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9 789995 367060 ISBN 978-99953-67-06-0 El libRo azul dE la psiquiatRía El libRo azul dE la psiquiatRía ANDRÉS ARCE RAMÍREZ & JULIO TORALES BENÍTEZ EFACIM 2012 Arce Ramírez A, Torales Benítez J. (Eds). El libro azul de la Psiquiatría. 1a ed. EFACIM. Asunción, 2012: 286 p. ISBN 978-99953-67-06-0 Editorial EFACIM Dr. José P. Montero esq. Dr. Mario Mazzei Telefax: (+595 21) 420 187 Correo electrónico: efacim@med.una.py Website: www.med.una.py Asunción – Paraguay Dirección Editorial: Prof. Dr. Nelson Apuril Céspedes Universidad Nacional de Asunción Facultad de Ciencias Médicas Cátedra y Servicio de Psiquiatría Cátedra de Psicología Médica Dr. Luis Garcete esquina Dr. Paiva Teléfono: (+595 21) 420 982 Interno: 208 Asunción – Paraguay Diseño editorial: Horacio Oteiza Impreso en Imprenta Salesiana Tirada: 500 ejemplares Queda prohibida la reproducción total o parcial de esta publicación, por cualquier medio o procedimiento, sin para ello contar con la autorización previa, expresa y por escrito de los editores. Acerca del nombre de este libro Elegimos nombrar a esta obra el “Libro Azul de la Psiquiatría” debido a que este color se asocia tradicionalmente a la libertad. Es esa libertad, enar- bolada por primera vez por el médico psiquiatra francés Philippe Pinel (1745-1826), quien liberó a los pacientes con trastornos psiquiátricos de las cadenas que los aprisionaban en el Hospital Salpêtrière de París, la misma que propugnamos y por la cual luchamos. Ayer fueron las cadenas que enlazaban cuerpos, hoy son las cadenas que siguen enlazando mentes. El médico psiquiatra francés Philippe Pinel (1745-1826) liberando pacientes de las cadenas que los apri- sionaban en el Hospital Salpêtrière de París en 1795. Reproducción de la obra original del artista Tony Robert-Fleury (1838-1912). Advertencia sobre el uso de este libro Este material está dirigido a estudiantes de medicina y médicos generales, y persigue la meta de ayudar en la evaluación diagnóstica de los problemas de salud mental, brindando herramientas para llevar adelante interven- ciones terapéuticas accesibles para profesionales médicos en general, sin soslayar y haciendo hincapié en la importancia de derivar oportuna y ade- cuadamente los casos a consideración del médico psiquiatra. En los capítulos destinados a los diferentes trastornos que se observan en la práctica de la psiquiatría, se mencionan los criterios diagnósticos pro- puestos en el texto revisado del Manual diagnóstico y estadístico de los tras- tornos mentales de la Asociación Americana de Psiquiatría (DSM-IV-TR), sin embargo, es necesario precisar que en organismos oficiales se utilizan los criterios diagnósticos de la décima edición de la Clasificación Interna- cional de Enfermedades de la Organización Mundial de la Salud. Los edito- res y autores recomiendan tener presentes los criterios de ambos manuales operativos en la práctica clínica. EDITORES Y AUTORES Prof. Dr. Andrés ARCE RAMÍREZ • Profesor Titular y Jefe de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría • Profesor Titular y Jefe de la Cátedra de Psicología Médica • Director del Postgrado de Especialización en Psiquiatría Clínica • Miembro Docente Titular del Honorable Consejo Directivo (periodo 2008-2010) Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Profesor de la Cátedra de Psicopatología Carrera de Psicología, Universidad Católica “Nuestra Señora de la Asunción” (hasta 1989) • Profesor de la Cátedra de Psicopatología • Profesor de la Cátedra de Psicoterapia Facultad de Filosofía, Universidad Nacional de Asunción (hasta 2003) • Profesor de la Cátedra de Psicopatología • Profesor de la Cátedra de Psicoterapia Carrera de Psicología Clínica, Universidad Americana (hasta 2004) • Co-director del Postgrado de Especialización en Psiquiatría y Psicología Clínica de la Infancia y la Adolescencia Asociación Psiquiátrica de América Latina, Sociedad Paraguaya de Psiquiatría y Univer- sidad Nacional de Villarrica del Espíritu Santo • Coordinador de la Unidad de Desintoxicación Programada para niños y adolescentes Centro Nacional de Control de Adicciones, Ministerio de Salud Pública y Bienestar So- cial • Ex Presidente y actual Secretario de Actividades Académicas de la Comisión Directiva Sociedad Paraguaya de Psiquiatría • Presidente del Capítulo de Psiquiatría de la Infancia y la Adolescencia Sociedad Paraguaya de Psiquiatría • Autor del libro: Normas Generales para personas usuarias de Salud Mental, sus familiares y cuidadores (2012) Editado por la Editorial de la Facultad de Ciencias Médicas (EFACIM) Dr. Julio TORALES BENÍTEZ • Mejor Egresado y Medalla de Oro, carrera de Medicina y Cirugía, Promoción 2005 • Jefe de Admisión y Guardia de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría • Jefe de Trabajos Prácticos de la Cátedra de Psicología Médica • Secretario Académico del Postgrado de Especialización en Psiquiatría Clínica • Médico encargado de Psicodermatología, Cátedra y Servicio de Dermatología (ad ho- norem) • Jefe de la Unidad de Derechos Humanos, dependiente del Honorable Consejo Direc- tivo (ad honorem) Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Encargado de Cátedra, Cátedra de Metodología de la Investigación • Auxiliar de la Enseñanza de la Cátedra de Psicología, Psicopatología y Psicomotricidad Escuela de Kinesiología y Fisioterapia, Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Na- cional de Asunción • Profesor Encargado de la Cátedra de Salud Mental I Facultad de Psicología, Universidad Columbia del Paraguay (hasta 2012) • Médico Psiquiatra Oficina de Servicio Técnico Forense, Corte Suprema de Justicia • Jefe del Servicio de Psiquiatría Hospital Regional de San Juan Bautista, Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social • Miembro correspondiente extranjero European Society for Dermatology and Psychiatry • Presidente del Capítulo de “Psiquiatría y Derechos Humanos” Sociedad Paraguaya de Psiquiatría • Miembro del Equipo Técnico de redacción de la Política Nacional de Salud Mental 2011-2020 Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social • Autor del libro: Normas Generales para personas usuarias de Salud Mental, sus familiares y cuidadores (2012) Editado por la Editorial de la Facultad de Ciencias Médicas (EFACIM) AUTORES DE CAPÍTULOS (en orden alfabético) Dr. Mauricio ACOSTA NÚÑEZ • Médico Residente de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción Dr. Víctor ADORNO QUEVEDO • Auxiliar de la Enseñanza, Cátedra y Servicio de Psiquiatría • Auxiliar de la Enseñanza, Cátedra de Farmacología Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Instructor de la Cátedra de Psiquiatría Facultad de Medicina, Universidad Católica “Nuestra Señora de la Asunción” • Jefe de Admisión y Guardia • Jefe de Sala de Corta Estancia Hospital Neuropsiquiátrico, Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social Dr. José Andrés BOGADO • Auxiliar de la Enseñanza, Cátedra y Servicio de Psiquiatría • Ex Jefe de Sala de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría (hasta 2012) Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Médico del Departamento de Planificación y Proyectos Hospital Neuropsiquiátrico, Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social • Vocal Titular de la Comisión Directiva Sociedad Paraguaya de Psiquiatría • Autor del libro: Normas Generales para personas usuarias de Salud Mental, sus familiares y cuidadores (2012) Editado por la Editorial de la Facultad de Ciencias Médicas (EFACIM) Prof. Dr. José BRÍTEZ CANTERO • Profesor Adjunto de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría • Profesor Adjunto de la Cátedra de Psicología Médica • Coordinador Académico del Postgrado de Especialización en Psiquiatría Clínica Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Profesor Asistente de la Cátedra de Modelos Integrados en Psicoterapia Carrerade Psicología, Universidad Católica “Nuestra Señora de la Asunción” • Director Académico del Postgrado de Especialización en Terapia Cognitivo Conductual Sociedad Paraguaya de Psiquiatría y Universidad Nacional de Villarrica del Espíritu San- to • Ex Presidente de la Comisión Directiva y actual Presidente del Capítulo de “Psicote- rapias” Sociedad Paraguaya de Psiquiatría • Autor del libro: Pajé, síndrome cultural del Paraguay (1998) Editado por la Editorial de la Universidad Nacional de Asunción (EDUNA) y la Editorial de la Facultad de Ciencias Médicas (EFACIM) Dra. Cecilia CANIZA GARDEL • Médica Residente de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción Dr. Marcos Hernán CAPURRO • Médico Residente de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría • Ayudante de Trabajos Prácticos de la Cátedra de Psicología Médica Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Ayudante de la Cátedra de Metodología de la Investigación • Docente del Curso Teórico-Práctico de Actualización en Metodología de la Investigación Escuela de Kinesiología y Fisioterapia, Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Na- cional de Asunción Dra. María Emilia CHÁVEZ • Médica Residente de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Ayudante de la Cátedra de Metodología de la Investigación • Docente del Curso Teórico-Práctico de Actualización en Metodología de la Investigación Escuela de Kinesiología y Fisioterapia, Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Na- cional de Asunción Dr. Miguel CUELLAR HOPPE • Auxiliar de la Enseñanza, Cátedra de Psicología Médica Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Miembro Titular del Colegio Electoral Sociedad Paraguaya de Psiquiatría Dra. Paloma FERNÁNDEZ DE LOS RÍOS • Médica Residente de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción Dr. Fabrizio De Giacomi Zaldivar • Médico Residente de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción