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See discussions, stats, and author profiles for this publication at: https://www.researchgate.net/publication/316753905 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA Book · August 2010 CITATION 1 READS 11,966 3 authors, including: Pedro Nass Universidad Bolivariana de Venezuela, UBV 16 PUBLICATIONS 195 CITATIONS SEE PROFILE Lourdes Torres-Sorando Universidad Bolivariana de Venezuela, UBV 9 PUBLICATIONS 225 CITATIONS SEE PROFILE All content following this page was uploaded by Pedro Nass on 08 November 2017. 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Depósito Legal: ISBN: DIRECCIÓN DE GENERAL DE PROMOCIÓN Y DIVULGACIÓN DE SABERES COORDINACIÓN DE EDICIONES Y PUBLICACIONES / IMPRENTA UBV: Diseño, diagramación, corrección de pruebas, montaje, fi lmación de negativos, fotolito e impresión. Caracas, Venezuela, Impreso en Venezuela Printed in Venezuela 4 “Cada vez que muere un viejo pescador se pierde una biblio- teca” ALBERTO PÉREZ Pescador neoespartano 5 DEDICATORIA Este esfuerzo es dedicado a dos grandes hombres, cama- radas y amigos, por cuya entrega y dedicación la Universidad Bolivariana de Venezuela en Nueva Esparta estará eternamente en deuda. !!!HASTA LA VICTORIA SIEMPRE, CAMARADAS!!! 5 A Gregory Colomine Nuestro Querido CHECO Credo de Mario Benedetti “…No creo en predicadores, ni en generales, ni en las nalgas de miss universo ni en el arrepentimiento de los verdugos, ni en el catecismo del confort ni en el fl aco perdón de dios. A esta altura, creo en los ojos y en las manos del pueblo en general y en tus ojos y en tus manos (CHECO) en particular …” A Jesús González Porque su vida y lucha le dieron al pueblo neoespartano y a la Universidad Bolivariana de Venezuela un espacio privilegiado para el conocimiento y la educación liberadora. 7 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA PRESENTACIÓN La evaluación y gestión integral del recurso pesquero en Ve- nezuela incluye una serie de aspectos relacionados con la his- toria, la situación socioeconómica del pescador artesanal, las diferentes pesquerías del país, los métodos de evaluación del recurso pesquero, la problemática del sector y el marco legal que lo rige; información indispensable para comprender esta importante actividad económica del país, especialmente de las comunidades costeras. Venezuela constituye, junto con Perú y Brasil, uno de los prin- cipales países latinoamericanos en cuanto a la actividad pesque- ra y ha sido por mucho tiempo el principal productor del Caribe Sur con aproximadamente 500.000 toneladas métricas (TM) al año. Sus cinco pesquerías permiten aprovechar un vasto y diver- so recurso de más de 300 especies entre crustáceos, moluscos y peces, dando empleo directo a más de 35.000 pescadores dis- tribuidos a todo lo largo y ancho de la costa e islas del país. En Nueva Esparta es posiblemente la tercera actividad económica con una producción de unas 50.000 a 100.000 TM al año. Nuestro objetivo es dotar al lector de las herramientas bási- cas para abordar de manera integral la realidad y problemática del sector pesquero en el ámbito nacional y en particular del estado Nueva Esparta. Este esfuerzo compila una serie de datos e información dispersa difícil de acceder y que se ha resumido y digerido para maximizar su utilidad al lector. El contenido de este libro se vincula estrechamente a las di- rectrices del Proyecto Nacional Simón Bolívar 2007-2013 rela- cionadas con: la construcción de un modelo social productivo, humanista y endógeno; la democracia protagónica revoluciona- ria y la articulación del modelo productivo con el desarrollo te- rritorial defi nido por regiones y ejes en un ambiente sustentable. Se plantea como alternativa que se inscribe en el área académi- ca Hábitat, Ecodesarrollo y Ordenamiento Territorial de la UBV y se estructura a partir de la concepción de la pesca como una actividad productiva de importancia estratégica para garantizar la soberanía alimentaria. 8 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA La iniciativa de esta publicación se justifi ca debido a las con- tinuas e inmensas amenazas latentes dentro del sector pesque- ro artesanal marino que podrían ocasionar, en un futuro no muy lejano, la desaparición de las principales poblaciones de peces como consecuencia de la sobreexplotación; además del in- sufi ciente relevo generacional de los pescadores debido al poco incentivo social, económico y cultural que actualmente ofrece la pesca, de allí que la mayoría se resista a incorporarse al desa- rrollo de esta actividad milenaria. Dentro de este marco de consideraciones, cabe preguntarnos: ¿Podrán los pescadores venezolanos rescatar su inmenso e invalorable patrimonio natural y cultural para encontrar en éste las claves de su perpetuación en el futuro y así adornar por siemprecon sus blancos botes los azules mares repletos de pe- ces en la patria bolivariana y socialista? Indudablemente la respuesta es sí, ya que en la República Bolivariana de Venezuela desde hace más de 10 años se de- sarrolla un proceso revolucionario, socialista y participativo, que garantiza las condiciones para emprender esta misión, por cuanto se ha desarrollado el andamiaje jurídico (Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, Ley de pesca, Ley de protección y defensa del patrimonio cultural); institucional (PD- VAL pesca, INSOPESCA); académico (Universidad Bolivariana de Venezuela) y político (Proyecto Nacional Simón Bolívar). El proceso revolucionario tiene como lineamientos primordia- les reivindicar la identidad, la soberanía y la independencia en todos los órdenes del quehacer nacional; por ello la necesidad de revalorizar el sector pesquero, responsabilidad que no admite postergaciones por las amenazas que lo acechan y la importan- cia de su legado cultural y social. La Universidad Bolivariana de Venezuela, convirtiendo en ac- ción emancipadora su lema “la casa de los saberes”, debe ir a la vanguardia de esta empresa y ser junto con los pescadores, por su condición de universidad popular, el centro del rescate, conservación y custodia de este patrimonio. 9 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA CONTENIDO PÁGINA CAPÍTULOS I. LAS PESQUERÍAS EN VENEZUELA ...................................... 1.- INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUE- RÍAS EN VENEZUELA ...................................................... 2.- HISTORIA DE LA PESCA EN VENEZUELA ........................ II. LAS FLOTAS PESQUERAS ................................................... 1.- LA PESCA DE ARRASTRE ................................................ 2.- LA PESCA PARGO-MERO (PESCA DE ALTURA) ................ 3.- LA PESCA DE ATÚN ......................................................... 4.- LA PESCA SARDINERA .................................................... 5.- LA PESCA ARTESANAL .................................................... III. ASPECTOS SOCIO-ECONÓMICOS DE LA PESCA ............... 1.- EVALUACIÓN SOCIO-ECONÓMICA .................................. 2.- ECONOMÍA ...................................................................... IV. EVALUACIÓN DEL RECURSO PESQUERO CON LA UTILI- ZACIÓN DEL MÉTODO DE LA PRODUCCIÓN EXCEDEN- TARIA ................................................................................. 1.- EL MODELO DE SCHAEFER ............................................ 2.- EL MODELO LOGÍSTICO .................................................. V. PROBLEMÁTICA DEL SECTOR PESQUERO ........................ 1.- PROBLEMAS ESTRUCTURALES ....................................... 2.- PROBLEMAS COYUNTURALES ........................................ 3.- ARTES DE PESCA DEVASTADORAS ................................ 4.- INVESTIGACIÓN Y ESTADÍSTICAS ................................... 5.- PÉRDIDA DEL PATRIMONIO CULTURAL .......................... VI. LA PESCA EN NUEVA ESPARTA VII. DE PUERTO DE CRUCEROS A UNIVERSIDAD BOLIVARIANA DE VENE- ZUELA .......................................................................... VIII. DIÁLOGO DE SABERES ............................................... FUENTES REFERENCIALES .................................................... 1111 CAPÍTULO I LAS PESQUERÍAS EN VENEZUELA 1.- INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS EN VENEZUELA Venezuela constituye un país de gran vocación pesquera, gracias a sus 2.300 Km. de costas. Según las estadísticas ofi - ciales reportadas por la FAO, Venezuela ocupó en el año 2005 el puesto 39 de los 239 países estudiados con 492.210 TM de producción (Fig.1.1). Ahora bien, al comparar con el resto de los países del Caribe nuestro país acumuló en el año 2005 el 73% de la captura total de la región. Figura 1.1: Producción pesquera reportada para 17 países caribeños (FAO, 2005) A pesar del comportamiento errático de la economía venezo- lana, defi nido por cortos períodos de bonanza económica, se- guidos de profundas crisis que pueden resumirse en 2 cifras: 800,9% de infl ación y 740% de devaluación acumuladas desde el año 1983 hasta el 2007; un análisis histórico de las pesque- rías venezolanas revela un notable incremento de 650% en los últimos 44 años (de 76.800 TM en 1960 hasta 492.210 TM en 2005) (Fig.1.2). 