¿Se necesita eliminar los planes sociales (ayudas sociales), las jubilaciones y las deudas en Argentina ya que representan más del 70% del gasto...

Las jubilaciones son un derecho adquirido por lo que no se pueden eliminar. Las deudas son obligaciones asumidas por lo que tampoco se pueden ni deben eliminar. Dejando de lado que las consecuencias de intentarlo serían mayores que las del actual déficit y además lo incrementarían. Los planes sociales tienen mayor flexibilidad aunque tampoco se pueden ni deben eliminar del todo y se deben regular eficientemente.

Si se quisiera reducir el déficit verdaderamente, sin impactar negativamente a la sociedad civil, se debería y es necesario reducir el presupuesto de la política. Una de tantas formas es eliminando los excesivos ministerios y secretarías que albergan ñoquis con cargos. También se deberían y necesitan eliminar todas las asistencias o subsidios a las organizaciones sociales, sindicatos, y agrupaciones que incentivan la pobreza, convirtiendo los subsidios y ayudas sociales, beneficios directos al individuo, ciudadano, sin intermediarios ni administradores, más que el estado.

Las obras públicas son otro de los inmensos tanques de corrupción y estafa que debieran eliminarse, reemplazandolo con un sistema de iniciativa privada en el que los interesados y beneficiados estén dispuestos a contribuir con sus propias inversiones. El estado debiera participar asistiendo minoritariamente y facilitando los proyectos, sin financiar, demorar, obstruir ni liderar el mismo.

La educación debería mejorarse privilegiando el mérito y permitiendo la libre competencia de casas de estudios. El sistema de voucher para cada estudiante permitiría una educación muy superior a la actual. Es en el mejor beneficio de la sociedad asistir a aquellos estudiantes que demuestren el interés, las ganas, dedicación y talento. Estos becados deberán calificar según sus ingresos personales y familiares además de sus calificaciones mantenerse por encima de la media de su clase. En la educación superior sería beneficioso tener profesores con experiencia práctica, que se hayan desarrollado en la actividad privada con algun merito, evitando aquellos académicos teóricos sin experiencia práctica, que nunca abandonaron la universidad, ni dejaron de ser una carga para la sociedad. Se necesitan profesionales idóneos para ejercer y retribuir lo invertido a la sociedad.

Así como los individuos son responsables de sí mismos, las sociedades también lo son colectivamente. Por mucha empatía y solidaridad que sus miembros posean, unos pocos no pueden ayudar a muchos más. Las transferencias discrecionales del gobierno federal a provincias y municipios idealmente deberían eliminarse. Podrían reducirse inmensamente si fueran solo un porcentaje de lo que estas recauden por sí mismas.

En fin, hay cientos de privilegios de la política que pueden recortarse sin afectar a la sociedad civil, que lleva décadas haciendo sacrificios, mientras los intereses políticos crecen y el país se derrumba. Un caniche no puede parir gatos ni ovejeros. Los representantes del pueblo son los políticos que estos eligen, iguales a la mayoria. Si se quiere mejorar la clase política, se debe comenzar por mejorar sus electores.