Prof. Dr. Néstor GIRALA SALOMÓN • Profesor Adjunto de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría • Docente del Postgrado de Especialización en Psiquiatría Clínica Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Ex Director General Hospital Neuropsiquiátrico, Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social Dr. Pedro LÓPEZ OLMEDO • Auxiliar de la Enseñanza, Cátedra de Psicología Médica Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Profesor Asistente de la Cátedra de Psicología y Psiquiatría Facultad de Medicina, Universidad Nacional de Caaguazú • Instructor de la Cátedra de Psiquiatría Facultad de Medicina, Universidad Católica “Nuestra Señora de la Asunción” • Instructor de la Cátedra de Psiquiatría Facultad de Medicina, Universidad de la Integración de las Américas (UNIDA) • Instructor de la Cátedra de Psiquiatría y Psiquiatría Facultad de Medicina, Universidad Privada del Este (UPE) • Médico de guardia Centro Nacional de Control de Adicciones, Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social • Médico de la Unidad Móvil de Salud Mental Dirección de Salud Mental, Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social Dra. Alicia MEDINA PEREIRA • Auxiliar de la Enseñanza, Cátedra de Psicología Médica Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Profesora Encargada de la Cátedra de Psicopatología I y II Facultad de Psicología, Universidad Columbia del Paraguay (hasta 2011) • Instructora de la Cátedra de Psiquiatría Facultad de Medicina, Universidad de la Integración de las Américas (UNIDA) (hasta 2012) • Médica de guardia Hospital Neuropsiquiátrico, Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social • Médica de la Unidad Móvil de Salud Mental Dirección de Salud Mental, Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social Dra. Nélida MINCK BENÍTEZ • Médica Residente de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Ayudante de la Cátedra de Metodología de la Investigación • Docente del Curso Teórico-Práctico de Actualización en Metodología de la Investigación Escuela de Kinesiología y Fisioterapia, Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Na- cional de Asunción Prof. Dr. Martín María MORENO • Profesor Adjunto de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría • Profesor Asistente de la Cátedra de Psicología Médica • Docente del Postgrado de Especialización en Psiquiatría Clínica Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Profesor Adjunto de la Cátedra de Trastornos Psicosomáticos Facultad de Filosofía, Universidad Nacional de Asunción • Docente de la Cátedra de Entrevista Clínica Carrera de Psicología, Universidad Católica “Nuestra Señora de la Asunción” • Coordinador de Hogares Sustitutos Dirección de Salud Mental, Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social • Ex coordinador del Área de Rehabilitación Hospital Neuropsiquiátrico, Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social • Vicepresidente de la Comisión Directiva Sociedad Paraguaya de Psiquiatría • Miembro del Equipo Técnico de redacción de la Política Nacional de Salud Mental 2011-2020 Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social • Autor del libro: Experiencias compartidas con los saberes de la comunidad María Auxilia- dora Guazú frente a la tragedia del incendio del Supermercado Ycuá Bolaños de Trinidad (2005) Auspiciado por la Universidad Católica “Nuestra Señora de la Asunción” • Autor del libro: Tavyrai rendá (2007) Editado por la Editorial Servilibro • Autor del libro: Normas Generales para personas usuarias de Salud Mental, sus familiares y cuidadores (2012) Editado por la Editorial de la Facultad de Ciencias Médicas (EFACIM) Dra. María Bettina ORTIZ • Auxiliar de la Enseñanza, Cátedra de Psicología Médica Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Instructora de la Cátedra de Psiquiatría Facultad de Medicina, Universidad del Pacífico • Instructora de la Cátedra de Psiquiatría Facultad de Medicina, Universidad de la Integración de las Américas (UNIDA) • Instructora de la Cátedra de Psiquiatría y Psicología Facultad de Medicina, Universidad Privada del Este (UPE) • Médica de guardia Hospital Neuropsiquiátrico, Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social • Médica del Centro de Psiquiatría y Psicoterapia Instituto de Previsión Social Dra. Claudia Analía PARODI • Auxiliar de la Enseñanza, Cátedra de Psicología Médica Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Instructora de la Cátedra de Psiquiatría Facultad de Medicina, Universidad Católica “Nuestra Señora de la Asunción” • Instructora de la Cátedra de Psiquiatría Facultad de Medicina, Universidad de la Integración de las Américas (UNIDA) • Profesora Encargada de la Cátedra de Neuropsicología I • Profesora Encargada de la Cátedra de Neuropsicología II • Profesora Encargada de la Cátedra de Psicobiología Carrera de Psicología Clínica y Empresarial, Universidad del Cono Sur de las Américas (UCSA) (hasta 2011) • Médica del Centro de Psiquiatría y Psicoterapia Instituto de Previsión Social Dra. Susana RECALDE BERNI • Médica Residente de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Ayudante de la Cátedra de Metodología de la Investigación • Docente del Curso Teórico-Práctico de Actualización en Metodología de la Investigación Escuela de Kinesiología y Fisioterapia, Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Na- cional de Asunción • Instructora de la Cátedra de Psiquiatría y Psicología Facultad de Medicina, Universidad Privada del Este (UPE) Dra. Viviana RIEGO MEYER • Jefa de Médicos Residentes de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría • Auxiliar de la Enseñanza, Cátedra y Servicio de PsiquiatríaFacultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Profesora Encargada de la Cátedra de Psicopatología II • Profesora Encargada de la Cátedra de Neuropsicología Facultad de Psicología, Universidad Columbia del Paraguay (hasta 2010) • Profesora Encargada de la Cátedra de Psicopatología I • Profesora Encargada de la Cátedra de Psicopatología II Carrera de Psicología, Universidad Americana (hasta 2011) • Instructora de la Cátedra de Psiquiatría • Facultad de Medicina, Universidad Católica “Nuestra Señora de la Asunción” (hasta 2011) • Instructora de la Cátedra de Psiquiatría y Psicología Facultad de Medicina, Universidad Privada del Este (UPE) (hasta 2011) • Secretaria Académica del Postgrado de Especialización en Psiquiatría y Psicología Clí- nica de la Infancia y la Adolescencia Asociación Psiquiátrica de América Latina, Sociedad Paraguaya de Psiquiatría y Univer- sidad Nacional de Villarrica del Espíritu Santo • Presidenta del Capítulo de “Jóvenes Psiquiatras y Psiquiatras en Formación” Sociedad Paraguaya de Psiquiatría Dr. Hugo RODRÍGUEZ MARÍN • Jefe de Sala de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría • Auxiliar de la Enseñanza, Cátedra de Psicología Médica • Docente del Postgrado de Especialización en Psiquiatría Clínica Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Instructor de la Cátedra de Psiquiatría Facultad de Medicina, Universidad Católica “Nuestra Señora de la Asunción” • Médico de la Unidad de Salud Mental del Hospital Materno-Infantil San Pablo Dirección de Salud Mental, Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social • Miembro Titular del Colegio Electoral Sociedad Paraguaya de Psiquiatría • Autor del libro: Normas Generales para personas usuarias de Salud Mental, sus familiares y cuidadores (2012) Editado por la Editorial de la Facultad de Ciencias Médicas (EFACIM) Dra. Jazmín RODRÍGUEZ ZARZA • Médica Residente de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción Dra. Claudia VALENZUELA HERMOSA • Médica Residente de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción • Instructora de la Cátedra de Psiquiatría y Psicología Facultad de Medicina, Universidad Privada del Este (UPE) • Médica de guardia y consultorio externo Centro Nacional de Control de Adicciones, Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social ÍNDICE PRÓLOGO 32 Prof. Dr. Rodrigo Chamorro Oschilewsky INTRODUCCIÓN 34 Prof. Dr. Andrés Arce Ramírez & Dr. Julio Torales Benítez CAPÍTULO 1 • SEMIOLOGÍA PSIQUIÁTRICA 39 Prof. Dr. Martín María Moreno, Dra. Alicia Medina Pereira, Mauricio Acosta Núñez, Dra. Cecilia Caniza Gardel & Dr. Marcos Hernán Capurro Historia clínica psiquiátrica 39 Anamnesis 39 Examen psíquico 41 Funcionalidad previa 41 Exploraciones complementarias 41 Diagnóstico multiaxial 41 Plan terapéutico 42 Consideraciones generales de la entrevista clínica 42 Exploración psicopatológica 44 Hábito externo 45 Actitud 46 Conciencia 46 Orientación 47 Psicomotricidad 47 Atención 48 Memoria 48 Sensopercepción 50 Estado de ánimo y afecto 50 Lenguaje 51 Pensamiento 52 Juicio e introspección 54 CAPÍTULO 2 • INTRODUCCIÓN A LA PSICOFARMACOLOGÍA 57 Prof. Dr. Néstor Girala Salomón, Dr. Julio Torales Benítez, Dr. José Andrés Bogado, Dra. María Bettina Ortiz & Dr. Marcos Hernán Capurro Antidepresivos 57 Mecanismo de acción 57 Antidepresivos Tricíclicos (ATC) 58 Inhibidores Selectivos de Recaptación de Serotonina (ISRS) 59 Inhibidores de Recaptación de Serotonina y Noradrenalina (IRSNS) 60 Otros Antidepresivos 60 Antipsicóticos 62 Antipsicóticos típicos (de primera generación) 62 Antipsicóticos atípicos (de segunda generación) 63 Efectos adversos de los antipsicóticos: generalidades 65 Efectos adversos de los antipsicóticos: extrapiramidalismo 66 Efectos adversos de los antipsicóticos: anticolinérgicos 67 Efectos adversos de los antipsicóticos: antiadrenérgicos 67 Efectos adversos de los antipsicóticos: antihistamínicos 67 Efectos adversos de los antipsicóticos: idiosincráticos 67 Antipsicóticos de depósito 67 Estabilizantes del ánimo 69 Litio 69 Valproato / ácido valproico 70 Carbamazepina 70 Lamotrigina 71 Benzodiazepinas 71 Antidemenciales 74 Inhibidores de colinesterasa 74 Antagonistas NMDA 75 CAPÍTULO 3 • TRASTORNOS COGNITIVOS Y ORGÁNICOS. 