Liderazgo y Caridad

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El liderazgo 
Antes de comenzar…
Te pido que hagamos un ejercicio para calmarnos, serenarnos y así podamos realizar una provechosa actividad
Siéntate bien derecho/a en tu silla
Cierra tus ojos y toma aire por la nariz lentamente, trata de sentirlo. Mantenlo 3 segundos en tus pulmones y lentamente expúlsalo por tu boca. Repite este ejercicio por 3 veces.
Si aún no estás en calma, vuelve a repetir este ejercicio. 
 
Clase 3
Atención!! debes realizar esta clase hasta la primera semana de junio, ya que el día 8 tendrás a disposición en la plataforma de la Escuela, una evaluación formativa de esta unidad.
	
Objetivo de la clase: 
Identificar elementos de liderazgo en los santos fundadores
En esta clase te voy a presentar a la madre Rossello y al padre Blas Cañas quienes ejercieron un liderazgo muy importante en la sociedad donde vivieron.
SANTA MARÍA JOSEFA ROSSELLO, más conocida como la madre del corazón grande, vivió en Italia, nació el 27 de mayo de 1811 en una ciudad muy hermosa llamada Savona, muy turística y muy conocida por las artesanías en cerámica confeccionadas por sus habitantes en esa época y hasta el día de hoy. Benita, como la llamaban sus familiares, era una niña muy inquieta por procurar el bienestar para todos. Siempre estaba atenta a las necesidades de los otros. Si llamaban la puerta, ella corría, porque sabía que eran personas que pedían alimentos, ropa o simplemente compañía, consuelo y cariño como sus amigas o vecinos conocidos. Ella siempre estaba inventando maneras de ayudar. Veía una necesidad y buscaba quien la pudiera orientar para hacer lo que le dictaba su corazón solidario. Sabía que no podía actuar sola, entonces buscaba amigas que pensaran como ella y mientras corrían por la arena de la playa, soñaban cómo y qué ser cuando grandes… sus corazones de niñas de hinchaban de gozo al pensarse ya como grandes y hacer el bien a todos. Desde pequeña Benita, guardaba ese anhelo de tener los brazos tan largos como para hacer el bien a todos” (Palabras de la Madre Rossello) Benita, era también una gran catequista y pequeña maestra, pues después de la escuela, se reunía con sus compañeros y a los que no habían comprendido las enseñanzas de las clases del día, ella, se ofrecía para explicarles las tareas escolares y las enseñanzas de catequesis. Nunca actuaba sola, sus amigas eran sus colaboradoras y le ayudaban a encontrar mejores estrategias para lograr sus metas ante las distintas necesidades que se presentaban, en la escuela y en sus hogares.
Ya de adulta, decidió ser religiosa y se consagró a Dios, pues pensaba que de esa manera podría ser una gran colaboradora de Dios. Y así fue, su vida entregada al buscar el bien del prójimo se extendió por varios países, llegando su caridad a beneficiar en el rescate de las niñas huérfanas de África que llegaban en barcos junto a sus padres, durante el tiempo de la esclavitud. Estos niños eran separados de sus padres y los colaboradores de la madre Rossello, las encontraban muy necesitadas de todo, especialmente de cariño maternal. También la Madre Rossello, con su gran corazón envió religiosas misioneras hacia Argentina cuando hubo una gran peste amarilla. Las religiosas, cuidaban a los enfermos en sus casas, pues los hospitales no daban abasto.
Hoy en día las religiosas que ella fue animando para tener su mismo espíritu de misericordia, están dispersas por todos los continentes, dando esperanza y consuelo a través de distintas obras de bien: misiones en lugares apartados y con grandes necesidades, colegios, hospitales, hogares de ancianos, hogares de niños...hacia todas las familias iba dirigida su ayuda y apoyo incondicional. El sueño de la madre del corazón grande, fue dando frutos a través de los años: donde hayan colaboradores del espíritu de misericordia que ella recibió de Dios y que compartió con sus hermanas religiosas, habrá siempre ayuda divina para responder a las necesidades físicas y espirituales de todos los hijos de Dios.
Tuvo muchos lemas, pero su favorito fue: “corazón a Dios y manos al trabajo”
En Santiago de Chile nace Blas Cañas, quien desde muy pequeño se sintió llamado por el Señor a ser sacerdote y a liderar una gran obra de amor, lo cual fue descubriendo poco a poco conforme iba creciendo. Él no sabía lo que Dios le pediría más adelante: ayudar a tantas mujeres que a mediados del 1800 y por diversas circunstancias de la vida, debían criar en soledad a sus hijos. Algunas sin hogar, otras sin trabajo, otras lejos de sus familias...pero todas en extrema pobreza y abandono.
La situación en Chile, como en toda Latinoamérica, era muy complicada pues se gestaba la independencia de España para consolidarse como nación. La indiferencia para con los más desprotegidos se hacía cada vez más evidente. En este contexto social aparece este joven sacerdote chileno que dispuesto a escuchar el clamor de los más pobres, se apresura a dar respuesta concreta y eficaz a lo que Jesús disfrazado de pobre le solicitaba. Una tarde lluviosa de invierno se presentó una madre con sus hijos: “...padre si usted no me ayuda no sé qué haré con mis hijos…!! El rostro de esos pequeños y la voz atormentada de aquella madre, enterneció el corazón del valiente sacerdote que sorprendido creyó estar seguro de haber escuchando la voz de Dios que lo invitaba a dedicar su vida en beneficio de estas y muchas más familias.
Nuestro padre Blas, reúne a sus colaboradores, observan la dificultad, las posibilidades que tienen, el entorno, planean estrategias, buscan recursos humanos y económicos, indagan, piden consejos…pero por sobre todo oran al Padre Dios para que provea lo necesario. 
Pronto comenzaba la gran obra del Redentor como la llamaron al comienzo, luego como funda una congregación de religiosas, la llaman Casa de María.
La nueva obra habría sus puertas para acoger a las madres brindándoles formación escolar y profesional ya que se les enseñaban distintos oficios que les permitía contar con el sustento para sus familias. Sus hijos recibían escolarización y educación en valores cristianos.
El padre Blas Cañas tuvo un lema: “Virtud y trabajo”
NUESTROS SANTOS FUNDADORES: VIDAS EJEMPLARES, PRESENCIAS REALES
PARA ESCUCHAR:
https://youtu.be/K0cvhYTJFJY
NUESTROS SANTOS FUNDADORES NO SE CONOCIERON EN VIDA, PERO ESCUCHARON LA VOZ DE DIOS EN LOS MÁS NECESITADOS EN LA MISMA ÉPOCA, DISTINTOS CONTINENTES, DISTINTAS CULTURAS. SUS CORAZONES ESTABAN VINCULADOS AL CORAZÓN DE DIOS QUE ES PURA MISERICORDIA
Luego de haber leído y conocido un poco más de la historia de liderazgo en nuestros santos fundadores, te invito a responder las siguientes preguntas:
¿Cómo descubrió la madre Rossello que era una líder? ¿Cuándo lo supo?
¿Fueron las acciones que realizó o las palabras que ella decía, por las que se la considera una gran santa?
Escribe acciones propias de un/a líder que aparecen en su vida
¿Qué importancia tuvieron sus amigas (colaboradoras) cuando le interesaba involucrarse con alguna necesidad que veía en los demás?
Escribe tu opinión sobre los líderes positivos
Escribe tu opinión sobre los líderes negativos.
Dibújate liderando una acción en favor de los demás.
¡¡BUEN TRABAJO!!
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