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INCIDENCIA DEL CÁNCER DE COLON EN LA PROVINCIA DE MANABÍ - ECUADOR

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PROYECTO INTEGRADOR DE BÁSICA MÚLTIPLE
ASIGNATURAS:
ANATOMÍA II
EMBRIOLOGÍA II
HISTOLOGÍA II
TEMA:
INCIDENCIA DEL CÁNCER DE COLON 
EN LA PROVINCIA DE MANABÍ
1. INTRODUCCIÓN 
El cáncer es una enfermedad que afecta a diferentes órganos o sistemas del cuerpo humano. Esta patología se caracteriza por la división descontrolada de las células de una determinada parte del organismo, pudiendo invadir otros tejidos y destruirlos de tal manera que inflige en la correcta funcionalidad del medio interno.
Para la ciencia médica, encontrar una cura definitiva para el cáncer ha supuesto una constante batalla por décadas en la que lamentablemente se han perdido miles de vidas. A pesar de esto, se debe conocer que existen factores que inciden en la supervivencia de los pacientes ante esta enfermedad, uno de los principales es la posibilidad en la que esta sea detectada en sus fases iniciales, cuando no se ha diseminado a otras regiones del cuerpo (metástasis). Sin embargo, es de suma importancia aclarar que el diagnóstico precoz no siempre es posible por la no disposición de técnicas rutinarias.
El tipo de cáncer en el que se enfocará este equipo de trabajo para la realización del presente proyecto es el cáncer de colón, temática que será tratada con la debida objetividad para satisfacer los requerimientos de los docentes que demandan el cumplimiento de la investigación.
El cáncer de colon como su nombre lo indica, afecta a la porción terminal del tubo digestivo (colon). Esta enfermedad se relaciona en gran medida al estilo de vida y a los hábitos alimenticios, entre otros factores que se dilucidarán a lo largo del proyecto.
Este tema se estudiará desde el punto de vista embriológico, histológico y anatómico, lo que favorecerá la realización de un mejor análisis, comprensión y la formulación de las conclusiones.
2. CONTEXTUALIZACIÓN
2.1. CONTEXTO MACRO 
El Cáncer es una enfermedad que a nivel mundial se le atribuye 7,9 millones de defunciones (aproximadamente el 13% de las defunciones mundiales). Entre los principales tipos de cáncer que contribuyen a la mortalidad general anual tenemos los siguientes: pulmón (1,4 millones), estómago (866 000), hígado (653 000), colon (677 000), mama (548 999), de las cuales aproximadamente el 72% de estas se registraron en países de ingresos económicos bajos y medianos
La posibilidad de desarrollar CCR en los países desarrollados, es de 4.4 % en hombres y 2.7 % en mujeres, con una mortalidad similar en los dos sexos
La incidencia es mayor en América del Norte, Australia y Nueva Zelanda, así como en algunos países europeos, mientras que las tasas más bajas se encuentran en África y Asia sur‐central. 
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que al año se detectan aproximadamente 945.000 nuevos casos en todo el mundo y se producen en torno a 492.000 muertes debido a esta enfermedad.
Los Estados Unidos es el único país con una disminución significativa de incidencia de CCR en hombres y mujeres en el período más reciente, con una disminución del 2‐3% anual en los últimos 15 años, lo que refleja en gran medida la detección y eliminación de las lesiones precancerosas como consecuencia de adecuados programas de screening. De igual forma, ha disminuido la tasa de mortalidad, que se puede atribuir, al menos en parte, a la detección y eliminación de los pólipos de colon, la detección de CRC en una etapa anterior, y los tratamientos primarios y adyuvantes más eficaces. 
En España, los últimos datos epidemiológicos publicados referentes al año 2000, confirmaron que el cáncer colorrectal fue la primera causa de muerte por cáncer (11.971 personas) y mostraron un aumento del número de nuevos casos diagnosticados que ascendió hasta los 25.665. De acuerdo con estos datos, en el período de tiempo comprendido desde 1975 hasta el año 2000, se produjo un incremento de la tasa ajustada de mortalidad anual por cáncer colorrectal tanto en hombres como en mujeres (2.6% y 0.8% respectivamente).
2.2. CONTEXTO MESO
 En Latinoamérica ocupa el cuarto lugar entre los cánceres más frecuentemente diagnosticados entre los hombres y el tercer lugar entre las mujeres.