79 Dr. Julio Torales Benítez, Dr. Víctor Adorno Quevedo & Dra. Claudia Analía Parodi Delirium y demencia 79 Delirium 79 Concepto 79 Epidemiología 79 Etiología 80 Fisiopatología 80 Cuadro clínico 81 Diagnóstico 82 Diagnóstico diferencial 82 Tratamiento 83 Demencia 84 Concepto 84 Epidemiología 85 Enfermedad de Alzheimer (EA) 86 Demencia fronto temporal y enfermedad de Pick 94 Demencia vascular 94 Demencia con cuerpos de Lewy 95 CAPÍTULO 4 • TRASTORNOS RELACIONADOS CON SUSTANCIAS 97 Prof. Dr. Andrés Arce Ramírez, Dr. Víctor Adorno Quevedo, Dr. Fabrizio De Giacomi Zaldivar & Dra. Nélida Minck Benítez Introducción 97 Conceptos básicos 97 Etiología 99 Factores psicodinámicos 99 Teorías conductistas 100 Factores genéticos 100 Factores Neuroquímicos 100 Epidemiología 101 Clasificación 101 Depresores, sedantes y analgésicos 102 Alucinógenos 102 Estimulantes 102 Diagnóstico 103 Tratamiento 104 Primer tiempo 104 Segundo tiempo 104 Tercer tiempo 104 Cuarto tiempo 104 CAPÍTULO 5 • ESQUIZOFRENIA Y OTROS TRASTORNOS PSICÓTICOS 107 Dr. Julio Torales Benítez, Dr. Hugo Rodríguez Marín, Dr. Pedro López Olmedo & Dra. Susana Recalde Berni Esquizofrenia 107 Concepto 107 Etiología 107 Epidemiología 109 Diagnóstico 109 Manifestaciones clínicas 109 Diagnóstico diferencial 112 Tratamiento 112 Trastorno esquizofreniforme 114 Concepto 114 Etiología 114 Epidemiología 115 Diagnóstico 115 Diagnóstico diferencial 116 Tratamiento 116 Trastorno esquizoafectivo 116 Concepto 116 Etiología 116 Epidemiologia 117 Diagnóstico 117 Diagnóstico diferencial 118 Tratamiento 118 Trastorno delirante 119 Concepto 119 Etiología 120 Epidemiologia 120 Diagnóstico 120 Diagnóstico diferencial 122 Tratamiento 122 Trastorno psicótico breve 122 Concepto 122 Etiología 123 Epidemiología 123 Diagnóstico 123 Diagnóstico diferencial 124 Tratamiento 125 CAPÍTULO 6 • TRASTORNOS DEL ESTADO DE ÁNIMO 129 Prof. Dr. Andrés Arce Ramírez, Dr. Julio Torales Benítez, Dra. Viviana Riego Meyer & Dra. Jazmín Rodríguez Zarza Trastorno depresivo mayor 129 Etiopatogenia 129 Epidemiología 130 Clínica 130 Evolución y Pronóstico 133 Diagnóstico 133 Diagnóstico diferencial 136 Comorbilidad 136 Tratamiento 136 Psicoterapia 138 Valoración del riesgo 138 Trastorno bipolar 139 Etiopatogenia 139 Epidemiología 139 Cuadro Clínico 140 Diagnóstico 143 Diagnóstico diferencial 144 Tratamiento 144 CAPÍTULO 7 • TRASTORNOS DE ANSIEDAD 149 Prof. Dr. Andrés Arce Ramírez, Dr. Julio Torales Benítez, Dr. Miguel Cuellar Hoppe, Dra María Bettina Ortiz & Dra. Nélida Minck Benítez Introducción 149 Concepto 149 Epidemiología 150 Etiopatogenia 150 Manifestaciones clínicas 151 CIE-10 152 DSM-IV-TR 152 Trastorno de angustia o pánico 152 Concepto 152 Etiología 153 Epidemiología 153 Clínica 153 Diagnóstico 154 Diagnóstico diferencial 155 Tratamiento 156 Fobias 157 Concepto 157 Fobias específicas o simples 158 Tratamiento 160 Trastorno de ansiedad social o fobia social 160 Tratamiento 161 Trastorno por estrés agudo (TEA) y trastorno Por estrés post traumático (TEPT) 162 Tratamiento 166 Trastorno de ansiedad generalizada 167 Concepto 167 Etiopatogenia 167 Epidemiologia 168 Diagnóstico 168 Diagnóstico diferencial 170 Tratamiento 171 CAPÍTULO 8 • TRASTORNO OBSESIVO COMPULSIVO 175 Dr. Julio Torales Benítez, Dra. Alicia Medina Pereira, Dra. Claudia Valenzuela Hermosa & Dra. Paloma Fernández De los Ríos Concepto 175 Epidemiología 176 Etiopatogenia 176 Diagnóstico 178 Diagnóstico Diferencial 178 Clínica 180 Comorbilidades 181 Tratamiento 182 CAPÍTULO 9 • TRASTORNOS SOMATOMORFOS 185 Prof. Dr. José Brítez Cantero, Dr. Julio Torales Benítez,Dra. Claudia Valenzuela Hermosa & Dra. María Emilia Chávez Concepto 185 Trastorno de somatización (Síndrome de Briquet) 186 Concepto 186 Etiología 186 Epidemiología 187 Clínica 187 Diagnóstico 188 Diagnóstico diferencial 188 Tratamiento 190 Trastorno de conversión 190 Concepto 190 Epidemiología 191 Etiopatogenia 191 Clínica 191 Diagnóstico 193 Diagnóstico diferencial 193 Tratamiento 194 Hipocondría 194 Concepto 194 Etiología 194 Epidemiología 195 Diagnóstico 195 Diagnóstico diferencial 196 Tratamiento 196 Trastoro dismórfico corporal 197 Concepto 197 Etiología 197 Epidemiología 197 Diagnóstico 197 Diagnostico diferencial 198 Tratamiento 198 Trastorno por dolor 199 Concepto 199 Etiología 199 Epidemiología 199 Diagnóstico 200 Diagnóstico diferencial 201 Tratamiento 201 Trastorno somatomorfo indiferenciado 202 Trastorno somatomorfo no especificado 202 Trastornos facticios 202 CAPÍTULO 10 • TRASTORNOS DE LA CONDUCTA ALIMENTARIA 205 Prof. Dr. Andrés Arce Ramírez, Dr. Hugo Rodríguez Marín, Dra. Claudia Analía Parodi & Dr. Pedro López Olmedo Anorexia nerviosa 205 Concepto 205 Etiología 205 Epidemiologia 206 Manifestaciones clínicas 206 Diagnóstico 207 Pronóstico 208 Tratamiento 209 Bulimia nerviosa 210 Concepto 210 Etiología 210 Epidemiología 211 Manifestaciones clínicas 211 Diagnóstico 211 Complicaciones médicas 211 Diagnóstico diferencial 212 Tratamiento 213 CAPÍTULO 11 • TRASTORNOS DE LA PERSONALIDAD 217 Prof. Dr. Andrés Arce Ramírez, Dr. Miguel Cuellar Hoppe & Dra. Jazmín Rodríguez Zarza Trastorno esquizoide de la personalidad 222 Epidemiología 222 Cuadro Clínico 222 Diagnóstico diferencial 223 Evolución y pronóstico 224 Tratamiento 224 Introducción 217 Trastorno antisocial de la personalidad 225 Epidemiología 226 Cuadro clínico 227 Evolución y pronóstico 227 Tratamiento 227 Trastorno de la personalidad por evitación 233 Epidemiología 233 Cuadro Clínico 233 Diagnóstico diferencial 233 Evolución y pronóstico 234 Tratamiento 234 Trastorno de la personalidad por dependencia 234 Epidemiología 234 Cuadro Clínico 234 Diagnóstico diferencial 235 Evolución y pronóstico 236 Tratamiento 236 Trastorno de personalidad narcisista 232 Epidemiología 232 Cuadro clínico 232 Evolución y pronóstico 232 Tratamiento 232 Trastorno obsesivo compulsivo de la personalidad 236 Epidemiología 236 Cuadro clínico 236 Diagnóstico diferencial 237 Evolución y pronóstico 237 Tratamiento 237 Trastornos de la personalidad del grupo C 233 CAPÍTULO 12 • PSIQUIATRÍA DE LA INFANCIA Y LA ADOLESCENCIA 239 Prof. Dr. Andrés Arce Ramírez, Dr. Julio Torales Benítez, Dra. Viviana Riego Meyer & Dra. María Emilia Chávez Componentes 239 Datos de Identificación 239 Anamnesis 240 Evaluación del estado mental 240 Diagnóstico 242 Plan terapéutico 242 Depresion infantil 243 Epidemiologia 243 Etiología 243 Clínica y diagnóstico 244 Tratamiento 247 Trastorno bipolar 248 Epidemiología 248 Etiología 248 Clasificación 249 Clínica y diagnóstico 249 Tratamiento 250 Trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) 251 Epidemiologia 252 Etiología 252 Diagnóstico 252 Tipos 254 Clínica 255 Comorbilidad 256 Tratamiento 256 Trastornos generalizados del desarrollo 257 Trastorno autista 257 Concepto 257 Etiología 257 Epidemiología 258 Diagnóstico 258 Clínica 259 Diagnóstico diferencial 260 Curso y pronóstico 260 Tratamiento 260 Síndrome de asperger 261 Concepto 261 Etiología 261 Epidemiología 261 Diagnóstico 261 Clínica 263 Diagnóstico diferencial 263 Tratamiento 264 Trastorno desintegrativo infantil o síndrome de Heller 265 Concepto 265 Epidemiología 265 Clínica 265 Diagnóstico 265 Diagnostico diferencial 266 Evolución 266 Tratamiento 267 Síndrome de Rett 267 Concepto 267 Etiología 267 Diagnóstico 267 Clínica 267 Diagnostico diferencial 268 Evolución 268 Tratamiento 268 Trastorno generalizado del desarrollo sin otra especificación 269 CAPÍTULO 13 • URGENCIAS PSIQUIÁTRICAS 273 Dr. Julio Torales Benítez, Dr. José Andrés Bogado, Dra. Susana Recalde Berni & Dr. Marcos Hernán Capurro Introducción 273 Suicidio y conducta autolítica 274 Conceptos 274 Epidemiología 274 Factores de riesgo y protectores 275 Evaluación del paciente en la urgencia 276 Pasos para la evaluación del riesgo 277 Intervención 277 Tratamiento farmacológico 278 Ingreso hospitalario 278 Paciente agitado o violento 279 Generalidades 279 Diagnósticos diferenciales 279 Factores tempranos de advertencia 280 Factores de riesgo 281 Manejo 281 Intervenciones 282 “Pero es que a mí no me gusta tratar a gente loca” –protestó Alicia. “Oh, eso no lo puedes evitar” –repuso el Gato–. “Aquí todos estamos locos. Yo estoy loco. Tú estás loca” “¿Cómo sabes que yo estoy loca?” –preguntó Alicia. “Tienes que estarlo” –afirmó el Gato–, “o no habrías venido aquí”. Del libro “Alicia en el País de las Maravillas”, por Lewis Carroll (1832-1898) 32 PRÓLOGO Este libro, editado y escrito por Andrés Arce y Julio Torales, psiquiatras en- trañables, maestro y discípulo, viene a evidenciar la necesidad de ver al ser humano, en salud o con alteraciones de ella, como una unidad integrada e integral. Durante estos años de trabajo y colaboración, se nos hace cada vez más evidente y tenemos la profunda convicción de que las ciencias de la mente, no solo nos sirven para explorar la experiencia vivida por un ser humano, tanto como experiencia en sí misma, sino también nos permiten ver las posibilidades infinitas de transformación que nos da la experiencia de lo vivido, positiva o negativamente. En las últimas décadas, la medicina, producto de la especialización, ha ido atomizando al paciente, fraccionándole, segmentadamente y no hemos sido, muchas veces, capaces de entender al ser humano con una unicidad. El entender soma, cognición y mente como una sola unidad nos obliga a mirar al ser humano como único, propio y particular. Todos compartimos los mismos sistemas, órganos y funciones; sin embargo lo genómico, epi- genético y nuestra propia biografía nos hacen diferentes y es desde esa diferencia el cómo vivimos la experiencia de enfermar. Los aportes recientes de las neurociencias nos muestran que el hombre, a cuyo sistema nervioso le entendíamos básicamente como una especie evolucionada desde la cognición, ha sobrevivido gracias a