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MASTER EN MÉDICINA COSMÉTICA, ESTÉTICA TRABAJO FIN DE MASTER TOXINA BOTULINICA EN EL REJUVENECIMIENTO DEL MUSCULO PLATISMA DEL CUELLO Autor: Dra. Diandra Carina Zeineb Ali, Universidad de Medicina y Farmacia "Carol Dávila". Rumanía Dra. Estefanía Borja Ponce, Universidad de especialidades Espíritu Santo. Ecuador Director/Coordinador del master (nombre) Barcelona, 2020 Índice RESUMEN ....................................................................................................................... 4 ABSTRACT ..................................................................................................................... 5 1. INTRODUCCIÓN .................................................................................................... 6 1.2 Farmacología .......................................................................................................... 8 1.3 Composición del producto ...................................................................................... 9 1.4 Almacenamiento y Reconstitución ......................................................................... 9 1.5 Duración del efecto ............................................................................................... 10 1.6 Pautas generales de inyección ............................................................................... 10 1.6.1 Tratamiento de la cara y cuello inferior ......................................................... 11 1.6.1.1 Bandas platismales .................................................................................. 11 1.6.1.2 Anatomía ................................................................................................. 12 1.6.2 Recomendaciones de tratamiento ................................................................... 12 1.7 Seguimiento del paciente y ajustes de toxina botulínica tipo A ........................... 13 1.8 Inmunogenicidad .................................................................................................. 14 1.9 Complicaciones ..................................................................................................... 15 2. OBJETIVOS............................................................................................................ 17 2.1 Objetivo general ............................................................................................... 17 2.2 Objetivos específicos ....................................................................................... 17 3. MATERIAL Y METODOS .................................................................................... 18 3.1 Criterios Metodológicos ....................................................................................... 18 3.1.1 Criterios de inclusión ..................................................................................... 18 3.1.2 Criterios de exclusión ..................................................................................... 19 3.2 Selección de estudios ............................................................................................ 20 3.3 Niveles de evidencia de los artículos seleccionados ............................................. 21 3.4 Diagrama de flujo PRISMA ............................................................................ 22 4 RESULTADOS ....................................................................................................... 23 5 DISCUSIÓN............................................................................................................ 31 6 CONCLUSIONES .................................................................................................. 36 7 BIBLIOGRAFÍA ..................................................................................................... 37 RESUMEN Introducción: La inyección de neurotoxina botulínica es una de las técnicas estéticas no invasivas más considerablemente realizadas. BoNT-A o neurotoxina botulínica tipo A ayuda a la transmisión neuromuscular ya que bloquea la liberación del neurotransmisor acetilcolina. De modo tal, la inyección de BoNT-A puede cooperar a suavizar las arrugas y puede mejorar la calidad de vida del paciente. Las bandas platismales en el cuello son muy visibles en algunos pacientes y se vuelven más prominentes cuando hablan o sonríen. El tratamiento con BoNT-A en pacientes con buena elasticidad de la piel es seguro y puede ser muy efectivo. Objetivo: Evaluar la diversa literatura que señala el uso de toxina botulínica en el rejuvenecimiento del cuello, en específico el musculo platisma del cuello. Material y métodos: se trata de una revisión bibliográfica, cuyas bases de datos utilizadas fueron Pubmed, ScienceDirect y Cochrane library. Luego del esclarecimiento de las palabras clave y la aplicación de los diversos criterios metodológicos se obtuvo un total de 7 artículos dispuestos a ser la muestra final de la revisión. Resultados: los autores seleccionados confluyen en que el uso de toxina botulínica resulta un procedimiento simple, útil y seguro para el rejuvenecimiento del musculo del cuello. Tambien es importante destacar que para el tratamiento del cuello depende mucho de indicaciones, los objetivos del paciente. Los especialistas ahora pueden ofrecer tratamientos mínimamente invasivos como parte de una terapia combinada, para así reforzar el tratamiento con toxina botulínica. Conclusiones: A pesar del uso habitual de la toxina botulínica en diversas partes del cuerpo, tanto de manera estética como no, en las bandas de platisma, esta técnica solo ha sido corroborada de modo reciente por una superior comprensión de la relación entre la tonicidad del platisma y las bandas. ABSTRACT Introduction: Injection of botulinum neurotoxin is one of the most considerably performed non-invasive aesthetic techniques. BoNT-A or botulinum neurotoxin type A aids neuromuscular transmission by blocking the release of the neurotransmitter acetylcholine. Thus, BoNT-A injection can cooperate to smooth wrinkles and can improve the patient's quality of life. Platysmal bands on the neck are highly visible in some patients and become more prominent when they speak or smile. Treatment with BoNT-A in patients with good skin elasticity is safe and can be very effective. Objective: To evaluate the diverse literature that indicates the use of botulinum toxin in the rejuvenation of the neck, specifically the platysma muscle of the neck. Material and methods: This are a bibliographic review, whose databases were Pubmed, ScienceDirect and Cochrane library. After the clarification of the keywords and the application of the various methodological criteria, a total of 7 articles were obtained, ready to be the final sample of the review. Results: the selected authors agree that the use of botulinum toxin is a simple, useful and safe procedure for the rejuvenation of the neck muscle. It is also important to note that the treatment of the neck depends a lot on indications, the objectives of the patient. Specialists can now offer minimally invasive treatments as part of a combination therapy, to reinforce botulinum toxin treatment. Conclusions: Despite the regular use of botulinum toxin in various parts of the body, both aesthetically and not, in platysma bands, this technique has only recently been corroborated by a superior understanding of the relationship between the tonicity of the platysma and bands. 1. INTRODUCCIÓN Un atributo atractivo de la juventud y la belleza es un cuello delgado y aerodinámico. El desarrollo de papadas y líneas de marionetas y la pérdida del contorno mandibular son signos desagradables de envejecimiento. La actividad hipercinética y la pérdida de tono delmúsculo platisma dan como resultado bandas musculares verticales y ritidas horizontales del cuello. Estas bandas generalmente se desarrollan cuando los pacientes tienen alrededor de 40 años, pero pueden presentarse antes en individuos delgados y activos (1,2). El músculo platisma estira la piel del cuello hacia abajo y lateralmente y, en sinergia con el depresor anguli oris, tira hacia abajo las esquinas laterales de la boca. Se extiende desde la articulación esternoclavicular, el hueso clavicular y el acromion escapular hacia abajo para unirse al sistema musculo aponeurótico superficial de la cara hacia arriba. Las fibras musculares contribuyen a la aparición del envejecimiento del cuello a medida que se desprenden gradualmente de los planos profundos y se atenúan (2). La facilidad de los procedimientos de rejuvenecimiento de la cara superior mínimamente invasivos puede dar como resultado una apariencia desproporcionadamente juvenil, con un cuello aparentemente envejecido, que afecta negativamente el bienestar mental del paciente. Anteriormente, la única modalidad de tratamiento para el rejuvenecimiento de la cara inferior y el cuello era la cirugía. Para satisfacer las crecientes demandas del paciente de un procedimiento antienvejecimiento