Logo Studenta

299280633-Introduccion-a-La-Educacion-Cristiana-y-Pedagogi1

¡Este material tiene más páginas!

Vista previa del material en texto

Introducción a la Educación Cristiana y Pedagogía
1. GENERALIDADES
1.1 Unidades 3
1.2 Horas 48
1.3 Área Ministerio
1.4 Nivel Básico
1.5 Semestre
1.6 Libro(s) de texto Hendricks, Howard. Enseñando para cambiar vidas. Unilit, 1995, 141
más suplemento de 91 páginas
Lefever, Maelene D. Estilos de aprendizaje. Patmos, 2003
Hemphill, Ken. Revitalice el dinosaurio dominical. Casa Bautista, 20001.7 Libro
alternativo
2. DESCRIPCIÓN DE LA MATERIA
Esta materia nos describe los principios básicos de la Educación Cristiana, las leyes,
técnicas y factores que gobiernan el proceso de Enseñanza-Aprendizaje.
3. OBJETIVOS
3.1 ACTITUDES
3.1.1 Ser instrumentos en el arte de formar a través de la tarea educativa.
3.1.2 Apreciar la visión y misión de la Educación Cristiana del Instituto Bíblico.
3.2 CONOCIMIENTOS
3.2.1 Identificar los principios básicos que rigen la educación cristiana.
3.2.2 Conocer los factores psicológicos que gobiernan el proceso de enseñanza-aprendizaje.
3.2.3 Aprender técnicas y diferentes métodos de enseñanza.
3.3 HABILIDADES
3.3.1 Enseñar clases bíblicas en la iglesia local, campamentos e Institutos Bíblicos.
3.3.2 Dirigir cursos y seminarios para formar e integrar a otros en la tareas educativa.
3.3.3 Practicar en clases las técnicas y métodos a través de grupos de estudios.
4. TEMÁTICA BÁSICA
4.1 Introducción a la Educación Cristiana 
4.2 La Institución de la Educación Cristiana en la iglesia local. 
4.3 El Maestro de Educación Cristiana 
4.4 La Pedagogía y el proceso de Enseñanza-Aprendizaje 
4.5 Los Estudiantes y sus necesidades 
4.6 Técnicas y métodos de enseñanza. 
4.7 Confección de tares y exámenes. 
4.8 Pasos en la preparación de la lección. 
4.9 Planes de curso y plan de clases. 
5. SUGERENCIAS METODOLÓGICAS
5.1 Diseñar un perfil del maestro bíblico.
5.2 Describir las características y el modo de aprender de los estudiantes pre-adolescentes y
adolescentes.
5.3Confeccionar un plan de curso basado en una materia.
5.4 Elaborar un plan de clase basado en una lección bíblica para adolescentes.
5.5 Confeccionar dos tipos de exámenes:
1. Selección múltiple
1
2. Emparejamiento
5.6 Preparación de un panel con mesa redonda, sobre la influencia negativa que ejercen los
medios de comunicación en los niños y que respuesta tiene la educación cristiana, para
enfrentar este flagelo.
5.7 Dividir las clases en grupos de estudio para el desarrollo de algunas temáticas.
6. CRITERIOS GENERALES DE EVALUACIÓN 
6.1 Examen30%
6.2 Tareas20%
6.3 Grupos de Estudio15%
6.4 Presentación de una clase utilizando técnicas y métodos20%
6.5 Participación en clases5%
6.6 Asistencia5%
6.7 Lectura del libro de texto5%
100% TOTAL
I. Introducción a la Educación Cristiana.
Cuando escucha las palabras “Educación Cristiana”, ¿qué le viene a la mente? ¿Piensa
solamente en la “Escuela Dominical”? ¿O piensa en la totalidad de la Educación que se
considera Cristiana? La Escuela Dominical ciertamente es una parte importante de la
Educación Cristiana, pero ésta también incluye los Centros Educativos Cristianos
(educación preescolar, primaria y secundaria), la Iglesia Infantil, Capacitación para
Obreros, Capacitación para Jóvenes, Educación Musical, Entrenamiento Misionero y
Capacitación para el Liderazgo de la Iglesia. Este último incluye muchas áreas para el
desarrollo y crecimiento personal – Explosión de Evangelismo, Discipulado, Ministerio de
Oración, Desarrollo Familiar, Capacitación para Padres, Consejería Prematrimonial y
Matrimonial, Clases de Membresía, Capacitación en Destrezas Manuales y Artísticas,
Capacitación para el Desarrollo de la Iglesia, Educación sobre el Abuso de las Drogas y el
Alcohol, Capacitación en Valores – todos estos y más están incluidos en el ministerio
educativo de la iglesia. ¿Por qué la Educación Cristiana? ¿En qué consiste? ¿Cómo vamos a
implementar programas para la Educación Cristiana? Dado que la Educación Cristiana es
un área interdisciplinaria, busca orientación en muchas direcciones. Sin embargo, dado que
es una disciplina en sí misma, debe formular su propio punto de vista como base para crear
y desarrollar sus objetivos. Las definiciones son, por lo tanto, de primordial importancia
para una clara identidad y objetivos propios, y para un claro sentido de dirección. (Miller)
La Educación Cristiana es uno de los ministerios claves dentro de la iglesia. Se nutre de la
Biblia, la teología, la historia Cristiana y la experiencia Cristiana para el contenido de sus
enseñanzas. Tiene una herencia de verdad Cristiana para recibir, entender y transmitir.
También es la responsable de nutrir la fe Cristiana en las personas a las que ministra. Es
educación Cristiana. En 2 Timoteo 2:2 se nos informa que la enseñanza no es un ministerio
de mediocridad, sino un ministerio de multiplicación. Ningún ser humano está totalmente
consciente del poder que reside en la enseñanza. Cada vez que una persona enseña, inicia
un proceso que, idealmente, nunca termina. La iglesia debe enseñar. No es opcional, sino
2
esencial, no sólo es bueno, sino necesario. La iglesia que deja de educar, deja de existir
como una iglesia del Nuevo Testamento. El Cristianismo debe ser propagado.
Jesucristo lo Ordena. Mateo 28:19-20 enfoca el lente de acercamiento del Espíritu
Santo en la Gran Comisión, las últimas palabras de Cristo resucitado, Cabeza de la
Iglesia, a Sus discípulos.
Mateo 28:19-20 – “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en
el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo, enseñándoles que guarden todas las
cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del
mundo. Amén.” La Gran Comisión aparece en cinco ocasiones en el Nuevo Testamento, lo
cual indica que no es un aspecto secundario, sino parte fundamental de la estrategia de
nuestro Señor. Mateo 28:19-20 (citado arriba)
Marcos 16:15-16 – “Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda
criatura. El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será
condenado”.
Lucas 24:46-48 – “…y les dijo: Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo padeciese
y resucitase de los muertos al tercer día; y que predicase en su nombre el arrepentimiento y
el perdón de pecados en todas las naciones, comenzando desde
Jerusalén. Y vosotros sois testigos de estas cosas”.
Juan 20:21-23 – “Entonces Jesús les dijo otra vez: Paz a vosotros. Como me envió el
Padre, así también yo os envío. Y habiendo dicho esto, sopló, y les dijo: Recibid el
Espíritu Santo. A quienes remitiereis los pecados, les son remitidos; y a quienes se los
retuviereis, les son retenidos”.
Hechos 1:8 – “…pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu
Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la
tierra”. El mandato de “hacer discípulos” incluye esencialmente la enseñanza. Sin embargo,
debemos tomar en consideración que la enseñanza a la que se llama es de índole particular,
a saber, la enseñanza de “obedecer todo” lo que Cristo ordenó. En otras palabras, Su
enseñanza está diseñada para producir tanto información como transformación. Esta clase
de instrucción es muy demandante e increíblemente difícil de llevar a cabo. 
Lucas 6:40 pone de manifiesto el objetivo de Cristo con respecto a Su enseñanza cuando
dice: “el discípulo no es superior a su maestro; mas todo el que fuere perfeccionado, será
como su maestro”. La verdad de Dios no nos fue revelada para satisfacer nuestra
curiosidad, sino para transformarnos a la imagen de Cristo. No obstante, la educación
Cristiana es también educación y debe reflexionar sobre la pregunta de por qué y cómo ha
de llevar a cabo esta tarea. Requiere una filosofía a través de la cual llegar a algunas
conclusiones operativas con respecto a sus objetivos únicos y a los procedimientos
adecuados para lograrlos.Las leyes del aprendizaje son comunes a todos los campos del
conocimiento. Por lo tanto, la Educación Cristiana necesita dominar la psicología del
aprendizaje para poder relacionar estos importantes principios con sus propias tareas de
enseñanza-aprendizaje en la promoción de la fe Cristiana.
II. La Institución de la Educación Cristiana en la iglesia local.
La Educación Cristiana en la Iglesia. Parece haber un consenso virtualmente universal de
que la Iglesia, concebida como el Cuerpo de Cristo, tiene un ministerio educacional, y que
este ministerio apoya y contribuye a todos los otros ministerios de la Iglesia. Esto no quiere
decir que los educadores Cristianos están intentando dominar otros ministerios – sino que la
Iglesia busca generar cambio, y en esto consiste el proceso de la educación. Ningún aspecto
3
del quehacer de la Iglesia puede estar separado de la tarea educacional. Un destacado
educador Cristiano menciona en su libro, La Misión Educativa, que “un programa de
educación Cristiana eficaz…necesita ser planificado a la luz de la misión total de la
iglesia”. (Shinn)
Existe una firme convicción de que la Educación Cristiana debe preocuparse por transmitir
la herencia Cristiana esencial de fe y vida, es decir, la doctrina y la ética. Esta herencia se
encuentra primeramente en las Escrituras, y además en la historia y la teología Cristianas.