que este mis- mo sistema es capaz de generar las herramientas adaptativas emocionales para la supervivencia. Se sabe hoy que la emoción usa circuitos y redes neuronales que procesan los estímulos a menor voltaje y más rápido que aquellas redes que partici- pan en la cognición. Unas anclan su información de una manera pre lin- güística y la otra lo hace desde el lenguaje; sin embargo, no es posible una cognición significativa sino está modulada desde la emoción. Eso genera cambios plásticos a nivel neuroquímico, pero también en las neuronas y la glía. Las emociones son connaturales a nuestra condición humana y nos permiten tener la capacidad social de ponernos en el lugar del otro. 33 Aportes como el descubrimiento de generación permanente de nuevas células en el hipocampo, el descubrimiento de neuronas espejo y el rol fundamental que cumplen los señalizadores moleculares en las células nos explican la salud y la enfermedad, más aún cuando hoy sabemos que los genes también tienen una plasticidad adaptativa.De este modo, y sólo así, es que podemos abordar a pacientes que desarrollan patologías tan diversas y enfrentadas de modos tan diferentes. El conocer la fenomenología de los trastornos del humor, de la ansiedad o del neurodesarrollo, es una obligación para cada especialista en salud. Este interesante “Libro Azul de la Psiquiatría” sin duda es un aporte signi- ficativo a la práctica clínica en cualquier especialidad y viene a complemen- tar una mirada más global, humana e integradora de nuestros pacientes. Prof. Dr. Rodrigo Chamorro Oschilewsky • Profesor Asociado de Psiquiatría, Universidad de Chile • Profesor Adjunto de Psiquiatría, Universidad Católica del Maule, Chile • Profesor Magísterde Neuropsicología, Universidad de Morón, Argentina • Co-director del Postgrado de Especialización en Psiquiatría y Psicología Clínica de la Infancia y la Adolescencia de la Asociación Psiquiátrica de América Latina, Sociedad Paraguaya de Psiquiatría y Universidad Nacional de Villarrica del Espíritu Santo • Coordinador del Programa Prioritario de Salud Mental Infanto Juvenil para Latinoamé- rica de la Asociación Psiquiátrica de América Latina • Miembro del Comité Ejecutivo de la Liga Latinoamericana del estudio del trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) • Director de la Comisión de Psiquiatría de la Sociedad Chilena de Neurología, Psiquia- tría y Neurocirugía (SONEPSYN) 34 INTRODUCCIÓN Cuando los jóvenes psiquiatras me propusieron escribir un libro de psi- quiatría me pareció un “delirio”. Afortunadamente decidí adherirme al mismo, tal como lo hacemos al tratar a un paciente delirante: primero para intentar entender el cómo, por qué y de donde provenía esta iniciativa (poco usual en nuestro caso), para luego tratar de “tocar tierra” y aterrizar en la realidad (en este caso, en nuestra realidad, la de la Cátedra y Servicio de Psiquiatría de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacio- nal de Asunción). Pero al momento de escribir estas líneas hice insight al recordar aquel leja- no año 2003, cuando apenas había asumido como Jefe de Cátedra (en ese entonces sin servicio) y habiendo recibido una cátedra literalmente virtual (sin siquiera dependencias físicas dentro de la Facultad), decidí –con el apoyo del Dr. Carlos Bertón (entonces Auxiliar de la Enseñanza) y del Dr. Carlos “Tito” Enciso (entonces médico residente)– llevar adelante el pro- yecto de instalar en el Hospital de Clínicas un “servicio” de Psiquiatría (conceptualmente diferente al modelo manicomial), en el cual la atención se basara en el respeto irrestricto de los derechos humanos de los pacien- tes, con internaciones voluntarias y sin celdas de seguridad (hoy simuladas en otras instituciones bajo el término de “salas de seguridad”). Ese sueño, que al principio fue tildado de delirante por algunos, se hizo realidad en julio del año 2004 con la habilitación de una unidad de inter- nación para pacientes en situación de crisis. Desde entonces nuestra Cáte- dra ha venido desarrollando una dinámica incesante, con aciertos y errores, con avances y retrocesos, incluso con algunas situaciones de conflicto pro- pios de cada grupo humano, pero con la capacidad de reconocer los errores aceptando las críticas, y tratando siempre de mejorar a fin de brindar una atención adecuada a los pacientes que acuden a nosotros. Como egresa- dos y funcionarios de la Universidad Nacional de Asunción no podemos olvidar nuestros roles de servidores públicos y nuestro compromiso con el pueblo, lo que nos exige apuntar siempre a la excelencia, con compromiso social hacia nuestros conciudadanos. La concreción de este libro en la práctica psiquiátrica del Paraguay no es un hecho aislado: refleja el cambio más difícil de realizar en el ser huma- no. En efecto, tal como lo habíamos conversado en intercambios con los jóvenes psiquiatras, Pinel liberó a los pacientes de sus cadenas… a nosotros 35 nos toca liberarlos de aquellas que los sujetan mentalmente, para lo cual sin dudas primero es necesario liberarnos nosotros de nuestros prejuicios y nuestras ideologías, muchas veces exageradamente reduccionistas. Por otro lado, que este libro se haga realidad en este momento no es casual. Actualmente, la Cátedra y Servicio de Psiquiatría se ha constituido en re- ferente en lo que atañe a la salud y la enfermedad mental. Esto es coinci- dente con un gran salto que ha dado en estos últimos años la psiquiatría paraguaya: en 2010, en el congreso realizado por la Sociedad Paraguaya de Psiquiatría (con auspicio de la Facultad de Ciencias Médicas de la Univer- sidad Nacional de Asunción, a través de nuestra Cátedra) por vez primera en nuestra historia hemos contado con la asistencia de las más altas auto- ridades de la psiquiatría mundial: el presidente de la Asociación Mundial de Psiquiatría (World Psychiatric Association, WPA) y el presidente de la Asociación Psiquiátrica de América Latina (APAL). Y precisamente en este momento estamos en el tramo final de otro evento que marcará un hito en la psiquiatría de nuestro país: la Reunión Regional de la Asociación Mundial de Psiquiatría, la cual se realizará por primera vez en Asunción (y también por primera vez en Latinoamérica), en enero del 2013, y a la cual asistirán las máximas autoridades tanto de la WPA como de la APAL. Qui- zás debiéramos repetir aquí lo que hace mas de un siglo planteaba Freud: “no existen las casualidades sino las causalidades”. Justo es reconocer que hemos tenido la suerte de contar siempre con el apoyo de las autoridades de la Facultad de Ciencias Médicas, incluso en ciertos momentos difíciles en los que ha prevalecido por encima de todo el interés institucional, lo cual considero digno de destacar y agradecer en este breve comentario. Antes de terminar, debo expresar que haber visto el entusiasmo de los jóvenes psiquiatras por llevar adelante esta tarea me llena de orgullo. Me- rece una mención especial el Dr. Julio Torales, quién debo reconocer fue el impulsor tenaz para que esta obra pudiera concretarse. Y, más que ver un texto donde soy uno de los autores, me alegra mucho más el ver los nombres de jóvenes psiquiatras e incluso de médicos residentes como au- tores de esta obra, de quiénes espero que muy pronto logren poner a la psiquiatría en el lugar que verdaderamente le corresponde, más allá de los prejuicios de nuestros propios colegas: como una de las especialidades más importantes de la medicina, pues así como el cese de la actividad cerebral significa la muerte de la persona, así también la ausencia de salud mental 36 como consecuencia de algún trastorno o enfermedad mental hace impo- sible que la persona –por más sana que se encuentre físicamente– pueda disfrutar plenamente de su vida, su familia, su trabajo, y sus logros. Finalizando, solo me resta mencionar que la formación actual del médico no puede seguir poniendo énfasis solamente en el cuerpo del paciente. Debe entenderse de una vez por todas que cuerpo y mente son absolu- tamente indivisibles, y su unidad constituye la esencia del ser humano y posibilita la convivencia social. Sólo conociendo los trastornos mentales es- taremos en condiciones de realizar la prevención y promoción de la salud mental. Me despido recordando que para ser un buen médico no podemos apartarnos de lo que decía Hesíodo: “Ciertamente, es el mejor de los hombres aquel que todo lo considera, y examina qué cosa será en último término lo justo. Bueno es también el que sabe seguir lo que otro rectamente le enseña. Solo es inútil aquel que ni conoce por sí mismo ni toma en su corazón la doctrina de otro”. Prof. Dr. ANDRÉS ARCE RAMÍREZ La salud mental es un componente intrínseco de la buena salud y, según el Relator Especial sobre el Derecho a la Salud de las Naciones Unidas, Paul Hunt, “el derecho a la salud mental es parte del derecho a la salud para todos”. La salud mental debe entenderse, no como ausencia de enfermedad psiquiátrica, sino como derecho al goce de una vida mental sana y plena. La salud mental involucra tanto a las experiencias cognitivas, es decir, los procesos mentales y las percepciones, como a las afectivas y relacionales, es decir, la manera en que las personas interactúan con las otras. Esto ocurre en un contexto social, económico, cultural y de relaciones de géne- ro, donde la desigualdad y la ausencia de derechos prevalecen y ameritan una respuesta integral y diferenciada desde las instituciones de salud y los médicos que trabajan en ellas.1 Con el objetivo de lograr que la enfermedad mental deje de ser vista como un estigma y que, por ende, la salud mental no sea ejercida como una dádiva, los autoresde este libro nos hemos enfocado en proporcionar a los estudiantes de medicina y a los médicos generales algunas herramientas básicas que les permitan lograr aproximaciones diagnósticas de problemas de salud mental prevalentes, así como elementos para instalar procesos terapéuticos precoces y adecuados. Hemos puesto un especial esfuerzo en preparar un material didáctico, que guíe al lector a través de la práctica psiquiátrica frecuente, siguiendo cri- terios diagnósticos de la Asociación Americana de Psiquiatría. No obstan- te, enfatizamos que los criterios diagnósticos de la décima edición de la Clasificación Internacional de Enfermedades de la Organización Mundial de la Salud también deben ser consultados en el quehacer clínico diario. Consideramos que esta obra podrá aportar al mejor conocimiento de la especialidad entre la población estudiantil de medicina y entre los médicos generales, para de esa manera reforzar la idea que el paciente no es sólo un cuerpo sufriente, sino una unidad integrada bio-psico-social, una persona que sueña, piensa, lucha y ama. Agradezco al Prof. Dr. Andrés Arce Ramírez y a mis compañeros y colegas, el haberme honrado al permitirme escribir esta obra con ellos. Dr. JULIO TORALES BENÍTEZ 1 Torales, J., Girala, N., Forestieri, F. & Garcete, MJ. Salud Mental en el Paraguay: el infierno continúa. En: Coordinadora de Derechos Humanos del Paraguay (CODEHUPY). Derechos Humanos en Paraguay 2007. AGR Impresiones. Asunción, 2007: 388 – 398. 