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Nuestros amigos los Ángeles - Omar R Cordero

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a diiÚ !F E,
Colección: Encuentro con Dios
. Misal del pueblo de Dios, E. paulino
. Dios con nosoÍos, B. Garcla
. El rosario, Recop. A. Vagnoni
. Encuentro con Jesús, E. Villafruela
. La semana santa, R. Ortega
. Las siete palabras, V. A. Dambrava
. Madre de-D]os y madre de los hombres, M. D. Alvarez. Novena al Espíritu Santo, M. D. Alvarez
. Nuestros amigos los angeles, O, Ramos
. Oraciones y novena al Espíritu Santo, B. Garcla. Para confesarse bien, M. b. Alvarez
. Visita al santísimo, B. García
. Yo soy la resurrección y la vida, B. García
. 3 | visitas y quince minutos a Jesús sacramenüad o, E. Sólesman. Cuatro horas santas pararezar en grupo, E. Aguilar. El santo rosario, E. paulino
. Jesús, yo confio en ti, J. AndrasT, sj.. Novena a las animas, M. Sánchez
Novena en honor a la virgen del Carmen, M. Sónchez. Novcna y misa al Sagradó Corazón, D. diorgetti. N¡rvcn¡rrios dc difr¡ntos,It. Iluysman
. ( )¡¡rci¡r¡rcs ¡xrr crrli.rrrros y rlilrirrtos. ll. Otrt.ítt
' f \'rftlr'ñrr rfcvrx lr¡lr¡u tt, 1,.' lrttultmt
. ()ttltx t' nul¡tl.¡¡ r or¡ t¡¡¡¡* rnr l¡tt¡r.t¡l¡r¡l¡l
. ll¡r rrr.rrlr rk. Nl¡n lxxl¡r, ll lt Alt,tttt.;
'f n lut¡¡r y tr)¡¡ulnrk'l r.nfcln¡o.il tt ,Llt,tut.;. Nfrn \¡¡r rlt' ( lrtr¡rrtrrr¡lluó, ll (;.,,.11,
. Nlrn Srn rl¡.1 VnlL', ll litttt ltt. I r¡'¡ f¡'¡l¡¡¡ ltr.l vl¡¡¡ lr¡ tr, /ll .\tltu.hr;
. Af rl¡rrf rrrr ¡rtlrlor In llll¡lr¡r, l) ( itttttu
. Mr.r.rr¡ n¡rf o l¡r llrlrlln. ll (iutrgrllt
. Nfrn Srrr rk.l ll.t¡ruftr Srr., M. I). Alvorez
' ( ¡)f rr'rffntfr nl Vl¡rt'rr¡cis dcr papa Juan pabro r, M. sónchez. f .n rru.rf¡rf f n rrrrllgrosl, M. D. Alvarez
MONS. OMAR RAMOS CORDERO
NUESTROS AMIGOS
LOS ANGELES
tó
PABLO
3a Reimpresión, 1995
O SAN PABLO, I989
Esq. Ferrenquín o Lo Cruz de Condelorío
Edificio Dorol Plozo, Locol I
Aportodo 14.034, Corocos I 0l I -A, Venezuelo
Telfs.: l}2l 573.63.46 - 573.64.75'- 576.76.62
Fox: {02) 576.93.34
lmpresión: SAN PABLO
PRESENTACION
Hablar de los ángeles hoy, en un mundo materia-
lista, consumista, con experiencia de lo inmediato y
con tendencia al "tener", más que al "ser", no es
fácil .
No obstante todas estas tnbas del hombre mo-
derno, el autor de este libro, muy conacido para los
radio-escuchas, sin mucho esfueno, Wro en un
lenguaje sencillo, nos muestn fehaciente, y simple-
mente siguiendo la Biblia, la existencia y el oficio de
estos seres espirituales. Con infinidad de textos nos
presenta a estas criatuns en acción, es dxir, inter-
viniendo en la vida de los hombres.
Es hermoso pensar 
-como afirma et mismoautor- que cada hombre tiene su ángel. Y en ver-
dad, si obserya mos, sobre todo, la vida de los niños,
uno no puúe menos que afirmar y crerur en su
existencia, junto a esos seres totalmente indefen-
sos.
Por contraposición, el autor, ya al finat del libro,
nos habla de la exrstencia del demonio.
Creo gue no hay venezolano gue no haya visto la
película "El Exorcista". Después de la contempla-
ción de esa película escalofriante, me parffie que
nadie duda del demonio. No hay que hacerlo
"dios", ni dueño del mundo, como muchas yeces se
ha pretendido; pero sí hay que temerle, espqial-
mente, a "ciertos hombres"...
EP.
5
1. EXISTENCIA DE LOS ANGELES
Hablar o escribir de los ángeles es un honor para
cuaf quier miembro de laraza humana.
Esta incursión doctrinal nos va a ubicar en un
cf ima degran altura. Nosvamosarozar con ángeles.
La tarea es delicada y tiene riesgos. Nadie ignora
la crisis de los últimos tiempos en esta materia de
a ngelología.
Pero el fundamento es muy sólido: La Sagrada
Escritura y la Sagrada Liturgia.
Jesús quiere que nos santifiquemos en la verdad
(Jn 17,17). Si ha puestoestealimento para nuestra
espiritualidad es porque no tiene veneno de errores.
Dios no puede darnos agua contaminada.
"Se negaría la autoridad de Jesús si se negara la
existencia de los ángeles" (Michael Seeman, en
Mysterium Salutis ll. tomo ll, p. 1046).
Casi no hay página de la Biblia donde no se hable
de los ángeles.
Y aunque es verdad que la Escritura no tiene un
tratado sistemático sobre la naturalezay número de
los ángeles, sin embargo, habla muy claro de sus
servicios a la causa de la salvación de los hombres.
Se dice que los ángeles son figuras marginales, ya
que los protagonistas de la historia de la salvación,
son Dios y el hombre, pero de tal manera están
vinculados a los personajes protagónicos que bien
se puede decir que Dios no ha querido hacer nada
sin ellos. En el desarrollo de este estudio lo veremos.
Han d icho que toda angelología es crístof ógica, ya
que salen en escena para preparar o para resaltar el
aconteci m iento Cristo. . .
No son, pues, los ángeles personajes indepen-
dientes o aislados... sabemos que fueron creados
por Dios al principio, como dice ef "Credo def pue-
blo de Dios" (de Pablo Vl), que los incluye en la
frase: "Creador de todas las cosas visibles e invisi-
bles"... Estas últimas son los ángeles.
No ha habido definiciones dogmáticas con anate-
mas sobre los ángefes.
En el Vaticano ll hay una cita muy sobria, pero de
contenido rico y pleno: (hablando de fos mártires)
dice que la iglesia "les profesó especial veneración
junto con fa bienaventurada Virgen y los santos án-
gefes" (Lumen Gentium n.7,50).
Es muy honroso estar así tan cerca de la Virgen y
de los mártires de Cristo.
El episodio 
-llamémoslo 
así- del Catecismo
holandés de 1969 y la Comisión Cardenalicia que le
hizo observaciones, arroja mucha luz sobre la reali-
dad de los ángeles.
Al parecer, la primera redacción no estaba muy
clara, entonces la comisión le sugirió otra que ellos
insertaron como apéndice y que dice así: "¿Es su
existencia (la de los ángeles) un presupuesto de la
concepción bíbfica def mundo o forma más bien
parte de la revelación? Sin duda jamás se había
propuesto la cuestión en estos términos. Los fieles
8
han considerado siempre a los ángeles como seres
que existen realmente. Estos aparecen siempre en
relación con nuestra historia de la salvación en
Cristo. Y todo lo que en ella se dice proclama esta
hermosa verdad, es decir, que Dios vela por nosotros
de mil modos diferentes".
El santo cura de Ars ---excelente catequista- reco-
mendaba esta oración a sus fieles antes de acos.
tarse: "Buenas noches, miángel guardián, yo te doy
gracias por haberme guardado durante este día,
ofrécele a Dios todos los latidos de mi corazón mien-
tras yo dormiré"
Santo Tomás de Aquino que, por algo es llamado
Doctor angéf ico, dedica 73 artículos de la Suma
Teológica a los ángeles, de los cuales sólo los útti-
mos fueron sobre los ángeles malos o demonios.
1) ¿Por gué es tan honroso para nosotros tratar de
los ángeles?
Nos recuerdan lo que de común tenemo.s con e//os.
2) ¿Cómo considera el pueblode Diosa /os ángelesT
Como /os seres que existen realmente y nos ayudan
en nuestra vida espiritual.
2. NATURALUA DE LOS ANGELES
Es verdad que no tenemos experiencias químicas
de los ángeles en los laboratorios, pero sí la tenemos
dentro de nosotros por las operaciones intelectuales
y volitivas de nuestra alma.
Hay que decir que estas operaciones son esen-
cialmente independientes de la materia, aungue
muchas veces están muy vecinas y afines.
Recordemos fos reinos de la naturaleza: la piedra
existe; f a planta existe y vive; el animal existe, vive y
siente; el hombre existe, vive, siente y piensa.
El hombre es el único ser compuesto del doble
elemento 
-materia 
y espíritu.
Conocer y amar son las operaciones específicas
del ser humano. Conocer es acto del entendimiento,
amar es acto de la voluntad.
En este último acto de la voluntad se incluye el
querer una cosa y el tomar una decisión cuando hay
afternativas.. . y para un ser libre como el hombre
siempre hay alternativas.
El hombre puede escoger entre levantarse a las 5
a.m. o levantarse a las 6 a.m; entre lo bueno y lo
malo. Entre ir al juego de pelota o no ir. Entre mil
cosas más.
Resum iendo entonces recordemos:
ldea: Es la representación mental de un objeto,
10
de una cosa, de una realidad que existe fuera de la
mente o af menos puedeexistir.
Se parece a !a fotografía en que ésta es fa fijación
en la pe.lícula de una cosa, cuya figura ha penetrado
por ef ojo de la cámara... tambiénla representación
mental entra por excitaciones sensorialós. por ejem-
pfo: mesa.
Pero se diferencia de la fotografía en la inmateria-
lidad, no se graba en pelícufa,lino en la mente.
Después diremos algo de la cooperación del
cerebro.
Juicio: Es la relación entre dos ideas: La mesa es
mía.
Raciocinio: Relación entre dos o más juicios co_
nocidos para llegar a otra verdad no conocida de
a ntema no.
Volición: El acto de la voluntad que elige libre_
mente algo.
Discernimiento: Posibilidad de ver los diversos
aspectos de una cosa.
criterio: facuftad de ver los motivos de una etec-
ción g de una opción.
Todas estas oireraciones son mentales. El cerebro
coopera como i.nstrumento presentando las impre_
siones sensoriales... de las iuales arranca la ¡deii...
El perro ve la casa de su amo y la conoce... más
nada.
