Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
- 185 - Una mirada sobre las estrategias de lucha del Movimiento Campesino de Santiago del Estero (MOCASE) Laura Celis1 Ensayo El presente artículo busca analizar las estrategias de lucha que despliega el Movimiento Campesino de Santiago del Estero (MOCASE) ante los inminentes confl ictos por la posesión de la tierra, que si bien pueden observarse a nivel nacional no deja de ser un problema signifi cativo en la provincia de Santiago del Estero. Es por ello que se procederá a realizar una aproximación al concepto de estrategia de lucha del mencionado movimiento, para luego describir brevemente algunas de las estrategias utilizadas por el mismo y el modo en que dichas estrategias de lucha se relacionan con la comunidad campesina, con la justicia local y con el sistema político, a fi n de arribar a una serie de refl exiones y realizar un aporte relevante de información para la comunidad científi ca en general. Aproximación al concepto de estrategia de lucha del Mocase2 Es a partir de la organización de los campesinos en torno al MOCASE, que los desalojos dejaron de ser una situación oculta, poniéndose en evidencia a través de un conjunto de acciones reivindicativas o repertorio de acciones colectivas de lucha y confrontación (De Dios, 2003:32), es decir, que el confl icto se hizo manifi esto. Las acciones colectivas se fundan en situaciones que colocan a los sujetos en espacios de la negociación política. Según Tarrow (1997:148) la posibilidad de que una acción colectiva se lleve a cabo requiere que alguien pueda tomar ventaja de la oportunidad política, desarrollar 1 Tesista de la carrera de Licenciatura en Sociología con Orientación Rural. Investigadora del Centro de Estudios de Demografía y Población, Universidad Nacional de Santiago del Estero. E-mail: laucego@hotmail.com 2 El presente artículo hace referencia a las estrategias de lucha del Mocase Histórico, esta aclaración se debe a que existen otros movimientos que se reconocen como Mocase Vía Campesina y Mocase Los Juríes. Cifra 5 - 186 - organizaciones de algún tipo e interpretar el agravio y movilizar consenso alrededor de él. En otras palabras, se requiere de “esfuerzos estratégicos conscientes realizados por grupos de personas en orden de forjar formas compartidas de considerar el mundo y así mismas que legitimen y muevan a la acción colectiva” (McAdam, McCarthy y Zald, 1999:27). Como sostienen Gamson y Meyer (1999:401) cuando no se reconoce la oportunidad es como si no existiera. La oportunidad política implica la percepción de una posibilidad de cambio, es decir, tiene un componente que es, básicamente, un “constructo” social. En cuanto a estas acciones colectivas, algunas no se despliegan solamente como una forma de resistencia o de reacción o como una forma de ‘hacer algo’ ante las amenazas a la dignidad o a la vida, sino que, en algunas ocasiones, pueden obedecer a una estrategia de lucha. Según De Dios (2002: 22) se entiende por estrategia de lucha al renovado despliegue de acciones colectivas, que -a juicio de los propios protagonistas y en especial de los dirigentes del movimiento social- han demostrado ser efi caces para alcanzar objetivos, aunque sea parcialmente, en situaciones anteriores. Por lo tanto, es importante verifi car si existe una secuencia de acciones que se repiten en el caso particular del Mocase, y comprobar su resultado en orden a la satisfacción total o parcial de las demandas planteadas. A su vez, no sólo se trata de acciones confrontativas, sino de los modos o estilos de negociación que se van adoptando respecto de los posibles adversarios y en particular respecto del poder político. Estrategias de lucha del Mocase Las Estrategias de lucha del Mocase ante los confl ictos de tierra son: La organización: la misma constituye un recurso para poder hacer frente en forma conjunta a la resistencia ante los posibles desalojos. Las familias campesinas se reúnen en un grupo de diez familias o más, constituyen lo que se conoce como organización de base y, generalmente, representan a una determinada comunidad; allí comparten sus problemáticas, sus preocupaciones, pero también encuentran una forma de contención ante problemas que sólo los que viven en el campo conocen muy de cerca. Los campesinos necesitaron empezar a organizarse