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0 ADAPTACIÓN DE ESTRATEGIAS PEDAGÓGICAS EN EL ÁREA DE LENGUA CASTELLANA Y LITERATURA PARA LA ATENCIÓN EDUCATIVA DE ESTUDIANTES DE ARTES PLÁSTICAS CON TRASTORNOS DEL DESARROLLO INTELECTUAL (TDI) EN UNA INSTITUCIÓN DE EDUCACIÓN NO FORMAL DE LA CIUDAD DE BOGOTÁ. ESTUDIO DE CASO. UNIVERSIDAD SANTO TOMAS VICERRECTORIA UNIVERSIDAD ABIERTA Y A DISTANCIA FACULTAD DE EDUCACION LICENCIATURA LITERATURA Y LENGUA CASTELLANA CAU-BOGOTA 2019 Estudiante: ROSA ELENA ZABALA VALBUENA Tutor: DANIEL MORENO REINA 1 ADAPTACIÓN DE ESTRATEGIAS PEDAGÓGICAS EN EL ÁREA DE LENGUA CASTELLANA Y LITERATURA PARA LA ATENCIÓN EDUCATIVA DE ESTUDIANTES DE ARTES PLÁSTICAS CON TRASTORNOS DEL DESARROLLO INTELECTUAL (TDI) EN UNA INSTITUCIÓN DE EDUCACIÓN NO FORMAL DE LA CIUDAD DE BOGOTÁ. ESTUDIO DE CASO. UNIVERSIDAD SANTO TOMAS VICERRECTORIA UNIVERSIDAD ABIERTA Y A DISTANCIA FACULTAD DE EDUCACION LICENCIATURA EN LITERATURA Y LENGUA CASTELLANA CAU-BOGOTA 2019 Estudiante: ROSA ELENA ZABALA VALBUENA 2 RESUMEN Los trastornos del desarrollo intelectual implican limitaciones del aprendizaje, de las habilidades en general, y del comportamiento adaptativo; siendo así que las principales dificultades de la población que los acusa se manifiestan en los procesos cognitivos, en lo concerniente a la atención y la memoria. La manifestación de estas falencias se revela en distintos niveles de compromiso de la capacidad evocativa, en la lentitud en los procesos y en problemas de atención sostenida. Esto explica los grados variables de dificultad que presentan en la adquisición del lenguaje, cuyo aprendizaje es más lento, presentando entonces retraso en sus diferentes áreas, tales como el desarrollo del vocabulario, la discriminación auditiva y la estructura gramatical. Sin embargo, a pesar de que las dificultades definitorias de la discapacidad cognitiva constituyen a su vez las habilidades que se requieren para aprender a leer y a escribir, tales como la memoria, la ideación, la planeación, la repetición y la abstracción; en este trabajo se emplea el desarrollo en el lenguaje simbólico como una importante posibilidad de estas personas para allanar el camino al aprendizaje del lenguaje verbal. De este modo, un programa de talentos especiales que forma en el campo de las artes plásticas a personas que tienen estas limitaciones cognitivas, fue el escenario en el que se utilizó ese dominio del lenguaje simbólico para apalancar el lenguaje verbal, con muy buenos resultados tanto a nivel de la construcción de narrativas como de su expresión visual, que concluyeron en la elaboración de libros de artista. Palabras clave: trastornos del desarrollo intelectual, lenguaje, aprendizaje, lenguaje verbal, lenguaje simbólico. 3 Tabla de Contenido Resumen Introducción……………………………………………………………………………...4 Capítulo 1 Planteamiento del problema ............................................................... 8 1.2 Objetivos ........................................................................................ 15 1.2.1 Objetivo general ................................................................... 15 1.2.2.Objetivos específicos .......................................................... 15 1.3 Justificación................................................................................... 16 Capítulo 2 Marco Teórico ................................................................................. 17 2.1 Estado del arte ................................................................................ 17 2.2 Marco conceptual. .......................................................................... 20 2.2.1 Adaptación curricular. ............................................................ 20 2.2.2 Inclusión educativa. ............................................................... 20 2.2.3 Trastornos del Desarrollo Intelectual. .................................... 22 2.2.4 Modelos de atención educativa para personas ..con discapacidad cognitiva y TDI ......................................... 27 2.2.5 Estrategias pedagógicas, en el área de Lengua ...Castellana y literatura para personas con TDI ................... 30 2.2.6 Artes plásticas y trastornos del desarrollo intelectual ............. 33 Capítulo 3 3.1 Diseño metodológico ...................................................................... 34 3.2 Delimitación espacial ...................................................................... 35 3.3 Delimitación temporal ..................................................................... 36 3.4 Población del estudio ..................................................................... 36 3.5 Método de enseñanza .................................................................... 37 3.6 Técnicas de trabajo en el aula ........................................................ 37 3.6.1 Estrategia .............................................................................. 38 3.6.2 Material didáctico ................................................................... 38 3.6.2.1 A cargo de la maestra en formación ......................... 38 3.6.2.2 A cargo de los estudiantes ....................................... 38 3.6.2.3 A cargo de la Academia ............................................ 38 Capítulo 4 4.1 Plan de aula.................................................................................... 39 4.2 Desarrollo del plan de aula ............................................................. 39 Capítulo 5 Evaluación ........................................................................................ 59 Conclusiones ...................................................................................................... 63 Recomendaciones .............................................................................................. 66 Bibliografía .......................................................................................................... 68 Anexos ............................................................................................................... 73 4 INTRODUCCION Este estudio de caso se ocupa de los procesos de enseñanza-aprendizaje de la literatura y la lengua castellana de discentes con trastornos del desarrollo intelectual (TDI) que han tenido una formación previa en artes plásticas. Las estrategias en un modelo pedagógico que favorezcan el desarrollo del lenguaje verbal sobre la base de un lenguaje simbólico asentado en personas con alteraciones del desarrollo caracterizados por impedimentos notables de las funciones cognitivas, asociados con limitaciones del aprendizaje, así como de las habilidades y el comportamiento adaptativo, en los dominios conceptual, social y práctico. Esta problemática se caracteriza por una desatención generalizada de las necesidades de la población. En lo educativo, eje de la inclusión económica, social y política, alude al acceso, permanencia y promoción de los estudiantes con necesidades educativas especiales, apuntando a organizar, flexibilizar y adaptar el currículo, el plan de estudios y los procesos de evaluación. Específicamente en Colombia, buscando continuidad en la inserción escolar, social y laboral que permita articular los proyectos de vida de estos ciudadanos, solo a partir de 2006, se promueve desde el Estado la educación no formal en el nivel vocacional, puntualmente en escuelas deportivas y de artes; siendo la Academia de Artes Guerrero, la únicainstitución en la ciudad de Bogotá que ofrece la posibilidad de formación como técnico laboral en artes plásticas. Allí se reconoce y se trabaja arduamente en el mejoramiento sustancial de las capacidades expresivas de personas con TDI, sin incluir, no obstante, procesos formativos alrededor de la representación verbal. El análisis de la situación pasa por la revisión de sus causas. En este sentido, la exclusión y segregación que sufren las personas con TDI son el resultado de la interacción entre su trastorno, la cultura de discriminación y la incapacidad de las instituciones sociales para brindar un acceso digno y universal a la educación, a los mercados laborales, a los servicios públicos y de salud. 5 En lo educativo, se avanza en la adquisición de competencias académicas básicas, pero la formación para el trabajo está aún lejos de ser normalizada en la sociedad, dada la ayuda permanente que requieren estas personas para lograr niveles adecuados de desempeño. En este escenario, la Academia Guerrero funge como una valiosa posibilidad, donde, sin embargo, desde la condición de desarrollo, la precariedad de los procesos de enseñanza-aprendizaje de la representación verbal viene determinada por las dificultades que acusa esta población en el aprendizaje de las habilidades necesarias, tales como la atención, la memoria y el lenguaje; la cultura de la discriminación se combate promoviendo la interacción de la población estudiantil de todos los programas en los mismos espacios; pero la adaptación curricular en el campo no se ha considerado hasta ahora. El lenguaje es una de las habilidades que mayor complejidad presenta para las personas con TDI, de suma importancia, por cuanto se trata de la herramienta fundamental para el acceso de todos y todas a los bienes que la vida social y cultural ofrece para la integración, el máximo desarrollo y el pleno disfrute de la propia existencia; así que el interés de base que anima la realización del estudio de este caso, pasa por indagar maneras de potenciar la enseñanza y el aprendizaje de la lengua castellana y la literatura, buscando incrementar las posibilidades de una mejor calidad de vida de la población a la que está dirigido. El interés académico se relaciona con la exploración de la idea del pedagogo y teórico de la educación Paulo Freire, según la cual un acto de creación es capaz de desencadenar otros actos creadores, aplicada al hecho, no solo de que la educación es de por sí un acto inicial de creación, sino que también los actos de creación que realizan los participantes en el estudio, como resultado de su formación en artes plásticas y lenguaje simbólico, puede dar pie a la generación de otros actos creadores, por ejemplo, en el lenguaje verbal. 