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PORTADA 2 Mayo 2023 – CID - Centro de Investigación y Desarrollo Copyright © CID - Centro de Investigación y Desarrollo Copyright del texto © 2023 de Autores libros.ciencialatina.org editorial@ciencialatina.org Atención por WhatsApp al +52 22 2690 3834 1ª. Edición. Año 2023. Editorial CID - Centro de Investigación y Desarrollo. El contenido del libro y sus datos en su forma, corrección y fiabilidad son responsabilidad exclusiva de los autores. Permite la descarga de la obra y compartir siempre que los créditos se atribuyan a los autores, pero sin la posibilidad de cambiarlo de cualquier forma o utilizarlo con fines comerciales . Prohibida su reproducción por cualquier medio. Distribución gratuita Datos Técnicos de Publicación Internacional Título: Actualizaciones De Urgencias Cardiológicas – Tomo 1 Autor: Claudia Alejandra Lapo Calderon, Jóse Rolando Castro Pomaquiza, Manuel Alexander Moya Verdezoto Editor: CID - Centro de Investigación y Desarrollo Diseño de tapa: CID - Centro de Investigación y Desarrollo Corrección de Estilo: CID - Centro de Investigación y Desarrollo Formato: PDF Páginas: 74 pag. Tamaño: Sobre C5 162 x 229 mm Requisitos de sistema: Adobe Acrobat Reader Modo de acceso: World Wide Web ISBN: en gestión DOI: https://doi.org/10.37811/cli_w889 https://doi.org/10.37811/cli_w889 3 INDICE Capítulo 1 ............................................................................. 4 Insuficiencia Cardiaca Aguda .............................................. 4 Capítulo 2 ........................................................................... 18 Sindrome Coronario Agudo ............................................... 18 Capítulo 3 ........................................................................... 33 Taquiarritmias .................................................................... 33 Capítulo 4 ........................................................................... 47 Crisis Hipertensiva ............................................................. 47 .Capítulo 5 .......................................................................... 62 Dolor Toracio Agudo ......................................................... 62 4 Capítulo 1 Insuficiencia Cardiaca Aguda Claudia Alejandra Lapo Calderon Pares evaluadores: Ciencia Latina Revista Científica Multidisciplinar.1 1 Ciencia Latina Revista Científica Multidisciplinar. www.ciencialatina.org 5 RESUMEN La insuficiencia cardíaca aguda sigue siendo una causa común de hospitalización, y a pesar de los esfuerzos realizados, su morbimortalidad no se ha reducido. Por lo tanto, es importante analizar todo lo relacionado con su manejo clínico. Este capítulo se centra en la práctica clínica, con un análisis detallado de los aspectos diagnósticos y terapéuticos. Se examinan diferentes definiciones y clasificaciones de la insuficiencia cardíaca aguda para una mejor comprensión del tema. Se propone un enfoque conceptual similar al del síndrome coronario agudo para mejorar los tiempos de intervención terapéutica. Además, se recomienda un esquema sencillo de evaluación clínica del paciente basado en la presencia o ausencia de signos y síntomas de bajo gasto y congestión. Se resumen los principales conceptos que el médico debe considerar frente a este cuadro clínico. En general, el capítulo proporciona una guía completa para el manejo de la insuficiencia cardíaca aguda, incluyendo su diagnóstico, tratamiento y estrategias para mejorar los resultados en la práctica clínica. Es fundamental que los profesionales médicos estén informados y actualizados sobre los avances en el manejo de esta afección, para garantizar un tratamiento óptimo y mejorar la calidad de vida de los pacientes afectados por la insuficiencia cardíaca aguda. Palabras Claves: Insuficiencia Cardiaca Aguda, síndrome coronario agudo, morbimortalidad 6 ABSTRACT Acute heart failure remains a common cause of hospitalization, and despite efforts made, its morbidity and mortality have not been reduced. Therefore, it is important to analyze everything related to its clinical management. This chapter focuses on clinical practice, with a detailed analysis of diagnostic and therapeutic aspects. Different definitions and classifications of acute heart failure are examined for a better understanding of the topic. A conceptual approach similar to that of acute coronary syndrome is proposed to improve therapeutic intervention times. Additionally, a simple clinical evaluation scheme for the patient based on the presence or absence of signs and symptoms of low output and congestion is recommended. The main concepts that the physician should consider regarding this clinical condition are summarized. In general, the chapter provides a complete guide to the management of acute heart failure, including its diagnosis, treatment, and strategies to improve outcomes in clinical practice. It is essential that medical professionals are informed and up-to-date on advances in the management of this condition, to ensure optimal treatment and improve the quality of life of patients affected by acute heart failure. Keywords: Acute Heart Failure, Acute Coronary Syndrome, Morbidity and Mortality. 7 INTRODUCCION El síndrome de Insuficiencia Cardíaca Aguda (ICA) es una condición prevalente que ocasiona hospitalizaciones frecuentes en pacientes mayores. Presenta un pobre pronóstico con una alta tasa de mortalidad hospitalaria que puede llegar al 30%-40% en el transcurso del año. Es responsable de internaciones prolongadas y de una tasa elevada de reingresos hospitalarios. En los últimos años, ha habido un cambio significativo en su diagnóstico y tratamiento, donde se recomienda un abordaje similar al del Síndrome Coronario Agudo (SCA) para lograr una intervención temprana, ya que "el tiempo es músculo". El tratamiento de la ICA requiere un diagnóstico y tratamiento urgente y completo, a fin de evitar o minimizar el daño múltiple que se produce en el síndrome y empeora el pronóstico. Actualmente, se utiliza un manejo basado en parámetros clínicos y marcadores biológicos para detectar tempranamente la disfunción de los órganos blancos y el daño cardíaco, lo que permite determinar el pronóstico y guiar la terapia. Se debe fomentar un enfoque multidisciplinario (equipo cardíaco) para mejorar los resultados y tratar adecuadamente los múltiples aspectos que presentan estos pacientes. A pesar de las guías actuales de la Sociedad Europea de Cardiología (ESC) sobre Insuficiencia Cardíaca (IC) y de múltiples estudios que abordan esta 8 afección, la ICA ha logrado pocos avances terapéuticos en comparación con la IC crónica (ICC). La mortalidad hospitalaria y anual son elevadas, siendo el doble que en la ICC. (Gheorghiade M, 2009) Se puede definir la insuficiencia cardíaca como un síndrome clínico que se caracteriza por la presencia de síntomas como disnea, edema y fatiga, acompañados por signos como presión venosa elevada, estertores pulmonares y edema periférico. Esto es causado por una anomalía estructural o funcional del corazón que resulta en un gasto cardíaco reducido y/o en una elevación de las presiones intracardíacas de llenado. Por otro lado, la insuficiencia cardíaca aguda se define como un cambio rápido o gradual en los signos y síntomas de insuficiencia cardíaca que requieren tratamiento urgente y que se deben principalmente a una congestión pulmonar severa debido a altas presiones de llenado. Estos síndromes pueden ocurrir en pacientes con fracción de eyección del ventrículo izquierdo preservada o reducida, y generalmente coexisten con otras patologías que pueden precipitar o contribuira su fisiopatología. Los síntomas y signos se dividen en típicos y específicos o menos típicos y menos específicos, y se deben descartar causas alternativas antes de realizar el diagnóstico. La evaluación clínica debe ser apoyada por estudios complementarios. (Mebazaa A, 2015) 9 Hay varias maneras de clasificar la insuficiencia cardíaca aguda (ICA). La clasificación más clásica, utilizada por el WGAHFS y las guías 2016 de la ESC, se basa en la entidad clínica, que se divide en tres categorías: IC "de novo", agudización de una IC previa y IC avanzada. La clasificación según el perfil clínico es otra forma de clasificar la ICA y puede variar desde el edema agudo de pulmón con o sin shock cardiogénico hasta una enfermedad menos grave caracterizada por empeoramiento del edema periférico. La clasificación según el perfil clínico está directamente relacionada con el pronóstico. La mortalidad global de la ICA hospitalizada es de alrededor del 3,8%, pero varía significativamente según el perfil clínico. La ICC descompensada es el grupo dominante y el shock cardiogénico es la forma más grave, que representa aproximadamente el 2,3% del total. (Ponikowski P, 2016) 10 MATERIAL Y METODOS Se llevó a cabo un estudio descriptivo en el Servicio de Emergencia de Adultos, desde diciembre de 2017 