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TEOLOGÍA WESLEYANATEOLOGÍA WESLEYANA
PARA EL AVIVAMIENTOPARA EL AVIVAMIENTO
TEOLOGÍA AL SERVICIO DEL
REINO
Dr. Guillermo Flores
 2 
 
	
 
 
 
 
 
 
Teología Wesleyana para el avivamiento 
©GuillermoFlores 
Diseño de portada: Avivamiento Global 
 
Iª edición 
 
 
Global Revival, 2023. 
 
 
Los Ángeles, CA 
Tel.: 954 888 8475 
 
Email: globalrm12@gmail.com 
 
 
Reservados todos los derechos de publicación en cualquier idioma. 
 
Ninguna parte de este libro puede ser reproducida, grabada en alguno de los 
sistemas de almacenamiento existentes o transmitida por cualquier procedimiento, 
ya sea electrónico, mecánico, reprográfico, magnético o cualquier otro, sin 
autorización previa y por escrito del autor, excepto, citas bibliográficas académicas. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 3 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Dr. Guillermo Flores 
 
 
 4 
 
 
 
 
 
 
“Prediqué a mediodía en Woodseats, y 
por la noche en Sheffield. ¡Para	mí	la	vida	
es	predicar!” (Juan Wesley) 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 5 
Comentarios a este documento 
 
En este documento están incluidos solamente los capítulos 4 y 5 de mi libro 
titulado Teología wesleyana para el avivamiento, el cual está compuesto de 13 
capítulos. En ese libro propongo dos tesis principales. La primera es que la 
teología que construyó y predicó Juan Wesley no fue un fin en sí misma, sino 
que constituyó el combustible que prendió el avivamiento metodista original o 
primitivo del siglo 18. Segundo, que la mejor manera de interpretar a Wesley 
es como predicador y, particularmente, como un predicador evangelista. Aquí 
incluyo dos capítulos que están directamente relacionados con el método 
teológico y con los métodos homiléticos o de predicación del fundador el 
metodismo. 
Hice estudios de posgrado sobre Wesleyan Studies (Estudios wesleyanos) en 
la Universidad y en el Seminario Teológico Asbury en Kentucky. Mientras hacía 
mi investigación sobre Wesley, me di cuenta de que la academia ha hecho 
unos aportes extraordinarios sobre la biografía y la historia, las influencias 
doctrinales y de piedad sobre Wesley, tanto como sobre los contenidos de su 
construcción teológica. Mucho ha sido escrito también sobre la organización 
del movimiento metodista. Y con todo y esas buenísimas contribuciones, 
siento que a Wesley se le ha domesticado y se le ha amellado su filo 
evangelístico, avivacionista, profético y apostólico. Además, la conversación y 
los estudios wesleyanos han quedado dentro del círculo de la academia y de 
los especialistas en el campo. Mi meta es sacar a Wesley del claustro para que 
nos vuelva a hablar hoy con el mismo mensaje bíblico, evangelístico, 
avivacionista y profético con el que habló en su tiempo. 
 
Hoy necesitamos, desesperadamente, un nuevo avivamiento. Juan Wesley fue 
un predicador de avivamiento. La predicación protestante-evangélica clásica 
debe cambiar. Debe ser predicación para el avivamiento y para la renovación 
de la iglesia. Hace poco estuve en Europa y observé que donde quiera que se 
predicó ese estilo de sermones protestantes, fundamentalmente doctrinales y 
racionales, eliminando la dimensión sobrenatural del evangelio, el cristianismo 
 6 
hoy es un desierto espiritual en vías de extensión. Esto es lo que Wesley quería 
evitar. 
 
Sirvan estos dos capítulos de mi libro para estimular a los estudiantes de 
cursos de predicación a cultivar rigor bíblico, pero con pasión de avivamiento. 
Deseo que estos capítulos sean de inspiración y de renovación en sus 
ministerios homiléticos de exposición de la palabra de Dios. Oro que se 
conviertan en predicadores y predicadoras evangelísticos para un nuevo 
avivamiento –como lo fue Wesley. 
 
Les dejo con una cita del gran historiador y teólogo metodista, Albert Outler, 
sobre la necesidad apremiante de un nuevo avivamiento. El futuro del 
cristianismo evangélico será o no será dependiendo de si, igual que Wesley, 
discernimos que hoy necesitamos renovar la iglesia para un fresco 
avivamiento. Las palabras que siguen de Outler son proféticas. Deberíamos 
tomarlas seriamente. 
 
“Renovación es nuestra única esperanza; pero nuestras esperanzas de 
revitalización escasamente pueden descansar en los programas corrientes de 
renovación. El protestantismo de línea principal, en su forma clásica y 
tradicional, como lo hemos conocido, no sobrevivirá este siglo sin un tercer 
gran avivamiento de un tipo u otro.”1 
 
 
 
Dr. Guillermo Flores 
Los Ángeles, 2023 
 
 
 
 
 
 
1 Albert Outler, Evangelism in the Wesleyan Spirit, (Nashville: Tidings, 1971), 75-6 (Itálica 
añadida) 
 7 
 
Capítulo 4 
 
MÉTODO TEOLÓGICO DE WESLEY 
 
 
Un método teológico es un sistema de procedimientos o pasos que nos 
permiten interpretar al texto bíblico y llegar a ciertas conclusiones 
doctrinales o prácticas. 
La cuestión del método teológico contesta la pregunta cómo 
hacemos teología. Cuáles son las fuentes de donde derivamos el 
conocimiento teológico. En teología y en filosofía esto se llama 
“epistemología”, o sea, la teoría del conocimiento. 
 
La epistemología es una rama de la filosofía que trata con la naturaleza y con 
las fuentes del conocimiento y desarrolla una teoría del conocimiento.2 
 
De entrada, es necesario reconocer que la epistemología y la teología 
clásica occidental han estado conectadas con los modos de pensamiento 
escolásticos, pasando por el racionalismo de la era del Iluminismo. En 
otras palabras, los métodos teológicos de la tradición occidental buscan 
encontrar una verdad objetiva, utilizando los instrumentos de la razón y 
empleando los métodos histórico-críticos de exegesis y de análisis 
bíblico.3 Estos métodos han hecho una buena contribución al 
entendimiento de la Biblia como un documento histórico y literario, pero 
han empobrecido nuestra fe en relación a la Biblia como revelación divina 
y como un documento sobrenatural y misional. Como estableceré en el 
capítulo siguiente, Wesley hizo una lectura bíblica devocional, espiritual, 
 