12 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA Figura 1.2: Producción pesquera venezolana desde 1950 hasta 2005 La fl ota pesquera del país está compuesta por aproximada- mente 21.500 embarcaciones correspondientes a 5 sectores: Flota artesanal: 20.000 embarcaciones1) Flota atunera: 100 embarcaciones2) Flota pargo mero: 1000 embarcaciones3) Flota arrastrera: 400 embarcaciones4) Flota sardinera: número no determinado de embarcacio-5) nes tipo peñero. En cuanto a los principales puertos pesqueros, encontramos que los estados orientales, Sucre y Nueva Esparta, constituyen los puertos más productivos, con un promedio aproximado de 190.000 y 50.000 TM respectivamente, que sumados se corres- ponden con el 68% de la pesca nacional entre los años 1990 y 1995. Con respecto a las fl otas pesqueras podemos describir los siguientes aspectos: Flota Atunera1) : Cuenta con unas 100 unidades clasifi cadas en tres tipos: Cerqueras, Palangreras y Cañeras que aportan unas 80.000 TM/año. Esta fl ota opera en el Pacífi co Oriental, en el Atlántico y en el Caribe; su puerto base principal se en- cuentra en el estado Sucre (Fundatun, 2009). Las capturas principales de esta fl ota incorporan las siguien- tes especies: atún aleta amarilla: (Thunnus albacares), atún 12 13 CAPÍTULO I: LAS PESQUERÍAS EN VENEZUELA bonito listado (Euthynus pelamis), atún albacora (Thunnus alalunga), atún ojo gordo (Thunnus atlanticus). Flota Arrastrera2) : Para el año 2009, cuando fue prohibida totalmente esta actividad, contaba con unas 400 embarcacio- nes que explotaban los recursos demersales (principalmente el camarón) entre 5 y 60 brazas de profundidad y capturaban unas 40.000 TM/año. Las embarcaciones utilizadas eran de acero con tamaño en- tre 11 y 35 m. de eslora y motores entre 125 y 850 hp de potencia. La mayor parte de esta fl ota se encontraba en los estados Sucre y Falcón. Aunque las capturas de la misma in- cluían importantes recursos ictícolas, como el corocoro, la cur- bina, el pargo guanapo y el tajalí, su principal producto era el camarón rosado, marrón y blanco; así como varias especies de calamar (FAO, 2005). Flota Pargo-Mero3) : Posee unas 1.000 embarcaciones dedica- das casi exclusivamente a la explotación de especies de par- go, mero, guanapo y carite, que aportan aproximadamente unas 5.000 TM/año. Se realiza en embarcaciones de madera de 12 a 30 m. de es- lora. Esta fl ota opera casi en su totalidad en aguas del noro- riente venezolano y de las guayanas, sus principales puertos base se encuentran en los estados Sucre y Nueva Esparta. Entre las principales capturas, están los pargos colorado, pargo cebal, pargo guanapo y cunaro; y los meros cherna, guasa, tofi a y el carite (FAO, 2005). Flota sardinera: 4) Incluye embarcaciones del tipo peñero con es- lora de unos 7,5 m. y motor fuera de borda con potencia de 48 hp. Esta pesquería llegó a aportar hasta unas 150.000 TM/año constituyendo la principal pesquería de país, aunque desde el año 2006 ha sufrido una estrepitosa caída. Opera exclusiva- mente en el oriente del país entre la isla de Margarita y la costa norte del estado Sucre, las capturas están casi exclusivamente compuestas por la especie Sardinella aurita (FAO 2005). Flota Artesanal: 5) Está integrada por unas 20.000 embarca- ciones llamadas peñeros, con eslora entre 7,5 y 10 m., pro- 14 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA pulsadas por motores fuera de borda con potencia de 48 hp. Esta pesquería aporta unas 300.000 TM/año y generalmente opera a pocos kilómetrosa lo largo de toda la costa del país, encontrándose los principales puertos pesqueros en los es- tados Zulia, Sucre y Nueva Esparta. Utiliza gran variedad de artes de pesca (cordel, palangre, nasa, chinchorro y fi lete) y capturan una gran variedad de especies tanto de peces como de invertebrados, los cuales –según las estadísticas pesque- ras– se agrupan en unos 70 renglones que representan unas 120 especies (FAO 2005). HISTORIA DE LA PESCA EN VENEZUELA El objetivo principal de este apartado es hacer una somera revisión de la historia de la pesca en el país, que nos ayude a comprender mejor la organización y los métodos utilizados ac- tualmente por los pescadores artesanales; de esta manera, se tendrán más elementos para entender los problemas del sector y sus posibles soluciones. Período prehispánico Esta historia se remonta a unos 12.000 años antes de Cris- to (a.C.), pasado desde el cual se han reportado los primeros pobladores del territorio que hoy conocemos como Venezuela. Estos aborígenes se ubicaban en las tierras litorales de los es- tados Falcón y Sucre. Sus comunidades eran principalmente cazadoras y recolectoras y estaban integradas por individuos unidos por nexos de parentesco que hacían un trabajo co- operativo y solidario. Evidencia de la actividad pesquera la representan los concheros y montículos de desperdicio de co- midas en los que comúnmente se encuentran restos de peces, equinodermos y moluscos. Otra fuente importante de recur- sos lo constituyó el manglar, sobre todo en aquellos aboríge- nes asentados en las penínsulas de Paria y Araya (Suárez y Bethencourt, 2002). 15 CAPÍTULO I: LAS PESQUERÍAS EN VENEZUELA Evidencias muestran que hace unos 6.000 años a.C. los habitantes originarios de nuestras costas dejaron una exten- sa arqueología asociada a la explotación del manglar del cual obtenían maderas fi bras y resinas para la fabricación de di- versos insumos (leña) e instrumentos (cestas arpones) (Suárez y Bethencourt, 2002). Los recolectores marinos que habitaron estas tierras entre los 3000 y 1000 años a.C. presentaron caracteres distintivos que los convirtieron en diestros navegantes, que conocieron los vien- tos y las corrientes marinas, y se desplazaron con facilidad por las diferentes islas vecinas, con cuyos habitantes comerciaron, desarrollando una industria de hueso y concha. El arte de la navegación y fabricación de embarcaciones, he- chas de un solo tronco de árbol mediante el uso combinado del fuego y el hacha, y propulsadas por canalete y/o velas hechas de fi bras fl exibles, les permitió llegar, entre otras islas, a Cubagua hace unos 2000 años a.C. El trabajo de la madera y fi bras princi- palmente con instrumentos de concha y hueso estuvo estrecha- mente asociado a la navegación (Suárez y Bethencourt, 2002). Ya para esta época se practicaba la agricultura en pequeños conucos, lo que permitía complementar la dieta con los recursos que cazaban, recolectaban y pescaban; al asentarse y recibir migraciones de tribus del mediano y bajo Orinoco incorporaron la alfarería, profundizando así el carácter sedentario de estas poblaciones (Suarez y Bethencourt, 2002). Podemos decir que desde esta época, en todo el norte cos- tero de Venezuela y las islas vecinas, prosperó la gran nación KA´RIÑA, que dará nombre al Mar Caribe, que por muchos si- glos garantizó su subsistencia. Como relictos de esta gran nación permanecen en el territorio venezolano 17 etnias y subgrupos que sobrevivieron al etnocidio europeo (Fig.1.3). En cuanto a la actividad pesquera, entre las costumbres más relevantes está su carácter comunal, pues todos participaban de la faena y se benefi ciaban por igual del producto organizándose en pequeñas comunidades de relación parental. Éste es quizás 16 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA el germen de la organización del pescador artesanal actual en forma de enramadas, trenes, entre otros. Por otra parte, la historia nos revela que las poblaciones abo- rígenes explotaron de manera sostenible durante miles de años recursos como la ostra, el botuto y peces. Por el examen de los otolitos se identifi caron varias especies de corocoros, loros, ca- zones y ejemplares grandes de pargos y meros. También caza- ban tortugas que atrapaban de noche en la playa cuando se acercaban a desovar (Suárez y Bethencourt, 2002). Figura 1.3: Distribución de etnias indígenas de Venezuela Período colonial La llegada de los europeos a América trajo, por supuesto, profundos cambios en todos los órdenes de la vida; la activi- dad pesquera fue uno de los órdenes afectados, pues aparte de los innegables aportes tecnológicos (embarcaciones, aparejos de pesca), que hicieron mucho más accesible el recurso y facilita- ron su explotación, hubo algunos elementos no tan positivos que debemos mencionar. El primero se refi ere al atroz etnocidio que signifi có la inva- sión y conquista de estas tierras, lo cual puede resumirse en la siguiente información: para 1492 se estimó una población indígena americana de 90 millones de habitantes, de los cuales, 17 CAPÍTULO I: LAS PESQUERÍAS EN VENEZUELA siglo y medio después, sólo sobrevivieron 3 millones y medio (Galeano,1979). Este aniquilamiento brutal fue casi total en el caso de la nación Caribe. Nada más –según reportan para La Española (Haití y Republica Dominicana)– en un sólo año (entre 1495 y 1496) una población de 3.770.000 indígenas fue reduci- da a 1.150.000 y para el año 1548 sólo alcanzaba 500 personas (Pereira, 2004). Pero la crueldad de esta matanza se hace más evidente cuando examinamos los relatos que describieron las faenas de pesca de los ostrales de Cubagua: ...se pescaba al buceo, al salir el sol comenzaban las zambullidas. Los buceadores llevaban atadas con un cordel a la cintura o al cuello, unas redecillas para guardar las ostras. El encargado se ocupaba de imponer con una vara un ritmo ligero a la operación. Por la tarde, las canoas regresaban a tierra y para protegerlas las guardaban en caletas frente a Nueva Cádiz. Muchos de los buceadores no