Según la OMS en el caso América Latina se diagnostican 160000 nuevos casos por año, 40 casos por cada 100 000 habitantes y 56 000 defunciones debido a esta causa.
Uruguay, Argentina y Brasil están entre los países latinoamericanos con las tasas más altas de cáncer colorrectal, el tercer tipo de tumor más común en la región, con 87.000 casos nuevos y 49.000 muertes anuales, y cuya incidencia sigue en aumento.
Datos del organismo muestran que las mayores tasas de Latinoamérica las presentan Uruguay, con 29,5 nuevos casos al año por cada 100.000 habitantes, Argentina (23,8), Cuba (19,7), Costa Rica (16,4), Brasil (15,8) y Chile (15); mientras que Guatemala (4,3) y Honduras (6,9) reportan las más bajas.
En el Perú se detectan anualmente 2000 casos de cáncer de colon, de los cuales 1100 fallecen, ubicando a esta neoplasia en el cuarto lugar de mortalidad, es por ello que se presenta como un problema de Salud Pública. 
2.3. CONTEXTO MICRO 
Entre los tipos de cáncer más comunes en Ecuador es el cáncer del colon: Se encuentra en el 8vo lugar para mujeres y en el 5to lugar para hombres. Este tipo de cáncer obtuvo mayor atención después de que la OMS anunció que se había determinado que el consumo de carnes rojas y procesadas contribuía al riesgo de cáncer de colon.
En Ecuador, cada año se presentan 1,200 casos nuevos de cáncer de colon. La tasa de incidencia ha aumentado significativamente en los últimos 15 años; en el 2003, la tasa de incidencia era de menos de 4 por 100,000 habitantes, y en el 2010 (las cifras más recientes) se encontraba en más de 9.
Según cifras oficiales de la Sociedad de Lucha contra el Cáncer (SOLCA), aproximadamente 1.200 nuevos casos de cáncer de colon se presentan en el Ecuador cada año. De estos casos, si son tratados oportunamente, el 52% de personas sobreviven.
3. OBJETIVOS
3.1 OBJETIVO GENERAL
· Determinar la incidencia del cáncer de colon en la provincia de Manabí. 
3.2 OBEJTIVOS ESPECÍFICOS
· Conocer el origen y formación embriológica del colon.
· Describir la clasificación histopatológica del cáncer de colon. 
· Identificar las características clínicas del cáncer de colon.
· Indicar los exámenes auxiliares empleados para el diagnóstico, control y seguimiento del cáncer de colon. 
3.MARCO TEÓRICO
CÁNCER DE COLON
El cáncer de colon es el crecimiento de un tumor maligno que afecta al tramo del intestino conocido también como intestino grueso. 
EMBRIOLOGÍA DEL COLON
El intestino primitivo, que se divide en anterior, medio y caudal, se desarrolla durante la cuarta semana de gestación. El intestino medio forma el intestino delgado (que se inicia en la entrada del colédoco) y el segmento de intestino grueso proximal al colon transverso medio. El intestino caudal forma el intestino grueso distal al colon transverso medio, el ano proximal y las vías urogenitales inferiores. El intestino medio en desarrollo migra hacia fuera de la cavidad abdominal durante la sexta semana del embarazo. En las cuatro semanas siguientes gira 270 en dirección contraria a las manecillas del reloj alrededor de la arteria mesentérica superior antes de tomar su posición anatómica definitiva en la cavidad abdominal. El intestino caudal en desarrollo termina en la cloaca, que durante la sexta semana del desarrollo es dividida por el tabique urorectal en seno urogenital por delante y seno rectal hacia el dorso.
HISTOPATOLOGÍA DEL CÁNCER DE COLON
La clasificación histopatológica general del cáncer colorrectal se describe en el cuadro I.
La gran mayoría de neoplasias malignas que se originan de intestino grueso son adenocarcinomas epiteliales que derivan de células epiteliales columnares en la capa mucosa del colon y recto. Estos adenocarcinomas usualmente se originan de pólipos que resultan de proliferación y displasia. La gran mayoría de los pólipos ocurren de forma esporádica y en individuos de edad avanzada;algunas veces de manera poco común síndromes familiares son asociados con cáncer colorrectal en individuos jóvenes.
Los tumores colorrectales frecuentemente producen mucina al interior de la luz glandular o a la pared del intersticio. Hallazgos como son diferenciación endocrina, aspecto en anillo de sello y diferenciación de células escamosas son apariencias frecuentes en cáncer colorrectal.