6 Desde el punto de vista profesional, el interés versa en atender el llamado de La UNESCO para la mejora general en la calidad de la educación, a partir de un entendimiento de los sistemas educativos más incluyentes y equitativos que procuren reducir las desigualdades, desarrollar las capacidades de los docentes y del sistema y fomentar los entornos de aprendizaje de apoyo. En el marco de la teoría sobre la adaptación curricular y la inclusión educativa, el estudio de caso se realizó por el método de investigación-acción en el aula, a lo largo de 15 sesiones, cada una de 2,5 horas, en la Academia de Artes Guerrero de la ciudad de Bogotá. Se contó con la participación de cinco jóvenes artistas del programa de talentos especiales, con TDI de leve a moderado. El método de enseñanza seleccionado fue el de centros de interés, para la transferencia de conocimientos previos de los estudiantes a una operación creadora de usos estructurados del lenguaje, donde la estrategia global consistió en abordar las temáticas y los componentes del lenguaje y la literatura en función de los logros evidenciados en los portafolios de los artistas en proceso de consolidación y articular los resultados en la elaboración individual de Libros de Artista. La herramienta fundamental fue un plan de aula abierto y en permanente ajuste según la evolución en el desarrollo y asimilación de los contenidos propuestos, para lo cual se convocaron ejercicios de observación, asociación y expresión como técnicas de trabajo en el aula. Simultáneamente, la maestra en formación llevó un diario de campo y se realizó registro fotográfico y en video, de procesos, avances y resultados. El objetivo general de llevar a cabo este estudio ha sido aproximar una mayor comprensión sobre las posibilidades que ofrecen los procesos de enseñanza y aprendizaje de la lengua castellana y la literatura entre personas con trastornos del desarrollo intelectual y una formación previa en lenguajes no verbales. Adicionalmente, caracterizar este tipo de estudiante, propiciar aprendizajes significativos en el campo, construir conocimiento sobre el libro y el libro de artista, vencer la dificultad de atención 7 y concentración de discentes con TDI, y generar ideas para mejorar la acción pedagógica específica y el quehacer del maestro en el entorno definido. En este marco, el trabajo que se presenta se distribuye en cinco capítulos, así: Un primer capítulo, en el que se presenta la fundamentación del estudio realizado. Un segundo capítulo que contiene el estado del arte en la investigación sobre el tema seleccionado y un marco conceptual que abarca las cuestiones de la adaptación curricular, la inclusión educativa, los trastornos del desarrollo intelectual, los modelos de atención educativa para la población y las estrategias pedagógicas en el área de la lengua castellana y la literatura. En el capítulo tres se encuentra el diseño metodológico del estudio de caso, incluyendo el plan de aula implementado; que se desarrolla para la intervención de la situación y la recolección de datos, en el capítulo cuatro. Finalmente, dichos datos se analizan para ofrecer los resultados del estudio, en el capítulo cinco. 8 CAPITULO 1 1.1 PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA Las personas con trastornos del desarrollo intelectual (TDI) tienen dificultades para el aprendizaje derivadas de un compromiso en grado variable de la atención y la memoria, que afectan los dominios del lenguaje: la atención, la memoria y el comportamiento adaptativo; resultando, en términos generales, en un lenguaje inmaduro. Por otra parte, aprender a leer y escribir exige capacidades del discente en aspectos como la planeación, la abstracción y la memoria. Así es que, bajo este panorama, en el que se oponen las dificultades inherentes al colectivo con las habilidades inherentes al aprendizaje de la literatura, surge la pregunta que inspira este estudio, ¿cómo adaptar estrategias pedagógicas en el área de lengua castellana y literatura para la atención educativa a un grupo de estudiantes de artes plásticas con trastornos del desarrollo intelectual (TDI) en una institución de educación no formal de la ciudad de Bogotá? Los trastornos del desarrollo intelectual (TDI) son un grupo de alteraciones del desarrollo caracterizados por impedimentos notables de las funciones cognitivas, que están asociados con limitaciones del aprendizaje, así como de las habilidades y el comportamiento adaptativo (Salvador Carulla et.al, 2011). Desde el consenso de 2011, se reemplaza el término discapacidad intelectual, buscando hacer el énfasis más en el funcionamiento adaptativo que en las falencias mismas de las personas que lo padecen, pues lo que "interesa saber [es] el impacto que dichas dificultades tienen en el aprendizaje de las habilidades que les permiten funcionar con el máximo de autonomía en su vida diaria‖ (Pérez, 2015.p31). La frecuencia de estos trastornos se estima a partir de censos poblacionales en países de ingresos altos, pueslos datos disponibles en las regiones con ingresos medios y bajos son limitados a causa de clasificaciones erróneas y subregistro. Las estimaciones de la prevalencia de TDI en países de ingresos altos muestran amplia variación (1- 10%), dependiendo de las definiciones, los métodos utilizados para estimarla y la población (Battaglia & Carey, 2003). 9 Al usar definiciones más estrictas, como la de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11) para estudiar la población general de todas las edades, las prevalencias de los estudios realizados sobre América Latina y el Caribe son menores (1-3%) (Vásquez, 2009). Para Colombia, según las cifras aportadas por el Observatorio Nacional de Discapacidad para el 2018 basado en la proyección del censo del DANE 2005, se menciona un total de 1.404.108 personas en condición de discapacidad, sin especificar claramente la prevalencia del grupo poblacional con TDI. Hoy está en proceso el registro unificado del DANE según el censo realizado en 2018, que permitirá conocer la prevalencia actual. En el mundo, hay millones de niños y adultos que padecen marginación, que están despojados de casi todos sus derechos y su vida no es plena. Aunque numerosos países firmaron en 2006, a instancias de la OMS, un tratado internacional sobre los derechos de las personas con discapacidad (Naciones Unidas, 2006), todavía existen grandes retos en el ámbito económico, político y social, pues las personas con discapacidad afrontan barreras en estos aspectos que impiden su integración y completa participación en la comunidad, especialmente en países con ingresos medios y bajos. Por ello, de acuerdo con los parámetros propuestos por la UNESCO (2003), resulta imperativo realizar intervenciones basadas en la evidencia científica en materia de promoción de la salud, prevención, rehabilitación e inclusión social. Específicamente en América Latina, si bien los países no exhiben políticas que propicien la segregación de personas con TDI, la carencia de políticas orientadas hacia su inclusión, el respeto de los derechos humanos y la no discriminación desemboca en exclusión social; concepto que incluye tres componentes: privación económica, social y política. En cuanto a la privación económica, las personas con TDI en la región suelen tener empleos inseguros con sueldos muy bajos o están desempleadas y, por ello, carecen de ingresos o estos son insuficientes (Galarza, 2008). 10 La privación social incluye la segregación y la ruptura de los lazos sociales y familiares, porque los afectados viven institucionalizados o sus familiares los esconden a causa de la discriminación, la estigmatización y la falta de oportunidades de participación en actividades sociales y de la vida comunitaria (Allen, Katz & Lazcano, 2009:73). Además, la participación de estas personas en las decisiones que afectan su propia vida es escasa o nula y están excluidas de los procesos políticos. Su exclusión social y laboral conduce a una mayor pobreza y aumenta los gastos catastróficos de las familias. La exclusión y segregación que sufren son el resultado de la interacción entre su trastorno, la cultura de discriminación y la incapacidad de las instituciones sociales para brindar un acceso digno y universal a la educación, a los mercados laborales, a los servicios públicos y de salud. En suma, en América Latina, las personas con TDI están ausentes de las agendas legislativa, judicial, educativa, de salud y social. En respuesta, la inclusión social ha de ser un proceso continuo y progresivo que se inicie desde el grupo familiar con la finalidad de incorporar al individuo con necesidades especiales a la vida escolar, social y laboral de la generalidad. Conceptualmente, esta postura tuvo su origen en la década de los sesenta del siglo pasado, en los países desarrollados, en medio de los movimientos a favor del derecho de las minorías a no ser discriminadas y en la conciencia de las condiciones en que vivían las personas con discapacidad, entre otros colectivos (Giné,2001). En el ámbito educativo, a partir de estos cambios, nació la idea de que la educación es un derecho humano