regresaban a puerto: Se zambullían y no tornan jamás a salir o porque se ahogan de cansados y sin fuerzas y por no poder resollar, o porque algunas bestias marinas los matan o tragan (E. Otte, 1977 citado por Suárez y Bethen- court, 2002). La explotación perlífera que comenzara en 1513 no sólo aca- bó con los indígenas sino también con los ostrales que se en- contraban totalmente agotados para 1538 (Fiero, 2008) y trajo un cambio de paradigma desde la explotación sostenible de las culturas originarias, al paradigma destructor de explotación desmedida de los recursos, propio de la civilización occidental. Ahora bien, a pesar de lo anteriormente expuesto, son indis- cutibles los grandes aportes a las técnicas y tecnologías pesque- ras traídas de Europa, hasta el punto que la pesca sufrió muy pocos cambios hasta bien entrado el siglo XX. De las artes de pesca utilizadas por los indígenas (fl echas, anzuelos, arpones, cercos), se incorporaron los chinchorros, el palangre, las redes de trasmallo, la ballestilla y la nasa; los anzuelos de hueso fue- 18 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA ron sustituidos por los de metal, artes que se mantienen casi inalterables y forman el fundamento técnico de la pesca artesa- nal en nuestros días. En cuanto a la organización de la faena se mantuvo como unidad de explotación la ranchería, aunque los sistemas iguali- tarios de repartición del trabajo y la producción fueron sustitui- dos por sistemas de explotación feudal con prevalencia del tra- bajo individual, compartamentalización de roles y participación en el producto. Historia contemporánea La historia contemporánea de la pesca, puede decirse, co- mienza a mediados del siglo XX, cuando ocurre principalmente la introducción de los motores para las embarcaciones que has- ta 1940 eran propulsadas a remo o vela. Este cambio aumentóde manera signifi cativa los rendimientos de la fl ota aunque tam- bién se incrementaron sus costos de operación. Sin embargo, signifi có un enorme impulso de la actividad, ya que, según el primer censo pesquero realizado en 1951 había unos 22.274 pescadores con 5.815 embarcaciones, produciendo unas 35.000 TM/año y 40 años después (en 1991) había 32.875 pescadores con 14.000 embarcaciones produciendo 339.397 TM/año (10 veces más) (Cervigon,1998). 19 CAPÍTULO II LAS FLOTAS PESQUERAS 1.- LA PESCA DE ARRASTRE La pesca industrial de arrastre se practicó en Venezuela desde 1950 hasta marzo del 2009 en embarcaciones conocidas como arrastreros tipo fl orida de acero, cuyas dimensiones oscilan en- tre 11 y 35 metros de eslora y potencia de motor de 125 a 850 HP, que operaban a menos de 15 millas de la costa a profundi- dades inferiores a los 200m (Fig. 2.1). Figura 2.1: Embarcación arrastrera del tipo fl orida Las redes empleadas tienen forma de embudo aplastado, con un par de portalones de hierro o de madera a los lados, los cuales mantienen abierta la boca de la red durante el arrastre (Fig. 2.2). El diámetro del hilo y el tamaño de la malla en el paño de la red dependerán del tamaño de las especies que se van a capturar. En el país se emplean dos tipos de redes de arrastre: la camaronera, construida con hilo de nylon de 3 mm de diámetro y una distancia de 2,5 cm entre dos nudos, y la “escamera” (para peces) construi- da con hilo de nylon de 4 mm y una distancia de 5 cm entre dos nudos (Alio y Marcano 1999). 20 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA Figura 2.2: Esquema de la red utilizada en la pesca de arrastre La pesca de arrastre aportó aproximadamente unas 40.000 TM al año lo que signifi ca cerca del 10% del total del país. Sus puertos base se encontraban en Cumaná, estado Sucre; en Puerto Cabello, estado Carabobo; y en Las Piedras, estado Fal- cón (Alio y Marcano 1999). Las capturas eran mixtas, entre invertebrados (principalmen- te camarón) y peces de diversas especies (Tabla 2.1). Aproxima- damente un 30% de las capturas eran peces, 55% camarones y 10% moluscos (pulpos y calamares) (MAC, 1990). Tabla 2. 1: Principales especies capturadas por la pesca de arrastre GRUPO NOMBRE VERNÁCULO NOMBRE CIENTÍFICO Peces Tahalí trichiurus lepturus Curbinata macrodon ancylodon coro coro orthopristis ruber Lamparosa selene setapinnis Gallina prionotus punctatus Roncador micropogon furnieri Perla lepophidium profundorum 21 CAPÍTULO II: LAS FLOTAS PESQUERAS Guanapo lutjanus synagris Camarones camarón blanco litopenaeus schmittii camarón marrón penaeus aztecus camarón rosado penaeus brasiliensis camarón rosado penaeus duorarum Moluscos Calamar loligo pealei La producción de esta pesquería, así como su importancia, fue decayendo en los últimos años, como puede verse en las se- ries temporales, construidas con las estadísticas ofi ciales entre los años 1973 y 1996 en las cuales se nota un claro descenso de la fl ota de 700 embarcaciones a cerca de 400, y la producción de un máximo obtenido de 42.443 TM en el año 1991 hasta las 20.895 TM en el año 1996 (Fig. 2.3) (SARPA, 1998). Figura 2.3: Evolución de las capturas y el número de embarcaciones de la pesca arrastre 2.- LA PESCA PARGO-MERO (PESCA DE ALTURA) Para realizar la pesca de altura del pargo se utilizan embar- caciones de madera (generalmente construidas con destreza por los carpinteros de rivera), con dimensiones de 10 a 20 m.(Fig. 2.4); en la mayoría de los casos utilizan motores diesel de 150 HP en promedio. La fl ota opera en aguas al oriente del país, 22 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA tanto en aguas territoriales (fl ota de media altura), como de la Guyana y la Guayana Francesa (fl ota de altura). Sus puertos base se encuentran principalmente en la Isla de Margarita (en la Península de Macanao) y el en estado Sucre (Celaya y González, 1988). Figura 2.4: Lancha o bote utilizado en la pesca pargo-mero Celaya y González (1988) describen los siguientes artes para la pesca pargo mero (Fig. 2.5 a y b): El cordel: Consta básicamente de una línea de mano, nor- malmente de alambre No. 18 y en algunos casos nylon monofi - lamento No. 120, 140 o 160, cuya longitud puede ser mayor a los 200 m. La Ballestilla: Se compone de una línea de mano, que se une a la ballesta de cobre; en el centro de la ballesta se empata la plomada de peso variable y el otro extremo se une a la línea ma- dre, que está unida a la plomada en su extremo terminal. El Palangre: Para la pesca de pargo se utiliza el palangre de fondo que está constituido principalmente por una guía central o línea madre (horizontal) de la que cuelgan verticalmente de 200 a 400 redales que rematan en anzuelos. A cada extremo de la línea madre se coloca una boya unida a un rezón (gancho) que fi ja el arte al fondo. 23 CAPÍTULO II: LAS FLOTAS PESQUERAS Figura 2.5: Artes de pesca utilizados en la pesca pargo mero a) esquema de un palangre. b)detalle del nudo del anzuelo Las capturas son altamente selectivas. Se restringen a un reducido número de especies de alto valor comercial tanto en el país como en el exterior, entre las que dominan los pargos que constituyen, junto con el cunaro, más del 80% de la producción (Tabla 2.2) (Celaya y González,1988; MAC 1990). Tabla 2.2: Principales especies capturadas en la pesca pargo-mero GRUPO NOMBRE VERNÁCULO NOMBRE CIENTÍFICO Peces pargo colorao lutjanus purpureus pargo dientón lutjanus griseus pargo guanapo lutjanus synagris pargo cebal lutjanus analis carite chinigua scomberomorus regalis carite pintao scomberomorus brasiliensis carite lucio scomberomorus covalla cunaro rhomboplites aurorubens 24 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA La producción de la pesca pargo mero no ha sufrido muchos cambios en los últimos años; esto puede deberse al carácter ar- tesanal y complejo de esta fl ota que impone limitaciones que no permiten crecimiento, lo que indica que quizás ha alcanzado su rendimiento máximo sostenible (RMS), que la mantiene en unas 5.000 TM al año, con una fl ota que se ha mantenido cerca de las 300 unidades (Fig. 2.6) (SARPA, 1998). Figura2. 6: Evolución de las capturas (TM) de la fl ota pargo mero en Venezuela durante los años de 1985 hasta 1996 3.-LA PESCA DE ATÚN La fl ota atunera está conformada por tres tipos de embarca- ciones que se clasifi can principalmente en base al arte de pesca que utilizan de la siguiente forma (MAC, 1990; SARPA, 1998; FAO, 2005), (Fig. 2.7): Las cerqueras son aquellas que usan redes de cerco de hasta 1000 metros de longitud y poderosos sistemas hidráulicos, así como autonomía sufi ciente para operar tanto en el Caribe como en el Océano Atlántico y el Pacífi co Oriental. 25 CAPÍTULO II: LAS FLOTAS PESQUERAS Las cañeras utilizan carnada viva para cebar y capturar el atún empleando cañas de pescar; requieren un mayor esfuerzo manual y por su menor autonomía se desempeñan principal- mente en el Caribe. Las palangreras emplean palangres hasta de 40 km de lon- gitud y operan tanto en el Caribe como en el Atlántico. La fl ota está compuesta por unas 30 unidades cuya base de operación se encuentra en su mayoría en el estado Sucre. Figura 2.7: Embarcación utilizada en la pesca del atún Cerca de la tres cuartas partes de la captura están conforma- das por 4 especies (Tabla 2.3), (MAC, 1990). Tabla 2.3: Principales especies capturadas en la pesca del atún GRUPO NOMBRE VERNÁCULO NOMBRE CIENTÍFICO Peces atún aleta amarilla thunnus albacares atún bonito listado euthynnus pelamis atún albacora thunnus alalunga atún ojo gordo thunnus obesus 26 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA Para el año 2003, el INAPESCA reportó por una producción de 133 TM. Si utilizamos las estadísticas reportadas por la FAO, podemos decir que ésta es una de las pesquerías que más hacrecido en el tiempo, pasando de unas 7.000 TM en la década de los 50 hasta cerca de 143.567 TM en los últimos años, aunque es importante decir que a partir del año 2003 se nota un descenso que alcanza su mínimo en el año 2005 (75.523 TM) (Fig. 2.8). Figura 2.8: Evolución histórica de la pesca del atún en Venezuela 4.