2 James k. Dew Jr y Mark W. Foreman, How Do We Know? An Introduction to Epistemology 
(Downers Grove, IL: Intervarsity Academic, 2014), 9-10. (Aquí y adelante, las obras en inglés son mi 
propia traducción) 
3 Ver Tom Steffen y William Bjoraker, The Return of Oral Hermeneutics: As Good Today as It 
Was for the Hebrew Bible and First-Century Christianity, (Eugene, Oregon: WIPF & Stock, 2020), 18.	
 8 
evangelística y misional, por lo que él aceptaría los instrumentos 
metodológicos mencionados solo parcialmente. 
Hasta aquí he escrito acerca de los contenidos principales de la 
teología wesleyana que deben conocer y saber articular los pastores y 
líderes de esta persuasión teológica. Ahora voy a hacer algunos apuntes 
concisos sobre la manera wesleyana de hacer teología, para finalmente, 
hacer algún aporte sobre el método teológico hispano-latinoamericano que 
necesitamos. 
Mi diseño del método que Wesley usó para armar su narrativa 
teológica incluye el cuadrilátero wesleyano, pero lo trasciende. Creo que el 
cuadrilátero wesleyano (las Escrituras, la tradición, la razón y la experiencia) 
es una herramienta útil, pero no es la única que usó Wesley. Además, el 
cuadrilátero wesleyano es 
responsable, en parte, de que el 
avivamiento metodista se haya 
disipado. Esta aseveración 
asume que cuando enseñamos el 
cuadrilátero lo exponemos en 
forma teorética y, aunque incluye 
el aspecto de la experiencia, 
pocas veces resaltamos que la 
evidencia que el cuadrilátero 
funciona fue confirmada por la 
experiencia del “corazón 
ardiente” de Wesley y por el 
avivamiento con miles de vidas 
experimentando el poder del evangelio. 
En la producción de la teología y del avivamiento metodista, Wesley 
integró otros elementos no incluidos en el cuadrilátero. Por ejemplo, la 
hermenéutica del amor en la que las personas son más importantes que 
dogmaso interpretaciones religiosas rígidas del texto bíblico. El amor como 
eje principal de interpretación bíblica. Esto es así, debido a que el lente o 
criterio de la bondad de Dios refleja de mejor manera Su naturaleza y su 
CUADRILÁTERO WESLEYANO 
Escrituras Revelación bíblica como 
estándar de fe y conducta 
Tradición 
 
Sabiduría de interpretación 
bíblica acumulada de la 
iglesia, especialmente de los 
primeros cuatro siglos. 
Razón 
 
Entendimiento iluminado por 
la Palabra de Dios y el sentido 
común 
Experiencia 
 
Mensaje bíblico confirmado 
por la experiencia de los 
creyentes. Fe no solo como 
dogmas doctrinales, sino 
como un cristianismo del 
corazón y de la experiencia 
 9 
atributo amoroso y misericordioso. Además, el amor de Dios por el mundo 
sirve al creyente de ejemplo, de estímulo y de impulso para el servicio y 
para unirse con Dios en la salvación del mundo. En segundo lugar, para 
Wesley la hermenéutica del Espíritu era sumamente importante porque el 
Espíritu revela, guía y redarguye. El relato de pentecostés de Hechos 2, por 
la “llenura del Espíritu Santo” y por la vida comunitaria, solidaria y activa de 
la iglesia primitiva era fundamental y paradigmático para Wesley. En tercer 
lugar, una hermenéutica de la fe. La fe como una convicción y evidencia 
sobrenatural de cosas invisibles a los sentidos. Wesley cita en griego la 
palabra elegchos, (ἔλεγχος) que aparece en Hebreos 11:1 para destacar el 
significado de elegchos en el sentido de la fe como una “convicción, una 
evidencia de cosas sobrenaturales no alcanzables por nuestros sentidos 
naturales”.4 En cuarto lugar, una hermenéutica de los sentidos espirituales 
despertados y desarrollados por el Espíritu y la Palabra, los cuales dan 
discernimiento sobrenatural para entender las cosas de Dios. Son los ojos 
espirituales del entendimiento. 
 
Todos sus sentidos espirituales están ahora atentos y tiene una clara 
comunicación con el mundo invisible y, por consiguiente, conoce más y más 
las cosas que antes no percibía.5 
 
Esta dimensión del conocimiento espiritual de Dios y de sus bendiciones a 
través de medios sobrenaturales está totalmente sofocada e ignorada por 
el cuadrilátero wesleyano. Yo no niego el valor del cuadrilátero, lo que digo 
que es que es incompleto y orientado escolásticamente. Es decir, no tiene 
un acercamiento ni carismático ni misional, como fue el espíritu de la 
teología de Wesley. 
 Hablando de los sentidos espirituales, Wesley decía que existe “una 
analogía entre el nacimiento natural y el espiritual.”6 Todo niño, aun cuando 
esté en el vientre de su madre, tiene órganos naturales tales como ojos, 
manos, oídos, pies, etc., pero no los sabe usar hasta que nazca y los 
 
4 Wesley, Defensa del metodismo, Obras. Tomo VI:78. 
5 Wesley, El gran privilegio de los que son nacidos de Dios, Obras. Tomo I:382 
6 Wesley, El Nuevo nacimiento. Obras. Tomo III:111-12	
 10 
desarrolle. Del mismo modo, el cristiano nace como un niño en Cristo, pero 
conforme madura va ampliando su discernimiento y su comprensión 
espiritual de las cosas de Dios. En este sentido, el desarrollo y la madurez 
espiritual ayudan como criterio hermenéutico en el cual el creyente maduro 
abandona interpretaciones bíblicas legalistas y estrechas y se abre a un 
discernimiento espiritual más en armonía con el tenor redentor de Dios 
revelado en Cristo y en las Escrituras. La biografía misma de Wesley es un 
testimonio acerca de cómo, conforme fue madurando, él abrazó la 
enseñanza bíblica de la justificación por la fe y la predicación al aire libre, 
revelación que no tenía en los inicios de su ministerio. 
 
Caso de estudio: Sermón sobre el cristianismo bíblico 
 
Estoy convencido que para que la teología wesleyana ayude a superar 
ciertas crisis misionales a las denominaciones que la afirman como suya nos 
es necesario deconstruir y reconstruir la manera escolástica con la que la 
enseñamos. Claro, si el resultado que queremos es simplemente 
conocimiento teorético de dicha teología no cambiemos nada. Pero si el 
resultado que queremos es avivamiento, entonces, tenemos que enseñarla 
de manera diferente. Un acercamiento produce conocimiento, mientras el 
otro es combustible para el avivamiento. 
 Voy a mostrarles el caso del sermón de Wesley sobre El cristianismo 
bíblico. Lo presento porque creo que este sermón es paradigmático, tanto 
del método como del contenido de su mensaje. Lo titula “El cristianismo 
bíblico”. En otras palabras, en él va destilar lo que cree que debe ser un 
cristianismo bíblico. Para los efectos de mis razonamientos en esta sección, 
tiene que ver con cómo (método) Wesley leyó e interpretó la Biblia para 
extraer el mensaje que predicó. 
 
Su texto base es Hechos 2:4: “Y todos fueron llenos del Espíritu Santo”. De 
entrada, debo decir que la conclusión que Wesley extrae de este texto 
aplicándolo no a los dones del Espíritu, sino al fruto del Espíritu, no está 
garantizado por lo que el texto realmente quiere comunicar. En el contexto, 
 11 
el resultado de ser llenos del Espíritu es que hablaron en lenguas. Lenguas 
misioneras ciertamente, o sea lenguas evangelísticas. Pero la activación 
sobrenatural que resultó de esa llenura sí incluyó milagros y manifestaciones 
de otros dones, además de valor para testificar de Cristo y para organizar y 
formar a la primera comunidad mesiánica de recién convertidos y 
bautizados. En este sentido, hay que acreditarle a Wesley que en el sermón 
también dice que: 
 
“Si estos dones del Espíritu han de permanecer en la iglesia a través de todas 
las edades, y si serán devueltos o no al aproximarse la restauración de todas 
las cosas, son asuntos que no es necesario que decidamos”.7 
 
En el fondo, creo que Wesley ya lo tenía decidido. Él sí creía que los dones 
espirituales eran para toda la vida de la iglesia. De todos modos, debemos 
concederle el beneficio de que, en su tiempo, se pensaba que los dones 
espirituales habían cesado al morir el último apóstol. Por otro lado, Wesley 
creía y, especialmente, la siguiente generación del metodismo de santidad, 
que el bautismo con el Espíritu Santo era una “segunda obra” de gracia 
subsecuente a la salvación, a saber, la entera santificación. Cuando llegó el 
pentecostalismo, esta segunda obra de gracia fue transformada en “el 
bautismo del Espíritu”, con la señal de hablar en lenguas. Esto era algo que 
ya estaba implícito en la práctica espiritual del metodismo de santidad, 
aunque no elaborado con la señal de hablar en lenguas. Era más bien un 
bautismo de poder para una vida santa y para dar testimonio de Cristo. 
 Regresando a la secuencia homilética del sermón que comento, 
basado en la vida espiritual dinámica, generosa y gozosa del retrato de la 
iglesia narrado en Hechos 2-4, Wesley dice que el cristianismo bíblico es 
uno lleno de unidad, de paz, amor, gozo, servicio solidario con los pobres 
y en una vida de comunión unos con otros. El ideal de Wesley fue reproducir 
la cultura espiritual de Hechos 2 en las clases, bandas y sociedades que 
estableció en el metodismo. 
 