a fi n de poder articular con las organizaciones de otras localidades, se reúnen a través de sus delegados generalmente en una organización más amplia, conocida como Central, allí también se eligen los representantes ante el Movimiento Campesino de Santiago del Estero. Estar organizados les permite priorizar cuáles son su principales problemáticas, ser receptores en forma conjunta de algunos proyectos, de capacitaciones, de distintos tipos de ayuda que puedan Laura Celis - 187 - necesitar. Estar organizados es un requisito necesario para poder ejercer su autodefensa ante quienes pretendan avasallar sus derechos. Mocase requiere que los campesinos se encuentren organizados a fi n de que el acompañamiento y el acceso de la información se torne menos compleja. La capacitación: lo que se busca con esto es la toma de conciencia del campesino acerca de la existencia de sus derechos. Existen diferentes tipos de capacitaciones en terreno, donde hay un técnico que capacita al campesino acerca de cuáles son los derechos que le asisten (generalmente los técnicos en esta temática son abogados o gente preparada en el tema); otra de las capacitaciones es a través de las radios, conocidas como comunitarias o de base, que están dispuestas a dar lugar para que se transmitan los radioteatros para que la gente tome conciencia de que se pueden lograr cosas con el conocimiento de los derechos; otro tipo de capacitación es a través de cartillas (publicadas por Derechos Humanos, por el Programa Social Agropecuario –PSA-) que son bien completas, y a través de las cuales los campesinos aprendieron a trabajar sobre el conocimiento de sus derechos. La Comunicación: existen radios bases que tienen un alcance de 50 a 60 km, las que pasan radioteatros sobre el Mocase, también existen estrategias de terreno que son las capacitaciones a delegados para que trabajen en grupos, las identifi caciones con carteles de cada lote; esto ayuda a los campesinos a desarrollar su ánimo de sentirse dueños, de demostrarle a cualquiera que el campesino pertenece a ese lugar y que tiene derecho a estar allí. También se encuentran las carpas de identifi cación (como por ejemplo la Carpa del Mocase, que se encontraba en la Feria del aniversario de Santiago, en el Parque Oeste), que sirven para dar a conocer a la gente de la ciudad las actividades del Mocase y para que se conozca lo que los campesinos producen con materiales de la propia naturaleza; todo esto sirve también para demostrar que los campesinos pueden ocupar espacios, como en el caso de la Feria lo hace cualquier otro artesano. Este último punto, hace referencia a un cambio en una de las estrategias, antes el los campesinos pertenecientes al movimiento por una cuestión de distancia no participaban o bien no lo toman en cuenta, pero ahora se ve la necesidad desde el propio Mocase de impulsar este tipo de difusión, para que las diferentes comunidades puedan dar a conocer a la sociedad su propia manera de vivir gracias a los productos del monte. La autodefensa: surge como estrategia de lucha para evitar los desalojos. El ejercicio del derecho de autodefensa lo empieza la comunidad que se ve afectada y es acompañada generalmente por otras comunidades y Ong, pertenecientes al Mocase; armar carpas de resistencia es una de las formas de ejercerlo ante la clara amenaza de que el grupo que trabaja para los empresarios continúen con la colocación de de alambres, varillas, postes, Cifra 5 Una mirada sobre las estrategias de lucha del... - 188 - cierre de caminos vecinales, robo de ganado mayor y menor, presencia de guardias armados, que intimidan a los vecinosen los lotes en confl icto. Mocase acompaña la resistencia y el ejercicio del derecho legítimo de autodefensa en los territorios comunales, a fi n de evitar los desmontes legales o ilegales por parte de foráneos privados, dependiendo de esto el no desalojo de los campesinos que habitan el lugar en confl icto. La justicia: Mocase, hace alrededor de cinco años atrás, contaba con la presencia de un profesional que se encargaba del asesoramiento jurídico a las comunidades que se encontraban en confl icto por el tema tierras, sin embargo en la actualidad Mocase no cuenta con un equipo propio de abogados, no obstante las comunidades que pertenecen al mencionado movimiento contratan a un profesional