Los carcinomas pueden ser exofíticos/fungantes con predominio de crecimiento intraluminal, exofíticos/ulcerativos con predominio de crecimiento intramural, infiltrativo difuso/linitus plástica con crecimiento endofítico y anular con envolvimiento circunferencial de la pared colorrectal y constricción del lumen. Los carcinomas del colon proximal tienden a crecer como masas exofíticas mientras que las del colon transverso y descendente son más frecuentemente endofíticas y anulares. Posterior a extensión transmural a través de la propia muscular dentro del tejido blando pericólico o perirrectal el tumor puede comprometer estructuras contiguas. Los carcinomas rectales avanzados pueden extenderse a estructuras pélvicas como la vagina o la vejiga urinaria, pero no pueden acceder directamente a la cavidad peritoneal cuando está localizado distal a un repliegue peritoneal. 
Los tipos histológicos más comunes de pólipos son los hiperplásicos y adenomatosos. Los adenomas son clasificados como tubulares o vellosos y la combinación de características como túbulo-vellosos. Tejido adenomatoso frecuentemente se encuentra contiguo a un carcinoma franco. Los pacientes con poliposis adenomatosa familiar los cuales tienen cientos o miles de pólipos colónicos adenomatosos inevitablemente desarrollan cáncer colorrectal si no se les realiza colectomía.
El cáncer de colon es condicionado por una cascada de mutaciones genéticas que progresivamente desordenan la replicación de ADN local y aceleran la replicación de colonocitos. La acumulación progresiva de múltiples mutaciones genética resulta en transición de la mucosa normal a adenoma benigno a displasia severa a franco carcinoma.
 Los canceres de colon son clasificados como bien diferenciados, moderadamente diferenciados o pobremente diferenciados en función del grado de preservación de la arquitectura glandular normal y las características citológicas. 
Menor grado de diferenciación es presumiblemente un marcador histológico de mutaciones genéticas. Alrededor del 20% de los cánceres son pobremente diferenciados. 
Alrededor del 15% de los cánceres de colon son clasificados como mucinosos o coloides por la importante acumulación intracelular de mucina. Estos cánceres son más agresivos. 
Alrededor del 65% de los cánceres de colon son distales al ángulo esplénico y potencialmente detectables por sigmoidoscopia. En contraparte, alrededor del 35% de los cánceres de colon son proximales al sigmoides y no detectables por sigmoidoscopia flexible. 
Los pólipos pequeños raramente contienen cáncer. El cáncer en un pólipo sésil puede metastatizar más rápido que un pólipo pedunculado con cáncer debido a la mayor proximidad con el drenaje linfático.
Los tumores endocrinos incluyen los tumores carcinoides (neoplasias bien diferenciadas del sistema endocrino difuso), carcinomas de células pequeñas (neoplasias endocrinas pobremente diferenciadas) idéntico al carcinoma de células pequeñas en pulmón y al carcinoma neuroendocrino maligno de células grandes. Los tumores endocrinos son más comunes en el recto (54% de casos) seguido del ciego (20%), colon sigmoides (7.5%), recto-sigmoides (5.5%) y colon ascendente (5%). 
El linfoma primario colorrectal es definido como un linfoma extranodal derivado ya sea del colon o de recto con la mayoría de la enfermedad en este sitio. Compromiso de nódulos linfáticos contiguos y extensión distal puede ser vista, pero la presentación clínica primaria es colon y/o recto. Los linfomas primarios que se originan del intestino grueso son menos frecuentes que los gástricos o los del intestino delgado. Los linfomas colorrectales primarios representan el 0.2% de las neoplasias en este sitio. Más comúnmente los linfomas comprometen la porción distal del colon, el recto y el ano. Hay una preferencia en pacientes infectados con HIV. 
Los tumores mesenquimatosos son una variedad de tumores benignos y malignos que se originan en intestino grueso como sitio primario. Representan el 0.1% de las neoplasias malignas de intestino grueso.
ANATOMÍA: ¿CÁNCER DE COLON, DE RECTO O COLORECTAL?
Los cánceres colorrectales (CCR) comprenden todos aquellos cánceres situados en el intestino grueso, el cual, anatómicamente, se divide en colon y recto. El colon comprende desde la válvula ileocecal hasta el recto y es un órgano intraperitoneal. Tiene una longitud aproximada de 1,5 metros y un calibre de 4-6 cm. Al dejar la cavidad abdominal, aproximadamente a nivel de la tercera vértebra sacra, el colon se convierte en el recto que, en el adulto, supone los últimos 12-15 cm del tracto intestinal. Los últimos 2 cm del recto aproximadamente constituyen el canal anal, donde existe un epitelio transicional al principio y posteriormente un epitelio escamoso (Latarjet y Ruiz-Liard, 1989).