hasta marzo de 2022, que incluyó a pacientes mayores de 18 años hospitalizados por insuficiencia cardíaca aguda (ICA). Los datos se obtuvieron de las historias clínicas y se registraron en una ficha diseñada para el estudio. Los pacientes solo se registraron una vez. Se incluyeron pacientes hospitalizados con diagnóstico de ICA según la definición de la Sociedad Europea de Cardiología, independientemente de la etiología o causa de la descompensación. (McMurray JJV, 2012) Los datos cuantitativos, como la edad, la presión arterial, la frecuencia cardíaca, la frecuencia respiratoria, los niveles séricos de sodio, creatinina, hemoglobina y pro-péptido natriurético tipo B (pro-PNB), se analizaron y categorizaron en grupos etarios. Las variables cualitativas, como el sexo, las comorbilidades, los hallazgos en el examen clínico, las hospitalizaciones previas, la clase funcional previa según la NYHA, la fracción de eyección del ventrículo izquierdo (FEVI), la medicación recibida y la mortalidad intrahospitalaria, también se evaluaron. (Ponikowski P V. A., 2016) El estudio fue aprobado por los comités de investigación y ética respectivos, y debido a que solo se utilizaron registros 11 de historias clínicas, no se requirió consentimiento informado de los pacientes. Solo los investigadores tuvieron acceso a la información para garantizar la confidencialidad de los pacientes. Se utilizó Excel 2016 para almacenar la información en una base de datos, y posteriormente, se procesó con el programa estadístico SPSS versión 22. Se utilizaron pruebas estadísticas para evaluar las diferencias en la administración de medicamentos al ingreso y al alta hospitalaria, y se consideró estadísticamente significativo un valor de p<0,05. 12 RESULTADOS En el estudio se incluyeron 1075 pacientes, cuya edad media fue de 73,6 años, con un 85,7% de ellos mayores de 60 años y un 31,2% mayores de 80 años. El 55% de los pacientes eran hombres. Las comorbilidades más comunes fueron hipertensión arterial (52,6%) y enfermedad coronaria (51%). Alrededor de un tercio de los pacientes padecían anemia, enfermedad renal crónica y diabetes cada uno. La mayoría de los pacientes se encontraban en la clase funcional II de la NYHA, seguida de la clase funcional III. La presión arterial sistólica mediana fue de 129,5 mmHg, y los pacientes presentaron taquicardia y taquipnea predominantemente, con crepitantes en más de dos tercios de los pacientes y edema de miembros inferiores y/o ingurgitación yugular en la mitad de ellos. Solo el 49,7% de los pacientes fueron evaluados con ecocardiografía de la fracción de eyección del ventrículo izquierdo (FEVI). La mayoría de los pacientes recibieron inhibidores de enzima convertidora de angiotensina (IECA) o bloqueadores de los receptores de angiotensina (BRA), diuréticos de asa, beta bloqueadores, espironolactona y digoxina. Durante la hospitalización, la mayoría de los pacientes estuvieron hospitalizados por tres días y un 23,6% estuvo hospitalizado por más de siete días. El porcentaje de complicaciones relacionadas con ICA fue del 15% y la 13 mortalidad intrahospitalaria por todas las causas fue del 7,2%. El 29,2% de los pacientes tuvieron hospitalizaciones previas por ICA y el 13,4% tuvo tres o más hospitalizaciones previas. 14 DISCUSION Y CONCLUSIONES La insuficiencia cardíaca aguda es una condición médica grave que se caracteriza por la incapacidad del corazón para bombear suficiente sangre y oxígeno al cuerpo. Esta condición puede ser causada por una variedad de factores, incluyendo enfermedades cardíacas previas, como la hipertensión arterial o la enfermedad coronaria, así como por enfermedades pulmonares, infecciones o reacciones a medicamentos. La insuficiencia cardíaca aguda se presenta en una amplia gama de gravedad, desde casos leves que pueden tratarse con cambios en la dieta y el estilo de vida, hasta casos graves que requieren hospitalización inmediata y atención médica intensiva. La insuficiencia cardíaca aguda es una de las principales causas de hospitalización en todo el mundo, y su tasa de mortalidad es significativamente alta. Aunque existen varios tratamientos para la insuficiencia cardíaca aguda, es importante destacar que el diagnóstico temprano es fundamental para una mejor tasa de supervivencia. Los síntomas más comunes incluyen dificultad para respirar, fatiga, hinchazón de las piernas y los pies, y aumento de la frecuencia cardíaca. Si se presentan estos síntomas, es importante buscar atención médica de inmediato. 15 En conclusión, la insuficiencia cardíaca aguda es una afección médica grave que puede ser causada por una variedad de factores. Su detección temprana y el tratamiento adecuado son fundamentales para mejorar la tasa de supervivencia. Se deben seguir investigando nuevas terapias y tratamientos para mejorar la calidad de vida de los pacientes con insuficiencia cardíaca aguda. 16 REFERENCIAS Gheorghiade M, P. P. (2009). Acute Heart Failure Syndromes. J Am Coll Cardiol. doi:10.1016/j.jacc.2008.10.041 McMurray JJV, A. S. (2012). Guidelines for the diagnosis and treatment of acute and chronic heart failure 2012: The Task Force for the Diagnosis and Treatment of Acute and Chronic Heart Failure 2012 of the European Society of Cardiology. Developed in collaboration with the Heart. Eu Heart J. doi:10.1093/eurheartj/ehs104 Mebazaa A, Y. M. (2015). Recommendations on pre- hospital and early hospital management of acute heart failure: a consensus paper from the Heart Failure Association of the European Society of Cardiology, the European Society of Emergency Medicine. . Eur Heart. doi:10.1002/ejhf.289 Ponikowski P, V. A. (2016). ESC guidelines for the diagnosis and treatment of acute and chronic heart failure: The Task Force for the diagnosis and treatment of acute and chronic heart failure of the European Society of Cardiology. Eur Heart J. doi:10.1093/eurheartj/ehw128 Ponikowski P, V. A. (2016). Guidelines for the diagnosis and treatment of acute and chronic heart failure: The Task Force for the diagnosis and treatment of acute and 17 chronic heart failure of the European Society of Cardiology (ESC)Developed with the special contribution of the Hear. Eur Heart J. doi:10.1093/eurheartj/ehw128 18 Capítulo 2 Sindrome Coronario Agudo Jóse Rolando Castro Pomaquiza Pares evaluadores: Ciencia Latina Revista Científica Multidisciplinar.22 Ciencia Latina Revista Científica Multidisciplinar. www.ciencialatina.org 19 RESUMEN Los síndromes coronarios agudos representan un importante problema de salud pública a nivel mundial. Esta categoría incluye tanto el infarto agudo de miocardio (IAM) con y sin elevación del segmento ST, así como la angina inestable. La incidencia anual de IAM es de 565,000 nuevos casos y 300,000 ataques recurrentes cada año. Entre los factores de riesgo para la enfermedad cardíaca isquémica se encuentran el tabaquismo, los niveles elevados de lípidos en sangre, la hipertensión arterial, la diabetes mellitus, la obesidad mórbida, el sedentarismo, el bajo consumo de frutas y verduras, el consumo problemático de alcohol y el índice psicosocial. En la evaluación inicial de un SCA, se debe prestar atención al dolor torácico, los signos y síntomas asociados y los factores de riesgo para SCA. Aunque los marcadores biológicos de lesión miocárdica han contribuido a una mayor sensibilidad en el abordaje diagnóstico y al pronóstico de los pacientes, actualmente no son esenciales para determinar el manejo inicial. Palabras Claves: Síndromes coronarios agudos, epidemiología, diagnóstico 20 ABSTRACT Acute coronary syndromes represent a significant public health problem worldwide. This category includes both acute myocardial infarction (AMI) with and without ST segment elevation, as well as unstable angina. The annual incidence of AMI is 565,000 new cases and 300,000 recurrent attacks every year. Risk factors for ischemic heart disease include smoking, elevated blood lipid levels, hypertension, diabetes mellitus, morbid obesity, physical inactivity, low daily intake of fruits and vegetables, problematic alcohol consumption, and psychosocial factors. In the initial evaluation of an ACS, attention should be paid to chest discomfort, associated signs and symptoms, and risk factors for ACS. Although biological markers of myocardial injury have contributed to greater sensitivity in the diagnostic approach and patient prognosis, they are currently not essential for determining initial management. Keywords: Acute Coronary Syndromes, Epidemiology, Diagnosis. 