El evangelio Cristiano y la Biblia, los cuales comunican las “buenas nuevas”, son
esenciales en la Educación Cristiana.
Si alguna vez la Educación Cristiana estuvo centrada únicamente en el contenido o en la
experiencia, ya no es así. La Educación debe involucrar una viva interacción de ambos
elementos. La mayoría de los educadores Cristianos insisten en que el contenido y la
experiencia son esenciales para la educación Cristiana. Los tesoros de la Biblia, por
ejemplo, deben ser relevantes y significativos en la experiencia del alumno antes de que
pueda ocurrir un cambio personal constructivo. Se entiende que sin la interiorización del
mensaje del evangelio, la Educación Cristiana muchas veces no tiene éxito. Por ende, tanto
el contenido Bíblico como la experiencia Cristiana son indispensables para la tarea
educacional de la iglesia.
Otra convicción dentro de este consenso emergente consiste en que la Educación Cristiana
debe comunicar un sentido de mayordomía como una filosofía de vida. En todas sus
relaciones, el discípulo Cristiano debe estar motivado por un deseo de servir a Dios y a sus
semejantes; debe ser una fuerza redentora y sanadora en la iglesia y en la sociedad. La
Educación Cristiana puede ser definida como uno de los ministerios esenciales de la Iglesia,
por medio del cual la comunidad de creyentes busca:
 (1) preparar a cada alumno para recibir el poder del evangelio en la conversión y la entera
santificación; 
(2) inspirar y dirigir a los creyentes para que experimenten el crecimiento personal en las
gracias Cristianas y en el conocimiento de la verdad, expresada en Jesús; y 
(3) asistirlos en la preparación y el descubrimiento de un lugar de servicio productivo en el
Cuerpo de Cristo y en el mundo más allá de la iglesia (Sanner, Explorando la Educación
Cristiana, p.19).
Se puede plantear la pregunta “¿Por qué es necesaria la Educación Cristiana?” En cualquier
proceso educativo se reconoce la importancia de trazar objetivos, propósitos y metas –
términos muchas veces intercambiables. Un objetivo es una meta, un destino. Los objetivos
pueden variar en su naturaleza o carácter. Los objetivos pueden ser psicológicos, operativos
o teológicos. Los objetivos pueden enfatizar los cambios esperados en el área personal, o
las técnicas por medio de las cuales la Educación Cristiana se lleva a cabo, o el contenido
del currículo. Los objetivos pueden ser generales o específicos; por ejemplo, pueden
intentar establecer una política general, o pueden identificar metas o pasos intermedios a
través de los cuales se ha de alcanzar un propósito primario.
III. El Maestro de Educación Cristiana.
Los maestros son el ingrediente más importante en cualquier programa educativo.
Por supuesto, el currículo, el salón de clases y el equipo son factores significativos. Pero en
última instancia, es el maestro quien abre la puerta a la educación de alta calidad. Es
lamentable, por lo tanto, que las iglesias presten más atención y cuidado a la compra de una
nueva impresora o a la escogencia del color de la alfombra que a la selección de los
4
maestros de la Escuela Dominical. Con demasiada frecuencia las iglesias nombran maestros
con base en su disponibilidad, personalidad o comportamiento fuera del salón de clase. Esta
forma de seleccionar de maestros tiene tanto sentido como escoger una aspiradora “porque
es muy bonita”. ¿Acaso escogemos un mecánico para nuestro auto por su agradable
personalidad? ¿O escogemos un doctor por su apariencia atractiva? ¿Por qué, entonces, la
personalidad y el estilo son con frecuencia los criterios principales para escoger los
maestros de la Escuela Dominical? Los maestros efectivos se distinguen de sus colegas
menos efectivos principalmente por lo que hacen en el salón de clase. Esto puede parecer
obvio, pero con frecuencia se pasa por alto. Todos conocemos personas que han sido
nombradas para enseñar porque tienen una “personalidad brillante”, porque conocen mucho
de la Biblia, son ejemplos dignos de imitar, aman a los niños, o porque hacen sentir bien a
los demás. Todas estas son características positivas, pero tienen poco que ver con lo que el
maestro realmente hace en la clase. Ninguno de nosotros escogería un cirujano
simplemente porque tiene una personalidad agradable o porque usa ropa elegante. Más
bien, queremos asegurarnos de que su desempeño en la sala de operaciones es competente.
Debemos evaluar el desempeño de los maestros de la Biblia en términos de cuánto sus
alumnos aprenden de la Biblia y cuánto de ello aplican en su diario vivir.
Existe, por lo tanto, una serie de cosas que los maestros efectivos hacen en su clase: 
(1) Promueven un aprendizaje activo; 
(2) Motivan a sus alumnos; 
(3) Se comunican con claridad; 
(4) Hacen que cada minuto de clase cuente;
 (5) Hacen que la verdad sea personal;
 (6) Logran una atmósfera de clase constructiva; y 
(7) Distinguen entre situaciones de mayor y menor importancia.
Cuando hemos identificado todas estas cualidades, e incluso si todas ellas se encuentran en
una persona, aún se plantea la pregunta “¿Cómo?” ¿Cómo podemos ayudar a los alumnos a
pasar de la Palabra escrita de Dios a la Palabra Viva, Jesucristo? ¿Cómo podemos ayudarlos
a aplicar las Escrituras a la vida diaria? ¿Cómo podemos ayudarlos a dar el siguiente paso
hacia la madurez en Cristo? La respuesta es muy simple, pero difícil de llevar a cabo en
nuestras formas tradicionales. Los alumnos deben tener un papel muy importante en el
proceso de aprendizaje, pues son ellos quienes deben tener un trato con Dios, quienes deben
cambiar su conducta diaria, quienes deben crecer en la gracia.
 Es verdad que los alumnos siempre aprenden algo, pero con frecuencia lo que aprenden no
es lo que el maestro trataba de enseñar. El crecimiento de un alumno no está determinado
por lo que oye, sino por lo que hace con respecto a lo que oye. Lo importante es lo que está
sucediendo dentro del alumno. Si trabajamos con el Espíritu de Dios, Él puede usarnos para
efectuar cambios internos. El Espíritu Santo es el único Maestro capaz de trabajar tanto a lo
interno como a lo externo del alumno; esta es la razón por la que Cristo dijo a Sus
discípulos que el Espíritu los guiaría a toda verdad y les declararía las cosas que habrían de
venir. La enseñanza es guiar y declarar – guiar a los alumnos y declarar la verdad. Un
verdadero maestro no duda en declarar la verdad, en un contexto de guiar a los alumnos. Si
el maestro sólodeclara, se convierte en un predicador. Un maestro debe tener la habilidad
de guiar, dirigir y ayudar a sus alumnos en su aprendizaje.
IV. La Pedagogía y el proceso de Enseñanza-Aprendizaje.
5
La enseñanza que impacta no es de cabeza a cabeza, sino de corazón a corazón.
Esta es la ley del corazón, y es cierta mientras usted entienda el significado bíblico de la
palabra corazón.
Es una de esas palabras difíciles de definir y que se presta al sentimentalismo. En la
actualidad tenemos la tendencia de usarla con poca precisión, pero los escritores del
Antiguo Testamento nunca la usaron así.
Deuteronomio 6.4-6es un pasaje que revela el contexto bíblico de la palabra. Moisés dijo:
«Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es. Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu
corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. Y estas palabras que yo te mando hoy,
estarán sobre tu corazón».
Para los hebreos, el corazón abarcaba la totalidad de la persona- su intelecto, sus
emociones, su voluntad.
Así que el proceso de la enseñanza consiste de una personalidad transformada por la gracia
sobrenatural de Dios que busca transformar a otras personalidades por la misma gracia. I
Qué privilegio! Lo más fácil del mundo es tomar solo el camino de la cabeza. Tomar el
camino del corazón es mucho más difícil. Pero también es el más remunerador. De hecho,
transforma vidas.
Carácter-Compasión-Contenido
Sócrates resumió la esencia de la comunicación en tres conceptos fascinantes que llamó
ethos, pathos, y lagos. 
Ethos comprendía el carácter. 
Pathos comprendía la compasión.
 Lagos comprendía el contenido.
Ethos, como Sócrates lo consideró, significa establecer la credibilidad del maestro, sus
credenciales. Él entendió que quien usted es, es mucho más importante que lo que diga o
haga, porque esto determina lo que usted dice y hace. Quien usted es como persona es su
mayor palanca como orador, como persuasor, como comunicador. Usted debe ser atractivo
para quienes aprenderán de usted. Deben confiar en usted, y mientras más confian, más
usted les comunica.
Pathos, o compasión, se refiere a cómo el maestro estimula los sentimientos de sus oyentes
y dirige sus emociones. Sócrates sabía que nuestras emociones deben correr en la dirección
de nuestras acciones. Este es el secreto de la motivación, porque Dios nos creó como seres
con emociones y sentimientos.
Sócrates también sabía que los oradores y los maestros necesitan contenido, e
interesantemente le llamó lagos, la misma palabra griega usada para Jesucristo en Juan 1:
«En el principio era el Verbo
(lagos). y aquel Verbo (logas) fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria,
gloria como la del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad». Cuando Dios quiso
comunicarse con nosotros, envolvió su mensaje en una Persona. Eso es exactamente lo que
estamos llamados a hacer.
El concepto de lagos, por lo tanto, incluye la reunión y presentación ordenada de su
evidencia. Requiere la acción de la mente y da entendimiento. Provee razones para la
acción que usted desea que los estudiantes tomen, de modo que vean cuán lógica y
razonable es dicha acción. Por supuesto, como maestro usted puede enseñar sin carácter, sin
compasión, sin contenido. Pero razone conmigo qué consecuencia le traerá esto al
estudiante.