El hombre ve la casa y piensa estas diversas posi-
bilidades que no figurán en la arquitectura de la
casa.
Casa propia.
Casa ajena.
l1
Casa alquilada.
Casa hipotecada.
Casa cómoda.
Casa incómoda.
Casa habitable.
Casa no habitable, etc.
Los hombres están contínuamente manejando
términos abstractos que no dependen de las impre-
siones sensoriales del cerebro:
Propiedad - libertad.
Bondad - dignidad.
Santidad, etc.
El parentesco de los hombres con los ángeles está
precisamente por esa actividad del espíritu.
Biológicamente somos muy parecidos a los ani-
males. Tenemos muchas experiencias físicas y quí-
micas en nuestro organismo. Pero también tenemos
- Dios sea bendito-- muchas experiencias de ordenintelectual y espiritual dentro de nosotros mismos.
Cuando se habla de los ángeles la dificultad está
en carecer de experiencia intelectual fuera del
cuerpo.
Pero si amarrada a la materia puede una inteli-
gencia escribir "El Quijote" o "La Divina Comedia"
o "La vuelta al mundo en ochenta días".
¿Qué no podrá cuando se vea libre de sus ataduras
carnales?
No habría arte, ni ciencia, ni cultura, ni tecnolo-
gía, si f a mente humana no pudiera actuar fuera de
los mecanismos cerebrales y muscuf ares...
El boxeador sería más hombre que el ingeniero...
T2
Nuestra materia nos pesa mucho, con frecuencia,
y [os tira hacia abajo...
Pero la realidad ile nuestro espíritu nos impulsa
hacia arriba. San Pablo dice: "Büscad las cosas de
arnba" (Col 3,2). Podemos vivir en atmósfera de
ángeles.
. No gSigamos en el "angelismo" que desconoce
las real idades temporales. . .
_ Pero. tampoco caigamos en ef materiarismo quenos reduce a hueso ymúsculo...
Somos algo más. 
-
Somos afguien ante Dios.
Lq: ángeles nos recuerdan esa maravillosa
condición.
1) ¿En qué nos parecemos a /os ángetes?
2) ¿cuáles son las operaciones que el hombre hace
sin intervención de ta materia?
l3
3. EL GUARDIAN DEL PARAISO
A los ángeles los vamos a conocer mejor por sus
actuaciones en la historia de la salvación. Entre los
dos grandes protagonistas - Dios y el hombre- vana aparecer ellos muchas veces cumpliendo una
misión.
Su esencia no se agota en la mensajería... pero el
mensaje indica el gran papel que Dios les enco-
mienda cerca de nosotros... y aquí vamos a tener
lecciones por montones.
"Expulsó al hombre y puso delante del jardín de
Edén un guerubín, que blandía flameante una es-
pada para guardar el camino del árbol de la vida"
(Gn 3 ,24).
Esta primera aparición histórica de un ángel va
íntimamente ligada a ciertas verdades reveladas por
Díos. Estas son, según la Pontificia Comisión Bí-
blica, en Decreto del 30 de junio de 1908 (acaban
de cumplirse los 80 años):
Formación de la mujer del cuerpo del hombre, la
unidad específica del género humano, la felicidad
original de los primeros padres en estado de justicia,
integridad e inmortalidad, el precepto dado por Dios
al hombre para probar su obediencia, el primer pe-
cado cometido por el hombre a instigación del dia-
blo, en figura de serpiente, la pérdida por parte del
L4
hombre def privifegio de la justicia original y la
promesa de un futuro redentor.
La presencia de los ángeles es evangelizadora. En
el texto sagrado el querubín está en la puerta, por-
que .han pq.s?.do todas esas cosas... que dice la
Comisión Bíblica.
Los ángefes son una referencia personal a Dios.
Cuento esta anécdota. Estaba yo, una tarde, en la
puerta de una iglesia y pasó un carro con una fami-
lia. Un niñito de 2 ó3añitos mevioy me saludóasí:
" Hof a , papá Dios. . . " no me dio tiempo de contestar
nada, pues el vehículo iba muy de prisa, me fui para
adentro y me puse a reflexionar. Porque yo hablo
siempre de Dios a los niños y éstos se acuerdan de
Dios cuando me ven a mí.
Este es otro parentesco con fos ángeles que, con
sólo estar o pasar por la calle, hagamos que otros
piensen en Dios.
Luchemos para que no haya expulsiones del pa-
raíso... Seamos buenos catequistas de la lglesia,
hagamos de heraldos de los preceptos de Dios... ya
no tendremos necesidad de esgrimir espadas en la
puerta.
Busquemos más bien que muchos se acerquen al
árbol de la vida.
San Buenaventura dÍrá un día: "Elárbol de la vida
es tu cruz, Señor".
1). ¿Qué verdades reveladas te sugieren la presen-
cia del querubín en la puerta del paníso?
2). ¿Nosotros estamos par¿t impedir que entren o
para impedir que salgan?
15
4. EL ANGEL DEL CAMINO
Cuando Tobías el viejo y Tobias el joven llamaron
aparte al compañero de viaje del segundo para pa-
garle sus honorarios, este dijo: "Yo soy Rafael uno
de los siete santos ángeles que presentamos las
oraciones de los justos y tienen entrada ante la
majestad del Santo" (Tb I2,Ir.
Es la bella historia del arcángel san Rafael, que
tan hondas raíces tiene en la religiosidad popular.
Guía, médico, compañero y amigo, su cercanía al
joven Tobías hizo que todo le saliera bien en aquel
viaje.
Se nos reveló el dato del viaje y algo más, la
natu raleza espiritual del ángel:
"Todos los días me hacía ver de vosotros; no
comía ni bebía; lo que vosotros veíais era una
a pariencia".
Los ángeles toman forma humana para cumplirsu
misión, pero no se sujetan a las necesidades biológi-
cas de los humanos.
Son excelentes misioneros y catequistas: "Ahora
alabad a Dios que yo me subo af que me envió".
También quiso se conseNara la memoria de las
maravillas de Dios, pues les mandó "poner por es-
crito todo lo sucedido"(Tb 12,19)
Después dice que no le volvieroñ á Ver:
16
San Rafael 
-medicina de Dio-- era honrado porsiglos 9n f_a liturgia del z4de octubre; cor la reforma
conciliar fue unido.al equipo de sus colegas sobre el
g,:lg M igu.el y Gabriel, y'tos tres juntos sü.1éUran el
29 de septiembre.
lqpularmente, Rafael sigue festejándose el 24 de
qctqbre. Lo piltp! como un pez gránde para recor_
dar la escena del río cuando ordenó a Tobías agarrar
el pez por las agallas.
El dogma dg..la providencia luce espléndido en
este hermoso libro. Quizás la sutileza de algunos
"doctores" para aceptar esta inefable bondJd _el
angel que cuida de nosotros_, se deba a lo que
podríamos llamar "escandalo angélico". ¿Será posi_ble este honor?
Rafael no sólo acompaña, sino que va como ade-
cány guardia de honor del joven Tobías.
Los israelitas temían morir al ver el ángel del
señor (.Sansón, Gedeón) caían en tierra par^ádorar.
No podían imaginar la intimidad con esbs principes
del Señor.
1) ¿Qué servrcios hizo san Rafael a Tobías?
2) ¿Qué consejo les dio at despedirse?
T7
5. LOS HUESPEDES DEABRAHAM
La Bíblia de la BAC dice, en una de sus notas, que
"los tres varones" que vio Abraham en la encina de
Mambré (Gn 18, 1) no son humanos. En el verso 17
se declara que uno de ellos es Yavé, los otros dos son
ángeles, como se ve en el relato del Lot.
En la carta a los Hebreos se alude a esta aparición
y se dice que Abraham hospedó ángeles (Hb 13,2).
"No olvidéis la hospitalidad, pues por ella algunos
sin saberlo hospedaron ángeles".
En toda esta aventura aparecen dos ángeles muy
alf egados a Yavé que lo acompañan, como edecanes
o ministros,en el diálogo con Abraham y en el
operativo de la destrucción de Sodoma.
Aceptan el banquete que les ofrece Abraham,
luego los dos ángeles se marchan a Sodoma a ejecu-
tar la sentencia mientras Yavé se queda conce-
diendo una audiencia privada a Abraham.
La intercesión de Abraham por Sodoma es una de
las páginas más dramáticas y conmovedoras de toda
la Biblia.
Está clara la mediación de los santos y el valor de
los justos.
P-aul Claudel lo decía: "Los Santos sólo tienen
que existir".
Cuando los ángeles cumplen una misión en nom-
bre de Dios no lo hacen para representar a un au-
18
sente... Dios está siempre muy cerca y actúa a
través de sus ministros.
No es de extrañar que en la visita a Abraham haya
actuando Yavé en persona- Dios Uno y Trino diría-
mos los cristianos- y dos de sus ministros de jerar-
quía angélica.
Como la investigación teológica ha visto que
nunca actúan para revelarnos su esencia metafísica
ni sus propiedades (apenas Rafael dijo que comía
en apariencia) no es de extrañar que a cada episodio
angéf ico le saquemos los mensajes salvíficos que
van con ellos adheridos.
Alrededor de la encina de Mambré hay un manojo
de luces, que iluminan el panorama de la doctrina
que salva.
Providencia de Dios, mediación de los santos
amigos de Dios, justicia de Dios para castigar a los
pueblos pecadores, misericordia y condescenden-
cia para perdonar hasta por diez justos, en el fondo
un recuerdo vivo al tratado de gracia, en su doble
aspecto de santificante y actual.
Las doctoras místicas, Catalina de Siena y Teresa
de Avila, tendrán visiones terribles sobre el infierno
y las almas con pecado mortal...
El azutre de Sodoma es un signo de esa horrible
situación...
Y que si el amor no nos conmueve, al menos el
temor de ir allá nos retraiga del pecado que dirá san
lgnacio en sus ejercicios.
1) ¿Qué mensaje trajeron los ángeles a Abraham en
Mambré?
2) ¿Qué luz arrojan sobre la gracia y et pecado?
t9
6. EL TRISAGIO DE ISAIAS
lsaías tuvo una visión maravillosa: "Vi al Señor
sentado sobre su trono alto y sublime. . . ".
En este pasaje, como en otros muchos de su
estilo, los profetas demuestran que están familiari-
zados con el mundo divino y las cosas del cielo...
"Había ante él serafines, que cada uno tenía seis
alas, con dos cubrían el rostro, con dos se cubrían
los pies, y con las otras dos volaban" (ls 6, 1 y 2).
El canto que hacían es el hermoso trisagio que
menciona la Trinidad: "Santo, santo, santb yavé
de los ejércitos. Está la tierra llena de su gloria...".
Es la hermosa visión de la vida contemplativa... es el
"no hacer nada" para ocuparse sólo de alabar al
Señor...
