Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
Guión para la dramatización Temática: Vacío existencial Participantes y roles: Terapeuta (T) Cliente 1 (C1) Cliente 2 (C2) Desarrollo del guión: Contexto: C1 padece depresión y siente un vacío emocional y existencial. C1: Me siento mal, me siento cansada y agotada, no siento ganas de hacer nada, y no sé por qué. No puedo concentrarme y me es imposible pensar. No sé lo qué me pasa, qué tengo, por qué me siento así. T: Lo que ocurre a veces nos encontramos mal porque nuestra mente está pensando de manera negativa y el cuerpo tiende a enfermarse sin tener una enfermedad en realidad. Si tú, ocuparás tu tiempo en otras “cosas”, no tendrías tiempo para decir: ¿ahora por qué me siento mal, cansada o agotada? Pero como no tienes cosas que hacer y no ocupas tu tiempo en actividades piensas en eso… C1: No siento iniciativa para hacer nada, porque simplemente no tengo ganas de hacer nada. No siento ninguna motivación ni ganas para ocupar mi tiempo “en otras cosas”, más que estar en casa, en mi cama. C2: Entonces podrías ser feliz con lo que tienes, pero tu malestar no te deja ser feliz. C1: Considero que sería “feliz”, entre comillas. C2: El problema es que no sabes que quieres. C1: Mi problema es que no sé cómo explicar cómo me siento o lo que siento... C1: Cuando veo a las demás personas de mi alrededor y de mi entorno, las veo como si aparentasen estar completos, como si nada les faltara en ellos para seguir haciendo su vida. Y a pesar de estar rodeada de esas personas, yo no me siento así, no me siento completa… T: Te sientes vacía. C1: Me es difícil entender qué sea lo que siento exactamente. Puede que sea así, que en realidad me sienta vacía. C2: Es como si sintieras una desconexión. Es no estar, no ser… C1: Siendo así, ¿Por qué, a pesar de aparentemente tenerlo todo, me siento así? Me siento cansada, agotada. Y no pretendo decir “cansada de la vida y de vivir”. No siento que podría quitarme la vida, con el miedo que me da morir... En realidad, me refiero a que estoy cansada de mi tipo de vida, de cómo yo me tomo mi tipo de vida… C2: ¿Cómo quieres que te guste, si no has hecho nada para cambiar tu vida? T: Estás descontenta contigo misma, de tu vida, es por eso que te sientes tan desanimada, cansada de lo mismo. Utiliza esa sensación de descontento y aburrimiento para darte cuenta de esto, que falta una parte de ti, que falta algo en tu vida. Todo está bien, pero, y ¿tú quién eres? ¿Qué te hace falta? ¿Qué quieres lograr o conseguir en esta vida? C1: Todo lo que mencionan también me lo he preguntado yo a mí misma. Pero es que no sé qué responder ante estas interrogantes, ni cómo hacerlo… T: Estás insatisfecha, de ti misma, de tu estilo de vida, y esa sensación genera que te sientas agotada y desanimada, y por eso solo optas por quedarte en tu cama; porque piensas que, así lo intentes, nada despertará tu interés y nada te movilizará a conseguir algo. Eso conlleva a que ahora estés preocupándote y angustiada por una vida que ni siquiera has empezado a vivir, que no has planificado porque no te ves en un futuro cumpliendo algo o alcanzando una meta concreta, entonces no hay motivación ni ánimo para conseguirlo. C2: Sí, esta sensación la he tenido yo mucho. C1: Sí, de hecho, es así. Es precisamente lo que siento. T: ¿Por qué intentarlo si nada va a hacerme sentir “vivo (a)”? Quienes están deprimidos se sostienen en esa base. La persona depresiva, en realidad, no encuentra motivación para algo porque, en primer lugar, no le encuentra un sentido a su vida por falta de visión al futuro, por ausencia de metas y objetivos. No puede decir: “mañana tengo que hacer esto para que, dentro de un mes, ya haya conseguido esto otro”. No, vives el día a día sin nada que te motive, que te haga sentir “viva” o útil. Lo que pasa es que, con el pasar de los años, te has estancado, y te quedaste en esa monotonía. Y aún cuando se te presentan opciones, ya te has dado por vencida.
Compartir