- LA PESCA SARDINERA La pesquería de la sardina comienza en Pampatar, isla de Margarita en 1927 (Cervigon, 1998), aunque puede decirse que forma parte de la fl ota artesanal. Debido a su importancia y particularidades, se le trata aparte. Se lleva a cabo en pequeños peñeros de madera de 7 a 10 m de eslora, impulsados por moto- res fuera de borda de potencia entre 45 y 80 HP (Fig. 2.9). Las capturas de esta especie se restringen casi exclusivamen- te a la región Nororiental en las aguas adyacentes a las costas de la Isla de Margarita y el estado Sucre donde se concentran las poblaciones y aunque puede pescarse todo el año las mayores capturas se alcanzan entre los meses de enero a junio cuando se intensifi ca el fenómeno de surgencia en la zona (González, et al 2007). 27 CAPÍTULO II: LAS FLOTAS PESQUERAS Figura 2.9: Embarcaciones de la pesca sardinera en Puerto Valdez, Nueva Esparta El arte de pesca utilizado es una red de cerco conocida con el nombre de mandinga de aproximadamente 1000 metros de longitud por 30 de ancho. En la actividad intervienen entre 4 y 12 embarcaciones que realizan desde la operación de cercar el cardumen y atraparlo, cerrando la parte inferior del cerco, hasta el proceso de retirar y transportar las sardinas hasta la costa (Fig. 2.10). Figura 2.10: Red de cerco utilizada en la pesca sardinera La especie capturada es la sardina Sardinella aurita (Ta- bla 2.4), que se encuentra en grandes cardúmenes en la re- gión oriental del país, estimándose por métodos de prospección 28 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA acústica, observación aérea y detección por sensores remotos poblaciones de cerca de 1.000.000 de TM., aunque estimaciones recientes parecen indicar disminuciones signifi cativas hasta ni- veles de unas 200.000 TM. Tabla 2.4: Especies capturadas en la pesca de la sardina GRUPO NOMBRE VERNÁCULO NOMBRE CIENTÍFICO Peces sardina o arenque sardinella aurita Esta pesquería ha venido creciendo en forma sostenida des- de los años 50 desde las 17.000 TM hasta más de 10 veces en el año 1998 con 186.060 TM, aunque en el año 2007 sufrió una merma signifi cativa al caer cerca de 9.000 (Marval y Cervi- gon, 2009), y aunque no se han determinado causas específi cas para esta disminución, algunos autores piensan que hay una sobreexplotación del recurso con disminución de las poblacio- nes (Fig. 2.11). Figura 2.11: Evolución histórica de la pesca de la sardina en Venezuela 5.- LA PESCA ARTESANAL La pesca artesanal reúne un numeroso grupo de pesquerías que por su carácter manual (no mecanizada) a pequeña escala cumplen con la defi nición propuesta para este sector. Explota 29 CAPÍTULO II: LAS FLOTAS PESQUERAS muchos recursos diferentes, tanto peces como invertebrados pe- lágicos y demersales, utilizando gran variedad de artes de pesca. Constituye el sector pesquero más importante del país, porque produce cerca del 60% de la producción total nacional y porque es fuente generadora de empleos (ocupa cerca del 80% de la po- blación dedicada a la pesca). La faena pesquera se realiza a poca distancia de la costa en embarcaciones del tipo peñero o curiara (pesca fl uvial) con mo- tores fuera de borda, en aproximadamente 155 puertos base que reportan su producción en las 40 inspectorías de pesca a nivel nacional (MAC, 1990; FAO, 2005). Figura 2.12: Faena de pesca con chinchorro de playa En esta actividad utilizan un variado número de artes y téc- nicas. Entre las más utilizadas tenemos: Redes: Redes de cerco (chinchorros): las hay de playa –cuando cer- can los peces hacia tierra–, y de argolla, cuando cercan aguas afuera (Fig. 2.12). Filetes y trasmallos: pueden ser de varios tipos. Según su posición, de fondo o superfi ciales; según su anclaje, fi jas o a la deriva. Atarrayas: son redes circulares que se usan en playas donde el fondo no presente obstáculos (Fig. 2.13). 30 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA Figura 2.13: Atarraya Trampas Las nasas: son jaulas construidas con marcos de diversos materiales (madera, fi bra, metal), cubiertas generalmente por mallas de acero galvanizado (Fig. 2.14). Figura 2.14: Nasas Artes con Anzuelos Palangre: los palangres constituyen una línea de la cual pen- de una serie de cordeles atados a intervalos iguales a los que se les colocan uno o varios anzuelos. Los palangres pueden ser de varios tipos según la profundidad a la que se colocan: fi jos al fondo (para la captura de especies demersales), a media agua o entre aguas (para la captura de especies pelágicas). 31 CAPÍTULO II: LAS FLOTAS PESQUERAS La pesca artesanal incorpora un gran número de especies (cerca de 200) agrupadas según los organismos encargados de su seguimiento en unos 70 renglones. Entre los peces más im- portantes se encuentran (Tabla 2.5): la cabaña blanca, la caba- ña pintada, la cabaña negra, el carite pintado, el carite rey, el jurel, la lisa, el tajalí, la lamparosa, el cunaro, el lebranche, la catalana; y, entre los invertebrados (Tabla 2.6) están la langos- ta, la pepitona, el mejillón, el pulpo, el calamar y el botuto. Tabla 2.5: Especies de peces capturadas en la pesca artesanal GRUPO NOMBRE VERNÁCULO NOMBRE CIENTÍFICO Peces aguja blanca tetrapturus albidus albacora thunnus alalunga anchoa pomatomus saltator atún aleta amarilla thunnus albacares atún aleta negra thunnus atlanticus atún meregal seriola rivoliana atún ojo gordo thunnus obesus bagre cacumo bagre bagre bagre cacumo bagre marinus bagre cuinche cathorops spixii bagre guatero sciades herzbergii cabaña cariba (bonito) sarda sarda cabaña negra auxis thazard cachama blanca pomacanthus arcuatus cachama de piedra holacanthus ciliaris cachama medioluto holacanthus tricolor cachama negra pomacanthus paru cachorreta scomber japonicus cachúa balistes capriscus cachúa balistes vetula cachúa negra melichthys niger cachúa perra aluterus heudelotii 32 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA cachúa perra aluterus monoceros cachúa perra aluterus scriptus cachúa perra aluterus shoepfi i Caitipa diapterus rhombeus Canario conodon nobilis caracaballo selene vomer carachana pintada euthynnus alleteratus carite pintado scomberomorus brasiliensis carite rey scomberomorus cavalla cataco garretón trachurus lathami cataco ojón selar crumenophtalmus catalucia priacantus arenatus cazón amarillo carcharhinus acronotus cazón chino rhizoprionodon porosus cazón trozo carcharhinus milberti cherechere haemulon steindachneri chinigua scomberomorus regalis chucho blanco myliobatis freminvillei chucho pintado aetobatus narinari cojinua amarilla caranx bartholomaei cojinua negra caranx ruber Cornua sphyrna spp. corocoro rayao haemulon bonariense corocoro margariteño haemulon plumieri corocoro orthopristis ruber corocoro plateado haemulon parrai cují haemulon aurolineatum cuna blanca mycteroperca cidi cunaro de charco pristipomoides macrophthalmus dorado coryphaena hippurus guasa epinephelus itajara guayanesa gymnura micrura 33 CAPÍTULO II: LAS FLOTAS PESQUERAS jurel atún caranx crysos jurel caranx hippos jurel ojo gordo caranx latus lamparosa selene setapinnis lebranche mugil liza lenguado paralichthys tropicus lisa mugil curema macarela decapterus macarellus machuelo opisthonema oglinum manta manta birostris mero cabrilla epinephelus adscensionis mero batata epinephelus striatus mero paracamo epinephelus morio mojarra eugerres plumieri muñama gerres cinereus paguara chaetodipterus faber palagar istiophorus albicans paleta caulolatilus cyanops paletacaulolatilus guppyi pargo cebal lutjanus analis pargo dientón lutjanus griseus pargo guanapo lutjanus synagris pargo colorao lutjanus purpureus peje burro anisotremus surinamensis pez sierra pristis pectinatus pez vela istiophorus albicans rabo amarillo cetengraulis edentulus raya blanca dasyatis americana robalo centropomus ensiferus robalo centropomus parallelus robalo centropomus undecimalis 34 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA roncador micropogonias furnieri salmonete mullus auratus sardina anchovia clupeoides sardina sardinella aurita toquincha cynoscion jamaicensis Tabla 2.6: Especies invertebradas capturadas en la pesca artesanal GRUPO NOMBRE VERNÁCULO NOMBRE CIENTÍFICO Moluscos almeja asaphis defl orata botuto strombus gigas calamar doryteuthis plei calamar loligo pealei chipichipe donax denticulatus guacuco tivela macroides margarita pecten papyraceus mejillón perna perna ostra crassostrea rizophorae ostra perla pinctata radiata pepitona arca zebra quigua cittarium pica vaquita strombus pugilis vieira pecten ziczac Crustáceos camarón blanco litopenaeus schmittii camarón marrón penaeus aztecus camarón rosado penaeus brasiliensis camarón rosado penaeus duorarum camarón titi xiphopenaeus kroyeri langostino rojo hymenopenaeus robustus langosta panulirus argus La pesca artesanal es, sin duda, una de las actividades pro- ductivas que más ha crecido en el país a pesar de la crisis eco- 35 CAPÍTULO II: LAS FLOTAS PESQUERAS nómica de fi nales del siglo XX y la gran dependencia de insumos importados como los motores fuera de borda y sus repuestos, los materiales para la construcción de los artes de pesca, an- zuelos, nylon, redes plomadas, etc., que han sufrido aumentos astronómicos debido a la fuerte devaluación imperante en los últimos 20 años. La fl ota alcanza cerca de las 20.000 unidades y su producción oscila cerca de las 300.000 TM, según las últi- mas estadísticas reportada por SARPA (actualmente Insopesca), aunque es importante mencionar que todos los estudios reali- zados señalan que estas estadísticas están subestimadas en un 20% o 30%, lo que implicaría una producción bastante superior (Fig. 2.15) (SARPA, 1998). Figura 2.15: evolución histórica de la pesca artesanal entre los años 1989-1996 37 CAPÍTULO III ASPECTOS SOCIOECONÓMICOS DE LA PESCA 1.