7 Wesley, El cristianismo bíblico. Obras. Tomo I:55. 
 12 
 El tercer punto del sermón, señala que, a partir del avivamiento del 
cristianismo bíblico nacido en Pentecostés el evangelio se expandió por 
todo el mundo. Aquí Wesley ofrece una catena o secuencia de versículos y 
pasajes de los profetas y otras partes de la Escritura, los cuales reflejan un 
cristianismo ideal donde nadie más se preparará para la guerra, convertirán 
sus armas de guerra en rejas de arados, habrá paz, fraternidad, santidad, 
humildad, amor a Dios y al prójimo y donde la tierra será llena del 
conocimiento de Jehová, como las aguas cubren el mar. Es como si Wesley 
entrara en un éxtasis en el que no puede parar de vislumbrar lo que Dios 
podía hacer con el metodismo como movimiento del fin de los tiempos 
preparatorio para el regreso deCristo. Como establecí en el capítulo tres, 
a causa de la visión posmilenial de Wesley, él pensaba que el avivamiento 
y la expansión de su movimiento metodista era el umbral del regreso 
glorioso de Cristo. 
 Los tres primeros puntos del sermón trataron sobre el inicio, el 
desarrollo y la expansión del cristianismo bíblico. Así llega a su cuarto y último 
asunto de aplicación donde levanta una pregunta solemne ¿Dónde existe esta 
clase de cristianismo [hoy]?8 A estas alturas, es oportuno apuntar que este 
sermón, Wesley lo predicó un 24 de agosto e 1744 ante las autoridades 
administrativas, ante la facultad de profesores, ante los clérigos y ante los 
estudiantes de la Universidad de Oxford (Inglaterra). Con esto en mente, 
oigamos la apelación y la invitación que con valor profético Wesley avanza. 
 
¿Se encuentra aquí el cristianismo bíblico? ¿Les recuerdan a aquellos que 
tienen bajo su cuidado que el fin razonable de todos de sus estudios es 
conocer, amar y servir al único Dios verdadero y a Jesucristo, a quien Dios 
ha enviado? ¿Qué diremos con respecto de la juventud de este lugar? … ¿No 
será una de las consecuencias de esto el que ésta sea una generación frívola 
con respecto a Dios, en las relaciones unos con otros y en relación a sus 
propias almas?9 
 
 
8 Ibid., 92 
9 Ibid., 92,99 
 13 
Y, Wesley sigue con más preguntas de autoexamen apropiadas para todos 
los grupos representados en su audiencia. Por lo tanto, añade una 
exhortación profética y evangelística más intensa y escudriñadora. 
 
Os ruego, hermanos, por las misericordias de Dios, aunque me consideren 
loco o tonto, que me escuchen todavía un poco más, con paciencia. Es 
necesario que alguien les hable con claridad. Es particularmente necesario en 
este tiempo; porque, ¿quién sabe si será el último? ¿Quién sabe cuán pronto 
el juez justo dirá: «No voy a sufrir más a este pueblo»?10 
Espero que tomen ustedes en consideración que no se trata aquí de asuntos 
extraños; que la cuestión aquí no tiene que ver con opiniones dudosas de un 
tipo o de otro; sino que se trata de las consecuencias fundamentales e 
indiscutibles de nuestro cristianismo común. Para su decisión, apelo a sus 
propias conciencias, guiadas por la Palabra de Dios. Quien no se sienta 
condenado por su propio corazón, que vaya en paz. Entonces, en el temor y 
ante la presencia del gran Dios ante quien todos hemos de comparecer, pido 
a quienes tienen autoridad sobre nosotros, a quienes respeto por razón de su 
dignidad, que consideren (y no a la manera de hipócritas delante de Dios): 
¿Están llenos del Espíritu Santo? ¿Son ustedes representantes dignos de 
aquél a quien están llamados a representar entre los seres humanos?11 
 
Y, el profeta-predicador concluye: 
 
En el nombre de nuestro Señor, Todopoderoso, les pregunto ¿Qué clase de 
religión es la suya? No quieren ni siquiera pueden soportar que se les hable 
del cristianismo. ¡Oh, mis hermanos! ¿Qué ciudad cristiana es esta? … ¿Qué 
debe enviar Dios hambre, pestilencia o espada?12 
 
Ahora desglosemos estos segmentos desde la perspectiva del método 
teológico-homilético de Wesley. Primero, tomen nota que el sermón de 
Wesley es totalmente bíblico de principio a fin. Para Wesley la Biblia fue su 
fuente principal de doctrina y predicación. La Biblia pura, sin rival. 
 
10 Ibid., 93 
11 Ibid., 94 
12 Ibid., 99-100 
 14 
Lo segundo es que, para persuadir a su audiencia, Wesley no apela 
tanto a la razón, ni a la tradición. A lo que Wesley apela es a la conciencia 
escatológica-profética de sus oyentes. 
 
“Es necesario que alguien les hable con claridad. Es particularmente necesario 
en este tiempo; porque, ¿quién sabe si será el último? ¿Quién sabe cuán 
pronto el juez justo dirá: «No voy a sufrir más a este pueblo»?” … ¿Qué debe 
enviar Dios? ¿Hambre, pestilencia (los últimos mensajeros de Dios a una 
tierra rebelde) o espada?13 
 
Seamos conscientes que al mencionar Wesley “hambre, pestilencia o 
espada” está haciendo referencia a varias profecías del fin de los tiempos, 
especialmente, los jinetes de Apocalipsis 6. 
 Además, para sacudir y persuadir con el evangelio a su audiencia 
Wesley apela a la “conciencia, al corazón, al temor a Dios y a la presencia 
de Dios como estímulos para hacer decisiones espirituales”. 
Para su decisión, apelo a sus propias conciencias, guiadas por la Palabra de 
Dios. Quien no se sienta condenado por su propio corazón, que vaya en 
paz. Entonces, en el temor y ante la presencia del gran Dios ante quien 
todos hemos de comparecer… ¿Son ustedes representantes dignos de aquél 
a quien están llamados a representar entre los seres humanos? (Ya citado arriba). 
La raíz del éxito del movimiento de Wesley fue este tipo de predicación. La 
razón está implícita en esta 
línea de exhortaciones. Pero 
Wesley se ha movido de la 
argumentación racional a la 
exhortación espiritual. 
Si en las clases de teología 
wesleyana nuestra meta es 
solo conocimiento, entonces, 
nuestra fuente de teología es 
la tradición y la razón. Pero si 
 
13 Ibid, 93,100	
Dos apelaciones de la predicación 
Mente racional Conciencia espiritual 
 
Razón. Intelecto Lógica. 
Tradición. Doctrinas. 
Dogmas. 
Mente. Pensamientos 
 Conceptos. Persuade. 
Argumenta 
 
La dimensión conceptual es 
importante, mas no suficiente. 
 
