Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
LIBRO V 307 en tiempos antiguos, con la oligarquía de los Basílidas, el pueblo, aunque los que estaban en el poder llevaban bien la administración, irritado por ser gobernado por unos po- cos, cambió el régimen. Las alteraciones de las oligarquías proceden de sí mis- mas a causa de la rivalidad entre los que hacen demagogia. 6 La demagogia es de dos clases: una, en el seno de la misma minoría 1°13 (pues un demagogo puede surgir, aun: que sean muy pocos; por ejemplo, entre los Treinta 1°14, en Atenas, los de Caricles lo'' adquirieron fuerza sirvién- dose de la demagogia con los Treinta, y del mismo modo los de Frínico 1°16 entre los Cuatrocientos). Otra, cuando prende todos los propietarios, nobles o no, qu,e habían sido excluidos de la vida política. lo'' Cf. V 8, 6, 1308a17. LOS Treinta son considerados como una tiranía; mandan desde la primavera al final del aíio 404 a. C. JENOFONTE, Helénicas 11 4, 8 y 24 SS., y ARISTÓTELES, Comtitucidn de l a atenienses 39, narran el res- tablecimiento de la democracia con la vuelta a Atenas de los exiliados del Pireo. En otras citas antiguas sobre los ((Treinta Tiranos» son considera- dos como una dinastía; cf. ARIST~TELES, Constitución de los atenienses 41, 2; ANDOCIDES, 2, 27; PLATÓN, Epístola VI1 325A; DIODORO, XIV 32, 1-4; CICERÓN, Sobre las leyes 1 28, 42. lo'' Caricles, como demócrata, forma parte en 415 a. C. de una co- misión que investiga sobre el famoso suceso de la mutilación de los Her- mes (cf: ANDÓCIDES, 1 36; PLUTARCO, Nicias 4). En 413 a. C., Tucídides nos dice que Caricles como general con Demóstenes devastó la costa la- conia (VI1 20-26). En 404 a. C. forma parte de los Treinta, entre los que juega un papel muy importante; cf. JENOFONTE, Helénicas 11 3, 2; Memorables 1 2, 31; LISIAS, Contra Eratóstenes 55. Fue desterrado en 403 a. C., pero muy pronto pudo volver a Atenas. lo" Frínico llegó a ser general en tiempo de los Cuatrocientos. Sobre este gobierno, cf. supra, V 4, 13, 1304b12 y nota 990. Antes de la caída de los Cuatrocientos murió asesinado al salir del Consejo; cf. TUC~IDES, VI11 68, 90 Y 92. los que forman parte del gobierno oligarquico se atraen con procedimientos demagógicos al pueblo, como en Lari- sa 1017 , donde los ((guardianes de los ciudadanos)) se atraían demagógicamente a la multitud por ser elegidos por ella; sucede lo mismo en todas las oligarquías donde los magis- trados no son elegidos por la misma clase que desempeña las magistraturas, sino que las magistraturas salen de los que tienen grandes rentas o de los círculos políticos 1°18, pero los eligen los hoplitas o el pueblo; como ocurría en Abidos 1°19 y donde los tribunales no son parte del gobier- 7 no (pues se atraen al pueblo demagógicamente con vistas a los pleitos y provocan el cambio de régimen; fue lo que precisamente ocurrió en Heraclea del Ponto loZ0); además, se producen cambios cuando algunos intentan restringir la 1 0 1 7 Larisa es una ciudad de Tesalia, muy fértil, con una nobleza de grandes propietarios, famosa por la cría de caballos; cf. VI 7, 2, 1321a8 SS.; IV 3, 2, 1289b35 SS. Sobre esta ciudad, véase también 111 2, 2, 1275b26 SS. y 11 8, 9, 1268a22, pasaje este ultimo en el que se trata de los ((guar- dianes de la ciudad», politophjkzr, cargo al que sólo podían acceder grandes rentistas; tenía sin duda la responsabilidad de guardar la ciudad, sus mu- ros y sus puertas; pero pertenecía al pueblo el derecho de su elección; cf. también VI 8, l4+ 1322a33. La oligarquía de la que se habla acaba cuando Licofrón de Feras derrotó a los jefes de la nobleza tesalia en Farsalo, en 404 a. C., y se hizo dueíio de Larisa. 