- EVALUACIÓN SOCIOECONÓMICA ORGANIZACIÓN Pesca individual En la pesca artesanal se desarrollan algunas actividades de manera “individual”, en las cuales participan un pescador y uno o dos compañeros o familiares. Este tipo de pesca se hace casi a diario en faenas generalmente nocturnas desde unas pocas hasta 12 horas, dependiendo de la captura. Se realiza muy cer- ca de la costa, en pequeños peñeros con motor fuera de borda, con diferentes artes de pesca. Los más comunes son el cordel, las nasas, el fi lete y el palangre. Esta pesca es marcadamente estacional. Los recursos que capturan dependen de las migra- ciones y movimientos de alimentación o reproductivos de algu- nas especies. Entre las que podemos mencionar como las más importantes están el bonito, el cataco, el cazón, la catalana. El producto de esta actividad es casi de subsistencia, con un pequeño excedente que se comercializa con los caveros y la ga- nancia suele repartirse por partes iguales entre los pescadores. Aunque se considera un tipo de pesquería individual, es impor- tante mencionar que muchas de sus actividades (esencialmente las realizadas en tierra) se hacen de manera colectiva y solida- ria, como la organización, el mantenimiento y la reparación de aparejos y artes de pesca, en sitios conocidos como rancherías que son construcciones rudimentarias, en la mayoría de los ca- sos, ubicadas en la orilla de la playa, donde un grupo de pesca- dores comparte el espacio, además del tiempo de ocio, en los pe- ríodos de espera para la faena cotidiana. Esta organización es, sin duda, un remanente que aún persiste de las formas de vida de las sociedades originarias del gran pueblo Caribe que pobló estas costas y que ya mencionamos en capítulos anteriores. 38 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA Ejemplos de pesquerías individuales Entre las pesquerías más importantes del país, encontramos la pesquería de la langosta y la pepitona. Pesquería de la langosta Este crustáceo, el Panulirus argus, capturado principalmente con nasas, representa un recurso de signifi cativa importancia pesquera y comercial. Su pesca, exclusivamente artesanal, data de muchos años y se ha ido intensifi cando en el tiempo, funda- mentalmente en dos áreas: el Parque Nacional Archipiélago Los Roques (PNALR), ubicado entre los 11° 48’ y 11° 58’ de latitud norte y 66° 32’ y 66° 52’ de longitud oeste, de donde proviene aproximadamente la mitad (48 %) de la captura nacional de este crustáceo; y, el Archipiélago Los Testigos, ubicado al noreste de la Isla de Margarita y al norte de la Península de Paria, entre los 11° 20’ 24’’ y 11° 24’ 53’’ de latitud norte y los 63° 08’ 24’’ y 63° 02’ 24’’ de longitud oeste, que aporta entre un 41% del total, mientras que el otro 10% es aportado por los estados Zulia (8 %) y Sucre (3 %). Al parecer, en los estados Falcón y Aragua existe una importante pesquería de langosta que escapa del control ofi cial (Gómez, 2002). Las estadísticas de producción pesquera nacional (1985- 1999), indican que en promedio, la langosta aporta 445 tone- ladas por año de peso total, lo cual representa un 5,48% de la producción total nacional de crustáceos y un 0,14% de la producción marítima nacional. No obstante, el recurso man- tiene su importancia porque además de los empleos directos e indirectos que genera, representa un aporte importante de divisas para el país. En lo que refi ere a los grupos de trabajo, en casi la totalidad de los casos, los patrones son dueños de las artes y las embar- caciones y se hacen acompañar de tripulaciones entre 4 o 5 ma- rinos. Las nasas, dotadas de carnadas para atraer la langosta, son caladas durante el día en los sitios de pesca previamente fi jados y su posición se determina a través de un proceso de 39 CAPÍTULO III: ASPECTOS SOCIOECONÓMICOS DE LA PESCA triangulación con puntos de referencia en la costa. Estas tram- pas se levan regularmente una vez a la semana con la ayuda de un garapiño (gancho) y la captura se almacena viva en tanques o jaulas rectangulares hasta la venta (Gómez, 2002). Pesquería de la pepitona (arca zebra) Comienza a ser económicamente importante desde 1940 al- canzando 45.850 TM en el año 2003 y ubicándose como uno de los rubros pesqueros más importantes del país. Este molusco crece y se reproduce a profundidades entre 5 a 15 mts. Los ban- cos más productivos se encuentran próximos a la costa frente a la península de Araya entre la isla de Coche y el Morro de Cha- copata. La pesca se realiza barriendo los bancos con una ras- tra pepitonera que se impulsa desde una embarcación, porque llena puede llegar a pesar hasta unas 600 Kg. En la actualidad, se utiliza un bote auxiliar que ayuda a izar la rastra hasta la superfi cie. Si el patrón es dueño de la embarcación y la rastra, entonces contrata los marinos acordando con ellos cuánto será el pago. Al llegar a puerto puede vender el producto a un intermediario y cancelar a los marinos, o puede asumir el proceso de precoc- ción y desbullamiento, lo que puede garantizarle una ganancia mayor (Arias et al., 2002). Perfi l socioeconómico El pescador artesanal promedio es un hombre de aproxima- damente 35 años de edad, casado, con tres hijos, educación básica incompleta, que labora junto a otros dos en un peñero de madera de 7 mts. de eslora, propulsado por un motor fuera de borda de 48 HP. Desarrolla faenas diarias de entre 6 y 13 horas, actividad a la que se dedican exclusivamente. Tienen un rendimiento diario de aproximadamente 50kgs., por lo que su nivel económico se ubicaen las clases d y e, es decir, en un nivel bajo (Fig. 3.1). 40 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA Figura 3.1: Pescador de Macanao Pesca Colectiva Varias de las principales pesquerías del país se realizan bajo sistemas de organización colectiva. En este caso, en la faena participan más de tres pescadores y se establecen relaciones particulares de trabajo y repartición de las ganancias bajo jerar- quías establecidas que son tácitamente aceptadas por todos los participantes. Las pesquerías colectivas utilizan diferentes modos y artes de pesca ya que se especializan en un recurso particular, para el cual se ha desarrollado desde hace muchas décadas toda una rutina que permanece en el tiempo casi sin variantes. Sólo en algunos casos la introducción de avances tecnológicos (ecoloca- lización, GPS) ha permitido mejorar los rendimientos y facilitar la faena. Las principales pesquerías colectivas que se realizan en Ve- nezuela son: la pesca de la sardina, del pargo-mero y jurel. Pesca de la sardina La faena comienza muy temprano en la mañana, cuando el bote madre, con una tripulación de 3 o 4 marinos y un patrón, 41 CAPÍTULO III: ASPECTOS SOCIOECONÓMICOS DE LA PESCA llevan la red. Una vez avistado el cardumen, empiezan a calarlo y se incorpora un bote auxiliar con dos marinos, sujetando la corredera que pasa por los anillos colocados en la relinga de plomos, procedimiento que embolsa el cardumen. Tras cum- plir esta etapa, el bote madre recoge corcha y plomadas para concentrar la captura. Si ésta es muy grande, se necesitan botes auxiliares que levanten la corcha para evitar que los pe- ces escapen. Terminado este proceso, un grupo de 6 marinos comienza a extraer el pescado con un pequeño chinchorro o “tipure” que puede cargar unos 500 Kg. y se cargan los bo- tes auxiliares con capacidad de unos 3500 Kg. En una calada promedio se pueden capturar unos 150.000 Kg. Hay casos de caladas muy grandes donde han intervenido hasta 12 peñeros y unas 25 a 30 personas. En el ámbito social, la estructura etaria de la población de pescadores coincide con lo reportado por González y Ramírez (1990); hay un predominio de individuos jóvenes (15-45 años). Los niveles de analfabetismo son bajos, debido probablemente a que los padres incentivan a sus hijos al estudio para alcan- zar un mejor bienestar socioeconómico. Esto demuestra que en los últimos 12 años los niveles de escolaridad han mejorado creando posibilidades para la implementación de programas so- cioeconómicos que permitan mejorar su calidad de vida. Asi- mismo, el porcentaje alto de jóvenes incorporados en la pesca evidencia que existe una generación de relevo interesada en la pesquería de la sardina como actividad económica estable, por cuanto consideran que el puerto libre y el turismo son fuentes de empleo temporales. Este indicador socioeconómico podría deberse a varios factores. Entre ellos