Conciencia. Corazón. 
Emociones 
Presencia de Dios 
Temor a Dios. Juicio final 
Convicción. Redarguye 
La voluntad. Decisiones 
 
Los sermones de Wesley 
apelaban a la conciencia. 
 15 
nuestra urgencia del momento es entrenar líderes y lideresas para la 
renovación y para el relanzamiento de un nuevo avivamiento metodista del 
reino, nuestro cuadrilátero debe convertirse en un octágono que integre 
otras fuentes de conocimiento y de discernimiento bíblico y espiritual. El 
avivamiento no surge en un ámbito de una teología wesleyana escolástica, 
tradicional y teórica. La atmósfera o el terreno dentro del cual se liberan las 
fuerzas renovadoras, salvadoras y liberadores del avivamiento es dentro de 
un campo de revelación, de fe como elegchos (convicción divina), de 
apertura de los sentidos espirituales, de toque divino a la conciencia y al 
corazón, de adquirir conciencia que estamos ante la presencia de Dios a 
quien tenemos que dar cuenta. Esto podría sonar simplista, incluso 
“entusiasta” para algunos de ustedes, pero es este nuevo acercamiento el 
que necesitamos en los estudios wesleyanos. Lo que el metodismo-
wesleyano desechó de su fundador, el pentecostalismo lo adoptó y lo 
maximizó con resultados exponenciales. 
 
Del cuadrilátero al octágono wesleyano 
 
En mi octágono wesleyano integro el cuadrilátero. Por lo tanto, las 
fuentes y la manera de Wesley de hacer teología para el avivamiento 
siguen un patrón o método similar al que presento aquí. 
 
1. Una metanarrativa bíblica-canónica-redentora. Su hermenéutica y su 
teología fueron totalmente bíblicas, con énfasis soteriológico-
evangelístico. La autoridad de la Biblia sin rival. 
 
2. Un peregrinaje espiritual. Su peregrinaje y exploración personal de la 
Biblia y su proceso de encuentros con Dios y de crecimiento y 
formación espiritual. Su biografía humana-teológica. Su experiencia 
del corazón ardiente le dio herramientas para entender la doctrina 
bíblica de la justificación por la fe y nuevas fuerzas para activar el 
avivamiento. La teología de Wesley era devocional y testimonial. 
 
 16 
3. La tradición histórica de la iglesia. La sabiduría acumulada de la iglesia, 
especialmente de antes de la conversión de Constantino. También la 
teología y tradición de su iglesia anglicana (que Wesley revisó y 
reformó para sus metodistas). 
 
4. Los consensos teológicos heredados. Los consensos teológicos del 
cristianismo histórico ortodoxo, especialmente, los credos y las 
confesiones de la reforma protestante. 
 
5. Discernimientoespiritual del estado de la iglesia y de la nación. Análisis 
racional, crítico y profético de la condición espiritual, moral y social de 
su iglesia anglicana y de la Inglaterra de su tiempo. Hizo más que un 
análisis crítico; fue un discernimiento profético. 
 
6. Hermenéutica del Espíritu. Iluminación, dirección y poder del Espíritu, 
más el desarrollo de la fe y de los sentidos espirituales para discernir 
las cosas espirituales. 
 
7. Su síntesis y construcción teológica – Teología de la gracia y santidad 
personal y social. Una teología evangelística, santificadora y 
liberadora. 
 
8. Una teología al servicio del avivamiento. Una activación y movilización de 
evangelistas laicos itinerantes y creación de redes de nutrición 
espiritual e integral de los creyentes, como evidencia de que los 
reclamos del mensaje de su teología se pueden verificar en la 
experiencia de miles de personas transformadas por el poder del 
evangelio. 
 
Los resultados de su teología construida a partir de este octágono 
wesleyano fueron confirmados y evidenciados en el avivamiento 
metodista local, nacional e internacional. Todo método teológico que se 
 17 
quede en el análisis crítico del texto bíblico y en teorías hermenéuticas 
sin producir estos resultados, será cualquier cosa, menos wesleyano. 
 
Método teológico para una teología hispana-
latinoamericana 
 
Claro está, tanto la teología wesleyana como el cuadrilátero, hoy día, es 
necesario abrazarlos, repensarlos, otras veces adaptarlos, y aun 
trascenderlos en contexto hispano-latinoamericano. Este tema lo desarrollo 
en el capítulo cinco donde hablo de Wesley como evangelista. Allí 
propongo que la teología del evangelismo basada en el esquema ley-
pecado-culpa-condenación que asume Wesley es una noción que es ajena 
al contexto de la cultura actual. En la cultura de hoy las personas no se 
sienten culpables, generalmente hablado. Vivimos en una cultura donde no 
existen verdades ni esquemas absolutos (relativismo intelectual y moral) y 
en una cultura donde las personas se sienten víctimas, no culpables ni 
responsables. Esto hace que tengamos la labor de actualizar la teología 
wesleyana para que conecte con las personas de hoy. 
 Las alternativas teológicas que tenemos en Latinoamérica no 
conectan plenamente con nuestra identidad ni temperamento teológico. Ya 
sea la corriente de prosperidad, la teología fundamentalista 
dispensacionalista o la teología de liberación, son voces estrechas y 
teológicamente problemáticas para algunos de nosotros. 
 La teología de la liberación, con matices particulares de cada teólogo 
o teóloga, ha propuesto un método teológico compuesto de cuatro pasos 
interactivos. En dichos pasos, la reflexión crítica como praxis histórica es el acto 
primero, mientras que la teología viene como acto hermenéutico 
segundo.14 Aquí les presento una combinación del sistema del quehacer 
teológico de Gutiérrez y de Leonardo Boff. 
 
Primero – Reflexión crítica de la praxis histórica (Praxis) 
 
14 Ver Gustavo Gutiérrez, Teología de la Liberación: Perspectivas, (Salamanca: Sígueme, 1975), 
34-41 
 18 
 
Segundo – Análisis e interpretación social, económica y filosófica (ver) 
 
Tercero – Reflexión teológica (juzgar) 
 
Cuarto – Praxis, estrategia, actuar 
 
Gustavo Gutiérrez decía que la teología ha tenido tres tareas.15 La primera 
fue la teología como sabiduría, es decir, la que tiene que ver con la 
meditación, el progreso espiritual y la espiritualidad de piedad. La segunda, 
es la teología como saber racional, es decir como una disciplina intelectual, 
como el encuentro entre la fe, la razón y la ciencia. La tercera es la teología 
como reflexión crítica sobre la praxis histórica a la luz de la Palabra. En esta 
última el nuevo lugar teológico es el “pobre” dentro de su contexto 
histórico de opresión social y económico. 
 No es serio escribir sobre teología wesleyana en contexto hispano-
latinoamericano sin reconocer que ya existen maneras alternativas del 
quehacer teológico en este ámbito cultural y geográfico. Particularmente, 
en lo referente a la Teología de la Liberación Latinoamericana, lo que me 
interesa resaltar es que, esta teología ha levantado una voz profética que 
nos recuerda que la teología evangélica fundamentalista ha pasado por alto 
la preocupación bíblica por la justicia, por el pecado personal y estructural 
y que el evangelio es buenas nuevas a los pobres (espiritual, material y 
socialmente). 
 Por otro lado, la Teología de la Liberación Latinoamericana no 
resuena completamente con la manera como algunos leemos la Biblia ni 
con la forma como hacemos teología. Ciertamente, en el presente, existe 
un vacío teológico en América Latina. 
 Mi propuesta es que el paradigma del reino de Dios debe ser la nueva 
alternativa teológica con sus ideales y con sus praxis tal como los profetas 
lo anunciaron y como Cristo lo demostró y lo predicó. Aquí no puedo 
desarrollar el contenido de lo que implica poner al reino de Dios como el 
 
15 Ibid, 22-26 
 19 
nuevo modelo teológico. Lo que sí deseo hacer es presentar brevemente 
los puntos que considero necesarios para hacer teología bíblica del reino 
dentro de un campo gravitacional wesleyano (o en interacción con la 
teología wesleyana). 
El nuevo método teológico hispano-latinoamericano que propongo incluye 
estos puntos. 
 
