El trastorno bipolar se caracteriza por la presentación recurrente y habitualmente alternada de episodios afectivos de tipo depresivo con episodios de naturaleza opuesta, es decir, maníacos y/o hipomaníacos. En función de la gravedad del episodio, podemos encontrarnos con el trastorno bipolar Tipo 1 o Trastorno Bipolar Tipo 2 ¿Cuándo estamos frente a un caso de Trastorno Bipolar Tipo 1?


a) Cuando presenta episodios maníacos, en los que el estado grave de exaltación del ánimo o bien la frecuente aparición de síntomas psicóticos suele hacer necesaria la hospitalización.
b) Cuando presenta episodios de hipomanía, en los que la alteración de la conducta es mucho menor y no suele ser necesaria la hospitalización.
c) Cuando identifican síntomas psicóticos tales como ideas delirantes de culpa, ruina o enfermedad, así como alucinaciones auditivas.
d) Cuando presenta crisis de angustia recurrentes e inesperadas con un periodo posterior de preocupaciones persistentes centradas en el temor a que aparezcan nuevas crisis.