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Estudio y caracterización microscópica de la lámina ungueal en relación con su consistencia

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ESTUDIO Y CARACTERIZACIÓN 
MICROSCÓPICA DE LA LÁMINA UNGUEAL 
EN RELACIÓN CON SU CONSISTENCIA 
Mingorance Álvarez, Esther 
Este trabajo se enmarca en el Departamento de Anatomía, Biología Celular y Zoología y se ha desarrollado 
en el seno del grupo de investigación Desarrollo Embrionario, Diagnóstico Molecular y Afecciones del Pie 
DEDAP (CTS020) siguiendo la línea de investigación: “conocimiento y patología de la uña”. 
1. Introducción 
Se define la lámina ungueal o comúnmente uña, como una placa de células queratinizadas, duras y 
densamente empaquetadas que se encuentra en la parte distal de los dedos de las manos y de los pies a los 
cuales protege (de-Berker, 2013). Es una de las estructuras que componen el aparato ungueal. Surge de la 
matriz ungueal, que es la zona germinativa de la uña y que se encuentra debajo de la porción proximal de 
la lámina ungueal. Esta lámina se asienta sobre el lecho ungueal y está rodeada de unos pliegues de la piel: 
repliegues proximal y laterales. La piel que subyace bajo el borde libre de la uña se denomina hiponiquio 
y es contigua a la piel de la yema del dedo (Alonso, 2007). 
Entre las funciones propias de la lámina ungueal se describen: la protección de los dedos frente a 
traumatismos, facilitar la regulación de la circulación periférica (McCarthy, 2004) y favorecer la sensación 
propioceptiva a través de la contrapresión. Las uñas de los pies son especialmente importantes porque 
protegen las estructuras neurovasculares del dedo y amplían la superficie de apoyo de los dedos durante la 
marcha (Samman, 1978). Estas funciones están íntimamente determinadas por la composición química y 
las propiedades físicas de la lámina ungueal. 
Químicamente, la uña se compone de queratina que es una proteína filamentosa almacenada en el 
citoplasma de los onicocitos (Gniadecka, Nielsen, Christensen y Wulf, 1998). El contenido en agua de la 
lámina ungueal es de aproximadamente el 18%. Sin embargo, este porcentaje puede variar de manera 
significativa debido a su alta porosidad. Así, si el contenido en agua desciende por debajo del 18%, la uña 
se vuelve quebradiza, y si supera el 30%, se torna opaca y blanda. El contenido lipídico es inferior al 5%, 
 
 
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el de azufre está en torno al 4% y también se han detectado trazas de calcio, magnesio, zinc, hierro y cobre 
(Runne y Orfanos, 1981). 
La lámina ungueal se caracteriza físicamente por ser dura, resistente y flexible (Goldmith et al., 2014). La 
dureza y la resistencia se deben a su alto contenido en queratinas duras o tricoqueratinas capaces de 
entrelazarse entre sí mediante puentes disulfuro (Gniadecka et al., 1998), a la disposición y la adhesión de 
los onicocitos en las diferentes porciones de la lámina ungueal (Runne y Orfanos, 1981), así como a la 
orientación de los filamentos de queratina en cada capa: dorsal, intermedia y ventral (Farren, Shayler y 
Ennos, 2004). Su flexibilidad depende de su contenido acuoso y aumenta con la hidratación de la lámina 
ungueal (Finlay, Frost, Keith y Snipes, 1980). 
El objetivo principal del presente trabajo es realizar una prueba para analizar la utilidad de la Microscopía 
Electrónica de Barrido (MEB) y de la técnica de espectroscopía de energía dispersiva de rayos X (EDS) en 
el estudio de la ultraestructura y composición de la lámina ungueal atendiendo a su consistencia. 
2. Metodología 
Este trabajo cuenta con el registro del Comité de Bioética de la Universidad de Extremadura (Reg. 
116/2016) además del consentimiento informado de todos los participantes. La prueba se realizó sobre una 
muestra de 10 individuos (6 hombres y 4 mujeres) pertenecientes a tres franjas de edad distintas: adultos 
(55±1.2), jóvenes (22±2.6) y adolescentes (15±1.5). El 40% de los participantes presentó uñas de 
consistencia dura, el otro 40% uñas de consistencia blanda y el 20% restante uñas inmaduras. 
La determinación de la consistencia ungueal se realizó in vivo, presionando manualmente sobre los bordes 
de la lámina en el eje lateral-medial y dorso-ventral, tras haber atemperado el pie durante 15 minutos, según 
la metodología previamente descrita (Pérez-Pico, Verjano y Mayordomo, 2017). Las muestras de láminas 
ungueales se tomaron con la misma herramienta de corte preservando la integridad de la banda 
onicodérmica. Posteriormente, se procedió a su lavado por inmersión en baño de ultrasonido para eliminar 
las células de piel adheridas, fibras y otros restos bajo la lámina. Las muestras se almacenaron hasta su 
posterior análisis. El análisis ultraestructural se realizó a MEB y en condiciones de alto vacío, observando 
la superficie dorsal de las muestras. El análisis elemental se realizó mediante una técnica analítica 
semicuantitativa basada en la captación de electrones dispersados, en condiciones de bajo vacío MEB-EDS. 
La superficie analizada fue la opuesta al borde libre de cada muestra, es decir, el análisis se llevó a cabo 
 