21 INTRODUCCION Los síndromes coronarios agudos son un importante problema de salud pública a nivel mundial. En los últimos años, ha habido avances significativos en la epidemiología, fisiopatología y tratamiento de estos trastornos, lo que ha tenido un impacto en las guías de manejo y el pronóstico de los pacientes. Por lo tanto, es crucial que los clínicos en las unidades de cuidados coronarios, intensivos e intermedios, así como en los servicios de urgencias, estén actualizados constantemente sobre las últimas tendencias en el manejo de pacientes con síndrome coronario agudo. En este artículo se presenta una revisión actualizada de la epidemiología y el enfoque diagnóstico inicial de los SCA en los servicios de urgencias, basado en la evidencia más sólida disponible en la actualidad. (Fuster V, 1985) (Antman EM, 2004) 22 MATERIAL Y METODOS La enfermedad coronaria (EC) representa un problema de salud pública a nivel mundial, siendo la principal causa de muerte en el mundo occidental. (RS, 2006) (Alpert JS, 2008) Actualmente, existen múltiples estudios que utilizan metodologías establecidas para la vigilancia epidemiológica de las enfermedades cardíacas, centrándose principalmente en el infarto agudo de miocardio (IAM) y basándose en tres criterios: dolor torácico, análisis electrocardiográfico y cambios en enzimas cardíacas. Cada uno de estos programas de vigilancia epidemiológica aporta información complementaria y diferentes puntos de vista sobre este importante problema. (Writing Group Members, 2006) (Alpert JS, 2008) De acuerdo con la Asociación Americana del Corazón (AHA), en el año 2003, 71.3 millones de estadounidenses experimentaron algún tipo de enfermedad cardiovascular. En EE. UU. durante el año 2004, hubo 1,565,000 altas hospitalarias debido al síndrome coronario agudo (SCA), de las cuales 896,000 correspondieron a infarto agudo de miocardio (IAM) y 669,000 a angina inestable (AI). En 2007, aproximadamente 700,000 estadounidenses sufrieron un nuevo evento coronario, mientras que alrededor de 500,000 tuvieron un evento recurrente. Según el Instituto 23 Nacional de Sangre, Corazón y Pulmón (NHLBI), se estima que en EE. UU. se producen 175,000 IAM silentes cada año. Los datos del NHLBI también indican que la incidencia anual de IAM es de 565,000 nuevos eventos y 300,000 eventos recurrentes por año. (Boland LL, 2002) El riesgo de desarrollar enfermedad coronaria (EC) después de los 40 años es del 49% para los hombres y del 32% para las mujeres. En el estudio ARIC del NHLBI, la incidencia promedio ajustada por edad para la EC por cada 1000 personas/año es de 12.5 para hombres blancos, 10.6 para hombres negros, 4.0 para mujeres blancas y 5.1 para mujeres negras. La edad promedio del primer IAM es de 65.8 años para los hombres y 70.4 años para las mujeres. La incidencia de EC en mujeres después de la menopausia es de 2 a 3 veces mayor que en mujeres de la misma edad antes de la menopausia. (Lloyd-Jones DM, 1999) Actualmente, el número de pacientes hospitalizados por SCA sin elevación persistente del segmento ST supera el de pacientes admitidos por SCACEST. El registro GRACE recopiló información de 10,693 pacientes con SCA entre 1999 y 2001 en Europa, América, Australia y Nueva Zelanda. De ellos, dos tercios correspondieron a pacientes con un electrocardiograma (ECG) sin elevación del segmento ST. (Writing Group Members, 2006) 24 En otro estudio observacional en el área de Worcester (EE. UU.), se llevó a cabo un registro de IAM en 16 hospitales durante los años 1975 a 1997. Los resultados mostraron una disminución importante a lo largo del tiempo en la incidencia de IAM con onda Q, la mayoría de los cuales provenían del SCACEST, de 171/100,000 habitantes en 1975 a 101/100,000 habitantes en 1997, así como en su tasa de mortalidad, del 24% al 12%. En contraste, la incidencia del IAM sin onda Q mostró un aumento constante junto con una tasa de mortalidad ajustada en 1922, casi idéntica a la de 22 años antes. (Mandelzweig L, 2004) Factores de Riesgos Un estudio de casos y controles realizado en 52 países (INTERHEART) ha identificado 9 factores de riesgo fácilmente medibles y modificables que representan más del 90% del riesgo de desarrollar un IAM inicial. Estos factores tienen un efecto consistente en hombres y mujeres en diferentes regiones geográficas y grupos étnicos, lo que los hace aplicables a nivel mundial. Los 9 factores de riesgo identificados son: tabaquismo, niveles elevados de lípidos séricos, hipertensión arterial, diabetes mellitus, obesidad mórbida, sedentarismo, bajo consumo diario de frutas y vegetales, consumo problemático de alcohol e índice psicosocial. Este enfoque complementa el enfoque convencional de factores de riesgo (hipertensión, diabetes, 25 hiperlipidemia, tabaquismo) para enfermedad coronaria, que ha sido ampliamente establecido en diversos estudios epidemiológicos. (Mandelzweig L, 2004) Pronostico Las personas que sobreviven a un IAM tienen un riesgo significativamente mayor de enfermar o morir en comparación con la población general, que oscila entre 1.5 a 15 veces mayor. Este grupo de pacientes enfrenta un riesgo sustancial de experimentar otro IAM, muerte súbita, angina de pecho, falla cardíaca y ataque cerebrovascular. Según estudios epidemiológicos, el porcentaje de personas que sufrirán muerte súbita 5 años después de su primer IAM varía entre grupos étnicos y edades. Además, se ha observado que la rehabilitación cardíaca después de un IAM es subutilizada, especialmente en mujeres y ancianos, y que latasa de participación es menor en aquellos de 70 años o más en comparación con otros grupos de edad. Se encontró que solo el 32% de hombres y mujeres de 70 años o más recibieron rehabilitación cardíaca después de un IAM, mientras que el porcentaje fue mayor en personas de edades comprendidas entre 60 a 69 años (66%) y en aquellos menores de 60 años (81%). (Mandelzweig L, 2004) (Alpert JS, 2008) 26 RESULTADOS La manifestación principal de los SCA es el dolor o malestar en el pecho, aunque también pueden presentarse síntomas como malestar en otras áreas del torso, sudoración, náuseas, falta de aliento y mareo. En comparación con la angina, los síntomas del IAM suelen ser más intensos y durar más de 15 minutos. Además, en grupos específicos como ancianos, mujeres y diabéticos, es posible que se presenten síntomas atípicos. Es importante que el personal médico de urgencias realice una evaluación rápida del paciente con sospecha de SCA para determinar si el dolor torácico es de origen cardíaco o si hay una situación que amenaza la vida del paciente, siguiendo el protocolo ABC de reanimación. La obtención de una historia clínica enfocada en el problema, la identificación de signos y síntomas asociados, factores de riesgo y datos personales que puedan contraindicar el uso de terapias es fundamental en la evaluación inicial, la cual debe realizarse en los primeros 10 minutos después de la llegada del paciente al servicio de urgencias. Además, durante esta fase inicial, se debe comenzar el manejo farmacológico básico y monitorizar al paciente mientras se realiza un electrocardiograma de 12 derivaciones. Es crucial realizar una evaluación eficiente, ya que en el caso de IAMCEST, el objetivo es administrar fibrinolíticos en los primeros 30 27 minutos después del arribo (intervalo puerta-aguja) o realizar una angioplastia percutánea en los primeros 90 minutos (puerta-balón en la unidad de cateterismo cardíaco). Eventualidades No todos los pacientes que sufren un SCA presentan dolor torácico como síntoma. El estudio Framingham demostró que aproximadamente la mitad de los IAM no son reconocidos por el paciente y pueden ser clínicamente silenciosos. En un estudio realizado por Cano et al. se encontró que un tercio de los pacientes con IAM confirmado ingresaron al hospital con síntomas diferentes al dolor torácico. Estos pacientes tenían más probabilidades de ser mujeres, ancianos, diabéticos o presentar insuficiencia cardíaca previa. Además, consultaron al hospital con un retraso promedio de 7,9 horas en comparación con los pacientes con dolor torácico, lo que disminuyó la probabilidad de que se les diagnosticara un IAM y tuvieran un tratamiento adecuado. Estos pacientes también presentaron una menor probabilidad de recibir terapia con fibrinolíticos o ICP, ASA, beta bloqueadores o heparina. Los pacientes con IAM silencioso tuvieron una tasa de mortalidad hospitalaria más alta en comparación con los pacientes que presentaron dolor torácico (23,3% vs. 9,3%). 