39 CAPÍTULO 1 SEMIOLOGÍA PSIQUIÁTRICA Prof. Dr. Martín María Moreno, Dra. Alicia Medina Pereira, Dr. Mauricio Acosta Núñez, Dra. Cecilia Caniza Gardel & Dr. Marcos Hernán Capurro HISTORIA CLÍNICA PSIQUIÁTRICA La historia clínica es un documento médico y legal, construido en base al conjunto de datos e información que el paciente, dentro de un marco de confianza, aporta al profesional de la salud con el fin de que éste pueda llegar a un diagnóstico, tratamiento y pronóstico. Su importancia radica en las dimensiones clínica, forense, de investiga- ción, epidemiológica y, por tanto, en las políticas de salud. Existen diversos modelos de historia clínica dependiendo del servicio en el cual se la utiliza. Una estructura bastante útil y completa resulta de distribuir la información obtenida en los siguientes apartados: anamnesis, examen psíquico, funcionalidad previa, exploraciones complementarias, diag- nóstico multiaxial y plan terapéutico. Se procede a detallar cada punto en los párrafos que siguen. Anamnesis Datos de filiación: nombres y apellidos; número de documento de identidad, fecha y lugar de nacimiento, edad, sexo, estado civil, escolaridad, ocupa- ción, procedencia, dirección y número telefónico de contacto. Dependi- endo de las reglas de internación de cada servicio también deberán regis- trarse los datos básicos del acompañante y número telefónico para contacto. Motivo de consulta: se define por la causa que lo llevó a consultar. Debe plasmarse en la historia clínica con las mismas palabras del paciente o acompañante respondiendo en forma general a la siguiente pregunta: ¿por qué viene a consultar? 40 Motivo de internación: el profesional que confecciona la historia debe escribir el porqué de la necesidad de internación en caso de que ésta sea indicada. Antecedentes de la enfermedad actual: debe presentarse el cuadro actual del paciente, registrar los signos y síntomas siguiendo el orden cronológico de aparición y con un enfoque y terminología semiológica. A veces es útil escribir textualmente las palabras del propio paciente para dar mayor fun- damentación a las descripciones semiológicas. Antecedentes remotos de la enfermedad actual: se describen en este apartado si existieron cuadros similares en el pasado. Si así fuere se deben detallar, si es posible, datos sobre internaciones y/o tratamientos anteriores. Antecedentes patológicos personales: registrar enfermedades médicas (Dia- betes mellitus, Hipertensión arterial, entre otras) actuales y/o del pasado, internaciones, tratamientos y cualquier dato relevante de la salud general del paciente; historia de consumo de sustancias, alcohol y tabaco; historia de traumatismo cráneo encefálico. Antecedentes patológicos familiares: describir enfermedades médicas y psi- quiátricas en la familia del paciente. Si es posible aclarar la causa de falleci- miento de los que estuviesen muertos. En este apartado es útil y necesaria la elaboración del familigrama o árbol genealógico del paciente, detallando el número de hermanos, hijos, quiénes conviven con él y otros datos como pa- tologías y causas de fallecimiento. La utilización de esta herramienta contri- buye a una lectura e interpretación rápida del contexto familiar del paciente. Psicobiografía: se describen los hechos relevantes durante la vida del paciente. Registrar datos que para el paciente o el médico son de trascendencia. Des- cribir la normalidad o alteraciones durante el embarazo, nacimiento, desa- rrollo psicomotor, infancia, adolescencia, adultez y vejez. También se deben hacer mención a la edad y circunstancias de la primera relación sexual. Personalidad previa: detallar con las palabras del paciente o su acompañan- te datos referentes al carácter, conducta y temperamento del paciente ante- riores a la presentación del cuadro actual. 41 Examen psíquico En este apartado se procede a la evaluación del estado mental del paciente. Se registran signos y síntomas hallados en cada uno de los puntos exami- nados del examen mental. Deben registrarse de manera ordenada de tal forma a que su agrupación oriente a un diagnóstico probable. Una propuesta para su descripción es la siguiente: hábito externo, concien- cia, orientación, atención, memoria, lenguaje, pensamiento, sensopercep- ción, juicio e introspección. En este mismo capítulo, en el apartado correspondiente, se procede a la descripción de una correcta evaluación del estado mental. Funcionalidad previa Establecer las actividades de la vida diaria previa a la aparición de los sig- nos y síntomas actuales. Deben describirse las actividades laborales, acadé- micas, sociales y culturales del paciente. Exploraciones complementarias Se registrarán datos relevantes del examen físico general. Además es pre- ciso hacer constar la solicitud y resultados de pruebas complementarias como imágenes, análisis de sangre y orina. Todo esto es de gran utilidad para la presunción o no de comorbilidades y, ante su eventual sospecha, para proceder a la solicitud de interconsultas con otras especialidades. DIAGNóSTICO MULTIAxIAL Actualmente, utilizando los criterios del texto revisado del Manual diag- nóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM-IV-TR, por sus si- glas en inglés), se establecen los diagnósticos en cinco ejes. Para mayor comprensión de los ejes, se recomienda consultar la sección de evaluación multiaxial del DSM-IV-TR. 42 Eje I: incluye trastornos psiquiátricos. Eje II: incluye trastornos de la personalidad y retraso mental. Eje III: incluye enfermedades médicas. Eje IV: problemas psicosociales y ambientales. Eje V: funcionalidad actual. Plan terapéutico Debe incluir: existencia o no de medidas de restricción física y de objetos potencialmente peligrosos, tipo de cama (unidad), dieta, indicaciones far- macológicas (vía, dosis y horarios), hidratación parenteral (si fuere el caso), control de signos vitales, pedidos laboratoriales, cuidados generales de en- fermería (resaltar siempre el riesgo suicida o el riesgo de fuga, en caso de existir cualquiera de los dos). CONSIDERACIONES GENERALES DE LA ENTREVISTA CLÍNICA Existen diversos tipos y escuelas de entrevista suficientemente justificadas como para utilizarlas en el consultorio en la recolección de los datos de los pacientes. En el área de la Psiquiatría, la cual realmente compete a este texto, se acostumbra utilizar fundamentalmente las entrevistas psicodiná- mica y descriptiva. La entrevista psicodinámica estáenfocada en la introspección del paciente, en cómo éste se ve y comprende lo que le está ocurriendo. Por su parte, la descriptiva se dirige a los signos y síntomas del usuario. La fundamental diferencia entre ambas radica en que la primera se basa en qué conflictos internos o externos del paciente llegan a constituirse en verdaderos agen- tes causales mientras que la segunda se basa en términos más biologistas, partiendo de que los trastornos son un conjunto de síntomas y signos que responden a un tratamiento y tienen un curso en muchos casos previsible. Se denomina psiquiatría ecléctica a la que integra ambos tipos de técnicas. 43 Con fines didácticos se describen periodos o fases en la entrevista, cada una de ellas constituida por ciertos componentes. Si bien estas divisiones son arbitrarias, las mismas resultan muy útiles para el estudiante o médico que se inicia en el arte de recoger datos del paciente. Se pueden distinguir tres fases: inicial en la cual se empieza la relación; media durante la cual se lleva a cabo la mayor parte de la entrevista, se invierte mayor cantidad de tiempo y además se construye la historia psiquiátrica propiamente dicha; y final en la que se establecen conclusiones y veredictos y se consolida la alianza terapéutica. Se subraya e insiste con lo arbitrario de establecer estas fases pues es nor- mal “saltar” durante la entrevista entre una y otra, con el fin de ir reestruc- turando la historia y el vínculo entre ambos personajes de la entrevista. Para entablar una relación adecuada con el usuario se deben tener muy pre- sentes algunos puntos cruciales para que el paciente se sienta cómodo de narrar su historia. Para lograr esto debemos saber reconocer e interpretar su lenguaje, tanto digital (la palabra) como el analógico (gestos, movimien- tos) y responder a ellos de manera adecuada. Es importante empatizar con las manifestaciones de sufrimiento que surjan. Por último, el paciente se siente apoyado cuando ve a la figura de su médico como un aliado, esto se logra mediante la mencionada empatía y la demostración de que se conoce (pericia) acerca del trastorno que padece. Esto último permitirá al