2014). Esta caracte-
rística potencia los espacios intermedios, por ser
una zona donde el agua es un recurso de fácil
acceso anual y los algarrobos crecen como par-
ches en el paisaje estableciendo formaciones
edáficas azonales (Figura 2b). Así, en estos espa-
cios se podría haber acentuado el uso humano de
este recurso de alto rango, que pudo haber sido
consumido en estado fresco, o bien ser procesado
para su almacenamiento y posterior consumo.
Este factor también podría contribuir a explicar
la abundancia de la cerámica en este sector y su
baja densidad en los sectores bajos. Asimismo,
Prosopis, junto con Geoffroea y Schinus, tiene
un retorno calórico neto alto incluso en amplias
distancias de viaje, debido a su elevado rendi-
miento nutricional (Llano 2015).
Registro arqueológico y uso humano del espacio
en la LBB
Los resultados presentados aquí indican que los
espacios intermedios (1.200-1.800 m snm) pre-
sentan la densidad de artefactos líticos más ele-
vada (200 artefactos/ha), que cuadruplica los
espacios bajos (50 artefactos/ha) y es 20 veces
mayor que la registrada en los espacios altos (10
artefactos/ha). Esto puede interpretarse como
indicador de una mayor intensidad ocupacional
de los espacios intermedios, que abarcan la tran-
sición entre las comunidades del monte y patagó-
nica y, como refleja el análisis de estacionalidad
(Figura 3), pueden ser ocupados anualmente.
A su vez, la distribución espacial de las distin-tas categorías artefactuales agrega observaciones
funcionales sobre el uso humano del espacio
regional. En primer lugar, y siendo la tendencia
más robusta, se registró una correlación significa-
tiva (r = 0,53; p = 0,004) entre la altitud y la
abundancia de puntas de proyectil, que aumentan
significativamente con la altura. El análisis de χ2
agrupando las transectas en los tres sectores alti-
tudinales también refleja esto, marcando un
número mayor de puntas de proyectil (3,86) en
los espacios altos que aquellas esperadas por
azar. Los núcleos están subrepresentados con
respecto a lo esperado en los espacios altos
(−3,28) y sobrerrepresentados (2,94) en los espa-
cios bajos. En el caso de los raspadores, se regis-
tra una mayor densidad en los espacios
intermedios en comparación con los bajos y
altos, aunque la correlación no es estadística-
mente significativa. Sobre la base de estos patro-
nes, se observa un predominio marcado de
instrumentos asociados a la caza de presas en
los espacios altos, mientras que se destaca la
abundancia de núcleos en espacios bajos. Estos
núcleos son mayormente de obsidiana y
[Rughini et al.] 15ARQUEOLOGÍA DISTRIBUCIONAL Y BIOGEOGRAFÍA HUMANA EN UN PAISAJE ANDINO-TAGÓNICO
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
muestran una baja intensidad de reducción,
estando espacialmente asociados a talleres en el
entorno de los depósitos principales de obsidiana
Cerro Huenul. No se registra un énfasis en el
transporte de núcleos, algo que puede vincularse
a la amplia disponibilidad de nódulos en el pai-
saje de la LBB (Barberena et al. 2019). Se des-
taca la mayor densidad de raspadores en los
espacios medios, dado que se espera un mayor
descarte en contextos ocupados en forma intensa
o prolongada (Chatters 1987; Rademaker y
Moore 2018; Weedman Arthur 2008). Esto
puede asociarse, aunque no en forma lineal, a
espacios ocupados en forma residencial.