 
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sobre la superficie obtenida mediante la herramienta de corte, y consistió en un triple análisis: en la capa 
dorsal, intermedia y ventral de cada lámina ungueal. 
3. Resultados preliminares 
En lo referente a la ultraestructura, las células del dorso de las láminas ungueales de consistencia dura 
mostraron abundantes interdigitaciones y pocos poros y canalículos en comparación con las láminas de 
consistencia blanda, en las que se aprecian células menos interdigitadas y con mayor presencia de poros y 
canalículos (Imagen 1 A y B). La superficie dorsal de las láminas inmaduras pertenecientes a adolescentes 
presentó características más próximas a las láminas de consistencia blanda que a las de consistencia dura. 
Imagen 1. SEM y MEB-EDS. Fuente: Elaboración propia. A: microfotografía electrónica de barrido de lámina 
de consistencia dura; B: microfotografía electrónica de barrido de lámina de consistencia blanda; C: 
espectro EDS y cuantificación del microanálisis. 
En cuanto al análisis elemental realizado sobre cada una de las tres capas de la lámina ungueal, se 
identificaron un total de 12 elementos: carbono, nitrógeno, oxígeno, sodio, magnesio, aluminio, silicio, 
fósforo, azufre, cloro, potasio y calcio (Imagen 1 C). Los más abundantes tanto en porcentaje en peso como 
en porcentaje atómico fueron: el carbono, el oxígeno, el nitrógeno y el azufre, con independencia de la 
consistencia ungueal. El resto de los elementos, de estar presentes en la muestra, se encontraron con 
porcentajes inferiores al 0.6%. 
 4. Conclusiones 
Pese al bajo número de muestras procesadas, la técnica MEB permite observar diferencias ultraestructurales 
en función de la consistencia ungueal. 
A B C 
 
 
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La técnica MEB-EDS permite identificar, además de los 4 elementos mayoritarios, hasta 8 elementos 
minoritarios en todas las capas analizadas. 
Tanto la técnica MEB como la MEB-EDS son herramientas útiles en el estudio de la ultraestructura y 
composición elemental de las láminas ungueales y podrían ayudar en la determinación y caracterización de 
la consistencia ungueal. 
REFERENCIAS 
Alonso, D. (2007). Atlas de dermatología del pie. Madrid, España: Editorial Médica Panamericana. 
de-Berker, D. (2013). Nail anatomy. Clinics in Dermatology, 31(5), 509–515. 
Farren, L., Shayler, S. y Ennos, A. R. (2004). The fracture properties and mechanical design of human 
fingernails. Journal of Experimental Biology, 207(5), 735–741. 
Finlay, A. Y., Frost, P., Keith, A. D. y Snipes, W. (1980). An assessment of factors influencing flexibility 
of human fingernails. British Journal of Dermatology, 103, 357-365. 
Gniadecka, M., Nielsen, O. F., Christensen, D. H. y Wulf, H. C. (1998). Structure of water, proteins, and lipids 
in intact human skin, hair, and nail. The Journal of Investigative Dermatology, 110(4), 393–398. 
Goldmith, L. A., Katz, S. I., Gilchrest, B. A., Paller, A. S., Leffell, D. J. y Wolff, K. (2014). Fitzpatrick. 
Dermatología en MedicinaGeneral. Buenos Aires, Argentina: Editorial Médica Panamericana. 
McCarthy, D. J. (2004). Anatomic considerations of the human nail. Clinics in Podiatric Medicine and 
Surgery, 21(4), 477–491. 
Pérez-Pico, A. M., Verjano, E. y Mayordomo, R. (2017). Relation between nail consistency and incidence 
of ingrown toenails in young male runners. Journal of the American Podiatric Medical 
Association, 107(2), 137–143. 
Runne, U. y Orfanos, C. E. (1981). The Human Nail- Structure, Growth and Pathological Changes. Current 
Problems in Dermatology, 9, 102–149. 
Samman, P. D. (1978). The Nails in Disease. Londres, Reino Unido: Butterworth-Heinemann Ltd. 
APUNTES BIOGRÁFICOS 
Esther Mingorance Álvarez (Martorell, 9 de abril de 1979). Es Licenciada de Grado en Biología por la 
Universidad de Málaga y miembro del grupo de investigación DEDAP (CTS020). Desde hace cuatro años 
reside en Plasencia donde compagina el trabajo de Tesis Doctoral (Programa Modelización y 
Experimentación en Ciencia y Tecnología) en el Centro Universitario de Plasencia con docencia en el Grado 
de Podología. 
Contacto: emingorance@unex.es 
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