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QUE ES EL IMPERIO ROMANO

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¿Qué fue el Imperio Romano?
El Imperio fue el período de máxima expansión del Estado romano en la Antigüedad Clásica. Operó como un sistema político autocrático y existió entre los años 27 a. C. y 476 d. C.
Se trata de uno de los entes políticos e históricos más importantes de toda la antigüedad, especialmente para Occidente. A lo largo de su historia sentó muchas de las bases del mundo tal y como hoy lo entendemos, y dejó un legado significativo en materia política, judicial, cultural y social.
El Imperio romano fue el periodo de la civilización romana posterior a la República y caracterizado por una forma de gobierno autocrática.
De hecho, fue en los tiempos del Imperio Romano que muchas de las grandes ciudades europeas se fundaron o adquirieron su significación geográfica, tales como:
· París (originalmente Lutecia),
· Viena (Vindobona),
· Barcelona (Barcino),
· Zaragoza (Cesaraugusta),
· Mérida (Augusta Emerita),
· Milán (Medioanum),
· Londres (Londinum),
· Lyon (Lugdunum).
Fue tanta su importancia que tras su caída hubo numerosos intentos por reunificarlo y refundarlo, dando origen así al Imperio Carolingio (a manos de Carlomagno) y el Sacro Imperio Romano Germánico. Sin embargo, cuando hablamos del Imperio Romano, nos referimos a su punto histórico más alto, alrededor de 117 d. C.
ETAPAS DEL IMPERIO ROMANO
La historia del Imperio Romano se suele dividir en dos etapas o períodos:
· El Alto imperio (27 a. C. hasta 284 d. C.). Esta es la etapa de auge del Imperio romano, en la que tiene lugar su expansión territorial y la mayoría de sus conquistas militares, de la mano de cuatro dinastías diferentes: la Julio-Claudia, la Flavia, la Antonina y la Severa. Comienza con la pax romana de Augusto y tiene su fin en la llamada crisis del siglo III, con el ascenso de Diocleciano al poder del Imperio.
· El Bajo imperio (284 d. C. hasta su caída en 476). Etapa de decadencia política y económica del imperio, que inicia con la crisis de gobernabilidad que generó el asesinato del emperador Alejandro Severo en 235, primer gobernante de una seguidilla de 19 emperadores también asesinados hasta el año 285. Durante este período aparece por primera vez la idea de manejar separadamente el ala occidental y oriental del Imperio, puesta en práctica por primera vez por Teodosio I, quien entregó a cada uno de sus hijos uno de los dos tronos recién creados. Sin embargo, ninguna restructuración logró traer de nuevo la paz al Imperio.

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