FACTORES DE RIESGO 
-Historia familiar: Aproximadamente el 5% de todos los pacientes con cáncer colorrectal tiene síndromes hereditarios asociados, principalmente poliposis adenomatosa familiar o cáncer de colon hereditario sin poliposis y otro 20% tienen historia familiar, no asociada a ningún síndrome hereditario conocido. El primer grado de consanguinidad se asocia a un aumento de aproximadamente dos veces el riesgo, comparado con la población general. Este riesgo se modifica según el número y la edad de diagnóstico en los familiares afectados de primer grado. Este riesgo es similar incluso si el paciente en primer grado sólo tiene un pólipo adenomatoso. 
-Diabetes mellitus: En estudios de cohorte, casos controles y prospectivos los diabéticos han demostrado consistentemente tener un 30-50% más de riesgo de cáncer colorrectal, comparado con los no diabéticos. No se sabe si el tratamiento de la diabetes o qué tipo de tratamientos modifican este riesgo. 
-Obesidad: Estudios de cohorte prospectivos han demostrado un aumento en dos a tres veces el riesgo de carcinoma colorrectal, en relación con los que están bajos de peso o con peso normal. 
-Sedentarismo: Las personas que realizan actividad física regular tienen 50% menos riesgo de desarrollar cáncer colorrectal, en relación con los sedentarios. 
Otros factores de riesgo son la edad, índice de masa corporal, tabaquismo, consumo de alcohol, pobre ingesta de vegetales, pobre ingesta de vitaminas, pobre ingesta de cereales.
SÍNTOMAS DEL CÁNCER DE COLON 
-Sensibilidad y dolor abdominal en la parte baja del abdomen.
-Sangre en las heces.
-Diarrea, estreñimiento u otros cambios en las deposiciones.
-Heces delgadas.
-Pérdida de peso sin ninguna razón conocida.
(MEDLINEPLUS, 2018)
MÉTODOS DE DIAGNÓSTICOS DEL CÁNCER DE COLON 
Se recomienda, en general, que las personas con un riesgo promedio de cáncer colorrectal se examinen para detectar el cáncer a intervalos regulares empezando a los 50 años de edad. La brigada recomienda que se continúe con los exámenes de detección hasta los 75 años de edad; después de los 75 años, la decisión de examinarse se basará en la esperanza de vida de la persona, de su estado de salud, de padecimientos comórbidos y de previos resultados de exámenes. La brigada no recomienda exámenes de rutina de personas de 86 años o más.
Las personas que tienen un riesgo mayor debido a antecedentes familiares de cáncer colorrectal o de pólipos o porque tienen enfermedad intestinal inflamatoria o algunas enfermedades heredadas, se puede aconsejar que empiecen a examinarse antes de los 50 años de edad o que se hagan exámenes más frecuentes.
PRUEBAS DE SANGRE OCULTA EN MATERIA FECAL DE ALTA SENSIBILIDAD (FOBT):
 Tanto los pólipos como los cánceres colorrectales pueden sangrar, y la prueba de sangre oculta en materia fecal busca pequeñas cantidades de sangre queno se puede ver en la materia fecal. (La sangre en la materia fecal puede indicar también la presencia de padecimientos que no son cáncer, como las hemorroides).
En la actualidad, dos tipos de pruebas de sangre oculta en materia fecal han sido aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) como pruebas para detectar el cáncer colorrectal: la prueba de sangre oculta en materia fecal con guayacol (gFOBT) y la prueba inmunoquímica fecal (o inmunohistoquímica, también llamada FIT o iFOBT, en inglés). Con ambos tipos de prueba de sangre oculta en materia fecal, las muestras de materia fecal son recolectadas por el paciente mediante el uso de un sobre para muestras que se envía al médico.
-La prueba con guayacol para buscar sangre oculta en materia fecal usa un compuesto químico para detectar el hemo, un componente de la proteína de la sangre llamada hemoglobina. Ya que la prueba de sangre oculta en materia fecal con guayacol puede detectar también el hemo en algunos alimentos (por ejemplo, las carnes rojas), las personas tienen que evitar ciertos alimentos antes de hacerse esta prueba.
