Si un gorila me diera un puñetazo con toda su fuerza, ¿me moriría o quedaría solo gravemente herido?

Como fotógrafo de vida salvaje, siempre es un premio conseguir un primer plano de una bestia tan majestuosa como un gorila.

Pero Christophe Courteau, nuestro fotógrafo, tuvo incluso más suerte. El gorila fue tan amable de acercarse más para conseguir una foto espontánea en primer plano.

Ésta era, sin duda, la toma perfecta.

……………….excepto por el puño derecho cerrado que iba directo hacia él.

Probablemente en ese momento pensó “Mamá tenía razón, me tendría que haber hecho cartero”

En cualquier caso no iba a poder sortear el puñetazo que el gorila ya dirigía hacia su cara.

Recuerda: los objetos en la cámara pueden estar más cerca de lo que parece.

En sus propias palabras: “Sentí toda su fuerza y peso sobre mi cuerpo, como si me atropellara un tren”.

Cabe apuntar que el gorila estaba borracho, pero no por la ingesta de alcohol. Bueno, sí era alcohol, pero provenía de tallos de bambú fermentados. Quizás el gorila hubiera golpeado con más fuerza si hubiera estado completamente sobrio.

En cuanto al fotógrafo, terminó con una cicatriz de recuerdo en su frente y una buena foto que colgar en la pared de su casa.

Papá, ¿por qué tenemos una foto de un gorila?

Venid niños, es hora de que os cuente la historia del día que luché con un gorila y lo maté con mis propias manos...