Joffe Representaciones sociales del SIDA (F 2901)

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Joffe H.
Representaciones sociales del SIDA
Las RS dominantes concernientes al origen y desarrollo del SIDA han contenido
frecuentemente, alusiones a “grupos de riesgo”. Este escrito focaliza en las
consecuencias psicológico-sociales de estas alusiones para los miembros de uno de los
grupos de riesgo: hombres gay. Las entrevistas profundas fueron suministradas a una
muestra de hombres gay británicos y sudafricanos, parte de los cuales tenían VIH-
SIDA. La evidencia de una identidad deteriorada era acompañada de la utilización de
mecanismos (conscientes e inconscientes) para manejar esta identidad. Estos
mecanismos son dispuestos desde el empoderamiento del grupo activo para la
idealización y externalización del SIDA. 
Uno de los aspectos más intrigantes de la crisis del SIDA, es el vínculo directo que se ha
establecido entre el SIDA y la homosexualidad. La identidad homosexual masculina ha
sido acusada en el desarrollo y génesis del SIDA. Instituciones como la ciencia y los
más media, han estado centralmente involucrados en esta acusación. 
Desde el principio, el SIDA ha estado controlado por RS que lo limitaron a ciertas
identidades, a grupos de riesgo, más que ha comportamientos practicados por alguien. 
Culpar a ciertos grupos por el SIDA, hace sentir a aquellos que culpan protegidos y
seguros. Paradójicamente, la proyección de culpa sobre “el otro” torna a los que culpan
más vulnerables al virus, porque éstos no sienten necesidad de tomar precauciones
contra él. Sin embargo, una RS que une SIDA con hombres gay, no podría ser
experimentada como protectora por los propios gay.
La identificación con un miembro del grupo estigmatizado (Goffman) lo liga a una
identidad desviada que es vista como ofensiva y repelente en la sociedad mayor. Ellos
se avergüenzan de esta identidad, y así obtienen una “identidad deteriorada”. El
conjunto de miembros de una comunidad de personas que están sujetas al mismo
estigma puede proteger el autoestima “positivo” de un miembro de la comunidad.
Siguiendo la noción de influencia de las minorías, la adquisición de poder político es un
modo (entre otros) importante en el que un grupo minoritario puede impactar sobre las
RS dominantes.
Metodología
Este escrito se focaliza en las entrevistas profundas conducidas con 20 hombres gay
entre 1990/1992. La mitad de los hombres eran británicos y la otra, sudafricanos. Los
hombres fueron solicitados para hablar acerca de: 
- dónde se originó el VIH-SIDA
- cómo se esparció el VIH-SIDA
- cuáles grupos pueden ser los peor afectados por el SIDA en su país.
Las campañas de SIDA de los más media representan una posición central oficial sobre
el SIDA para las masas. Éstas, tanto en Sudáfrica como en Gran Bretaña, nacieron
contra un fondo de presiones sobre los respectivos gobiernos para hacer consciente a la
población de su riesgo de infección de VIH. Un interés central de la campaña británica
fue fomentar la responsabilidad individual por contraer el VIH. En amplio resumen, el
eje central de la campaña sudafricana fue similar al de la británica; había una clara fase
de responsabilidad individual en la población y una clara falta de responsabilidad
gubernamental por la contención de la epidemia.
Resultados
Una amplia trama de RS se pone de manifiesto cuando los miembros de uno de los
grupos visto como de los más afectados y esparcidores de SIDA, son interrogados para
que hablen sobre el origen y desarrollo de la enfermedad. 
Se supone que las voces externas dominantes tienen un impacto sobre las voces de los
hombres gay.
Identidad deteriorada
La incredulidad del hombre británico sobre su test de VIH negativo, indica que él espera
contraer el SIDA por su identidad, más que por sus prácticas: él nunca ha practicado
sexo inseguro. El hombre sudafricano implica esto también en sus respuestas. Quizá
como una consecuencia de unir su identidad al SIDA, los hombres homosexuales
comienzan a verse en una forma altamente negativa, coincidiendo con lo que Goffman
llamó la “identidad deteriorada”.