6
Porque el carácter del maestro es lo que produce la confianza del estudiante. Cuando yo
como estudiante veo la calidad de su vida, entonces sé que usted como maestro tiene una
contribución significativa que ofrecer a mi vida. Yo puedo confiar en usted. Sé que no me
va a mentir. El factor confianza, la confianza en usted, es la ventaja más grande que tiene en
la comunicación. Nunca haga algo para fragmentarla. Es lo más difícil de volver a ganar.
Entienda que la base de toda comunicación eficaz emana de nuestro interior.
Periódicamente pregúntese: «¿Qué clase de persona soy?»
Segundo, su compasión es la que produce la motivación del estudiante. Si yo siento que
usted me ama, estaré ansioso de hacer toda clase de cosas que usted quiere que yo haga.
¿Por qué siguieron los discípulos a Jesús? Es sencillo: Él los amaba. Los evangelios nos
dicen: «y saliendo Jesús, vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos». Hombres,
mujeres, jóvenes y niños, todos son atraídos a una persona que los ama. ¿Qué reacción
provocan las personas en usted? ¿Lo molestan? ¿Lo desafían? ¿A usted le gustan las
personas, o las considera una amenaza? Tercero, su contenido es lo que produce la
percepción del estudiante. Usted, como maestro, lo ha visto; ahora yo, como estudiante, lo
veo. Lo entiendo, lo he descubierto. Es mío, está entretejido en las fibras de mi vida. Los
mejores comunicadores-los mejores maestros- no son necesariamente las personas al frente,
las muy conocidas. Son aquellas personas que tienen un gran corazón. Ellos comunican con
la totalidad de su persona, y comunica la totalidad de la persona de sus oyentes.
El proceso de enseñanza-aprendizaje
Piense por un momento qué significa realmente enseñar y aprender.
Enseñar es causar. ¿Causar qué? Causar que las personas aprendan. Esta es la definición
más sencilla que conozco. Existe una relación muy esencial entre enseñar y aprender. Es el
proceso de enseñanza-aprendizaje, y note el guión. Estas palabras son inseparables. Si el
estudiante no aprende , no hemos enseñado. Ahora, por favor note: Enseñar es lo que usted
hace; aprender es lo que hacen sus estudiantes. Hemos preservado esta distinción en el
idioma español. Nunca decimos: «Yole aprendí», porque eso es imposible. El estudiante
debe aprender, el maestro solo puede enseñar.
Así que el enfoque de la enseñanza consiste primordialmente en lo que usted hace como
maestro, y el enfoque del aprendizaje consiste principalmente en lo que el estudiante hace.
Pero nosotros probamos la eficacia de su enseñanza no por lo que usted hace, sino por lo
que hace el estudiante como resultado de lo que usted hace. La definición más sencilla que
conozco del aprendizaje es esta:
Aprender es cambiar. Esencialmente, aprender significa un cambio en su conocimiento, un
cambio en su sentimiento, un cambio en su conducta. Aprender quiere decir que se produce
un cambio en la mente, en las emociones y en la voluntad. Cuando alguien haya aprendido,
esa persona habrá cambiado.
Pablo señala esto en Romanos 8.29: «Porque a los que antes conoció, también los
predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo». Subraye la palabra
conformes en su Biblia. Usted conoce el proceso. Usted toma el polvo de la gelatina, la
mezcla con agua, echa la mezcla en un molde para gelatina y la coloca en el refrigerador.
Horas más tarde la saca, la vierte en un plato y allí la tiene. Lo que Pablo quiere decir es
que usted está predestinado para que lo viertan en el molde de Jesucristo. ¡Esto sí que
requiere un cambio revolucionario!
Solo unas páginas más adelante, en Romanos 12.2, vemos a Pablo usando las mismas
palabras de nuevo: «No os conforméis a este siglo». O como J.B. Phillips lo parafraseó:
«No deje que el mundo que lo rodea lo ajuste a su propio molde». Coloque estos Pasajes
7
juntos y verá el propósito de Dios: Usted está predestinado para que lo viertan en el molde
de Jesucristo. Así que no permita que el mundo lo conforme a su molde, ya que estos dos
procesos están diametralmente opuestos. ¿y cómo podemos evitar que el mundo nos
moldee? Pablo responde: «Transformaos por medio de la renovación de vuestro
entendimiento». Lo evitamos por medio de la transformación una metamorfosis, No es una
transformación del exterior, sino del
Interior «por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál
sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta», Requiere que cambiemos- que
cambiemos radicalmente. Así somos conformados a la semejanza del Hijo de Dios. Así que
ustedviene a su clase y los desafía en el área del discipulado. Usted los lleva a Lucas 14y a
otros pasajes. Y dice:
-¿Quieren cambiar su vida?
--Seguro -responden.
-Entonces deséchenla.
-¿Desecharla? -exclama alguien-. ¿Pero acaso no sabe que solo vivimos una vez? Hay que
aprovechar tanto como se pueda Es interesante saber que personas sujetas a las
prohibiciones evangélicas puedan estar completamente saturadas por esa filosofía.
Exponemos a una dosis masiva del pensamiento mundano nos conforma al molde del
mundo. Pero abrimos camino para el cambio cuando nos alejamos de esto y dejamos que la
verdad viva de Dios se establezca en nuestras mentes, emociones y conducta.
Dónde comienza el aprendizaje
Todo aprendizaje comienza a nivel del sentimiento. Las personas aceptan lo que están
dispuestos a aceptar, y rechazan lo que están dispuestos a rechazar. Si ellos tienen una
actitud positiva, tienden a tomar para sí lo que oyen. Si su actitud es negativa, tienden a
dejarlo de lado. Si yo tengo sentimientos negativos hacia usted, rechazaré lo que dice
porque yo lo rechazo a usted. Pero si usted me cae bien-y si sé que usted está interesado en
mí- usted podrá lograr que yo haga las cosas más increíbles del mundo. Y es muy posible
que a mí también me agrade su Señor, quien lo hizo de la manera que usted es.
A nadie le importa lo que usted sabe hasta que saben que a usted les importa. ¿y qué de
aquellos a los que usted enseña?-¿Son receptivos u hostiles? Quizás mientras ellos lo oyen,
están pensando: «Ya he oído esto antes; y además, sospecho que usted es tan falso como el
último individuo que me quiso hacer ese cuento». Si es así, tiene una gran tarea por delante.
Así que desde la perspectiva bíblica el contenido es críticamente importante. Necesitamos
conocer la verdad que Dios nos ha revelado. Nunca olvide las verdades de la Palabra de
Dios. Pero el asunto no termina aquí. Hay más. Está el nivel del sentimiento, de las
emociones; y el de la voluntad -acción, conducta. La enseñanza y el aprendizaje bíblicos no
habrán tomado lugar hasta que la mente, las emociones, y la voluntad no hayan sido
cambiadas.
Sea una persona de impacto
Le daré tres cosas que puede tomar y explotar hasta dónde usted quiera, si desea ser una
persona de impacto. Nadie que lea este libro carece de la capacidad para hacer estas tres
cosas:
1. Ya esto lo hemos mencionado antes, y vale la pena repetirlo: Conozca a sus
alumnos. Mientras más conozca las necesidades de ellos, mejor capacitado estará para
satisfacerlas. Por supuesto, esto requiere un compromiso, y lleva tiempo, y aquí es donde
8
perdemos a tantos maestros. Pero no hay una fórmula mágica. La buena enseñanza tiene un
precio: Uno tiene que estar dispuesto a dar de su vida
2. Gane el derecho de ser escuchado. Usted no puede caminar por la calle y decirle al
primero que encuentre: «Yo sé cuál es su problema». Es muy probable que a usted le digan
unos cuantos insultos. Incluso, aunque usted sí sepa cuál es el problema, le garantizo que no
logrará hacer que esa persona lo escuche. La credibilidad siempre precede a la
comunicación.
Esté dispuesto a demostrar su vulnerabilidad ante sus estudiantes. Déjelos saber con qué ha
tenido que luchar y con qué ha luchado por años. Si tiene una clase de niños, cuénteles con
qué luchaba cuando tenía esa misma edad. Ellos se identificarán con eso y les encantará. Si
son adolescentes, déjeles saber que una vez usted fue adolescente y también tuvo sus
propios problemas. (Si usted no cree que los tuvo, pregúntele a algunos que lo conocieron
en ese entonces, y le darán algunos datos.)
Para reflexionar
(Preguntas para su evaluación personal y para discusión con otros maestros).
l. En sus propias palabras, ¿cómo describiría usted la enseñanza de «corazón a corazón»?
2. ¿A cuáles estudiantes de su clase aprecia más y por que? ¿Cuáles estudiantes piensa
usted que tienen la mayor «necesidad» de sentir su aprecio?
3. ¿Cómo afecta a su enseñanza las emociones y actitudes que usted ve en sus alumnos?
¿Alguna vez le desalientan? ¿Le levantan? ¿Le enfadan?
4. ¿Qué cree usted que disfrutan más los estudiantes de su clase y porque?
La comunicación es, un componente básico del proceso de enseñanza-aprendizaje, siendo
vital el trasvase de información para el logro del propósito educativo. El proceso de
comunicación educativa incluye: 
 A) El mensaje. Constituido por el contenido educativo, la materia o conjunto de
conocimientos que se pretende transmitir. 
 B) El emisor. El profesor actúa de fuente de información y de origen de la
comunicación. 
 C) El receptor. El alumno recibe la comunicación y descodifica el mensaje. 