entrevis- tador adoptar una posición de liderazgo que sea capaz de guiar al paciente. Invariablemente surgen dudas y cuestionamientos acerca de qué tipos de preguntas hacer, cómo hacerlas y en qué momento. No cabe duda de que es la experiencia, basada en aciertos y equivocaciones, la que terminará perfec- cionando los criterios individuales para encaminar la entrevista; sin embar- go, en este material se citan y describen algunas técnicas y formas de llevar a cabo las preguntas que pueden ayudar al médico principiante a hacerse de ciertas herramientas para adentrarse en el mundo de la entrevista clínica. Antes de describir algunas técnicas útiles, es necesario dejar en claro que existen, fundamentalmente, dos tipos de preguntas: abiertas y cerradas. Las abiertas permiten al paciente explayarse en los tópicos que él considere más importantes, así como expresar sus emociones, lo cual proporciona autenticidad a las respuestas. Cabe destacar sus desventajas: las respuestas pueden ser largas y el paciente puede caer en la vaguedad. Las preguntas cerradas generan respuestas precisas y rápidas acerca de lo que el entrevis- 44 tador necesita. No obstante, las cerradas pueden forzar falsos positivos y limitan la expresión emocional del entrevistado. Si el entrevistador se encuentra frente a un paciente que resulta vago en sus expresiones puede resultar útil la especificación, que consiste en pre- guntar para obtener información sobre determinado punto considerado de importancia. En caso contrario, la generalización permite contextualizar algún tema sobre el cual el paciente hace mucho hincapié. Si son varios los temas de resonancia, es conveniente establecer una revisión de síntomas de tal manera a ir recogiendo datos sobre cada uno. Parecido al método anterior resulta el resumen, útil para repasar los datos y corroborarlos. Las transiciones son interesantes pero deben ser utilizadas adecuadamente, consisten en cambiar de tema, suave o bruscamente. Existen ocasiones en las que determinados datos parecen no tener relación entre sí: estas situaciones pueden confrontarse mediante la interrelación, en la cual se cuestiona directamente cuál es el nexo entre uno y otro dato. El objetivo de estas técnicas es que sean utilizadas de manera ordenada y adecuada para lograr quitar el máximo provecho de una entrevista y así elaborar una historia psiquiátrica que oriente consistentemente hacia los diagnósticos diferenciales. ExPLORACIóN PSICOPATOLóGICA También conocida como examen mental o examen psíquico, describe la suma total de observaciones e impresiones del médico acerca del paciente en el momento preciso de la entrevista, ya que se debe considerar que el estado mental del sujeto puede variar de un momento a otro. El objetivo de la exploración psicopatológica es la evaluación del estado mental del paciente, describiendo e interpretando sus alteraciones. Se debe describir el estado mental del paciente, y para ello es importante tener un esquema ordenado que se ajusta de acuerdo a las condiciones de la entrevista pero que de todas formas debe ser completo. Se dispone de varios métodos para analizar el examen psíquico durante el desarrollo de la entrevista clínica. Mediante la simple observación se logra obtener datos acerca la apariencia, el estado de conciencia, el comporta- 45 miento psicomotor y el afecto del entrevistado. Este procedimiento puede llevarse a cabo cuando el paciente ingresa al consultorio, incluso sin me- diar palabras. La atención, el lenguaje, el curso del pensamiento y el afecto se exploran mediante la conversación, oyendo al paciente y analizando lo que expresa. Por último, la exploración permite estudiar el estado de áni- mo, sensopercepción, el afecto y el contenido del pensamiento. En el párrafo precedente se asocian puntos del estado mental con las di- versas técnicas. Cabe aclarar que dichas relaciones se establecen bajo el criterio de que dicha técnica es la que permite un estudio más fiel del objeto a describir. No obstante, cualquiera de las otras técnicas puede ser- vir, al menos de indicio, para descubrir alteraciones de cualquiera de los aspectos del examen psíquico. Por ejemplo, un paciente cuya mirada se dirige constantemente hacia un lugar del consultorio puede dar indicio de que sufra alguna alteración sensoperceptiva, este hecho guiará a explorar detalladamente síntomas de esa área y confirmar la sospecha. Como puede verse, el afecto es transversal a las tres técnicas. Son necesa- rios datos obtenidos de la observación, conversación y exploración para es- tablecer una descripción suficientemente detallada del afecto y así fundar la congruencia o no con el estado de ánimo. Existe un cuarto elemento para corroborar los datos obtenidos: los tests. Estos son un conjunto de pruebas mediante las que se valoran, en térmi- nos generalmente cuantitativos, las características psicológicas o los cono- cimientos de una persona y pueden ser útiles ante dudas diagnósticas. Tie- nen a su favor que dejan de lado la subjetividad del observador y muchos de ellos son muy sencillos de aplicar. En los siguientes párrafos, se describen las áreas básicas del examen psí- quico que deben ser evaluadas en la exploración del examen mental. Hábito externo Se denomina de esta manera a todo aquello que se observa en el paciente, desde el momento en que éste ingresa al consultorio. Se evalúa la vesti- menta (acorde o no a la situación y al clima, teniendo en cuenta los paráme- tros socioculturales), higiene personal (prolijo o desprolijo, olor), marcha, fascie y biotipo. 46 Actitud Se describe basándose en la forma de manifestarse del paciente, evaluán- dose fundamentalmente la abordabilidad. Normalmente se utilizan térmi- nos como “colaborador” o “no colaborador”; otros prefieren expresaren tér- minos de abordabilidad, abordable/no abordable. En el caso de un paciente no abordable el entrevistador debe establecer si se trata de un paciente no colaborador abierto o activo (se niega) o indirecto o pasivo (alteración de la conciencia que impide al paciente expresarse). Para la descripción del paciente abordable cabe prácticamente cualquier adjetivo: amable, hostil, suspicaz, seductor, etcétera. Igualmente importante es describir si el paciente establece o no contacto visual. Conciencia Estado de conocimiento subjetivo y respuesta apropiada a los estímulos externos. Algunos consideran que debe ser el primer aspecto a describir en el examen mental, pues es el que determinará la continuidad o no de la exploración. Niveles de conciencia: Vigilia: estado de plena alerta. El paciente es capaz de responder a los estí- mulos externos. Letargia o somnolencia: estado de dificultad para mantener la alerta a pesar del esfuerzo del paciente. Obnubilación: estado de somnolencia fluctuante. El paciente se encuentra desorientado e indiferente al exterior. Reacciona escasamente frente a es- tímulos intensos. Estupor: el paciente impresiona durmiendo. Solo es capaz de alcanzar un nivel pobre de alerta mediante estímulos potentes dolorosos. Coma: no existe reacción ante estímulos externos, incluso a aquellos que producen dolor. Es la alteración más grave del estado de conciencia. 47 El término sopor no debe ser confundido con estupor. El primero es equi- valente a la letargia, mientras que el segundo corresponde al descripto pre- viamente. Orientación Capacidad del ser humano de conocer quién es y ubicarse en las coordena- das de espacio y tiempo. Basado en esto existen dos tipos de orientación: la alopsíquica referente a la orientación sobre el exterior y la autopsíquica hace alusión la orientación sobre uno mismo. La evaluación de la orientación se realiza mediante preguntas simples res- pecto al nombre, a qué se dedica, año, mes, día, hora, lugar. Un individuo puede estar orientado autopsiquicamente pero no en tiempo o espacio o viceversa. Además, es importante destacar, que la desorienta- ción puede ser completa o parcial. Por ejemplo, un paciente que esté ubica- do en año y mes pero no en día está parcialmente desorientado en tiempo. Psicomotricidad En este apartado del examen mental se describe la conducta motora del paciente. Es el medio a través del cual se manifiesta la comunicación ana- lógica. El comportamiento puede aportar una impresión previa acerca del individuo; esta “impresión” se refiere a que da un pantallazo acerca del estado del paciente y puede adelantar si es que se encuentra nervioso, tran- quilo, tímido, arrogante, etcétera. En síntesis, proporciona información acerca del nivel de atención, energía y afecto del paciente. Los movimientos pueden clasificarse dentro de cuatro grupos: postura, movimientos psicomotores, movimientos que expresan afecto y movi- mientos anormales. En la postura se describe si las posiciones que adopta son estáticas o diná- micas, en este último caso se detalla el grado de variabilidad de la postura. Esencialmente la postura puede orientar hacia el estado de agitación del paciente. 