28 Por lo tanto, los proveedores de salud deben mantener un alto índice de sospecha para SCASEST cuando evalúan a pacientes con características como mujeres, diabéticos, ancianos, disnea inexplicable, historial de IC o ACV, así como aquellos que presentan marcapasos permanentes que pueden dificultar el reconocimiento del SCASEST en el electrocardiograma. El examen físico puede ayudar al diagnóstico, descartar otras causas y evaluar las complicaciones relacionadas con el SCA. Sin embargo, no hay evidencia que respalde la utilidad de signos clínicos individuales o combinados para confirmar el diagnóstico del SCA (34). Hallazgos Cuando un paciente presenta síntomas sugestivos de SCA, el médico utiliza los resultados del electrocardiograma para clasificar al paciente en uno de tres grupos distintos (37). El primer grupo incluye a aquellos con elevación del segmento ST o bloqueo completo de rama izquierda que es nuevo o presumiblemente nuevo y se caracteriza por una elevación del segmento ST de más de 1 mm (0,1 mV) en dos o más derivaciones precordiales contiguas o en dos o más derivaciones adyacentes de los miembros. Este grupo se clasifica como IAMCEST o infarto agudo del miocardio con elevación del segmento ST. 29 El segundo grupo está compuesto por pacientes con depresión isquémica del segmento ST de más de 0,5 mm (0,05 mV) o inversión dinámica de la onda T acompañada de dolor o disconfort. Este grupo se clasifica como angina inestable de alto riesgo / infarto agudo del miocardio sin elevación del segmento ST (IAMSEST). Este grupo también incluye a aquellos con una elevación del segmento ST de más de 0,5 mm que es no persistente o transitoria y dura menos de 20 minutos. El tercer grupo es aquel que presenta un electrocardiograma normal o cambios no diagnósticos en el segmento ST o la onda T. Esto incluye pacientes con un electrocardiograma normal, aquellos con una desviación del segmento ST menor de 0,5 mm (0,05 mV) o una inversión de la onda T menor o igual de 0,2 mV. Este grupo requiere de estudios cardíacos seriados y pruebas funcionales (estratificación) para definir la conducta adecuada. La morfología del segmento ST es determinante para definir si el tratamiento fibrinolítico es adecuado. Los pacientes con infartos con elevación del segmento ST pueden beneficiarse de este tipo de tratamiento, mientras que los pacientes con infartos sin elevación del segmento ST no lo requieren. 30 DISCUSION Y CONCLUSIONES Los síndromes coronarios agudos siguen siendo una preocupación significativa para la salud pública a nivel mundial debido a su alta tasa de mortalidad y los costos económicos que generan. Sin embargo, se ha observado una disminución en la mortalidad en la enfermedad coronaria en los últimos años, lo que podría deberse a avances en el diagnóstico y en el diseño de estrategias farmacológicas, así como al énfasis en el control de los factores de riesgo. (Alpert JS, 2008) La definición actual del síndrome coronario agudo se centra en la morfología del segmento ST, lo que permite una estrategia de revascularización efectiva para el vaso responsable, siendo este el objetivo terapéutico principal. La utilización de biomarcadores, como las troponinas, ha cambiado el panorama del SCA, permitiendo el diagnóstico temprano de más casos de IAM antes clasificados como angina, lo que ha aumentado la incidencia, pero disminuido la mortalidad global del IAM. En consecuencia, el diagnóstico y tratamiento oportunos son fundamentales para el manejo del SCA. 31 REFERENCIAS Alpert JS, T. K. (2008). Implications of the universal definition of myocardial infarction. Nat Clin Pract Cardiovasc. doi:10.1136/postgradmedj-2012-302976rep Antman EM, A. D. (2004). ACC/ AHA guidelines for the management of patients with ST-elevation myocardial infarction; a report of the American College of Cardiology/American Heart Association Task Force on Practice Guidelines. ) J Am Coll Cardiol. doi:10.1161/01.CIR.0000134791.68010.FA Boland LL, F. A. (2002). Occurrence of unrecognized myocardial infarction in subjects aged 45 to 65 years (the ARIC study). ). Am J Cardiol. doi:10.1371/journal.pone.0200381 Fuster V, S. O. (1985). Role of platelets and thrombosis in coronary atherosclerotic disease and suden death. J Am Coll Cardiol. doi:10.1016/s0735- 1097(85)80552-0 Lloyd-Jones DM, L. M. (1999). Lifetime risk of developing coronary heart disease. doi:10.1016/S0140- 6736(98)10279-9 Mandelzweig L, B. A. (2004). The second Euro Heart Survey on acute coronary syndromes: characteristics, 32 treatment, and outcome of patients with ACS in Europe and the Mediterranean Basin in 2004. European. doi:10.1093/eurheartj/ehl196 RS, V. (2006). Biomarkers of cardiovasculardisease. Molecular basis and practical considerations. doi:10.1161/CIRCULATIONAHA.104.482570 Writing Group Members, T. T. (2006). Heart disease and stroke statisticsd 2006 update. A report from the American Heart Association Statistics Committee and Stroke Statistics Subcommittee. doi:10.1161/ CIRCULATIONAHA.105.171600 33 Capítulo 3 Taquiarritmias Claudia Alejandra Lapo Calderon Pares evaluadores: Ciencia Latina Revista Científica Multidisciplinar.3 3 Ciencia Latina Revista Científica Multidisciplinar. www.ciencialatina.org 34 RESUMEN Según numerosos estudios, las arritmias cardíacas pueden estar relacionadas con enfermedades cardíacas, pero también pueden ser causadas por factores externos como el estilo de vida, la alimentación y el estrés, así como por factores fisiológicos, como en el caso de los deportistas. La evaluación y manejo adecuado de esta patología en una unidad de atención médica de primer nivel dependerá de la clínica y los síntomas, así como de la capacidad para identificar si la arritmia es fisiológica o está relacionada con una enfermedad cardíaca. Un estudio cuidadoso e investigativo analizó cómo una unidad de atención médica de primer nivel puede manejar a pacientes con arritmias cardíacas. Como resultado, se recomienda que estos centros de salud promuevan campañas de prevención y conocimiento sobre la patología, para que los pacientes puedan tomar medidas preventivas. La identificación temprana de los síntomas de las arritmias cardíacas es fundamental para garantizar un tratamiento adecuado y evitar complicaciones graves. Los centros de atención médica de primer nivel pueden desempeñar un papel importante en la prevención y el tratamiento de la enfermedad, si cuentan con la capacitación necesaria y ofrecen una atención de calidad a los pacientes que lo necesiten. Palabras Claves: Taquiarritmias, manejo de las arritmias en unidades de salud de primer nivel; indicaciones; recomendaciones; prevención y promoción. 35 ABSTRACT According to numerous studies, cardiac arrhythmias may be related to heart diseases, but they can also be caused by external factors such as lifestyle, diet, and stress, as well as physiological factors, as in the case of athletes. The appropriate assessment and management of this pathology in a primary healthcare unit depend on the clinical symptoms and the ability to identify whether the arrhythmia is physiological or related to a heart disease. A careful and investigative study analyzed how a primary healthcare unit can manage patients with cardiac arrhythmias. As a result, it is recommended that these healthcare centers promote prevention and knowledge campaigns about the pathology, so that patients can take preventive measures. Early identification of cardiac arrhythmia symptoms is crucial to ensure adequate treatment and prevent serious complications. Primary healthcare centers can play an important role in disease prevention and treatment if they have the necessary training and offer quality care to patients in need. Keywords: Tachyarrhythmias, management of arrhythmias in first-level healthcare units; indications; recommendations; prevention and promotion. 36 INTRODUCCION Las arritmias cardíacas siguen siendo un desafío importante para el diagnóstico y el manejo en las nidades de atención médica de primer nivel y de urgencias, y son una de las causas más comunes de consulta. En las últimas décadas, el conocimiento adecuado sobre las arritmias ha aumentado gracias al advenimiento de nuevas técnicas de diagnóstico y de investigación clínica. Para mejorar las tasas de supervivencia después de una parada cardíaca, es necesario evitar que las personas sufran una en primer lugar. El equipo médico que trata al paciente tiene un papel determinante en la detección e interpretación de las distintas arritmias cardíacas. Después de que se analizan los síntomas, antecedentes médicos y clínicos del paciente, el cardiólogo comúnmente recomienda estudios complementarios para llegar a un diagnóstico preciso y elegir la mejor conducta, ya sea un tratamiento farmacológico o uno más complejo. Según los expertos, solo alrededor del 20% de las personas que sufren una parada cardíaca en un hospital sobreviven después del alta. (Sotelo, 2002) De acuerdo con información proporcionada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), las enfermedades cardíacas son la principal causa de muerte en Ecuador. En el presente año, los paros cardiorrespiratorios representan el 7,7% de todas las muertes registradas. De acuerdo con 37 estadísticas del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos del Ecuador (INEC) se reportaron 4.430 muertes por enfermedades isquémicas del corazón y 1.316 por insuficiencia cardíaca. Asimismo, durante el año en cuestión se registraron 168 fallecimientos por arritmias cardíacas y 106 por paradas cardiorrespiratorias. Estos datos ilustran la importancia de contar con profesionales capacitados en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades cardiovasculares. En cuanto a la prevención de arritmias, se enfoca en prevenir los síntomas y reducir las posibilidades de que