Asimismo, el análisis de la distribución espa-
cial de la cerámica también resultó de gran inte-
rés para un ahondar en la funcionalidad de los
espacios. Cabe destacar la ausencia de cerámica
en contextos de baja densidad de registro,
como en todas las transectas realizadas. Por
el tipo de actividades para las que se utiliza la
cerámica —almacenamiento o cocción de ali-
mentos (Rice 2015)—, cabe esperar un mayor
descarte en contextos de alta intensidad ocupa-
cional, incluyendo situaciones de equipamiento
de sitios ocupados en forma planificada (Eerkens
2008; Simms et al. 1997). Los residuales ajusta-
dos del análisis de χ2 entre abundancia de tiestos
y número de sitios por piso altitudinal señalan
que los espacios bajos y altos poseen menos ties-
tos cerámicos que los esperados en relación con
la cantidad de sitios (−2 y −2,11, respectiva-
mente), mientras que los intermedios tienen
frecuencia mayor que la esperada (3,22).
La asociación espacial entre la densidad de
cerámica y raspadores en los espacios interme-
dios respalda su interpretación como sectores
donde tuvieron lugar ocupaciones más intensas
o prolongadas (Chatters 1987). Integrando
estos indicadores, planteamos que los sectores
intermedios habrían funcionado como lugares
centrales (Zeanah 2004) ocupados en forma
más intensa que los espacios bajos y altos, mini-
mizando así la magnitud de los desplazamientos
y los costos de transporte necesarios para la
obtención de distintos recursos —camélidos,
algarrobo, madera, agua y rocas—. Desde estos
emplazamientos, se habrían articulado movi-
mientos logísticos hacia los espacios altos para
actividades de caza durante el verano, que es a
su vez la estación en la cual estarían disponibles
las crías de guanaco (Franco y Borrero 1996;
Goñi et al. 2018). En este marco, consideramos
que las decisiones de asentamiento se explican
por la articulación estratégica de actividades
múltiples, que pueden tener agendas conflictivas
a lo largo del año, más que por la maximización
de una variable ecológica por sobre las otras,
como por ejemplo la cercanía a fuentes de
agua. Al respecto, el Río Colorado, la fuente de
agua más importante en la LBB, presenta indica-
dores de baja intensidad ocupacional y diversi-
dad funcional.
Respecto del arte rupestre, los análisis de
χ
2 (χ2 = 24,12; p < 0,001) marcan una distribu-
ción desigual de los motivos. El número de sitios
con manifestaciones es similar en cada piso alti-
tudinal (χ2 = 1; p > 0,05), si bien existen diferen-
cias en las abundancias absolutas de motivos.
Así, los espacios altos poseen los únicos residua-
les significativos, sugiriendo que hay menos
representaciones en relación con la cantidad de
sitios que lo esperado por azar (−4,86). En los
espacios intermedios y bajos la tendencia es con-
traria, aunque no significativa, con un número de
representaciones mayor que lo esperado por azar
en ambos casos. Sin embargo, cabe aclarar que
dos sitios en particular producen este patrón, al
aportar el 55,3% de la muestra total: CH1 (n =
446; 39,5%), ubicado en los espacios bajos, y
CY (n = 176; 15,8%), en los intermedios.
Resulta interesante que ambos se emplazan en
ámbitos para los cuales la evidencia distribucio-
nal y tecnológica sugiere diferentes formas de
uso humano, algo que también se verifica en
los respectivos registros estratigráficos (Barbe-
rena, Borrazzo et al. 2015; Romero Villanueva
et al. 2020). Así, las dos concentraciones más
grandes de motivos rupestres en la LBB demar-
can visualmente sitios con historias ocupaciona-
les diferentes medidas en términos de la
abundancia de cerámica, abundancia de instru-
mentos líticos y representación de grupos de
obsidiana (Fernández et al. 2017). Mientras que
los sectores intermedios donde se ubica CY evi-
dencian un uso humano intenso y prolongado, el
entorno de los espacios bajos donde se sitúa CH1
tiene un registro discontinuo que sugiere ocupa-
ciones breves. Estas inferencias proveen un
marco conductual de gran interés para evaluar
16 LATIN AMERICAN ANTIQUITY
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
la historia de formación de los conjuntos de
motivos rupestres y ahondar en los tipos de in-
formación transmitidos por estas imágenes en
diferentes contextos ocupacionales (Romero
Villanueva 2019).