1. El evangelio. La metanarrativa bíblica, canónica, redentora con énfasis en 
el reino. La autoridad de la Biblia. El reino como el único proyecto redentor 
de Dios para el mundo y para la iglesia. A este punto Vanhoozer lo llama el 
“teodrama”. 
 
2. La condición humana. Análisis crítico de la condición humana hispano-
latinoamericana en su contexto espiritual, social y ambiental 
(antropología, sociología, medio ambiente, etc.). 
 
3. Condición de la iglesia. Análisis y discernimiento de la condición actual de 
la iglesia. Discernimiento profético y evangelístico. 
 
4. Hermenéutica del Espíritu. Discernimiento espiritual: una sensibilidad a la 
iluminación, revelación y a la dirección del Espíritu. Activación de la fe y 
de los sentidos espirituales para discernir y percibir las cosas del Espíritu. 
 
5. Nueva síntesis y construcción teológica. Basada en el reino, en diálogo con 
la teología wesleyana y con otras tradiciones teológicas relevantes y con 
un acercamiento poscolonial. Existe otra manera de hacer teología en 
colaboración y más allá de la teología protestante tradicional anglo-
europea. 
 
6. Resultados. Impacto en la iglesia y en el mundo: Avivamiento y 
transformación social 
 
 20 
La pregunta que nos debemos hacer es esta: ¿Queremos un método 
teológico que resulte en una teología que produzca conocimiento o 
avivamiento? La respuesta debería ser ambos resultados, porque es 
necesario saber articular coherentemente nuestras creencias doctrinales. A 
la vez, nos hemos dado cuenta que el conocimiento en sí no produce 
avivamiento. 
No quiero ser mal entendido. No estoy negando el valor del 
cuadrilátero wesleyano. Solo estoy proponiendo que el mismo no refleja 
otras maneras que Wesley usó como fuentes de conocimiento, mejor 
dicho, como fuentes de discernimiento espiritual. Wesley vivió en plena 
era del apogeo del “Iluminismo” inglés y europeo. Él había leído y 
conocía muy bien a los padres del racionalismo, los cuales proponían que 
todo lo que no se pudiera probar por medio de la razón tenía que ser 
desechado. Que la era de la religión había pasado y que había llegado la 
era de la educación y de la razón. A pesar de esto, Wesley sabía, por la 
Biblia y por la experiencia, que el ser humano es una criatura religiosa. 
Que para llegar a la dimensión espiritual del ser humano es necesario ir 
más allá de las capas de la razón y entrar en el santuario de la conciencia y 
del corazón. Pablo predicando en Atenas (la meca de la razón) les decía: 
“Varones atenienses, en todo observo que sois muy religiosos”(Hechos 17:22). 
 
 Las alternativas filosóficas o religiosas del tiempo de Wesley eran 
el racionalismo (no podemos probar racionalmente que Dios exista), el 
deísmo (Dios existe, pero le dio cuerda al mundo y se alejó y éste corre 
por sus propias leyes), o los movimientos de “iglesias libres” (solo 
queremos espiritualidad, no doctrina ni liturgia). El metodismo wesleyano 
fue una respuesta de Dios entre los extremos del racionalismo y del 
puritanismo extremo. La razón debe ser redimida y consagrada y puesta 
al servicio del desarrollo científico, al servicio del bien común, y al servicio 
del avivamiento. 
Con la herramienta metodológica que les he propuesto aquí, la iglesia 
hispana está en condiciones de dar un paso grande en el diseño de su 
propia teología bíblica del reino y wesleyana. Queremos una teología que 
nos aporte tanto conocimientos como combustible para el avivamiento. 
 21 
Lista de principios hermenéuticos de interpretación bíblica 
 
1). Lea e interprete la Biblia como Palabra de Dios. La Biblia refleja la revelación e 
inspiración del Espíritu y la autoridad divina. Confié en el poder y en la eficacia 
inherente de la Palabra de Dios. El evangelio sigue siendo “poder de Dios para 
salvación…” 
 
2). Interprete la Biblia canónicamente. Como ella nos ha sido transmitida y 
comparando su texto o pasaje con el resto de la totalidad de sus libros. 
 
3). Interprete la biblia redentoramente. La Biblia es un libro que trata sobre los 
actos redentores de Dios en la historia con el fin de salvar al mundo. Salvación 
es el hilo conductor de toda el relato y la trama divina desde Génesis hasta 
Apocalipsis. 
 
4). Interprete la Biblia Cristo-céntricamente. Cristo es el cumplimiento de las 
sombras y profecías del Antiguo Testamento. Además, Cristo es la perfecta 
revelación del carácter de Dios. Pasajes de violencia, de racismo, machismo y de 
pena de muerte del Antiguo Testamento, entre otros, deben ser interpretados a 
la luz de la ética de perdón, de igualdad y de misericordia de las enseñanzas de 
Cristo. Cristo desmilitarizó al reino y eliminó la pena de muerte (considere el así 
llamado, caso de la mujer adúltera en Juan 8). Para Cristo los enemigos no son 
personas en sí, sino que la pelea es “atando al hombre fuerte”. No convirtamos 
al cristianismo en una ideología guerrerista-militar como en la escatología 
dispensacionalista de la derecha evangélica. 
 
5). Interprete la Biblia mesiánicamente. Cristo vino a inaugurar el reino de Dios. El 
plan de Dios para el mundo no es la iglesia ni ninguna otra institución. El único 
plan de Dios para salvar al mundo es el reino. Con el nacimiento de Cristo la era 
mesiánica del reino de Dios ya empezó y está operativo, solo falta su 
consumación final. 
 
6). Lea e interprete la Biblia carismáticamente. El Espíritu que inspiró a los 
escritores sagrados es el mismo Espíritu que nos puede dar la iluminación y la 
revelación para comprender y activar la eficacia de la Biblia en nuestras vidas y 
ministerios. ¿Cómo pueden personas no carismáticas interpretar un libro (la 
Biblia) que es un documento carismático de principio a fin? 
 
 22 
7). Interprete la Biblia misionalmente. La Biblia es un documento sagrado que 
nos revela a Dios como misionero buscando a Adán y a Eva, llamando a 
Abraham, liberando a su pueblo esclavo en Egipto y enviándonos a Cristo para 
salvar al mundo. La Biblia es, fundamentalmente, un libro misional, no tanto 
doctrinal. El cristianismo posterior convirtió a la Biblia en un libro de credos, de 
dogmas y de doctrinas. Pero la Biblia misma es un libro sobre el amor y la 
bondad de Dios buscando salvar al ser humano atrapado por fuerzas internas y 
externas que le oprimen. Tenga solo las doctrinas bíblicas y denominacionales 
básicas. Envuélvase en la misión de Dios en su iglesia, en su comunidad y en el 
mundo. 
 
