¿Piensas que tras el coronavirus la carrera de enfermería estará menos infravalorada por la sociedad?

No sé qué vaya a pasar, pero sí lo deseo. Me gustaría que valoráramos ese esfuerzo heroico que han hecho miles o quizás cientos de miles de personas, que han arriesgado su vida y en ocasiones, dejado de vivir, aunque sea por unos meses y a veces para siempre, para que nosotros recobremos nuestra vida.

Depende de nosotros. Debemos ser mucho más enérgicos con los que nos gobiernan, y dejarles muy en claro que el tipo de ineficiencias y estupideces que han estado cometiendo, son inaceptables. Debemos también dejarles claro lo mucho que valoramos a todos los que se han sacrificado para que nos recuperemos de la crisis que ellos como políticos no supieron prevenir.

Creo que debemos ser firmes en eso. Nuestros gobiernos tienen que saber que queremos que se les pague un salario justo a las enfermeras y al personal médico y que queremos que se les compense por los riesgos que implica su profesión, que son muchos.

Y lo mismo debemos hacer con los bomberos, los paramédicos, los policías y el ejército. Hay que exigirles, su honestidad no debe estar en cuestión, pero también hay que pagarles.

Hoy fue el coronavirus. Mañana puede ser un terremoto, un cartel, un volcán o Godzilla. Bueno, en mi país al mismo tiempo en que ocurre esta pandemia, ya hubo un terremoto de 7.5 grados y también un atentado de consideración. El volcán ahí lo tenemos. Nos falta Godzilla.

Los príncipes en Venecia tenían una frase cuando se nombraba un gobernante, que le decían al pueblo. Por favor, ésta es una frase del renacimiento, no me la tome a mal por repetirla y no lo tomen en sentido literal. La frase era: "Páguenles bien, y si se equivocan, mátenlos". No, no estoy de acuerdo en matar gobernantes por ineptos que sean. Estoy en contra de cualquier tipo de linchamiento, pero podemos conservar la esencia de la frase sobre la responsabilidad de un mandatario, sin llevarla a su extremo y sin tomarla literalmente.

Como electores y como ciudadanos debemos ser mucho más exigentes con quienes nos gobiernan.