y básico y proporciona los cimientos para lograr una sociedad más justa. ―Todos los alumnos tienen derecho a la educación‖ (Organización de las Naciones Unidas para la Ciencia, la Cultura y la Educación – UNESCO, 1990), por lo que se debe prestar especial atención a las necesidades de aprendizaje de las personas con discapacidad y tomar las medidas para garantizar su acceso a la educación con calidad y con integralidad social (UNESCO, 1994). Tales planteamientos en educación se han adoptado en los países del hemisferio norte apoyados en las políticas educativas, presentando experiencias exitosas en la práctica 11 pedagógica, asumiendo el reto modificando los elementos curriculares (Romero y Lauretti, 2006:348). En los países iberoamericanos, España encabeza el grupo propulsor de este cambio en el sistema educativo, descartando la educación especial como la educación de un determinado grupo de alumnos, dejando en desuso el antiguo modelo médico y psicológico (Arnaiz, 1997). En América Latina, la inclusión escolar ha puesto de manifiesto que la atención a la diversidad es un proceso complejo, que a pesar de sus esfuerzos no ha cubierto la totalidad de sus objetivos, sin embargo, ha representado un cambio importante en el panorama educativo (Lazcano-Ponce et.al., 2013). En Colombia, la atención educativa a las personas con necesidades especiales (NEE) se sustenta en principios de integración social y educativa, desarrollo humano, oportunidad, equilibrio y soporte específico que permitan comprender las diferencias del ser humano como una condición natural. A partir del decreto 2082 de 1996, que reglamenta dicha atención, se establece el uso de estrategias que respondan a sus necesidades y características, la inclusión del tema en los currículos de las instituciones formadoras de docentes, y se propone la implementación de estrategias y apoyos necesarios en los PEI que les permita tener acceso a la educación, la vida laboral y la vida social. De otro lado, desde la Ley General de Educación, Ley 115 de 1994, se destacaron las modalidades educativas: formal (estructura en niveles y grados), no formal (programas y estrategias) e informal (art.2), lo que dio lugar al decreto 0114 del 15 de enero de 1996, que define en su artículo 1° la prestación del servicio educativo No Formal, como El conjunto de acciones educativas que se estructuran sin sujeción al sistema de niveles y grados establecidos en el artículo 11 de la Ley 115 de 1994. Su objetivo es complementar, actualizar, suplir conocimientos, formar en aspectos académicos o laborales y en general capacitar para el desempeño artesanal, artístico, recreacional, ocupacional y comunitario, a las personas que lo deseen o lo requieran. 12 Sin embargo, solo a partir de 2006 se explica que ―La organización de la prestación del servicio educativo desde la modalidad de Educación No Formal es pertinente y extensiva para estudiantes con NEE‖ (MEN, 2006a:51) y en las Orientaciones Pedagógicas (2006b) se propone ―Gestionar la participación del estudiante con discapacidad cognitiva en alternativas educativas de Educación No Formal que estén encaminadas en su proyecto de vida y que pueden ser trabajados… como escuelas deportivas y de arte‖(p.54) Y es que el arte es un quehacer esencial que acompaña al ser humano desde su origen, brindando otras posibilidades para descubrir y entender el mundo, expresar y comunicar sentimientos, emociones, pensamientos y vivencias subjetivas, así como para establecer lazos entre el mundo interno y el mundo exterior (Novaes, 1973:45). Un medio que ayuda a la autocomprensión, la liberación y el autodescubrimiento, a ―reafirmarel yo, [la] identificación de la personalidad y [la] superación de problemas personales‖ (Ulman, 2000:1). El arte fortalece la significación de las experiencias y, extendiendo la percepción y la sensibilidad, beneficia el fortalecimiento de las características personales (Kramer, 1985:66). A través de la creación artística y la reflexión sobre los procesos y productos del arte, la gente puede ―aumentar el conocimiento de sí mismo y los demás... mejorar las habilidades cognitivas y disfrutar de ellos" (Asociación, A.A., 2013); por lo que introducir a una persona al uso del lenguaje plástico aumenta su capacidad de expresión y la confianza en sí mismo, surgiendo la idea de que realizar una práctica artística brinda cualidades terapéuticas. En este sentido, la educación artística para personas con TDI funge como herramienta idónea para alcanzar objetivos de desarrollo, tales como los reseñados en las Orientaciones pedagógicas (2006b): posibilitar de forma concreta la manifestación de pensamientos, intereses y potenciales a través de las creaciones artísticas; aumentar la capacidad expresiva de forma progresiva para así poder expresar libremente sus sentimientos, vivencias y emociones; facilitar el acceso a otros medios de 13 expresión y comunicación, como es el arte en sus diversas manifestaciones; potenciar actitudes de participación, tolerancia y respeto para sí mismo y a los demás; desarrollar hábitos de observación y retentiva, fomentando el desarrollo de actitudes hacia pautas de comportamiento positivas (mejora la autoestima y autocontrol); conocer su propio cuerpo y el del otro; fomentar la sensibilidad y la creatividad; respetar y apreciar el trabajo tanto de él como el de los demás; valorar la opinión propia y la ajena, afianzar su estima personal y auto concepto; favorecer la interacción mediante actividades en grupo; ajustar las expectativas y percepción realista de sí mismo (p.62). Más recientemente, en materia de política educativa para la población con TDI en el país, el decreto 366 de 2009 reglamenta la organización del servicio de apoyo pedagógico para la atención de los estudiantes con barreras para el aprendizaje y la participación en el marco de la educación inclusiva, determinando las competencias de las Secretarías de Educación, la prestación del servicio educativo para esto y las funciones del personal de apoyo. Estipula que los establecimientos educativos que reporten matrícula de tales estudiantes deben organizar, flexibilizar y adaptar el currículo, el plan de estudios y los procesos de evaluación de acuerdo con las condiciones y estrategias establecidas por el MEN. Esta adaptación convierte el currículo en una herramienta que responde a la oferta educativa y a la diversidad pensada especialmente para un alumno en particular con dificultades individuales en el aprendizaje, personalizando su proceso de enseñanza y aprendizaje. Arnaiz (1997), la considera "el conjunto de estrategias y recursos educativos adicionales que la comunidad educativa o el profesorado deciden aplicar o implementar para posibilitar el acceso, permanencia y promoción de los estudiantes con necesidades educativas" (p.148). De esta manera, cuando se habla de adaptación curricular se hace referencia, en primer lugar, a una estrategia de planificación docente para responder a las necesidades de aprendizaje de cada estudiante, teniendo en cuenta el qué, cómo, 14 cuándo y dónde debe aprender, a partir de la organización de la enseñanza propuesta para que todos se beneficien. Sólo en última instancia las adaptaciones se modifican en sus aspectos más significativos como lo son objetivos, secuencias y evaluación o temporalizaciones distintas, y organizaciones escolares (MEN, 2006:35) para responder a las necesidades específicas de algunos estudiantes, con validez en todos los niveles educativos (p.58). Es así como, haciendo acopio de los elementos señalados hasta este punto, la institución de educación no formal de la ciudad de Bogotá seleccionada para este estudio ofrece formación socio ocupacional y laboral en el campo de las artes plásticas para personas con trastornos del desarrollo intelectual. Se trata de un programa iniciado en el año 2005, organizado en seis ciclos, cada uno de un semestre académico de duración. Abarca la formación en dibujo, pintura, cerámica y escultura, fotografía, medios digitales y producción audiovisual; aprendizajes en historia del arte, pedagogía artística y gestión cultural; incluye un trabajo con el cuerpo en áreas como percepción y conciencia corporal, acondicionamiento corporal, expresión y cuerpo escénicos; y culmina con una tutoría de donde emana el trabajo de grado para optar el título de Técnico Laboral en Artes Plásticas. Igualmente, cada semestre concluye con una muestra abierta al público, una exposición de los trabajos más representativos de los estudiantes, donde los aprendices deben sustentar oralmente sus trabajos, argumentar a favor de las propuestas y estar dispuestos y preparados para interactuar con el público a propósito de su obra plástica. Significa que a lo largo del proceso de formación se promueve el trabajo intensivo de la representación gráfica e icónica y las representaciones cinético-corporales, pero la representación verbal, siendo un área de especial déficit en el TDI, si bien se usa con tanta o más intensidad, no se contempla explícitamente en los procesos de enseñanza y aprendizaje. Los TDI se caracterizan por el impedimento marcado de funciones cognitivas centrales, necesarias para el desarrollo de conocimientos, razonamiento y 15 representación simbólica… en general… tienen dificultades con la comprensión verbal, el razonamiento perceptivo, la memoria de trabajo y la rapidez de procesamiento… está asociado con dificultades en diferentes ámbitos del aprendizaje, incluidos los conocimientos académicos y prácticos (Salvador Carulla et al, 2011). En este sentido, habría una debilidad en el programa vocacional para atender en una forma óptima a estos estudiantes. También se estaría dejando pasar una gran oportunidad para mejorar el área de lenguaje de la población específica, pues con avances significativos en el lenguaje no verbal, integrar aprendizajes en lengua castellana y literatura podría facilitar un importante mejoramiento en la estructuración del lenguaje verbal sobre esas bases. 