Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
HISTORIA Y CRÍTICA DE LA OPINIÓN PÚBLICA – JURGEN HABERMAS I. El surgimiento y el concepto de la publicidad burguesa (1)Hacia finales del SXVIII se ha desarrollado en Alemania una publicidad pequeña, pero que discute críticamente. Aparece un público lector generalizado, q se mantiene al corriente d las novedades. Junto a ellos surge, a partir d la esfera privada, una red d comunicación pública. + lectores � ampliación d producción, + escritores, editoriales, librerías, etc. Tmb surgen soc ilustradas, en dnd se ensayan las futuras normas d igualdad política. La Rev Fr es el detonador d la politización d una publicidad q había girado sobre la literatura y la crítica artística: politización d vida soc, prensa d opinión, lucha contra la censura, caracterizan el cambio funcional d la red expansiva d comunicación pública. (2) Habla de la publicidad plebeya. Cree q configura el transfondo histórico para las formas modernas d la comunicación pública. En tanto el pueblo es excluido d la dominación representada, pertenece a las cond d constitución d la publicidad representativa. (3) La cuestión es si las mujeres fueron excluidas d la publicidad burguesa d la misma manera que lo fueron los H no autosuficientes. Bajo las cond d una soc d clases, la democracia burguesa cayó en una contradicción c/sus premisas esenciales. A dif d la institucionalización del conflicto d clase, las transf d las R sexuales no sólo afectan al sist eco, sino tmb al ámbito nuclear y privado del espacio interior d la pequeña flia. II. El cambio estructural de la publicidad. Tres revisiones (1) Dicho cambio está incrustado en la transformación del E y d la eco. Hay 2 circunstancias q determinan la construcción constitucional d la R poder público garantizador d libertades-ámbito socioeco org s/dcho privado: 1) teoría liberal d los dchos fundamentales (estricta separación dcho privado/público) y 2) consecuencias del fracaso d la doble rev alemana (1848). Hay un retraso alemán en el establecimiento gradual d la igualdad civil. C/la confrontación E-soc surge el problema d la participación d la soc en el poder estatal d decisión y en la ejecución del mismo. Este transfondo histórico da el contexto para el interés en una publicidad c/función política. C/la división E-soc viene la diferenciación d una eco controlada x el mdo q emerge a partir d los órdenes premodernos d dominación política. Ambas divisiones se juntan en la autonomía d una soc burguesa, es decir en la autorregulación eco d un ámbito socioeco garantizado constitucionalmente y org s/el dcho privado. (2) S/el moderno dcho natural, la soc burguesa (como soc civil) siempre contrapuesta al poder público o gobierno como esfera privada en su totalidad. La posición y libertad d mov d los propietarios priv en la producción fueron las bases d una autonomía priv q tenía su reverso psicológico en la esfera íntima d la pequeña flia. C/la emancipación soc d las clases bajas y la politización en masa d los conflictos d clase en el SXIX se pudo ver q la esfera íntima flia y el sist d ocupaciones estaban estructurados en direcciones contrapuestas. La autonomía privada d las masas debía quedar asegurada sin prescindir d las garantías del E social, ya q ellas no podían conseguir el control sobre las condiciones d su existencia privada participando del tráfico d K s/el dcho privado. (3) La infraestructura d la publicidad cambió junto c/las formas d organización, distribución y consumo d una extensa prod profesionalizada d libros, adaptada a las nuevas capas d lectores, y d una prensa d revistas y periódicos q cambió tmb sus contenidos. La publicidad políticamente activa en las condiciones del E social tiene q entenderse como un proceso d autoproducción: se ve forzada a institucionalizarse de a poco, compitiendo c la otra tendencia q, en el marco d una esfera ampliada d la publicidad, reduce la eficacia crítica del ppio d la publicidad, volviéndolo contra sí mismo. Dice q su análisis es demasiado simplista x su desarrollo rectilíneo dsd el público políticamente activo h/el público replegado en una mala publicidad. 3. Sobre la génesis de la publicidad burguesa C/el temprano Kismo financiero y comercial aparecen las grandes ferias en las encrucijadas d las rutas comerciales largas. Se van dando los elementos para la formación d un nuevo orden social. Al ppio el humanismo burgués es asimilado x la cultura cortesana aristocrática. Mientras el Kismo vive d los frutos del viejo modo d prod, sin reestructurarlo, convive c/la ambigüedad d sus rasgos: estabiliza las R estamentales d dominio y pone los elementos en los q habrán d disolverse. Dsd siempre las ciudades tienen mercados locales, q son antes un instr d dominio q del tráfico mercantil. Cuando empieza el comercio a larga distancia surgen mdos d otro tipo, se consolidan como ferias periódicas y pronto como bolsas. Ese intercambio se desarrolla c/reglas manipuladas x el poder político, pero se despliega