Conclusiones y perspectivas
Este trabajo sintetiza el análisis espacial de la
información arqueológica producida para la
LBB. Se evaluaron en forma articulada diferen-
tes líneas de evidencia en una escala espacial
microrregional, que permitieron conocer las for-
mas de organización espacial humana en relación
con la estructura biogeográfica del paisaje regio-
nal. Tal como se evidenció a partir de las recons-
trucciones mediante sistemas de información
geográfica, la estacionalidad es una variable
clave en la dinámica anual de esta región del
noroeste de Patagonia.
En suma, sobre la base de los análisis de
densidad de artefactos líticos, proporciones de
instrumentos líticos y fragmentos cerámicos, se
ha sugerido una delimitación funcional del espa-
cio regional que opera en escala temporal prome-
diada, en la cual los espacios intermedios habrían
funcionado como lugares centrales desde donde
se articularon movimientos hacia otros sectores
del paisaje. Específicamente durante el verano,
predominarían los desplazamientos logísticos
hacia los espacios altos para la caza de
camélidos.
En el próximo paso de nuestra investigación,
este marco espacial será cruzado con las tenden-
cias relevadas en secuencias estratigráficas, des-
tacándose los sitios CH1 (espacios bajos) y CY
(espacios intermedios; Barberena, Borrazzo
et al. 2015; Romero Villanueva et al. 2020).
Estas secuencias ofrecen información sobre
tasas de descarte de material lítico, diversidadde materias primas, amplitud de dieta, intensidad
del procesamiento faunístico e indicadores de
estacionalidad a nivel zooarqueológico y arqueo-
botánico, que contribuirán a anclar a nivel tem-
poral los patrones espaciales identificados.
Estas evidencias proveen, asimismo, el marco
conductual para situar la formación diacrónica
de los conjuntos de motivos rupestres en contex-
tos con historias ocupacionales distintas (Holda-
way y Wandsnider 2006).
A futuro, se ajustarán las observaciones reali-
zadas a partir de la información provista por nue-
vos indicadores temporales. Así, una línea de
evidencia que estamos comenzando a desarrollar
es la hidratación de obsidiana en contextos de
superficie y estratigrafía (Garvey 2012) como
método de datación relativo para establecer el
tempo de formación de los conjuntos. A eso se
sumará el análisis temporal de las puntas de pro-
yectil recuperadas en CY, que proveerán nuevos
marcadores temporales. Para finalizar, considera-
mos que el área de prospección sistemática den-
tro de la LBB intercepta fracciones importantes
—aunque variables y difíciles de precisar— de
una sucesión de múltiples rangos de acción
humanos a través del tiempo. Sin embargo, el
foco de nuestro análisis no está puesto en la
reconstrucción de hipotéticos territorios, sino
en identificar las estrategias dominantes de uso
humano de una determinada unidad espacial
definida sobre criterios geográficos y ecológicos.
En última instancia, dado que la unidad de mues-
treo captura variación biogeográfica que se
expresa en forma amplia (Barberena 2013), el
modelo de uso del espacio propuesto es relevante
para la arqueología del noroeste de Patagonia en
general.
Agradecimientos. Las investigaciones son financiadas por
el CONICET y la Agencia Nacional de Promoción de la
Ciencia y la Tecnología de Argentina (Proyectos PIP
0301, PICT 2016-0062). Se agradece al CONICET por
financiar las tesis doctorales de Guadalupe Romero Villa-
nueva y Agustina Rughini. A Claudia Della Negra, Carlos
Cides y Pablo Azar (Dirección Provincial de Patrimonio
Cultural de la provincia del Neuquén). Nuestro trabajo es
posible gracias al generoso apoyo de las comunidades y
las autoridades municipales de Barrancas y Buta Ranquil.
Un agradecimiento especial a los evaluadores anónimos
del trabajo, cuyos precisos comentarios y sugerencias con-
tribuyeron a mejorarlo notablemente.
Declaración de disponibilidad de datos. Los autores decla-
ran la disponibilidad y accesibilidad de los datos físicos y
digitales sobre los cuales se basa la presente
investigación. Los mismos están disponibles en las tablas
(evidencias cerámicas y rupestres) y en elMaterial Suplemen-
tario (evidencias líticas).