1.2 OBJETIVOS 1.2.1 Objetivo general Aproximar una mayor comprensión sobre las posibilidades que ofrecen los procesos de enseñanza y aprendizaje de la lengua castellana y la literatura entre personas con trastornos del desarrollo intelectual y una formación previa en lenguajes no verbales, para mejorar su acceso a los bienes que brinda el desarrollo integrado del lenguaje. Así entonces, la estrategia que se propone consiste en que, a partir de imágenes generadas por cada estudiante, este cree secuencias narrativas para dar forma a su propio libro de artista. 1.2.2 Objetivos específicos - Conceptualizar el contexto educativo y la caracterización de los estudiantes. - Propiciar en los estudiantes el aprendizaje significativo que, desde la teoría cognitiva de Ausubel significa ―el proceso que se genera en la mente humana cuando subsume nuevas informaciones de manera no arbitraria y sustantiva y que requiere como condiciones: predisposición para aprender y material 16 potencialmente significativo‖ (Rodríguez Palmero M y cols. 2008: 26), propiciando bajo estos delineamientos, el aprendizaje de las temáticas seleccionadas de la lengua castellana y literatura, acorde con la opción vocacional y el Trastorno del Desarrollo Intelectual de los estudiantes participantes en este trabajo de investigación, para lo que se implementa como herramienta la creación de narrativas para la elaboración de un libro de artista.- Construir conocimiento a partir del análisis del libro de artista, de sus partes y sus componentes. - Desarrollar actividades alrededor del libro y sus partes. - Crear y poner a prueba actividades comunicativas centradas en el desarrollo de la atención para vencer la dificultad de atención y concentración de los estudiantes con TDI. - Promover una reflexión profunda sobre los procesos de enseñanza y aprendizaje de la lengua castellana y la literatura, y sus resultados en la población señalada. - Generar ideas para mejorar la acción pedagógica específica y el quehacer del maestro en el entorno definido de estudiantes con TDI. 1.1 Justificación Estudiar minuciosamente este caso va a permitir una mejor aproximación a la exigencia planteada por las políticas públicas de inclusión educativa en cuanto a la adaptación del currículo a las poblaciones específicas en instituciones especializadas. En nuestro caso, se tratará de la formación de personas con trastornos del desarrollo intelectual, en el campo de la lengua castellana y la literatura. Todavía más específico es el hecho de que las personas seleccionadas para el estudio cuentan con una formación previa en artes plásticas, esto es en el campo de los lenguajes no verbales; tal que el análisis de la realidad social así recortada puede aportar elementos relevantes para la didáctica del campo. 17 CAPITULO 2. MARCO TEORICO 2.1 Estado del arte La evolución en la historia para llegar al concepto actual de trastornos del desarrollo intelectual guarda relevancia no sólo con los criterios diagnósticos que son los que definen para cada época el término, sino que su importancia radica en que de esto derivan las políticas sociales a nivel de salud y educación para este colectivo. Por ello es importante dar una mirada a lo que ha sido tal desarrollo. Como reseña Thomas Armstrong (2016), en El poder de la neurodiversidad, durante la Ilustración, s. XVIII, a las personas con alguna discapacidad intelectual se les denominaba "débiles mentales" y eran recluidos en instituciones públicas. En la época de los setenta, en Estados Unidos, se favoreció que las personas con discapacidades intelectuales abandonaran la reclusión y fueran acogidas en sus hogares gracias, entre otros, al trabajo de Wolf Wolfensberger, quien desarrolló la teoría de la normalización. Propuso que las personas con discapacidad intelectual deben considerarse personas en desarrollo y "no diferentes", planteando "la maleabilidad de la conducta", fundamentándose en la existencia en esta población de potencialidades para aprender y desarrollarse (pp. 133-134). Posteriormente, como se menciona en el documento del Ministerio de Educación Nacional (2006c), se hablaba de ―retraso mental”, hasta el sistema de clasificación de enfermedades de 2002. A partir de esta fecha, la Asociación Americana de Retraso Mental (AAMR) propone el término de ―discapacidad cognitiva”, como un concepto subsumido dentro del constructo más general de “discapacidad intelectual”. Es entendida como ―una disposición funcional específica en procesos cognitivos, habilidades de procesamiento y estilos de pensamiento, que determinan el desempeño y el aprendizaje de una persona‖ (p.17), aclarando que pone el énfasis aquí, puesto que ―lo hace un concepto mucho más específico que la discapacidad intelectual y más 18 cercano a las prácticas educativas por su relación directa con los procesos de aprendizaje‖ (p.17); y también porque ―no refiere categorías diagnósticas... sino que constituye un concepto más ecológico y funcional que alude al desempeño cognitivo de cualquier persona‖ (p.17). Para el 2011, el grupo de trabajo convocado por la OMS, en consenso reemplazó el término discapacidad intelectual por el de trastornos del desarrollo intelectual (TDI), entendido como: ―un grupo de trastornos del desarrollo caracterizados por impedimentos notables de las funciones cognitivas, que están asociados con limitaciones del aprendizaje, así como de las habilidades y el comportamiento adaptativo‖. El cambio fue acogido por la Clasificación Internacional de Enfermedades CIE-11, que redefinió los principales descriptores así: • Los TDI se caracterizan por el impedimento marcado de funciones cognitivas centrales, necesarias para el desarrollo de conocimientos, razonamiento y representación simbólica del nivel esperado para la edad de sus pares y del ambiente cultural y comunitario. Sin embargo, patrones muy diferenciados de impedimentos cognitivos aparecen para alteraciones particulares de TDI. • En general, las personas con TDI tienen dificultades en la comprensión verbal, el razonamiento perceptivo, la memoria de trabajo y la rapidez de procesamiento. • El impedimento cognitivo de personas con TDI está asociado con dificultades en diferentes ámbitos del aprendizaje, incluidos los conocimientos académicos y prácticos. • Es típico que las personas con TDI manifiesten dificultades en el comportamiento adaptativo: superar los retos de la vida diaria al nivel esperado para la edad de sus pares y del ambiente cultural comunitario. • Las personas con TDI frecuentemente tienen dificultades para manejar su comportamiento, emociones y relaciones interpersonales y para mantener la motivación en el proceso de aprendizaje. 19 • Como los TDI perduran toda la vida, hay que tener en cuenta las etapas del desarrollo y las transiciones. Y más recientemente, Pérez (2015) acoge la definición de Schalock et al., 2010, según la cual ―La discapacidad intelectual se caracteriza por limitaciones significativas tanto en funcionamiento intelectual como en conducta adaptativa tal y como se ha manifestado en habilidades adaptativas conceptuales, sociales y prácticas. Esta discapacidad aparece antes de los 18 años‖ (p.26); donde es necesario que se cumplan estos tres requisitos para diagnosticarla: a) el/los déficits intelectuales deben ser confirmados mediante evaluación clínica y pruebas de inteligencia estandarizadas; b) el/los déficits en la conducta adaptativa deben ocasionar problemas en la vida personal y social del individuo; c) la aparición de estos déficits debe ocurrir durante el periodo de desarrollo (antes de los 18 años). Por otra parte, los distintos niveles de gravedad: leve, moderado, grave y profundo, se definen sobre la base del funcionamiento adaptativo, y no en las puntuaciones de coeficiente intelectual (CI), ya que es este funcionamiento el que determina el nivel de apoyo requeridos. Las mayores dificultades de esta población se evidencian en los procesos cognitivos y en las características de personalidad. Pérez atina al señalar que al respecto ―nos interesa saber el impacto que dichas dificultades tienen en el aprendizaje de las habilidades que les permiten funcionar con el máximo de autonomía en su vida diaria‖ (p.31). En relación con la atención, se presenta cierta lentitud en los procesos, problemas en la atención sostenida y de largo plazo, pero la atención selectiva es capaz de seleccionar aspectos relevantes de los estímulos, en lo que hay que hacer énfasis; en la memoria tienen dificultades en todos los aspectos (registro sensorial, memoria a corto plazo y memoria a largo plazo); Y en el lenguaje, la adquisición es más lenta y se presenta retraso en las diferentes áreas: desarrollo del vocabulario, discriminación auditiva, estructura gramatical y longitud de las frases (p.32). 20 En este trabajo de investigación, se aborda el tema acogiendo la definición de Trastornos del Desarrollo Intelectual (TDI). 