está la asistencia que les brinda el “pescador-dueño” con préstamos de dinero y garantía de trabajo durante todo el año. Este perfi l es poco común en las pesquerías artesanales que son vistas como símbolo de pobreza y retraso tecnológico. La relativa alta tendencia a permanecer en la actividad pesquera podría asociarse con estos incentivos económicos. A pesar de ello, los pescadores no se sienten satisfechos con el esquema de repartición de los ingresos por el sistema de par- 42 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA tes, lo que podría originar a futuro un desplazamiento hacia otras fuentes de empleo porque los ingresos que perciben con la pesca de sardina son bajos. Organización El sistema de organización responde a categorías o jerarquías fi jas. En éste existen: un patrón que puede o no ser dueño de los botes y las artes de pesca, los marinos, los buzos, el vigía y el remendón. Adicionalmente pueden considerarse los motoristas y los ayudantes. La ganancia se reparte según un esquema fi jo de partes como se especifi ca en la Tabla 3.1, en el cual el dueño, las lanchas y el arte de pesca que generalmente representan aproximadamente el 1% de los participantes acumula cerca de más del 60% de la ganancia y el 40% se reparte entre el resto de la tripulación (González et al., 2005). Pesca pargo- mero Las faenas de captura de estas especies se llevan a cabo nor- malmente durante el día. Cuando la embarcación se aproxima a la zona de pesca, se prende la ecosonda para determinar la pro- fundidad, el tipo de fondo y la localización de los cardúmenes. Al detectarse los peces, se comienza la faena empleando las artes seleccionados. Los peces capturados se levan y desvisceran y posteriormente son colocados en la cava de la embarcación (en- hielado). Al caer la noche, se lava la cubierta y los pescadores descansan tomando turnos de guardia. La duración promedio de una campaña es de 23 días de au- sencia de puerto y 15 días efectivos de pesca. En promedio una campaña puede producir entre unos 1000 a 3000 Kg. Adicionalmente a las actividades propias de la pesca, la tri- pulación tiene otras tareas relacionadas con el mantenimiento de la lancha cuando están en puerto y aprovisionamiento antes de zarpar a una campaña. 43 CAPÍTULO III: ASPECTOS SOCIOECONÓMICOS DE LA PESCA Organización La organización de la tripulación y la repartición de las ga- nancias se hace según tradiciones muy antiguas que al igual que la pesca de la sardina sigue el régimen de repartición por partes. En una embarcación tipo con una tripulación de 10 ma- rinos la repartición se hace según el siguiente esquema (Tabla 3.2) (Celaya y Gónzález, 1988). Tabla 3.1: Forma de reparto de las ganancias en la pesca de la sardina CANTIDAD PARTES FIJAS PARTES Nº PARTES REPARTICIÓN % 1 Dueño 20 20 25 2 Lancha 3 6 75 7 Peñero 2 14 1 Piragua 1 1 1 Artes de pesca 20 20 10 Marino 1 10 2 Buzo 1 2 2 Remendón 1 2 1 Vigía 0,5 0,5 PARTES OPCIONALES 2 Buzo 0,5 1 2 Motorista 1 2 2 Remendón 1 2 2 Ayudantes 0,25 0,5 Total 80 44 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA Tabla 3.2: Forma de reparto de las ganancias en la pesca de altura pargo-mero CARGO PARTES Embarcación 10 Patrón 2 Motorista 1 y media Pescador 1 Enhielador 1 y media Cocinero 1 y media Destripador 1 y cuarto El ingreso de un pescador de la fl ota pargo-mero varía depen- diendo de diversos factores como las variaciones estacionales de las especies, razones socioculturales, que les impiden participar en todas las campañas de un año y difi cultades de orden técnico que inhabiliten la embarcación. Sin embargo, es ampliamente reconocido que el pescador de la fl ota pargo-mero percibe ingre- sos superiores al pescador artesanal costanero. Adicionalmente, aunque no hay un contrato formal entre el propietario y las per- sonas que laboran en las embarcaciones, existe un compromiso tradicional por parte del dueño de la embarcación para la asis- tencia económica de los familiares de los marinos en campaña. Pesca del jurel Ésta es una especie migratoria cuyos cardúmenes se despla- zan de este a oeste por las costas venezolanas estacionalmente entre los meses de enero a junio. Las artes, procedimientos y organización responden y se adecuan armoniosamente a las ca- racterísticas migratorias de la especie. La faena de pesca tiene como elemento primordial la detec- ción del cardumen a cargo del vigía, quien con su vasta expe- riencia, apostado en una localidad alta en la orilla, puede con 45 CAPÍTULO III: ASPECTOS SOCIOECONÓMICOS DE LA PESCA sólo ver la mancha en el mar, determinar las dimensiones del cardumen y una vez detectado, avisa con un silbato a los pesca- dores que permanecen en la ranchería. Las tripulaciones para la pesca del jurel pueden estar com- puestas hasta por una veintena de pescadores. La repartición de las ganancias se hace por partes para cada miembro de la tripu- lación: el dueño, el bote, el motor y las redes son convenidas conel dueño antes de iniciar la pesca y dependiendo de la captura también se acostumbra distinguir con partes adicionales al vigía y al patrón. Es importante mencionar que cuando el cardumen es cercado para acercar el chinchorro a la playa acuden nu- merosas personas de los alrededores a colaborar en la pesada tarea de halar el chinchorro y vararlo en la playa. Al terminar la faena, el patrón autoriza la entrega de pequeñas porciones de pescado a los “jaladores” para retribuirles el trabajo (Suárez y Bethencourt, 2002). Organización La tripulación está compuesta por el patrón, el vigía, los pescadores, los motoristas, los plomeros, los bulleros y los ja- ladores. 2.- ECONOMÍA Otro factor que analizaremos es la relación entre la pesca y la economía en Venezuela. La mayoría de los autores coinciden en concluir que variables económicas como la infl ación, el desem- pleo y las políticas como el control de precios de algunos rubros pesqueros y los controles de cambio son factores que afectan la actividad pesquera y la producción del sector. La dependencia antes mencionada viene dada por varios ele- mentos que tiene la actividad en el país como: el alto componen- te de insumos importados (motores, repuestos, anzuelos, nylon, redes) que se encarecen con la devaluación; los altos precios del pescado, que en situaciones de crisis económica lo hacen 46 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA inaccesible a la mayoría de la población, lo que disminuye su demanda; y en el caso de la sardina, el control de precios que prevalece en este producto desde hace muchos años, y la poca competencia entre las industrias procesadoras y enlatadoras del producto que promueven la cartelización y manipulación de los precios que se pagan al pescador. En los estudios realizados sobre las pesquerías en el país, las variables anteriormente mencionadas generalmente tratan de explicar las fl uctuaciones que se notan a corto plazo. Sin embar- go, cuando hacemos un análisis más general utilizando series de datos más largas, detectamos que no es tan obvia la relación de dependencia funcional entre las variables macroeconómicas y la producción pesquera. La economía en el país durante los últimos 25 años viene teniendo un comportamiento muy fl uctuante, desde el llama- do “viernes negro” ocurrido en el año 1983, cuando se rompe la larga estabilidad de nuestro signo monetario y entramos en un período de acelerada devaluación. Esta etapa de inestabili- dad económica se caracterizó por cortos períodos de crecimiento económico, seguidos de períodos de crisis y recesión, ya que en ese tiempo se ensayó todo tipo de políticas económicas y mone- tarias de corte neoliberal (“el gran viraje”, 1989- 1993; “la agen- da Venezuela” 1996- 1998) o períodos de marcada intervención estatal (1984-1988; 1994-1996). Por otra parte, la economía venezolana también fue marcada- mente infl uenciada por la inestabilidad política imperante en es- tos años que incluyeron una rebelión popular (febrero de 1989), dos golpes de estado con iniciativa militar (febrero y noviembre de 2002), la culminación abrupta de un período constitucional por razones jurídico-políticas (1996) y un golpe de estado empresarial- militar, aunado a un sabotaje y paralización de la industria petro- lera (2002). Por último, debido a la fuerte dependencia de nuestra economía de petróleo, las crisis e inestabilidades en los mercados energéticos (crisis de las economías asiáticas en 1997 y mexicana en 1988) han afectado fuertemente nuestra economía y se refl ejan claramente en las variables macroeconómicas como son el PIB, el desempleo y la infl ación (Fig. 3.2 a y b) (MPPF. 2007). 