Material suplementario. Para acceder al material suplemen-
tario que acompaña este artículo visitar https://doi.org/10.
1017/laq.2020.22.
Tabla Suplementaria 1. Frecuencias de materiales líti-
cos en las transectas en la localidad de Barrancas-Buta
Ranquil.
[Rughini et al.] 17ARQUEOLOGÍA DISTRIBUCIONAL Y BIOGEOGRAFÍA HUMANA EN UN PAISAJE ANDINO-TAGÓNICO
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
Notas
1. Conjunto de datos: JAXA/METI ALOS-1 PAL-
SAR L1.0 2007. Accedido mediante ASF DAAC (11/6/
2017).
2. Conjunto de datos: Landsat 8 OLI/TIRS C1 Level-2
2016. Accedido mediante U.S. Geological Survey (11/6/
2017).
3. La variable bioclimática “estacionalidad de la precipi-
tación (coeficiente de variación)” es la proporción entre la
desviación estándar de la precipitación mensual y la precipi-
tación media mensual a lo largo del año.
4. Este trabajo fue el primero explícitamente distribucio-
nal para el arte rupestre patagónico.
Referencias citadas
Aranibar, Julieta, Silvana Goirán, Aranzazú Guevara y
Pablo Villagra
2014 Carbon and Nitrogen Dynamics in a Sandy
Groundwater-Coupled Ecosystem in the Monte Desert,
Indicated by Plant Stable Isotopes. Journal of Arid Envi-
ronments 102:58–67.
Aschero, Carlos
1988 Pinturas rupestres, actividades y recursos naturales,
un encuadre arqueológico. En Arqueología contempo-
ránea argentina: Actualidad y perspectivas, editado
por Hugo Yacobaccio, Luis Borrero, Lidia García,
Gustavo Politis, Carlos Aschero y Cristina Bellelli, pp.
109–145. Búsqueda, Buenos Aires.
Banning, Edward
2002 Archaeological Survey. Kluwer Academic/Plenum
Publishers, Nueva York.
Barberena, Ramiro
2008 Arqueología y biogeografía humana en Patagonia
meridional. Sociedad Argentina de Antropología,
Buenos Aires.
2013 Biogeografía, competencia y demarcación simbólica
del espacio: Modelo arqueológico para el norte de
Neuquén. Intersecciones en antropología 14:367–381.
2015 Cueva Huenul 1 Archaeological Site (Northwestern
Patagonia, Argentina): Initial Colonization and Mid-
Holocene Demographic Retraction. Latin American
Antiquity 26:304–318.
Barberena, Ramiro, Karen Borrazzo, Agustina Rughini,
Guadalupe Romero, Paz Pompei, Carina Llano,
Eugenia de Porras, Víctor Durán, Charles Stern,
Anahí Re, Diego Estrella, Analía Forasiepi,
Fernando Fernández, Manuel Chidiak, Luis Acuña,
Alejandra Gasco y Marianela Quiroga
2015 Perspectivas arqueológicas para Patagonia septen-
trional: Sitio Cueva Huenul 1 (provincia del Neuquén,
Argentina). Magallania 43(1):1–27.
Barberena, Ramiro, Luciano Prates y Eugenia de Porras
2015 The Human Occupation of Northwestern Patagonia
(Argentina): Paleoecological and Chronological Trends.
Quaternary International 356:111–126.
Barberena, Ramiro, M. Victoria Fernández,
Agustina Rughini, Karen Borrazzo, Raven Garvey,
Gustavo Lucero, Claudia Della Negra,
Gomero Romero, Víctor Durán, Valeria Cortegoso,
Martín Giesso, Catherine Klesner, Brandi MacDonald
y Michael Glascock
2019 Deconstructing a Complex Obsidian “Source-
Scape”: A Geoarchaeological and Geochemical
Approach in Northwestern Patagonia. Geoarchaeology
34:30–41.