 D) El medio. Las explicaciones son recibidas por vía auditiva o visual. Este aspecto es
de suma importancia, pues una adecuada compatibilización de explicaciones verbales y
ayudas visuales, es crucial para el correcto desarrollo de la comunicación. La utilización de
las diversas formas de ayudas visuales se debe adaptar a la audiencia, y coordinar
adecuadamente con la exposición oral 
El proceso de comunicación es un proceso interactivo en el que el alumno también emite
mensajes hacia el profesor. Es, por tanto, una comunicación bidireccional que debe
utilizarse por parte del docente como fuente de información para detectar fallos en su labor
docente, para subsanar carencias de información de los estudiantes y para confirmar la
consecución de los objetivos propuestos. 
 
 Este carácter bilateral de la comunicación es fundamental como sistema de
adquisición de información que permite controlar el proceso y realizar las correcciones
oportunas en un mecanismo iterativo que nos acerca al objetivo. Un proceso de
comunicación entre el profesor y el alumno, debe cumplir una serie de requisitos: 
 
9
 A) Adecuación del emisor. El profesor ha de poseer unos conocimientos de la disciplina
que ha de impartir, así como ciertas habilidades y actitudes en relación a la materia
correspondiente. 
 
 B) Recepción de la información transmitida. El docente necesita realizar un esfuerzo
para adaptarse a las características y capacidades del receptor. La recepción también
depende de los conocimientos y capacidades previos del receptor y de la motivación del
mismo. Son igualmente significativos, las características físicas del mensaje para su
correcta audición o visión. 
 C) Descodificación del mensaje. Para que se capte adecuadamente el mensaje debe
realizarse en un lenguaje común. 
El Aprendizaje como un Proceso Activo.
En un ejemplo que muestra que los niños pueden expresar con sus propias palabras lo malo
de sus experiencias de enseñanza y aprendizaje, Carlitos dijo: “me enseñaste y enseñaste y
enseñaste hasta que ya no podía aprender nada”, y Sarita dijo que no iba a jugar a la
Escuelita Dominical porque ella quería que sus muñecas fueran bien educadas, pero que
todo lo que ella hacía en la Escuela Dominical era sentarse y escuchar y que sus muñecas
nunca iban a aprender nada haciendo sólo eso. No queremos desarrollar una iglesia de
“oyentes profesionales” entrenados, que se vuelven expertos en no prestar atención a
aquello que no es vital para ellos en lo personal. No es de sorprender el hecho de que no se
experimenten resultados espirituales cuando los alumnos van a la Escuela Dominical
únicamente a escuchar al maestro hablar. En realidad, con este sistema los alumnos están
siendo entrenados para no escuchar. El carácter distintivo de la enseñanza se encuentra en
el pequeño grupo íntimo en el cual es posible una interacción abierta. Con frecuencia los
alumnos son divididos en grupos pequeños para que pueda haber intercambio. En la
enseñanza se debe involucrar la totalidad de la personalidad. El viejo dicho deque
obtenemos de una experiencia lo mismo que invertimos en ella es cierto. No existe tal cosa
como recibir una educación. Hubbard dice que “la educación es una conquista, no un
legado; no puede ser dada, debe ser alcanzada”.
Un maestro mal orientado podría decir de alguno de sus alumnos: “Voy a dominar a este
alumno, sin importar lo que le cueste”. Un maestro sabio dirá: “Voy a ayudar a este alumno
a conquistarse a sí mismo, sin importar lo que me cueste”. Cuando el proceso de
aprendizaje se transfiere del maestro al alumno, el alumno desarrolla la mitad de la
actividad y es recompensado por sus esfuerzos. No se debe permitir que los alumnos hagan
lo que quieran ni que actúen de manera indisciplinada. Los alumnos comparten con el
maestro la responsabilidad por la actividad y los resultados. Los alumnos pueden ayudar a
preparar planes, hacer sus propios descubrimientos en las Escrituras y evaluar sus propios
esfuerzos. El maestro no debería hacer aquello que los estudiantes pueden hacer de manera
más provechosa para ellos.
Podemos analizar seis elementos fundamentales en el proceso enseñanza-aprendizaje: el
alumno, el profesor, los objetivos, la materia, las técnicas de enseñanza y el entorno social,
cultural y económico en el que se desarrolla. 
 Los alumnos y profesores constituyen los elementos personales del proceso, siendo
un aspecto crucial, el interés y la dedicación de docentes y estudiantes en las actividades de
enseñanza-aprendizaje. Los objetivos sirven de guía en el proceso, y son formulados al
inicio de la programación docente. La materia, por su parte, constituye la sustancia, el
conocimiento que es necesario transmitir de profesor a alumno, y que debe ser asimilada
10
por éste. Constituyen las técnicas de enseñanza, los medios y métodos a través de los cuales
realizaremos la labor docente. Por último, el entorno condiciona en gran medida el proceso.
 Por tanto, la enseñanza y el aprendizaje son dos fenómenos correlativos y
relacionados por lo que se denomina la relación didáctica. Se distinguen tres etapas en la
acción didáctica: 
 A) Planteamiento. En esta etapa se formulan los objetivos educativos y los planes de
trabajo adaptados a los objetivos previstos. La formulación de un plan implica la toma de
decisiones anticipada y la reflexión con anterioridad a la puesta en práctica. 
 B) Ejecución. Posteriormente al planteamiento, el profesor pone en práctica los recursos
y métodos didácticos, desarrollándose el proceso de enseñanza. 
 C) Evaluación. Es la etapa en la que se verifican los resultados obtenidos con la
ejecución, materializándose en el proceso de evaluación. 
 Por tanto, el proceso de enseñanza-aprendizaje se desarrolla en varias etapas, y
comporta un proceso de comunicación entre el docente que enseña, que transmite unos
conocimientos y a quien se enseña, el alumno o también denominado discente. 
V. Los Estudiantes y sus necesidades.
 Obviamente en casi cualquier iglesia existen múltiples “grupos con necesidades
especiales” entre los adultos. Los pastores y los maestros de adultos expresan un deseo de
ayudar a las personas a responder a lo que se dice en la clase y desde el púlpito.
Nuestra predicación y nuestra enseñanza deben comunicar respuestas específicas a las
necesidades genuinas que la gente real experimenta. Las personas responden
favorablemente a un tipo de predicación “con los pies en la tierra”, anclada en el mundo
real. La gente no quiere más ideas. No se sienten atraídos por análisis brillantes o ensayos
formales. No poseen mucha información teológica ni un vasto conocimiento bíblico. En la
mayoría de las congregaciones existen cuatro “grupos con necesidades especiales”
principales, los cuales deben tener una enseñanza especial: 
(1) Solteros; 
(2)Padres Solteros;
 (3) Divorciados; y
 (4) Familias.
1. Solteros. Hay básicamente cuatro clases de solteros:
 (1) Los que nunca han estado casados;
 (2) Los que han estado casados y cuyos cónyuges todavía viven (casos de divorcio o
separación); 
(3) Los que han enviudado; y
 (4) Los que se podrían llamar “solteros espirituales”, cuyos cónyuges no conocen al Señor.
Los solteros tienen una gran necesidad de aceptación, además de la necesidad de un fuerte
sentido de valor propio y de un sentido de pertenencia.
2. Padres Solteros. La mitad de los niños en nuestra sociedad vive en hogares con un solo
padre. Los padres solteros enfrentan presiones psicológicas y emocionales, presiones
domésticas y financieras. Los padres solteros también enfrentan fuertes presiones sociales.
Para estas personas necesitadas y llenas de estrés, el cuerpo de Cristo debe proveer un
sentido de paz y seguridad, y debe atender los asuntos prácticos en sus vidas de maneras
concretas que brinden ayuda real.
11
3. Divorciados. Muchos padres solteros se pueden clasificar como “solteros” y muchos
adultos divorciados se pueden clasificar como padres solteros. Sin embargo, lo anterior no
se aplica en todos los casos, de modo que el divorcio se convierte en un tema separado. Sin
entrar a discutir las diferentes posiciones acerca de si es correcto o no el divorcio, debemos
comprender que nos enfrentamos a un grupo creciente de personas que se encuentran en
esta situación y debemos evaluar de qué manera les podemos ministrar. Asumiendo que una
persona se arrepienta y esté dispuesta a seguir la voluntad de Dios, el cuerpo de Cristo no
debe juzgarla ni condenarla. Las personas divorciadas deben participar del compañerismo
de la iglesia, aún cuando pueda haber restricciones específicas con respecto a las tareas que
pueden desempeñar.
4. Familias. Uno de los objetivos principales de la educación adulta procura fortalecer y
edificar las familias, reproduciendo de este modo el ciclo de la educación Cristiana, desde
los primeros esfuerzos de instrucción en el departamento de preescolar hasta la clase de
adultos mayores, la cual trata con el tema de ser abuelos. Hoy en día más adultos asisten a
estudios bíblicos que los que asistían hace veinte años. Predicaciones desde el púlpito,
clases especiales de Escuela Dominical, seminarios de fin de semana, campamentos
familiares y cualquier otro medio posible debe ser utilizado para desarrollar un ministerio
formal de educación familiar en la iglesia. Debemos enseñar a los padres a ser efectivos en
modelar valores, en el ministerio y en la multiplicación. La educación de adultos tiene por
delante un futuro emocionante, pero sólo si los líderes educativos están dispuestos a
convertirla en un área de concentración significativa en su ministerio. Las estrategias para
enseñar a jóvenes y adultos son completamente diferentes de las que se utilizan para
enseñar a los niños. Pablo describe el ministerio de multiplicación que debe tener lugar en
cada generación, de modo que la fe Cristiana continúe siendo enseñada hasta que Jesús
venga otra vez. Los líderes Cristianos deben equipar a maestros y padres en cada faceta del
ministerio de niños, de modo que una correcta enseñanza tenga lugar al nivel de cada
alumno. De esta manera se completa el ciclo de evangelismo – el discípulo llega a
convertirse en hacedor de discípulos.