Hay evidencia de un deseo de ocultar aquello que pueda estigmatizarlos. La identidad
deteriorada de estos hombres es unida no sólo al mero hecho de ser gay sino también a
lo que los hombres gay hacen. El lazo entre SIDA, hombre gay y castigo de dios,
contribuye a una identidad deteriorada.
La culpa, el estigma y una consecuente identidad deteriorada no están fijas. Al
contrario, están caracterizadas por formas conscientes e inconscientes de resistencia. La
identidad deteriorada es manejada en, al menos, 3 formas:
*Idealización: la identidad deteriorada es resistida cuando la gente con VIH y con SIDA
ve su condición bajo una luz idealizada. La mayoría de las personas con VIH-SIDA
muestran una visión altamente positiva de su condición. La idealización es el intento de
mantenerse en un mundo bueno y perfecto cuando el mundo propio se siente alterado.
*Externalización de la amenaza: la culpa por el origen y desarrollo del SIDA es a
menudo externalizada por los hombres gay en este estudio. Farmer sostiene que los
grupos que han sido culpados por el SIDA por parte de una cultura más amplia, son
susceptibles a unirse a teorías de su origen y desarrollo. La mitad de los británicos en
esta muestra adhiere a tales teorías, aunque sólo uno de los sudafricanos alude a tales
ideas. Esto puede ser visto en términos de un mecanismo de resistencia a una identidad
deteriorada internalizada.
*Empoderamiento: mientras que los dos métodos anteriores de resistencia contienen un
elemento inconsciente, el empoderamiento es una estrategia consciente, utilizada por
varios grupos oprimidos para lograr unificación cuando la identidad de grupo se haya
amenazada. Para alcanzar la unificación y la consecuente adquisición de poder que
surge de allí, los miembros del grupo oprimido necesitan reconocer su identidad de
grupo, y tener una historia de unidad previa al comienzo de la crisis.
Los que sufrían la plaga del SIDA tenían una voz y la usaron de varias maneras, una de
las cuales fue crear consciencia de las nocivas RS del SIDA que estaban circulando.
Discusión
Las RS dominantes, que ligan SIDA con identidad y práctica gay, proveen una
conceptualización, sustancian un sentido común que es central en la creación de
identidad deteriorada de hombres gay. Viendo al SIDA como una afección de otros
desviados, las corrientes principales de la sociedad permanecen sin amenazas,
distanciándose de los temores de muerte y disolución. Así, la “otrización” y la resultante
identidad deteriorada entre los “otros” sobrevive en el corazón de las RS de masa.
Aun así, formas consientes e inconciente de resistencia a las RS dominantes coexisten
con, y últimamente modifica, estas representaciones.
El empoderamiento no solo les provee protección contra el contagio de VIH, sino que
también permite a gente con VIH y SIDA, manejarse con el despliegue de su
enfermedad vía una serie de cambios basados en el estilo de vida.
La RS opera en términos de defensa y resistencia. Le permite a persona de diferentes
grupos sociales arreglárselas con el desafío de mantener una positiva identidad propia y
del endo-grupo. Aun así, su función auto-defensiva batalla con su función social que es
la de reproducir la relación existente entre normalidad y desviación. Cuando un grupo
estigmatizado tiene poco empoderamiento, la función social prevalece, modelando la
“identidad deteriorada” de las representaciones. Cuando tal grupo adquiere mas poder la
función defensiva toma precedencia revelando RS que resisten las presiones que
intentan desfigurar una positiva auto-identidad. 
Diferentes grupos sostiene diferentes representaciones sociales de los fenómenos en el
mundo social, pero se posiciona en relación a la RS dominantes.