Barberena, Ramiro, Guadalupe Romero Villanueva,
Gustavo Lucero, Victoria Fernández, Agustina Rughini
y Paula Sosa
2017 Espacios internodales en Patagonia septentrional:
Biogeografía, información y mecanismos sociales de
interacción. Estudios Atacameños 56:57–75.
Baxter, Michael
2017 Kernel Density Estimation in Archaeology. Docu-
mento electrónico, https://www.academia.edu/34849361/
Kernel_ density_estimation_in_archaeology, accedido el
20 de marzo de 2019.
Belardi, Juan
2005 Paisajes arqueológicos: Un estudio comparativo de
diferentes ambientes patagónicos. Archaeopress, Oxford.
Belardi, Juan, Luis Borrero, Patricia Campan, Flavia
Carballo Marina, Nora Franco, Fernanda García,
Victoria Horwitz, José Lanata, Fabiana Martin,
Francisco Muñoz, Sebastián Muñoz y Florencia Savanti
1992 Intensive Archaeological Survey in the Upper Santa
Cruz Basin, Southern Patagonia. Current Anthropology
33:451–455.
Binford, Lewis
1980 Willow Smoke and Dogs’ Tails: Hunter-Gatherer
Settlement Systems and Archaeological Site Formation.
American Antiquity 45:4–20.
1992 Seeing the Present and Interpreting the Past—and
Keeping Things Straight. En Space, Time, and Archaeo-
logical Landscapes, editado por Jacqueline Rossignol y
LuAnn Wandsnider, pp. 43–59. Plenum Press, Nueva
York.
Borrero, Luis
1990 Evolución cultural divergente en la Patagonia aus-
tral. Anales del Instituto de la Patagonia 19:133–139.
Borrero, Luis (compilador)
1998 Arqueología de la Patagonia meridional (Proyecto
“Magallania”). Búsqueda de Ayllu, Concepción del
Uruguay.
Borrero, Luis, José Lanata y Beatriz Ventura
1992 Distribuciones de hallazgos aislados en Piedra del
Águila. En Análisis espacial en la arqueología patagó-
nica, compilado por Luis Borrero y José Lanata, pp. 9–
20. Ayllu, Buenos Aires.
Chatters, James
1987 Hunter-Gatherer Adaptations and Assemblage
Structure. Journal of Anthropological Archaeology
6:336–375.
Dunnell, Robert y William Dancey
1983 The Siteless Survey: A Regional Scale Data Collec-
tion Strategy. Advances in ArchaeologicalMethod and
Theory 6:267–287.
Ebert, James
1992 Distributional Archaeology. University of New
Mexico Press, Albuquerque.
Eerkens, Jelmer
2008 Nomadic Potters: Relationships Between Ceramic
Technologies and Mobility. En The Archaeology of
Mobility: Old World and New World Nomadism, edi-
tado por Hans Barnard y Willeke Wendrich, pp. 307–
326. Cotsen Institute of Archaeology, University of
California, Los Angeles.
Fernández, Jorge
1976 Estudios sobre el arte rupestre de la provincia del
Neuquén. Anales de arqueología y etnología 29-31:5–
36.
18 LATIN AMERICAN ANTIQUITY
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
Fernández, Victoria, Ramiro Barberena, Agustina Rughini,
Martín Giesso, Víctor Durán, Valeria Cortegoso,
Karen Borrazzo, Gustavo Lucero, Guadalupe Romero,
Raven Garvey, Brandi MacDonald y Michael Glascock
2017 Obsidian Geochemistry, Lithic Technology, and
Human Geography in Northern Patagonia (Argentina).
Journal of Archaeological Science: Reports 13:
372–381.
Fiore, Danae
2009 La materialidad del arte. Modelos económicos, tecno-
lógicos y cognitivos visuales. En Perspectivas actuales en
arqueología argentina, editado por Ramiro Barberena,
Karen Borrazzo y Luis Borrero, pp. 123–154. IMHI-
CIHU, Buenos Aires.