En el Salmo 148 se dice: "Alabadle vosotros sus
ángeles todos, alabadle vosotros todos sus ejérci-
tos" (V.2)... y así, muchas veces.
Cuando se dice "Pan de los ángeles" se entien-
de la adoración contemplativa que ellos hacen de
la esencia divina y de la Trinidad adorable (Sb
16,20).
Ef texto se refiere al maná blanco del desierto que
"tenía en sí todo deleite y se amoldaba a todos los
gustos", pero no tenía por qué llamarlo "alimento
de ángeles", si no fuera por el simbolismo eucarís-
tico, pues sabemos que los ángeles no comen.
20
El af imento de fos ángeles es la adoración.
No tenemos que hacér rodeos para decir que rajerarquía. de los serafines se nos presenta ya en
plena actividad latréutica.
La única lección que aquínos dan es fa oración de
adoración..Aquí no hay espada de fuego; ñ¡iucrrillo
exterminador.
Permítanme una anécdota infantil. Los niños
ayudan mucho a la reflexión. Tengo un equipo de
monaguillos (válgame Dios. .. ¿y eso va a producir
una reflexión teológica?) y como son muchos, se
reparten los oficios con celosa minuciosidad: Cam-
pana pequeña, campana grande, vinajera uno, vina-
jera dos, música, bandeja, conteo, lavado, etc., etc.,
etc... Alguna vez uno se queda sin oficio porque hay
muchos ayudantes y se agotan los utensilios litúrgi-
cos... Entonces, "el sin oficio" me pregunta: "¿y yo
no voy a hacer nada?' ' Yc le respondo: "Vas a hacer
mucho, vas a adorar a Dios con las manos juntas,
como un serafín".
Esta adoración seráfica, como la del campesino
d.e Ars, debe ser rescatada del poco aprecio en estos
tiempos de activismo, de "herejía de'la acción".
Y los obispos de territorios de misión siguen pi-
díendo monasterios de vida contemplativa para sus
diócesis, convencidos de que la oración será el me-
jor modo de evangelizar.
Pero dirá alguno que rsaías habra de una visión
que no es historia...
Le respondemos que la visión del gran profeta
2I
narra la historia de todos los días en el cielo. Si no.
¿para qué se nos iba a revelar?
1) ¿Qué hacían los seraf ines de la visión de lsaías?
2) ¿Qué actitud humana corresponde mejor a la
Dostura de /os seraf ines?
22
--f
7. ANGELES LIBERADORES
Me refiero al que destruyó los 185.000 hombres
de Senaquerib (2 M 15,22) y al que hirió a los
primogénitos de Egipto en la noche pascual.
Primero se demuestra su gran poder. Uno que
destruye a 185.000... ¿ Habrá que buscarle un
matiz a este número?
¿ Habrá que buscarle un matiz a este número?
La invocación de Judas Macabeo fue así: "Tú,
Señor, que enviaste un ángel bajo Ezequías, rey de
Judá, que mató del ejército de Senaquerib a ciénto
ochenta y cinco mil hombres" y añade en seguida:
"Envía ahora, Señor de los cielos delante de noso-
tros un ángel bueno que infunda a éstos temor y
tem blor".
Sabemos que esta vez también fue oída su ora-
ción: "Oraban en su corazón a Dios y magnífica-
mente fortalecidos por una aparición de Dios echa-
ron por tierra no menos de treinta y cinco mil hom-
bres" (2M 15,22) y después lo celebraron mos-
trando la cabeza del impío Nicanor.
A veces, el materialismo nos invade, también en
política... o en deporte... Boxeo y lucha libre, por
ejemplo. Rara vez se hace un torneo de ajedrez o
matemática que es ejercicio mental. El armamen-
tismo y el militarismo es un homenaje a la tuerza
bruta. El elefante vale más que el conejo... y con
este criterio el aborto puede llegar fácilmente.
Estos episodios bíblicos de un ángel venciendo a
185.000 y de otro venciendo a 35.000 nos de-
muestran la superioridad del espíritu sobre la mate-
ria, lo que es una tesis filosófica...y la providencia
de Dios con su pueblo lo que es una tesis teológica.
l.o que dijimos del elefante hay que tomarlo en
seno.
Un directordel zoológico no lo mataría pordinero.
Pero a un niño sin nacer lo mata el médico del
hospital por ganar algunos billetes.
El que cree en los ángeles cree también en el alma
humana inmortal... son dos creencias muy af ines...
y muy honrosas para nosotros.
Otro ángel liberador es el del Exodo que acom-
pañó a los israelitas y que venció la fuerza del ejér-
cito egipcio.
Exodo: "El ángel de Dios que marchaba delante
de las huestes de lsrael, se puso detrás de ellas; la
columna de nube que iba delante de ellos se puso
detrás, entre el campo de los egipcios y el de lsrael,
y se hizo tenebrosa y sombría toda la noche, y las dos
huestes no se acercaron una a otra durante toda la
noche".
La investigación de las escuelas teológicas nunca
sabra qué siguió haciendo este ángel cuando los
israelitas llegaron a la tierra de promisión... El
exodo nada dice de su agenda en el cielo... sólo nos
habló de su agenda en el Mar Rojo... pero de aquel
pueblo que él salvó de Egipto salió en la plenitud de
f os tiempos el Mesías, la luz del mundo, el Cristo
redentor.
24
. Un inggl de Dios era el encargado de castigar conla peste al p_ueblg de lsrael, du-rante tres díás para
castigar a David por el censo triunfalista h S
24, 16).
Un ángef impidió que Abraham sacrificara a su
hijo lsaac que él iba a inmolar en el Monte Moria. El
sacntlclo lo consumó en su corazón .. el ángel por
orden de Dios fe atajó la mano cuando ya el iorúón
le sangraba (Gn 22,-15).
!) iC.Aryo actuaron los ángeles liberadore.s del pue-
blo de Dios?
2) ¡ Qué tesis importante ftuyede esa actuación?
25
8. ANGELES EN ACCION
Por razón de brevedad y con deseos de llegar
pronto al Nuevo Testamento resumiremosalgunas
actuaciones de ángeles en la Antigua Alianza.
Un extraño aire acondicionado
Así podría llamarse el fenómeno del horno ar-
diente de Babilonia a donde fueron arrojados los
tres amigos de Daniel Pero el ángel del Señor
había descendido al horno con Azarías y sus compa-
ñeros y apartaba del horno las llamas de fuego y
hacía que el interior del horno estuviera, como si en
éf soplara un viento fresco" (Dn 3 ,49).
No nos extrañaremos si la lglesia en su acción de
gracias litúrgica, recuerda ese episodio a Dios para
qué no nos consuma el ímpetu de otros fuegos; "oh
Dios que mitigaste las llamas del fuego a los tres
jóvenes, concede propicio que a tus siervos no los
queme la llama de los vicios".
D,omadores de leones
Más deportivo y espectacular fue lo que hizo el
ángel en la cueva de los leones.
Daniel estaba condenado a morir triturado por los
leones de una cueva, por el "delito" de haber orado
tres veces en su casa con la ventana abierta.
26
Cuando el rey, su amigo, fue a la cueva a buscar
los huesitos del profeta con la posible intensión de
echarf os a f os perrítos de su palacio, se encontró con
esta formidable sorpresa: "Mi Dios ha enviado a su
ángel qyg Fa cerrado la boca de los leones para que
no me hiciesen mal, porque delante de éi ha sido
haf lada en mijusticia, yaun contra tioh rey, nada he
hecho de malo" (Dn 6,22).
. . Lo menos que podemos pensar por asociación de
rdeas gs que los ángefes protegen la libertad reli_
giosa de los hijos de Dios... y poisupuesto... la tesis
que siempre defienden los ángeles, Dios nos ama y
nos cuida cuando conf iamos en é1...
El gran comunicador social
Daniel no agotó su actividad en el horno, ni en la
cueva de los leones. Quería investigar el futuro y
saber cuándo llegaría el Santo de losiantos.
Y por ser "varón de deseos" recibió el anuncio
profético más preciso de la llegada del Cristo:
".Y.gquel varón Gabriel, a quien antes vi, en la
visión, se llegó a mícomo a la hora del sacrificio de
la tarde... ".
f nterrumpimos la narración para notar que el án-
gel, aquí y en otros lugares, es Jlamado "varón"...
par? hacernos esta pregunta , ¿Por qué se ha femini-
zado a. l.gs ángeles? ¿Por qué lbs angelitos, gramati-
cgl y bíbf icamente masculinos son representados
siempre por niñas de cara bonita?... Tal vez culpa de
los artistas, los poetas y sobre todo los pintores,
?ungue el gran poeta venezolano le pidió a ellos que
le pintaran angelitos negros. . .
27
Cerramos el paréntisis para oír el mensaje del
varón Gabriel:
"Setenta semanas de años están prefijadas sobre tu
pueblo y sobre tu ciudad santa para poner fin a la
prevaricación y cancelar el pecado, para expiar la
iniquidad y traer la justicia eterna... y ungir al Santo
de los santos" (Dn 9,24...).
lmpresionante la precisión periodística del arcán-
gel, que desde entonces se puse a contar los días
hasta que fuera enviado "a una ciudad de Galilea
llamada Nazaret, a una virgen desposada con un
varón de nombre José, de la casa de David y el
nombre de fa virgen eraMaría"...
De este anuncio hablaremos después.
La última palabra sobre el problema del sexo de
los ángef es la dice Jesús al responder a la cuestión
de los saduceos que negaban la resurrección: "An-
dáilerrados por no conoóer tas Escrituras ni el poder
de Dios. Pues en la resurrección no se casarán ni
ellos ni ellas sino que serán como ángeles de Dios en
el cielo" (Mt 22,29 y 30).
Nada hay que añadir, sino que la vocación a la
vidg consagrada en la virginidad, es ya un ensayo del
cielo y una afinidad especial con los ángelás de
D ios.
1) ¿Qué hizo el ángel del horno y qué et ánget de la
cueva?
2) ¿En qué ayudan los ángeles en la oración de los
f ieles?
28
9. EL ANGEL DE LA ANUNCIACION
Conocemos el diálogo en detalle, nos resistimos a
pensar que sea un sueño, un mito o una etiología...
Daría una jaqueca al que quisiera encontrar una
adecuada explicación al capitulo primero de san
fucas, si los ángeles no existieran y el diálogo de
Nazaret fuera un simple sueño de la Virgen.
Además cuando es un sueño lo dice claramente la
B iblia. . .
Jacob vio una escafa en sueño.s(Gn 2A, 12).
El ángel se apareció en sueño a José... y le explicó
ef misterio de la encarnación... (Mt I,2O). El Faraón
de Egipto tenía sueños misteriosos y Jose, el hebreo,
se los interpretaba (Gn 4I,2il, etC.
El acontecimiento más grande y central de la
historia de la salvación es la encarnación del Hijo de
Dios en las entrañas de María, por obra del Espíritu
Santo.
