Receta80

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PEZ ESPADA A LA SICILIANA (PV)
 
 
Ingredientes para 2 raciones
 
• 1 rodaja de emperador o pez espada de unos 400 g
• 1 berenjena de tamaño mediano
• 2 tomates maduros
• 1 rama de apio
• 1 cebolleta morada o blanca
• 1 ramita de albahaca fresca
• aceite de oliva
• sal, edulcorante, pimienta y agua
 
 
Lavar todas las verduras. Trocear la cebolleta, el apio y la berenjena en dados. Escaldar
los tomates en agua hirviendo durante 2 minutos para que resulte más fácil pelarlos.
Trocearlos finamente.
Pochar la cebolleta y el apio en una sartén con aceite. Dejar durante 2-3 minutos. Añadir
la berenjena para que se mezcle con los ingredientes y pochar todo otros 2 minutos.
Agregar el tomate troceado y remover. Sofreírlo 2-3 minutos. Salpimentar al gusto y
agregar 1 cucharadita de edulcorante, para eliminar la acidez del tomate.
Verter sobre las verduras ½ vaso de agua. Cuando rompa a hervir, bajar el fuego.
Dejarlas durante 15 minutos o hasta que se reduzca todo el líquido. Picar finamente la
albahaca fresca y espolvorearla sobre las verduras un par de minutos antes de retirarlas
del fuego.
Cortar la rodaja de emperador por la mitad y cocinarla en una sartén o plancha
antiadherente 1 minuto por cada lado. Es importante que este pescado no se seque.
Salpimentar y servir esta deliciosa guarnición de verduras.
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A Marta, la conozco, creo, de sde qu e nació. Desde qu e nació
virt ua lmente, qu ie ro decir, qu e ante s de tropezarnos andando por la
red, y a pe sar de vivir bien ce rqu ita, no sa bíamos de nu e stras
af icione s y existencias mutuas.
Como ha bla mucho de la ofe rta gastronómica de Vigo debió de
aparecérseme un día, cuando bu sca ba en Google información sobre
a lgún re stau rante de por a quí. Comencé a segu irla y un buen día,
de spués de unas cuantas conve rsacione s decidimos desvirt ua lizarnos.
Como hu bo tanta química en a que l momento de su s inicios en la red,
la ayudé y aconsejé todo lo bien qu e supe. Siendo como e s (la ve rdad
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que no e s nada difícil), mucho más a lta, de lgada y joven qu e yo, la
bauticé como Supe rnena.
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