Necesidades y Características por Grupos de Edad
¿Cómo diseñó Dios a los niños? Para ministrar a los niños se requiere un entendimiento de
sus características y necesidades de acuerdo a su edad. ¿Cómo son nuestros niños? Lucas
2:52 revela que Jesús crecía en sabiduría (intelectualmente); en estatura (físicamente); y en
gracia para con Dios (espiritualmente) y los hombres (social y emocionalmente). Existen
características específicas por grupos de edad que describen la niñez temprana (del
nacimiento a los cinco años) y la niñez (de primero a sexto grado). La mayoría de los
materiales de Escuela Dominical han sido elaborados teniendo en mente estas
características. Sinembargo, es importante recordar que se trata de características y
necesidades generales. Los niños se desarrollan a ritmos diferentes en diferentes áreas y
siempre deben ser tratados como individuos. Aparte de estas características y necesidades
específicas, los niños tienen seis necesidades generales que deben ser tomadas en cuenta al
enseñarles la Palabra de Dios. Éstas son:
 (1) Los niños necesitan amor.
 (2) Los niños necesitan seguridad.
 (3) Los niños necesitan aceptación. 
(4) Los niños necesitan disciplina (auto-control).
 (5) Los niños necesitan independencia.
 (6) Los niños necesitan reconocimiento de su valor. 
12
Al satisfacer estas necesidades los maestros y padres no sólo hablan de la Palabra de Dios,
sino que también modelan lo que ella dice; modelar es uno de los métodos más importantes
para enseñar a los niños la verdad de Dios. ¿Cómo podemos satisfacer las necesidades de
los niños? ¿Cómo podemos satisfacer estas necesidades en nuestro ministerio de enseñanza
dentro de la iglesia, el hogar y la escuela? Nuestras metas para el ministerio de niños se
clasifican en dos categorías: 
(1) metas para el niño y 
(2) metas para la institución (iglesia, hogar o escuela) para facilitar la enseñanza.
Una forma interesante de desarrollar metas consiste en que los líderes de la iglesia junto
con los maestros dediquen un fin de semana a la planificación. Pueden realizar una lluvia
de ideas para determinar metas y objetivos para cada área (espiritual, mental, emocional,
social y física) y para cada grado o grupo de edad. Estos objetivos darán dirección a los
líderes y maestros para el año que viene. A su vez, proporcionarán una base para la
evaluación del desempeño del maestro y de los logros en la vida de los alumnos al final del
año. Los siguientes son doce metas para la iglesia, hogar o escuela:
1. Presentar a cada niño la Biblia como la santa Palabra de Dios.
2. Establecer un fundamento para las principales doctrinas bíblicas de acuerdo con el nivel
mental y espiritual del niño.
3. Guiar a cada niño a Jesucristo.
4. Proveer un programa balanceado de adoración, instrucción, compañerismo y expresión.
5. Proveer oportunidades para una enseñanza de calidad de la Palabra de Dios – tanto
contenido como aplicación.
6. Conocer y comprender las características y necesidades de los niños de cada grupo de
edad.
7. Proveer un programa de capacitación continua para todos los maestros y padres.
8. Proveer un equipo de maestros que permita tener una proporción adecuada de maestros
por cantidad de niños: clase cuna – 1:3; de 2 a 5 años – 1:6; de primero a sexto grado – 1:8-
10.
9. Proveer instalaciones y equipo adecuados.
10. Fomentar la variedad en la selección y el uso de métodos y materiales creativos en
todos los ministerios de niños.
11. Mantener registros para el seguimiento de visitas y de alumnos ausentes.
12. Animar a los líderes, maestros y padres a evaluar su ministerio, identificando fortalezas
y debilidades, y estableciendo metas específicas para mejorar. En cada etapa de su
crecimiento el niño está listo para asimilar ciertos aspectos de la verdad, principios que él o
ella pueden comprender y en base a los cuales pueden actuar. Principios que a ellos les
parecen necesarios, que tienen sentido para ellos y que pueden aplicar en su propia vida.
Tratar de adelantarnos en la enseñanza de estos principios es una pérdida de tiempo y un
motivo de desánimo para nuestros alumnos. Es importante saber escoger el tiempo
oportuno.
Las estrategias para enseñar a jóvenes y adultos son completamente diferentes de las que se
utilizan para enseñar a los niños.
Enseñando a los Jóvenes
Dios nos manda a enseñar a los jóvenes. Los jóvenes de hoy son los líderes de mañana.
Ellos establecen metas, toman decisiones y viven la vida a la luz de sus decisiones. El
ministerio de enseñanza hacia los jóvenes debe ejecutarse con excelencia.
13
Los jóvenes se encuentran ante una encrucijada. Las personas que están en contacto con
jóvenes hoy en día tienen la sensación pesimista de una crisis que se agrava y se acelera
cada vez más. Hay que hacer algo. Hay una necesidad urgente de ministerios para jóvenes y
quienes sienten esta necesidad están un paso adelante de aquellos que le asignan una baja
prioridad. Los jóvenes buscan respuestas y la mayor parte de ellos responde al liderazgo. Es
posible transmitirles ánimo y emoción. Por medio del ministerio de jóvenes podemos
establecer un fundamento sólido para las decisiones y escogencias de los próximos años.
Deberíamos estar enseñándoles cómo construir una relación emocionante con Dios, con su
familia, sus compañeros y con ellos mismos. Trabajamos para rescatar jóvenes que han sido
dañados por el mundo. Muchos jóvenes han sido abusados física y mentalmente. Miles de
jóvenes de hogares desintegrados viven en nuestras comunidades. Podemos guiarles al Dios
que los ama y que cuida de ellos, a Aquel que nunca los abandonará. Enseñar a los jóvenes
es emocionante, pero es también un enorme desafío y una gran responsabilidad. Para
ministrar a los jóvenes se requiere un entendimiento de sus características y necesidades.
¿Cómo diseñó Dios al adolescente? ¿Cómo son los jóvenes? Lucas 2:52 afirma que Jesús
crecía en sabiduría (intelectualmente) y en estatura (físicamente), y en gracia para con Dios
(espiritualmente) y los hombres (social y emocionalmente). Las siguientes características
por edad describen a estudiantes de secundaria (de 7º a 12º grado).
Se debe tener presente que éstas representan solamente características y necesidades
generales. Los adolescentes se desarrollan a un ritmo diferente en diferentes áreas y
merecen que se les trate como individuos únicos. Es más fácil para los maestros y padres
comprender a los adolescentes una vez que conocen sus características. En Hechos 17 se
observa cómo Pablo conocía muy bien a su audiencia. En su sesión de enseñanza en el
Areópago, Pablo demostró que conocía a su audiencia, su trasfondo, su cultura y su
literatura. ¡Él citó a uno de sus poetas para respaldar su posición! Luego dijo: “…hallé
también un altar en el cual estaba esta inscripción: AL DIOS NO CONOCIDO. Al que
vosotros adoráis, pues, sin conocerle, es a quien yo os anuncio” (v.23). El primer paso hacia
un ministerio exitoso es conocer a su audiencia.
Metas y Objetivos
¿Cómo podemos atender las necesidades de nuestros jóvenes? ¿Cómo podemos atender
estas necesidades en nuestro ministerio de enseñanza dentro del hogar, la iglesia y la
escuela? Nuestras metas para el ministerio de jóvenes se clasifican en dos categorías: 
(1) metas para el individuo y 
(2) metas para la institución (hogar, iglesia o escuela) para facilitar la enseñanza.
(1) Metas para el individuo
El perfil de un alumno que ha sido discipulado debería incluir las siguientes características
al momento de su graduación de secundaria, si el alumno ha sido fiel en el ministerio de
jóvenes. Dicho alumno debería:
1. Vivir cada día consciente de la presencia y la guía de Dios.
2. Pensar por sí mismo y ser capaz de tomar decisiones personales con la ayuda del Espíritu
Santo.
3. Ser capaz de compartir su fe con sus amigos y con aquellos con quienes se relaciona.
4. Ser capaz de decir a otros lo que conoce acerca de Dios y de cómo vivir una vida
Cristiana. (2) Metas para la institución (hogar, iglesia o escuela)
La iglesia y el hogar también requieren metas. Se debe plantear la pregunta
“¿Cómo se desarrollará el alumno que es discipulado? Estas tres metas principales con sus
objetivos específicos para los líderes que trabajan con jóvenes pueden ayudarle a identificar
14
las fortalezas y debilidades de su ministerio de jóvenes. Las metas y objetivos del
ministerio de jóvenes para el hogar, la iglesia o la escuela se pueden dividir en tres áreas: el
alumno, el personal y los padres. Evalúe su ministerio de jóvenes a la luz de estas metas y
objetivos:
Meta 1 – El alumno. Esta metabusca proveer al alumno con una variedad de experiencias y
oportunidades a través de la adoración, la instrucción, la comunión, el evangelismo y el
servicio.
Meta 2 – El Personal. El objetivo es reclutar y capacitar personal, organizar el ministerio de
jóvenes, llevar a cabo reuniones de personal e involucrar al personal en evangelismo
personal con los alumnos.
Meta 3 – Los Padres. El personal busca proveer capacitación, consejería, ánimo y buenos
modelos para los padres.
Entendiendo por qué los Adultos son Diferentes
Los adultos son diferentes. No sólo son diferentes entre sí, sino que también son diferentes
de los otros grupos de edades a los que comúnmente enseñamos en la iglesia.