horizontalmente una red d dependencias eco, no previstas en las R verticales d dependencia del sist d dominio estamental. Igual c/el tráfico d noticias. El comerciante necesitaba info + frecuente y exacta sobre hechos lejanos. Dsd el SXIV comienza un sist prof d correspondencia. Grandes ciudades = centros d tráfico d noticias (permanentes cuando el tráfico d mercancías y d papel-valor tmb lo son). Aún no resultaba conveniente la publicidad d la info. No puede decirse q haya prensa h/q la info periodística regular no se hace pública. Esto sucede a finales del SXVII. En el mercantilismo e forman las eco nac y territoriales al mismo tiempo q el E moderno. Dsd el SXVI las compañías comerciales, c/amplia base d K, no se conforman c/los mercados limitados, sino q exploran y abren nuevos terrenos. Pronto surgen las soc x acciones. Pero necesitaban sólidas garantías políticas. En ese proceso se constituye la nac: el E moderno, c/org burocráticas y necesidad financiera creciente, a su vez acelerador d la política mercantil. Delimitación bs domésticos del rey y bs E es ejemplar para la objetivización d las R personales d dominio. La reducción d la publicidad representativa ofrece la esfera del poder público q se objetiviza en una adm constante y en un ejército permanente; la permanencia d los contactos en el tráfico d mercancías y noticias coincide ahora c/una act estatal continuada. Poder público como un estar-frente-a-aquellos q le están sometidos y q sólo encuentran en él su propia determinación negativa. Ellos son las personas priv q están excluidas d la participación en el poder público (=E). El dominio señorial se transf en policía y las personas subsumidas forman el público. La act eco priv ha d orientarse s/un tráfico mercantil sometido a directivas y supervisiones d carácter público. Dentro d ese orden político y soc refigurado durante la fase mercantil se desarrolla la prensa, el 2do elemento constitutivo del marco del tráfico tempranamente Kista. Periódicos c/frecuencia diaria a mediados del SXVII. Sólo un par d las noticias q circulan x correspondencia llegan a los periódicos impresos. X eso los periódicos escritos no existen para los comerciantes, sino q los comerciantes existen para los periódicos. El tráfico d noticias se desarrolla no sólo en R c/las necesidades del tráfico mercantil: las noticias mismas se han convertido en mercancías. La info periodística prof obedece a las mismas leyes del mdo a cuyo surgimiento deben su existencia. Toda info epistolar tiene su precio y es natural la pretensión d ampliar la ganancia aumentando las ventas. Una parte del material d noticias recibidas comenzó a imprimirse periódicamente y a venderse anónimamente consiguiendo publicidad. Interés d las nuevas autoridades x usar a la prensa, les servía para dar a conocer órdenes, haciendo q los destinatarios se convirtieran x 1ra vez en público. La autoridad dirigía sus participaciones al público, a todos los súbditos; pero no llegaban x este camino al H común, sino a los estamentos ilustrados. Junto al nuevo aparato del E moderno ha surgido una nueva capa burguesa,cuyo núcleo lo constituirán los funcionarios d la Adm real. Esa capa burguesa es la V sostenedora del público d lectores. La autoridad provoca en esa capa su autocomprensión como público d la naciente publicidad burguesa., q se desarrolla cuando el interés público d la esfera priv comienza a ser tomado como algo propio x los mismos súbditos. La R e/autoridad y súbditos cae en la ambivalencia d la suma d reglamento público e iniciativa priv. La soc delimita un ámbito priv distinguido del poder público, pero x otro lado la reproducción d la vida rebasa los límites del poder doméstico priv, convirtiéndose en asunto d interés público, la zona d contacto adm se convierte en zona crítica en el sentido d q reclama la crítica d un público raciocinante. El público puede atender a esa reclamación c/la prensa. Dsd el último tercio del SXVII los periódicos eran completados c/revistas. Al comienzo, las revistas científicas se dirigían al círculo d legos ilustrados. En la 1ra mitad del SXVIII entra el raciocinio. El razonamiento como tal está tdv sometido al reglamento. 4. El elemento fundamental La publicidad burguesa puede captarse como la esfera en la q las personas priv se reúnen en calidad d público. Un reparto del dominio mediante la delimitación d los dchos señoriales no es posible sobre la base d la eco d tráfico mercantil. Los burgueses son personas priv y no dominan. X eso sus exigencias d poder frente al poder público no intentan repartirlo, sino a acatarlo. La publicidad no quiere cambiar el dominio como tal. La autocomprensión del razonamiento público está guiada x esas exp priv procedentes d la subjetividad d la esfera íntima d las pequeñas flias. En la medida en q el tráfico mercantil rebasa las fronteras d la eco doméstica, queda delimitada la esfera fliar respecto d la esfera d la reproducción social. Aún antes d q la publicidad se volviera