mínimamente invasivo, conveniente e indoloro, la toxina botulínica se ha utilizado en el rejuvenecimiento del cuello con altas tasas de satisfacción del paciente (2,3). Brandt y Bellman (4) fueron los primeros en utilizar la toxina botulínica en el tratamiento antienvejecimiento del cuello. Esto fue seguido por numerosos informes. En 2007, Levy introdujo el concepto de "elevación de Nefertiti", quien inyectó la toxina botulínica en las bandas platismales, junto con el borde inferior de la mandíbula. La técnica lleva el nombre de Nefertiti, una reina egipcia famosa por su contorno mandibular bien definido (4). Desde entonces, ningún ensayo clínico ha evaluado el efecto del lifting de Nefertiti en los diferentes componentes del envejecimiento de la cara inferior y el cuello, y se sabe poco sobre las características clínicas que predicen el éxito del tratamiento. Este estudio prospectivo de prueba de concepto fue diseñado para evaluar estas deficiencias. Cuantificará el efecto del lifting de Nefertiti en los diferentes componentes del envejecimiento de la cara y el cuello con puntajes validados específicos de la región (4). El uso clínico de la toxina botulínica para deprimir selectivamente la actividad del músculo esquelético en el tratamiento de los trastornos espasmódicos faciales comenzó en la década de 1970. Sus usos estéticos fueron descubiertos, por cierto, pero han cambiado drásticamente el panorama del rejuvenecimiento facial. Desde la aprobación de la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA) en 1992, la inyección de toxina botulínica se ha convertido en el procedimiento cosmético más popular en los Estados Unidos, con más de 6.6 millones de inyecciones de toxina botulínica tipo A (BTA) solo en 2014. Además, hay cada vez más usos fuera de etiqueta para tratar una variedad de trastornos oftalmológicos, urológicos, gastrointestinales, hipersecretores y de dolor debido a su versatilidad y perfil de seguridad favorable. Aquí, se revisan los usos actuales de BTA para el rejuvenecimiento estético de la cara (5,6). 1.1 Historia del uso de la toxina botulínica Los primeros usos clínicos de BTA se informaron a principios de la década de 1970 para debilitar selectivamente los músculos extraoculares como tratamiento para el estrabismo. El éxito de BTA como un depresor selectivo de la actividad del músculo esquelético condujo a aplicaciones similares en el tratamiento del blefaroespasmo y el espasmo hemifacial. En 1989, la FDA aprobó el uso de la toxina onabotulínica A (Botox) para el tratamiento de los trastornos espasmódicos faciales (7). En ese mismo año, Clark y Berris informaron el uso de Botox como tratamiento para la asimetría facial resultante del daño iatrogénico del nervio facial durante la ritidectomía. Este uso es ampliamente considerado como el primer uso estético de la neurotoxina botulínica. En 1987, el oftalmólogo Jean Carruthers descubrió el efecto de la toxina botulínica en las ritidas faciales cuando un paciente que trató de blefaroespasmo solicitó que le inyectaran la frente debido a la mejoría que observó en su región periorbital. Afortunadamente, su esposo, el dermatólogo Alastair Carruthers, tuvo varios pacientes pidiéndole formas de mejorar las ritidas faciales. Al día siguiente, Jean inyectó las líneas fruncidas del ceño fruncido de su recepcionista, una participante dispuesta, y nació el uso estético de BTA. Estos éxitos preliminares llevaron a una mayor experimentación que culminó en un informe que preparó el escenario para el desarrollo de Botox Cosmetic y varios otros productos comercializados específicamente para indicaciones estéticas (7.8). En los últimos 42 años, las indicaciones clínicas para BTA han aumentado, con varios usos aprobados por la FDA y fuera de etiqueta en urología, gastroenterología, oftalmología, neurología y varios otros campos. Este artículo se centra en los usos estéticos del BTA inyectable y revisa los sitios de tratamiento más comunes para la mejora de las ritidas faciales. Actualmente, BTA está aprobado para el tratamiento de líneas de ceño glabelar y patas de gallo; todos los demás usos estéticos faciales permanecen fuera de etiqueta (9). 1.2 Farmacología Las neurotoxinas botulínicas son producidas por varias cepas de bacterias del género Clostridium, principalmente Clostridium botulinum. Hay 7 serotipos conocidos de neurotoxina botulínica (A – G), de los cuales, los tipos A (BTA) y B (BTB) se producen comercialmente para uso clínico. La toxina botulínica se sintetiza como una proteína de 150 kDa que sufre modificaciones postraduccionales en una cadena pesada de 100 kDa y una cadena ligera de 50 kDa, unidas por un puente disulfuro (3-6). La cadena pesada se une a las neuronas presinápticas en la unión neuromuscular y facilita la entrada de la cadena ligera en el citoplasma celular. Allí, la cadena ligera de cada serotipo se dirige a un componente del complejo soluble del receptor de la proteína de unión al factor sensible a N-etilmaleimida (SNARE), al que se escinde y por lo tanto inactiva. Los componentes del complejo SNARE son esenciales para la fusión de microvesículas y la liberación del neurotransmisor almacenado. BTA se dirige a la proteína asociada al sinaptosoma, sinaptobrevina diana BTB de 25 kDa, también conocida como proteína de membrana asociada a la vesícula (10). Al inhibir la liberación del neurotransmisor almacenado en la unión neuromuscular, las neurotoxinas botulínicas causan una parálisis flácida de los músculos diana. La parálisis y una pérdida casi completa de los potenciales de la placa motora se producen a las pocas horas de la inyección de neurotoxina botulínica; sin embargo, el efecto clínico puede no ser evidente hasta 1 semana después de la administración (1,10). La latencia del efecto clínico puede ser causada por la liberación espontánea, no asociada a vesículas, de acetilcolina en la unión neuromuscular. El bloqueo neuromuscular de la administración de toxina botulínica es irreversible. El brote axonal y la formación de nuevas uniones neuromusculares son responsables de la disipación de los efectos clínicos a lo largo del tiempo (11). 1.3 Composición del producto La toxina botulínica pura se sintetiza como una proteína de 150 kDa que forma complejos con cantidades variables de proteínas no tóxicas y hemaglutinina. Cada producto comercialmente disponible tiene su toxina compleja con una cantidad variada de proteínas únicas. Las dosis de cada producto se miden en unidades, correspondiendo una unidad a la dosis intraperitoneal letal media (LD50) en ratones(2,9). Sin embargo, el método para realizar este ensayo es específico para cada fabricante, lo que impide la comparación entre productos similares. Las equivalencias de dosificación aproximadas y comúnmente aceptadas se han determinado clínicamente y se analizan a continuación. Actualmente, hay 4 preparaciones de toxina botulínica de uso común: onabotulinumtoxinA (Botox; Botox Cosmetic, Allergan, Irvine, CA), abobotulinumtoxinA (Dysport; Ipsen, Ltd, Berkshire, Reino Unido), incobotulinumtoxinA (Xeomin; Merz Pharmaceuticals, Frankfurt) y rimabotulinumtoxinB (Myobloc; Solstice Neurosciences, San Francisco, CA) (4,6,12). Aunque el efecto clínico de cada uno es similar, difieren en su estructura química, proteínas asociadas, procesos de fabricación y purificación, mecanismo de acción y eficacia clínica. Debido a estas diferencias, no existen equivalencias de dosificación establecidas entre los productos, aunque han surgido algunas pautas clínicas generales. Los inyectores de BTA más experimentados usan las siguientes conversiones de dosis de BTA para usos faciales estéticos: 1 unidad de onabotulinumtoxin A 5 1 unidad de incobotulinumtoxinA 5 3 unidades de abobotulinumtoxin A. No hay suficiente experiencia para convertir las dosis de BTA en dosis de rimabotulinumtoxin B (13). 1.4 Almacenamiento y Reconstitución Myobloc (rimabotulinumtoxinB) está disponible en forma reconstituida y no requiere diluyente adicional antes de su uso. BTA se suministra en forma de polvo y debe reconstituirse antes de su uso. El fabricante de cada preparación de BTA recomienda la reconstitución exclusivamente con solución de cloruro de sodio al 0,9% sin conservantes; sin embargo, muchos médicos han cambiado a una solución de cloruro de sodio conservada con alcohol benzalconio para reducir la incomodidad del paciente (14). Varios ensayos clínicos han encontrado un éxito equivalente y una menor incomodidad para el paciente, atribuida al equilibrio de pH más favorable de la solución salina conservada. Una vez reconstituido, BTA se considera comúnmente frágil, a pesar de la evidencia de lo contrario. Varios estudios encontraron que la agitación vigorosa y el almacenamiento por hasta 6 semanas no tienen ningún efecto en los resultados clínicos de BTA reconstituido. Un estudio incluso no encontró cambios en la potencia de la onabotulinumtoxina A después de 6 semanas de agitación continua (10,14). 