'O1' Sobre el papel de los clubs políticos, hetairíai, en esta época, véa- se F. SARTORI, La eterie nella vita politica ateniese del V I et V secolo A. C., Roma, 1957. PLATÓN, Teeteto 173D. PLUTARCO, Lisandro 5, 13, 21, habla de estos círculos políticos cerrados de carácter oligárquico. So- bre sus fines, cf. también TUCÍDIDES, 111 82, 4-6; VI11 54, 4. lo'' Abidos, en el Quersoneso Tracio, está situada en la zona más estrecha del Helesponto; fue fundada por los milesios en torno a 670 a. C.; cf. EsTRABÓN, XIII 1, 22. La oligarquía de Abidos se habría esta- blecido después de su defección de la confederacion ateniense, cuando llegó a ser después de 411 a. C. la gran base lacedemonia del noroeste de Asia Menor; cf. TUC~DIDES, VI1 62, 1; JENOWNTE, Helénicm IV 8, 35 SS. 'OM Sobre Heraclea del Ponto véase supra, nota 994. LIBRO v 309 oligarquía a un número más pequeño, pues los que buscan la igualdad se ven obligados a llamar en su auxilio al pueblo. s Se dan también cambios de la oligarquía, cuando los oligarcas gastan sus bienes privados 'O2' viviendo desenfre- nadamente; de hecho, tales personas pretenden hacer una 1306a revolución y ellos mismos aspiran a la tiranía o preparan a otro para tal, como Hiparino a Dionisio en Siracusa, o como en Anfípolis donde cierto individuo cuyo nom- bre era Cleótimo llevó colonos de Calcis, y después de 9 llegar los sublevó contra los ricos; y en Egina donde el que llevó a cabo la negociación con Cares intentó cam- biar el régimen por la misma causa. Así pues, unas veces intentan producir algún cambio directamente, otras veces Cf. V 12, 17, 1316b14 SS. PLATÓN, República VI11 555D. EURÍPI- DES, Heracla furioso 588. 'O2' Hiparino, influyente ciudadano de Siracusa, fue general y procu- ró por todos los medios que eligiesen al general Dionisio el Viejo con plenos poderes en 406/5 a. C.; cf. PLUTARCO, Dión 3. 'Oz3 Sobre Anfípolis, cf. supra, V 3, 13, 1303b2 y nota %9. Este suce- so debió ocurrir bajo la oligarquía que gobierna la ciudad después de 424 a. C. Cleótimo, un ciudadano rico, después de derrochar su fortuna, quiso instaurar la tiranía en Anfipolis con el apoyo de los nuevos colonos de Calcis de Eubea. 'O" Egina, pequefia isla rocosa, próxima a Atenas, era un gran centro comercial por vía marítima. Su aristocracia de industriales, negociantes y armadores supo conservar la independencia de la ciudad, incluso en tiempo de las Guerras Médicas; cf. HERÓWTO, V 89 SS.; VI 87 SS. Hubo una oposición democrática a esa aristocracia en el poder, pero no llegó a la tiranía. No se conocen por otras fuentes estas negociaciones. Un ciudadano de esta ciudad, que había derrochado su fortuna, negoció con Cares para establecer con su apoyo la tiranía. - Cares fue un general ateniense que murió poco antes de 322 a. C., conoció éxitos y fracasos en su actuación. Luego pasó al servicio del sátrapa rebelde Artábazo. Intervino en la guerra de Olinto (348 a. C.) y en la batalla de Queronea (338 a. C.), y se consideró uno de