"En el sexto mes el ángel Gabriel fue enviado por
Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret a una
virgen desposada con un hombre de la casa de David
f lamado José... La Virgen se llamaba María..." (Lc
I,26 y ss).
Dicen los teólogos y exégetas que las objeciones
lanzadas por los críticos racionalistas contra este
versículo dan realce a su significado.
Inventan cualquier cosa por destruir o desvirtuar
la gran verdad. . .
A través de un ángel nos llega la noticia central de
la historia y del mundo.
Los más sagrados misterios de la fe se esconden
en el diálogo de la humilde casa, llamada por alguno
que visitó el sitio y luego la así llamada "Sánta
Casa" de Loreto: la oficina de la Santísima
Trin idad. . .
Conocemos la tierna intervención de San Ber-
nardo cuando asomándose en su imaginación le
dice a la Virgen María: "Responde pronto, Señora, a
la proposición del ángel. El cielo y la tierra y todos
los siglos anteriores, y posteriorei al Mesíai están
esperando tu respuesta para que se salve el
m u ndo".
María dice: "He aquí la esclava del señor, hágase
en mí según tu palabra" .
. El evangelio dice que en ese momento el ángel se
alejó de ella.
No sabemos la emoción de Gabriel cuando em-
prendió el vuelo de regreso... pero sí nos imagina-
mos la sonrisa de satisfacción cuando llegó al cielo,
af trono de Dios Padre para decirle: "Señbr, misión
cumplida". En ese trascendental momento el Verbo
se hizo carne y habitó entre nosotros.
1) ¿Cuáles /a noticia más grande de la historia?
2) ¿C.Qmo podríamos imitar a los ángeles en su
relación con María?
30
10. LA CORAL ANGELICA DE NOCHE BUENA
Aq u í está n insepa ra blemente u n idos los á ngeles y
los pastores.
Los ángeles vinieron por los pastores. Los prínci-
pes del cielo por los humildes campesinos de la
tíerra.
Fue una fiesta y un desquite. Se vinieron las
mejores voces del coro angélico detrás de uno que
f ungía de jefe o director de la sinfónica.
Ese director, ¿era Gabriel o era otro?... no sabe-
mos, ni interesa su nombre... tal vezera otro para
indicar que en el cielo hay una muy buena distribu-
ción de los oficios. Los ángeles no son "quita ofi-
cios" y entre ellos no existe la envidia.
'lU n ángel del Señor se presentó a los pastores. La
gloria del Señor los inundó con su gloria".
El mejor teatro de ópera de Milán, París o Nueva
York, o el "Teresa Carreño" de Caracas no podrían
nunca poner una mejor decoración.
Como los pastores se asustaron, el ángel les dijo:
"No tengáis miedo, os anuncio una gran alegría que
será para todo el pueblo: Hoy os ha nacido en la
ciudad de David un Salvador que es el Cristo Se-
ñor... y esta será la señal: €ncoritraréis un niño
envuelto en pañales y recostado en un pesebre... y
de inmediato 
-recordémoslo 
con emoción- con el
3t
ángef .vino_qna multitud del ejército cefestial que
alababa a Dios diciendo: "Gloiia a Dios en fo más
alto def cielo y pazen la tierra a los hombres que ama
ef señor".
Aquello debió ser maravilloso... nos llenamos de
gozo al oír los niños cantores de Viena, o del Zulia...
o de la Sixtina de Roma o la Salve Regina de la
Escolanía de Monserrat... Cómo sería e-l caso de
aquella multitud...
¡El concierto más bello de la historia de la música
no fue dado en Versalles o en el palacio lmperial de
Viena... sino en el campo de los pastorbs de la
Colina de Belén, a los humildes hombres que vela-
ban rebaños de ovejas!
Jesús venía a cambiar las estructuras del mundo
con su doctrina del sermón de la montaña... pero las
cambió primero el día de su nacimiento, 'cuando
convirtiólos campos de Belén en una serenata ce-
lestial para los pobres...
1) ¿Qué dijeron los ángele.s a /os pastores?
2) ¿Cómo podemos imitara /os ángelesdel pesebre?
32
1T. LOS SERVIDORES DEL DESIERTO
Cuando Jesús fue tentado por el diablo en el
desierto (habrá un breve capítulo para este perso-
na je) y para nuestro ejemplo venció las tentaciones,
al final vinieron los ángeles y le sirvieron (Mt 4, 11).
La narración es extremadamente sencilla y noso-
tros, en nuestra curiosidad, quisiéramos muchos
detalles de este sobrio pero delicioso almuerzo. Por
ejemplo, cuántos vinieron, qué le trajeron de comer,
cuántos tiempo estuvieron con é1, etc.
Las narraciones bíblicas sobre los ángeles son
así, muy breves y sin más explicaciones.
Particularmente, con ocasión de este "servicio"
podríamos recordar algunas cosas fundamentales
de lo que llaman algunos "angelología cristoló-gica o sea, que todo lo que hacen los ángeles y
todo lo que de ellos se nos ha revelado está ordenado
y subordinado a Cristo.
Esto vale para la actuación del ángel de Getse-
maní, de los ángeles del sepulcro vacío, del ángel
q ue liberó a Pedro de la cárcel, en textos que nos son
muy familiares del Nuevo Testanrento.
Lo primero y fundamental que se afirma de los
ángeles es que su gracia es también gracia de
Crísto, es decir, que no son un mundotreatural
desvinculado del drama redentor.
La afirmación es maravillosa. Nadie está en el
33
cielo entre los seres creados independiente de la
sangre de Cristo.
Parece lo más lógico. Si el mundo angélico tomó
parte en la caída del hombre para la cual llegó la
redención de la humanidad por Cristo, es conve-
niente pensar que en la regeneración los ángeles
sean incluidos como beneficiarios y colaboradores
de la obra redentora de Cristo.
Pero más que todo por la doctrina de san Pablo:
"Cristo es la imagen de Dios invisible, primogénito
de toda criatura, porque en él fueron creadas todas
las cosas del cielo y de la tierra las visibles y las
invisibles. ..." y por si quedaran dudas... añade:
"Los tronos, las dominaciones, los principados, las
potestades; todo fue creado por él y para é1, El es
antes que todo y todo subsiste en é1" (Col I,14 y
siguientes).
Este párrato de san Pablo contiene la más alta
exposición de la excelencia de Jesucristo Hijo de
Dios, amado del Padre "en quien hemos sido enri-
quecidos en todo" ( lCo 1,5).
Con lo que se ve muy claramente que los ángeles
dependen de Cristo y se ordenan a él en el orden
natural y en el sobrenatural.
Queda todavía por analizarse el misterio de la no
redención de los ángeles caídos...
Al introducir su hijo primogénito en el mundo dice
Dios: "Adórenlo todos los ángeles de Dios" (Hb 1,6).
A ninguno de ellos le dijo: "siéntate a mi derecha"
(ld 1, 13) y "no fue a los ángeles a quienes sometió
el mundo venidero" (ld 1,5).
El hecho se consumió así. Por la eximia perfec-
34
ción natural de los ángefes, su caída los confirmó en
desgracia. Dice la Carta Canónica de san Judas, en
forma escueta: "A los ángeles que no guardaron su
principado y abandonaron su propio.domicilio los
reservó con vínculos eternos bajo tinieblas para el
juicio del gran día" (Judas 1,6).
1) ¿Qué se entiende por ángeles servidores de
Jesús?
2) ¿Qué debemos pensar que nosotros sí fuimos
redimidos y /os ángeles no?
35
12. ELANGEL DE LA PASION
Cuando Jesús hizo su dramática oración del
huerto, sudando gotas de sangre que corrían hasta
el suelo, "se le apareció un ángel del cielo que lo
confortaba" (Lc 22, 13).
Getsemaníconserva todavía el ambiente de la no-
che triste. Los olivos de ahora dicen que vienen de
18 siglos... Deben ser pues retoños legítimos de los
que oyeron y contemplaron la agonía del salvador
del mundo.
Un ángel confortó a Jesús, el hijo muy amado del
Padre... Uno de los enrolados en las "doce legio-
nes" que él podía lla¡nar para defenderlo (Mt
26,53) le dio el consuelo que los amigos de la tierra
no le daban...
Uno de los ángeles que recibieron orden de ado-
rarlo (Hb 1,6)... uno de los que están a su alrededor
en el trono (Ap7, 11), uno de los que vendrán con él
como glorioso juezal final del mundo (Mt 16,27).
Uno de aquéllos que según san Pedro "desean
contemplar su misterio" ( lP I,12) ahora lo viene a
ver en ef misterio del dolor y la debilidad... y le
ofrece la copa del consuelo diúino.
Si los ángeles malos-así llamados malos-, que
antes eran buenos, cayeron por no aceptar la debili-
dad y humíllación del Dios encarnado..., los ángeles
36
buenos f ueron buenos porque no se escandalizaron
de f a cruz... como no se habían escandalizado del
pesebre.
. Y si ellos., los ángeles, son importantes por razóndel mensaje... ést-e de Getsemaní es demasiado
impo_rtante y debe tener mucha gloria... como dirá
san Pablo: "Lejos de mígforiarmé en otra cosa que
no sea la cruz de nuestro Señor Jesucristo"... ('Ga
6, 14) .
Hab.rá después una corriente de espiritualidad
g.ue tiene_ a gusto asociarse con el' ángel del
Huerto... Son los reparadores del Sagrado Corazón
de Jesús... gue no sufre ahora en él cielo... por
supuesto... pero que aceptó en Getsemaní, con vi-
:.¡ól de futuro, el amor reparador de los amigos....'l¿Nq llabéis podido velar una hora conmigoT" (Mt
26,40).
En ese sentido se deben interpretar las quejas del
Señor en Paray- le Monial.
. ..El lenguaje, por lo demás, es usado por la Bi-
blia.;.. "No pongais triste al Espíritu Sánto" (Ef
4,30)
1 ) ¿Cuál es e/ noble oficio del ángel de Gets emaní?
2) ¿Qué podríamos hacer hoy para imitarlo?
37
13. LOS ANGELES DEL SEPULCRO VACIO
Las aspiraciones angélicas, narradas en la Biblia
dieron ocasión a que los Santos Padres no pudieran
pensar en ellos como totalmente incorpóreos.
Muchos pensaron que tenían un cuerpo especiai,
"sin materia", algo así como el fuego y el aire. Hoy
la opinión general es la de la pura espiritualidad.
Aunque los ángeles tengan un parentesco esen-
cial con el alma humana, pero no son almas, en el
sentido de nuestra antropología cristiana, pues las
almas tienen una relación existencial al cuerpo y los
ángeles no, por eso son llamados espíritus puros.
Los "cuerpos" de los ángeles son pues meras
visiones y su locución es una producción de sonidos
similares al lenguaje humano.