1.5 Duración del efecto La duración típica del efecto de la toxina botulínica es de 3 a 4 meses, dependiendo de varios factores, que incluyen dosis, concentración, técnica de inyección, respuesta inmune del paciente y otros. En los estudios de aprobación previa para cada uno de los productos disponibles comercialmente, se trató la región glabelar y se registró mensualmente el número de pacientes que mantenían una respuesta. Tres meses después del tratamiento, los porcentajes de pacientes que mantuvieron una respuesta clínica fueron aproximadamente del 50% para Botox, del 40% al 50% para Dysport y del 15% al 25% para Xeomin (11,12). Los rangos presentados para Dysport y Xeomin se debieron a diferencias en la evaluación de la respuesta del clínico versus el paciente. Es importante destacar que el estudio Xeomin definió una respuesta como al menos una mejoría clínica de 2 puntos, mientras que el estudio Dysport definió una respuesta como al menos una mejoría clínica de 1 punto. Teniendo esto en cuenta, Xeomin puede no ser inferior a Botox o Dysport. Independientemente del producto utilizado, menos del 20% de los pacientes mantuvieron una respuesta más allá de los 4 meses. Es posible que el aumento de las dosis en cada sitio de inyección prolongue la duración clínica y el número de respondedores, pero las dosis máximas, después de las cuales no se logra ningún beneficio clínico, aún no se han establecido (15). 1.6 Pautas generales de inyección Los pacientes deben suspender cualquier medicamento o suplemento que interfiera con la hemostasia 10 a 14 días antes del procedimiento para minimizar los moretones. Antes de inyectar, se pueden usar compresas de hielo o anestésico tópico para minimizar la incomodidad del paciente. La aguja de calibre más pequeño disponible debe usarse para inyección, ya que las agujas más pequeñas reducen significativamente el dolor y limitan los hematomas (3,10). La concentración de BTA se puede variar para limitar o aumentar la difusión cuando se tratan áreas localizadas o amplias, respectivamente. Los estudios de electromiografía han encontrado que el BTA inyectado puede extenderse hasta 3 cm desde el sitio de inyección. Por lo tanto, se debe tener cuidado y se debe considerar la concentración al intentar un debilitamiento muscular selectivo altamente facial. Con respecto a la administración de dosis, la práctica clínica varía ampliamente, y solo podemos proporcionar un marco desde el cual abordar al paciente que se presenta para el tratamiento con toxina botulínica. Se han publicado recomendaciones de consenso clínico para el uso de Botox Cosmetic y Dysport. Debido a su relativamente reciente aprobación de mercado, Xeomin no tiene recomendaciones publicadas actualmente, pero se encuentra que la administración de dosis es intercambiable con Botox Cosmetic (13- 15). 1.6.1 Tratamiento de la cara y cuello inferior Al igual que con la cara media, los pilares del tratamiento de los cambios relacionados con el envejecimiento en la cara inferior y el cuello son la restauración del volumen y la resuspensión de los tejidos descendidos; Sin embargo, hay varias indicaciones estéticas para el tratamiento con BTA (1,6,16). 1.6.1.1 Bandas platismales A pesar de los avances en el rejuvenecimiento no quirúrgico de la cara, el envejecimiento del cuello sigue siendo un desafío para el cirujano estético. La lipodistrofia, las ritidas horizontales, el adelgazamiento de la piel y los tejidos subcutáneos, los cambios esqueléticos subyacentes, la disminución del ángulo cervicomental y la laxitud del tejido son solo algunos de los componentes del envejecimiento del cuello (2,4,9). Aunque muchos de estos componentes requieren técnicas quirúrgicas para abordar, sigue existiendo un papel para el rejuvenecimiento no quirúrgico del cuello envejecido con toxinas botulínicas. Las ritidas estáticas y la lipodistrofia no son susceptibles de tratamiento con BTA, pero las bandas platismales verticales y las ritidas horizontales pueden mejorarse con la quimiodenervación. Además, los pacientes que buscan mejorar el contorno y la definición de la mandíbula han sido tratados con éxito con quimiodenervación de la parte inferior de la cara y el cuello (10,11). Figura 1. Músculo platisma, los bordes anterior y posterior de los músculos están delineados en la piel. 1.6.1.2 Anatomía El platisma es un músculo ancho y delgado que se origina en la fascia deltopectoral y se extiende cefálica para insertarse a lo largo del borde inferior de la mandíbula y el sistema musculoaponeurótico superficial de la cara inferior. Estas inserciones hacen que el platisma sea un poderoso depresor de la cara inferior y la mandíbula. Aunque se representa clásicamente como un músculo distinto a cada lado del cuello anterior, las fibras a menudo se decusan a través de la línea media (2,4). 1.6.2 Recomendaciones de tratamiento En los pacientes que buscan suavizar la apariencia de sus bandas platismales, pero no son candidatos o no desean una platoplastia, la inyección de BTA en las bandas platismales es un procedimiento seguro y efectivo. Además, hay técnicas disponibles para aquellos que buscan mejorar el contorno del borde mandibular. Matarasso y Matarasso desarrollaron un sistema para clasificar el envejecimiento del cuello que guía las dosis de tratamiento y predice qué pacientes responderán más favorablemente al tratamiento. Se le pide al paciente que contraigael músculo platisma, que a menudo se puede obtener pidiéndole que muestre al examinador sus dientes inferiores (14,15,17). Esta contracción le permite al examinador agarrar cada banda entre el pulgar y el dedo índice de la mano no dominante. Se sugieren inyecciones directas en las bandas en 3 a 5 sitios, a intervalos de 1 cm a lo largo del músculo. Se ha informado una variabilidad significativa en la dosificación en la literatura, con recomendaciones consensuadas que promedian 30 a 40 U de Botox Cosmetic y varían según el número de bandas y la masa muscular (14,15,17). En general, 4 a 5 U por sitio de inyección deberían proporcionar una corrección adecuada de las bandas. Se debe tener cuidado de inyectar específicamente en las bandas, en la capa dérmica profunda, ya que la difusión de BTA a los músculos de la correa o los músculos más profundos del cuello puede causar disfagia, disfonía, disartria o dificultades respiratorias potencialmente mortales. Las complicaciones, aunque raras, se pueden minimizar o eliminar manteniendo las dosis de inyección a menos de 50 U por sesión. BTA también se puede utilizar para afilar el contorno mandibular para alargar la apariencia del cuello. Esta técnica, el ascensor Nefertiti, lleva el nombre de una reina egipcia con una mandíbula considerada ideal. Las inyecciones se dirigen al platisma a lo largo de la mandíbula y las bandas platismales posteriores para definir mejor la unión mandibular-cuello (8,12,17,18). Figura 2. La técnica se coloca a través de cada una de las líneas horizontales, y se inyecta toxina al retirar la aguja. 1.7 Seguimiento del paciente y ajustes de toxina botulínica tipo A Como con cualquier otro procedimiento, los registros de inyección deben mantenerse para permitir futuros tratamientos reproducibles. Especialmente después de que un área anatómica se trata por primera vez, los pacientes deben ser vistos 2 semanas después de las inyecciones de BTA para evaluar el resultado, considerar inyecciones adicionales y hacer ajustes para futuros tratamientos (2,6,7,11). 1.8 Inmunogenicidad Al igual que con cualquier sustancia extraña, el sistema inmunitario del cuerpo reconoce el BTA y desencadena una respuesta humoral. La formación de anticuerpos puede bloquear la acción terapéutica de BTA, dando como resultado un fracaso parcial de la terapia secundaria o un fracaso completo de la terapia secundaria (13,18). La mayoría de los casos de fracaso de la terapia se han documentado en pacientes que reciben grandes dosis de BTA para el tratamiento de la espasticidad y la distonía; sin embargo, se han publicado varios informes de fracaso de la terapia en pacientes que reciben tratamientos estéticos. Se han implicado varios factores en la promoción de la formación de anticuerpos contra BTA, incluidas dosis únicas grandes, intervalos de inyección cortos y tratamientos de refuerzo después del tratamiento inicial; la preparación utilizada para inyección; y las características individuales del sistema inmune de un paciente (19). Una determinación precisa de la incidencia del fracaso de la terapia es difícil, ya que los comportamientos del paciente (recibir tratamiento de más de un profesional, seguimiento irregular) y las prácticas médicas (técnica de inyección, dosificación, frecuencia de administración) no están estandarizadas (9,15). Del mismo modo, actualmente no se entiende qué pacientes pueden progresar a un fracaso de la terapia secundaria. Los datos disponibles sugieren que la frecuencia de conversión de anticuerpos después del tratamiento con onabotulinumtoxinA es baja y con poca frecuencia conduce a la pérdida de eficacia clínica. Las proteínas complejas que acompañan a la toxina botulínica inyectable se han implicado como adyuvantes en la estimulación de la respuesta inmune. Las preparaciones comerciales desprovistas de cualquier proteína complejante (Xeomin) están disponibles y pueden reducir la formación de anticuerpos (20,21). En las indicaciones no estéticas, existe evidencia de que el cambio de preparaciones de toxinas complejas (Botox, Dysport) a neurotoxinas purificadas (Xeomin) puede ser eficaz en los no respondedores secundarios. Además, aunque las toxinas botulínicas tipos A y B son igualmente efectivas en el tratamiento de la distonía cervical, la toxina botulínica tipo B muestra niveles más altos de inmunogenicidad que el tipo A. La indicación principal para las toxinas botulínicas tipo B puede ser, por lo tanto, en el tratamiento de pacientes quien tiene (20). 