empeoren, lo que implica identificar si la causa subyacente es un factor externo como el estrés, el consumo de alcohol o tabaco, o una patología cardíaca. (Cardiología, 2012) Taquiarritmias son alteraciones del ritmo cardíaco que pueden ser peligrosas para la vida. La fibrilación ventricular es una taquiarritmia en la que la actividad eléctrica del corazón se vuelve completamente desorganizada y no hay un latido efectivo, lo que puede llevar a una parada cardíaca grave y la muerte si no se trata con maniobras de reanimación. El síndrome de Brugada es una enfermedad hereditaria que puede provocar síncopes repetidos y muerte súbita, y se diagnostica mediante un electrocardiograma (EKG) que muestra alteraciones. El tratamiento de las taquiarritmias depende del tipo específico de arritmia, pero puede incluir la reanimación cardiopulmonar de emergencia, 38 antiarrítmicos o cardioversión eléctrica. Se pueden realizar pruebas como un EKG ambulatorio de 24 horas, una prueba de esfuerzo o el implante de un marcapasos. Algunos fármacos utilizados para tratar las taquiarritmias incluyen los antiarrítmicos de clase 1 (como la quinidina o la lidocaína) y de clase 2 (como la amiodarona o el sotalol). La decisión de implantar un marcapasos o un desfibrilador cardioverter no debe tomarse a la ligera y debe basarse en una evaluación individualizada del paciente. (E, 2014) 39 MATERIAL Y METODOS Los métodos y materiales utilizados para el manejo de las taquiarritmias dependen del tipo de arritmia y de la gravedad del caso. Algunos de los métodos y materiales más comunes incluyen: Desfibrilador: dispositivo que administra una descarga eléctrica al corazón con el fin de restablecer su ritmo normal. Se utiliza en casos de taquicardia ventricular y fibrilación ventricular. (E. Gargallo García, 2015) • Cardioversión eléctrica: procedimiento mediante el cual se administra una descarga eléctrica al corazón a través de electrodos colocados en el pecho del paciente. Se utiliza para restablecer el ritmo normal del corazón en casos de taquiarritmias como la fibrilación auricular. (E. Gargallo García, 2015) • Medicamentos antiarrítmicos: fármacos que se utilizan para controlar la frecuencia y el ritmo cardíaco. Algunos de los medicamentos antiarrítmicos más comunes incluyen amiodarona, lidocaína y sotalol. (E. Gargallo García, 2015) • Terapia de ablación: procedimiento que utiliza la energía de radiofrecuencia o láser para destruir las 40 células que están causando la taquiarritmia. Se utiliza encasos de taquiarritmias como la taquicardia supraventricular. (E. Gargallo García, 2015) • Dispositivos implantables: dispositivos como el marcapasos o el desfibrilador automático implantable que se colocan en el cuerpo del paciente para controlar y corregir las taquiarritmias. (E. Gargallo García, 2015) • Monitorización electrocardiográfica: se utiliza para monitorear continuamente el ritmo cardíaco del paciente y detectar cualquier taquiarritmia que pueda presentarse. (E. Gargallo García, 2015) • Oxígeno y soporte vital: se utilizan en casos de taquiarritmias graves que pueden llevar a la hipoxia o la insuficiencia cardíaca. (E. Gargallo García, 2015) Manejo de las Taquiarritmias Para tratar las taquiarritmias, es importante determinar si se requiere una derivación urgente a una unidad médica de mayor complejidad y con medidas de soporte vital, especialmente si se sospecha de taquicardia ventricular. Se ha demostrado que las taquiarritmias inducidas por isquemia son una causa importante de síndromes coronarios agudos y pueden provocar un paro cardíaco súbito. Afortunadamente, los avances terapéuticos recientes, como los nuevos agentes 41 antiplaquetarios (por ejemplo, prasugrel, ticagrelor y cangrelor), han reducido significativamente la incidencia de estas taquiarritmias y se espera que sigan mejorando en el futuro. (Agüero Rodríguez Manuel A, 2008) Criterios Generales de Derivación Hospitalaria Se deben considerar los siguientes criterios de derivación en la unidad de primer nivel: • Arritmias graves como Fibrilación Ventricular, Taquicardia Ventricular y Taquicardia QRS ancho de origen desconocido. • Taquiarritmias o bradiarritmias que no se pueden controlar en la unidad. • Cualquier arritmia de QRS ancho que no esté siendo tratada. • Bloqueos de segundo grado y tercer grado asintomáticos (tipo 2 de BAV y tercer grado). • Arritmias causadas por intoxicación medicamentosa. • Cuando se ha producido un importante deterioro hemodinámico o se ha requerido tratamiento agresivo. (E. Gargallo García, 2015) 42 RESULTADOS El diagnóstico de taquiarritmia se basa en una combinación de la historia clínica del paciente, el examen físico y pruebas complementarias. En la historia clínica, el médico preguntará sobre los síntomas que el paciente ha experimentado, como palpitaciones, mareo o desmayo, y sobre cualquier antecedente médico que pueda ser relevante, como enfermedades del corazón o problemas de tiroides. El examen físico puede incluir la auscultación del corazón para detectar sonidos anormales, como un ritmo cardíaco irregular, y la medición de la presión arterial y la frecuencia cardíaca. Las pruebas complementarias pueden incluir un electrocardiograma (ECG) para registrar la actividad eléctrica del corazón, un monitor Holter para registrar el ritmo cardíaco durante un período de tiempo prolongado, y un ecocardiograma para evaluar la estructura y función del corazón. En algunos casos, se pueden realizar pruebas adicionales, como una prueba de esfuerzo para evaluar la respuesta del corazón al ejercicio, una prueba de mesa basculante para evaluar la respuesta del sistema nervioso a los cambios 43 posturales, y análisis de sangre para evaluar la función tiroidea o la presencia de ciertas sustancias en la sangre. Una vez que se ha confirmado el diagnóstico de taquiarritmia, el tratamiento dependerá del tipo de taquiarritmia y la gravedad de los síntomas del paciente. 44 DISCUSION Y CONCLUSIONES La taquiarritmia es una afección cardíaca que se caracteriza por latidos cardíacos rápidos e irregulares. Puede ser causada por una variedad de factores, como la enfermedad cardíaca, la ansiedad, el consumo de alcohol o drogas, y puede tener consecuencias graves si no se trata adecuadamente. (Hernández Keerby, 2022) La discusión sobre la taquiarritmia debe centrarse en la importancia del diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado para prevenir complicaciones potencialmente mortales, como el accidente cerebrovascular, el paro cardíaco y la insuficiencia cardíaca. (Hernández Keerby, 2022) En primer lugar, es importante tener en cuenta que los síntomas de la taquiarritmia pueden variar de persona a persona, y algunos pacientes pueden no presentar ningún síntoma en absoluto. Sin embargo, en aquellos que sí presentan síntomas, estos pueden incluir palpitaciones, mareo, falta de aire, sudoración y fatiga. El diagnóstico de la taquiarritmia se basa en una combinación de la historia clínica del paciente, el examen físico y las pruebas diagnósticas, como el electrocardiograma (ECG) y la monitorización Holter. En algunos casos, puede ser necesaria una evaluación cardíaca 45 más exhaustiva, como una prueba de esfuerzo o una ecocardiografía. Una vez que se ha realizado el diagnóstico, el tratamiento de la taquiarritmia puede incluir medidas para controlar los síntomas, como la administración de medicamentos para disminuir la frecuencia cardíaca y reducir la presión arterial. En algunos casos, puede ser necesario realizar un procedimiento médico, como la cardioversión eléctrica o la ablación con catéter, para restaurar el ritmo cardíaco normal. En conclusión, la taquiarritmia es una afección cardíaca común que puede tener consecuencias graves si no se trata adecuadamente. El diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado son fundamentales para prevenir complicaciones potencialmente mortales y mejorar la calidad de vida de los pacientes afectados. 46 REFERENCIAS Agüero Rodríguez Manuel A, C. F. (2008). Comportamiento de la taquiarritmias cardíacas en los Cuidados Progresivos. (AMC, Ed.) Retrieved from http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S102 5-02552008000400006&lng=es Cardiología, R. E. (2012). 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Manual de arritmias cardiacas, guía diagnóstica y terapéutica. 