para que los asesore legalmente. La creación del Comité de Emergencia y el Registro de Poseedores fueron herramientas logradas por el Mocase en acuerdo con el Gobierno Provincial, las comunidades pertenecientes al Mocase recurren a dichos organismos pero los mismos no son considerados como una solución al problema de los confl ictos de tierra. Mocase impulsa a sus comunidades campesinas a trabajar para realizar los planos de sus posesiones a fi n de empoderar a los campesinos. En cuanto a los juicios de prescripción veinteañal, en la mayoría de los casos las familias campesinas que pudieron realizar dicho juicio y que lograron ‘ganarlo’, en realidad, se quedaron con muchas menos hectáreas de las que le correspondían. Con lo cual Mocase procura utilizar de la justicia civil todas las herramientas con las que pueda obtener, en determinados casos, la titularidad de las tierras a nombre de sus verdaderos poseedores, las familias campesinas; en otros casos busca, a través de interdictos de reivindicación, la restitución de las tierras a las familias que han sido desalojadas, entre otras y de la justicia penal; utiliza herramientas como la denuncia por usurpación contra los empresarios que la ejercen, siendo en muchos casos una contradenuncia, en otro casos se los denuncia por agresiones, portación de armas y demás. La política: En un principio, Mocase estuvo apartado del sector político por disentir sobre la forma de construcción política. Desde el año 2008, se le presentó al Movimiento una oportunidad política a través de la cual pudieron visualizar un espacio que debía ser ganado para su propia construcción política, para poder empezar a luchar ante los confl ictos por el tema tierra desde adentro del propio Estado. Con este pensamiento es que se empiezan a postular para las elecciones de Comisionado Municipal, Diputados, entre otros. Mocase apoya las candidaturas de los campesinos que saben que están comprometidos con sus propias raíces, esta selección de quienes pueden llegar a ser los candidatos es muy cuidadosa, debido a que se trata de evitar ante todo la cooptación política por parte del Gobierno de turno; se trata de evitar el uso de la política como una estrategia para Laura Celis - 189 - un solo momento. El movimiento sabe que es un proceso riesgoso, pero también sabe que la política y las instituciones pueden ser utilizadas como herramientas para lograr una causa, que en este caso es ocupar espacios que han sido ganados, a fi n de poder luchar por el cambio de las políticas públicas y leyes que entorpecen un principio de solución de los confl ictos por la posesión de la tierra. A partir de lo antes dicho, las estrategias de lucha del Movimiento Campesino de Santiago del Estero estarían determinadas por la manera en que el mismo se relaciona con las comunidades campesinas, con la justicia y con el sistema político de la provincia. Relación del Mocase con las Comunidades Campesinas de Santiago del Estero En cuanto a la relación de los campesinos con la estructura organizativa del Mocase, la misma podría darse en el ámbito de las organizaciones locales o de primer grado, que pueden ser comisiones de base o zonales y/o pueden ser cooperativas locales; y en el ámbito de la ‘Comisión Central’ o simplemente ‘Central’ que está constituida por representantes de las organizaciones locales. En muchos casos un/a campesino/a puede ser miembro de la cooperativa de la zona y al mismo tiempo participar en la comisión de base de su paraje, que a su vez puede enviar sus representantes a la Central. En el caso de las organizaciones de base, las mismas cuentan con un delegado representante, cuyo vínculo con sus representados es muy fuertes debido a que el mismo pertenece a esa comunidad; además es quien los representará en la Comisión Central y también es quien -en la mayoría de las veces- transmite la información de lo que sucede en la Central. Esta estructura organizativa del Mocase hace un tanto más fácil el acceso a la información de los problemas que se suceden dentro de cada comunidad, teniendo en cuenta el gran número de ellas. Relación del Mocase con la justicia de Santiago del Estero Con respecto a la relación del Mocase con la Justicia de Santiago del Estero el movimiento campesino y también los movimientos del resto del país son portadores de una idea de