48 Deben describirse tres tipos de movimientos psicomotores. Movimientos dirigidos a un objetivos (detallar si se cumplen los objetivos o se los deja por el camino), gesticulación expresiva (la que acompaña al lenguaje) y la gesticulación simbólica (independiente del lenguaje, tiene un significado por sí sola [el pulgar hacia arriba significa Ok]). La expresión facial, si el paciente sonríe, la orientación de las comisuras son elementos que sirven para describir los movimientos que expresan el afecto. Por último, pero no menos importantes, deben tenerse en cuenta los movi- mientos anormales. Son ejemplos: excitación, acatisia, catalepsia, tics, com- pulsiones, estereotipias, manierismos, entre otros. Atención Proceso por el cual se seleccionan estímulos importantes y se desechan otros. Es importante tener en cuenta dos términos que representan anormali- dades de la atención. Hipoprosexia y disprosexia. Hipoprosexia es la nece- sidad de mayor estimulo para mantener la atención y disprosexia implica cambios frecuentes en el foco de atención. Inatención es la incapacidad de cambiar el foco de atención. Memoria Función psicofisiológica que permite al ser humano adquirir, almacenar y evocar hechos pasados. La adquisición de tales hechos se produce me- diante un registro consciente o inconsciente, y la evocación puede ser un proceso voluntario o automático. Es importante invertir un tiempo interesante en la evaluación de la fun- ción mnésica, sobre todo en individuos de edad avanzada, pues no es infre- cuente toparse en la práctica clínica con alteraciones de la memoria como consecuencia de trastornos psiquiátricos o como efectos adversos de algún tratamiento. Existen múltiples clasificaciones de la memoria, las más importantes que deben ser aprendidas son las de los tipos de memoria según el tiempo y 49 según el tipo de información o contenido. En los siguientes párrafos se procede a describirlas brevemente. Tipos de memoria según el tiempo Memoria a corto plazo: también denominada inmediata. Es la capacidad de registrar las sensaciones percibidas por los sentidos. Esta memoria tiene capacidad de procesar gran cantidad de información aunque durante un tiempo muy breve (5 a 20 segundos), involucrando entre 5 y 7 elementos. Puede ser icónica (visual) o ecoica (auditiva). La limitación antedicha está regida por los efectos de primicia y ultimidad. Al presentar al paciente una lista de elementos, este recuerda con mayor facilidad los primeros y los últimos, no así los intermedios. Memoria a largo plazo: es un almacén al que se hace referencia cuando se habla de memoria en general. Se mantiene el objeto de recuerdo por un tiempo prolongado, a veces indefinido, a pesar de que el paciente haya sido alejado del estímulo. Dispone de capacidad desconocida y contiene infor- mación de distinta naturaleza. Tipos de memoria según información o contenido Memoria procedimental (implícita): puede considerarse un sistema de eje- cución. Constituye el depósito de las distintas habilidades aprendidas acer- ca de cómo llevar a cabo las cosas ante la demanda de hacer alguna tarea (conducir, escribir, leer, etcétera). Consiste en una serie de repertorios mo- tores y estrategias cognitivas llevadas a cabo de manera inconsciente sin demandar demasiados recursos de la atención. El aprendizaje se desarrollo de forma gradual mediante la repetición de actos. Memoria declarativa (explícita): incluye a la memoria episódica que contiene información referida a las experiencias vividas por la persona en su propia historia y a la memoria semántica que contiene conocimientos generales sobre el mundo (cosas, lugares, personas). Alteraciones de la memoria Amnesia: ausencia de recuerdos de un período determinado de la vida. El sujeto suele estar consciente de que son recuerdos que existieron pero que se han perdido. Puede ser parcial o total. Además se la divide en anterógra- 50 da, retrógrada y global. La anterógrada es la incapacidad de retener aconte- cimientos recientes, mientras que la retrógrada es la incapacidad de evocar hechos pasados. La global es la combinación de las dos anteriores. Paramnesias: constituyen falsos recuerdos que no coinciden con la realidad, o que provocan la distorsión de la misma. El déjà vu es la impresión de haber vivido algo que no ha ocurrido aún. El jamais vu se caracteriza por la sensación de nunca haber vivido algo que ya ocurrió. El tercer tipo de paramnesia es la confabulación que se basa en la evocación deformada y distorsionada de los acontecimientos. Sensopercepción Función mental del ser humano mediante la cual se es consciente de la propia corporeidad y del mundo externo. Como su nombre lo dice, la sen- sopercepción involucra la percepción sensorial. Se citana continuación di- versos tipos de alteración de la sensopercepción. Ilusión: deformación de la percepción real. Puede aparecer como conse- cuencia de condiciones ambientales deficientes como poca iluminación y por lo tanto no siempre son patológicas. Alucinosis: percepción sin objeto real pero se conserva la capacidad de jui- cio, por lo tanto la persona critica la experiencia. También se la denomina alucinación parcial. Alucinación: toda percepción carente de objeto que la cause y que es vivida como real por el individuo. Las alucinaciones pueden ser visuales, auditi- vas (más frecuentes), olfativas, gustativas, táctiles (formicación), cinestési- cas (de movimientos). Es importante diferenciar las llamadas alucinaciones fisiológicas que se dan en individuos sanos y no son consideradas patológicas. Por un lado están alucinaciones hipnagógicas que son las que suceden antes de dormir y por el otro, las hipnopómpicas que ocurren al despertarse. Estado de ánimo y afecto Estado de ánimo o humor se define como una emoción permanente que tiñe la apreciación del mundo de una persona. 51 Es una cuestión completamente subjetiva, expresada explícitamente por las palabras o gestos del paciente pasible de ser observada por los demás. Los adjetivos que pueden ser utilizados para la descripción del afecto son muy variados, abarcando toda la gama de alegría/tristeza, desde la manía hasta la anhedonia pasando por la eutimia, considerada el afecto normal. Son otros ejemplos: hipomanía, euforia, disforia, eutimia, animado, varia- ble, alexitimia, melancolía, depresión. Por su parte, el afecto constituye un concepto más momentáneo de las emociones del paciente. Es la respuesta actual que expresa tácitamente el comportamiento del paciente. El afecto puede ser apropiado (congruente) o inapropiado (incongruente) con el estado de ánimo que manifiesta explíci- tamente el individuo. En el primer caso, lo implícito está en armonía con lo explicito, no así en el segundo en el cual existe incongruencia entre lo observado y lo expresado por el paciente. Ejemplo: el paciente dice que está triste pero ríe a carcajadas. Afecto embotado se refiere a la reducción de la intensidad con la que se ex- presan los sentimientos. Un nivel más grave es el aplanamiento afectivo, en el cual reina la ausencia de expresión afectiva. Es crucial recordar algunos puntos importantes para saber diferenciar el afecto del humor: 1. el afecto es transitorio, el humor duradero; 2. el afecto es lo que se observa (signo) e interpreta del paciente, el humor es lo que él expresa (síntoma); 3. el afecto es superficial, el humor es el fondo. Lenguaje Es el sistema mediante el cual los seres humanos se comunican. En la evaluación del lenguaje se aprecia si la persona es capaz de entender las preguntas que se le formulan, de responderlas atingentemente, de enten- der un texto escrito, de escribir, de nombrar objetos que se le muestran. El paciente debería ser capaz de nombrar objetos, leer un párrafo y escribir frases. Es importante destacar que ante esta evaluación debe tenerse muy presente el nivel de preparación del entrevistado, pues ante un individuo analfabeto, el déficit de lectura o escritura no debe considerarse patológico. Deben evaluarse esencialmente el tono, el ritmo, articulación y la fluidez de la palabra. 52 Las alteraciones del lenguaje son fundamentalmente los trastornos del rit- mo (bradifasia, latencia de respuesta, taquifasia y tartamudez), los trastor- nos iterativos o por repetición (palilalia, ecolalia, coprolalia), los trastornos de la significación (neologismos), y las afasias, caracterizadas por la incapaci- dad de comprender o utilizar la palabra. Pensamiento De forma breve y sencilla, con el fin de entender el concepto, se puede definir el pensamiento como la capacidad de razonar, abstraerse, analizar, resolver problemas y anticipar, mediante el uso del intelecto, las conse- cuencias de una conducta sin la necesidad de realizarla. El pensamiento implica una actividad global del sistema cognitivo, que uti- liza la mayoría de las habilidades mentales, fundamentalmente el lengua- je, elemento esencial para la exteriorización del pensamiento y, por ende, para su evaluación. A la hora de examinar el pensamiento se deben tener en cuenta tres gran- des criterios: el concepto de las palabras, la capacidad asociativa de palabras o frases y el ajuste de las palabras al objetivo. Las alteraciones del pensamiento pueden clasificarse, clásicamente, en trastornos del curso y del contenido. Se entiende por curso del pensamiento la manera en que el individuo une y organiza sus ideas. Por su parte, el contenido constituye el conjunto de ideas o creencias del paciente. En otras palabras, el curso es la velocidad y forma en que se expresa el pensamiento y el contenido, es el fondo, lo expresado. Trastornos del curso del pensamiento Taquipsiquia: el pensamiento es más veloz de lo normal. El paciente ex- presa varias ideas en relación al tiempo, contesta rápido e incluso puede iniciar las respuestas entes de que se termine la pregunta. Bradipsiquia: pensamiento enlentecido. El individuo deja la sensación de que piensa poco hablando más lentamente de lo normal. 