1.9 Complicaciones El historial de seguridad general de BTX es excepcional. Un metaanálisis reciente de ensayos controlados con placebo con OnaA, ya sea para los ritidos cantales laterales o glabelares, encontró que solo 3 eventos adversos (EA) fueron más comunes que el placebo entre 1170 sujetos: trastorno sensorial de los párpados (2.4%), que incluye síntomas subjetivos de opresión. y pesadez; edema de párpados (1,1%) y ptosis de párpados (1,8%) (8,19). Las secuelas adversas de la administración de BTX se pueden dividir en 2 categorías principales: complicaciones relacionadas con el producto y complicaciones técnicas. Es importante destacar que todos los EA hasta la fecha han sido de naturaleza efímera y, según el conocimiento de los autores, ni siquiera se han propuesto complicaciones creíbles a largo plazo, mucho menos establecidas (22). Teniendo en cuenta la prolongada lista de efectos secundarios con la mayoría de los productos farmacéuticos modernos y el número prodigioso de pacientes expuestos a BTX, el número y la frecuencia de reacciones farmacológicas verdaderas a BTX es notablemente baja. Cabe esperar que la inyección de una proteína extraña desencadene fenómenos inmunológicos, pero estos son extremadamente raros. Las reacciones de hipersensibilidad inmediata de tipo I caracterizadas por urticaria o anafilaxia se enumeran como posibles EA en el prospecto de OnaA (18-20). Sin embargo, una búsqueda en la literatura de estas y otras complicaciones alérgicas reveló solo un caso reportado de anafilaxia.42 Este caso fue un EA fatal que ocurrió en respuesta a una amalgama de BTX- lidocaína no aprobada.43 No se encontraron casos de urticaria. Solo hubo un puñado de informes de erupciones cutáneas o posibles reacciones de hipersensibilidad que podrían atribuirse razonablemente a BTX-A o un excipiente asociado. Una revisión exhaustiva de 2005 de los informes de la FDA AE reveló 47 casos de "erupción cutánea no grave" no especificada y 13 casos "graves" de "reacciones alérgicas / erupción" de millones de exposiciones, con el 85% de las últimas reacciones graves después del uso no cosmético (23). De manera similar, BTX no parece provocar una inmunidad celular significativa con pocas reacciones bien establecidas, si es que las hay, consistentes con una hipersensibilidad de tipo retardado. Ha habido un informe de nódulos postinyectables diagnosticados como sarcoidosis y un informe de una erupción farmacológica fija provocada por la lactosa incluida con AboA (24). Tres de las erupciones documentadas relacionadas con BTX mencionadas anteriormente tenían un carácter morbiliforme comparable a un exantema clásico de drogas (aunque 2 de ellas no se repitieron en la reexposición) (17,25). Sin embargo, BTX, en dosis y duraciones suficientes, generará una inmunidad humoral significativa, incluidos anticuerpos neutralizantes. Estos anticuerpos han sido reportados en pacientes tratados por distonía cervical que reciben tratamientos repetitivos, cada uno de los cuales suele superar los 100 bU. A pesar de las intensas investigaciones de los fabricantes y otros, no se han descubierto anticuerpos neutralizantes en pacientes tratados con fines cosméticos, excepto en un paciente después de recibir 240 bU (4 inyecciones de 60 bU) para hipertrofia masetero (25).2. OBJETIVOS 2.1 Objetivo general Evaluar la diversa literatura que señala el uso de toxina botulínica en el rejuvenecimiento del cuello, en específico el musculo platisma del cuello. 2.2 Objetivos específicos Analizar la técnica de toxina botulínica aplicada en las bandas platismales del cuello. Especificar los diversos usos de la aplicación de la toxina botulínica. Identificar los posibles efectos adversos relacionados con la aplicación de toxina botulínica en las bandas platismales. 3. MATERIAL Y MÉTODOS Se trata de una revisión bibliográfica-sistemática, donde los artículos se buscaron en 3 bases de datos destinadas a temas de ciencias de la salud y en específico odontología. Las bases de datos utilizadas para la búsqueda de la muestra bibliográfica fueron Pubmed, ScienceDirect y Cochrane Library, las mismas corresponden a bases de información que se ajustan a temas de ciencias de la salud en específico de medicina estética. Se emplearon ecuaciones de búsqueda. Las mismas fueron formuladas a partir del esclarecimiento de palabras clave traducidas al dialecto científico o lenguaje controlado. Este lenguaje se representa mediante descriptores del tesauro MeSH (Medical Subjet Headings), perteneciente a las bases de datos mencionadas anteriormente, donde el mismo es un extenso vocabulario de lenguaje controlado. Término Lenguaje libre Lenguaje controlado MeSH Toxina botulínica Toxina botulínica Botulinum toxin Musculos del cuello Musculos del cuello Neck Muscles Rejuvenecimiento Rejuvenecimiento Rejuvenation Cirugia Estética Cirugia plástica Surgery, Plastic Tabla 1. Palabras clave, lenguaje controlado Es significativo destacar que el termino o palabra clave que aún no forma parte del MeSH es ‘Platysmal bands’ pero es imprescindible usarlo porque forma parte del tema principal de la revisión, de modo que la búsqueda por las bases de datos fue de manera simple, usando su término en lenguaje libre y búsqueda simple Estas palabras clave, serán combinadas de manera diversa con el uso del operador boleano AND, formando así ecuaciones de búsqueda. • Botulinum toxin AND Neck muscles • Rejuvenation AND Neck Muscles • Surgery, Plastic AND Botulinum toxin AND Neck Muscles • Botulinum toxin AND Rejuvenation AND Neck Muscles • Botulinum toxin AND Rejuvenation AND Platysmal bands 3.1 Criterios Metodológicos 3.1.1 Criterios de inclusión • Artículos con años de publicación a partir del 2013 • Artículos en inglés • Categorías de artículos: revisiones, ECAs, ensayos clínicos y revisiones sistemáticas. • Artículos a texto completo 3.1.2 Criterios de exclusión • Artículos con publicación menor al año 2013 • Artículos con acceso limitado al texto. • Artículos en idiomas diferentes de inglés. • Para la base de datos ScienceDirect, debido a la amplia gama de información contenida en esta base de datos será necesario filtrarlo en contenidos Revistas/Journal, para quitar libros y enciclopedias y ser más específicos con los artículos, entre ellos tenemos a Facial Plastic Surgery Clinics of North América, Journal of Plastic, Reconstructive & Aesthetic Surgery, A continuación, se mostrarán en cada base de datos los artículos obtenidos: Pubmed: Ecuaciones de búsqueda Resultados Botulinum toxin AND Neck muscles 7 Rejuvenation AND Neck Muscles 14 Surgery, Plastic AND Botulinum toxin AND Neck Muscles 0 Botulinum toxin AND Rejuvenation AND Neck Muscles 0 Botulinum toxin AND Rejuvenation AND Platysmal bands* 3 Tabla 2. Resultados de Pubmed, Búsqueda simple* ScienceDirect Ecuaciones de búsqueda Resultados Botulinum toxin AND Neck muscles 35 Rejuvenation AND Neck Muscles 78 Surgery, Plastic AND Botulinum toxin AND Neck Muscles 0 Botulinum toxin AND Rejuvenation AND Neck Muscles 20 Botulinum toxin AND Rejuvenation AND Platysmal bands* 8 Tabla 3. Resultados de ScienceDirect Cochrane Library Ecuaciones de búsqueda Resultados Botulinum toxin AND Neck muscles 97 Rejuvenation AND Neck Muscles 1 Surgery, Plastic AND Botulinum toxin AND Neck Muscles 0 Botulinum toxin AND Rejuvenation AND Neck Muscles 0 Botulinum toxin AND Rejuvenation AND Platysmal bands* 1 Tabla 4. Resultados de Cochrane Library, *Búsqueda simple 3.2 Selección de estudios Tras la búsqueda ejecutada y posterior lectura y análisis bibliográfico a través de las diferentes bases de datos revisadas en las que se encuentran incluidas Pubmed, ScienceDirect y Cochrane Library se realizó una búsqueda sistemática en las mismas donde estuvieron fundamentadas en la utilización de palabras clave o ecuaciones de búsqueda. En este procedimiento se examinaron los títulos de los artículos científicos y resúmenes, en los diversos criterios metodológicos pertinentes, así como sus objetivos correspondientes. En consecuencia, se obtuvo un total de 264 artículos, todos ellos englobados en categorías de revisiones, revisiones sistemáticas y ensayos clínicos. De dichos artículos fueron excluidos 210 al leer sus títulos, 35 excluidos al leer el resumen, 2 por ser duplicados, 2 por estar en idiomas distintos de inglés y español, quedando así 11 artículos dispuestos para su lectura completa, luego del análisis de los mismos, se escogieron 7 artículos que serían los resultados de la revisión bibliográfica que se adaptaron más a los objetivos de la revisión todo reflejado en la figura 3. 