2.2. Marco conceptual 2.2.1 Adaptación curricular Como define Hoyos et.al (2004), el currículo es ―el conjunto de actividades y experiencias que tienen lugar en las instituciones educativas, encaminadas a asegurar el aprendizaje y el desarrollo integralde los educandos, para que actúen adecuadamente sobre el contexto‖ (p.14-15). Y, en tanto que su quehacer es asegurar el aprendizaje, requieren para cumplir con su fin, la modificación a las necesidades individuales. Como refieren los autores, se requiere la descentralización curricular para poder llevar a efecto tal adaptación siendo así que, en Colombia, es mediante la Ley 115 de 1994 que se da esta autonomía a las instituciones educativas (pp.30-31), y con el decreto 2247 de 1997 en su art. 12, se insta tener en cuenta las necesidades específicas de menores con capacidades o talentos excepcionales (MEN, 1997). Por otra parte, de acuerdo con Holzschuer (2018) se entiende como adaptación curricular individualizada (ACI), ―un resumen de información acerca del rendimiento de determinado alumno en cada área académica, así como de su actuación social y conductual‖ (p.9). Y es precisamente en este aspecto en el que radica la verdadera actuación docente y en lo que las políticas de educación deben centrar sus esfuerzos para auspiciar el camino que favorezca el proyecto de cambio hacia una educación inclusiva, para todos y todas. 2.2.2 Inclusión educativa Con este concepto, de acuerdo con las psicopedagogas Aizencang y Bendersky (2013), se propone como eje del sistema educativo al alumno, y la escuela se concibe como el lugar en el que se debe generar el espacio necesario para la construcción subjetiva de todos y todas, promoviendo un aprendizaje en el que se reconozca la singularidad de sus alumnos y el trabajo sea enfocado en sus necesidades (pp.112-118). Así pues, la 21 inclusión educativa es en términos generales, la atención de las necesidades de los alumnos en el espacio de las escuelas, ajustando las formas de enseñanza a las capacidades y las formas de aprendizaje de cada sujeto reconociendo, respetando y manteniendo las diferencias entre los alumnos y alumnas. Madurar el concepto de educación especial para llegar al de inclusión educativa, fue un proceso que surgió para resolver la segregación hacia aquellos con alguna discapacidad. Si bien es cierto que fue gracias a la figura de la educación especial que se superó la marginación del sistema educativo de quienes tenían algún tipo de discapacidad, también lo es que fue bajo esta misma figura que se dio cabida a una disgregación social y cultural, puesto que por una parte, acabó por convertir a estas escuelas en los lugares a donde se enviaban, además, a todos aquellos que el sistema educativo rechazaba por problemas de comportamiento e inadaptación social (Verdugo, 2003); y por otra, el hecho de que ya es de por sí segregador, tener una escuela ―normal para normales‖ y otra para ―diferentes o personas con una etiqueta de discapacidad‖ (párr.7) De modo que, para subsanar la marginalidad en la educación, surgió en 1969 el movimiento normalizador, en Escandinavia, gracias a Bength Nirje, cuyo principio era ―poner a disposición de todas las personas con retraso mental los patrones de vida y las condiciones de la vida cotidiana lo más cerca posible de las circunstancias y formas de vida normales de la sociedad‖ (Perrin, B. y Nirje, B.,1985:69). En 1972, Wolfensberger, en Estados Unidos, reelabora el concepto al promulgar la ―utilización de medios que sean culturalmente lo más normativos posibles para establecer y/o mantener los comportamientos y las características personales que sean lo más normativas posible‖ (p.28), siendo estos los parámetros sobre los que finalmente se fundamenta la inclusión educativa que, como señala Echeita Sarrionandia (2014), es un proceso de transformación del sistema educativo (p. 90). Esta transformación inició en Colombia en 1968, cuando, mediante el decreto 3157, publicado en el Diario oficial 32697, se reestructuró el Ministerio de Educación (MEN), y 22 se creó la división de Educación Especial, a lo que posteriormente sobrevinieron sucesivas transformaciones del sistema educativo con el fin de alcanzar la meta que rige en la actualidad, de una educación para todos y todas. El llamado que la UNESCO hace a los países miembros en 2017 encierra los principios de equidad e inclusión en las políticas de educación en la región, así: — Valorar la presencia, la participación y los logros de todos los estudiantes, independientemente de sus contextos y características personales. — Reconocer los beneficios de la diversidad de los y las estudiantes y cómo vivir con las diferencias y aprender de ellas. — Recopilar, cotejar y evaluar evidencias sobre las barreras al acceso de los niños y de las niñas a la educación, a la participación y a los logros, prestando especial atención a los y las estudiantes que pueden estar más expuestos al fracaso, la marginación o la exclusión. — Alcanzar un entendimiento común de que los sistemas educativos más incluyentes y equitativos tienen el potencial de promover la igualdad de género, reducir las desigualdades, desarrollar las capacidades de los docentes y del sistema y fomentar los entornos de aprendizaje de apoyo. Estos diversos esfuerzos, a su vez, contribuirán a una mejora general en la calidad de la educación. — Movilizar a los principales actores claves del sistema educativo y de la comunidad para propiciar las condiciones para un aprendizaje inclusivo y una comprensión más amplia de los principios de inclusión y equidad. — Aplicar cambios de forma eficaz y supervisar su impacto, reconociendo que el logro de la inclusión y de la equidad en la educación es un proceso continuo, más que un esfuerzo único. 2.2.3 Trastornos del Desarrollo Intelectual En este trabajo de investigación se utilizan los criterios diagnósticos del TDI planteados por El Manual Diagnóstico y Estadístico de las Trastornos Mentales DSM-5 ® de la A.P.A. (American Psychiatry Association), 5ª edición, en 2014, lográndose una 23 aproximación general a las características del funcionamiento adaptativo de este colectivo, a partir de lo cual se establecen las necesidades en lo clínico, social y en lo educativo, que es el aspecto que nos interesa desarrollar. Para el DSM-5 ® de la A.P.A., el Trastorno del Desarrollo Intelectual (TDI) está definido como una discapacidad intelectual dentro del grupo de patologías asociadas al neurodesarrollo. Lo describe como ―un trastorno que comienza durante el período de desarrollo y que incluye limitaciones del funcionamiento intelectual como también del comportamiento adaptativo en los dominios conceptual, social y práctico‖ (p.33), y sus niveles de gravedad, lejos de la métrica del coeficiente intelectual, están determinados por el funcionamiento adaptativo que es el que determina el nivel de apoyo que se requiera (p.34). Profundizar en los criterios diagnósticos excede los intereses de este trabajo, por ser competencia del ámbito clínico; así es que solo se mencionarán las características del dominio conceptual, social y práctico propias del trastorno leve, y moderado, por ser los que caracterizan al grupo de estudiantes participantes en esta investigación. Para los otros grados, ver anexo 1. Escala de gravedad de la discapacidad intelectual (trastorno del desarrollo intelectual) Escala de gravedad Dominio conceptual Dominio social Dominio práctico Leve En los niños de edad preescolar puede no haber diferencias conceptuales manifiestas. En los niños de edad escolar y en los adultos existen dificultades en el aprendizaje de las aptitudes académicas relativas a la lectura, la escritura, la aritmética, el tiempo o el dinero, y se necesita ayuda en uno o más campos para cumplir las expectativas relacionadas con la edad. En los adultos existe alteración del pensamiento abstracto, de la función ejecutiva (es decir, la planificación, la definición de estrategias, la determinación de prioridadesy la flexibilidad cognitiva) y de la memoria a corto plazo, así como del uso funcional de las aptitudes académicas (p. ej., leer, manejar el dinero). Existe un enfoque algo concreto de los problemas y las soluciones en comparación con los grupos de la misma edad. En comparación con los grupos de edad de desarrollo similar, el individuo es inmaduro en cuanto a las relaciones sociales. Por ejemplo, puede haber dificultad para percibir de forma precisa las señales sociales de sus iguales. La comunicación, la conversación y el lenguaje son más concretos o inmaduros de lo esperado para la edad. Puede haber dificultades de regulación de la emoción y del comportamiento de forma apropiada para la edad; estas dificultades son percibidas por sus iguales en las situaciones sociales. Existe una comprensión limitada del riesgo en las situaciones sociales; el juicio social es inmaduro para la edad y el individuo corre el riesgo de ser manipulado por los otros (ingenuidad). El individuo -puede funcionar de forma apropiada para la edad en el cuidado personal. Los individuos necesitan cierta ayuda con las tareas complejas de la vida cotidiana en comparación con sus iguales. En la vida adulta, la ayuda implica normalmente la compra, el transporte, la organización doméstica y el cuidado de los hijos, la preparación de los alimentos y la gestión bancaria y del dinero. Las habilidades recreativas son similares a las de los grupos de la misma edad, aunque necesita ayuda respecto al juicio relacionado con el bienestar y la organización del ocio. En la vida adulta, con frecuencia se observa competitividad en los trabajos que no destacan en habilidades conceptuales. Los individuos generalmente necesitan ayuda para tomar decisiones sobre el cuidado de la salud y sobre temas legales, y para aprender a realizar de manera competente una ocupación que requiera habilidad. Se necesita normalmente ayuda para criar una familia. Moderado Durante todo el desarrollo, las El individuo presenta notables diferencias El individuo puede responsabilizarse de sus necesidades 24 habilidades conceptuales