47 Capítulo 4 Crisis Hipertensiva Manuel Alexander Moya Verdezoto Pares evaluadores: Ciencia Latina Revista Científica Multidisciplinar.4 4 Ciencia Latina Revista Científica Multidisciplinar. www.ciencialatina.org 48 RESUMEN La investigación describe las crisis hipertensivas, las cuales son una elevación repentina de la presión arterial por encima de 180/120 mm Hg, lo que puede generar complicaciones en diferentes sistemas del cuerpo. El objetivo del estudio fue analizar los aspectos clínicos de las crisis hipertensivas en pacientes ingresados en el Departamento de urgencias del Hospital. Se llevó a cabo un estudio observacional, descriptivo con componente analítico, de corte transversal y prospectivo en el período de enero a marzo del 2023, con pacientes diagnosticados con crisis hipertensiva. Se estudiaron 60 pacientes, con una edad media de 14-60 años, predominando el sexo masculino en un 52.50%. Los valores más elevados de la presión arterial fueron la sistólica (193,5 ± 15,2 mmHg) y la diferencial (84,5 ± 17,75 mmHg). El motivo de consulta más común fue la dificultad respiratoria (19,28%). La mayoría de los pacientes tenían algún tipo de comorbilidad, siendo el sobrepeso el más común. El tratamiento antihipertensivo era irregular o abandonado en la mayoríade los casos. El tratamiento inicial más común fue la administración de enalaprilato EV (28,58%). Se detectó daño en órganos en la mayoría de los pacientes, siendo el accidente cerebrovascular el más común. Los factores que se asociaron significativamente con el daño en órganos fueron la comorbilidad y el tratamiento irregular o abandonado. Palabras Claves: Presion Arterial, Hipertension, presión sanguínea. 49 ABSTRACT The research describes hypertensive crises, which are sudden elevation of blood pressure above 180/120 mm Hg, and can lead to complications in different systems of the body. The objective of the study was to analyze the clinical aspects of hypertensive crises in patients admitted to the Emergency Department of the Hospital. An observational, descriptive study with an analytical, cross-sectional and prospective component was carried out from January to March 2023, with patients diagnosed with hypertensive crisis. Sixty patients were studied, with a mean age of 14-60 years, and males predominating in 52.50%. The highest values of blood pressure were systolic (193.5 ± 15.2 mmHg) and differential (84.5 ± 17.75 mmHg). The most common reason for consultation was difficulty breathing (19.28%). Most patients had some type of comorbidity, with overweight being the most common. Anti-hypertensive treatment was irregular or abandoned in most cases. The most common initial treatment was administration of intravenous enalapril (28.58%). Organ damage was detected in most patients, with stroke being the most common. Factors that were significantly associated with organ damage were comorbidity and irregular or abandoned treatment. Keywords: Blood pressure, hypertension, blood pressure. 50 INTRODUCCION La crisis Hipertensiva es una de las tres principales causas de daño cardiovascular y accidente cerebrovascular a nivel mundial, junto con el tabaquismo y la dislipemia. Afecta al 30% de la población adulta en Europa y causa aproximadamente 7,5 millones de muertes al año. Según las nuevas pautas de la ACC/AHA, la hipertensión arterial se define como estadio I cuando la presión arterial sistólica (PAS) es ≥ 130 mmHg, y también se considera hipertenso a aquellos con cifras ≥ 80 mmHg de presión arterial diastólica (PAD). En 2015, se estimó que la prevalencia de la hipertensión arterial en el mundo era de 1.130 millones, con una prevalencia de más de 150 millones en Europa central y oriental. Con el envejecimiento de la población, el sedentarismo y el aumento del peso y la obesidad, se espera que la prevalencia de la hipertensión arterial siga aumentando en todo el mundo, llegando a un incremento de aproximadamente el 15-20% para el año 2025, lo que equivale a 1.500 millones de personas. (1) (5) La presión del pulso, que es la diferencia entre la presión arterial sistólica (PAS) y la presión arterial diastólica (PAD), es un parámetro que, junto con la PAS, puede reflejar la rigidez arterial y el deterioro progresivo del endotelio. En pacientes añosos e hipertensos de larga data, cifras más elevadas de PAS y de presión diferencial pueden ser 51 indicadores clínicos de riesgo de daño en órganos diana. La diabetes mellitus tipo 1 o tipo 2 y la enfermedad renal crónica se consideran factores de muy alto riesgo para el desarrollo de enfermedades cardiovasculares en pacientes hipertensos. Las crisis hipertensivas representan más de una cuarta parte de todas las consultas por elevación de la presión arterial y representan un peligro inmediato, con una tasa de aproximadamente entre 1% y 2% de pacientes hipertensos que desarrollan una crisis hipertensiva. Las crisis hipertensivas se definen como una elevación aguda de la PAS o PAD de forma independiente, que puede ser una urgencia hipertensiva o una emergencia hipertensiva, que se asocia a lesión de órgano diana y requiere intervención inmediata. Los daños de órgano blanco asociados a las crisis hipertensivas incluyen la encefalopatía hipertensiva, el síndrome coronario agudo, la hemorragia intracraneal, el edema agudo de pulmón, el ictus isquémico y, en casos menos frecuentes, la disección de aorta, la preeclampsia y la insuficiencia renal aguda. El control subóptimo de la presión arterial está vinculado a un gran número de muertes por enfermedades cardiovasculares en todo el mundo, y se espera que la región de las Américas tenga 20,7 millones de muertes por enfermedad hipertensiva en los próximos 10 años, según la Organización Panamericana de la Salud. Es de vital importancia prestar atención a las emergencias hipertensivas, ya que representan situaciones clínicas mucho más graves y 52 pueden generar complicaciones en diferentes niveles fisiopatológicos. (5) (2) 53 MATERIAL Y METODOS El diseño del estudio fue observacional, descriptivo con un componente analítico y de corte transversal. La población en estudio estuvo compuesta por hombres y mujeres mayores de edad que ingresaron al Departamento de Urgencias del Hospital General IESS Riobamba entre junio y noviembre de 2021 y que cumplieron con los criterios de la investigación, es decir, diagnóstico clínico de crisis hipertensiva (PAS ≥180 mmHg y/o PAD ≥120 mmHg) y hospitalización de al menos 48 horas. El muestreo utilizado fue no probabilístico de tipo intencional. Las variables predictoras incluyeron cifras de presión arterial, presión arterial media, presión arterial diferencial, sexo, edad, comorbilidades y tratamiento ambulatorio previo, mientras que la variable dependiente fue la lesión de órganos blanco. Los datos fueron gestionados mediante una planilla electrónica en Microsoft Excel y procesados con el programa Epi Info 7.2™ para su valoración con estadística descriptiva y analítica. En todos los análisis, se consideraron estadísticamente significativos aquellos resultados con un valor p <0,05. Se estimó una muestra mínima de 60 sujetos a partir de un universo de 120 pacientes, y se respetaron los 54 principios éticos de la Bioética en relación a estudios en humanos. Se mantuvo la confidencialidad de los datos personales y clínicos de los sujetos de la investigación en todo momento. 55 RESULTADOS Se examinaron 60 pacientes que tenían un diagnóstico clínico de crisis hipertensiva. La edad promedio fue de 50 años con una desviación estándar de 14 años (rango de edad entre 25 y 97 años). Los pacientes masculinos predominaron, con 36 pacientes (54,29%). Los valores de la presión arterial sistólica (PAS) y diastólica al momento de ingreso fueron registrados y se notó que la mayoría de los pacientes presentaron valores elevados de PAS con un promedio de 193,5 mmHg, así como valores elevados de presión diastólica con una media de 109,17 mmHg. Además, se observó un aumento significativo en las cifras de presión diferencial (consultar tabla 1). Tabla 1: Valores de presión arterial sistólica, diastólica, media y diferencial en pacientes que presentan crisis hipertensiva. Categoría (mmHg) mínimo (mmHg) máximo (mmHg) Presión arterial sistólica 193,5 ± 15,2 180 260 Presión arterial diastólica 109,17 ± 14,7 63 141 Presión arterial media 137,3 ± 12,4 102 173 Presión diferencial 84,5 ± 17,75 55 153 56 Tabla 2: Razones por las cuales los pacientes con crisis hipertensiva fueron admitidos en la unidad de urgencias del hospital. Motivos de consulta Frecuencia Porcentaje Dificultad respiratoria 15 25% Cefalea 12 20% Dolor osteoarticular 10 17% Alteración de la conciencia 7 12% Dolor de pecho 5 8% Hemiparesia / hemiplejía 5 8% Disartria 2 3% Mareos 2 3% Edema 1 2% Astenia 1 2% Se observó que la mayoría de los pacientes con crisis hipertensiva habían tenido un tratamiento ambulatorio previo para la hipertensión arterial, siendopredominante la irregularidad o el abandono del tratamiento. Tabla 3: Tratamiento inicial terapéutico para pacientes hospitalizados en urgencias que presentan crisis hipertensivas Tratamientos Frecuencia Porcentaje Enalaprilato EV 24 40% Labetalol EV 16 27% Antihipertensivos VO 8 13% Diuréticos EV 5 8% Analgesia EV 4 7% Nitroglicerina EV 3 5% 57 DISCUSION Y CONCLUSIONES La mayoría de los pacientes fueron hospitalizados en el Departamento de Urgencias debido a problemas relacionados directamente con la hipertensión arterial y sus complicaciones, así como también por otras patologías no relacionadas que presentaban simultáneamente una crisis hipertensiva. Se