Fiore, Dánae y Agustín Acevedo
2016 El trabajo del arte. Una evaluación de la inversión
laboral en la producción de arte rupestre: El caso del
Cañadón Yaten Guajen (Santa Cruz, Patagonia, Argen-
tina). En Imagenes rupestres: Lugares y regiones, edi-
tado por Ana María Rocchietti, Fernando Oliva,
Fátima Solomita y Mariana Algrain, pp. 485–504.
CEAR-CEAH, Río Cuarto, Argentina.
Fiore, Danae y Mariana Ocampo
2009 Arte rupestre de la región margen norte del Río Santa
Cruz: Una perspectiva distribucional. En Arqueología de
Patagonia: Una mirada desde el último confín, editado
por Mónica Salemme, Fernando Santiago,
Myrian Álvarez, Ernesto Piana, Martín Vázquez y
EstelaMansur, pp. 499–513. Utopías, Ushuaia, Argentina.
Fishman, George
1995 Monte Carlo: Concepts, Algorithms, and Applica-
tions. Springer, Nueva York.
Foley, Robert
1981 A Model of Regional Archaeological Structure.
Proceedings of the Prehistoric Society 47:1–17.
Franco, Nora y Luis Borrero
1996 El stress temporal y los artefactos líticos. La cuenca
superior del Río Santa Cruz. En Arqueología: Sólo
Patagonia: Ponencias de las Segundas Jornadas de
Arqueología de la Patagonia, editado por Julieta
Gómez Otero, pp. 341–348. CONICET-CENPAT,
Puerto Madryn, Argentina.
Garvey, Raven
2012 El uso de la hidratación de obsidianas en el sur de
Mendoza, Argentina. En Paleoecología humana en el
sur de Mendoza, editado por Gustavo Neme y
Adolfo Gil, pp. 213–227. Sociedad Argentina de Antro-
pología, Buenos Aires.
Goñi, Rafael, Anahí Re, Solana García Guraieb,
Gisela Cassiodoro, Augusto Tessone, Diego Rindel,
Juan Dellepiane, Josefina Flores Coni, Francisco Guichón
y Agustín Agnolin
2018 Climate Changes, Human Peopling and Regional Dif-
ferentiation during LateHolocene in Patagonia.Quaternary
International 505:4–20.
Gordón, Florencia, Marien Beguelin, Diego Rindel,
Claudia Della Negra, Adam Hajduk, Romina Vázquez,
Virginia Cobos, Ivan Perez y Valeria Bernal
2019 Estructura espacial y dinámica temporal de la ocupa-
ción humana de Neuquén (Patagonia argentina) durante
el Pleistoceno final-Holoceno. Intersecciones en Antro-
pología 20(1):93–105.
Hajduk, Adán, Ana Albornoz y Maximiliano Lezcano
2011 Espacio, cultura y tiempo: El corredor bioceánico
desde la perspectiva arqueológica. EnCultura y espacio.
Araucanía-Norpatagonia, editado por Pedro
Navarro Floria y Walter Delrío, pp. 262–292. Universi-
dad Nacional de Río Negro, Bariloche, Argentina.
Hall, Dorothy y George Riggs
2014 Normalized-Difference Snow Index (NDSI). En
Encyclopedia of Snow, Ice and Glaciers, editado por
Vijay Singh, Pratap Singh y Umej Haritashya, pp.
779–780. Springer, Nueva York.
Hammer, Øyvind, David Harper y Paul Ryan
2001 PAST: Paleontological Statistics Software Package
for Education and Data Analysis. Palaeontologia
Electronica 4(1):1–9.
Hijmans, Robert, Susan Cameron, Juan Parra, Peter Jones y
Andy Jarvis
2005 Very High Resolution Interpolated Climate Surfaces
for Global Land Areas. International Journal of Clima-
tology 25:1965–1978.