3.3 Niveles de evidencia de los artículos seleccionados Los grados de recomendación se han utilizado con mayor frecuencia en el desarrollo de guías de práctica. En este proceso, las organizaciones reúnen toda la literatura apropiada sobre una cuestión clínica. La calidad de la literatura se evalúa con el uso de niveles de evidencia. Finalmente, la calidad general de la literatura se resume como un grado de recomendación. El uso de Grados de recomendación mejorará los artículos de revisión publicados de dos maneras. En primer lugar, los artículos de revisión proporcionarán recomendaciones de tratamiento explícitas para los profesionales de la salud, según el área de estudio. En segundo lugar, los grados de recomendación guiarán a los clínicos en cuanto a si definitivamente (grado A) o probablemente (grado B) deben cambiar su práctica. Finalmente, al usar este sistema, también sabremos aquellas cosas que no se saben. En algunas situaciones clínicas, el medico no tendrá buena evidencia, o incluso ninguna evidencia en absoluto, sobre la cual tomar una decisión importante y, en tales casos, la decisión deberá tomarse con el médico o especialista confiando en gran medida en el juicio profesional únicamente. Artículos Grados de recomendación Tipo de estudio Awaida et al. 2018 A Ensayo clínico Geister et al. 2013 A Ensayo clínico Gupta et al. 2015 A Ensayo clínico Jabbour et al. 2017 A Ensayo clínico Kane 2018 A Revisión Prager et al. 2015 B Ensayo clínico Sugrue et al. 2018 A Revisión sistemática 3.4 Diagrama de flujo PRISMA Figura 3. Esquema y cribado de resultados Registros identificados a través de la búsqueda en la base de datos (n = 264) S c r e e n I n g I n c l u I d o s E l e g I b I l I d a d I d e n t I f I c a c I o n Registros adicionales identificados a través de otras fuentes (n = 0) Registros después de eliminar duplicados (n = 2) Registros seleccionados (n = 11) Registros excluidos (n = 247) Artículos de texto completo evaluados para elegibilidad (n = 11) Artículos de texto completo excluidos, con razones: 1. Idioma incorrecto 2. No se hablaba de temática directa al tema de la revisión. 3. Artículos con acceso limitado (n = 4) Estudiosincluidos en síntesis cualitativa. (n = 11) Estudios incluidos en síntesis cuantitativa (n = 7) 4 RESULTADOS La historia de la toxina botulínica en medicina es extensa y continúa siendo una colaboración multidisciplinaria. Desde el punto de vista terapéutico, se documentó por primera vez en 1973 que se descubrió que la exotoxina botulínica A mejora los músculos extraoculares. No fue sino hasta casi dos décadas después, en 1992, que debilitar los músculos faciales seleccionados con "exotoxina" podría mejorar las ritidas, y no fue sino hasta un cuarto de siglo después de eso, en 1998, que apreciamos por primera vez que las inyecciones intramusculares de platisma podían mejorar el ángulo cervicomental (4,12). Un punto con la revisión es anatómico. La amplia extensión del músculo platisma tiene muchas variaciones y tiene una relación funcional integral con la musculatura adyacente. Se debe tomar mucha importancia a los autores de los artículos seleccionados porque integran la preocupación con la seguridad del paciente y su uso inicial de dosis bajas de toxina; sin embargo, a diferencia de la cantidad de toxina. Además, las fibras musculares no están completamente aisladas y, de hecho, la mayoría están entrelazadas con grupos musculares cercanos (2,18). El algoritmo para el tratamiento del cuello depende de las indicaciones, los objetivos del paciente. Los médicos ahora pueden ofrecer tratamientos mínimamente invasivos como monoterapia o como parte de una terapia combinada que incluye láser, terapia de luz, dispositivos para tensar los tejidos, estiramientos de hilo e inyecciones de desoxicolato. Sin embargo, el estándar con el que se comparará la mayoría de los tratamientos no quirúrgicos es la quimiodenervación del músculo platisma con neurotoxinas. Los artículos obtenidos reflejan diversos resultados en cuanto al uso de la toxina botulínica en el rejuvenecimiento de los músculos del cuello (17,20). Los cambios del cuello relacionados con la edad se deben a la laxitud excesiva de la piel, atrofia de la grasa subcutánea, herniación del tejido adiposo y reabsorción de la altura mandibular. El descenso de grasa y tejidos blandos produce ptosis de la comisura oral, formación de papada y línea de marionetas con una pérdida del contorno mandibular. Es por ello que el trabajo de Awaida et al. 2018 (26) hizo una investigación cuyo objetivo fue evaluar la seguridad y la eficacia de la técnica Microbotox utilizando puntajes validados y compararlo con la técnica de Nefertiti en cuello. Los resultados fueron que 25 de los 30 pacientes tratados previamente con la técnica de Nefertiti fueron inyectados con una dosis media de 154 U utilizando la técnica de Microbotox. Las bandas platismales con contracción, papada y volumen del cuello alcanzaron una mejoría estadísticamente significativa. La técnica de Microbotox mejoró las papadas y el volumen del cuello más que la técnica de Nefertiti, mientras que las bandas platismales en reposo y con contracción mejoraron más con la técnica de Nefertiti. El 100% de los pacientes estaban satisfechos con ambas técnicas y se calificaron a sí mismos como mejorados (26). Asimismo, se puede decir que un cuello delgado y estilizado se percibe como un atributo atractivo de la juventud. La pérdida de definición del cuello, la barbilla y la línea de la mandíbula y la aparición de papadas y zarzos son signos no deseados de envejecimiento. los procesos de envejecimiento degenerativos junto con los efectos de la gravedad causan laxitud, adelgazamiento y pérdida de elasticidad de la piel; la aparición de múltiples ritidas horizontales; ptosis gradual de los tejidos blandos del mentón; y bandas o cordones del músculo platisma del cuello anterior y lateral. Las bandas platismales son pliegues mediales y laterales del cuello causados por la contracción crónica del músculo platisma y la laxitud de la piel que puede conducir a la conocida apariencia de "cuello de pavo" o "engullidor" (15,19). El trabajo de Geister et al. 2013 (27) Desarrollo una escala para la evaluación objetiva de las bandas platismales dinámicas y validar su uso en el entorno clínico. De los 50 sujetos finalmente seleccionados de la base de datos fotográficos. Todas las calificaciones en la escala de evaluación se registraron en ambos ciclos de validación, con calificaciones de 0 a 3 que representan más del 90% de todas las calificaciones. El Grado 4, la mayor severidad de las bandas platismales en la escala, se registró en 7.6% (38 calificaciones) de todas las evaluaciones en el primer ciclo de validación y 8.6% (43 calificaciones) en el segundo (27). Las respuestas a la pregunta global de la escala de evaluación facial "Según su experiencia clínica, ¿cómo calificaría el esfuerzo de un tratamiento estético para este tema?" están en una escala de respuesta numérica que va de 0 (bajo esfuerzo) a 10 (alto esfuerzo). Los 11 grados en esta escala de evaluación se ingresaron en ambos ciclos de validación, con la excepción del grado 10 en el primer ciclo de validación. En el segundo ciclo de validación, el grado 10 fue asignado solo tres veces. En ambos ciclos de validación, las calificaciones en el rango 1-6 se asignaron cada una en al menos el 10% de las evaluaciones, mientras que las calificaciones 0 y 6> se usaron con menos frecuencia (27). En la estética facial, los sistemas de clasificación son herramientas útiles para planificar procedimientos estéticos. Un componente clave del rejuvenecimiento, el cuello anterior, se ha pasado por alto relativamente. En la década de 1980, se establecieron criterios para la aparición de un cuello juvenil. Considerando la contribución significativa del cuello anterior a la estética de la cara inferior, las herramientas de evaluación clínica actualizadas y más extensas son críticas para la ejecución exitosa y la medición del rejuvenecimiento. Todavía no se ha creado una escala de evaluación validada para las bandas platismales, un componente del cuello anterior que contribuye significativamente a la estética (15,21). Gupta et al. 2015 (28) estableció una escala de bandas platismales validada para aplicación clínica. Un total de 119 pacientes voluntarias fueron reclutadas para este estudio de poblaciones de pacientes y no pacientes. Los pacientes tenían edades comprendidas entre los 24 y los 78 años, con una edad promedio de 49 años. En gran parte debido a la amplia gama