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396 Ginecología general SECCIÓ N 1 lento es más probable en las relaciones románticas con coito (37%) que en las que no incluyen relaciones sexuales (19%). Abma y sus colaboradores (2010) señalaron que entre las mujeres que habían comenzado su vida sexual antes de los 20 años, 7% describió que el primer coito fue involuntario. Medidas anticonceptivas A pesar de que se dispone de diversas opciones anticonceptivas, casi la mitad de los embarazos en Estados Unidos no son volunta- rios (Finer, 2006). Entre las adolescentes, más del 20% no utilizó alguna medida anticonceptiva en el primer coito y se observó una mediana de retraso de 22 meses antes de solicitar métodos “de prescripción” después de la primera relación sexual (Finer, 1998). Las tendencias recientes en la tecnología anticonceptiva com- prenden el desarrollo de métodos muy efectivos que aumenten la aceptación de las pacientes. En el capítulo 5 se analizan estos novedosos métodos, que incluyen parches anticonceptivos, ani- llos vaginales, el sistema intrauterino liberador de levonorgestrel, anticonceptivos orales de uso prolongado y el implante subdér- mico liberador de etonorgestrel. Los anticonceptivos que con más frecuencia utilizan las adolescentes son los combinados de administración oral. Los datos de la National Survey of Family Growth correspondientes a 2006, 2007 y 2008 indicaron que de las mujeres que utilizaban medidas para prevenir el embarazo, 30% usaba anticonceptivos orales combinados (COC, combina- tion oral contraceptives); 10% recurría a otros métodos hormonales y 54% usaba condones como única medida o como parte de un método doble (Abma, 2010). Otras de las opciones disponibles para las adolescentes, que cumplen con los criterios, son los dispo- sitivos intrauterinos con cobre y progestágenos (American College of Obstetricians and Gynecologists, 2007, 2009). Una técnica anti- conceptiva segura que está en fase de aceptación a nivel mundial para las nulíparas, incluyendo a las adolescentes (Yen, 2010), es el sistema intrauterino liberador de levonorgestrel (LNG-IUS, levonorgestrel-releasing intrauterine system). En un estudio de 179 adolescentes se observó un índice de continuación de 85% después de usar dicho dispositivo durante un año (Paterson, 2009). La participación del médico que atiende adolescentes con vida sexual activa es doble; ayuda a prevenir embarazos no planeados y protege contra las STD. Lo ideal es comenzar el asesoramiento antes del inicio de la actividad sexual; esta educación debe incluir el uso de anticonceptivos de urgencia. Muchas mujeres manifi estan inquietud sobre los servicios que ofrecen medidas de anticoncepción; creen que es necesaria una exploración pélvica simultánea, temen a los efectos colaterales de los anticonceptivos a corto y a largo plazos y no quieren exponer su privacidad. Es importante explicar a las adolescentes que no es necesario realizar una exploración pélvica cuando se prescribe un anticonceptivo. Muchas jóvenes tienen percepciones erróneas de las técnicas para prevenir el embarazo; se cree que pueden causar infecundidad o defectos natales, preocupación que puede ser un tema importante durante la orientación para el uso de anticoncep- tivos (Clark, 2001). Según las directrices del Colegio americano de obstetras y ginecólogos (American College of Obstetricians and Gynecologists) (2009), es importante no comenzar la práctica del método de Papanicolaou como técnica de cribado hasta los 21 años de edad, sin importar la actividad sexual. Una excepción sería la infección por el virus de la inmunodefi ciencia humana (VIH); en el capí- tulo 29 (pág. 742) se describen las recomendaciones completas. Percepciones de la actividad sexual en las adolescentes La sexualidad en las adolescentes se desarrolla durante un periodo de cambios rápidos que les ofrece la oportunidad de experimentar conductas, tanto riesgosas como saludables. Según los resultados de dos estudios a gran escala, realizados en Estados Unidos, se observó que el porcentaje de adolescentes con actividad sexual aumenta de manera constante después de los 13 años (cuadro 14-6) (Abma, 2010; Eaton, 2010). Las investigaciones indican que las adolescentes consideran a sus médicos como un recurso importante para obtener informa- ción y educación sobre el desarrollo sexual saludable. Sin embargo, muchos progenitores y educadores se oponen a la educación sexual por la preocupación de que la difusión de tales datos propicie el comienzo de la vida sexual, conocido como coitarquia, e incre- mente la frecuencia de los coitos. Por el contrario, se ha observado en varios estudios que este tipo de orientación en realidad retrasa el comienzo y la frecuencia de la actividad sexual, aumenta el uso de anticonceptivos y reduce el coito sin protección (Kirby, 1999, 2001). Según una encuesta nacional realizada en 1999, se observó que 75% de las adolescentes que asistían a secundarias y preparatorias públicas manifestó haber recibido clases de educación sexual (Hoff , 2000). Un gran porcentaje deseaba obtener más información sobre ciertos temas como anticoncepción, enfermedades de transmisión sexual (STD, sexually transmitted diseases), uso del condón y pro- blemas emocionales. En la actualidad el sexo oral es la práctica más común entre los adolescentes. La Encuesta nacional sobre el crecimiento familiar (National Survey of Family Growth) realizada durante 2005 publicó que uno de cada cuatro adolescentes de 15 a 19 años de edad que no habían tenido relaciones sexuales manifestó haber practicado el sexo oral con alguna pareja. De los adolescentes sexualmente activos, 83% de las mujeres y 88% de los varones mencionó haber tenido sexo oral (Mosher, 2005). Quizá los adolescentes conside- ran dicha práctica como una alternativa para conservar su “virgi- nidad”, prevenir el embarazo y evitar las STD, o la perciben como un paso en el camino de la actividad sexual con una pareja estable. Al parecer la actividad sexual y la violencia contra la pareja son más frecuentes en la población de adolescentes (cap. 13). Por ejemplo, Kaestle y Halpern (2005) observaron que el trato vio- CUADRO 14-6. Porcentaje de adolescentes sexualmente activas en Estados Unidos según los grados escolares Grado Coito ocasional Actualmente activas ≥4 compañeros en toda la vida 9 29.3 21.6 6.3 10 39.6 29.3 7.6 11 52.5 41.5 12.9 12 65.0 53.1 19.1 Cuadro compilado de Eaton, 2010. 14_Chapter_14_Hoffman_4R.indd 39614_Chapter_14_Hoffman_4R.indd 396 06/09/13 21:0806/09/13 21:08
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