Además de lo referido por el tecnólogo en gestión ambiental Luis Eduardo Ciro, para la entidad ambientalista Parques Nacionales es importante anota...

Además de lo referido por el tecnólogo en gestión ambiental Luis Eduardo Ciro, para la entidad ambientalista Parques Nacionales es importante anotar que, las comunidades indígenas que se encuentran habitando sobre los bosques y vegetación selvática de los parques del territorio Amazónico del departamento de Guaviare, han convivido en relaciones intrínsecas y amigables con la riqueza de la biodiversidad, de cuencas y fuentes de agua, lo cual constituye una relación saludable y amigable con la naturaleza y las demás formas de vida del territorio, es la forma natural de sostenibilidad, basada en el respeto, sensibilidad, admiración y valoración por la vida. El concepto del Agua Los profesionales entrevistados de la Corporación para el Desarrollo del Sur y Oriente Amazónico (CDA) dice que: El Agua, es el recurso más valioso e importante de los elementos que se encuentran en la naturaleza, es quien provoca la repoblación de la vida, y el sostenimiento de la vida de las diferentes especies y ecosistemas incluyendo la vida de los seres humanos. Es también el elemento esencial y vital para desarrollar todo tipo de actividad bien sea humana, vegetal o animal. Al respecto, Martha Campino, ingeniera forestal y directora del SENA, regional San José, argumenta que: El agua es un líquido vital para la sostenibilidad de la vida y está compuesto por partículas de oxigeno e hidrogeno tiene un valor relevante porque la carencia de éste puede significar la extinción de la vida del planeta y todos los seres vivos, por lo tanto el agua es vital para garantizar la vida y el funcionamiento adecuado de la tierra y los demás ecosistemas. Para la organización ambientalista, Si Guaviare el agua es el agente de la promoción de la salud y de la prevención de miles de enfermedades catastróficas que afectan el bienestar de la humanidad, ya que, propicia los ambientes saludables, de asepsia y de higiene pero al escasear o no existir, se disparan los brotes de enfermedades de todo tipo y con ello la muerte de personas, animales y plantas de las diferentes especies y ecosistemas. Luis Bosiga, sociólogo y ambientalista, de esta misma organización, manifiesta que, El agua significa la vida en la tierra, es la que le da significado a la vida de todas las especies que existen en el planeta. (Bosiga) Al respecto y como complemento a lo expresado por Bosiga, la organización Si Guaviare añade que, no existe medicamento alguno que pueda sanar, curar las enfermedades si no hay agua, por estas razones el agua es el eje articulador y principal de todo bienestar. Es importante anotar que muchos de los problemas de salud que padece la humanidad actual, obedece a los altos niveles de agua contaminada que se consume, a mayor nivel de contaminación del agua en general, mayor nivel de aparición de enfermedades, Otra consecuencia de la contaminación de las fuentes hídricas es la extinción de diferentes especies y ecosistemas, es decir, que para sostener la vida en el planeta, se debe proteger y cuidar primero las cuencas y fuentes de agua. Además, argumenta que: Los saberes, creencias, conocimientos, hábitos, costumbres, valores éticos y morales han servido para cuidar, conservar y proteger las cuencas y fuentes de agua del territorio de la Amazonia del departamento de Guaviare, así como los diferentes ecosistemas y la rica biodiversidad del Departamento. Teniendo presente que las prácticas cotidianas de las comunidades étnicas son amigables con la naturaleza y la humanidad, es decir, la relación con la naturaleza es pacífica y sostenible en el tiempo. . (Bosiga) El cuidado de las cuencas y fuentes de agua Los profesionales entrevistados de la entidad ambientalista Parques Nacionales, evidencia la relación amigable entre la naturaleza y las comunidades indígenas - Tucano Orientales, Desanos, Cubeos, Piratapuyo, Carijonas, Jiw, Tuyucas, Guananos, Sirianos y Nukak Makuk, entre otros -, ya que han convivido desde sus orígenes con la naturaleza y las diversas formas de vida que ella contiene, por lo tanto, estas comunidades han aprendido a comprenderla e interpretarla, pero sobre todo a respetarla, adorarla, venerarla y quererla, de hecho la denominan