de edades capturadas en el estudio, los voluntarios proporcionaron un espectro de estética cervicomental, con una gran variedad de severidad de banda platismal, para el análisis y la creación de una escala de calificación. Los resultados de la encuesta presentados muestran las estadísticas descriptivas de todos los datos recopilados. Para todos los grados, el intervalo de confianza del 95% demuestra la consistencia de los datos, ya que no hay superposiciones entre los intervalos o sobre las diferentes clasificaciones. Las tablas también contienen coeficientes de correlación intraclase (ICC) para la confiabilidad entre evaluadores, calculados para todos los resultados que varían del valor de la escala. La validación de esta escala de bandas platismales dio resultados que van desde valores buenos a excelentes. Esta evaluación denota el grado de acuerdo entre los distintos evaluadores, que van desde 0.6 (bueno) a 0.82 (excelente) (28). En el trabajo de Jabbour et al. 2017 (29) señala que el "levantamiento de Nefertiti" consiste en inyectar las bandas platismales y el borde inferior de la mandíbula con toxina botulínica. Ningún ensayo clínico ha evaluado su efecto sobre los diferentes componentes del envejecimiento de la cara inferior y el cuello, y se sabe poco sobre las características clínicas que predicen el éxito del tratamiento. Este estudio prospectivo de prueba de concepto fue diseñado para evaluar estasdeficiencias. Cuantificará el efecto del lifting de Nefertiti en los diferentes componentes del envejecimiento de la cara y el cuello con puntajes validados específicos de la región. También hizo una evaluación subjetiva general y la tasa de satisfacción del paciente y definirá al candidato ideal para este procedimiento. Treinta pacientes fueron inyectados con una dosis media de 124.9 U de abobotulinumtoxinA por paciente (29). Las bandas platismales en reposo y con tensión máxima alcanzaron una mejora estadísticamente significativa. Los otros componentes mostraron una tendencia a la mejora, pero no alcanzaron significación estadística; El 93.3% de los investigadores y pacientes calificaron los resultados generales como mejorados, y el 96.6% de los pacientes estaban satisfechos con sus resultados. Al comparar a los pacientes que mejoraron más con todos los demás pacientes, obtuvieron puntuaciones más bajas específicas de la región de preinyección. Al comparar las fotografías de pre-inyección y post-inyección y utilizar la Escala Global de Mejora Estética del Sujeto, el 93.3 por ciento de los pacientes se calificaron a sí mismos como mejorados, y el 96.6 por ciento de los pacientes estaban satisfechos con sus resultados. Esta tasa de satisfacción no se correlacionó con ninguna otra variable (es decir, edad, tabaquismo, dosis de toxina botulínica, puntaje de dolor y puntajes específicos de las regiones preinyección y post-inyección) (29). Hay muchos componentes en el proceso de envejecimiento facial. El adelgazamiento de la dermis, la elastosis, la pérdida de volumen facial, los factores genéticos, la gravedad, los cambios esqueléticos, el daño solar y el tabaquismo juegan un papel importante en este proceso. También lo hace la animación facial. Ciertas rítidas son causadas principalmente por el movimiento facial. Otros son causados por otros factores, así como por un componente de la animación. Por lo tanto, siempre que una arruga o una forma poco atractiva sea causada al menos parcialmente por la acción muscular, puede tratarse con toxina botulínica A (BoNT-A); sin embargo, qué tan bien responda un área no estética específica al tratamiento con BoNT-A depende de cuánto del área poco atractiva es causada por factores distintos a la animación (1-5). Es por ello que el trabajo de Kane 2018 (30) tuvo como objetivo enfocado en la manipulación de la animación facial, la capacidad de la piel suprayacente para resistir estas fuerzas subyacentes que la deformarían también es de suma importancia cuando se discuten los ritidos. Por lo tanto, siempre que una arruga o una forma poco atractiva sea causada al menos parcialmente por la acción muscular, puede tratarse con toxina botulínica A (BoNT-A); sin embargo, qué tan bien responda un área no estética específica al tratamiento con BoNT-A depende de qué parte del área poco atractiva es causada por factores distintos a la animación. Por ejemplo, un ritido glabelar causado casi por completo por las acciones de los corrugadores y los músculos procáricos en un paciente relativamente joven puede erradicarse totalmente con BoNT-A (30). Por el contrario, los ritidos verticales del labio en una mujer de edad avanzada con piel delgada, daño solar, antecedentes de tabaquismo y pérdida de volumen del labio solo pueden mejorarse parcialmente mediante la inyección cuidadosa del músculo orbicular del oris, lo que contribuye a la formación de acordeones en forma de acordeón. La piel del labio suprayacente. El tratamiento con BoNT-A es actualmente el procedimiento cosmético más frecuentemente realizado en los Estados Unidos, y su importancia en la cirugía plástica estética simplemente no puede ser exagerada. En 2008, se realizaron casi 3,6 millones de procedimientos BoNT-A en los EE. UU. Eso es más que todos los procedimientos combinados de liposucción, aumento de senos, rinoplastia, estiramiento facial y blefaroplastia (9,30). El procedimiento secundario más común asociado con la inyección de BoNT-A es la inyección de relleno concomitante. El uso de BoNT-A y rellenos es altamente sinérgico. Atacan áreas no estéticas a través de sus diferentes causas, a menudo con resultados sobresalientes. Mientras que BoNT-A ataca la causa mimética subyacente, el relleno aborda el volumen y las causas estructurales del envejecimiento facial y del cuello. El rejuvenecimiento con láser es otro procedimiento que se beneficia del tratamiento con BoNT-A. En muchos sentidos, el mecanismo es similar a los resultados mejorados observados con BoNT-A y la revisión de cicatrices. Parece que la disminución relativa del movimiento mejora la cicatrización de heridas y da como resultado un tejido cicatricial menos aparente (16,31). Prager y col. 2015 (31) tuvo como objetivo investigar la eficacia, la seguridad y la satisfacción del sujeto de la incobotulinumtoxina A para el tratamiento con banda platismal. Se inscribieron 23 sujetos con 2 a 4 bandas platismales. Se administró IncobotulinumtoxinA (15 U) a cada banda. Las evaluaciones, utilizando la escala de 5 puntos, ocurrieron en 6 visitas posteriores al tratamiento durante 5 meses. Se registraron eventos adversos y los sujetos autoevaluaron la apariencia de sus bandas platismales versus la línea de base. En la tensión máxima, se observó una respuesta en el 65,2% de los sujetos 3 días después del tratamiento, que aumentó al 100% en el día 8. El cambio desde el inicio en el puntaje promedio fue significativo en cada punto de tiempo, incluida la visita final (semanas 20-21). Las tasas de respuesta fueron más altas en la tensión máxima que en reposo. El efecto pico ocurrió más tarde en reposo que a la tensión máxima. No se produjeron eventos adversos graves. En la tensión máxima, 69.6%, 73.9% y 68.2% de los sujetos calificaron sus bandas platismales como "mejoradas" o "notablemente mejoradas" en las visitas 2, 3 y 4, respectivamente (31). Aquí, los autores presentan datos que muestran que la incobotulinumtoxina A es un tratamiento efectivo para las bandas platismales en el cuello, con un inicio de acción rápido y una respuesta de larga duración. El tratamiento con toxina botulínica tipo A (BoNT / A) es un enfoque mínimamente invasivo ampliamente aceptado para el rejuvenecimiento facial, y su uso se ha expandido a otras áreas, como el tratamiento de bandas platismales marcadas. Una nueva escala de evaluación fotonumérica Merz de 5 puntos ha sido desarrollado y validado como una herramienta efectiva para clasificar la gravedad de las bandas de platisma a la tensión máxima. Utilizando esta escala, los autores investigaron la eficacia, seguridad y satisfacción del sujeto con incobotulinumtoxinA (Xeomin / Xeomeen / Bocouture / XEOMIN Cosmetic; toxina botulínica tipo A, libre de proteínas complejantes, NT 201, Merz Pharmaceuticals GmbH, Alemania) para el tratamiento de bandas platismales (25). Las bandas de platisma son características de un cuello envejecido, 3 que se presentan de forma aislada o con otros cambios senescentes en el cuello, como laxitud de la piel, lipodistrofia, mandíbulas nasolabiales y submandibular. Ptosis de las glándulas salivales. Sugrue y McInerney en el año 2018 (32) evaluaron la eficacia, las técnicas de inyección y las complicaciones asociadas con la inyección de toxina botulínica para el tratamiento de las bandas de platisma. Tres estudios cumplieron los criterios de inclusión, con un total de 78 pacientes sometidos a inyección de toxina botulínica para bandas de platisma. Se usó Incobotulinumtoxin A (Xeomin®) en 62.3% (n = 45/78) de los pacientes, con 38.4% (n = 30/78) con