los responsables de esta úitima derrota. Cf. DEMÓSTENES, 2, 28; JENOFONTE, Helénicas VI1 1, 27. roban los bienes públicos; por ello se sublevan contra los oligarcas o bien los culpables o bien los de la oposición contra los que roban, como sucedió en Apolonia del Ponto Pero una oligarquia donde se tiene el mismo l o parecer no es fácil de destruir desde dentro 'O2$ una prue- ba es la constitución de Farsalo los dirigentes, aunque son pocos, ejercen su autoridad sobre muchos 'O2' por las buenas relaciones que hay entre ellos. Se destruyen también las oligarquías, cuando en su seno crean otra oligarquía. Esto ocurre cuando, a pesar i i de que todo el gobierno lo constituyen pocos miembros, no participan todos éstos en las magistraturas más impor- tantes, como sucedió en otro tiempo en Elis estando el gobierno en manos de unos pocos, eran muy pocos los que llegaban a ser del senado, por ser vitalicios los noventa senadores y por ser la elección por línea dinástica 'O3' y semejante a la de los gerontes en Lacedemonia. 'O2' Sobre Apolonia del Ponto, cf. V 3, 13, 1303a36 SS., y nota 967. No se conoce la fecha de este acontecimiento.. Cf. PLATÓN, República VI11 545D. Infra, V 8, 6, 1308a10. 'O2' Farsalo, ciudad de Tesalia, al norte de Beocia. Su historiaestá llena de luchas y discordias; cf. JENOFONTE, Helénicas VI 1, 4. Política- mente dependió de Feras despues de 375 a. C., y, más tarde, de Macedo- nia cuando Filipo se. apoderó de Feras, en 353 a. C. 1028 Manda sobre muchos porque hay otras ciudades que dependen de Farsalo; cf. JENOFONTE, Helénicas VI 1, 8. Elis, capital de la ÉBde, en el noroeste del Peloponeso, en la desembocadura del Peneo, fue fundada en 471 a . C. Esta revolución fue causada por Formión; cf. P ~ v r m c o , Preceptos para la actuacidn política 10, 805d. Se proponen para este acontecimiento varias fechas: unos lo sitúan a comienzos del siglo VI a. C.; otros, en cambio, piensan en la revolución de 472 a. C. La elección de carácter dinástico es cuando se presenta favorable a los intereses de algunas familias ricas. Cf. 1V 5, 4, 1292bl0; IV 6, 11, 1293a31, y V 3, 3, 1302b, y nota 942. LIBRO V 311 12 Se producen revoluciones en las oligarquías tanto en la guerra como en la paz; en guerra 'O3', cuando los oiigar; cas, por su desconfianza del pueblo, se ven obligados a servirse de mercenarios 'O3' (pues aquél, en cuyas manos se entregan, llega a ser con frecuencia tirano, como Timó- fanes en Corinto; y si son varios los jefes, se procuran para sí mismos una dinastía); y otras veces, por miedo a esto, conceden a la multitud una participación en el go- bierno, por verse obligados a servirse del pueblo. 1 3 Y en la paz, cuando, por desconfianza mutua, entregan la defensa a los soldados y a un magistrado mediador 'O" Cf. PLATÓN, República VI11 551D; Leyes IV 709. TUC~DIDES, 111 82, 2. Consideran que los cambios son más de temer en tiempos de gue- rra. Esto ocurrió a la democracia ateniense; cf. IS~CRATES, Sobre la Paz 5 1. Cf. V 10, 11, 1311a12. Los mercenarios (cf. V 3, 13, 1303bl) llegan a tener una importancia grande en el s. rv a. C.; lo hacen notar los oradores áticos. Expresan la devoción de la armada a su jefe y el papel político que esto puede desempeñar. El jefe llega a ser el tirano de su ciudad, como Eufrón en Sición; cf. JENOFONTE, Helénicas VI1 2, 11. Y como Tirnófanes en Corinto, hecho que sucedió en 366 a . C., es- tando en guerra contra Argos; cf. PLUTARCO, Timoleonte 3-5. Timófa- nes, traicionado pronto por sus mercenarios, fue matado por aristócratas conducidos por su hermano Timoleonte que quería liberar a su patria; cf. PLUTARCO, Dión 52. 