La Madre Tierra por el significado de respeto. Para las etnias del departamento de Guaviare, el territorio, las cuencas y fuentes de agua representan y tienen un valor sagrado y espiritual, lo cual constituye lo más importante de la cultura, filosofía de vida y cosmovisión de estos pueblos ancestrales de la Amazonia. Las relaciones de respeto, admiración, agradecimiento, adoración y sensibilidad son parte de los valores éticos y morales que fundamentan y le dan sentido a la cultura ancestral. Los profesionales y especialistas entrevistados pertenecientes a las entidades oficiales argumentan que, para las comunidades indígenas de estos territorios, la naturaleza constituye parte vital de su existencia, el hombre indígena considera que la naturaleza hace parte de su ser, de su sentir, y de su vida. Creen que gracias a ella pueden alimentarse, respirar, pensar, reproducirse, ser felices y vivir en paz. Es ciertamente clara su postura, cuidar, conservar y proteger la vida, contraria a la de la cultura occidental que cuida y protege la naturaleza con fines de acumulación de riqueza, es decir, la primera protege la vida con base en valores éticos y morales, y la segunda sobre explota la naturaleza, la contamina, la devasta, la degrada y la deteriora para acumular capital financiero bajo el pretexto del mejoramiento económico y social. Lo anterior se refleja en el relato de Mauricio Zurita, ingeniero Agrónomo, director del SINCHI: Las fiestas del Yurupary y Dabocury, que consiste en alabar a los espíritus buenos para pedirles abundancia, prosperidad, salud, bienestar, son eventos espirituales para dar las gracias por la prosperidad, abundancia, alegría y bienestar, bailes como el “CARRIZO”, el mito de la ANACONDA, la cual es respetada, ya que según la creencia ancestral, si desaparecen las Anacondas de las profundidades de los lagos y fuentes de agua, los ríos y fuentes de agua desaparecen o se secan. (…) debemos aprender de las culturas indígenas el cómo entender el lenguaje de la naturaleza, interpretar sus avisos, sus advertencias, aprender a leer sus códigos, conocer más de ella y así evitar la devastación y el deterioro de la misma. (Zurita) Lo expuesto por Zurita, demuestra que la forma de pensar y hacer las cosas por parte de la cultura occidental está llevando al colapso de la naturaleza y de la sociedad. Por lo tanto, se requiere fortalecer los diálogos interculturales entre las dos cosmovisiones (occidental y ancestral), uniendo esfuerzos para minimizar la violencia y la agresividad con la que está siendo tratada la madre tierra, por las formas, estilos de vida y prácticas cotidianas las sociedades actuales. En consecuencia, se percibe el interés de empezar a construir una nueva sociedad que comprenda, interprete, valore y respete la naturaleza, los ecosistemas, la biodiversidad, la diversidad etno – cultural de los pueblos indígenas, y las cuencas y fuentes de agua. En este sentido, se hace necesario diseñar propuestas alternativas donde las diferentes culturas aporten sus conocimientos, saberes, hábitos, costumbres, habilidades y competencias para cuidar, proteger y conservar la naturaleza junto con todas las formas de vida que existen en ella. La Corporación para el Desarrollo Sostenible del Norte y el Oriente Amazónico, considera que las creencias ancestrales son saberes y conocimientos que se deben aprovechar en la toma de decisiones y ser tenidos en cuenta en las políticas, programas, proyectos de orden territorial, local y nacional en temas relacionados con el cuidado, conservación y protección de las fuentes de agua del territorio, considerando que el municipio de Calamar y el departamento de Guaviare son ricos en fuentes de agua, las cuales se deben cuidar y proteger para garantizar la vida de los diferentes ecosistemas del territorio. Por otra parte, la CDA afirma que las creencias, saberes, conocimientos, valores éticos y morales y prácticas ancestrales de nuestro territorio están en vía de extinción, es decir, las comunidades étnicas están a punto de desaparecer, considerando que su cultura está siendo absorbida aceleradamente por la cultura occidental. Esto se debe en parte como lo manifiesta el ingeniero ambiental Julio Pachón cuando dice que, Los conocimientos, saberes, prácticas, valores ancestrales han sido desvalorizados