47 CAPÍTULO III: ASPECTOS SOCIOECONÓMICOS DE LA PESCA Figura 3.2: a) Evolución del producto interno bruto entre los años 1983- 2007 Figura 3.2: b) Evolución de la infl ación en el período 1984-2007 48 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA El examen detallado de la evolución de la producción pesque- ra y otros indicadores socioeconómicos del sector en relación con las variables macroeconómicas nacionales muestra resulta- dos interesantes que vale la pena analizar. En primer lugar, cuando comparamos la situación del desem- pleo acumulado para todos los sectores económicos y el sector agrícola-pesquero entre los años 1995 y 2005, vemos una dife- rencia signifi cativa de casi 6 puntos menos, es decir, existe una situación de casi pleno empleo en el sector pesquero (aproxima- damente 6,8%). En segundo término, al cotejar la tasa de variación de la pro- ducción pesquera entre los años 1982 y 2006, y la tasa de va- riación del PIB, notamos muy poca correlación entre ambas va- riables (Fig. 3.3). Figura 3.3: Comparación del PIB con la producción pesquera en el período 1983-2005 Otro factor que vale la pena mencionar es la aparente inde- pendencia del crecimiento en cuanto al número de personas que trabaja en la pesca y el crecimiento vegetativo de la población, ya que según las estadísticas reportadas, el número de pescado- res aumentó de 22.274 en el año 1951 a 37.951 en el año 1996, con una variación de aproximadamente 70%; mientras que en 49 CAPÍTULO III: ASPECTOS SOCIOECONÓMICOS DE LA PESCA el mismo lapso la población del país se incrementó en 321%, al pasar de 5.091.716 en 1950 a 22.474.655 en 1996. La aparente independencia del comportamiento de la produc- ción pesquera de las fl uctuaciones de la economía nos revela, al menos en la globalidad del sector, variables propias que deter- minan con más fuerza su evolución en el tiempo. Por último, un elemento que debemos considerar y que puede estar actuando de manera positiva en el sector, es el subsidio a los combustibles que impera en Venezuela como país productor de petróleo, ya que este insumo representa un costo importante a nivel internacional. En la actualidad, el litro de gasolina se cotiza internacionalmente a unos 1.600 Bs. por litro y en el país se alcanza los 90 Bs. Esta diferencia se multiplica al considerar que una faena de pesca cerca de la costa puede consumir unos 15 o 20 litros de gasolina. 51 CAPÍTULO IV EVALUACIÓN DEL RECURSO PESQUERO CON LA UTILIZACIÓN DEL MÉTODO DE LA PRODUCCIÓN EXCEDENTARIA Este método es muy sencillo; sólo requiere datos de produc- ción y esfuerzo de captura, y estima el nivel óptimo de esfuer- zo que produce un rendimiento máximo sostenible del recurso. Sin embargo, es importante decir que este método supone cier- tas condiciones. Por ejemplo, el stock es considerado como una gran masa de biomasa uniforme que no presenta diferencias de edad, ni longitud, por lo que no considera el concepto de cohor- te. Por supuesto, no considera efectos del tamaño de la malla, y el proceso de mortalidad es tratado como el crecimiento negativo de la biomasa. El modelo requiere los siguientes datos: E = esfuerzo en el año 1,2,3...... , n C/Ei = (Captura en peso) por unidad de esfuerzo en el año i 1.- EL MODELO DE SCHAEFER Schaefer expresa la relación entre la captura por unidad de esfuerzo y el esfuerzo como una simple relación lineal (Fig. 4.1) según la siguiente pauta: C(i) /E(i)= a + b E(i) si E(i) ≤ [-a/b] Figura 4.1: Gráfi ca de la captura comercial vs. el esfuerzo de captura, donde C(TM)= captura en toneladas, E= esfuerzo medido como número de embarcaciones y Ai= años 52 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA Y cuando grafi camos la captura por unidad de esfuerzo (C/E) contra el esfuerzo (E) obtenemos: Figura 4.2: Gráfi ca de captura por unidad de esfuerzo vs. el esfuerzo de captura Haciendo la regresión de estos puntos, obtenemos la fi gura 4.2, donde a/b es el término que estima la extinción de la po- blación, es decir, para esfuerzos superiores a esta magnitud el rendimiento de la pesquería es cero. Utilizando esta expresión y su transformación parabólica, Schaefer determina que el ren- dimiento máximo sostenible se alcanzacuando el esfuerzo es exactamente la mitad de este punto –a / 2b y, por lo tanto, el rendimiento máximo sostenible es igual a: –a2 /(4b) (Sparre et al., 1989). Cálculo del esfuerzo óptimo y el rendimiento máximo sostenible de las pesquerías de Venezuela Para evaluar el recurso pesquero del país y estimar el esfuer- zo óptimo y rendimiento máximo sostenible se aplicó el modelo de Schaefer a los datos reportados por el Servicio Autónomo de los Recursos Pesqueros y Acuícola (SARPA) en 1996,1997 para las diferentes fl otas entre los años 1984 y 1996 (Tabla 4.3 a, b y c) y los datos reportados para la fl ota sardinera por Mendoza (1990), que incluyen estadísticas de los años 1973 y 1989. En el primer caso, se utilizó para medir el esfuerzo de las fl otas arrastrera, artesanal y pargo mero, el número de embar- 53 CAPÍTULO IV: EVALUACIÓN DEL RECURSO PESQUERO CON LA UTILIZACIÓN DEL MÉTODO... caciones registradas; y en el caso de la pesca de la sardina, se utilizó el número de cercos (Tabla 4.1). Tabla 4.1: Capturas y Esfuerzos (número de embarcaciones y número de cercos) de las diferentes fl otas pesqueras de Venezuela entre los años 1984-1996 NÚ M ER O DE E M BA RC AC IO NE S F lo ta 19 84 19 85 19 86 19 87 19 88 19 89 19 90 19 91 19 92 19 93 19 94 19 95 19 96 Ar ra st re - 27 2 28 3 31 7 33 9 43 3 44 6 44 9 41 5 40 5 37 3 37 3 - Pa rg o- M er o - - - - - 21 3 18 7 23 8 22 0 25 8 25 8 15 9 25 7 Ar te sa na l (m ar ) 12 72 0 12 91 7 13 44 4 13 59 0 14 37 0 12 82 1 84 98 10 33 5 88 94 75 68 89 75 88 58 - Fuente: SARPA 1998(a) 54 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA Pr od uc ci ón e n To ne la da s m ét ric as F lo ta 19 84 19 85 19 86 19 87 19 88 19 89 19 90 19 91 19 92 19 93 19 94 19 95 19 96 Ar ra st re - 29 81 9 30 26 3 30 98 9 27 34 7 39 21 9 37 02 1 42 44 2 29 85 2 31 27 2 38 80 0 30 28 0 - Pa rg o- M er o - - - - - 13 89 21 82 5 48 41 21 98 61 09 26 76 47 68 44 46 Ar te sa na l (M ar ) 16 02 41 16 06 16 18 09 51 19 92 99 18 35 55 20 68 03 16 16 21 18 11 28 18 32 00 23 15 00 26 53 25 31 06 82 - Fuente: SARPA 1998(b) 55 CAPÍTULO IV: EVALUACIÓN DEL RECURSO PESQUERO CON LA UTILIZACIÓN DEL MÉTODO... Flota Sardinera 19 73 19 74 19 75 19 76 19 77 19 78 19 79 19 80 19 81 19 82 19 83 19 84 19 85 19 86 19 87 19 88 19 89 Nú m er o de c er co s 12 00 80 0 13 50 12 00 10 50 50 0 75 0 10 50 60 0 12 00 80 0 10 00 12 00 14 50 15 00 17 50 17 50 Pr od uc ci ón e n m ile s de T on el ad as m ét ric as 41 28 53 40 39 27 ,5 30 37 15 33 28 32 40 53 58 60 58 Fuente: Mendoza 1990(c) 56 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA Con estos datos se calculó el rendimiento máximo susten- table y el esfuerzo óptimo (esfuerzo necesario para alcanzar el rendimiento máximo sustentable), y se obtuvieron los siguientes resultados (Tablas 4.2 a y b). Tabla 4.2 Rendimiento máximo sostenible y esfuerzo óptimo de las dife- rentes fl otas pesqueras venezolanas Flota Rendimiento máximo sostenible en toneladas métricas Esfuerzo óptimo en número de embarcaciones Arrastre 38.447,734 573,24 Pargo-Mero 95.311,66 1436,68 Artesanal (Mar) 229.219,290 9389,42 *incluye la pesca sardinera(a) Flota Rendimiento máximo sostenible en toneladas métricas Esfuerzo óptimo en número de cercos Sardinera 80.629,43 673 2.- EL MODELO LOGÍSTICO Por otro lado, para corroborar los datos obtenidos para la pesquería de la sardina se aplicó otro método basado en la co- secha máxima sustentable de una población bajo explotación. Este modelo se construye utilizando los datos poblacionales y biológicos de la población explotada y el dato de su biomasa total. En el caso de la sardina, debido a la gran cantidad de tra- bajos realizados sobre esta especie, todos estos parámetros se conocen con bastante exactitud (Guzmán et al., 1998; Guzmán y Gómez, 2000). Longitud máxima alcanzada por la especie L = 266 mm de 1) longitud total Fecundidad entre 9.000 y 40.000 huevos2) 57 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA Biomasa 800.000 a 1000.000 de toneladas métricas3) Edad límite 10,2 años4) K = 1,26 año 5) -1 Mortalidad natural 0,36) Mortalidad por pesca 0,37) Tasa intrínseca de crecimiento 0,48) Para el cálculo de la cosecha máxima sostenible, se utiliza- ron los valores anteriores reportados para la sardina y se usó la ecuación logística según la siguiente expresión: Cmax = T* B/4 Donde: Cmax: es la cosecha máxima sostenible T: es la tasa intrínseca de crecimiento B: es la biomasa Cmax= 0.4 * 1000000/4 Cmax=100000 TM Se obtiene un estimado de 100.000 toneladas métricas. Es- tos valores están cercanos a los reportados por Guzmán et al. (1998) de 100.000 a 120.000 TM. Estos estimados indican que la producción máxima sosteni- ble para la pesca artesanal en Venezuela está alrededor de las 300.000 TM, de las cuales un tercio se corresponde con las cap- turas de la sardina, principal renglón pesquero del país. 59 CAPÍTULO V PROBLEMÁTICA DEL SECTOR PESQUERO La actividad pesquera tiene en la actualidad múltiples pro- blemas muy particulares, algunos de los cuales subsisten desde hace muchos años y pueden considerarse estructurales; mien- tras que otros se asocian con las diferentes coyunturas econó- micas, políticas y sociales. Ahora bien, esta clasifi cación es arti- fi cial ya que muchas de estas situaciones aunque las tratemos en categorías distintas, están relacionadas entre sí y su solución debe abordarse de manera integral para implantar soluciones que puedan ser exitosas. 1.