La agenda dq los.ángeles en la mañana de la
resurrección, estuvo I fena :
"Un ángel del Señor bajó del cielo y se acercó,
rodó f a piedra y se sentó sobre ella" (Mt28,4.
"Entrando en el sepulcro (las dos Marías y Sa-
lomé) vieron a un joven sentado a la derecha, ves-
tido con una vestidura blanca y tuvieron miedo. . . ".
Pero ét tes dijo: "No tengáis mido, vosotras buscárs
a Jesús Nazareno, el crucificado, ha resucitado. No
está aquí. ld a decir a sus discípulos y a Pedro que
fos precede en Galilea... allá fo veréis como lo ha
dicho" (Mc 16,5 y siguientes).
38
1
"Dos hombres aparecieron cerca de ellas (ángeles
en forma de hombre) con vestidos fulgurantes, y las
mu jeres se asustaron y habiendo inclinado el rostro
a tierra ellos le dijeron: ¿Por qué buscáis entre los
muertos al que está vivo?" (Lc 24,4).
"María Magdalena vio dos ángeles en blancas
vestiduras, uno sentado del lado de la cabeza y otro
del lado de los pies donde había estado puesto el
cuerpo de Jesús... y le dijeron: Mujer ¿por qué llo-
ras? ... y luego vino Jesús en forma de hortelano" (Jn
29,r2).
Estos dos ángeles de Juan deben ser los mismos
"dos hombres" de Lucas... de los cuales Mateo y
Marcos mencionan uno.
Donde hay dos hay uno necesariamente. Hubiera
sido falso si hubiera dicho: "uno solamente"...
Como cuando a uno le preguntan si tiene en ese
momento cien bolívares en el bolsillo, y contesta
que sí porque lleva más de mil.
No ha dicho ninguna mentira.
Los ángeles anuncian la noticia más extraordina-
riay grandiosa de todos los tiempos que dio origen al
nacimiento y expansión de fa lglesia y fundó la
esperanzq. de todos los hombres en su propia
resurreccton.
Fueron evangelizadores de los evangeiizadores de
los apóstoles...
lgual que en Belén, aquí anunciaron "el gran
gozo' ' que es para todo el pueblo...Y vofvemos a decir lo mismo..., aunque no sepa-
mos la esencia metafísica, ni lo que hicieron estos
ángeles después de la mañana bendita de Pascua...
39
no,s basta para aprec¡arlos mucho y tenerles devo-
cro-lt ya q.ue nos anunciaron a Jesús resucitado.
Hero observemos este dato curioso: Se aparecen a
la .gente sencilla, a las piadosas mujeres... nada
más. ..
Digamos con un respetable teólogo: "Las apari-
ciones angélicas, sea cual fuere su explicación, de-
jan bien en claro que los ángeles, como mensajeros
de Dios pueden intervenir en la esfera de la existen-
cia humana a todos los niveles y que puedan ha-
cerse perceptibles". (Michael Seeman, Mysterium
Salutis, Vol. ll, Tomo ll, pag. 108 1).
1) ¿Cuál f ue el anuncio más importante de los
ángeles?
2) ¿Cómo nos haríamos tesfigos de ta resurrección?
40
14. LOS TROMPETEROS DEL JUICIO
No sé si los ángeles son cada uno una especie
distinta, como opina santo Tomás de Aquino, o
todos pertenecen a la misma especie... de lo cual
d isertará n los teólogos.
Pero lo que sí sé es que serán los encargados de
tocar la trompeta del juicio f inal y serán pregoneros
de la gloria del Gran Rey.
Veamos con calma algunos consoladores textos
de la Sagrada Escritura, sobre todo, para los mo-
mentos de aflicción.... cuando parezca que nos
traga la tierra y todo se hunde bajo nuestros pies.
"Cuando venga el Hijo del Hombre con todos sus
ángeles, se sentará sobre el trono de su gloria" (Mt
25,3r).
"En un momento, en un abrir y cerrar de ojos, al
son de la última trompeta, los muertos resucitarán
íncorruptos y nosotrbs seremos transformados"
( 1Co 15,52).
"El señor mismo, a la señal dada por la voz del
aycángel y al son de la trompeta de Dios bajará del
cielo y los muertos en Cristo resucitarán primera-
mente" (lTs 4, 15).
Como síempre los ángeles al servicio de los planes
d ivinos.
Al q.ue vieron reclinado en un pesebre, ahora lo
anuncian como juez del mundo sobre las nubes del
cielo...
41
Jesús dice que vendrá con todos sus ángeles.
Será un espectáculo maravilloso, empezañdo por la
cantidad. ¿Cuántos son los ángeles?
En Daniel hay un dato elocuente: "Le servían
millares de millares y le asistían millones de millo-
nes y el tribunal tomó asiento y fueron abiertos los
f ibros" (Dn 7 ,IO).
Y ef Apocalipsis no se queda atrás en la estadís-
tic3, .pugs dice: "El númeio de los del ejército de la
caballería era de dos miríadas de miríadas; yo oí su
número" (Ap 9, 16).
El diccionario dice que miríada es un número
gr?nqg e indeterminado... pero hay miríadas de
estrellas.
. Ef. ejército incontable vendrá a decirnos la catego-
ría del personaje que se pasó siglos solitario en"el
Sagrario y ante el cual rezaban humildes niños y
ancianas en los jueves eucarísticos: "Te adoramos
en unión de los santos ángeles que en torno a esa
Hostia divina te contemplan abismados en profunda
adoración".
Me guslaría en ese momento ver la cara de Caifás,
el Sumo Sacerdote del Sanedrín, que se rasgó las
vestiduras cuando oyó a Jesús 'anunciar- este
momento.
lot ángeles serán los vengadores del honor ultra-
Jaoo oe Jesus.
En la fórmula de la sentencia dirá el Señor: "Ve-
n id benditos de mi padre a poseer el reino preparado
pqra vosotros desde el principio del mundo" (Mt
25,31) y no menciona a los ángeles, dando a en-
tender que ese destino eterno de felicidad nos es
común con los ángeles.
En cambio, en la sentencia de condenación si se
42
menciona a los ángeles malos: "Apartaos de mí,
malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y
sus ángeles" (ld. 4I).
Pero de los ángeles caídos hablaremos en otro
momento.
En los desfiles gimnásticos son muy vistosas las
f iguras de los trompeteros... de las bandas secas...
Nuestros amigos los ángeles darán ese aire de
tríunfo a la venida del Gran Rey.
Que ahora nos ayuden con sú protección a ubicar-
nos bien ese día.'.. a la derecfia, como las ovejas
buenas y seamos invitados a entrar a la herenóia
eterna
1) ¿Qué of icio desempeñarán los ángeles en el juicio
f inal?
2) ¿Cómo podríamos granjearnos su benevolencia
para ese día?
43
15. CON EL AMIGO SAN PABLO
El apóstof de.las gentes tuvo una profunda pene_
tración en el misterio de cristo. No es de extrañar
que se tope con los ángefes en cuafquier momento
de su contemplación.
Pabf o tuvo que compartir con ros creyentes de su
tiempo la fe en la posibilidad oe que los ángefes
existan y actúen y se empeña en probar que en todo
momento effos están ordenados af misterio de
cristo.
Previniendo contra un falso ascetismo y una fatsa
piedad menciona una "simulada humildad o culto
de ángeles", que impiden "adherirse a ra cabeza por
la que todo el cuerpo s.¡stentado y ligado por las
articulaciones aumentan su crecimienito en Dios"
Gol 2, 19) Esta clalo que la cabezaes Cristo... y que
fos. ángefes no deben interferir, sino ayudar a ra
unión con él ... "Crezcamos en aquéf qrá., la ca_
beza, Cristo" (Ef 4, l5).
. . Los ángef es son testigos y espectadores en toda la
historia de la salvación-... t'Hemos llegado a ser el
espectáculo del mundo, de los ánge'ies y de los
hombres" ( lCo 4,9) por lo visto vañ a mánifestar
afgun día su admiración por los muchos trabajos def
apóstol Pablo. Podríamos pensar en los ,rpádor.,
de f as carreras atléticas... los ángeles nomn¡r arán
44
desde la tribuna del cielo. En lo referente a oficios
eclesiásticos, los ángeles son testigos cualificados
ante Dios.
"Yo te conjuro delante de Dios y de Cristo Jesús y
de los ángeles elegidos, que observes estas cosas
imparcialmente sin dejarte llevar de apreciaciones
humanas" ( lTm 5,2I).
La presencia de los ángeles cerca de Cristo glo-
rioso, es algo familiar a san Pablo... Parece que no
sabe pensar en Cristo rey de majestad, sin su cortejo
de ángeles: "Cuando aparezca en el cielo el Señor
Jesús con los ángeles de su poder" (2Ts I,7)...
Pablo piensa, además, que los ángelés tuvieron
una participación especialen la entrega de la ley de
la Antigua Alianza: " ¿A qué viene pues la ley? Por
causa de las transgresiones fue añadida hasta que
viniera el descendiente a quien fue hecha la pro-
mesa promulgada por ángeles por mano de su me-
diador" (Ga 3, 19).
Y otro pasaje, singularmente elocuente, encon-
tramos de la actuación de los ángeles en la promul-
gación de la antigua Ley: "Si la palabra promulgada
por fos ángeles estaba garantizada hasta el punto
que toda transgresión y desobediencia recibió su
justo castigo... ¿Cómo podríamos escapar nosotros
si descuidamos tan gran salud, la cual inaugurada
por la predicación del Señor nos ha sido transmitida
con garantía por aquéllos que la oyeron?.. (Hb 2,2y
3).
De modo que debemos imaginar a los ángeles
muy activos y dinámicos en los truenos del Sinaí y
también en las escenas del Calvario, ya que no se
debe pensar que estuvieran ausentes al promul-
45
garse la ley del amor... si estuvieron presentes en la
Ley del temor...
. .Pablo opinaba muy bien de los ángeles y los repu-
taba como expertos en lenguas 
-Glosolalia- 
pues
al argumentar en el sermón de la caridad dice:
"Au.nque yo hq.blara_l-as lenguas de los hombres y de
los ángeles... "etc. ( lCo lJ, 1).
También se recuerda la gran categoría que pablo
d? a los ángeles, aunque inferiores aCristo, cuando
dice a los Gálatas: "Aun cuando nosotros o un ángel
del cielo les anunciase un evangelio distinto del q-ue
les hemos anunciado, sea anatéma" (Ga 1,7).
lor último,_ los ángeles son muy allegados por víadel conocimiento experimental, al misterio de
Cristo: "Grande es el misterio de la piedad... mani-
festado en la carne, justificado,en el espíritu, yrsto
de los ángeles, procfamado a los gentiles" ( lTm
3, 16).
Esta última alusión a la proclamación del misterio
1 los gentiles nos revela una nueva nota de ros
ángeles, la dimensión misionera...