justicia, “que supone pasar del estado de víctima al estado de alguien que está de pie” Badiou (2004: 4). “Es decir Cifra 5 Una mirada sobre las estrategias de lucha del... - 190 - pasar, en el caso del Mocase, de una situación de desalojos silenciosos a una postura que declara igualdad en tanto principio” (Barbett a, 2009:190). Por lo tanto el concepto de justicia presente en este movimiento no puede reducirse a una idea estática, subjetiva y abstracta, sino que se materializa a través de luchas reales por oportunidades iguales en el proceso de producción y distribución de bienes. La inscripción en el campo jurídico (Bourdieu, 1987:807) del confl icto por la tenencia legal de la tierra se presenta como el espacio donde campesinos y empresarios se someten a un poder exterior a ellos, que se les impone como poder judicial. Éste determina lo que es justo (y por lo tanto lo que es injusto), reglamentando así los confl ictos y los litigios, estableciendo la medida misma según la cual cada parte sólo toma lo que le corresponde (Rancière, 1996:17). En este contexto el derecho se constituye en el lenguaje común a partir del cual se funda el litigio o el desacuerdo. Para comprender en qué consiste el asesoramiento jurídico por parte del Mocase hacia los campesinos se hará una distinción entre propiedad, posesión y tenencia debido a que existen distintas formas de ocupar una tierra o un territorio. El propietario tiene escritura sobre la parcela y el derecho de propiedad es el mejor de los derechos que se puede tener sobre una cosa. Sin embargo, la propiedad no es el único derecho que es protegido por la ley argentina. El mismo Código Civil que protege a la propiedad también protege los derechos que nacen de la posesión. La posesión se da cuando una persona tiene un terreno bajo su poder, con la intención de ser su propietario. Es decir que deben darse esas dos condiciones: por un lado ocupar y hacer un uso efectivo de ese terreno y por otro lado el comportarse como si uno fuera realmente el dueño, “con ánimo de dueño”, y sin reconocer que otra persona es dueña del terreno. La diferencia entonces entre la propiedad y la posesión es que en la propiedad, el dueño tiene amplios poderes sobre la cosa y tiene los papeles que lo justifi can, tiene los títulos que dicen que es dueño. En cambio, en la posesión, el poseedor se comporta como dueño y hace actos posesorios, pero no tiene un título de propiedad sobre ella. Tanto propietario como poseedor pueden tener ánimo de dueño si se comportan como si fueran dueños. Finalmente se dice que hay tenencia cuando alguien tiene una cosa, pero con la obligación de devolverla. Son los casos de alquiler, arriendo o préstamo. El tenedor no tiene ánimo de dueño. Por lo cual no es poseedor. (arts. 2.351, 2.352 y 2.461 del Código Civil) En resumen, el propietario no es el único que tiene derechos sobre la tierra.Una familia campesina puede no tener los títulos, pero si es poseedor la ley lo protege y le da la posibilidad de llegar a ser propietario. Por su parte, así como la ley da derechos sobre la tierra al propietario, Laura Celis - 191 - también le da derechos al poseedor, que deben ser conocidos para poder hacerlos respetar. Un primer derecho es el de autodefensa, que se esgrime en el caso de que alguien intente quitarle la tierra al poseedor por la fuerza. En este caso, el poseedor puede defenderse ante la agresión cuando considera que la justicia o la policía llegarían demasiado tarde, y con una fuerza equivalente, es decir sufi ciente como para impedir que al poseedor le quiten el terreno. Un segundo derecho es el de acceder a la Escritura de propiedad del inmueble mediante la sustanciación de un juicio de prescripción veinteñal, que llegue a una sentencia declarativa de dominio a su favor. De lo dicho se puede concluir que el asesoramiento jurídico que demandan los poseedores debería contemplar su defensa, tanto ante la justicia penal como ante la justicia civil. El Mocase, en un principio, utilizó como estrategia de lucha la capacitación, considerada como una herramienta para la autodefensa y el conocimiento de sus derechos por parte de los campesinos; con este primer paso se pudo accionar ante la justicia provincial juicios de prescripción veinteañal o interdictos para retener la posesión. No obstante, la relación del Mocase