Porque los sistemas los producen a destajo. Ininterrumpidamente. La vida se define con el movimiento, y la única manera de entenderlo es si acompasamos nuestro comportamiento al de la evolución análogamente. No lo hacemos. Desde el principio hemos estado lastrados por las circunstancias que nos fueron muy adversas, pues lo más importante era sobrevivir (y lo hemos conseguido pagando un precio muy alto). Esto nos obligó a adoptar normas y patrones que nos solucionaban nuestras necesidades pero solo parcialmente, y con ello sembramos el germen que tanto nos ha afectando y sigue haciéndolo: El de la inequidad. Nunca pudimos enmendar, ni siquiera intentamos reajustar los principios y normas que no funcionaban, todo lo contrario, se fueron ahondando, y todo se fué anquilosando y degenerando, y esto es lo que ahora nos pasa factura.
Cómo podrías evitar intoxicarte cuando constatas que todo lo que te han dicho (y aún dicen) son auténticas falacias, infames medias verdades, claros sofismas, mitos y astutos espejismos, manipulación total. Como no sentirse menospreciado, oprimido, aplastado y abusado, cuando te das cuenta que has sido engañado miserablemente, que la corrupción campéa a sus anchas, que se cultiva la ignorancia, que se impide u obstruye el conocimiento; ¿Por qué es tu origen, o el seno de la familia en la que naces, lo que determina tu futuro, y será lo que definirá si vivirás sin agobio, o poder darle una vida decente a tu familia?
Vivimos en sociedades en las que nos enfrentan continuamente un grupo contra otro, y tampoco es extraño, “Divide et Impera”, es lo que se me viene a la mente. Qué tiene de raro que una persona que después de trabajar toda su vida, ni siquiera sabe lo que le depara el futuro, cuando la ancianidad llegue?. Y el paro?, qué hacemos con esta peste?, qué haces si eres joven, no tienes ingresos ni futuro, y aún con tener un título no encuentras trabajo; ¿Que haces, lo festejas?
Mientras tanto la prensa te da noticias diarias de que aquel que “votaste” para que cuide de tus intereses resulta un prevaricador y un parasitario mañoso, mientras los ricos lo son cada vez más, beneficiandose de las “crisis”, que curiosamente les enriquece cada día más, pero el estado “no tiene medios ni recursos” para los grupos débiles; como para celebrarlo, ¿Verdad?
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Sociologia e Sociologia Jurídica
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