8). Interprete el texto o pasaje a la luz de su contexto. Son varios los contextos. El 
contexto anterior y posterior en el capítulo que está leyendo. El contexto 
histórico, geográfico, político, cultural y teológico que está detrás del pasaje que 
está interpretando. Los escritores bíblicos no escribieron en un vacío histórico. 
Sus obras reflejan los usos y costumbres del entorno socio-cultural dentro del 
cual vivieron. 
 
9). Interprete el texto considerando su género literario. La Biblia está compuesta 
de varias formas de literatura. En ella tenemos literatura histórica, legal, poética, 
sapiencial, profética, evangelios, epistolar y apocalíptica. Cada uno de estos 
géneros literarios tiene sus propias reglas de interpretación. 
 
10). Interprete la Biblia tomando en cuenta sus figuras retóricas. La Biblia contiene 
símiles, metáforas, sinécdoques, prosopopeyas, parábolas, hipérboles, símbolos, 
figuras y otras formas del lenguaje. 
 
11). Interprete algunos pasajes del Antiguo Testamento en forma figurada, 
tipológica y espiritual (ejemplos, el agua de la roca era Cristo, el tabernáculo y 
sus partes eran anticipos e ilustraciones del ministerio de Cristo). 
 
12. Interprete un texto bíblico en su sentido literal, a no ser que sea evidente que 
debe ser interpretado de otra manera (de acuerdo a los principios anteriores). 
 
13. Lea e interprete la Biblia para encontrar la voluntad de Dios para su vida y 
para activarse en el ministerio y para activar un nuevo avivamiento en su iglesia. 
 
14. Lea e interprete la Biblia contextualmente. Para aplicarla a su realidad de vida 
y ministerio dentro de la cultura contemporánea. Haga una lectura poscolonial 
de la Biblia. 
 23 
 
Capítulo 5 
 
WESLEY: PREDICADOR BÍBLICO 
 
Hasta ahora ha sido establecido que la mejor manera de interpretar a 
Wesley es como predicador evangelístico. Además, que la gracia que 
justifica y santifica al pecador fue el centro de su teología y que, por lo 
tanto, la gracia salvadora fue el contenido de sus predicaciones. En 
consecuencia, su mensaje como predicador tuvo una orientación, 
principalmente, soteriológica-evangelística. Esto no elimina otra de sus 
prioridades en su ministerio de enseñanza y de predicación que fue “dar 
dirección y formación espiritual” a los recién iniciados en la fe. De esto 
hablaré adelante en el capítulo 7. 
Pero, ¿Cuáles fueron las características de la predicación de Wesley? 
Fueron varias. En este capítulo y en los siguientes voy a dar respuesta a 
esta pregunta. 
 
Una predicación bíblica 
 
Primero que todo, la predicación de Wesley fue profundamente bíblica. Fue 
bíblica de principio a fin. 
Wesley aceptaría, en términos generales, lo que ahora llamamos el 
cuadrilátero wesleyano, en el cual se le asigna un rol valioso a la tradición, 
la razón y a la experiencia cristiana como fuentes de producción teológica. 
Pero, Wesley no dudaría en decir que la Biblia ocupa el lugar central y sin 
rival como autoridad de revelación divina para establecer doctrina y 
conducta. Las otras fuentes son subsidiarias y subordinadas a la revelación 
y a la autoridad de la Biblia. 
 24 
En el sermón sobre La viña del Señor, Wesley hace un recuento de 
los inicios del metodismo en 1729 con el club santo en la Universidad de 
Oxford. En este sermón Wesley, hablando de la prioridad de la Biblia, dice 
lo siguiente. 
 
Desde el comienzo, desde el mismo momento en que aquellos cuatro 
jóvenes se reunieron, cada uno de ellos fue homo unius libri--hombre de un 
solo libro. A todos ellos Dios les enseñó a creer que lámpara sería a sus pies 
su palabra, y lumbrera a su camino. Tan sólo una norma aceptaban como 
guía para juzgar su forma de ser, sus palabras y acciones: la palabra de 
Dios. Todos y cada uno de ellos estaban decididos a ser cristianos bíblicos. 
Continuamente se les criticaba precisamente por esto; algunos se burlaban 
llamándolos los fanáticos de la Biblia. Otros los llamaban comebiblias 
porque, según decían, se alimentaban de la Biblia como una polilla se 
alimenta de la ropa. Por cierto, hasta el día de hoy, aquellos hombres 
siempre se han esforzado para que su pensamientoy su prédica sean fiel 
reflejo de la palabra de Dios.16 (énfasis añadidos) 
 
En el mismo sermón, Wesley reconoce que el grupo inicial de metodistas 
leyó también otros libros edificantes y provechosos, pero que su 
fundamento fue siempre la Biblia. 
 
“Todos los metodistas leyeron esos libros con mucha atención, y su lectura 
resultó muy beneficiosa. Pero de ninguna manera se puede decir que los 
metodistas nacieron de esos libros. Nacieron de las Sagradas Escrituras, 
siendo renacidos, como dice San Pedro, por la palabra de Dios que vive y 
permanece para siempre”.17 
 
Por lo tanto, estamos en terreno seguro si afirmamos que Wesley 
consideraba las Sagradas Escrituras en los siguientes términos. 
 
La Biblia es inspirada por el Espíritu Santo 
Es la palabra de Dios 
Es y contiene los oráculos divinos 
 
16 LLerena, editor, Sermones de Wesley, Tomo II, Sermón sobre la Viña del Señor, p. 407-408 
17	Ibid.	
 25 
Revela el camino al cielo 
Tiene poder para edificar y transformar la vida 
Es poder de Dios para el presente y para conducir a la eternidad 
 
 Wesley tiene una visión alta sobre la inspiración y la autoridad de la 
Biblia. Por otro lado, él no especula sobre teorías de la inspiración o sobre 
lo que hoy llamamos “critica histórica” que recién empezaba en su tiempo 
con la era de la Iluminación. Él da por hecho que la Biblia es la palabra 
inspirada de Dios, sin rival. Wesley lee la Biblia en actitud devocional y 
espiritual. Para edificación y formación espiritual de él y de sus sociedades 
metodistas. También, lee e interpreta la Biblia para su predicación 
evangelística. Dicho resumidamente, Wesley no teoriza sobre la Biblia, la 
lee devocionalmente y la predica evangelísticamente. 
 Pero Wesley no caminaría con lo manera que hoy llamamos 
“fundamentalista” o literalista de leer Biblia. Literal sí, pero no literalista. El 
literalismo bíblico interpreta pasajes llenos de símbolos, figuras y 
metáforas de manera literal. Lo cual, evidentemente no es correcto. 
 
Principios de interpretación bíblica en el método wesleyano 
 
Wesley practicaba y recomendaba algunos principios de interpretación 
bíblica. Recuerden que él era un erudito en lenguas bíblicas. Además, fue 
profesor en la Universidad de Oxford (su alma mater) de lógica, retórica y 
de filosofía. Él leía su Nuevo Testamento en griego, era profesor o tutor 
de griego, y en sus escritos y comentarios bíblicos traducía directamente 
del griego. Sabía hebreo, también. 
 Aquí les presento en forma parafraseada los principios 
recomendados por Wesley para leer e interpretar la Biblia. 
 