-PROBLEMAS ESTRUCTURALES Situaciones socioeconómicas1.1 La pesca en Venezuela ha tenido en el último medio siglo un desempeño altamente positivo en comparación con muchas otras actividades económicas productivas del país. A pesar de esta situación, existe la incontrovertible realidad de que los pes- cadores artesanales en la gran mayoría pertenecen a los estra- tos más bajos de la población e impera en el sector un factor de pobreza casi constante. Las causas de esta contradicción tienen varios orígenes que van desde lo netamente histórico-cultural hasta lo económico-ideológico. En el primer caso, las costumbres arraigadas durante siglos, que tienen parte de su fuente en las civilizaciones originarias y en los mecanismos de explotación medieval que trajeron los colonos europeos, han conformado una idiosincrasia particular que puede defi nirse por: La baja autoestima del pescador y el escaso aprecio de la pes-a. ca artesanal como ofi cio. El apego a costumbres y modos de producción anticuados b. que hacen la actividad poco rentable. Los bajos niveles de conciencia organizativa, que aumentan c. 60 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA la vulnerabilidad del individuo ante los entes explotadores que participan en la cadena de comercialización. La condición casi estrictamente rural de la actividad limita d. el acceso a bienes y servicios de cotidiano uso en la sociedad moderna. La dependencia de insumos importados que se encarecen con e. las altas tasas de devaluación. El alto consumo de bebidas alcohólicas por parte de los pes-f. cadores. La escasa importancia que los factores políticos dan tradicio-g. nalmente al sector, sin implementar efectivas estrategias de estímulo y apoyo sufi cientes. Situaciones relativas al recurso pesquero1.2 En relación con los problemas intrínsecos del recurso pes- quero podemos mencionar: poca predictibilidad de la actividad, caída de las poblaciones por factores físico-ambientales o bioló- gicos, sobreexplotación de los recursos, pescacon artes y mé- todos inadecuados (pesca de arrastre, jalapa tierra, pesca con luces, entre otros). 2.-PROBLEMAS COYUNTURALES En cuanto a los problemas coyunturales que afectan al sec- tor pesquero tenemos la delincuencia, las regulaciones guber- namentales de precios, los permisos, las vedas y la situación socioeconómica del pescador. En este último punto es impor- tante detallar una serie de problemas que determinan la baja autoestima del pescador y el escaso aprecio por la actividad. La pesca es de por sí una actividad ruda que exige mucho es- fuerzo físico en condiciones desfavorables, largas jornadas con- tinuas de trabajo, sin descansos, actividad propensa a acciden- tes, que requiere frecuentemente utilizar la fuerza física al ex- tremo (carga de grandes pesos o por tiempos prolongados). Esto causa un acelerado desgaste físico, envejecimiento prematuro, 61 CAPÍTULO V: PROBLEMÁTICA DEL SECTOR PESQUERO incapacitación por accidentes y carencia del pescador artesanal de protección o seguridad social que le permita disfrutar de un ingreso en su vejez o cuando está incapacitado. Por otra parte, es un trabajo de tiempo completo porque cuando no se está en las largas y agotadoras jornadas de pesca, se trabaja en tierra reparando u organizando los implementos de pesca o haciendo el mantenimiento frecuente que requiere la embarcación. Esto impide que el pescador pueda estudiar y trabajar a la vez para así obtener una profesión que le permita alcanzar mejores oportunidades que fortalezcan el sector pes- quero. Por otra parte, los pescadores empiezan muy jóvenes como consecuencia del bajo rendimiento académico y la deserción es- colar, ya que en las comunidades pesqueras los niños en esta situación son tempranamente reclutados en la pesca como ayu- dantes de sus familiares, con el fi n de disciplinar al “muchacho” y evitar las consecuencias del ocio y las malas costumbres. De esta forma y casi por tradición oral, los conocimientos son tras- pasados de una generación a otra, sin que se propicien situa- ciones que generen la práctica de habilidades de lectoescritura y cognitivas que faciliten la reinserción en el sistema educativo. Todos estos factores hacen que la actividad del pescador sea poco atractiva para los jóvenes. 3.- ARTES DE PESCA DEVASTADORAS 3.1 Los jalapa tierra Existen en la actualidad algunos artes de pesca que causan gran daño a los ecosistemas marinos y a las poblaciones de pe- ces. Apartando la pesca de arrastre que trataremos posterior- mente, podemos mencionar entre las artes y prácticas más da- ñinas: los jalapa tierra o chinchorros de playa de gran longitud (de hasta 1 Km.), que son arrastrados por dos o más embarca- ciones hacia la orilla, arrasando con todo lo que hay en el fondo, y adicionalmente usan redes con apertura de malla muy peque- ña que capturan gran cantidad de especies pequeñas o juveniles 62 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA que son descartadas (Fig. 5.1) y dejadas en la playa donde se descomponen y generan contaminación. Figura 5.1: Especies pequeñas o juveniles que son capturadas y desechadas Pesca con luces1.2 Otro modo de pesca muy dañino es la pesca con luces, que se hace utilizando faros de gran potencia que atraen a los peces hacia la superfi cie, donde son atrapados con gran facilidad. A pesar de que la utilización de luces por los pescadores está regu- lada, las normas no se cumplen y se utilizan faros con potencias prohibidas. Pesca con redes de nylon1.3 Por último, es importante mencionar la pesca con mallas de trasmallo hechas de nylon fi no (Fig. 5.2) en las que se enreda cualquier tipo de animal incluyendo tortugas, delfi nes y otras especies protegidas. Figura 5.2: Redes de nylon fi no 63 CAPÍTULO V: PROBLEMÁTICA DEL SECTOR PESQUERO La pesca de arrastre1.4 El carácter nocivo y devastador de la pesca de arrastre ha sido ampliamente discutido desde hace más de 30 años. Este arte genera algunos efectos dañinos reconocidos, entre los cua- les están: la enorme cantidad de capturas incidentales mayori- tariamente juveniles de muchas especies comerciales que son descartadas sin ningún tipo de aprovechamiento y que a nivel mundial se ha calculado alcanzan las 500.000 toneladas. La devastación que causa en los ecosistemas bentónicos y los inconvenientes y daños que causan a los pescadores artesana- les destrozando sus artes de pesca y ahuyentando los peces de la costa son algunos de estos efectos más reconocidos. Por otra parte, lo exiguo de sus capturas, apenas alcanza en Venezuela unas 40.000 TM (cerca del 10% de la producción nacional), que son en su mayoría dedicadas al mercado de la exportación. Sabiamente, el estado venezolano en el mes de marzo del año 2008 aprobó una modifi cación a la Ley de Pesca que prohíbe to- talmente, desde marzo el año 2009, este tipo de actividad y hace su tratamiento como problema un asunto más para la historia que para la gestión del recurso pesquero. Sin embargo, es nece- sario establecer planes para propiciar y evaluar la recuperación de los ecosistemas marinos y poblaciones de peces e invertebra- dos afectados. Desafortunadamente, estos estudios necesitan como insumo datos precisos de estadísticas pesqueras para ser comparados con la situación posterior a la prohibición a la pesca de arrastre. 4.- INVESTIGACIÓN Y ESTADÍSTICAS El elemento primordial para la elaboración de políticas y pla- nes de gestión pesqueros adecuados radica en poseer la infor- mación necesaria sobre la evaluación del recurso, su evolución histórica, sus relaciones con el medio ambiente y la actividad pesquera. Sin embargo, el país cuenta con muy pocos investiga- dores, centros de investigación y organismos ofi ciales dedicados a estas labores. 64 INTRODUCCIÓN AL CONOCIMIENTO DE LAS PESQUERÍAS MARINAS EN VENEZUELA Si tomamos en cuenta que Venezuela representa el país con la producción pesquera más alta del Caribe y uno de los más importantes de Sudamérica. Especial atención debe darse a las estadísticas del sector, cuya exactitud y regularidad son muy cuestionadas. A manera de ejemplo, podemos citar el caso de la información sobre la captura total en el año 1990 que repor- ta valores diferentes para 3 instituciones: la Ofi cina Central de Estadística e Informática con 337913 TM, el Servicio Autónomo de Recursos Pesqueros y Acuícola con 301131TM y la FAO con 319995 TM (OCEI, 1990; MAC SARPA, 1996; FAO, 2009). Otro caso aun más grave lo constituyen las estadísticas repor- tadas en los atlas del estado Nueva Esparta, según los cuales para un mismo año (1990) las cifras reportadas son de 42.471 TM y de 26.000,028 TM lo que representa una diferencia de casi el 100%. La situación se ha hecho más grave en los últimos años, ya que hasta la década pasada (los 90) los organismos ofi ciales del sector publicaban un anuario con las estadísticas con cierta regularidad, pero desde 1996 este anuario dejó de ser editado y existe un inmenso vacío de información que va a limitar mucho el entendimiento de la evolución del sector y el recurso pesquero durante este período. 5.- PÉRDIDA DEL PATRIMONIO CULTURAL Este problema lo dejamos de último, ya que en nuestra opi- nión la amenaza más grave que sufre el sector pesquero en la actualidad es la progresiva pérdida de la enorme riqueza histó- rica y cultural que tiene esta actividad para nuestro país, por el insufi ciente relevo generacional de los pescadores que ocurre debido al poco incentivo social, económico y cultural que actual- mente ofrece la actividad y el escaso interés que demuestran las nuevas generaciones en incorporarse al desarrollo de esta milenaria actividad. En Venezuela, la relevancia del patrimonio cultural pesque- ro se potencia ya que juega un papel de privilegio en nuestra identidad como nación, porque los primeros pobladores de estas 65 CAPÍTULO V: PROBLEMÁTICA DEL SECTOR PESQUERO tierras se asentaron hace unos 12.000 años en las costas
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