de los individuos están notablemente retrasadas en comparación con sus iguales. En los preescolares, el lenguaje y las habilidades preacadémicas se desarrollan lentamente. En los niños de edad escolar, el progreso de la lectura, la escritura, las matemáticas, la comprensión del tiempo y el dinero se produce lentamente a lo largo de los años escolares y está notablemente reducido en comparación con sus iguales. En los adultos, el desarrollo de las aptitudes académicas está típicamente en un nivel elemental y se necesita ayuda para todas las habilidades académicas, en el trabajo y en la vida personal. Se necesita ayuda continua a diario para completar las tareas conceptuales de la vida cotidiana, y otras personas podrían tener que encargarse de la totalidad de las responsabilidades del individuo. respecto a sus iguales en cuanto al comportamiento social y comunicativo a lo largo del desarrollo. El lenguaje hablado es típicamente el principal instrumento de comunicación social, pero es mucho menos complejo que en sus iguales. La capacidad de relación está vinculada de forma evidente a la familia y a los amigos, y el individuo puede tener amistades satisfactorias a lo largo de la vida y, en ocasiones, relaciones sentimentales en la vida adulta. Sin embargo, estos individuos podrían no percibir o interpretar con precisión las señales sociales. El juicio social y la capacidad para tomar decisiones son limitados, y los cuidadores han de ayudar al individuo en las decisiones de la vida. La amistad, que normalmente se desarrolla con los compañeros, con frecuencia está afectada por limitaciones de la comunicación o sociales. Para tener éxito en el trabajo es necesaria una ayuda social y comunicativa importante. personales, como comer y vestirse, y de las funciones excretoras y la higiene como un adulto, yunque se necesita un período largo de aprendizaje y tiempo para que el individuo sea autónomo en estos campos, y podría necesitar personas que le recuerden lo que tiene que hacer. De manera similar, podría participar en todas las tareas domésticas de la vida adulta, aunque se necesita un período largo de aprendizaje y se requiere ayuda continua para lograr un nivel de funcionamiento adulto. Podrá asumir encargos independientes en los trabajos que requieran habilidades conceptuales y de comunicación limitadas, pero se necesitará una ayuda considerable de sus compañeros y supervisores, y de otras personas, para administrar las expectativas sociales, las complejidades laborales y las responsabilidades complementarias, como la programación, el transporte, los beneficios sanitarios y la gestión del dinero. Se pueden desarrollar diversas habilidades recreativas. Estas personas necesitan normalmente ayuda adicional y oportunidades de aprendizaje durante un período de tiempo largo. Una minoría importante presenta un comportamiento inadaptado que causa problemas sociales Tomado de AMERICAN PSYCHIATRIC ASSOCIATION., KUPFER, D. J., REGIER, D. A., ARANGO LÓPEZ, C., AYUSO-MATEOS, J. L., VIETA PASCUAL, E., & BAGNEY LIFANTE, A. (2014). DSM-5: Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (5a ed.). Madrid, España: Editorial Médica Panamericana. pp34-36 Si bien los criterios diagnósticos permiten establecer las necesidades del colectivo, es a partir del modelo con el que se explique la discapacidad que se puede hacer una aproximación a las posibilidades de intervención que, para los intereses planteados de este estudio, consiste en buscar el modelo pedagógico y las estrategias a implementar para la enseñanza de la literatura y lengua castellana en adultos jóvenes con TDI y con formación previa en artes plásticas. Para analizar los modelos del enfoque de la discapacidad, se sigue la revisión que la investigadora en salud pública Peñas-Felizzola presentó en 2013, momento en el que planteó cinco arquetipos: 1) el tradicional o cultural, que enfatiza en la compasión y reviste carácter asistencialista; 2) el biomédico de Nagi, centrado en la limitación funcional del individuo; 3) el social de Oliver, quien al basarse en la autonomía y al adoptar el planteamiento que hace Bernell S de la discapacidad como una relación entre las personas y su entorno; finalmente define el modelo como el resultado de la opresión y la exclusión social; 4) el biopsicosocial, ecológico o relacional, en el que la discapacidad resulta tanto de la condición de salud del individuo como de su entorno social y físico; y para finalizar, el 5) el modelo universalizante de Turner, quien en tanto que trata de la discapacidad como un fenómeno universal considera que todas las 25 personas tienen susceptibilidad de experimentar alguna situación de discapacidad a lo largo de su experiencia vital (pp.207-211) En este trabajo, el enfoque que se adopta es el biopsicosocial o ecológico, por cuanto es el que permite una visión holística de las personas con TDI. Este modelo, como señala Peñas-Felizzola (2013b), fue desarrollado por el psiquiatra norteamericano George L. Engel en 1977, quien, superando el modelo causa-efecto del modelo médico hasta ese momento imperante, se fundamenta en la teoría de sistemas, y postula que, en el funcionamiento humano, tanto en el contexto de enfermedad como en la percepción de esta, actúan tres factores determinantes que están interconectados como una red, y que son los biológicos, psicológicos y sociales. Señalando además que, cualquier factor relativo a la salud se transmite por la red compleja de estos elementos interconectados (p.130-133). Por otra parte, bajo el enfoque holístico de la discapacidad, se puede comprender que, mientras el factor biológicoexcede el ámbito de la pedagogía, es en el psicológico y el social en los que el sistema educativo debe intervenir para favorecer el proceso enseñanza aprendizaje de las personas con TDI, y así hacer posible la inclusión educativa. De modo que, con esta visión y buscando las herramientas con las que plantear el proceso de enseñanza aprendizaje en personas con TDI, se encuentra afinidad con Lev Vygotski (MOTA DE CABRERA, C y, VILLALOBOS, J. 2007) al señalar en su teoría sociocultural del aprendizaje que este se compone de tres aristas que interactúan por medio del lenguaje, el individuo con su genética y sus funciones mentales; las habilidades psicológicas del individuo, y la interacción social que estimula el desarrollo de las funciones mentales las cuales son de dos tipos, las inferiores (con las que se nace y dependen de la genética) y las superiores o habilidades psicológicas (son adquiridas y se desarrollan por la interacción social) (pp. 411-413). Significa entonces, de acuerdo con la teoría sociocultural, que el aprendizaje consiste en la mediación de las funciones mentales que el medio sociocultural genera. Y es en este sentido en el que, cuando el sujeto discente tiene TDI, la teoría de las inteligencias 26 múltiples pone a la vista que todo sujeto es susceptible de intervención desde la pedagogía. Howard Gardner (2001) apunta a que el ser humano posee diversas habilidades intelectuales relativamente autónomas que pueden ser moldeadas para favorecer la adaptabilidad de los sujetos, y sus oportunidades de educación. Tan solo deben identificarse sus potencialidades y, a partir de estas, diseñar estrategias de enriquecimiento especial (pp.24-26). Este es justamente el escenario en el que se desarrolla el presente trabajo de investigación, puesto que a partir de las habilidades con las que el grupo de estudiantes participantes cuenta -conocimientos en el lenguaje simbólico-, es que se propone la enseñanza de la literatura y lengua castellana. Si bien hasta este momento se puede identificar que este proyecto se identifica en alto grado con las teorías constructivistas del conocimiento sin inscribirse exclusivamente en él, puesto con lo dicho hasta ahora concluimos que las personas con TDI, tienen compromiso de grado diferente en los dominios conceptual, social y práctico, y que éstos, así como su interrelación, constituyen las vías de intervención pedagógica, es a partir de las ideas del conocimiento sociocultural de Vygotski que comprendemos que el proceso educativo se logra de la interacción social y con Gardner que todo sujeto tiene habilidades a partir de las cuales puede compensar aquellas dimensiones en las que tiene debilidades, también es cierto que es con el conductismo de Decroly que se encuentra que es a partir de la individualidad del discente que se puede introducirlo a la interacción con el otro pues objetivando sus necesidades individuales, es la manera como se puede ayudarle a que busque el conocimiento. Decroly introduce además un elemento que es esencial principalmente para personas con TDI y es la función co- educadora de las familias por cuanto son sujetos dependientes de sus familias más que otros grupos de estudiantes. Si bien Vygotsky plantea la importancia de la interacción social, Decroly incluye también la familiar. Así es como estas son las teorías que desde la psicología del conocimiento se utilizan para este trabajo de investigación, y es a partir de éstas que se plantea entonces la búsqueda del modelo que mejor se pueda adaptar para la enseñanza de la literatura y 27 lengua castellana, es decir el lenguaje verbal a un grupo de estudiantes con TDI con conocimientos previos en lenguaje simbólico. 