Son diferentes en su perspectiva de sí mismos, mucho más conscientes de sus necesidades
personales, en experiencias de vida y en su disposición para aprender. Los escenarios
educativos para adultos necesitan ser psicológica, física y ambientalmente apropiados para
adultos. Por lo general esto conduce a métodos que enfatizan la informalidad, las
oportunidades para la participación y una relevancia de contenido dinámica e inmediata.
Los adultos también se diferencian de los niños y jóvenes en su experiencia de vida. Han
acumulado una abundancia de conocimientos y experiencias, la cual traen consigo a cada
situación de aprendizaje. Esto nos permite acudir a ellos como recursos, en ver de
considerarlos simplemente como estudiantes a los que debemos transmitir información.
Esto significa que los adultos deberían tener la oportunidad de diagnosticar sus propias
necesidades de aprendizaje, en vez de que se les imponga siempre el contenido de la
enseñanza. Esta diferencia se demuestra en lo que podríamos llamar disposición para
aprender. Los adultos asumen la tarea del aprendizaje con mayor auto-dirección y
disposición para “optar” por los temas. La motivación para la educación de adultos se
relaciona de manera inseparable con lo que podríamos llamar “responsabilidad personal”
– los adultos deben entender claramente que las experiencias de aprendizaje están asociadas
con la realidad y no han sido concebidas de manera artificial simplemente para mantener la
maquinaría educativa funcionando. Finalmente, los adultos difieren en su perspectiva del
tiempo; poseen una clara orientación hacia el “ahora”. Quizás por eso Pablo le escribió a
Tito exhortándole a demostrar en su propia vida y enseñar a otros cómo vivir “…en este
siglo sobria, justa y piadosamente” (v. 12). Los adultos (particularmente los más jóvenes y
los de edad media) parecen más orientados hacia el “presente” que cualquier otro grupo de
edad. La implicación educativa de este hecho enfatiza la practicidad inmediata y la
resolución de problemas específicos en la tarea educativa.
VI. Técnicas y métodos de enseñanza.
Según el Diccionario de la Lengua Española, “método” es el modo de decir o hacer con
orden una cosa. Se tiene un método cuando se sigue un cierto camino para lograr un
objetivo propuesto de antemano. Los métodos de enseñanza e investigación, no sólo
contienen los pasos o reglas flexibles a seguir, sino que además suelen contener los motivos
15
por los que se dan tales o cuales pasos, o se adoptan tales o cuales reglas. O dicho de otro
modo, los principios psicológicos y/o sociológicos en que se apoyan.
 Diversos estudios muestran los mejores resultados de los alumnos que trabajan en
grupo o cooperan con sus compañeros. La integración del discente en un grupo de trabajo
facilita el aprendizaje y la ayuda mutua, fomentando la motivación y la resolución de
dudas. 
 Las nuevas estructuras organizativas enfatizan la importancia del trabajo en equipo y la
capacidad de integrarse mediante una participación activa. Durante los últimos años se ha
producido un considerable aumento de la necesidad de preparar a los estudiantes para
cooperar con especialistas de otros campos. 
 Por tanto, las nuevas exigencias sociales y laborales demandan capacidad creativa, de
comunicación verbal y escrita, espíritu crítico y capacidad de trabajo en equipo. Se hace
preciso fomentar estas habilidades además de los conocimientos de la materia. En el
aprendizaje por parte de los alumnos es preciso un nuevo énfasis, debido al enorme
crecimiento de información útil y la rapidez con que pasa de moda. Además, es preciso
entrenamiento para que a medida que se desarrollan nuevas especialidades poder ser
flexible. El problema de la metodología es, sin duda, de carácter instrumental pero no por
ello secundario. Lo instrumental es, en cuanto tal, ineludible. Sin método de enseñanza no
se cumplen las finalidades de la universidad: instrucción, aprendizaje, educación. Hay que
tener en cuenta que prescindiendo ahora del contenido de la enseñanza, un método siempre
existe. Se trata de que sea el mejor posible, porque sólo así los contenidos -sean cuales
sean- serán trasmitidos en un nivel de eficacia y, desde el punto de vista económico, de
rentabilidad de la inversión educativa. Es preciso prestar atención a los métodos y no sólo a
los contenidos, porque los métodos pueden impedir, si no son adecuado, la transmisión de
cualquier conocimiento.
 Una gran parte del qué de una enseñanza depende del cómo se trasmite. Así, Pujol y Fons
(1981, pág. 15) afirman: “Sin querer hacer de la empresa educativa una copia de la empresa
industrial -como pretende un cierto gusto por el management cultural-, es razonable pensar
que una mejora en la tecnología educativa se traduzca en mayor rendimiento. Como escribe
COOBS en la introducción de su conocida obra <<La crisis mundial de la educación>>, no
se comprende por qué si en agricultura se ha pasado del arado al tractor, en la educación se
debe permanecer en la pizarra.” 
 El principio de la multiplicidad de los métodos se presenta como el mejor punto
de vista para acometer la renovación didáctica en la enseñanza. Esto ocurre por el hecho de
que no puede haber un único método válido, es decir, que los métodos son múltiples y
deben aplicarse en función de los objetivos que se intenten conseguir. 
 El concepto de combinatoria metodológica permite además salir al paso de una
ilusión futurista que se advierte incluso en los autores más ecuánimes. Cuando se refieren a
las nuevas perspectivas en la enseñanza superior, anotan como algo decisivo la introducción
de la moderna tecnología educativa. Confiar como una panacea en la nueva tecnología
educativa equivale a jugar a la ilusión. 
 Es difícil definir la superioridad de uno u otro método sobre los demás; pues todos
ellos presentan aspectos positivos. La decisión dependerá del objetivo de la enseñanza y del
16
grado de preparación científica que se quiera dar al alumno. Las técnicas y procedimientos
que se emplean en la enseñanza de un individuo es determinante de lo que aprende o no
aprende. Tradicionalmente, al profesor universitario, y en menor medida, al profesor de
enseñanza media, se le ha criticado su excesivo verbalismo, su dogmatismo y el predominio
del método expositivo, no siempre verdadera lección magistral. Este excesivo verbalismo
ha provocado en el estudiante universitario, dos tipos de comportamientos no deseados pero
muy extendidos, la pasividad y culto excesivo a la memoria.
 Efectivamente, tal como afirman Pujol y Fons (1981, pág. 18): “Ningún profesor
enseña bien si sus alumnos no aprenden. De nada sirve que él crea que enseña bien si sus
alumnos no alcanzan los objetivos de conocimientos o comportamientos que él esperaba.” 
 Los métodos de enseñanza precisan una multiplicidad de sistemas que se adapte al
entorno y a los alumnos concretos a los que se dirige
 LA LECCION MAGISTRAL 
 La lección magistral es un método de enseñanza centrado básicamente en el docente y en
la transmisión de unos conocimientos. Se trata principalmentede una exposición continua
de un conferenciante. Los alumnos, por lo general, no hacen otra cosa que escuchar y tomar
notas, aunque suelen tener la oportunidad de preguntar. 
 Es, por consiguiente, un método expositivo en el que la labor didáctica recae o se centra
en el profesor. El docente es el que actúa la casi totalidad del tiempo, y por lo tanto, a él
corresponde la actividad, mientras que los alumnos son receptores de unos conocimientos.
Casi siempre, en la enseñanza universitaria el acento se ha puesto de una forma exclusiva
en el docente, siendo el responsable de enseñar a un auditorio de estudiantes. 
 Por tanto, la lección magistral se caracteriza fundamentalmente por ser un proceso de
comunicación casi exclusivamente unidireccional entre un profesor que desarrolla un papel
activo y unos alumnos que son receptores pasivos de una información. Es el docente el que
envía la información a un grupo generalmente numeroso de discentes, y estos se limitan a
recibir esa comunicación, y sólo en ocasiones, intervienen preguntando. 
 Las características esenciales de la lección magistral como forma expositiva son: la
transmisión de conocimientos, el ofrecer un enfoque crítico de la disciplina que lleve a los
alumnos a reflexionar y descubrir las relaciones entre los diversos conceptos, el formar una
mentalidad crítica en la forma de afrontar los problemas y la existencia de un método. 
 Pero, generalmente, la práctica docente suele olvidar los dos últimos puntos y se
centra en la transmisión de conocimientos, en impartir información; por lo que a nivel
práctico, las características de la lección magistral pueden reducirse a las siguientes: 
 A) Predominio total o casi total de la actividad del profesor en el proceso didáctico. 
 B) El proceso didáctico consiste en enseñar. El aprendizaje queda relegado a un
segundo plano, y predomina la finalidad informativa. 
 C) La mayor parte del saber simplemente consiste en transmitir una serie de temas,
limitándose el alumno tan sólo a memorizarlos. 
 Las características anteriores determinan que la clase magistral haya sido duramente
criticada. Las críticas a la lección magistral se centran básicamente en dos aspectos: por un
17
lado, en la pasividad del alumno, y por otro, en la poca efectividad en la transmisión de
conocimientos. Se argumenta que los estudiantes pueden encontrar la información en una
biblioteca bien abastecida, y que los libros son preferibles a los apuntes de clase a la hora
de proporcionar información. 
LAS CLASES PRACTICAS.
 En las clases prácticas, generalmente se analizan ejercicios y supuestos, normalmente de
carácter cuantitativo. Se trata de aplicar los conocimientos teóricos a la resolución de casos
y problemas concretos. Las etapas que suelen seguirse en las clases prácticas son: 
 A) El profesor selecciona una situación que se refleja en unos datos para su análisis, y
de los cuales, a través de unos métodos seleccionados, se llegarán a ciertos resultados o
conclusiones. 
