La línea de caché que contiene el bloque generalmente consta de entre 4 y 64 bytes (excepcionalmente 128) consecutivos. La capacidad de la caché interna oscila entre 16KB y 64KB, mientras que la caché externa oscila entre 512KB y 1MB. La tendencia actual es hacia dos cachés, lo que permite una ejecución paralela de instrucciones y mejores prestaciones en diseños "pipelining". La estrategia de escritura de datos puede ser inmediata (Write Through) o post-escritura (Write Back), cada una con sus ventajas e inconvenientes. Además, la consistencia de la información y la función de correspondencia son aspectos importantes en la organización de la caché.
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