agresiva c/el poder público, a través del raciocinio político d las personas priv, se formó bajo su manto una publicidad d configuración impolítica: el embrión d la publicidad políticamente activa. Ella es el campo d acción d un raciocinio público q se mueve aún alrededor d sí mismo. La publicidad representativa no es una publicidad autóctonamente burguesa; conserva cierta continuidad c/la publicidad representativa d la corte real. La ciudad, en contraposición pol-cultural c/la corte, es signo d una publicidad literaria q cuaja en las casas d café y salones. La herencia d esa soc humanísitco-aristocrática tendió el puente e/los residuos d una publicidad decadente (cortesana) y el embrión d una nueva publicidad, la burguesa. La línea d separación e/E y soc escinde a la esfera pública del ámbito priv. En el seno del ámbito reservado a las personas priv distinguimos e/esfera priv y pulicidad. La esfera priv comprende a la soc burguesa en sentido estricto (ámbito del tráfico mercantil y del t soc), tmb la flia. La publicidad política resulta d la literaria; media, a través d la opinión pública, e/E y las necesidades d la soc. 5. Instituciones de la publicidad Le public se llamaba en Fr del SXVII a los consumidores y críticos d arte y literatura, es decir a la corte y a la aristocracia urbana. Un momento moderno aparece en la sala cortesana, q luego se llamaría salón. C/Felipe d Orléans, q trasladó la corte d Versalles a París, perdió la corte su posición central en la publicidad. La ciudad tomó el relevo d sus funciones culturales. Tras la rev palideció el brillo d la corte, q en lo sucesivo fue la residencia d una flia real d vida retirada a la q se contemplaba a distancia. Surgen en su reemplazo nuevas instituciones: las casas d café, e/1680 y 1730, salones en la época e/la regencia y la rev. Son centros d crítica literaria y luego política, en los q se establece una paridad e/personas d la aristocracia y d la intelectualidad burguesa. La literatura busca su legitimación en esas casas d café, en las q la intelectualidad coincide c/la aristocracia. En Fr, la burguesía estaba excluida del E y d la Iglesia, tomando posiciones en la eco. Coinciden la nobleza y la burguesía bancaria y burocrática c/la intelectualidad. En las casas d café se impone una paridad sobre cuya ase puede la autoridad del argumento afirmarse, incluso prevaleciendo sobre la jerarquía social, es una paridad d los meramente hombres: personas priv q constituyen el público. La discusión en el marco d un público tal presupone la problematización d ámbitos incuestionados h/aquel momento. Las obras artísticas comenzaron a ser producidas para el mdo y mediadas x él, volviéndose mercancías, siendo universalmente accesibles. Pierden su aura, su carácter sagrado (buscando su sentido mediante la racionalización). El mismo proceso q lleva a la cultura a mercantilizarse, haciéndola capaz d discusión y controversia, lleva al desenclaustramiento del público. Nunca un clan, xq siempre había un público más amplio. Las cuestiones discutidas se convertían en algo gral, no sólo x su relevancia, sino x su accesibilidad. C/el público difuso formado a partir d la comercialización del tráfico cultural surge una nueva categoría soc. Tmb el teatro c/público (ej de la reina entre el público). H/las postrimerías del SXVIII siguió la música atada a las funciones d la publicidad representativa. La entrada d pago convirtió al concierto en mercancía. X 1ra vez se junta el público a oír música como tal. Los museos, conciertos y teatros, institucionalizan el juicio profano en arte: la discusión se convierte en un medio d apropiarse de él. El círculo interno del nuevo público d arte lo forman en la 1ra mitad del SXVIII los aficionados instruidos. Cuando atraen a otros círculos no pueden mantener su posición, aunque su función se ha vuelto imprescindible. Son sustituidos x críticos d arte prof. Son portavoces del público xq su única autoridad es el razonamiento, pero tmb pueden volverse contra aquél xq son expertos. Pronto el periódico será el instrumento publicístico d esa crítica. Los periódicos d crítica artística y cultural, como instr q son d la crítica artística institucionalizada, son creaciones típicas del SXVIII. 6. La familia burguesa y la institucionalización de una privacidad inserta en el público Se consolida la flia nuclear patriarcal como el tipo dominante en las capas burguesas. Duradera intimidad d la nueva vida fliar. La privatización d la vida puede observarse en un cambio estilístico d la arquitectura. Las habitaciones particulares d los miembros han sido provistas c/vez + y c/+ propiedad. Este proceso d privatización hace la casa + habitable para el H, pero + estrecha y pobre para la flia. El espacio + imp en la casa burguesa distinguida es el destinado al salón, pero éste no rinde servicio a la casa, sino a la soc. La línea e/esfera priv y la publicidad atraviesa la casa. El espacio interior d la flia nuclear patriarcal constituye el lugar d una