-La prueba inmunoquímica de sangre oculta en materia fecal usa anticuerpos para detectar específicamente la proteína hemoglobina humana . De ordinario no se requieren restricciones en la dieta para la prueba inmunoquímica.
Los estudios han mostrado que la prueba de sangre oculta en materia fecal con guayacol, cuando se hace cada uno o dos años en personas de 50 a 80 años de edad, puede ayudar a reducir el número de muertes por cáncer colorrectal de 15 a 33%. Si la prueba de sangre oculta en materia fecal es el único tipo de examen selectivo de detección que se hace para el cáncer colorrectal, los expertos recomiendan generalmente pruebas anuales.
SIGMOIDOSCOPIA:
En esta prueba, se examinan el recto y el colon sigmoide mediante el uso de un tubo iluminado y flexible llamado sigmoidoscopio, el cual tiene un lente para observar y una herramienta para extraer tejido. Este instrumento se inserta por el ano dentro del recto y del colon sigmoide al mismo tiempo que se bombea aire para expandirlo, de forma que el médico pueda ver el revestimiento del colon con mayor claridad. Durante una sigmoidoscopia, los abultamientos anormales del recto y del colon sigmoideo pueden extirparse para analizarlos (biopsia). El colon inferior debe estar limpio de materia fecal antes de la sigmoidoscopia, pero la preparación es menos extensa que la que se requiere para una colonoscopia. Para esta prueba, en general, la persona no recibe sedantes.
Los estudios han mostrado que las personas que tienen exámenes regulares de detección con sigmoidoscopia después de los 50 años de edad tienen un riesgo 60 a 70% más bajo de morir por cáncer del recto y del colon inferior que las personas que no se hacen los exámenes. Un estudio clínico controlado, aleatorizado, encontró que hasta un solo examen de sigmoidoscopia entre los 55 y los 64 años de edad puede reducir sustancialmente la incidencia y mortalidad del cáncer colorrectal. Los expertos recomiendan generalmente la sigmoidoscopia cada 5 años con o sin la prueba de sangre oculta en materia fecal con guayacol o FIT cada 3 años para personas con un riesgo promedio que han tenido resultados negativos en las pruebas.
COLONOSCOPIA REGULAR (U ÓPTICA):
En esta prueba, se examinan el recto y todo el colon mediante el uso de un tubo iluminado y flexible llamado colonoscopio, el cual tiene un lente para observar y una herramienta para extraer tejido. Tal como ocurre con el sigmoidoscopio que es un instrumento más corto, el colonoscopio se inserta por el ano dentro del recto y del colon sigmoide al mismo tiempo que se bombea aire (o dióxido de carbono) en el colon para expandirlo, de forma que el médico pueda ver el revestimiento del colon con mayor claridad. Durante la colonoscopia, cualquier abultamiento anormal en el colon y el recto puede extirparse, incluso tumores en las partes superiores del colon que no pueden alcanzarse con la sigmoidoscopia. Es necesaria una limpieza completa de todo el colon antes de esta prueba. La mayoría de las personas reciben algún tipo de sedante durante esta prueba.
Los estudios indican que la colonoscopia reduce la mortalidad por cáncer colorrectal cerca de 60 a 70%. Están en curso estudios clínicos adicionales para evaluar mejor qué tan eficaces son los métodos de detección que usan la colonoscopia. Expertos recomiendan la colonoscopia cada 10 años para personas con un riesgo promedio con tal de que los resultados sean negativos.
COLONOSCOPIA VIRTUAL:
Este método de detección, también llamado colonografía por tomografía computarizada [TC]), usa un equipo especial de rayos X (un escáner de TC) para producir imágenes del colon y del recto desde afuera del cuerpo. Una computadora ensambla luego esas imágenes en imágenes detalladas que pueden mostrar pólipos y otras anomalías. La colonoscopia virtual es menos invasiva que la colonoscopia regular y no requiere sedantes. Como con la colonoscopia regular, es necesaria una completa limpieza del colon antes de esta prueba, y aire (o dióxido de carbono) se bombea en el colon para expandirlo para ver mejor el revestimiento del colon. La exactitud de la colonoscopia virtual es semejante a la de la colonoscopia regular y tiene un riesgo menor de complicaciones. Sin embargo, si se encuentran pólipos u otros tumores anormales durante una colonoscopia virtual, ordinariamente se hace una colonoscopia regular para extirparlos.