observó una predominancia del sexo masculino en los pacientes estudiados, lo que difiere de otros hallazgos a nivel nacional donde se ha reportado una mayor prevalencia del sexo femenino. La edad promedio de los pacientes con crisis hipertensiva superó los 50 años, lo que coincide con estudios previos. (3) La presión arterial sistólica fue el valor promedio más elevado, mientras que la presión arterial diastólica no presentó valores muy elevados, lo que se reflejó en un pulso diferencial promedio muy elevado. Esto podría indicar rigidez arterial y daño endotelial y aterosclerótico en los pacientes estudiados, lo que ha sido demostrado como un factor predictivo en el desarrollo de complicaciones cardiovasculares en pacientes con hipertensión arterial. Estudios previos en Cuba han encontrado valores promedio menores de presión diferencial en pacientes con daño vascular por rigidez arterial. Se sugiere que futuras investigaciones aborden más ampliamente la rigidez arterial y el daño vascular en pacientes con crisis hipertensivas. (6) 58 Se dispone de diversas pautas y directrices para tratar la hipertensión arterial y las crisis hipertensivas esenciales. Es esencial individualizar el tratamiento en función de la edad, las comorbilidades, la situación social y el riesgo del paciente, además de definir la hipertensión arterial y el tipo de crisis hipertensiva. El manejo de las crisis hipertensivas depende de si se trata de una urgencia o una emergencia, y es importante evaluar qué órgano blanco está afectado para proporcionar un tratamiento específico y personalizado. En este estudio, se observó un mayor uso de enalaprilato EV y medicación analgésica para la mayoría de las urgencias hipertensivas. Sin embargo, muchos pacientes necesitaban una medicación específica para el daño en órganos blancos que presentaban, pero recibían otro tipo de medicación antihipertensiva. Esto podría deberse a la falta de suministro de medicamentos antihipertensivos en nuestro centro hospitalario y las dificultades económicas de los pacientes en estudio, un tema que requiere una investigación más detallada. (7) Otro aspecto importante que se descubrió fue que un gran porcentaje de pacientes no seguían su tratamiento de manera regular o lo habían abandonado, con un 66,43% de los pacientes en este grupo. Esto podría explicarse por la alta tasa de no adherencia al tratamiento, que en nuestro país llega hasta el 59% en pacientes ambulatorios. Otras 59 investigaciones realizadas a nivel nacional muestran un nivel de adherencia del 39,7%, y se han asociado factores como la edad de 50 a 69 años, tener un empleo activo y un menor número de fármacos antihipertensivos con una mayor adherencia al tratamient. Estos hallazgos son importantes para la toma de decisiones en salud pública, y podrían fomentar medidas sanitarias que refuercen la atención primaria en salud y el manejo ambulatorio de pacientes con enfermedades crónicas controlables como la hipertensión. (8) Los pacientes incluidos en el estudio predominantemente tenían más de 60 años y fueron principalmente hombres. Se registraron niveles elevados de presión arterial, especialmente en la presión arterial sistólica y la diferencia de presión arterial. Se identificó que más de la mitad de los casos de crisis hipertensivas fueron emergencias hipertensivas, y el accidente cerebrovascular fue la complicación más común. Las comorbilidades más frecuentes fueron sobrepeso, diabetes mellitus tipo 2 y enfermedad renal crónica, y el sobrepeso y la enfermedad renal crónica fueron factores de riesgo significativos para el daño de órgano blanco. La mayoría de los pacientes (más del 50%) presentaron tratamiento irregular o abandono, lo que también fue un factor de riesgo estadísticamente significativo para el daño de órgano blanco. (9) 60 REFERENCIAS AD, E. B. (2018). Hipertensión arterial: cifras para definirla al comenzar 2018. Finlay. Retrieved from https://revfinlay.sld.cu/index.php/finlay/article/view/594 Albaladejo Blanco C, S. M. (2014). Crisis hipertensivas:Seudocri-sis, urgencias y emergencias. 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ESC/ESH guidelines for the management of arterial hypertension. Eur Heart J. doi:https://doi.org/10.1093/eurheartj/ehy339 62 .Capítulo 5 Dolor Toracio Agudo Jóse Rolando Castro Pomaquiza Pares evaluadores: Ciencia Latina Revista Científica Multidisciplinar.5 5 Ciencia Latina Revista Científica Multidisciplinar. www.ciencialatina.org 63 RESUMEN El dolor repentino en el pecho es uno de los motivos más comunes de consulta en servicios de emergencia. Aunque los síndromes coronarios agudos son una de las causas más importantes, hay varias otras afecciones graves que también pueden causar dolor en el pecho. En esta revisión, se describen las características clínicas que ayudan a distinguir entre estas diferentes afecciones, así como sus características electrocardiográficas y radiológicas. También se mencionan los biomarcadores que son importantes para detectar daño en el corazón debido a su alta precisión y sensibilidad. Además, esta revisión también aborda temas como la conmoción cardíaca y el traumatismo torácico cerrado, que generalmente se omiten en otras revisiones similares. Finalmente, se discuten temas relacionados con las pruebas de provocación de isquemia con y sin imágenes y la tomografía computarizada de las arterias coronarias para evaluar pacientes con este síndrome. Palabras Claves: Dolor torácico, troponina, prueba de esfuerzo 64 ABSTRACT Sudden chest pain is one of the most common reasons for emergency department visits. Although acute coronary syndromes are one of the most important causes, there are several other serious conditions that can also cause chest pain. This review describes the clinical characteristics that help distinguish between these different conditions, as well as their electrocardiographic and radiological features. It also mentions biomarkers that are important for detecting heart damage due totheir high precision and sensitivity. In addition, this review also addresses topics such as commotio cordis and closed chest trauma, which are typically omitted in other similar reviews. Finally, it discusses issues related to ischemia provocation tests with and without imaging, and computed tomography of the coronary arteries to evaluate patients with this syndrome. Keywords: Chest pain, troponin, stress test. 65 INTRODUCCION El dolor agudo en el pecho es una de las razones más comunes para acudir a servicios de urgencias en todo el mundo. La principal preocupación en estos casos es que pueda ser causado por un síndrome coronario agudo, aunque sólo el 15-25% de los pacientes que acuden por este síntoma tienen finalmente un síndrome coronario agudo después de una evaluación clínica y de laboratorio adecuada. Es importante mejorar los protocolos de evaluación para minimizar el número de casos en los que se da de alta a pacientes con un síndrome coronario agudo en evolución. Otras causas potencialmente mortales de dolor torácico agudo de origen cardiovascular son la embolia pulmonar y la disección aórtica. La causa más frecuente de dolor torácico agudo que pone en riesgo la vida es la isquemia miocárdica o el infarto agudo de miocardio, que se produce cuando hay un desequilibrio entre el suministro de oxígeno al miocardio y sus necesidades metabólicas. Los síntomas más comunes son dolor en el pecho, disnea y, en algunos pacientes, dolor que se irradia a otras partes del cuerpo. En algunos subgrupos de pacientes, como mujeres, ancianos y diabéticos, los síntomas pueden ser atípicos. Es importante considerar la posibilidad de consumo de drogas ilícitas, especialmente cocaína, en personas jóvenes con dolor torácico. (Cava JR, 2004) (CH, 2003) 66 MATERIAL Y METODOS Cuando un médico evalúa a un paciente con dolor torácico agudo, es prioritario responder tres preguntas antes de intentar formular un diagnóstico preciso: 1) ¿requiere el paciente medidas terapéuticas inmediatas debido a que se encuentra en shock o en insuficiencia respiratoria aguda? Además de la anamnesis y el examen físico, es necesario realizar un electrocardiograma, una radiografía de tórax y obtener marcadores séricos de daño miocárdico. El electrocardiograma proporciona información diagnóstica y pronóstica, pero es importante integrar la información con datos de la anamnesis y el examen físico, así como obtener electrocardiogramas seriados y muestras sanguíneas para marcadores de necrosis miocárdica. Un electrocardiograma con elevación difusa del segmento ST sugiere pericarditis aguda, mientras que un electrocardiograma que muestra desviación del eje eléctrico de los complejos QRS hacia la derecha y T negativa en las derivaciones precordiales derechas es sugestivo de embolia pulmonar. En pacientes con infarto agudo del miocardio de pared inferior, es útil obtener derivaciones precordiales derechas para evaluar el compromiso eventual del ventrículo derecho. La