Holdaway, Simon y LuAnn Wandsnider
2006 Temporal Scales and Archaeological Landscapes
from the Eastern Desert of Australia and Intermontane
North America. En Confronting Scale in Archaeology,
editado por Gary Lock y Brian Molyneaux, pp. 183–
202. Springer, Nueva York.
Johnston, Ben
2010 An Investigation of the Distribution of Open
Archaeological Sites in the Upper Kickapoo Valley
Archaeological District, Vernon County, Wisconsin.
Papers in Resource Analysis 12:1–18.
Kelly, Robert
2013 The Lifeways of Hunter-Gatherers: The Foraging
Spectrum. Cambridge University Press, Cambridge.
Kottek, Marcus, Jürgen Grieser, Cristoph Beck,
Bruno Rudolf y Franz Rubel
2006 WorldMap of the Köppen-Geiger Climate Classifica-
tion Updated. Meteorologische Zeitschrift 15
(3):259–263.
León, Rolando, Donaldo Bran, Marta Collantes, José Paruelo
y Alberto Soriano
1998 Grandes unidades de vegetación de la Patagonia
extra andina. Ecología Austral 8:123–141.
Llano, Carina
2015 On Optimal Use of a Patchy Environment: Archaeo-
botany in the Argentinean Andes (Argentina). Journal
of Archaeological Science 54:182–192.
Marsh, Erik
2017 La fecha de la cerámica más temprana en los Andes
sur: Una perspectiva macrorregional mediante modelos
bayesianos. Revista del Museo de Antropología, suple-
mento especial 1:83–94.
Martínez, Gustavo, Florencia SantosValero, Gustavo Flensborg,
Natalia Carden, Luciana Stoessel, Ana Alcaraz y Erika
Borges Vaz
2017 Was There a Process of Regionalization in North-
eastern Patagonia During the Late Holocene? Journal of
Island and Coastal Archaeology 12:95–114.
Mendía, Juan
2006 Aptitud de las tierras de Neuquén para el pastoreo.
INTA, Buenos Aires.
Nielsen, Axel
2017 Actualidad y potencial de la arqueología internodal
surandina. Estudios Atacameños 56:299–317.
Oyarzábal, Mariano, José Clavijo, Luis Oakley,
Fernando Biganzoli, Pedro Tognetti, Ignacio Barberis,
Hernán Maturo, Roxana Aragón, Paula Campanello,
Darién Prado, Martín Oesterheld y Rolando León
[Rughini et al.] 19ARQUEOLOGÍA DISTRIBUCIONAL Y BIOGEOGRAFÍA HUMANA EN UN PAISAJE ANDINO-TAGÓNICO
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
2018 Unidades de vegetación de la Argentina. Ecología
Austral 28:40–63.
Perez, Iván, Paula Gonzalez y Valeria Bernal
2016 Past Population Dynamics in Northwest Patagonia:
An Estimation Using Molecular and Radiocarbon
Data. Journal of Archaeological Science 65:154–160.
Rademaker, Kurt y Katherine Moore
2018 Variation in the Occupation Intensity of Early Fora-
ger Sites of the Andean Puna: Implications for Settle-
ment and Adaptation. En Foraging in the Past:
Archaeological Studies of Hunter-Gatherer Diversity,
editado por Ashley Lemke, pp. 76–118. University
Press of Colorado, Louisville.
Re, Anahi
2010 Representaciones rupestres en mesetas altas de la pro-
vincia de Santa Cruz: Circulación de información en espa-
cios de uso estacional. Tesis doctoral inédita, Facultad de
FilosofíayLetras,UniversidaddeBuenosAires,Argentina.
Rice, Prudence
2015 Pottery Analysis: A Sourcebook. 2da. ed. University
of Chicago Press, Chicago.
Rindel, Diego
2017 Explorando la variabilidad en el registro zooarqueo-
lógico de la provincia del Neuquén: Tendencias cronoló-
gicas y patrones de uso antrópico. En El poblamiento
humano del norte del Neuquén, editado por
Florencia Gordón, Ramiro Barberena y Valeria Bernal,
pp. 101–125. Aspha Ediciones, Buenos Aires.Rivera, Juan, Olga Penalba, Ricardo Villalba y Diego Araneo
2017 Spatio-Temporal Patterns of the 2010–2015
Extreme Hydrological Drought across the Central
Andes, Argentina. Water 9:1–18.