OTROS MÉTODOS:
Existen otras pruebas para detectar el cáncer colorrectal, aunque estos no se recomiendan en general.
Enema de bario de doble contraste: Esta prueba, también llamada DCBE, es otro método para visualizar el colon desde el exterior del cuerpo. En el enema de bario de doble contraste, se toman imágenes de rayos X de todo el colon y del recto después de que la persona recibe un enema con una solución de bario. El bario ayuda a delinear el colon y el recto en las imágenes. El enema de bario de doble contraste se usa muy rara vez porque es menos sensible que la colonoscopia para detectar cánceres y pólipos pequeños. Sin embargo, puede usarse en personas que no pueden tener una colonoscopia regular, por ejemplo, porque tienen un riesgo especial de complicaciones.
Prueba de sangre oculta en materia fecal con guayacol en una sola muestra de materia fecal realizada en el consultorio médico: Los médicos algunas veces llevan a cabo una prueba de sangre oculta en materia fecal con guayacol en una sola muestra de materia fecal recolectada durante un examen digital del recto que se hace como parte de un examen físico de rutina. Sin embargo, este método no ha mostrado ser una forma efectiva como examen de detección de cáncer colorrectal. (Instituto Nacional del Cáncer, 2016)
TRATAMIENTO
El tipo de tratamiento que el médico recomiende dependerá en gran medida de la etapa de tu cáncer. Las tres opciones de tratamiento principales son cirugía, quimioterapia y radiación.
CIRUGÍA PARA CÁNCER DE COLON EN ETAPA TEMPRANA
Si el cáncer de colon es muy pequeño, el médico puede recomendar un enfoque quirúrgico mínimamente invasivo, como:
-Eliminar pólipos durante una colonoscopia: Si el cáncer es pequeño, localizado y está completamente contenido dentro de un pólipo y en un estadio muy temprano, es posible que el médico pueda extraerlo por completo durante una colonoscopia.
-Mucosectomía endoscópica. Al extraer pólipos de mayor tamaño, puede ser necesario quitar una pequeña cantidad de revestimiento del colon o el recto en un procedimiento denominado «mucosectomía endoscópica».
-Cirugía mínimamente invasiva: Los pólipos que no pueden quitarse durante una colonoscopia pueden extraerse mediante una cirugía laparoscópica. En este procedimiento, el cirujano realiza la operación mediante varias incisiones pequeñas en la pared abdominal e introduce instrumentos con cámaras incorporadas que muestran el colon en una pantalla de video. El cirujano también puede tomar muestras de los ganglios linfáticos de la zona donde se encuentrael cáncer.
CIRUGÍA PARA CÁNCER INVASIVO DE COLON
Si el cáncer alcanzó o atravesó el colon, el cirujano puede recomendarte lo siguiente:
-Colectomía parcial: En este procedimiento, el cirujano extrae la parte del colon que contiene el cáncer, junto con un margen de tejido normal a cada lado del tumor. En general, el cirujano puede volver a conectar las partes saludables del colon o el recto. Con frecuencia, este procedimiento se puede realizar con un enfoque mínimamente invasivo (laparoscopia).
-Cirugía para crear una vía para eliminar los desechos del cuerpo: Si no se pueden volver a conectar las partes saludables del colon o el recto, es posible que necesites una ostomía. Este procedimiento implica crear una abertura en la pared del abdomen, desde una parte del intestino restante, para la eliminación de heces en una bolsa que se ajusta de forma segura sobre la abertura.
A veces, la ostomía se realiza solo de forma temporal, lo que le da tiempo al colon o al recto para sanar después de la cirugía. Sin embargo, en algunos casos, lo colostomía puede ser permanente.
-Extirpación de los ganglios linfáticos: En general, en la cirugía para tratar el cáncer de colon, también se extraen los ganglios linfáticos cercanos y se los analiza en busca de cáncer.
CIRUGÍA PARA CÁNCER AVANZADO
Si el cáncer está muy avanzado o si la salud general es muy mala, el cirujano puede recomendar una operación para aliviar la obstrucción del colon u otras afecciones con el fin de mejorar los síntomas. Esta cirugía no se realiza para curar el cáncer, sino para aliviar los signos y síntomas, como el sangrado y el dolor.
En casos específicos donde el cáncer solo se propagó al hígado, pero la salud general es buena, el médico puede recomendar cirugía para extraer la lesión cancerosa del hígado. La quimioterapia puede aplicarse antes o después de este tipo de cirugía. Este abordaje ofrece una posibilidad de estar libre de cáncer a largo plazo.