abobotulinumtoxin A (Dysport®). La eficacia se evaluó utilizando la escala de puntuación de Merz (puntuación media y tasa de respuesta-% de pacientes que respondieron a las inyecciones por al menos una puntuación). Se observó una mejora en la puntuaciónmedia de 2.0 puntos, con una tasa de respuesta del 93.7% después de 14 ± 2 días. A los tres meses, la mejora de la puntuación media fue de 1,2 puntos con una tasa de respuesta del 86%. Las métricas informadas por los pacientes demostraron una mejora en 71/78 (91%) de los sujetos. Hubo una técnica de inyección estándar entre los estudios, con un máximo de 20 UI de incobotulinumtoxina A y 5 U de abobotulinumtoxina A por banda. Se informaron complicaciones en 12/78 (15,4%) pacientes, y ninguno requirió más invención (32). Esquema de resultados Autor / Año Diseño Objetivo Conclusiones Awaida et al. 2018 Ensayo clínico Evaluar la seguridad y la eficacia de la técnica Microbotox utilizando puntajes validados y compararlo con el Nefertiti Lift. La técnica Microbotox es un procedimiento útil, simple y seguro para el rejuvenecimiento de la cara inferior y el cuello. Es principalmente eficaz en el tratamiento de la ptosis de tejidos blandos del cuello y la cara inferior en contraste con la técnica de Nefertiti que es más efectiva en las bandas platismales. Geister et al. 2013 Ensayo clínico Desarrollar una escala para la evaluación objetiva de bandas dinámicas platismales y validar su uso en el entorno clínico. La nueva escala de evaluación fotonumérica de banda platísmica dinámica de 5 puntos es una herramienta valiosa para su uso en el entorno clínico estético. Gupta et al. 2015 Ensayo clínico Establecer una escala de bandas platismal validada para aplicación clínica. Este estudio estableció una escala validada para evaluar el grado de bandas platismales en el cuello femenino. Este sistema de clasificación tiene una aplicación potencial en la planificación previa al procedimiento para pacientes que estén considerando el rejuvenecimiento de la cara y el cuello para abordar las bandas platismales. Jabbour et al. 2017 Ensayo clínico Evaluar la evaluación subjetiva general y la tasa de satisfacción del paciente y definir el candidato ideal para este procedimiento. La técnica de Nefertiti se puede usar solo o junto con otros procedimientos de rejuvenecimiento. Es particularmente útil en pacientes más jóvenes con hiperactividad muscular del platisma y elasticidad de la piel retenida. Kane 2018 Revisión Analizar las diversas técnicas estéticas utilizadas entre ella la musculatura del cuello. El procedimiento secundario más común asociado con la inyección de BoNT-A es la inyección de relleno concomitante. El uso de BoNT-A y rellenos es altamente sinérgico. Prager et al. 2015 Ensayo clínico Investigar la eficacia, seguridad y satisfacción del sujeto de la incobotulinumtoxina A para el tratamiento con banda platismal. La incobotulinumtoxina A es un tratamiento eficaz y bien tolerado para las bandas platismales, con un inicio rápido y un efecto de larga duración. Sugrue et al. 2018 Revisión sistemática Evalúa la eficacia, las técnicas de inyección y las complicaciones asociadas con la inyección de toxina botulínica para el tratamiento de las bandas de platisma. La toxina botulínica es un tratamiento altamente efectivo para bandas de platisma aisladas. Se describe y recomienda una técnica de inyección segura para la práctica clínica. Tabla 5. Esquema de resultados 5 DISCUSIÓN La inyección de toxina botulínica A es un procedimiento cosmético seguro, útil y mínimamente invasivo para el rejuvenecimiento facial. Comprender la función y la musculatura facial subyacente, así como las expectativas estéticas del paciente, es fundamental para lograr resultados satisfactorios. Las indicaciones y las ritidas relacionadas con la edad se vuelven más populares. Hasta hace poco, la única opción para el rejuvenecimiento del cuello era a través de procedimientos de cirugía plástica. Estos procedimientos quirúrgicos pueden excluir a varias personas, como aquellas psicológicamente no preparados para la cirugía, candidatos no quirúrgicos debido a problemas médicos, pacientes con resultados de ritidectomía subóptima, pacientes que no pueden someterse a un tiempo de recuperación y pacientes más jóvenes con cambios degenerativos tempranos de la cara y el cuello (30.31). En la revisión se analizó una técnica mediante la cual la inyección de toxina botulínica en el complejo de platisma puede rejuvenecer dramáticamente la mitad inferior de la cara y el cuello. Esta técnica puede lograr resultados cosméticos similares en resultados a la cirugía de ritidectomía en ciertos individuos. Para comprender cómo el uso de la exotoxina botulínica A puede rejuvenecer la cara inferior y el cuello y redefinir la mandíbula mandibular, se debe revisar la anatomía subyacente. El complejo muscular platisma abarca los aspectos anterolaterales del cuello. Se origina en la fascia superior de la parte superior del tórax y se inserta en el tejido subcutáneo de la región clavicular y acromial. Sus fascículos cruzan la cara lateral del cuello y se insertan superiormente en el mentón y las comisuras orales (25,26). Los diferentes componentes del envejecimiento de la cara inferior y el cuello están dirigidos por las 2 técnicas de inyección diferentes. Presumimos que la técnica Microbotox produce un efecto de estiramiento de la piel al debilitar las fibras superficiales del músculo platisma. Al paralizar las fibras superficiales del platisma, permite que la piel se adapte al cuello subyacente y a la silueta de la cara inferior, mejorando las papadas, el volumen del cuello y el ángulo cervico-mandibular. En contraste, la técnica de Nefertiti no logró mejorar la ptosis de los tejidos blandos (28). Aunque la mejora de las bandas platismales en la contracción fue estadísticamente significativa con la técnica Microbotox, la mayoría de los pacientes presentaron 15 días después del tratamiento con diversos grados de bandas residuales. Además, no hubo mejora de las bandas platismales en reposo. En contraste, las bandas platismales en reposo y contracción mejoraron significativamente con el ascensor Nefertiti. Se cree que las fibras profundas del platisma permanecieron activas con las inyecciones de Microbotox en comparación con la técnica de Nefertiti, donde las fibras del platisma profundo estaban paralizadas. Por lo tanto, la modalidad Microbotox para el rejuvenecimiento del cuello fue más efectiva en la ptosis de tejidos blandos, pero menos efectiva en las bandas platismales en comparación con la técnica de Nefertiti (26,30). Las bandas laterales del músculo platisma facilitan la expresión facial al bajar las esquinas del labio inferior. Sus fibras posteriores continúan superiormente para unirse al sistema musculoaponeurótico superficial (SMAS) de la cara. Si el tratamiento con toxina botulínica se inicia lo suficientemente temprano y se repite a intervalos de 4 a 6 meses, se pueden prevenir algunos de los cambios degenerativos de la cara y el cuello inferiores, posponiendo así la necesidad de ritidectomía por un período de tiempo indefinido. Sorprendentemente, todos los pacientes de diferentes edades y diversas etapas de degeneración musculocutánea pueden beneficiarse de las inyecciones de toxina botulínica (27). El tratamiento del envejecimiento del cuello con toxina botulínica es un procedimiento cosmético beneficioso para aquellos pacientes que desean posponer la cirugía de estiramiento facial y las personas que no desean tomarse el tiempo de recuperación. Algunos pacientes tienen problemas médicos que impiden hacerse un estiramiento facial, mientras que otros no están psicológicamente preparados para la cirugía. Después de la operación, a los pacientes con ritidectomía se les puede reaparecer sus bandas platismales entre 6 meses y 1 año después de la cirugía. Estas bandas recurrentes pueden tratarse eficazmente con toxinabotulínica (25,27,29). Los pacientes también pueden presentar asimetría de las papadas y bandas platismales después de un estiramiento facial. El tratamiento con toxina botulínica puede eliminar algunas de las bandas longitudinales prominentes y mejorar el resultado cosmético después de la ritidectomía (31). Las inyecciones de toxina botulínica A son un excelente procedimiento complementario para cuando el material de relleno se inserta en las comisuras orales, ya que la disminución de la actividad muscular en las comisuras orales de las inyecciones de toxina botulínica puede aumentar la cantidad de tiempo que durará el material. Hasta ahora, no ha habido informes de reacciones alérgicas o de urticaria1 a la toxina botulínica. Aunque se ha informado que la incidencia de la formación de anticuerpos contra la proteína botulínica es entre 3-5%, no hemos visto ningún paciente que haya desarrollado anticuerpos o resistencia a la exotoxina botulínica A para el tratamiento del envejecimiento del cuello. La exotoxina botulínica A debería no inyectarse en mujeres