radiografía de tórax es generalmente normal en los pacientes con sospecha de síndrome coronario agudo, pero en algunos casos puede mostrar signos de edema pulmonar o revelar un 67 mediastino más ancho que lo habitual, lo que puede ayudar a plantear la posibilidad de una disección aórtica. (GE, 1985) En pacientes que se sospecha que tienen un síndrome coronario agudo, se deben medir biomarcadores de daño miocárdico en la sangre. La troponina (I o T) es la preferida debido a su mayor sensibilidad y especificidad en comparación con la creatina cinasa fracción MB. Las troponinas pueden detectar daño miocárdico en muestras seriadas tomadas hasta 12 horas después del inicio de los síntomas. La especificidad de las troponinas se debe a que son proteínas codificadas por genes exclusivos del músculo cardíaco. Si no se dispone de troponinas, la CK-MB es una alternativa aceptable, ya que su vida media más corta permite la detección de un eventual reinfarto. (Alpert MA, 1991) Los pacientes considerados de bajo riesgo de síndrome coronario agudo y con baja probabilidad de presentar complicaciones graves pueden ser observados en unidades de dolor torácico por 6 a 12 horas. Estas unidades cuentan con desfibriladores, monitorización electrocardiográfica continua y la capacidad de obtener muestras seriadas de biomarcadores de daño miocárdico. Aquellos pacientes que desarrollen síntomas o signos de isquemia o elevación de troponinas o CK-MB durante este período de observación deben ser trasladados a la unidad coronaria del hospital. Los pacientes que evolucionan sin incidentes pueden ser 68 sometidos a una prueba de esfuerzo convencional o a otra prueba de provocación de isquemia antes del alta. En algunos casos, puede ser seguro dar de alta al paciente y efectuar ambulatoriamente la prueba de esfuerzo. Si se decide optar por esta última estrategia, el test de esfuerzo debiera ser realizado no más allá de 72 horas después del alta. Es razonable indicar ácido acetilsalicílico (100 mg/día) y nitroglicerina sublingual, pero el autor no recomienda el uso rutinario de bloqueadores beta en este subgrupo, ya que puede disminuir significativamente la sensibilidad diagnóstica de la prueba de esfuerzo. (MK, 2008) 69 RESULTADOS PRUEBA DE ESFUERZO Una opción de diagnóstico no invasiva temprana es la prueba de esfuerzo, que puede llevarse a cabo en pacientes con bajo riesgo de síndrome coronario agudo entre 6 y 12 horas después de su ingreso al hospital o unidad de dolor torácico. La prueba de esfuerzo convencional tiene la ventaja de ser relativamente económica y ampliamente disponible, y diversos estudios han demostrado su seguridad y alto valor predictivo negativo para eventos adversos posteriores si es normal. Para que sea segura y efectiva, el paciente debe estar libre de dolor en el momento de la prueba, o si lo experimenta, debe ser atípico. Los electrocardiogramas de 12 derivaciones tomados antes y durante la prueba no deben mostrar isquemia ni alteraciones basales de ST que puedan dificultar la interpretación, y los biomarcadores de daño miocárdico deben ser negativos. Pruebas de Provocación de Isquemia con Imágenes Dentro de estas opciones se encuentran el ecocardiograma de estrés y el cintigrama miocárdico SPECT. Las razones principales para realizar estas pruebas son pacientes que no pueden hacer ejercicio o que presentan alteraciones en sus electrocardiogramas en reposo que dificultan la interpretación de la prueba de esfuerzo. Otra razón es que el médico puede buscar una mayor sensibilidad y precisión en 70 el diagnóstico, ya que tanto el ecocardiograma de estrés como el cintigrama pueden medir la cantidad de isquemia y su ubicación en el ventrículo izquierdo. Una desventaja de estas pruebas es su mayor costo y menor disponibilidad en distintos centros médicos. Cintigrama miocárdica con inyección del trazador en reposo (durante los síntomas) Una estrategia útil para determinar si los síntomas son causados por isquemia es la inyección de un isótopo radiactivo (99mTecnecio – sestamibi) en reposo mientras el paciente experimenta los síntomas en el servicio de urgencia. Esta prueba tiene mayor sensibilidad si se realiza durante el dolor y las imágenes en la gamacámara SPECT se obtienen incluso hasta 2 o 4 horas después de la resolución de los síntomas. La ecocardiografía en reposo, durante los síntomas o poco después de la resolución de estos, también es valiosa ya que puede mostrar trastornos de la motilidad segmentaria del ventrículo izquierdo que respalden el diagnóstico de isquemia miocárdica. Ambas pruebas pueden arrojar resultados falsos negativos si la región isquémica es pequeña y limitada solo al subendocardio. Sin embargo, estas pruebas tienen limitaciones en cuanto a sucosto y disponibilidad. 71 Tomografía computada cardíaca La tomografía computada cardíaca es una técnica que, a diferencia de las pruebas de imágenes funcionales mencionadas anteriormente, proporciona información anatómica de los vasos coronarios mediante el uso de escáneres con múltiples filas de detectores (normalmente entre 64 y 128). Su valor predictivo negativo para descartar un síndrome coronario agudo es muy alto, lo que la hace útil en pacientes con una probabilidad baja a intermedia de padecer esta afección, ya que ayuda a descartar el diagnóstico. Sin embargo, su valor predictivo positivo no es óptimo, por lo que su uso en pacientes con una probabilidad más alta puede llevar a un mayor número de coronariografías e intervenciones coronarias percutáneas que cuando se utiliza otro método diagnóstico. Es importante tener precaución en su uso en mujeres jóvenes debido a la dosis de radiación que implica y que se enfoca en gran medida en el tejido mamario, lo que teóricamente puede aumentar el riesgo de desarrollar neoplasias malignas en este órgano. Además, se utiliza medio de contraste yodado, por lo que es necesario revisar la función renal y los antecedentes de alergias antes de su utilización. En resumen, la tomografía computada cardíaca es una técnica de gran utilidad en pacientes bien seleccionados, pero se deben tener en cuenta sus posibles riesgos y precauciones en su uso. 72 DISCUSION Y CONCLUSIONES El dolor torácico agudo es un síntoma común y potencialmente grave, que requiere una evaluación clínica exhaustiva para determinar su etiología. La evaluación inicial del dolor torácico debe incluir una historia clínica completa, examen físico y pruebas diagnósticas apropiadas. Los estudios de imágenes, como el electrocardiograma, la ecocardiografía de estrés, el cintigrama miocárdico SPECT y la tomografía computarizada cardíaca, son útiles en la evaluación de pacientes con dolor torácico agudo. El electrocardiograma sigue siendo la prueba diagnóstica inicial de elección en la evaluación de pacientes con dolor torácico agudo debido a la sospecha de síndrome coronario agudo. La ecocardiografía de estrés y el cintigrama miocárdico SPECT son opciones útiles para pacientes incapaces de ejercitarse o con alteraciones basales en sus electrocardiogramas de reposo que harán incierta la interpretación del electrocardiograma de esfuerzo. También son útiles si el clínico desea una mayor sensibilidad y precisión diagnóstica. (Ferrés i Serrat F, 2008) La tomografía computarizada cardíaca proporciona información anatómica de los vasos coronarios y tiene un valor predictivo negativo muy elevado para excluir un síndrome coronario agudo, lo que la hace útil en el subgrupo 73 de pacientes con probabilidad baja a intermedia de síndrome coronario agudo, en que el clínico no espera un resultado positivo. En resumen, la evaluación y el manejo del dolor torácico agudo son complejos y requieren una evaluación clínica exhaustiva, incluyendo una historia clínica completa, examen físico y pruebas diagnósticas apropiadas. Los estudios de imágenes pueden ser útiles en la evaluación de pacientes con dolor torácico agudo, y cada prueba debe ser seleccionada y realizada de acuerdo con la evaluación clínica y la probabilidad pretest de enfermedad coronaria. 74 REFERENCIAS Alpert MA, M. V. (1991). Mitral valve prolapse, panic disorder, and chest pain. Med Clin N Am. doi:10.1016/s0025-7125(16)30402-3 Cava JR, S. P. (2004). Chest pain in children and adolescents. Pediatr Clin N Am. doi:10.1016/j.pcl.2004.07.002 CH, G. (2003). Precordial catch syndrome. South Med J. doi:10.1097/00007611-200301000-00011 Ferrés i Serrat F, G. A. (2008). Dolor torácico. Protocolos de Urgencias de la Asociación Española de Pediatría. Retrieved from http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S11 39-76322010000100011&lng=es. GE, P. (1985). Slipping rib syndrome: an infrequently recognized entity in children: a report of three cases and review of the literature. Retrieved from https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/4058991/ MK, P. (2008). Child with chest pain. Elsevier Health Science. 75 CONTRAPORTADA
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