QUIMIOTERAPIA
La quimioterapia utiliza medicamentos para destruir las células cancerosas. La quimioterapia para el cáncer de colon se suele administrar después de la cirugía si el cáncer se propagó a los ganglios linfáticos. De esta forma, la quimioterapia puede ayudar a reducir el riesgo de que haya una recurrencia del cáncer y de muerte a causa este. A veces, también se puede utilizar quimioterapia antes de la cirugía a fin de reducir el tamaño del cáncer antes de la operación. Es más frecuente que se utilice quimioterapia antes de la cirugía para el cáncer de recto que para el de colon.
La quimioterapia también se puede administrar para aliviar los síntomas del cáncer de colon cuando se ha propagado a otras partes del cuerpo.
RADIOTERAPIA
La radioterapia usa fuentes de energía poderosas, como los rayos X, para destruir las células cancerosas, reducir el tamaño de tumores grandes antes de una operación para que puedan extraerse con mayor facilidad o aliviar los síntomas del cáncer de colon y el cáncer de recto. La radioterapia, ya sea sola o combinada con la quimioterapia, es una de las opciones de tratamiento estándar para el control inicial del cáncer de recto, seguida de cirugía.
MEDICAMENTOS DE TERAPIA DIRIGIDA
Los medicamentos que atacan problemas de funcionamiento específicos que permiten el crecimiento de las células cancerosas se encuentran disponibles para personas con cáncer de colon avanzado, como:
-Bevacizumab (Avastin)
-Cetuximab (Erbitux)
-Panitumumab (Vectibix)
-Ramucirumab (Cyramza)
-Regorafenib (Stigvara)
-Ziv-aflibercept (Zaltrap)
Los medicamentos dirigidos se pueden administrar solos o junto con la quimioterapia. Dichos medicamentos dirigidos suelen reservarse para personas con cáncer de colon avanzado.
Algunas personas mejoran con los medicamentos de terapia dirigida, mientras que otras no lo hacen. Recientemente, los investigadores han progresado en establecer quién es más propenso a obtener el mayor beneficio con estos medicamentos de terapia dirigida. Hasta que haya más información al respecto, los médicos comparan los posibles beneficios de los medicamentos dirigidos con el riesgo de los efectos secundarios y el costo al decidir si recurrir o no a estos tratamientos.
INMUNOTERAPIA
Algunos pacientes con cáncer de colon avanzado tienen la posibilidad de beneficiarse de la inmunoterapia con anticuerpos, como el pembrolizumab (Keytruda) y el nivolumab (Opdivo). Para saber si un cáncer de colon tiene posibilidades de responder a estas inmunoterapias hay que realizar una prueba específica del tejido tumoral. ( Mayo Foundation for Medical Education and Research, 2017)
PRONÓSTICO DEL CÁNCER DE COLON
En un cáncer de colon, las probabilidades de curación dependen, al igual que en el resto de tumores malignos, del estadio en que se halle la enfermedad. Si hay metástasis en el hígado, el pronóstico será peor. No rara vez, el tumor extiende solo una metástasis hasta el hígado, sin afectar al resto de órganos. En este caso, es posible eliminar la metástasis hepática quirúrgicamente o mediante una terapia láser. Cuando se ha eliminado el tumor original y no hay más metástasis, también en este caso las probabilidades de curación son bastante buenas. (Jaramillo, 2017)
FACTORES PRONÓSTICOS DEL CÁNCER DE COLON
El factor más importante para hablar de pronóstico en el cáncer colorrectal es el estadio tumoral, el cual se establece según la clasificación TNM. Esta clasificación tiene en cuenta la extensión del tumor (T), el grado de diseminación a los ganglios linfáticos (N), y la presencia de metástasis (M) a distancia. A esta letra se le añade un número que indica el tamaño, la extensión y el grado de diseminación del cáncer (cuanto mayor sea el número, peor es el pronóstico del paciente).
Los pacientes que tras el estudio de extensión presentan una enfermedad localizada (estadios I‐III) son candidatos a tratamiento quirúrgico (en el cáncer de colon) o a tratamiento con quimioterapia y radioterapia concomitante seguido de cirugía (en el cáncer de recto). 
La supervivencia a 5 años varía entre el 50‐90% en función del estadio. En los pacientes con cáncer de colon sin ganglios afectos (estadios I‐II), la supervivencia a 5 años oscila entre el 80‐ 90%. 