embarazadas o en período de lactancia ni en pacientes con sensibilidad a la albúmina humana o antecedentes de afecciones neuromusculares. La exotoxina botulínica A aún no ha sido aprobada por la Administración de Drogas y Alimentos para uso cosmético. Es un tratamiento alternativo seguro y efectivo para el rejuvenecimiento del cuello y la cara inferior envejecidos. Los pacientes están uniformemente satisfechos y las complicaciones son mínimas (26,27). La toxina botulínica puede tener un inicio de acción diferente en la piel y los músculos. Se ha demostrado que la parálisis muscular máxima ocurre a las 2 semanas después de las inyecciones. Sin embargo, ningún estudio ha evaluado el inicio de la acción de la toxina en la piel y sus diferentes componentes (21,26,30). La nueva escala dinámica de evaluación de la banda platismal del trabajo Geister et al. 2013 no se correlacionaron altamente con la edad del sujeto o con las dos preguntas globales. Esto puede ser por diferentes razones: primero, la prominencia de las bandas platismales puede ser un rasgo de envejecimiento específico o atípico y, por lo tanto, generalmente no refleja la edad general; en segundo lugar, la importancia destacada de las bandas platismales puede expresarse bastante temprano y depender más de factores genéticos y características específicas de género en cada sujeto que en la edad del sujeto; y finalmente, el tejido circundante del cuello, particularmente en cuellos con alta adiposidad o con un alto grado de elastosis, puede ocultar la expresión de la prominencia de las bandas platismales, lo que a su vez puede dar como resultado una relación más independiente de la edad (21,26,30). Un hallazgo interesante que surgió del procedimiento de selección de 50 sujetos finales para la validación (de una población inicial de 173 sujetos) fue que el tejido circundante del cuello era un factor crucial que afectaba la visualización de bandas prominentes, especialmente en mujeres, en nuestra población. Esto también se reflejó en la distribución desigual final de mujeres y hombres en nuestra población. Por lo tanto, la prominencia de las bandas platismales parece estar relacionada con una población bastante específica, y no se esperaba una relación general entre la prominencia de la banda platismal y la edad real de los sujetos para esta nueva escala de la misma manera que se ha demostrado para rasgos de envejecimiento más universales, como como pérdida de la definición de la mandíbula (18,24,32). A medida que nuevos avances médicos farmacológicos y tecnológicos llegan al mercado, nos enfrentamos a una gama cada vez mayor de modalidades de tratamiento para mejorar la estética del cuello y la parte inferior de la cara. Los métodos confiables de evaluación basada en evidencia de estas intervenciones son cruciales para proporcionarnos la capacidad de discernir diferencias, ventajas y desventajas entre varias técnicas. En 1996, la caracterización de la banda platismal se definieron cuatro clases de bandas, siendo la clase uno la menos prominente y cuatro las bandas severas en reposo (21). Sin embargo, una mayor delineación, así como la validación de las escalas de calificación, es crucial para su utilización en el análisis basado en evidencia. Recientemente, se han desarrollado múltiples escalas de evaluación validadas para varios componentes del tercio inferior de la cara y el cuello. Sin embargo, aún no se ha publicado una herramienta de evaluación validada para las bandas platismales en la literatura sobre cirugía plástica (26,31,32). Una preocupación teórica de algunos profesionales es que la inyección de platisma dará como resultado una mayor laxitud de la piel como consecuencia de la pérdida de tono muscular y cordones platismales pesados, sueltos y paralizados. En consecuencia, el volumen general del cuello podría aumentar. Sin embargo, no encontramos ningún cambio en las puntuaciones de volumen del cuello después de la inyección. Para definir al paciente ideal, examinamos las características basales de los sujetos que obtuvieron los puntajes más altos de la Escala de Mejora Estética Global del Investigador. Encontramos que los mejores resultados se obtienen en pacientes con signos de envejecimiento menos avanzados. De hecho, la hiperactividad muscular juega un papel importante en las primeras etapas del envejecimiento del cuello y la cara inferior, en contraste con el predominio de la laxitud de la piel y los ligamentos en las etapas más avanzadas. Los mejores resultados generalmente se obtienen en pacientes más jóvenes con elasticidad de la piel retenida (25,26,28). Para que la toxina botulínica produzca una mejora significativa, la indicación principal es la hiperactividad muscular. Por lo tanto, la selección de pacientes es de suma importancia cuando se trata el cuello con toxina botulínica. El bajo nivel de dolor reportado durante la inyección (1.2 de 10) junto con la baja tasa de eventos adversos (uno de 30) y la mejora significativa observada por los pacientes arrojaron una tasa de satisfacción del paciente del 96.6 por ciento. Tasas de satisfacción comparativamente altas también se han observado en otros informes que usan toxina botulínica en el rejuvenecimiento del cuello (29). Los elementos más importantes para el rejuvenecimiento facial con BoNT-A son la anatomía funcional, la anatomía funcional y la anatomía funcional. Para minimizar el riesgo de una apariencia congelada y antinatural, se debe la dosis mínimamente efectiva de BoNT-A. La dosis de BoNT-A utilizada debe basarse en la masa estimada del músculo que se inyecta, no en la profundidad del ritmo (18). Los eventos adversos informados por los fabricantes de productos BoNT-A y BoNT-B incluyen nasofaringitis, dolor de cabeza, dolor en el lugar de la inyección, sangrado, hematomas, edema, eritema, infección, inflamación, sinusitis, equimosis y náuseas. La debilidad de los músculos adyacentes también puede ocurrir debido a la propagación de toxinas que resulta en efectos no deseados. Estos tipos de eventos adversos se describen con mayor detalle a continuación. Para minimizar los hematomas, los pacientes deben evitar el uso de aspirina y medicamentos antiinflamatorios no esteroideos durante 2 semanas antes del tratamiento. Los pacientes han desarrollado anticuerpos neutralizantes poco comunes para BoNT-A después del uso cosmético. Estos eventos se asocian más a menudo con el uso de dosis altas para fines neurológicos, aunque esto se ha informado después del uso cosmético que resulta en el fracaso del tratamiento (21,27,29). Las limitaciones del trabajo radican en la cantidad de trabajos e investigaciones relacionadas al tema en estudios, resulta que pocos trabajos actualizados existen y es por elloque forma parte de una limitación importante para la revisión bibliográfica. 6 CONCLUSIONES A pesar del uso frecuente de la toxina botulínica en las bandas de platisma, esta técnica solo ha sido validada recientemente por un mejor conocimiento de la relación entre la tonicidad del platisma y las bandas. La efectividad y la seguridad de la toxina botulínica para las bandas platismales se confirman claramente en esta revisión. La cirugía de rejuvenecimiento del cuello sigue siendo esencial para los pacientes que presentan múltiples cambios senescentes, pero para los pacientes con bandas de platisma aisladas, la denervación química con toxina botulínica debe convertirse en una práctica estándar. La toxina botulínica se usa para una gama cada vez más amplia de problemas clínicos, y estético, las áreas faciales comunes en las que las personas usan Botox incluyen: líneas glabelares u arrugas alrededor de los ojos, conocidas como pliegues horizontales de patas de gallo, en las líneas de la frente, en las comisuras de la boca piel "adoquinada", en la barbilla y en el cuello. Las complicaciones de la cara inferior de la administración de BoNT-A incluyen asimetría, disfagia y problemas de competencia oral. Los eventos adversos asociados con el tratamiento de los ritidos verticales de los labios incluyen dificultades para comer y beber o dificultad para producir ciertos sonidos explosivos. 7 BIBLIOGRAFÍA 1. Cavallini M, Cirillo P, Fundaro SP, et al. Safety of botulinum toxin A in aesthetic treatments: a systematic review of clinical studies. Dermatol Surg 2014; 40(5):525–36. 2. Sezgin B, Ozel B, Bulam H, et al. The effect of microneedle thickness on pain during minimally invasive facial procedures: a clinical study. Aesthet Surg J 2014;34(5):757–65. 3. Maas C, Kane MA, Bucay VW, et al. Current aesthetic use of abobotulinumtoxinA in clinical practice: an evidence-based consensus review. Aesthet Surg J 2012;32(1 Suppl):8s–29s. 4. Brandt FS, Bellman B. Cosmetic use of botulinum A exotoxin for the aging neck. Dermatol Surg. 1998;24(11):1232–4. 5. Jandhyala R. Relative potency of incobotulinumtoxinA vs onabotulinumtoxinA a meta-analysis of key evidence. J Drugs Dermatol 2012;11(6):731–6. 6. 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