 B) Se entrega el enunciado a los estudiantes, preferiblemente antes de la clase. 
 C) Lectura del ejercicio antes de su resolución, permitiendo aclarar posibles dudas. 
 D) Resolución del ejercicio, procurando que todos colaboren en la búsqueda de la
solución, discusión y análisis de los resultados obtenidos. 
 Las clases prácticas suelen basarse en unos conocimientos teóricos previos.
Permiten un desarrollo de las enseñanzas teóricas que posibilita la clarificación de
conceptos, la eliminación de fallos en el aprendizaje anterior y el desarrollo de habilidades. 
 Es deseable y permitiendo una participación activa del alumno. Se trata de que el
alumno participe en el ejercicio y encuentre la solución del problema planteado. De tal
modo, que en clase se puedan analizar los procedimientos de solución seguidos, los
resultados obtenidos y las dudas o aspectos no comprendidos por los estudiantes. 
 La participación activa de los alumnos en la resolución de un ejercicio facilita el
aprendizaje y la capacidad de resolución de los problemas. En este caso, el profesor realiza
una tarea de asesoramiento y guía en la búsqueda de soluciones adecuadas a la cuestión
planteada. 
 Las clases prácticas permiten poner al alumno en contacto con instrumentos de resolución
de problemas y toma de decisiones en casos concretos, que les acercan a las situaciones
reales y permiten comprender la aplicación práctica de los modelos teóricos. 
 Mediante la evaluación se pretendía determinar el grado de cumplimiento del
propósito pretendido a través de una actividad de aprendizaje, comparando las ejecuciones
de los estudiantes con los objetivos fijados en forma de comportamiento. 
 Se hace preciso para poder evaluar, el efectuar un diseño previo de lo que se
pretende alcanzar. Este diseño ha de ser realizado a través de unas especificaciones, de unas
características que se han de conseguir en el producto final, después de efectuar
íntegramente el proceso de enseñanza. 
 El proceso de control sirve de mecanismo de información. El análisis de los errores
más frecuentes cometidos por los alumnos en los exámenes permite diseñar un proceso de
enseñanza mejorado para los cursos siguientes. El conocimiento de los fallos nos guía para
insistir en los aspectos que resultan más difíciles de comprender para los alumnos. 
 La explicación al comienzo del curso de los criterios de evaluación y consejos de
forma pormenorizada, enlaza luego con una corrección detallada y con explicaciones
minuciosas de los errores cometidos. Animaremos a los alumnos a ver sus exámenes y
comprobar dónde se han equivocado o dónde pueden mejorar. 
 La evaluación del aprendizaje tiene efectos sobre el proceso de seguir aprendiendo.
Cuando la evaluación abarca una lección o tópico concreto (corto plazo), se dice que tiene
18
sobre el estudiante el efecto de reactivar o consolidar su recuerdo, centrar la atención sobre
aspectos importantes del contenido, estimular las estrategias de aprendizaje,
proporcionarles oportunidades de consolidarlo, ofrecerle información sobre el mismo,
ayudarle a conocer su progreso a efectos de mejorar su autoconcepto y guiar la elección de
actividades de aprendizaje para incrementar el dominio de lo aprendido. Si la evaluación se
refiere a módulos más amplios, cursos o experiencias amplias, se dice que sus efectos son
los de aumentar la motivación de los estudiantes hacia la asignatura y condicionar la
percepción de sus propias capacidades en la materia de que se trate, incidiendo también en
la elección que los estudiantes hacen de estrategias de estudio. 
 Esto último es importante. Dependiendo de cómo preguntemos así va a estudiar el
alumno. Si preguntamos cosas para memorizar, memorizaran. Si ponemos preguntas más
de razonar o les advertimos del valor calificatorio de explicarse, poner ejemplos y razonar
en los exámenes, su modo de estudiar y, por tanto, de aprender, será distinto y los
resultados también. Es importante el cómo se evalúa, el cómo se mide determina en buena
medida el comportamiento de los alumnos. 
 La consultora Griker y Asociados (1994, pág. 35) propone un método de evaluación
colectiva para estudiar la rentabilidad de las acciones formativas en las empresas, que
puede servir de orientación en otros ámbitos. El sistema se basa en el análisis detallado de
cuatro puntos: 
 A) La percepción del evento formativo por parte de los participantes. 
 B) La cantidad de aprendizaje consolidado después del curso. 
 C) La transferencia de lo aprendido al puesto de trabajo. 
 D) Análisis de los costes comparado con el impacto en la organización. 
LA ENSEÑANZA EN PEQUEÑOS GRUPOS
 Beard (1974, pág. 136) recoge los resultados de una encuesta entre profesores sobre
los objetivos y las ventajasde la enseñanza en pequeños grupos, que se resumen en las
siguientes:
 A) El objetivo que prepondera sobre todos los demás es el de ayudar a los estudiantes a
discutir y a esclarecer las dificultades que surgen en clases magistrales u otras sesiones
docentes. Entre las ventajas del método se señalan el dar la oportunidad de formular
pregunta, ayudar a la comprensión del tema de la clase magistral, asegurarse de que los
alumnos no se pierden en los cursos de clases magistrales y obtener un contacto más
personal con los alumnos. 
 B) Promover un pensamiento más crítico y más lógico, ayudar a los estudiantes a
resolver problemas y a hacer aplicaciones prácticas de las teorías. 
 C) Obtener práctica en la presentación oral de informes, discutir la labor de los
estudiantes. 
 D) Proporcionar al profesorado una visión retrospectiva sobre el progreso de los
estudiantes, así como de las actitudes de estos y también de la efectividad de la enseñanza.
Muchos profesores universitarios consideran que esta visión retrospectiva sobre el éxito
del aprendizaje y de la enseñanza es una de las principales ventajas del método. 
 El objetivo más mencionado es ayudar al estudiante en sus dificultades. Pero es difícil
descubrir las dudas, errores, dificultades de los estudiantes. En la gran mayoría de los casos,
analizar las dificultades implica plantear problemas en forma de ejercicios escritos o
preguntas cuyas respuestas deben ser pensadas en voz alta o a lo sumo anotadas. 
19
 Existen una gran variedad de métodos de enseñanza que se diferencian básicamente en la
intensidad mayor o menor que muestran dos variables como son: el número de participantes
y el grado de intervención del profesor o los alumnos. De tal manera, que tenemos métodos
que se dirigen a muchos alumnos, como la lección magistral, pasando por diversos métodos
de enseñanza a grupos reducidos, a la enseñanza tutorial, a uno sólo o muy pocos alumnos
atendidos a la vez. 
 Por otra parte, los diversos métodos se diferencian por la mayor o menor actividad del
profesor o de los alumnos. De esta manera, tenemos sistemas centrados en el docente en el
que la actividad corresponde casi exclusivamente al profesor, y los discentes tienen una
participación más o menos pasiva; métodos más centrados en los alumnos en los cuales
estos tienen un protagonismo mucho mayor y desarrollan una gran actividad. La mayor
parte de técnicas de enseñanza a pequeños grupos consisten en actividades centradas en los
alumnos donde se procura una máxima participación de los mismos. 
 
 CARACTERISTICAS DE LOS METODOS CENTRADOS EN LOS ALUMNOS
Podemos resumir las características de estos métodos centrados en los discentes de la
siguiente manera: 
 A) El proceso didáctico se centra en la actividad del alumno. El profesor trabaja
ayudando directamente a éste. 
 B) Cobra especial importancia el aprender y el proceso de enseñanza se subordina a que
el aprendizaje se desarrolle de la mejor manera. 
 C) Pasa a segundo plano la labor informativa, siendo lo prioritario la labor formativa. 
 D) Existe un trabajo previo del estudiante. 
 Aun cuando se trate de métodos de enseñanza en grupo, se intenta personalizar de
algún modo el proceso de enseñanza y llegar al alumno concreto, individual. Los grupos
reducidos permiten una atención y un seguimiento más personalizado y una comunicación
con un mayor grado de individualización en la atención al discente. 
 Existe una gran variedad de sistemas de enseñanza a pequeños grupos. Un esquema
tradicional del seminario a pequeños grupos consiste en que el profesor proponga un tema o
texto que le asigna a un alumno, el cual debe trabajarlo y redactar un texto que somete a la
crítica de los demás alumnos, para pasar posteriormente a una discusión en una reunión
coordinada por el profesor. 
 Una variante de este procedimiento consiste en asignar trabajos cuya elaboración se
encarga a un grupo de alumnos que deben realizar en común un informe que posteriormente
es discutido en un grupo presidido por el docente, que guía las discusiones.
 Estos sistemas de trabajo mediante seminarios se desarrollan y alcanzan gran
perfección a principios de siglo en las universidades alemanas, siendo también las
universidades americanas precursoras de estos métodos. El método de los seminarios puede
servir para cubrir toda una serie de objetivos: 
 A) Mejorar las capacidades de expresión escrita y oral, al tener que escribir y
posteriormente exponer y defender ante un auditorio el trabajo realizado. 
 B) Aprender a reflexionar sobre un tema, trabajarlo y buscar información sobre el
mismo y elaborar una exposición coherente. Se trata de analizar los problemas y aprender a
pensar y extraer conclusiones. 
 C) Numerosos autores resaltan la importancia de los seminarios para crear el hábito de
investigación científica y aprender los métodos científicos. De tal manera, que los alumnos
20
aprendan a manejar los instrumentos del trabajo intelectual. El conocer y utilizar las
herramientas propias de un área científica y habituar a los estudiantes a su uso. 
 D) El aprender a trabajar de forma individual o en grupo, defendiendo puntos de vista y
coordinándose con otros miembros del grupo. 