53 Fuga de ideas: concatenación de ideas que, por la taquipsiquia, dan un sen- tido de déficit asociativo, que sin embargo no se desprenden de la idea central. Bloqueo del pensamiento: detención brusca del curso del pensamiento sin causa discernible para el observador. Circunstancialidad: ideas unidas vagamente pero que al final logran el obje- tivo. El paciente expone detalles innecesarios e irrelevantes tratando de ex- presar alguna respuesta, tras lo cual termina respondiendo a la pregunta. Tangencialidad: pérdida de la asociación de las ideas, sin llegar al objetivo. Al tratar de responder una determinada pregunta el paciente se pierde en detalles o, incluso, en temas ni siquiera asociados con el objetivo. Trastornos de contenido del pensamiento Preocupaciones: el pensamiento ronda mucho sobre algún tema específico que inquieta al paciente. Bajo situaciones de estrés es normal encontrarlas. Ideas falsas: ideas carentes de veracidad que pueden ser corregidas median- te el uso de la lógica. Se diferencia de las ideas sobrevaloradas en que no tienen gran influencia en la conducta del paciente. Ideas sobrevaloradas: creencias exageradas que van más allá de la razón; el paciente no reconoce lo ilógico de tales ideas y estas tienen gran implican- cia en su conducta. A diferencia de las ideas delirantes, las sobrevaloradas aún pueden ser corregidas con argumentación lógica. Ideas delirantes: son creencias falsas persistentes, irrebatibles con el uso de la lógica y exclusivamente patológicas. Pueden tratarse de temas de- presivos (culpa, pobreza, ruina, nihilismo, muerte, enfermedad), temas de grandeza (mesianismo, riqueza, poder, salud invulnerable, poderes o talentos, erotomanía) y temas que detonan pasividad (difusión, robo o im- posición de pensamientos, sentimientos, sensaciones u órdenes). Pensamiento mágico: creencia de que ciertos actos o frases pueden asegurar o evitar que algún suceso ocurra sin responder a ningún argumento lógico. 54 Otras alteraciones del contenidos del pensamiento son las ideas obsesivas y las ideas fóbicas, cuyas características serán detalladas suficientemente más adelante en este libro en los capítulos correspondientes. Juicio e introspección El juicio es la capacidad de seleccionar objetivos y los medios para llevarlos a cabo y mediar la consecuencia de los mismos. La introspección (“darse cuenta”) o insight es el nivel de compresión global que tiene el paciente acerca de lo que le sucede y las implicancias que pueda llegar a tener su situación sobre él mismo y la sociedad. Se establecen tres niveles distintos de insight; nulo, parcial y completo. 55 BIBLIOGRAFÍA 1. American Psyquiatric Association. (1996). Directrices para la práctica clínica en laevaluación psiquiátrica del adulto. Barcelona: Edika Med. 2. Cegla, I. (2007). Tratado de Psiquiatría. Asunción: Serigraf Impresio- nes SRL. 3. Borrell i Carrio, F. (1989). Manual de entrevista clínica. Barcelona: Doyma. 4. Gastó, C. (2000). Psicopatología descriptiva: Nuevas tendencias. Madrid: Editorial Trotta. 5. Gelder, M; Mayou, R. y Geldes, J. (1999). Oxford Psiquiatría. Madrid: Malban Libros SL. 6. Sadock, V. y Sadock B. (2009). Kaplan & Sadock Psiquiatría Clínica. Barcelona: Lippincott Williams & Wilkins. 7. Morínigo, J. (2003). Compendio de Psiquiatría. Asunción: Imprenta Salesiana. 8. Othomer, E. y Othomer. S. (1998). DSM – IV La entrevista clínica. Barcelona: Masson S.A. 9. Perales, A; Mendoza, A; Vázquez, G. y Zambrano, M. (1998). Manual de Psiquiatría “Humberto Rotondo”. Lima: Centro de producción edito- rial de la UNMSM. 10. Torales, J. (2012). Elementos mínimos indispensables del resumen de in- greso a sala. Asunción: Cátedra y Servicio de Psiquiatría, Universidad Nacional de Asunción (inédito). 11. Vallejo Ruiloba, J. (2011). Introducción a la psicopatología y a la Psiquia- tría. Barcelona: Elsevier Masson. 57 CAPÍTULO 2 INTRODUCCIóN A LA PSICOFARMACOLOGÍA Prof. Dr. Néstor Girala Salomón, Dr. Julio Torales Benítez, Dr. José Andrés Bogado, Dra. María Bettina Ortiz & Dr. Marcos Hernán Capurro Existen cinco grupos principales de medicamentos psiquiátricos: Antidepresivos: utilizados para el tratamiento de trastornos como la depre- sión, trastorno distímico, ansiedad, trastornos alimentarios y trastorno lí- mite de la personalidad, entre otros. Antipsicóticos: utilizados para el tratamiento de los distintos tipos de psico- sis y el trastorno bipolar con síntomas psicóticos y en otras indicaciones en el caso de los antipsicóticos de nueva generación. Estabilizantes del estado de ánimo: Utilizados para el tratamiento del trastor- no bipolar y el trastorno esquizoafectivo. Benzodiazepinas: utilizados para el tratamiento del insomnio y los trastor- nos del espectro ansioso. Antidemenciales: o promotores cognitivos. Son usados para el tratamiento de las demencias. ANTIDEPRESIVOS Mecanismo de acción Todos los antidepresivos disponibles ejercen su acción antidepresiva a tra- vés del incremento de la disponibilidad de monoaminas (serotonina [5HT], noradrenalina [NA] y dopamina [DA]) mediante: • Inhibición presináptica de la recaptación de la 5HT, NA o DA; • Actividad antagonista en los sitios receptores de 5HT y NA; 58 • Inhibición de la monoamino oxidasa, reduciendo la degradación de neuro- transmisores; y, • Incremento de la disponibilidad de los precursores de neurotransmisores. Aunque el incremento neto de los neurotransmisores ocurre inmediata- mente siguiendo a la administración de los antidepresivos, la resolución inicial de los síntomas depresivos ocurre entre 1 a 2 semanas después, lo cual señala que el efecto terapéutico involucra mecanismos posiblemente relacionados con la regulación de los receptores en el tiempo y cambios en la señalización intracelular. Antidepresivos Tricíclicos (ATC) ATC más utilizados: amitriptilina, clorimipramina, imipramina, maprotilina. Mecanismo de acción: inhibidores de la recaptación de 5HT y NA (y DA). Efectos colaterales: anticolinérgicos (sequedad bucal, visión borrosa, cons- tipación, retención urinaria, sedación, confusión/problemas de memoria, palpitaciones), por bloqueo alfa adrenérgico (sedación, hipotensión postu- ral, síncope, taquicardia, disfunción sexual), antihistaminérgico (sedación, incremento de peso). Ventajas: eficacia bien establecida; muy efectivos en depresión severa; bajo costo. Desventajas: toxicidad en sobredosis; puede que tenga menos tolerancia en comparación a los Inhibidores Selectivos de la Recaptación de Serotonina (ISRS); todos los ATC pueden llegar a disminuir la conducción cardiaca y disminuir el umbral convulsivo. Eficacia cuestionada en niños y menor eficacia en depresiones con rasgos atípicos. Mayor riesgo de inducir episo- dios maníacos. Contraindicaciones: infarto agudo de miocardio, bloqueo cardiaco, arritmias. Precauciones: embarazo y lactancia; enfermedad cardiovascular, hepática, renal; enfermedades endocrinas (hipertiroidismo, tumores adrenales, dia- betes); retención urinaria/hipertrofia prostática; constipación; glaucoma; epilepsia; trastornos psicóticos; pacientes con pensamientos suicidas; an- cianos (utilizar baja dosis). 59 Interacciones significativas: alcohol, anticoagulantes, anticonvulsionantes antihipertensivos, antipsicóticos, barbitúricos, benzodiazepinas, cimetidi- na, digoxina, IMAO, metilfenidato, ISRS, tabaquismo. Inhibidores Selectivos de Recaptación de Serotonina (ISRS) ISRS más utilizados: fluoxetina, paroxetina, fluvoxamina, sertralina, citalo- pram y escitalopram. Mecanismo de acción: inhibición de recaptación de serotonina (produce un aumento de serotonina en la hendidura sináptica). Efectos adversos: agitación, acatisia, ansiedad, pánico, insomnio, disfunción sexual, nauseas, alteración gastrointestinal, diarrea, cefalea. Ventajas: fácil dosificación; mejor tolerados que los ATC, pues son menos cardiotóxicos; menos efectos colaterales anticolinérgicos; baja toxicidad en sobredosis. Desventajas: comúnmente causa nauseas y malestar gastrointestinal, cefa- lea, inquietud, y insomnio; pueden ser menos efectivo en episodios depre- sivos severos; problemas de discontinuación. Contraindicaciones: episodio maniaco. Precauciones: efectos inhibitorios significativos y variables sobre las enzi- mas hepáticas P450 (particularmente CYP2D6). Por lo tanto tener cautela al prescribir con fármacos que son sometidos a una metabolización hepá- tica extensa y tienen un rango terapéutico estrecho. Estas interacciones varían según el fármaco utilizado. Interacciones significativas: alcohol, anticoagulantes, anticonvulsionantes, antipsicóticos, benzodiazepinas, B-bloqueantes, bupropión, buspirona, ci- metidina, ciproheptadina, hipoglicemiantes, litio, metadona, IMAO, mor- fina, tabaquismo, ATC, teofiliina, warfarina. 60 Inhibidores de Recaptación de Serotonina y Noradrenalina (IRSNS) IRSNS más utilizados: venlafaxina y duloxetina. Mecanismo de acción: a baja dosis actúan como un ISRS, a dosis moderadas como un inhibidor de la recaptación de 5HT y NA. A alta dosis actúan como un inhibidores de la recaptación de 5HT, NA y DA. Efectos adversos comunes: náuseas, malestar gastrointestinal, constipa- ción, pérdida de apetito, sequedad bucal, mareos, agitación, insomnio, dis- función sexual, cefalea, nerviosismo, sudoración, debilidad muscular. Ventajas: útil en el tratamiento de síndromes de dolor crónico y de inconti- nencia urinaria (duloxetina). Desventajas: dosis moderadas a altas menos toleradas; precisa de una mo- nitorización de la presión arterial cuando se utilizan dosis mayores de 200 mg; efectos colaterales molestosos, efectos de la discontinuación son co- munes. Precauciones: en glaucoma secundario a midriasis. Otros Antidepresivos Mirtazapina Mecanismo de acción: es un antidepresivo que actúa como antagonista de receptores alfa-2-adrenérgicos y serotoninérgicos 5-HT2 y 5-HT3. Por este mecanismo incrementa la actividad noradrenérgica y serotoninérgica. Efectos adversos comunes: sedación, incremento de apetito e incremento de peso. Son efectos menos frecuentes la elevación de las transaminasas, ictericia, edema, hipotensión ortostática, temblor, mioclonías, discrasias sanguíneas (raro, discontinuar tratamiento). Ventajas: baja toxicidad en sobredosis, menos disfunción sexual y malestar gastrointestinal. Desventajas: Incremento de peso, efectos sedativos pueden ser menores a altas dosis (puede ser utilizado como ventaja). 61 Bupropión Mecanismo de acción: inhibición de la recaptación de NA y DA. Efectos adversos comunes: agitación/insomnio, sequedad bucal, hiperten- sión (especialmente si es concomitante con parches nicotínicos), riesgo de convulsiones. Ventajas: mecanismo de acción
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