Ellos están viendo el misterio... "sus ángeles ven
de continuo la faz de mi padre que está en los
cielos" (Mt 18, 10)..., de cuya contemplación sal-
drá el deseo ardiente de darlo a conocer..., como
dice Juan: "Lo que hemos oído, lo que hemos visto
con nuestros ojoslo que contemplamos y palparon
nuestras manos tocando al verbo de la ú¡0a... eso
anunciamos... ".
Los misioneros debemos ser-y todo cristiano es
misionero- testigos oculares de la vida que
anunciamos.
Nos queda recordar aquella frase famosa de san
46
Pablo a los Corintios ( lCo 6,3): "¿No sabéis que
juzgaremos a los ángeles?".' S"iempre me llamé la atención eso de que i.ulgue-
mos a lós ángeles. ¿En qué tribunal y en qué juicio
va a ser eso?
Dice san Juan Crisóstomo que juzgaremos a los
ángeles malos igual que a los otros réprobos en el
juicio final.' 
Y en algún sentido juzgaremos a los ángeles bue-
nos. al soJidarizarnos coñ la sentencia del supremo
iuez que premi ará a los elegidos, ángeles y hombres,
bn la'dichosa sentencia "Venid benditos de mi Pa-
dre... tomad posesión del reino preparado para vo-
sotros desde la creación del mundo... " (Capítulo 25
de san Mateo. Texto familiar a todo el mundo).
Notemos que aquí se dice "para vosotros", sln
mencionar hombres o ángeles, quienes formarán
una gran fraternidad por ser fieles a Dios.
Eñ cambio, en la sentencia de condenación sí se
dice; "Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno,
preparado para el diablo y sus ángeles".
Muy claro queda que el premio y el castigo lo
compartiremos con los ángeles. Y que nos toca a
nosotros escoger, desde ahora, el reino eterno pre-
parado, desde siempre, para los fieles a Dios.
1) ¿Qué paret desempeñan los ángeles en la promuL
gación de la Alianza?
2) ¿Cómo nos estimulan en nuestra acción
misionera?
47
16. LOS ANGELES DEL APOCALIPSIS
Lo primero que discuten los teólogos al llegar aquí
es ef problema de fos ángefes de las siete lglesias de
Asia Menor y dicen que la mayor parte de los comen-
taristas piensan que no se trata de los obispos de las
comunidades, sino de los ángeles que velan por
cada una de las iglesias...
Lo leí con asombro, debo confesarlo y más
cuando los autores que sostienen eso son nada me-
nos que alemanes y modernos...
Lo menos que se insinuaría con esa palabra "al
ángel de la lglesia.de Efeso, de Esmirna, etc..." si no
son sus propios obispos, es que esas comunidades
tienen su respectivo Angel de la Guarda.
TraIándose de un género literario tan "sui gene-
ris", como el Apocalipsis, es obvio pensar que se
trata de una expresión literaria... pero que unida al
contexto de los otros incontables lugares bíblicos en
que los ángeles aparecen como seres que realmente
existen... debe pensarse que las expresiones del
Apocalipsis sobre esos ángeles de revelación son
forma literaria con fundamento real.
En el Apocalipsis figuran también los "cuatro
ángeles que están de pie sobre los cuatro ángulos de
la Tierra y que dominaban los cuatros vientos (7, 1),
al fuego (I4,18), al agua ( 16,5) y otros protegen la
tierra, el mar y sus f rutos" 0 ,2). . . etc.
48
se podría decir que el Apocalipsis es un mosalco
de hermosos textos angélicos:
-"El mensaje se le envía 
por medio de un ángel"
( 1, 1).' 
--'"Vi otro ángel que subia de la parte del
Oriente" (7,2).
- "V¡no otro ángel y se puso en 
pie" (8,3).
-"Ef humo de-los perfumes se elevaba 
delante
de Dios,con las oraciones de los santos por mano del
ángel" (8,4).
I-"Ei ángel tomó el incensario, lo lle¡ó de fuego
del altar y-lo lanzó sobre la tierra. Entonces se
produjeroñ truenos, relámpagos, voces y terremo-
tos" (8,5).
-"El segundo tocó la trompeta" 
(8,8).
-"El tercero" 
(8, 10).
-"El cuarto" 
(8, 12).
-"El quinto" 
(9,1)
- En ei capítulo 10 se podría decir 
que hay una
danza de ángeles o una ópera clásica o unos juegos
olím picos:
"Vi otro ángel vigoroso que.bajaba del .cielo en-
vuefto en una ñubelsobre la cabeza tenía el arco iris,
iu rtiitio era como'el sol y sus piernas como colum-
nas de fuego".-p¡éñso 
{ue ni el mejor espectáculo de Disney-
tandia puede imitar esta decoración- 
Sigu'en cinco misiones más en el capítulo décimo';Éj séptimo ángel tocó la trompeta y dos grandes
voces lei dejaron" oír en el ciefo: El imperio del
mundo ha pa'sado a Nuestro Señory a su Cristo" (Ap
11, 15).
óebiéramos meditar estos encendidos párrafos a
49
la hora de nuestros ¡desalientos y a la hora de los
estériles f amentos que dicen estar todo perdido!
En el capítulo 14 tenemos los tres ángeles misio-
neros de grandes noticias:
"Vr otro angel que volaba por meclto clel clelo y
tenía una buena nueva eterna que anunciar a los
habitantes de la tierra, a toda nación, tribu, lengua y
pueblo. Decía con gran voz: "Teman a Dios y denle
gf oria porque ha llegado la hora de su juicio. Adoren
a Aquel que ha hrcho el cielo y la tierra el mar y las
f uentes del agua" (I4,6).
. Y.o mq prygunto: ¿No es ése el grito de Francisco
Javier, de Pedro Claver, de Pablo de Tarso. de Juan
Pablo 11... en todos sus viajes misioneros por el
m u ndo?
. iUn mensaje semejante pregonaban el segundo, y
el tercer ángel!... ¡La caída de Babilonia y la ame-
naza para los que adoran a la bestia!...
Este capítulo se haría muy largo, si anaf izaracada
una de las actuaciones de los ángeles en los restan-
tes capítulos del Apocalipsis.
El últ¡mo testimonio lo da Jesús en persona: "Yo,
Jesús, he enviado a un ángel para testificar estas
cosas acerca de f as lglesias" (Ap 22,IO .
Si nos familiarizáramos con la presencia y la ac-
ción de los ángeles en todos los acontecimientos de
la historia de la salvación tendríamos gran unción y
comprensión del misterio de Dios.
1) ¿Cómo podríamos unirnos a /os ángeles adorado-
res del cielo?
2) ¿Con qué debemos marcarnos para que no nos
dañen las copas de /os ángeles del Apocalipsis?
50
17. LOS ANGELES DE LA GUARDA
La mejor escenificación bíblica del Angel de la
Guarda lá tenemos en el epísodio de san Pedro preso
en la cárcel y liberado por el ángel. sirve además
espléndidam-ente para la Teología de la Liberación.
Narrado con detalle en los Hechos de los Apósto-
les, capítulo 12, con 17 versículos dramáticos...
,,Ahora'conozco verdaderamente que el señor envió
a su ángel y me libró de la mano de Herodes y de
toda la éxpectación del pueblo judío.. '
Antes (5, tg) el ángel había librado también de la
cárcel a varios apóstóles y los envió a predicar en la
plaza "esa forma de vida".
S¡ todo se escribe en la Biblia "para nuestra edifi-
cación" ( lCo 10, 11) pensemos que estas escara-
muzas angélicas por las cárceles de Jerusalén son
hechos históricos y también signos teológicos de la
providencia de Dios con los hombres.
El texto clásico del evangelio para saber que a
cada uno de nosotros nos cuida un ángel es el de san
Mateo, cap. 18 v. 10: "Sus ángeles (de los peque-
ños) siempre están viendo el rostro de mi Padre que
está en los cielos".
Con este testimonio, no sólo se afirma la existen-
cia del ángel custodio individual, sino su función
51
activa y contemplativa: Trabajar mirando el rostro
del Padre.
Santo Tomás, el Doctor Angélico, dedica ocho
artículos a fa custodia de tos ángeles buenos, en la
Cuestión 103 de la primera [arte Oe lá 'Sumá
Teof ógica.
. Vafe la pena analtzar brevemente sus afirma-
crones.
1) Los hombres son custodiados por los ángeles.
La prueba central fa trae del Salmo é0, 1 1: .,Eñvió a
sus ángeles delante de ti para que tó guarden en
todo tus caminos",-que fue la bita he"cha por el
diablo en la tentación del desierto y que Jedús no
legó, sino que iluminó con la otra de ,,no tentarás al
Señor tu Dios" (Mt 4,7).
Con lo cual se no3 enseña que aunque seamos
cu idados. por ángefes debemos ¡ioner nosotros nues-
traprovidencia y no exponernod a los peligros.
Previendo el Doctor Angélico alguná oUiec¡ón pro_
pia de.nuestra.era.tec.noló-gica, de"que el ñombre no
necesita ayuda de ángeiés, 'pues con la cieñciá
puecle resolver todos sus problemas, responde con
?,l3o qu.e confirma la experiencia de'todos lós días,-'uon timldos los pensamientos de los mortales einciertas nuestras' providencias" (Sb é,-t41,- Oé
donde concluye la nécesidad de la protecci'ón d'e los
angetes.
_ Leyendo eso me acuerdo del desastre atóm jco de
Chernobyl r. . y del cohete espacial Challenger que serncendió al empezar elvueló.
2) En ef segundo artículo afirma con san Jerónimo
qlpllc.an.dg ef texto de Mateo 18, l0: ,,Grande es la
clrgnrdad de fas almas pues cada una de ellas tiene
52
desde el momento de su nacimiento un ángel dele-
gado oara su custodia".
3) En el tercero intenta probar que los ángeles
custodios son los más cercanos a nosotros en la
ierarquía de los espíritus celestiales..., que no nos
inandan a las altas'jerarquías, sino a las más humil-
des... (pero ¡qué altura, Señor!).
4) En el artículo cuarto afirma que no sólo a los
predestinados, sino a todos los hombres se le asigna
un ángel.
5) Esta designación se hace desde el momento en
que nace un ser numano.
6) Los ángeles buenos de nuestra guarda nunca
nos abandonan, nunca se quedan dormidos.
7) Aunque procuran nuestro bien indecible-
ntente, pero por raz6n de la visión Beatífica no
suf ren con nuestros males...
8) En el último artículo explica las misteriosas
palabras de Daniel'-"Et plLl.¡p-e_dgl.reino de los
irersas me resistió 21 d ías" (Dn 10, 13).
Se trata de un príncipe de los demonios que se
oponía a los planes liberadores de Daniel, que pre-
sentaba a Dios sus oraciones por medio de Gabriel.
Pero san Gregorio Magno tiene otra interpretación
muy singular y yo diría simpática.