2.2.4 Modelos de atención educativa para personas con discapacidad cognitiva y TDI El qué y cómo de la educación para personas con TDI, son las preguntas que interesa responder ahora para direccionar la búsqueda del modelo pedagógico que favorezca el proceso de enseñanza-aprendizaje de la Lengua Castellana en estudiantes con TDI, quienes además cuentan con una formación previa en artes plásticas. Con este fin, se abordan los planteamientos de los pedagogos colombianos Rafael Flórez Ochoa y Julián De Zubiría Samper, para recorrer los pasos que sugieren deben seguirse para hallar un modelo pedagógico a implementar que satisfaga las necesidades de los discentes. Para Flórez (1995), los modelos son las ―representaciones esenciales de las corrientes pedagógicas‖ (p.165); y para De Zubiría (2015), son ―la huella inocultable de nuestra concepción pedagógica‖ (p.25), que se caracterizan a partir de ―la finalidad, la selección de propósitos y el sentido que se le asigna a la educación‖ (p.41). Como reseña Flórez (1995b), con el movimiento pedagógico de la Escuela Nueva se buscó que la escuela definiera su propia misión y metas de formación con la pretensión de crear una humanidad única y pluralista, avanzando en la Escuela Tradicional que era coactiva, disciplinar, autoritaria y magisterial, en la que los niños tenían un papel sumiso. Así es que La Escuela Nueva, inspirada en Dewey, apunta a una educación hacia la vida y la producción social, y con Makarenko, hacia el cultivo de la responsabilidad social y cultural (p.159-163) y más recientemente, Julián De Zubiría Samper, (Zubiría, 2015) promulga por el desarrollo (p.196). Tanto De Zubiría como Flórez, proponen responder unas preguntas que conduzcan a la definición del modelo pedagógico al cual adherirse. De Zubiría (2015c), sugiere usar las preguntas que propuso Coll (1985 y 1994), en su libro Psicología y currículum, para 28 elaborar un currículo afirmando que es de acuerdo al nivel de generalidad como se respondan que se puede hablar bien sea de una teoría, de un modelo pedagógico o de un currículo. Estas son: ¿qué enseñar?, ¿cuándo enseñar?, ¿cómo enseñar? y ¿qué?, ¿cuándo y cómo evaluar? y De Zubiría le añade ¿para qué de la educación? (16-36). Entre tanto, Rafael Flórez (1995b), propone como componentes de un modelo pedagógico la meta educativa, el desarrollo del individuo, los contenidos curriculares, la relación maestro-alumno, y la metodología de la enseñanza; para lo que invita a responder: ¿qué tipo de ser humano se quiere formar?,¿con qué experiencias crece y de desarrolla un ser humano?,¿quién debe impulsar el proceso educativo? y ¿con qué métodos y técnicas puede alcanzarse mayor eficacia? (p.175). Para nuestro caso, se responderán las preguntas propuestas por De Zubiría Samper y es lo que ahora se propone con el objetivo de llegar al modelo pedagógico a implementar en el grupo de estudiantes participantes de este trabajo. 1 ¿Para qué de la educación? Componente: Propósitos. En términos generales, se afirma con Cultrera S (1949), que la educación es ―todo un complejo continuado de actos directivos, ordenados a un determinado fin, de forma que un acto se relacione por su calidad con los anteriores, progresando así continuamente hacia la meta prefijada‖ (p.77-78); y cuando se trata de educar en lenguaje verbal a estudiantes que poseen conocimientos previos en lenguaje simbólico dada su formación previa en artes plásticas como es el caso en este trabajo, se cree con Paulo Freire (2011) en la educación como ―un acto de creación capaz de desencadenar otros actos creadores‖ (p.98). Este trabajo se inscribe en educar en literatura y lengua castellana construyendo el conocimiento a partir del reconocimiento de los intereses del colectivo y propendiendo por el desarrollo de sus habilidades para una convivencia en sociedad que les permita enfrentar la vida con autonomía. 2 ¿Qué enseñar? Componente: Contenidos. Al tratarse de un grupo de estudiantes que tienen, de acuerdo al DSM V, dificultades para percibir las señales sociales de sus iguales y cursan con dificultades en la regulaciónde sus emociones, por lo que su juicio social es inmaduro, siendo lo que les limita tanto en su autonomía como en la interacción social, y lo que se busca es aportarles herramientas que les permita 29 autonomía y convivir en sociedad; la respuesta a los contenidos está en: desarrollar habilidades de comunicación. El grupo tiene formación en artes plásticas y en consecuencia habilidades en la comunicación simbólica así es que para interrelacionar con la sociedad lo que falta por madurar en este colectivo es la habilidad en el lenguaje verbal y el escrito que es lo que se propone en este estudio de investigación. Así es que los contenidos se desarrollan alineados con sus conocimientos ya adquiridos en el lenguaje simbólico. 3 ¿Cuándo enseñar? Componente: Secuencia. Atendiendo a que el grupo de participantes tienen algún grado de dificultad en el pensamiento abstracto, principalmente para la planificación de estrategias y definición de prioridades, debido al TDI, y que, en consecuencia, requieren apoyos en las tareas conceptuales para desarrollar sus habilidades académicas y ejecutivas, se determinan estos como los aspectos que constituyen las necesidades académicas en las que se propone trabajar en este estudio. Entonces, se plantea organizar los contenidos desde lo más sencillo del aprendizaje del lenguaje escrito hasta lo más complejo y que es, la elaboración de un cuento, haciéndolo a partir de sus herramientas y fortalezas en el lenguaje simbólico. Es decir, con sus habilidades en artes plásticas superar su dificultad ejecutiva progresiva en el lenguaje verbal. Se propone que, a través de las manualidades y del contacto con objetos como es el libro de artista (expresión simbólica), el estudiante desarrolle la abstracción necesaria para la adquisición de las habilidades en el lenguaje verbal y el escrito expresando en forma literaria su obra de arte. 4 ¿Cómo enseñar? Componente: Estrategias. Se plantea que, a través de la experimentación con el lenguaje simbólico por medio de la elaboración del libro de artista, experimente con el lenguaje verbal y con el reconocimiento del otro y los otros para trasformar su arte plástica en el arte de la escritura; es decir, construir su cuento a través de la experimentación en el lenguaje simbólico mediante la elaboración de su 30 libro de artista. Con el apoyo de la maestra en formación, el estudiante participante en este estudio aprende por observación y experimentación. 5 ¿Qué?, ¿cuándo? y, ¿cómo evaluar? Componente: Metodología. El método implementado sigue la línea de aprender haciendo, puesto que, centrándose en las habilidades plásticas de los discentes, que significa habilidades en las sensaciones y la expresión de estas, a través de la manipulación de cuentos, y ejercicios de escritura, se desarrollaran las habilidades en la expresión escrita de su arte simbólico. Con lo dicho hasta el momento, se concluye que el modelo pedagógico que se puede adaptar a las necesidades del grupo de estudiantes con TDI y con formación en artes plásticas para la enseñanza de la literatura y lengua castellana, se encuentra en los preceptos planteados por la escuela activa, con un modelo autroestructurante. Como refiere Julián de Zubiría y Samper (2015), esta identifica el aprendizaje con la acción, el estudiante es el protagonista en el proceso educativo y, tanto el programa como los métodos se construyen a partir de sus necesidades e intereses. La finalidad de la educación es a su vez cognitiva e instructiva, así como orientada a lograr la felicidad, seguridad y autonomía del discente. El maestro tiene un papel secundario y sirve de facilitador para procurar el desarrollo espontáneo del estudiante quien, a partir de sus intereses y necesidades, construya habilidades, conocimientos y destrezas desde lo simple hasta lo complejo que lo preparen para enfrentar la vida (112-115). 2.2.5 Estrategias pedagógicas, en el área de Lengua Castellana y Literatura para personas con TDI De acuerdo con De Zubiría (2015d), las estrategias metodológicas se establecen según la relación que se plantee entre los estudiantes, los docentes y el saber (p.60); en consecuencia, dependen tanto del lugar que se otorgue al discente y al maestro ante la escuela y el aprendizaje, así como de los objetivos y contenidos que se quieran transmitir. Para discentes con TDI y que es el caso que nos concierne en este estudio, el papel del aprendiz es el de un sujeto activo y generador del aprendizaje y el del docente es de facilitador del aprendizaje. 