 Lo prioritario en el seminario es la colaboración entre el profesor y alumnos. Por tanto, se
puede decir que en el seminario lo esencial es la colaboración entre el profesor y los
estudiantes, siendo imprescindible una participación muy activa de estos. 
SEMINARIO
 El seminario tradicional se ha enfocado a la investigación y a la realización de
auténticos trabajos de investigación. No existe propiamente seminario si los participantes
no hacen un trabajo real de investigación que ordinariamente será escrito. El trabajo en un
seminario implica para el alumno toda una serie de actividades: 
 
 A) Preparación. Generalmente, el estudiar un determinado tema y ampliarlo buscando
material. 
 B) Elaboración. Posteriormente, debe pensar, reflexionar, resolver los distintos
problemas que plantea el tema y desarrollar una síntesis que debe normalmente presentar
por escrito. 
 C) Exposición. Y por último, debe ser capaz de exponer claramente al resto de los
compañeros el resultado de su trabajo, defenderlo y aclarar las dudas y cuestiones que
puedan plantear los demás y el profesor. 
 En la práctica, cuando los alumnos trabajan en grupo, entre ellos se suele dar un
amplio debate, sobre todo si es un tema que les resulta atractivo y cercano como el
desarrollar un plan de marketing para una empresa que han escogido y para lo que se
encuentran motivados. Asimismo, se encuentran motivados para plantear dudas al profesor
en una sesión en grupo pequeño. Sin embargo, el plantear dudas o criticar el trabajo de los
compañeros es una actividad mas complicada de realizar y de que se produzca. 
 El objetivo del seminario es que el alumno aprenda a reflexionar, que adopte un
comportamiento activo y que aprenda a debatir en grupo y a defender sus posturas. Se trata
de un adiestramiento en la solución de problemas, en la búsqueda de soluciones y en la
defensa y debate del planteamiento personal. 
 Uno de los requisitos que cada vez demandan más las empresas, es que sus
miembros sean capaces de trabajar eficientemente en grupo y que establezcan una buena
comunicación con el resto de la empresa, y en muchas ocasiones, también con los clientes,
proveedores y otros grupos de públicos con los que las organizaciones se relacionan. Del
mismo modo, también se valora la capacidad de liderazgo y ser capaz de defender las
propias ideas, de argumentar y de convencer. 
 El desarrollo de este tipo de habilidades directivas requiere aprender a trabajar en
grupo, la habilidad para participar en una discusión, y saber analizarlas diversas
posiciones. El ser capaz de comunicar de forma convincente y de defender una posición
ante un grupo son habilidades sociales o de comunicación que cada día las empresas
valoran más. 
LAS TUTORIAS
 Las tutorías constituyen un método complementario de formación personalizada. 
 
21
El sistema de las tutorías tal como se las entiende de forma tradicional en las Universidades
inglesas, y luego en parte copiadas por algunas americanas, exige la formalización de una
relación entre un tutor y un grupo de estudiantes, así como reuniones periódicas de forma
individual o con muy pocos alumnos. 
 Por consiguiente, en este sistema tradicional de las Universidades inglesas, el
estudiante se reúne semanalmente sólo o con unos pocos alumnos con el tutor que le ha
sido designado. Se ha asimilado en ocasiones al seminario, pero en las tutorías el alumno
recibe atención personalizada al ser una reunión individual con el tutor o un grupo más
reducido que en los debates de los seminarios. El seminario, por tanto, implica mayor
número de alumnos. 
 Las tutorías, al ser personalizadas o en un grupo que no suele ser más de cuatro,
permite aclarar las dudas que cada alumno de forma individual tiene. Permite una atención
personalizada. Da lugar a una comunicación de doble sentido que puede ser más difícil en
las lecciones magistrales. Permite resolver dudas especificas o pedir más información a los
que están especialmente interesados en un tema, materia o cuestión. 
 Se critica el método de las tutorías por ser muy costoso en tiempo y requerir una gran
cantidad de profesores y muchas horas de trabajo. Se dice que es un gasto excesivo de
tiempo y dedicación por parte de los profesores el repetir lo mismo una otra vez a los
estudiantes, que podrían adquirir esos conocimientos por otros varios métodos. 
 Lo que hay que tener claro es que cada método tiene sus ventajas e inconvenientes y
que cada sistema de enseñanza es mejor en unos determinados aspectos y sirven, por lo
tanto, para unos fines diversos. El sistema tutorial parte de la premisa de que cada
estudiante es distinto de los demás y requiere, por consiguiente, un trato especial. Las
tutorías presentan toda una serie de ventajas: 
 A) Sirve de sistema de retroalimentación para el profesor. El docente puede adquirir una
valiosa información sobre lo que se va entendiendo en clase, las dificultades de los alumnos
donde están, la motivación de estos, los temas que les interesan, etc. 
 B) Permite aclarar dudas individuales. 
 C) Permite a los alumnos que quieren profundizar en un tema informarse sobre él,
localizar información. 
 D) Si existe una reunión periódica, permite hacer un seguimiento de los alumnos y
motiva, como los que preparan oposiciones. 
TRABAJOS EN GRUPO 
Mientras que en la lección magistral el alumno tiene un comportamiento básicamente
pasivo, en las técnicas de trabajo en grupo debe participar de modo activo. Al trabajar en
grupo, el alumno puede resolver problemas prácticos, aplicar conocimientos teóricos y
también recibir orientación por parte del profesor. 
 El trabajo en grupo es un método que permite a los alumnos convenientemente
agrupados, realizar y discutir un trabajo concreto, intervenir en una actividad exterior, o
encontrar solución a un problema sometido al examen del grupo, con la finalidad de
concluir con unos razonamientos concretos. El trabajo en grupo permite conseguir unos
objetivos distintos a los métodos expositivos, al facilitar una mayor participación y
responsabilidad de los alumnos. 
Los objetivos generales de este método son: 
 A) Lograr la individualización de la enseñanza. 
22
 B) Conseguir la participación activa de todos los alumnos en el proceso de enseñanza-
aprendizaje. 
 C) Desarrollar la habilidad de trabajar en equipo. 
 D) Los grupos restringidos poseen gran capacidad autoformativa. Por medio de la
dinámica de grupo se puede cambiar las actitudes de forma más fácil que actuando
individualmente. 
 La correcta aplicación del método suele requerir un número limitado de alumno en
cada grupo de trabajo pues los grupos excesivamente grandes dificultan la colaboración y la
participación activa de todos los alumnos. La labor del profesor es orientadora y
motivadora del proceso de trabajo de los estudiantes. 
 Además de los objetivos generales, el método de trabajo en grupos permite la
consecución de objetivos específicos. En este sentido si nos centramos en una disciplina
concreta, con el trabajo en grupo se pueden alcanzar las siguientes finalidades: 
 
 A) Desarrollar la capacidad crítica autónoma al enfrentar el alumno con una situación
problemática. 
 B) Conseguir desarrollar las habilidades de expresión oral y escrita. 
 C) Aplicar lo aprendido. 
 D) Obtener por parte del profesor información continua sobre el desarrollo del
aprendizaje. La comunicación se facilita por la conversación entre los miembros del grupo
y su diversidad de opiniones. 
 Tanto los miembros integrantes de los grupos como el tema objeto del trabajo puede
ser impuesto por el profesor o elegidos por los propios alumnos. El permitir cierto margen
de libertad en la elección del tema objeto del trabajo mejora la motivación y el interés de
los 
METODO DEL CASO 
 En este método, se presenta a los estudiantes una situación empresarial tomada
generalmente de un caso real, se suministra cierta información, y basándose en los
conocimientos adquiridos, se pide que se tomen y se razonen las decisiones oportunas. Un
caso es la descripción de una situación real, en la que se representa o puede presentarse un
problema o serie de problemas en toda su complejidad, con la riqueza de matices que una
situación de ésta índole contiene. 
 Por su parte, Reynolds (1990, pág. 19) define el método del caso como: “Una
descripción breve con palabras y cifras de una situación real de gestión. La mayoría de los
casos se detienen justo antes de la exposición de todas las medidas tomadas por el directivo
en la vida real. Le dejan así a usted como participante, libertad para elegir las acciones que
sería necesario emprender. Se pretende que los alumnos estudien la situación, definan los
problemas, lleguen a sus propias conclusiones sobre las acciones que van a emprender y
después discutan el caso en sesión conjunta y/o describan y defiendan su plan de acción por
escrito.” 
 Este sistema pretende poner al estudiante en contacto con situaciones reales de la
práctica profesional, practicando la toma de decisiones en condiciones de incertidumbre. Se
desarrolla de forma simplificada siguiendo un proceso con las siguientes etapas: 
 A) Selección de casos. Una etapa previa la constituye la selección por el profesor de una
secuencia de casos destinada a constituir el tema de estudio. La recomendación es
comenzar con casos sencillos y progresar después hacia los más complejos. Pero también
intervienen en el proceso el orden de introducción de las ideas y los conceptos analíticos.
23
 B) Planteamiento. Exposición de la situación de la empresa y su entorno, y
presentación del problema y de la información referente a caso. 
 C) Análisis del caso. El alumno analiza los datos, selecciona los más relevantes, y
formula las hipótesis sobre posibles alternativas en la toma de decisiones. 
 D) Solución propuesta. Razonamiento de la toma de decisiones decidida. De especial
significación es la discusión de las alternativas seleccionadas y las propuestas de soluciones
a la situación planteada. El profesor puede facilitar el aprendizaje señalando las
consecuencias, relevancia e inconvenientes de las soluciones propuestas por los alumnos,
así como los aspectos teóricos relevantes y las variables no tomadas

Continuar navegando