Romero, Guadalupe y Anahí Re
2014 Representaciones rupestres del noreste de Neuquén
(Patagonia septentrional): Primeras tendencias espacia-
les y temporales. Comechingonia 18(1):73–92.
Romero Villanueva, Guadalupe
2019 Biogeografía humana y circulación de información
en el norte del Neuquén: Un análisis arqueológico
sobre la comunicación visual en grupos cazadores reco-
lectores del noroeste de Patagonia. Tesis doctoral iné-
dita, Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de
Buenos Aires, Argentina.
Romero Villanueva, Guadalupe y Ramiro Barberena
2017 Los huesos de guanaco pintados de Cueva Huenul 1
(Patagonia septentrional). Relaciones de la Sociedad
Argentina de Antropología 42(2):369–377.
Romero Villanueva, Guadalupe, Gustavo Lucero y Ramiro
Barberena
2020 “Andean Summer-Break”: Rock Art Insights on
Information Networks and Social Interaction in a
Desert-Highland Interface in Northern Patagonia
(South America). Cuadernos de arte prehistórico, en
prensa.
Schobinger, Juan
1985 Áreas intermedias o marginales. En Arte rupestre de
la Argentina: Cazadores de la Patagonia y agricultores
andinos, editado por Juan Schobinger y Carlos
J. Gradin, pp. 80–91. Encuentro Ediciones, Madrid.
Simms, Steven, Jason Bright y Andrew Ugan
1997 Plain-Ware Ceramics and Residential Mobility: A
Case Study from the Great Basin. Journal of Archae-
ological Science 24:779–792.
Weedman Arthur, Kathryn
2008 The Gamo Hideworkers of Southwestern Ethiopia
and Cross-Cultural Comparisons. Anthropozoologica
43(1):67–98.
Zeanah, David
2004 Sexual Division of Labor and Central Place Fora-
ging: A Model for the Carson Desert of Western
Nevada. Journal of Anthropological Archaeology
23:1–32.
Submitted March 22, 2019; Revised November 19, 2019;
Accepted December 4, 2019
20 LATIN AMERICAN ANTIQUITY
at https://www.cambridge.org/core/terms. https://doi.org/10.1017/laq.2020.22
Downloaded from https://www.cambridge.org/core. Uppsala Universitetsbibliotek, on 09 Jun 2020 at 12:27:40, subject to the Cambridge Core terms of use, available
	Arqueolog&iacute;a distribucional y biogeograf&iacute;a humana en un paisaje andino-patag&oacute;nico
	Marco regional
	Dise&ntilde;o de investigaci&oacute;n y m&eacute;todos
	Sistemas de informaci&oacute;n geogr&aacute;fica y estacionalidad
	Prospecci&oacute;n arqueol&oacute;gica: Registro l&iacute;tico, cer&aacute;mico y de representaciones rupestres
	An&aacute;lisis estad&iacute;stico de la estructura espacial del registro arqueol&oacute;gico
	Resultados
	Modelo geogr&aacute;fico de la estacionalidad
	Espacios bajos (850-1.200&thinsp;m snm)
	Espacios intermedios (1.200-1.800&thinsp;m snm)
	Espacios altos (&gt;1.800&thinsp;m snm)
	Distribuci&oacute;n de materiales l&iacute;ticos en superficie
	Distribuci&oacute;n espacial de los motivos rupestres
	Distribuci&oacute;n espacial del registro cer&aacute;mico
	Movilidad y uso humano del espacio en un paisaje de transici&oacute;n topogr&aacute;fica y ecol&oacute;gica
	Situando la LBB a nivel temporal y espacial
	Registro arqueol&oacute;gico y uso humano del espacio en la LBB
	Conclusiones y perspectivas
	Agradecimientos
	Notas
	Referencias citadas

Continuar navegando