al no existir una política clara para controlar el endeudamiento del personal, crean distorsiones de dos vías; la primera hacia dentro, en términos...
al no existir una política clara para controlar el endeudamiento del personal, crean distorsiones de dos vías; la primera hacia dentro, en términos del desempeño del personal fruto de una realidad salarial no creada por el sistema mismo y que afecta al sistema en sus niveles de eficiencia, en pocas palabras, un problema que él no ha creado implícitamente. La segunda, es la percepción hacia el exterior de que el maestro, para nuestra realidad salarial como país, no devenga un sueldo competitivo”22.
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