con la justicia santiagueña es de tensión debido a que, por un lado, el movimiento busca la mejor solución para el campesino en tanto que, por el otro, se encuentran los jueces tratando de determinar qué es lo justo, sin tener en cuenta el modo de vida del campesino mismo y benefi ciando directamente a los empresarios; se trata de una lucha contra un modelo de desarrollo preconcebido por los jueces, lo cual puede ser claramente observado tanto en el fuero civil como en el penal. Relación del Mocase con el sistema político de Santiago del Estero: En cuanto a la relación del Mocase con el sistema político, es importante contemplar el concepto de autonomía que, según Castoriadis (1993:90), implica la posibilidad de darse uno mismo sus leyes o, más precisamente, del actuar refl exivo de una razón que se crea en un movimiento sin fi n, de una manera a la vez individual y social. En el caso del Mocase, la autonomía se expresa a través de un determinado sistema de reglas internas de construcción de liderazgos propios, y de una ideología que no reporta necesariamente a los Partidos Políticos o grupos de interés existentes en la provincia. La aparición del Mocase puso en cuestión las prácticas políticas hegemónicas del régimen juarista, al mismo tiempo que abrió un debate en cuanto al sujeto campesino y al sentido de sus prácticas defi nidas por ellos mismos. De hecho, provocó una tensión y una disputa con una forma de construcción política basada en las prácticas clientelares. En el Mocase, Cifra 5 Una mirada sobre las estrategias de lucha del... - 192 - en cambio, se procuró alentar las prácticas participativas, la discusión horizontal entre los mismos campesinos y la elección democrática de los líderes, de tal manera que de esa metodología se derivaran las posibles soluciones a sus problemas. Con la Intervención Federal, en el 2004, y el posterior gobierno de Gerardo Zamora se produjo un cambio en el contexto político provincial, que motivó un reposicionamiento de los líderes campesinos, se crearon el “Registro de Poseedores”3 y el “Comité de Emergencia”4. Si bien, todavía persisten de una forma u otras situaciones que marcan una continuidad con el período juarista, el gobierno de Zamora ha implementado una serie de medidas conducentes al logro de una solución jurídica a la problemática de la tierra que describimos antes. Este nuevo panorama brindó cierta oportunidad política para el movimiento que está en pleno proceso de reconstrucción del vínculo que mantenía con el aparato de gobierno y con el sistema político provincial. Por un lado, una parte de los dirigentes del Mocase se han planteado el desafío de participar de la disputa democrática con candidatos propios, en una alianza con otros sectores sociales en un nuevo espacio político llamado ‘Compromiso Social’, de tal suerte que en las elecciones del 2008 han sido elegidos varios Comisionados Municipales pertenecientes al sector, y una Diputada Provincial de origen campesino y con una larga trayectoria de participación en su organización de base o zonal. Por otro lado, el Mocase -asumiendo su condición de movimiento social- sigue intentando colocar en la agenda política provincial los temas de su interés, pero al mismo tiempo se plantea lograr una mayor participación en la defi nición y el diseño de aquellas medidas de gobierno, que serían conducentes a una solución defi nitiva al problema de tierras. Refl exiones El Mocase desde sus orígenes, allá por el año 1989, tuvo que recorrer un largo camino lleno de obstáculos, los cuales paso a paso fue sabiendo 3 Su propósito es inscribir a las familias campesinas poseedoras de tierras fi scales o privadas y aportarles un subsidio y apoyo técnico para la realización de los Planos de Levantamien- to Territorial para la Prescripción Adquisitiva Veinteañal, y para la asistencia jurídica que implica el inicio de los juicios de prescripción. 