Los reinos, estados y grupos humanos tienen tam-
bién su respectivo ángel que no conoce necesaria-
mente los planes de Dios sobre sus protegidos. Los
persas estaban interesados en que continuara la
cautividad, los judíos lógicamente querían la liber-
tad. Había como un juicio oral en el cielo. Cada
abogado tiraba para su lado.
Después de admitir la doctrina de la providencia,
amalgama de la bondad, sabiduría y el poder divino,
no nos debe extrañar una doctriná tan ennoblece-
dora para ef hombre y tan conciliadora de los más
bellos atributos de Diós.
, Si se cree en su palabra, hay que creer en los
ángeles.
Los que se resistan a creer esto deberán inventar
otra Biblia.
1) ¿Por qué los santos, los humildes y /os senci-
llos entienden tan bien y tan pronto lo relativo al
Angel de la Guarda?
2) ¿Cuáles /a oración popular al Angel de la Guarda?
54
19. LOS DEMONTOS
La doctrina sobre los demonios, o Satán en singu-
lar, se ha abierto paso en la literatura actual en la
cual desempeña, como dice un famoso teólogo (Da-
masus Lahringer), un papel divertido, pero no siem-
pre claro.
Todos conocemos el éxito taquillero de "El exor-
cista", como libro y como película, sólo igualado por
"Tiburón 1", "T¡burón Il" y "Aeropuerto"...
En la fe popular, este campo tan sagrado y respe-
table, el demonio goza de gran popularidad. Aquí
toda la estrategia es hacia la santidad. Recuérdense
las luchas tremendas del Cura de Ars, san Juan
María Vianney, contra el enemigo malo que lo hacía
suf rir mucho y de mil maneras de noche.
La mejor instancia para no caer en la superchería
y luchar en forma legítima contra el demonio es la
Sagrada Escritura.
Ninguna persona seria deberá ya reírse de las
incursiones por este tema en algunas catequesis de
los miércoles en el Vaticano por los papas Pablo Vl y
J uan Pablo I l.
Dicen los teólogos que la primera y mayor argucia
del diablo consiste en negarse a sí mismo, que el
mejor presupuesto para que él logre sus objetivos es
poner en duda o negar su existencia.
. Ig primera vez que en fa sagrada Escritura se
habfa como de un ser personaf es er f ibro de Job
( 1,6- 12, etc.).
Y en la doctrina de la Escritura, de los padres y del
Magisterio en todos los tiempos, ha habido siempre
gran cuidado de no crear del diablo una idea abs-
tracta, (conjunto de cosas malas que pasan en el
mundo), ni un principio eterno del mal paralelo al
principio def bien que sería Dios, según ia doctrina
ma n iq uea.
Era un ángel bueno que fue sometido como todos
a prueba y cayó con una gran cantidad de
seguidores.
Cuál fuera esa prueba, opinan algunos teólogos,
como Suárez, que fue ef proyecto de fa Encarnac¡ón
def Verbo... al que sintieron repugnancia de adorar
en una naturaleza humana inferiora la angélica.
"Por envidia del diablo entró la muerte en el
Iynqo y la experimentan los que le pertenecen"(Sb 2 ,23) Está muy clara la alusión a la serpiente
del paraíso.
La reffexión teológica ha visto en el relato del
Génesis (3, 1-5) que se trata de un tentador ex-
trqhq.rlglo y en toda la relación "algo más que un
m ito" ( Mysterium Salutis,Il , 2-l0gg.
El demonio es un ser personal que miente y ca-
lumnia. Pero no es todopoderoso. Con la ayuda de
Dios podemos vencer sus malas sugerenciaé.
En el Nuevo Testamento es nombrado al demonio
con gran variedad de nombres, veamos algunos:
56
Satán (Hb 1, 13).
Diablo (Mt 4, l-L 4,2).
Belcebú (Mt 10,25).
Belial QCo 6, 15).
El Tentador ( lTs 3,5).
Enemigo (Mt 13 ,25).
Espíritu lmpuro (Hch 19,12).
El Maligno ( lJn 2,L3).
El Gran Dragón (Ap 12,3).
La Antigua Serpiente (Ap L2,19).
El Príncipe de este mundo (Jn 12,3I).
El Dios de este mundo QCo 4,4)
El Fuerte Armado (Mc 3 ,27).
¿Qué nos dice esta amplia variedad de nombres?
Pensamos que ello demuestra las multiforme
acción de Satán en el mundo... y tal vez, ¿por qué
no?... Una voz de alerta, por pa-rte de Diós, en la
Escritura para prevenirnos contra sus incursiones,
va que el, él demonio, lleea hasta el extremo de-cJisfiazarcó 
de ángel de luz (ZCo 11, 14).
Es verdad que la lglesia, en la relación con los
ángeles y los demoníos, no ha hecho declaraciones
dogmáticas con anatemas, como los del Concilio de
Trento... pero en su piedad personal y litúrgica nos
ha enseñado pacíficamente su existencia y su fun-
ción especialmente a través de textos bíblicos.
Todas las noches, antes de acostarnos, nos pone
en los labios la admonición de san Pedro: "Sed
sobrios y vigilidad. Vuestro enemigo el diablo como
león rugiente ronda buscando a quien devorar. Al
cual debéis resistir firmes en la fe" ( lP 5,8).
La experiencia del pueblo cristiano con la Medalla
Milagrosa, aparecida en ParÍs en 1830, en que la
57
Virgen aparece aplastando la cabeza de la serpiente,
según el protoevangelio del Génesis 3, 15, nos
f lena de confianza en que por la protección de "La
Muier" dgl Génesis y del Apocalipsis.-., qye..no es
otra que María..., venceremos en la bat'alla óon el
d ragón .
Ef demonio actúa por vía de tentación y por vía de
posesión. Esta última era muy frecuente en tiempo
de Jesús.
Podríamos decir que ahora le gusta actuar por vía
de distracción, es decir... hacernos pensar que él no
existe y que tal cosa no es pecado.
1) ¿Podrás explicar alguna cita del demonio en el
Nuevo Testamento?
2) ¿Cómo armarnos para defendernos de sus
ataques?
58
19, OPINAN LOS SANTOS PADRES
Ciento veintidós hermosos testimonios -de log
S aiió-é"Éaá réJ'tiáé ei 
-reiu * gn, 
. 
e n. gri e go E n c h i r i -
dlon, que se usa en las escuelas teologicas.-'Lás-'áfirmaciones principales vienen en esta
escala:
Existen ángeles creados por Dios. 14 textos.
f ueron creádos al princi¡iio, "ni antes, ni después
de los astros" (San Epifanio a. 315).--'¡Fueron 
hechos lcis ángeles y todas las virtu.des
celestes desde el principio para que Fo estuvlese
ociosa la bondad de Dios sino que tuvlera e.n qule-
nes demostrar su bondad por muchos espacios" '""Ésté ei un frermoso tesiimonio de san Ce#reo de
Arf és-\i.- +lOl, que hace una maravillosa armonía
cón la iorma ó¡ehtífica y moderna de explicar los
orimeros capítulos de la Biblia.- fsi¿ Oemiistrado, por la ciencia, qpe la evolución
OelólaliioaVláa iapas geológicas iJuraron miles y
tal vez millon-es de ahos... haSta llegar a su.estado
actual. Hasta llegar al que llaman Homo saplens.- - LJtesis de san-Cesár'eo es que esas maravillas de
la éieáción, que ya existían por millones de años,
ténlan que sei coñocidas y alábadas por seres racio-
nales e inteligentes.
Con mucha lógica suponen los Padres que en ese
largo período hubo una hermosa liturgia de adora-
ción a cargo de los ángeles...
59
A veces lo pienso... Los sabios se empeñan en
poner siglos entre la materia y la llegada del
hombre...
¿ lba a carecer Dios de alabanza externa, que
aunque no necesitarp.g.r9 sí le glorifica, en ese laigo
período cuando ya biillaba el-sol y ya titilában las
estref las?...
.Los ángeles están dotados de una excelente natu-
raleza -7 bellos testimonios- de los que saco elsiguiente:
, '.'El, ángel se lfama espíritu y fuego porque estádotado de naturareza. iriterectlar..."Sábero, qre
gli :!q ! _ { nge I es, a rcá ngéiéé; 
- 
ióñós J;"t&t.dé;;pfl ncrpados, dominaciones,. . . mentes'totalmente
pjlalt que.cantan las alabanzas de la divina majes_
tad, que mtran por siempre su gloria sempiterna, no
para que crezc_a.de ahí la.glori-a de Dios, sino paraqu.e aquellas primeras criáturas no se frivaran deeste beneficio" (San Gregorio Nazianzeno _año
329).
^":fl flSustín tiene una idea muy profunda paraproDar ra no repugnancia de que el fuego atormente
?. f og demon ios. _ U na nattiiaiiza .r?¡ñiürl está
Ig¡¿r ind,isotubtemente áÍ tuerpo rruiñánó.]. tu,.n-
?f.J^qy_ede .ta naturaleza puramente espiritual _oemonlo-- tener una relación con el fu'eeo... sonmodos maravillosos, pero verdaáéro. ¿ñ.-éí santodoctor.
Particularmente elocuente es et testimonio desan Juan Damasceno en et ano-lé+,-il;;i; da tadefinición más exacta que pudi¿ramóitenelie los
dfl$et€s:
_ "El,ángel es.una sustancia inteligente, dotada deperpetuo movimiento y libertad,"qr.'.-ó. de
60
cuerpo, servidor de Dios, que porconcesión de Dios
ha conseguido en su naturalezala inmortalidad".
Parece todo dicho. Pero añade unos datos más,
muy interesantes: "Su forma de ser como substancia
y su def inición sólo la conoce el Creador".
El gran doctor Damasceno tiene luego una expre-
síón que los teólogos modernos han analizado con
respeto y reserva...
"El ángel se dice substancia incorpórea e inmate-
rial en relacíón con nosotros... pues en lo que se
refieren a Dios se encuentra su sustancia crasa y
material, pues Dios es aquel que con nadie se puede
com parar" .
Pensamos que es una expresión hiperbólica, una
forma de hablar para salvar la infinita independen-
cia de materia que Dios tiene, pues ya ha dicho que
es incorpórea...
En su relación con el verbo, san Juan Damasceno
nos dice: "Por el Verbo todos los ángeles han sido
creados y por el Espíritu Santo santificante han
recibido la consumación...". Con lo que se salva su
total dependencia de la Trinidad.
Luego dice: "Los ángeles son fuertes y prontos y
se encuentran inmediatamente donde quiera que
los envíe Dios" (Enchiridion 235I y s. ).
San Bernardo de Claraval, llamádo el último de
los Padres por orden cronológico tiene el famoso
texto para los ángeles de la Guarda...
"A sus ángeles ha mandado para que te guarden
en tus caminos. ¡Cuánta reverencia debe inspirarte
esta palabra, cuánta devoción, cuánta conf ianza!...
