Logo Studenta

Parasitosis transmitidas por contacto directo prevención y control

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

Parasitosis transmitidas por contacto directo: prevención y control 
Las parasitosis transmitidas por contacto directo son aquellas enfermedades 
parasitarias que se propagan de persona a persona a través del contacto directo 
con la piel, las mucosas o los fluidos corporales de individuos infectados. Algunos 
ejemplos comunes incluyen la sarna (causada por el ácaro Sarcoptes scabiei) y la 
pediculosis (infestación de piojos en el cabello o el cuerpo). Aquí hay algunas 
estrategias importantes para la prevención y el control de estas parasitosis: 
Educación y concienciación: La educación sobre prácticas higiénicas adecuadas 
es fundamental para prevenir la transmisión de parasitosis transmitidas por 
contacto directo. Esto incluye instrucciones sobre el lavado frecuente de las 
manos, el uso de ropa limpia y evitar compartir artículos personales como peines, 
cepillos, ropa y toallas. 
Promoción de la higiene personal: Fomentar la higiene personal, como ducharse 
regularmente, lavarse el cabello y mantener las uñas cortas y limpias, puede 
ayudar a prevenir la propagación de las parasitosis transmitidas por contacto 
directo al eliminar los parásitos y los huevos de la piel y el cabello. 
Tratamiento de personas infectadas: Es importante identificar y tratar a las 
personas infectadas lo antes posible para prevenir la propagación de la infestación 
a otras personas. El tratamiento generalmente implica el uso de medicamentos 
tópicos o medicados para eliminar los parásitos, así como medidas adicionales 
para desinfectar la ropa, la ropa de cama y otros objetos personales. 
Control de brotes: En caso de un brote de parasitosis transmitidas por contacto 
directo en comunidades o instituciones (como escuelas, centros de cuidado infantil 
o prisiones), es importante implementar medidas de control rápidas y efectivas, 
como la identificación y el tratamiento de casos, la limpieza y desinfección de 
áreas comunes y la educación sobre la prevención y el manejo de la infestación. 
Manejo de contactos cercanos: Es importante identificar y tratar a los contactos 
cercanos de las personas infectadas para prevenir la propagación de la 
infestación. Esto puede incluir miembros de la familia, compañeros de habitación, 
compañeros de clase o personas que hayan compartido artículos personales con 
el individuo infectado. 
Control ambiental: En entornos donde las parasitosis transmitidas por contacto 
directo son endémicas o recurrentes, se pueden implementar medidas de control 
ambiental adicionales, como la limpieza regular de superficies y objetos 
potencialmente contaminados, el lavado de ropa y ropa de cama con agua 
caliente, y el uso de insecticidas o productos repelentes según sea necesario. 
En resumen, la prevención y el control efectivos de las parasitosis transmitidas por 
contacto directo requieren una combinación de educación, higiene personal, 
tratamiento oportuno de personas infectadas, control de brotes y medidas de 
control ambiental. La colaboración entre autoridades de salud, profesionales 
médicos y la comunidad es fundamental para reducir la transmisión y la carga de 
estas enfermedades parasitarias.

Continuar navegando