4 Su propósito es atender en forma inmediata una diversidad de situaciones confl ictivas rela- cionadas con la problemática de tierras, donde los supuestos o reales titulares de dominio avanzan con topadoras sobre las posesiones de los campesinos y estos hacen ejercicio del derecho de autodefensa; o donde se pretenden realizar trabajos de extracción forestal sin la debida autorización o el consentimiento de los poseedores; etc. Laura Celis - 193 - superar. Hubo muchos desalojos silenciosos en la historia santiagueña y, aunque hoy el silencio se convirtió en la voz y el grito de los campesinos, los desalojos no terminaron. Pero hay una lucha por parte de los campesinos, que con el paso de los años se ha ido convirtiendo en una estrategia a fi n de terminar con el avasallamiento de sus derechos. Esta lucha implica muchas cosas, entre ellas saber aprovechar las oportunidades que se le presentan a fi n de poder poner fi n, en algún momento, a los confl ictos por la posesión de la tierra. El campesinado santiagueño sabe que su lucha no terminará ‘mañana’, pero actualmente están preparados con un arma muy poderosa, que es tener el conocimiento de cuáles son sus derechos y, ante todo, saberse acompañados en estos momentos, no sólo por sus compañeros sino también por otros sectores sociales. Cierta oportunidad política que se ha abierto en los últimos años también podría favorecer un mayor acceso del movimiento al proceso de toma de decisiones públicas. Actualmente en Santiago del Estero hay campesinos que están haciendo su experiencia de gestión desde las Comisiones Municipales, como el caso de Juan Cuellar en San José de Boquerón, que expresa que “la lucha por la posesión de la tierra, y la lucha por los derechos campesinos, es una lucha por una sociedad más justa” (Cuellar, 2008:8). Incursionar en la política tiene sus riesgos, pero al formar parte de una estrategia de lucha más amplia podría generar mejores condiciones para evitar los riesgos de cooptación de un sistema político, que también tiene que transformarse en dirección a la construcción de una democracia más participativa. Con el presente artículo dejamos la posibilidad abierta a la investigación de esta nueva estrategia de lucha, que creemos advertir y que tiene sus riesgos, pero que también podría cambiar la realidad de los campesinos y de toda la sociedad santiagueña. Bibliografía Barbett a, Pablo, 2009, En los bordes de lo jurídico: Confl ictos por la tenencia legal de la tierra en Santiago del Estero, Tesis de Doctorado, Buenos Aires, Universidad de BuenosAires, mimeo. Castoriadis, Cornelius, 1993, El mundo fragmentado, Buenos Aires, Editorial Altamira. Código Civil de la República Argentina, 2010, Editorial Abeledo Perrot. Cifra 5 Una mirada sobre las estrategias de lucha del... - 194 - Cuellar, Juan, 2008, El rol de la subsecretaria y el desarrollo rural de los territorios, Ponencia, Santiago del Estero, Encuentro El Espacio para la Agricultura Familiar, Las Familias Campesinas y Las Comunidades Indígenas, 9 y 10 de octubre. De Dios, Rubén Eduardo, 2002, Régimen de tenencia y distribución de la tierra, Apuntes de la Cátedra Conceptos de Sociología Urbana y Rural, Santiago del Estero, Universidad Nacional de Santiago del Estero, Facultad de Humanidades, Ciencias Sociales y de la Salud, mimeo. -----------, 2009, Los campesinos santiagueños y su lucha por una sociedad diferente, Ponencia, Buenos Aires, Primer Congreso Nacional sobre Protesta Social, Acción Colectiva y Movimientos Sociales, 30 y 31 de marzo. Gamson, William y Meyer, David, 1999, Marcos interpretativos de la oportunidad política, en John McCarthy, Doug McAdam y Meyer N. Zald (Coord.), 1999, Movimientos sociales, perspectiva comparada: oportunidades políticas, estructuras de movilización y marcos interpretativos culturales, Madrid, Istmo, pp. 389-412. McCarthy, John, McAdam, Doug y Zald, Mayer N. (Coord.), 1999, Movimientos sociales, perspectiva comparada: oportunidades políticas, estructuras de movilización y marcos interpretativos culturales. Madrid, Istmo. Rancière, Jacques, 1996, El desacuerdo. Política y Filosofía, Buenos Aires, Ed. Nueva visión. Tarrow, Sidney, 1997, El poder en movimiento. Los movimientos sociales, la acción colectiva y la política, Madrid, Alianza Universidad. Publicaciones periódicas Badiou, Alain, 2004, La idea de Justicia, Revista Acontecimiento, Buenos Aires, nº 28, pag.1-11. Bourdieu, Pierre, 1987, The Force of Law: Toward a Sociology of the Juridical Field, The Hastings Law Journal, San Francisco, California, University of California, Hastings College of the Law, vol. 38, julio, pag.805-53. De Dios, Rubén Eduardo, 2003, Movimiento agrario y lucha social, Realidad Económica, Buenos Aires, n° 199, pag.13-34. Laura Celis
Compartir