Características generales:
Síndromes clínicos según la arteria afectada:
Circulación cerebral anterior:
Circulación cerebral posterior:
Otros síntomas:
Es importante tener en cuenta que la presentación clínica del ACV cardioembólico puede variar considerablemente de un paciente a otro. El tipo y la gravedad de los síntomas dependen de la arteria afectada, el tamaño del émbolo y la extensión del daño cerebral.
El diagnóstico del ACV cardioembólico se basa en la evaluación clínica del paciente, la realización de pruebas de imagen cerebral (tomografía computarizada o resonancia magnética) y la búsqueda de posibles causas cardioembólicas (fibrilación auricular, enfermedad valvular cardíaca, etc.).
El tratamiento del ACV cardioembólico se basa en medidas de soporte vital, la administración de medicamentos antitrombóticos (anticoagulantes o antiagregantes plaquetarios) y la intervención médica para la causa cardioembólica subyacente.
El pronóstico del ACV cardioembólico depende de la gravedad del evento, la edad del paciente y la presencia de otras enfermedades. La recuperación puede ser completa o parcial, y puede requerir rehabilitación física, neurológica y cognitiva.
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