En los pacientes con ganglios afectos (estadio III) oscila entre el 40‐70% en función del número de ganglios extirpados (cuantos más ganglios extirpados, mejor pronóstico) y el número de ganglios afectos (cuantos menos ganglios afectados, mejor pronóstico). 
Los pacientes con estadio IV presentan mal pronóstico, siendo la mediana de supervivencia de 1‐2 años. (Velásquez, 2015)
COMPLICACIONES DEL CÁNCER DE COLON
En un estadio avanzado del cáncer de colon pueden darse enfermedades secundarias en función del tamaño del tumor y de si están afectados órganos vecinos. Si el tumor sangra mucho, puede darse una anemia. Si el tumor crece muy rápidamente, esto puede dificultar el paso de las heces o incluso imposibilitarlo. Ante tal oclusión intestinal (íleo) es indispensable una intervención rápida.
Una operación inmediata también es necesaria si el tumor ha perforado la pared intestinal exterior y el contenido del mismo ha accedido al espacio abdominal abierto. Aquí, se producen fuertes dolores repentinos y puede llegar a darse un caso de peritonitis. (Jaramillo, 2017)
El cáncer colorrectal es el tumor digestivo más frecuente en nuestro medio, con una incidencia de 21-23 nuevos casos por 100000 hab/año. Habitualmente se llega al diagnóstico tras una serie de síntomas, con una media de 6 meses de evolución. Sin embargo, en otras ocasiones dicho diagnóstico nos llega a través de la investigación de síntomas de instauración aguda, producidos por complicaciones evolutivas. Dichas complicaciones son la obstrucción intestinal, la perforación y la hemorragia importante. A continuación, describimos estas complicaciones, su tratamiento y sus implicaciones pronósticas. (Minguillón, 2013)
-Obstrucción
-Perforación intestinal
-Hemorragia
PREVENCIÓN EL CÁNCER DEL COLON
Como con todos los tipos de cáncer, no hay una manera segura de prevenirlo. Sin embargo,si se pueden tomar medidas que reducen el riesgo de cáncer colorrectal. Por naturaleza, en muchos casos, están directamente relacionadas a los factores de riesgo que sí se pueden cambiar. (Cueva, 2014)
Las formas de reducir el riesgo de cáncer de colon incluyen:
-Mantener un peso saludable
-Realizar por lo menos 150 minutos de ejercicio a la semana (30 minutos diarios por 5 días).
-Tener una dieta con alto contenido de frutas, vegetales, y granos enteros, y reducir o eliminar el consumo de carnes rojas y comidas procesadas
-Evitar fumar y beber bebidas alcohólicas
-Realizarse pruebas de detección temprana de cáncer colorrectal.
Estas pruebas incluyen estudios de sangre oculta en heces, sigmoidoscopias y colonoscopias. Habla con tu médico para determinar qué tan seguido debes realizar una prueba de detección temprana de cáncer colorrectal. 
Existen algunas otras formas que posiblemente se pueda reducir el riesgo de cáncer de colon, pero la evidencia aún no está clara.
El cáncer del colon es relativamente común en Ecuador, como lo es en muchos otros países. Es importante llevar un estilo de vida saludable que incluye una dieta rica en alimentos que provienen de plantas, realizar actividad física, evitar fumar y beber, y realizarse una prueba de cáncer de colon de forma oportuna.
También actualmente la prevención para evitar el cáncer se basa en actuar sobre los factores de riesgo modificables como son la dieta y el tabaco, y en las campañas de diagnóstico precoz entre la población mayor de 50 años, o menores de esta edad, si por antecedentes personales o familiares se está expuesto a mayor riesgo de desarrollar un cáncer colorrectal. (Zalduendo, 2017)
La investigación médica sugiere que las dietas con bajo contenido en grasas y ricas en fibra frutas y verduras, pueden disminuir el riesgo de padecer este tipo de cáncer.
Así mismo, se aconseja no fumar y no beber alcohol, ya que su consumo aumenta el riesgo de padecer pólipos precursores del cáncer colorrectal.
Por último, es recomendable realizar alguna actividad física y mantener hábitos de vida saludables, porque la vida sedentaria y la obesidad favorecen la retención intestinal y el riesgo de aparición de esta enfermedad.
BIBLIOGRAFÍA
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ANEXOS
Cuadro 1: Clasificación histopatológica del cáncer de colon.

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