'O3' Cf. PLATÓN, República VI11 551D. Cf. IV 12, 5, 1297a4, donde se trata de la desconfianza recíproca y del juez mediador. Véase también ARIST~TELES, Ética a Nicómaco V 7, 1132a22. Este magistrado o jefe mediador puede ser Polidamante, cf. JENOFONTE, Helénicas VI 1, 2 SS.; pero no parece que lo fuera este Si- mo. - Los Alévadas era una familia noble y poderosa de Tesalia, de la que salieron varios dinasta y se oponía a la dominación de los tiranos de Feras. - Simo pertenecía a esta familia de los Alévadas de Larisa. Ellos pidieron a Filipo de Macedonia que interviniese en Tesalia en con- tra de los tiranos de Feras; con esta excusa Filipo aprovecha la ocasión para hacerse con el poder de Feras. Cf. DIODORO %CULO, XVI 14 y 35, y DEM~STENES, Sobre la Corona 48. que algunas veces llega a ser dueño de ambos bandos, co- mo sucedió en Larisa, en tiempo del gobierno de los Alé- vadas bajo Simo, en Abidos en tiempo de los grupúsculos políticos, uno de los cuales era el de Ifíades 'O3'. Se producen revueltas también, en el seno de la misma 14 oligarquía, por ser víctima de desprecio unos de otros y combatirse a propósito de bodas o procesos, como las cau- sas mencionadas antes 'O3' debido a bodas; también la oli- garquía de los caballeros en Eretria 'O3' fue derribada por Diágoras, agraviado con motivo de una boda. A partir de 1s una sentencia de un tribunal sobre una acusación de aquel adulterio se produjo la revuelta de Heraclea y la 1035 Sobre Abidos, véase supra, 1019. Ifíades, próxeno de los Cni- dios, fue un general de gran valor; cf. ENEAS EL TÁCITO, 28, 8; DEM~STE- NES, Contra Aristócrates 176 SS. Sobre los grupúsculos, hetairíai, o clubs politicos, véase nota supra, 1018. Cf. desde V 4, 5, 1303b37 a V 4, 7, 1304a17. 1037 Eretria es una ciudad grande de la isla de Eubea. Sobre la oligar- quía de los Caballeros de Eretria, cf. también IV 3, 3, 1289b36. HERÓDO- TO, V 77; PLUTARCO, Pericles 23. Este cambio de régimen realizado por Diágoras tuvo lugar antes de las Guerras Médicas. Durante éstas sufrió la destrucción por los persas y sus habitantes fueron transportados a Susa en 490 a. C. (cf. HER~DOTO, VI 99 SS.), permaneció bajo el yugo persa hasta la victoria de la batalla de Micale (479 a. C.). Entró en la primera Confederación, y llegó a ser una cleruquia después de sus sublevaciones contra Atenas en 446 y 41 1 a . C. Formó parte de la segunda Confedera- ción ateniense en 378 a. C., y sufrió las tiranías de Temisón (366 a. C.) y de Clitarco (349 a. C.) antes de estar bajo el mando macedonia después de la Batalla de Queronea (338 a. C.). Sobre Eretria y su historia cf. ESTRAB~N, Geografía X. 'O3* Las acusaciones por adulterio eran ante los tesmótetas; cf. ARIS- T~TELES, Constitución de los atenienses 59, 3. En este pasaje está tomado en el sentido amplio para designar todos los casos de relaciones ilegíti- mas. Cf. también infra, VI1 16, 18, 1335b38 SS. Sobre Heraclea del Ponto véase supra notas 994 y 1010. Este caso de Euritión ejemplifica lo que fue dicho en V 6, 7, 1305b33
Compartir