emancipación psicológica coincidente c/la emancipación político-eco. Los poseedores d mercancías pueden considerarse autónomos. Se han emancipado d las directivas y controles estatales. Nadie es sometido a obediencia, sino q todos están a merced d las anónimas leyes del mdo. La autonomía del propietario en el mdo coincide c/una autorrepresentación d los H en la flia, a cuya intimidad subyace una autonomía priv ejercida en el mundo d los negocios. Una autonomía priv q reniega d su origen eco presta a la flia burguesa consciencia d sí misma. La libertad volitiva, la comunidad amorosa e instrucción, dan lugar a una idea d humanidad q se entiende como inherente y q le fija su posición: la emancipación d la intimidad del sujeto. Esa idea, s/la cual la esfera íntima pequeño-fliar se constituye x sí misma, choca c/las funciones reales d la flia burguesa, registrándose en la consciencia del burgués mismo. Garantiza la continuidad personal, objetivamente encauzada en la acumulación d K y anclada jurídicamente en la libre transmisión hereditaria d la propiedad. Es funcional como agente soc para mantener las exigencias soc necesarias preservando una apariencia d libertad.Sin embargo las ideas d libertad, amor y formación son realidad en su calidad d disposición mental, teniendo un peso objetivo en la configuración d la institución. En la esfera d la intimidad, las personas priv se conciben como independientes incluso d la esfera priv d su act eco. El SXVIII se robustece el individuo en su subjetividad escribiendo cartas. Aquella está continuamente inserta en público. De hecho, muchas cartas están d antemano previstas para imprenta. A partir d la subjetividad se explica el surgimiento de la novela burguesa, q sería la descripción psicológica en forma autobiográfica. La 1ra es Pamela de Richardson (1740). Las R e/autor, obra y público cambian. Ambos se convierten en protagonistas q se expresan. La novela crea el estilo d realismo q autoriza a penetrar en la acción literaria como sustitutivo d la propia acción. La esfera del público se origina en las capas d la burguesía como aplicación y consumación d la esfera d la intimidad pequeño-fliar. El lector repite las R priv d la literatura. La subjetividad literariamente capaz se convierte en la literatura d un amplio público lector. Las personas priv convertidas en público razonan tmb públicamente sobre lo leído y lo introducen en el proceso comúnmente impulsado d la Ilustración. Esas capas burguesas constituyen el público q ahora adquiere una textura uniforme gracias a la mediación d la prensa y d su crítica prof. Ellas forman la publicidad d un raciocinio literario en el q la subjetividad d origen íntimo y pequeño-fliar llega a un entendimiento consigo misma y acerca d sí misma. 7. La relación de la publicidad literaria con la publicidad política El proceso x el q el público d personas priv racriocinantes se apropia d la publicidad, transf en esfera d crítica del poder público, se completa c/la transf del funcionamiento d la publicidad literaria, dotada c/organizaciones del público y plataformas d discusión. La tarea política d la publicidad burguesa es la regulación d la soc civil. La publicidad burguesa hace frente a la autoridad monárquica. La exigencia polémica d una racionalidad, enfrentada a la prác secreta d la autoridad soberana, se ha desarrollado en conexión c/el razonamiento público d las personas priv. Se desarrolla en la publi burguesa una consciencia política q articula la idea y exigencia d leyes generales y abstractas frente al dominio absoluto, y q aprende a afirmarse a sí misma como la única fuente legítima d esas leyes. Los criterios q caracterizan a la norma legal debe resultar evidente a las personas priv. En calidad d público están esas personas bajo una paridad e/los instruidos, ley cuya universalidad garantiza q los H serán respetados en su subjetividad. El razonamiento público del público burgués no toma en cuenta rangos ni jerarquías soc y políticas preexistentes. El rdo del raciocinio público en tales circunstancias reclama racionalidad. Una opinión pública nacida d la F del mejor argumento pretende estar en posesión d la capacidad raciocinante. La autocomprensión d la publi política, como cat central d la norma legal, es mediada x la consciencia institucionalizada d la publi literaria. En ambas se forma un público d H priv cuya autonomía se basa en la disposición sobre la prop priv y quiere manifestarse en la esfera d la flia burguesa. Esfera del mdo = privada. Esfera d la flia = núcleo d lo priv, esfera íntima. Se presume independiente d aquella cuando en realidad es cautiva. La ambivalencia d la flia, ser a la vez agente soc y emancipación d la soc, se manifiesta en la posición d los miembros. Como H priv, el burgués es d 2 en 1: prop d bs y H, pero tmb H e/H (igual). La publicidad burguesa desarrollada acaba basándose en la ficticia identidad d las personas priv reunidas en calidad d público en sus 2 roles d propietario y hombre.
Compartir