1). Lea la Biblia como el “Libro de Dios”18 
2). Lea la Biblia con el propósito de “encontrar el camino al cielo” 
3). Lea la Biblia devocionalmente – Para edificación y crecimiento en gracia. 
 
18 Los principios 1-4 aparecen en el prefacio de Wesley a sus sermons en el Tomo I:20 
 26 
4.) Si encuentra algo intrincado o difícil “eleve su corazón al cielo y pida 
sabiduría” (iluminación). 
5). No se quede solo con el sentido literal, muévase al sentido espiritual del 
texto o pasaje bíblico. 
6). “Busque pasajes paralelos en la Escritura. Acomode lo espiritual con lo 
espiritual”. 
7). Tome la Biblia en su “sentido llano y literal, a menos que ello implique algo 
absurdo”.19 
8). Si la interpretación literal de un texto es incompatible con el amor, la 
misericordia la justicia y la bondad de Dios debe ser interpretado de otra 
manera (figurada, retórica, metafórica, analógica, etc.)20 
9). Lea la Biblia en “conferencia con otros” o sea en conversación y 
edificación mutua con creyentes y profesores sabios y entendidos. 
10). Pasajes o textos oscuros o difíciles deben ser interpretados a la luz de 
textos más claros. 
11). Lea la Biblia siguiendo el tenor de las Escrituras y considerando la 
analogía de la fe, es decir la armonía y conexión entre las grandes doctrinas 
tales como el pecado original, la justificación, el nuevo nacimiento, la 
santificación y la glorificación.21 
12). Lea la Biblia en diálogo con la sabiduría acumulada de la iglesia de los 
primeros tres siglos (tradición), en diálogo con la razón, con la experiencia y el 
sentido común, pero la autoridad final es la Biblia (El cuadrilátero wesleyano). 
13). Lea la biblia considerando la metanarrativa bíblica y el hilo conductor de 
redención desde la creación, la expiación hasta la glorificación. Lectura 
canónica y narrativa de la Biblia. 
14). Lea la Biblia en oración, “porque la Escritura puede ser entendida 
solamente por el mismo Espíritu que la inspiró”. 
15). Lea la Biblia no solo para conocerla, sino para activarse en el 
evangelismo, plantación de iglesias, en el servicio social y en el avivamiento. 
 
 
19 Llerena, Sermones, II:309 
20 Wesley, “Free Grace”, Works, III: 555.	
21 Los principios 9-12 se encuentran en el prefacio de Wesley en sus Notas sobre el Antiguo 
Testamento. 
 27 
Pero, lo importante para Wesley, es que la lectura de la Biblia debería 
conducir a amar a Dios con todas las fuerzas y a aprender a vivir amando 
e imitando a Cristo (“teniendo el mismo sentir que hubo en Cristo Jesús”). 
Porque “nosotros le amamos a él porque él nos amó primero”. La lectura 
de la Biblia debería resultar, también, en edificación y crecimiento en 
gracia. 
Otro asunto a considerar es que, para Wesley, el lente principal con el 
que hay que interpretar la Biblia es el criterio del amor y la gracia de Dios. 
Todo lo que contradiga el carácter amoroso, sabio y justo de Dios debe 
ser comparado y estudiado a la luz del tenor redentor de toda la Biblia. 
Además, la Biblia es suficiente como criterio de la verdad de Dios en 
asuntos concernientes a su plan de la gracia y salvación. Lo que la Biblia 
establece hay que enseñarlo, lo que la Biblia no obliga no se impone. 
 
El método wesleyano de predicación bíblica 
 
Wesley recomendaba a los ministros y profesores de carrera conocer y 
dominar los idiomas bíblicos originales (griego y hebreo), pero no era 
indispensable para los predicadores laicos. Lo que ellos sí debían dominar 
era el contenido de las enseñanzas y doctrinas de los sermones escritos 
de Wesley y su método homilético de predicación y enseñanza. Esto hoy 
significa que todo estudiante de cualquier denominación de herencia 
wesleyana-metodista debe conocer las doctrinas de la Biblia, 
interpretadas en el Libro de Disciplina y en los documentos oficiales de la 
denominación. 
Wesley es un experto homilético y usa una variedad de tipos de 
sermones, pero, generalmente hablando, los sermones de Wesley son 
textuales. Mejor dicho, textuales-temáticos (como les llamamos hoy). 
Él acostumbra citar un texto bíblico, tomarlo como está en el canon, 
interpretarlo en su contexto histórico (cuando es necesario) siguiendo los 
principios de interpretación listados arriba para, finalmente, darle el 
sentido espiritual y de aplicación práctica. Este sentido espiritual, con su 
 28 
aplicación práctica, Wesley lo insertaba, ya fuera en el desarrollo o en la 
conclusión de sus sermones. 
Algunos de sus sermones tenían también una atmósfera y un tono 
profético. Muchos de sus sermones, proféticamente, discernían los signos 
de los tiempos en los que se encontraba el mundo, la iglesia y los líderes 
religiosos de su tiempo. Sus mensajes bíblicos, algunas veces, sonaban y 
tenían el discernimiento espiritual, la pasión y el dolor por el pueblo de 
Dios y por el mundo de los mensajes de Elías, de Jeremías, de Cristo o de 
los apóstoles. 
El método homilético o de predicación de Wesley se componía de varias 
partes. 
 
Primero: Ponía ante su audiencia su texto o base bíblica del tema 
 
Segundo: Planteaba el problema o el asunto del cual iba a predicar 
 
Tercero: Exponía, resumidamente, los puntos que iba a desarrollar en su 
sermón 
 
Cuarto: Desarrollaba su sermón. Argumentando de la Biblia, de los padresde la iglesia, de los documentos oficiales de su propia iglesia anglicana, 
de ejemplos de la razón, ejemplos de la historia o de autores clásicos o 
contemporáneos de su tiempo, de la experiencia, del mundo natural o de 
su testimonio personal y del testimonio de los resultados del avivamiento 
metodista. 
 
Quinto: Hacía una aplicación. La aplicación podía ser una exhortación 
edificante, una invitación evangelística o un reto profético desafiante. 
 
Por ejemplo, en el sermón sobre La salvación por fe, su texto base es 
Efesios 2:8: “Porque por gracia sois salvos por medio de la fe”. Luego, en el 
punto dos elabora su tesis o la gran idea que va a desarrollar, después. 
 29 
Wesley empieza así: “Todas las bendiciones que Dios le ha conferido al ser 
humano vienen de su gracia, liberalidad y favor. Vienen de su favor inmerecido…”22 
Cuando pasa al punto tres, como dije arriba, expone, 
resumidamente, los argumentos principales con los cuales va a desarrollar 
y a establecer su tesis. Wesley dice: 
 
“La gracia es la fuente, la fe es la condición de la salvación. Nos incumbe, por 
tanto, a fin de alcanzar la gracia de Dios, investigar cuidadosamente: 
I. Mediante qué fe somos salvos 
II. Qué es la salvación que resulta de esa fe 
III. Cómo responder a ciertas objeciones”23 
 
Como les dije, Wesley tenía una formación académica de primer 
nivel. Había enseñado lógica y retórica en su universidad. Por lo tanto, 
estaba bien familiarizado con la retórica o el arte de comunicar para 
influenciar y persuadir de la retórica greco-romana clásica. 
 
Los seis puntos24 del arte de hablar y persuadir de la retórica antigua 
incluían los siguientes elementos. 
 