31 En otro aspecto, plantear el cómo de la enseñanza de la literatura y lengua castellana para estudiantes con TDI, requiere reconocer tanto las características globales como las particulares del grupo al que van dirigidas las acciones pedagógicas, puesto que, a partir de este reconocimiento, el maestro puede establecer las aptitudes e intereses de los discentes desde donde buscar las estrategias de enseñanza más favorables. Para nuestro caso, se identifican dos cualidades generales en el grupo de estudiantes, la primera y que es propia del TDI es que, si bien saben leer y escribir, sus habilidades comunicativas están limitadas debido a que, como señala el DSM V, poseen un lenguaje concreto e inmaduro, dificultades para la planeación, la abstracción y la memoria las cuales, son habilidades esenciales para la adquisición de capacidades de lecto-escritura. La segunda cualidad y que es determinante para este grupo es que tienen formación en artes plásticas mediante la formación técnica en esta área. Ahora bien, si se tiene en cuenta que tanto las artes plásticas como la Literatura y la Lengua Castellana son formas distintas para comunicar los pensamientos, emociones y sentimientos, comparten el modo de expresión: los símbolos. Así pues, se considera que la formación previa en artes plásticas facilita a los estudiantes allanar el terreno para el aprendizaje de la lectoescritura, pues ―los artistas entienden el poder de la imagen, el sonido, la representación y la palabra, y no de manera separada unos de otros, sino de forma interconectada para crear significados adicionales‖ (Irwin, 2013. p.109) y de este poder de creación artística se hace uso a la hora de planear estrategias pedagógicas, pues de lo que se trata es de complementar su conocimiento en la expresión artística plástica con el arte de escribir un cuento como expresión artística literaria. Y precisamente, hacer uso de las habilidades con las que cuentan los estudiantes para introducirlos en la adquisición de otros dominios es lo que, desde la teoría cognitiva de Gardner y las inteligencias múltiples hace pensar que es viable que las personas con TDI puedan desarrollar habilidades de lectoescritura a pesar de que justamente las dificultades definitorias de la discapacidad cognitiva constituyen a su vez, las mismas habilidades requeridas para aprender a leer y escribir como son la memoria, la ideación, 32 la planeación, la repetición y la abstracción. Así mismo, la viabilidad de nuestro emprendimiento se apoya en Decroly y ―los centros de interés‖ por considerar que las capacidades se pueden desarrollar a partir de los propios intereses. De modo que, una de nuestras estrategias es despertar el interés del grupo por adquirir habilidades para la lectoescritura para que, posteriormente puedan comunicar su arte plástica a través del arte de la escritura. Decroly, (Londoño 2001) propone una ―escuela para la vida y por la vida‖ en la que el enfoque se dirige hacia necesidades de la vida como ―la defensa hacia el peligro, el entretenimiento y el gusto por el trabajo‖ (p.43- 44) que si bien hace parte de los objetivos a alcanzar para todos los estudiantes, es principalmente útil para enfocar la escuela en personas con TDI en tanto que son personas vulnerablesporque requieren apoyos para su desenvolvimiento en sociedad puesto que según el DSM V pueden tener dificultades para percibir las señales sociales. Su método educativo como mencionan Irene Calvo y colaboradores (2015), está dirigido al aprendizaje por medio de la experimentación basada en los intereses de los alumnos, que es la estrategia de ―los centros de interés‖ siendo además el juego la estrategia del programa académico (p.65-66). Es así que para este trabajo, además de las artes plásticas y el aprender experimentando, se adopta también la estrategia de aprender jugando de Decroly. La herramienta del juego como estrategia pedagógica es vista desde la didáctica (Minerva T. 2002) como una forma de entretenimiento que favorece el conocimiento al estimular la atención, el autodominio, la honradez, la enseña de reglas y el respeto de estas, estimula la cooperación, es decir, enseña valores (p.290). Y precisamente, los dominios hacia los que se deben dirigir las estrategias de enseñanza aprendizaje en un colectivo con TDI, son justamente aquellas que favorezcan el autocontrol, la atención y la interrelación con los otros, y que Decroly (Decroly en Londoño Ramos 2001b) señala como el objetivo de aprender ―la defensa hacia el peligro, el entretenimiento y el gusto por el trabajo‖ (p.43- 44) 33 De acuerdo con lo señalado a este punto, las estrategias que se consideran más adecuadas para la enseñanza de la Literatura y Lengua Castellana para el grupo de estudiantes participantes en este trabajo de investigación que tienen TDI y quienes además cuentan con una formación previa en artes plásticas, son las propuestas por el programa de Decroly. Se propone entonces que el eje de las herramientas a implementar sean sus capacidades en la expresión simbólica a través de las artes Plásticas y, que el instrumento utilizado sea la elaboración del libro de artista. El libro de artista es ―un objeto estético‖ (Moros 2010 p.151) por medio del cual ―se trata de hacer uso de una forma socialmente aceptada, para transgredirla, destruirla mediante una gimnasia creativa y transustanciarla en obra de arte―(Moros b 2010 p.153), y para González (2012) es ―manifestación de la expresión y la comunicación humana, que implica un trabajo de creación estética, mediante diversos lenguajes o técnicas de representación simbólica, con el propósito de producir un impacto sensible, experiencia emocional de recreación o invención de la realidad‖. De modo que, en tanto creación artística palpable y visible, permite que se utilice como el eje en la estrategia pedagógica al tenor de Decroly, porque pertenece al campo artístico de interés del discente y permite además que el artista se estimule e interese por sobrepasar sus conocimientos en artes plásticas para acompañar el arte plástica de su creación con el aprendizaje de la escritura. 2.2.6 Artes plásticas y trastornos del desarrollo intelectual El arte es una forma de comunicación y, según Ballesta y colaboradores (2011), es un lenguaje del ser humano por medio del cual se abre un espacio para el diálogo entre lo subjetivo y lo objetivo, en ―donde el Arte nos permite contar, expresar y comunicar ambos mundos‖ (p.140); y justamente es en las áreas de las emociones y la comunicación, que la personas con TDI manifiestan dificultades que afectan su desempeño social. De acuerdo con esto, estimular la libre expresión artística de las personas con TDI por medio de las artes plásticas permite establecer un puente de comunicación entre el sujeto con TDI y la sociedad, que permitirá a la persona con 34 déficit cognitivo traspasar las barreras que su condición intelectual le presenta, para interactuar en la escuela, en el trabajo y en la familia, y así integrarse a la sociedad. Las artes, incluyendo las plásticas, permiten a los individuos con discapacidad cognitiva desarrollar habilidades de la expresión simbólica. A partir de aquí pueden integrar el desarrollo de otras habilidades, pues de acuerdo con Faure (1973), La dimensión artística es otra expresión esencial de la personalidad. Pero el interés por lo bello, la posibilidad de descifrarlo e integrarlo como elemento de la personalidad, así como los demás componentes de la experiencia artística, deberían ser indisociables de la práctica de una o varias actividades artísticas (p236). Finalmente, el arte permite desarrollar las potenciales del ser en cuanto a que permite la expresión objetiva de la subjetividad que yace en todo ser humano y, en consecuencia, le permite hacerse a un lugar que como individuo ocupa en la sociedad. Permitir objetivar la individualidad de las personas con TDI por medio de las artes plásticas, es avanzar en el camino hacia la construcción de una sociedad inclusiva, pues solo bajo el concepto de que todos somos seres individuales, se reconocen los derechos y deberes de unos hacia otros. CAPITULO 3 3.1 Diseño metodológico El estudio es cualitativo en la perspectiva de estudio en la que los datos son recolectados en el salón de clases donde se desarrollan las actividades de proyecto de aula, para lo que se recurre al método de la investigación- acción, definida como: una actividad dinámica y compleja que implica los esfuerzos de los miembros de las comunidades u organizaciones y de los investigadores profesionales. Implica simultáneamente la cogeneración de nueva información y el análisis junto con 35 acciones encaminadas a trasformar la situación en direcciones democráticas. La investigación-acción es holística y también ligada al contexto, produce soluciones parciales y nuevo conocimiento como un conjunto de partes integradas…La investigación-acción es un modo de proporcionar resultados tangibles y deseados a los participantes y constituye un proceso de generación de conocimiento que favorece tanto a los investigadores como a los participantes. (Greenwood y Levin, citado en Blaxter L, Hughes C y Tight, 2015, p.82) De modo que se recurre a este enfoque con el fin de explorar las posibilidades de integración de los diferentes lenguajes dentro del marco de la condición cognitiva que caracteriza a los participantes. Así, la intervención programada garantiza explorar las posibilidades de llevar a cabo dicha integración desde una adaptación concienzuda de los lineamientos curriculares y los estándares básicos de competencias de lenguaje a las necesidades específicas de los estudiantes. 3.2 Delimitación espacial El proyecto se desarrolló en una institución de educación no formal de la ciudad de Bogotá, la Escuela de Artes Guerrero, que ofrece formación socio ocupacional y laboral en el campo de las artes plásticas para personas con trastornos del desarrollo intelectual. Se trata de un programa iniciado en el año 2005, organizado en seis ciclos, cada uno de un semestre académico de duración. Abarca la formación en dibujo, pintura, cerámica y escultura, fotografía, medios digitales y producción audiovisual; aprendizajes en historia del arte, pedagogía artística y gestión cultural; incluye un trabajo con el cuerpo en áreas como percepción y conciencia corporal, acondicionamiento corporal, expresión y cuerpo escénicos; y culmina con una tutoría de donde emana el trabajo de grado para optar el título de Técnico Laboral en Artes Plásticas. Igualmente, cada semestre concluye con una muestra abierta al público, una exposición de los trabajos más representativos de los estudiantes, donde los aprendices deben 36 sustentar oralmente sus trabajos, argumentar a favor de las propuestas y estar dispuestos y preparados para interactuar con el público a propósito de su obra plástica. 3.3 Delimitación temporal El plan de aula se desarrolló en 15 sesiones, cada una de 2,5 horas. Etapas Presentación. Sesión 1. (abril 6 de 2017) Exploración.
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