Reverencia por la presencia, devoción por la bene-
volencia, confianza por la custodia". Está en la
6l
f eclión de la Liturgia de ras Horas er 2 de octubre.
-, _O_rlge¡es 
(sigto lTl) nania at¡imáoo qr"'Jüba uno
de nosotros nos asisten dos ángeles, úno de iusticiá
y^q10_ {e iniguidad. Si tenemol nuehos pensám¡en_tos es por el á.ngef bueno, si tenemos pehsamienios
perversos, éllo5 atribuye al ángel maló.-
,,)af Agusttn eg claro y terminante af decir ouesofo .fa te nos da una certeza úftima sobre los
ángeles...
^, -En _otro,lugar 
dice ef doctor dq Hipona:,,Lo que ha
srcto creido en todas partes, siempre y por todos,
9:to es propio y verdaberam'eñte óátélicü;'(to trae
Mypterium Sa/utrs ll, p. 297).
Lsos tres adverbios: Siempre, en todas partes y
universalmente... se dan admirablemente en la fe
de la lglesia con fos santos ángeles.
1) ¿Desde cuándo existen los ángeles?
2) ¿En qué se ocupan tos ángetes?
62
20. LAPIZ EN MANO
No es título teológico ni angélico, es más bien
cuestión de nemotecmia... Cuando leo el Nuevo
Testamento voy subrayando, con el lápiz, los ver-
siculos en que se cita a los ángeles buenos o a los
ma los.
Empecemos por Mateo 10, 1: "Convocados los
doce discípulos les dio potestad sobre los espíritus
inmundos, para que los expulsarany para que cura-
ran toda enfermedad y toda dolencia".
Está claro que se puso al demonio bajo el poder de
los apóstoles.
También está bajo nuestro poder, cuando usamos
el arma de la cruz e invocamos a la Virgen
Sa ntísima.
Aquí va una anécdota: En el parque de El Retiro
de Madrid, capital de España, hay un monumento
original y único en el mundo: Un Monumento al
diablo que se convirtió en atractivo turístico.
La primera vez que el guía nos explicaba la razón
del monumento nos dijo: "Los españoles queremos
tener amigos en todas partes. Hicimos este monu-
mento al diablo, por si alguno de nosotros tenía que
ir af inf ierno. .. para así encontrar allá un amigo... ".
M uchos comentarios me ha tocado hacer del céle-
bre monumento.
63
El diablo, ef espíritu inmundo no necesita monu-
mentos de bronce para hacerse amigos... se los
granjea muy bien con todos los que obran el mal y
dan escándalo.
"Expulsad demonios" fue la orden de Jesús a sus
apóstoles, en la Misión Nacional de lsrael, antes de
fa Misión ad gentes que les encomendó el día de la
Ascensión en ef Monte de los Olivos (Art. 10,8)
Como sabemos que esa expulsión no es pacífica
sino bélica..., estamos en permanente batalta de
f iberación.
Cuando Rusia o Alemania invaden un país pe-
queño de sus contornos, el ideal de elfos es expulsar
a f os invasores... La conclusión fluye. El diablo nos
invade y se entromete en el régimen interno.
Cuando España fue invadida por los moros, la
expulsión de ellos duró B siglos y la Epopeya se
llamó Reconquista.
El precursor del Mesías fue comparado con un
ángel (Art. 11, 10), porque la figura del ángel era
familiar en el pueblo de lsrael.
"Tiene ef demonio", le decían a Jesús sus enemi-
gos, para insultarlo (Mt 11, 18); también esta figura
era ampliamente conocida por el pueblo.
En las parábolas del capítufo 13 de san klateo se
afirma el oficio de los ángeles al fin del mundo:
"Saldrán los ángeles y separarán los malos de en
medio de los justos y envia rán a los malos al horno
de fuego, donde habrá lfantoycrujirdedientes" (Mt
13,47 ss).
64
Por este texto será que los españoles hicieron un
monumento al diablo en el parque de el Retiro...
sólo que la decisión del lugar la hacemos nosotros
con nuestras buenas obras.
Se nos quedaría muy rayado nuestro Nuevo Testa-
mento si subrayáramos fas continuas alusiones a
ángeles y demonios...
La ref lexión teológica sobre los ángeles ha tenido
un campo inmenso en la Biblia de la cual ha llegado
a la noción segura: Cada ángel es una realidaddis-
Ll.fita de Dios y del hombre siempre a la orden de
Dios para la sajvación del hombre.
Al afirmar que la gracia de los ánseles es también
gracia de Cristo, se- aclara que no-se ofreció a los
ángeles caídos ninguna gracia redentora...; sólo de-
crmos que aunque no sean redimidos por Cristo pero
si son todos referidos a Cristo... Nadie habrá en el
ciefo que pueda decir: "Soy independiente de
Cristo".
Por el Verbo de Dios fueron creados...
Para el Verbo de Dios fueron conservados...
Al Verbo de Dios fueron sometidos...
"Adórenle todos los ángeles" (Sal 2,7) ; (Hb 1,4).
1) ¿Cómo granjearse la amistad de |os ángeles?
2) ¿Cómo evitar la amistad de los demonios?
65
2T. MI SUBIDA AL MONTE GARGANO
Un apéndice teliz de mi estadía en San Giovanni
Rotondo, vale decir, como un milagro más del que-
rido Padre Pío, tuve la oportunidad de subir al
Monte Gargano, a la Sagrada Cueva de San Miguel
Arcá ngel .
Este capítulo me faltaba en mi estudio sobre los
ángeles.
Nuestro antiguo Breviario Romano traía cierta-
mente en sus famosos "segundos nocturnos" de
Maitines el 29 de septiembre, esta hermosa historia
de las cuatro apariciones de san Miguel Arcángel...
pero como la ausencia causa olvido... en la nueva
Liturgia estuvieron ausentes los ángeles del Monte
Gargano y se produjo el olvido.
Vino a despertar este trascedental recuerdo, pri-
mero al esfuerzo de los padres Benedictinos de la
Abadía de "Monte Vergine" que se hicieron cargo de
la Sagrada Cueva del Arcángel en I97O (5 años
después del Concilio) y sobretodo la emocionada
visita del papa Juan Pablo ll en mayo de 1987.
Para esta memorable fecha los padres Benedicti-
nos editaron tres obras formidables: "La guía turís-
tica del Santuario" donde narran en detalle las apa-
riciones, un folleto con la "Catequesis de Su Santi-
66
dad Juan Pablo ll sobre los Angeles", y un estu-
pendo trabajo teológico del benedictino Giovanni
Mongelf i, en dos volúmenes de los cuales me obse-
quiaron gentilmente ef primero cuyo título €s: ,,Gli
angeli buoni ministri di Dio per la salvezza degli
uomini alfa Scuola di San Tommaso".
Esta obra aunque no es muy voluminosa (tiene
sólo 2O9 páginas pero de tam-año grande y papel
ru¡oso), es a mt parecer una obra monumental. La
sola Bibf iografía trae 296 obras consultadas y cita-
das en el libro.
Como se ve, los ángeles están teológicamente
muy bien respaldados.tomo dato curioó el autor
trae el nombre de 73 ciudades y localidades de
Italia 
-solamente de ltalia- que-llevan el nombrede los santos ángeles.
, Las cateq.uesis del ?gpa reinante sobre los ánge-
leg y recogidas en el folleto mencionado alcanzañel
número 49.
La Revista especial del santuario con la visita del
Papa .tfqe su díscurso completo, con frases como
esta: "He venido para venerbr e ihvocar al Arcángef
:a.n lyliguel , para que proteja y defienda a la sanlta
tgtesta. en un momento en que es difícil dar un
auténtico testimonio cristiano sin compromisos y
sin acomodaciones".
. Vgriog Papas habían ido al Monte Gargano, según
las Crónicas. Gelasio lo en el 493 que autórizó el cüfto
qry la Grqlp y.concedió la indulgencia llamada "per-
don angéf ico" todavía hoy vieeñte.
Vinieron también con Íe dn los ángeles: Agapito
lo.. León .lX.^Urbano.!1, Cel¡rstino ||l,"lnocenEid ll,
Urbano Vl, Gregorio X, san Péijro Céiéstiñó (eii'apá
67
que renunc¡ó), Benedicto 1X... y el Papa Juan XXlll
cuando era Cardenal.
Vinieron también a esta gruta a honrar a los ánge
les, santos como san Bernardo (que habla mucho en
el Breviario, inclusive hoy, de los Angeles de la
Guarda), san Guillermo de Vercelli fundador de la
Abadía de Monte Vergine, y eminencias de la santi
dad como santo Tomás de Aquino, santa Catalina de
Siena y san Francisco de Asís que vino aquí a
prepararse para la cuaresma de I22I.
El pueblo por supuesto nunca ha faltado en su
cita con el gran Arcángel y los compañeros de
m ilicia.
Comencé este modesto estudio afirmando que
hablar de los santos ángeles era un honor para
cualquier miembro de la raza humana.
Me complació muchísimo en el Monte Gargano
ver 'confirmada esa afirmación mía con este
hermoso párrato del santo padre, con el cual creo
poner broche de oro: "El tema de la existencia de los
ángefes pudiera parecer lejano, o menos vital a ta
mentalidad del hombre moderno. Sin embargo la
lglesia proponiendo con franq ueza la totalidad áe la
verdad sobre Dios creador también de los ángeles,
cree proporcionar un gran servicio al hombre.
El hombre nutre la convicción de que en cristo,
Hombre Dios, es éf (er hombre) y no ios ángeres eique se encuentra en el centro de la divina
revelación. El encuentro religioso con el mundo de
los seres puramente espirituales viene a ser una
68
preciosa revelación de su ser, que es no sólo cuerpo
sino también espíritu, y de su pertenencia a un
proyecto de salvación verdaderamente grande y
ef tcaz en una comunidad de seres personlres que
por el hombre y con el hombre sirven al designio
providencial de Dios" (Catequesis del 3O-7_96).
69
INDICE
Páe.
5 Presentación
7 1. Existencia de los ángeles
10 2. Naturaleza de los ángeles
14 3. El guardián del paraíso
16 4. El ángel del camino
18 5. Los huéspedesdeAbraham
20 6. El trisagio de lsaías
23 7. Angeles liberadores
26 8. Angeles en acción
29 9. El ángel de la anunciación
3 1 10. La coral angélica de Noche Buena
33 1 1. Los servidores del desierto
36 12. El ángel de la pasión
38 13. Los ángeles del sepulcro vacío
41 14. Los trompeteros del juicio
44 15. Con el amigo San Pablo
48 16. Los ángeles del Apocalipsis
51 17. Los ángeles de la guarda
55 18. los demonios
59 19. Opinan los santos padres
63 2O. Lápiz en mano
66 21. Mi subida al Monte Gargano
70
Celeeción
Emcuenfro con Dios

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