Exordioum—La sección introductoria del discurso 
 
Narratio—Un relato de lo que ha sucedido que causa el discurso 
 
Propositio –Un resumen de la tesis principal del discurso 
 
Probatio—Los argumentos positivos a favor de la tesis o del caso 
 
Refutatio—Respuestas a posibles contra-argumentos de los oponentes 
 
Peroratio—Un cierre del tema apelando a las emociones y a la mente de 
los oyentes con el fin de persuadirlos 
 
22 Obras. Tomo I:25 
23 Obras. Tomo I:26 
24 Ver Ben Witherington III, “Rhetorical Criticism” en Paula Gooder, Searching For Meaning: 
An Introduction to Interpreting the New Testament, (Louisville: Westminster John Knox Press, 2009), 72.	
 30 
Debido a que varios de sus sermones, Wesley los escribió para aclarar el 
contenido de sus doctrinas o para contrarrestar falsas acusaciones contra 
sus enseñanzas o ministerio, él tuvo que hacer uso de estas técnicas 
retóricas para desbaratar y desmontar los argumentos en su contra. El 
apóstol Pablo en sus cartas muestra el mismo formato de argumentación. 
Aun así, Wesley prefería predicar en forma serena, edificante, 
evangelística y profética. Prefería predicar en el poder del Espíritu Santo. 
 
Lecciones prácticas del método de Wesley de leer, 
interpretar y predicar la Biblia 
 
Leer la Biblia en modo wesleyano es leerla para discernir la voluntad de 
Dios para la vida de uno y para el ministerio. Además, es para discernir los 
deseos de Dios de bendecir y de salvar al mundo. 
Yo diría que, aunque Wesley lee e interpreta la Biblia en forma erudita, 
al mismo tiempo, él es parte, por convicción y por sus lecturas, de una 
corriente de piedad, de una espiritualidad mística, devocional y de 
santidad. En la espiritualidad católica romana, para tener este nivel de 
espiritualidad había que hacerse monja o monje, hacer votos de pobreza 
y recluirse en un convento o monasterio retirándose de la vida en el 
mundo. El genio de Wesley es que logró niveles superiores de piedad y 
de santidad con sus centenares y miles de metodistas sin sacarlos del 
mundo. Los convirtió en santos y piadosos en el contexto de sus vidas 
diarias, en sus hogares, en sus trabajos y dentro de la sociedad civil. El 
movimiento metodista original, no solo era una “maquina” de producir 
evangelistas y conversiones masivas, sino también, un instrumento de 
generación de gente piadosa, sabia, espiritual y feliz, al mismo tiempo. 
Es debido a esta vertiente mística y de piedad de Wesley que algunos 
estudiosos de su vida lo ubican más en el canon de los “santos” que de los 
teólogos. Yo creo que Wesley debe ser clasificado, tanto, dentro del 
canon de los teólogos como de los santos. Él era ambas cosas. 
Como herederos de esta teología espiritual y devocional, las siguientes son 
algunas maneras como podemos poner en práctica el método wesleyano 
 31 
de lectura e interpretación bíblica hoy para nuestra renovación personal y 
para la renovación de la iglesia. 
 
1. Antes de predicar ore, ayune, congréguese, sirva, participe de la Santa Cena, 
sirva, (practique las obras de piedad y las obras de misericordia). 
2. Cultive una relación íntima con Dios. 
3. Manténgase en comunión y en la misma visión de su iglesia, de sus pastores o 
pastoras y líderes espirituales; repórtese, rinda cuentas de su vida espiritual y de 
su ministerio. 
4. Ame a Cristo con todo su ser. Satúrese de Cristo. Tenga “el sentir que hubo en 
Cristo Jesús”. Ame como Cristo amó. Se humilde como Cristo. 
5. Lea su Biblia. Satúrese de la palabra de Dios. 
6. Tenga el amor y la pasión de Cristo por su iglesia y por el mundo (los perdidos). 
7. Discierna la ocasión, el lugar y el propósito de su predicación 
8. Escoja su texto bíblico y tómelo tal como aparece en el canon bíblico. 
9. No dude del poder de la Biblia como Palabra ungida, inspirada y como autoridad 
final de Dios. La Biblia no necesita ser defendida. Ella tiene poder en sí misma para 
tocar y transformar vidas. 
10. Interprete su texto bíblico en su contexto histórico. 
11. Interprete el texto bíblico en su sentido llano y literal, pero considerando otras 
posibilidades de interpretación (figurada, simbólica, metafórica, etc.). 
12. Lea la Biblia como palabra ungida, llena de poder para salvar y transformar. El 
evangelio es poder de Dios (Romanos 1:16). No tenga temor predicar con 
confianza, con poder y autoridad espiritual. 
13. Predique la Biblia para activar un movimiento de renovación y de revitalización 
de la iglesia, para salvar a los perdidos y para activar un nuevo avivamiento masivo 
y exponencial. 
 
Recuerda, la Biblia no es para discutir. Las enseñanzas de la Biblia deben 
conducirnos a amar a Dios y al prójimo y a llevar las buenas nuevas a 
nuestra comunidad y al mundo. 
 
 
 
 
 
 
 
 32 
Resumen y aplicación 
 
En este capítulo ha quedado establecido, que la mejor manera de 
interpretar a Wesley es como un predicador bíblico. 
Desde un punto de vista homilético, Wesley hace una enorme 
contribución en los aspectos siguientes. 
 
1). La manera como debemos tomar la Biblia: Inspirada y canónica. 
 
2). El enfoque y énfasis soteriológico y evangelístico de la predicación. 
 
3). La prioridad que el pastor o pastora deben dar al ministerio de predicación. 
Wesley llama a sus ministros “predicadores”. Este es el llamado. 
 
4). La estructura del discurso homilético con su introducción, su cuerpo o 
desarrollo con sus divisiones principales, sus ilustraciones y el cierre 
evangelístico o profético de aplicación. 
 
5). Nos enseña a proyectar la voz; a mejorar los ademanes; a hacer una mejor 
entrega del sermón. 
 
6). Sobre todo, no enseña a predicar con seguridad, convicción y con unción 
espiritual, confiando en el poder del evangelio para salvar y para hacer santo 
al pecador. 
 
Sirva este capítulo para reclamar nuestra herencia wesleyana de confianza 
en la inspiración y en la autoridad de las Escrituras, sin caer en literalismos 
ni fundamentalismos innecesarios. 
Sirva, también, para renovar tu amor por la lectura de la Biblia como 
palabra de Dios y para renovar tu pasión por la predicación edificante, 
evangelística y profética. 
Temo que algunos pastores y pastores, formados en las corrientes 
críticas de interpretación bíblica, hayan perdido la confianza en la Palabra 
de Diosy que se haya desvanecido el ímpetu y la pasión por la predicación 
bíblica y ungida con la que empezaron. Sirva este capítulo para restaurar 
 33 
y reposicionar a esos predicadores y predicadoras y para reenergizar y 
activar a las nuevas y nuevos mensajeros de Dios hoy con un mensaje 
ungido y convincente a un mundo perplejo. 
 
Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para 
salvación a todo aquel que cree… (Romanos 1:16). 
 
Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada 
de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los 
tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón 
(Hebreos 4:13). 
 
Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra 
de Dios… (Efesios 6:17). 
 
Los avivamientos restauran la predicación bíblica sencilla, en la unción y 
en la autoridad del Espíritu. Seamos, entonces, predicadores y 
predicadoras ungidos para prender un nuevo mover de Dios que sacuda 
a la iglesia y la comunidad para hacerla volver a Dios. Esta es la 
predicación que Dios quiere para este tiempo. Tu puedes, con Su ayuda.

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